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CRISIS DEL PERIODISMO INVESTIGATIVO EN COLOMBIA

NICOLÁS HOLGUÍN LORA


JUAN CAMILO POTES SABOGAL
DIEGO ANDRES POTES SABOGAL

UNIVERSIDAD DE LA SABANA
FACULTAD DE COMUNICACIÓN SOCIAL Y PERIODISMO
ÁREA DE OPINIÓN PÚBLICA
BOGOTA D.C.
2003
CRISIS DEL PERIODISMO INVESTIGATIVO EN COLOMBIA

NICOLÁS HOLGUÍN LORA


JUAN CAMILO POTES SABOGAL
DIEGO ANDRES POTES SABOGAL

Monografía para optar al título de


Comunicador Social y Periodista

Directora
ADRIANA PATRICIA GUZMÁN
Comunicadora Social y Periodista

UNIVERSIDAD DE LA SABANA
FACULTAD DE COMUNICACIÓN SOCIAL Y PERIODISMO
AREA DE OPINIÓN PÚBLICA
SANTAFE DE BOGOTA D.C.
2003
AGRADECIMIENTOS

Los autores expresan sus agradecimientos a:

Adriana Guzmán, Directora de Programa de la Facultad de Comunicación Social y


Periodismo de la Universidad de La Sabana por su paciencia y sus valiosos
aportes personales y profesionales a lo largo de la monografía y la carrera.

Sergio Otálora, periodista del Miami Herald; Martha Elvira Soto, Directora de la
unidad investigativa del diario El Tiempo; Daissy Cañón, periodista y abogada;
Nelson Padilla, periodista de la unidad investigativa de Cromos; Juan Roberto
Vargas, periodista y director fines de semana Caracol Noticias; Germán Castro
Caycedo, escritor y periodista; Germán Suárez, abogado y periodista; Hugo
Sabogal, periodista y consultor de contenidos de Legis; Diego Fajardo, periodista
del Canal UNO y antiguo miembro del equipo de Séptimo Día; Javier Giraldo, jefe
de redacción de “Registro Médico” de Legis; e Ignacio Gómez, periodista del
Canal UNO. A todos los anteriores, muchas gracias por su disponibilidad, interés y
colaboración con la monografía.
2

CONTENIDO

Pág.

Introducción 5
1. CONCEPTUALIZACIÓN DEL PERIODISMO INVESTIGATIVO 9
1.1 Definición de periodismo investigativo 9
1.1.1 Características 13
1.2 El periodista investigador 16
1.2.1 Reseña histórica del periodismo investigativo 18
1.3 Técnicas y estrategias del periodismo investigativo 22
1.3.1 Herramientas del periodismo investigativo 28
1.3.2 Tipos de investigación 33
1.3.3 Cómo se escribe un artículo investigativo: más que redactar un artículo 34
1.4 El periodismo investigativo en Colombia 38
1.4.1 Crisis del periodismo investigativo en Colombia 40
1.4.2 El futuro del periodismo investigativo en Colombia 47
2. LAS LEYES EN EL PERIODISMO INVESTIGATIVO 51
2.1 La Tutela 55
2.2 Leyes internacionales que amparan el ejercicio del periodista investigador
en Colombia 63
2.3 Leyes nacionales que amparan el ejercicio del periodista
investigador en Colombia 65
3. JUSTIFICACIÓN DEL PERIODISMO INVESTIGATIVO 69
4. EL CASO DE SÉPTIMO DÍA 73
5. CONCLUSIONES 89
BIBLIOGRAFÍA 91
ENTREVISTAS 92
ANEXOS 93
3

RESUMEN

Esta monografía tiene por objeto realizar una investigación que explique las
razones para el declive del ejercicio del periodismo investigativo en Colombia.

Se busca expresar y plantear los detalles que hacen del periodismo investigativo
una técnica importante para la profesión. El trabajo va sustentado por una serie de
entrevistas a reconocidos periodistas. Se plantean las técnicas y estrategias que
se deben tener en cuenta. Otra parte está dedicada al marco legal de la rama
donde se exponen los aspectos jurídicos del periodismo investigativo.

Finalmente, expone como ejemplo un programa que es la muestra de lo que es y


no debe ser el periodismo de investigación; sus debilidades, fortalezas y las
causas que lo llevaron al panóptico y a su extinción.

Abstract
The objective of this graduation work is to make an investigation that explain the
main reason why there has been a downward spiral in the exercise of the
investigative journalism in Colombia.

This work will help express the details that make investigative journalism what it is.
A wide range of interviews made to several journalists knowledgeable in the matter
support it. There are several indications about how this kind of journalist is
supposed to be, as well as various techniques and strategies that should be kept in
mind.
4

Finally, there`s sample of what it should be and shouldn’t be the investigative


journalism; his weaknesses, strengths and the causes that leaded to the panoptic
and carried it to the extinction.

Palabras Clave
- Periodismo investigativo
- Investigación
- Periodista/s
- Medios
- Comunicación
- Noticia/s
5

INTRODUCCIÓN

"Revelar al mundo algo que le interesa profundamente y que hasta


entonces ignoraba, demostrarle que ha sido engañado en algún punto
vital para sus intereses temporales o espirituales, es el mayor
servicio que un ser humano puede prestar a sus semejantes"
- John Stuart Mill -

El periodismo investigativo ha venido presentando un fenómeno de extinción


debido al poco respaldo de las cadenas y programadoras, y a las pocas garantías
y oportunidades de su ejercicio. Varios de los periodistas más reconocidos que
solían realizar periodismo investigativo han tenido que salir del país a causa de
amenazas en su contra.

Como se sabe, esta rama periodística ha sido, durante muchos años, una
herramienta útil para denunciar problemas en el ámbito mundial. El mejor caso
para ejemplificar es el ya conocido Watergate, donde periodistas del Washington
Post, luego de exhaustivas investigaciones, destaparon el caso de espionaje
político en el que Richard Nixon estaba involucrado, lo que terminó por sacarlo de
la Presidencia. Muchos profesionales en la materia de periodismo investigativo
consideran este caso como uno de los pioneros y más nombrados con fin
ejemplificador. Al hacer mención de la importancia de la técnica y denunciar
problemas dentro de una sociedad cualquiera, se debe enmarcar la relevancia, no
el hecho de tumbar un presidente, sino de sacar a la luz temas de interés público.
Para redactar un buen artículo investigativo no se requiere un escándalo de
magnitudes desproporcionadas, sino más bien una situación que amerite ser
6

informada y sacada a la luz a fin de beneficiar a un grupo de personas


potencialmente afectado directa o indirectamente por éste.

La investigación se dirigirá a analizar por qué ha ido desapareciendo una


importante rama periodística como es la investigación, tal y como aseguran
algunos periodistas reconocidos en el medio investigativo, los cuales expresarán
su punto de vista más adelante en esta monografía. Se llegará a esta conclusión
analizando las variables que pueden influir, llevando así a un conocimiento
profundo acerca de la desaparición de este género.

Desde hace unos años el periodismo investigativo ha venido sufriendo una


decadencia en lo que a su función y exposición corresponde. Esta investigación
resulta de suma importancia, ya que se podrá llegar al fondo de un problema de
índole social, informativo y profesional de interés para cualquier estudiante de
comunicación social y periodismo en Colombia. Asimismo, se buscará esclarecer
el fenómeno que a largo plazo se convertirá en una amenaza para el ejercicio de
la técnica en Colombia y el mundo, y, por otro lado, plantear alternativas para la
solución del problema.

Profesionales de la información reconocidos en el medio coinciden en que el


periodismo investigativo sí ha venido presentando una depresión. La pérdida de la
función social periodística, la corrupción en las entidades estatales donde se
chantajea a los mismos periodistas para no emitir determinada información, los
intereses económicos que priman entre el Gobierno y los grupos económicos,
dueños de los medios de comunicación, y la inseguridad son algunos de los
argumentos de estos comunicadores.

Según la periodista Daissy Cañón, “la solución se encuentra en la academia, que


los periodistas que salgan de ella tengan esa conciencia de función social. Se
7

debe cambiar el sentido de la “chiva” y de la primicia por algo que de verdad le


sirva a la gente, y que el periodista cuando va a investigar no piense en una
inmortalidad, sino en servir. Por otra parte, en los medios hay un problema grave
de dirección, debido a que cuando se realiza una investigación debe primar la
independencia. Esa conciencia se crea en las universidades. El punto es no
confundir escándalo con investigación.” 1

Por otro lado, Sergio Otálora opina que “las unidades investigativas actualmente
están de capa caída, porque no sólo es peligroso investigar, sino porque la
corrupción, como se ha visto, no es patrimonio exclusivo del Estado. También los
grandes industriales y banqueros son corruptos, y con unos medios en manos de
grandes conglomerados económicos. Si alguien se pone a investigar pueden
terminar ellos mismos mordiéndose la cola. Con una sociedad tan polarizada, con
unos grupos armados ejerciendo presión de hecho sobre los periodistas, con un
Estado corrupto y sin mayor legitimidad y con una impunidad galopante, es
evidente que los medios de comunicación no ven en el Periodismo Investigativo
una forma atractiva de ganar público. Para eso están la farándula, las secciones
de chismes, y las lindas piernas, para no mirar más hacia arriba, de Catalina... y
punto.” 2

No se concluye que el Periodismo Investigativo está llegando a su final, pero sí en


muchos medios como en la televisión donde se dedicaron a realizar programas de
opinión o reforzar alguna nota presentada en un noticiero. La radio constituye otro
ejemplo demostrativo donde la presencia de investigaciones, en sus diferentes
formatos (Entrevista, Reportaje, Noticia, Crónica, Opinión) ha desaparecido de las
transmisiones radiales. No obstante, uno de los pocos medios donde se
mantienen las tendencias investigativas es la prensa. Sin embargo, los factores de

1
ENTREVISTA con Daissy Cañón, periodista y abogada. Bogotá, septiembre de 2002.
8

vulnerabilidad contra los periodistas investigativos – amenazas, exilios forzados,


chantajes, entre otros – siguen latentes.

2
ENTREVISTA con Sergio Otálora, periodista del Miami Herald. Vía Internet, septiembre de 2002.
9

1. CONCEPTUALIZACIÓN DEL PERIODISMO INVESTIGATIVO

1.1 Definición de periodismo investigativo

Como línea de base, la investigación es la esencia del periodismo, de donde nace


la expresión de todos y cada uno de los demás géneros periodísticos; la esencia,
porque el periodismo se basa principalmente en la investigación sobre un tema.
Así, el periodismo investigativo se encarga de llevar más a profundidad las
investigaciones básicas de la rutina periodística; de ahí que una de sus primeras
denominaciones en sus inicios en Inglaterra fuera “in depth reporting”, o
periodismo de profundidad. De la misma manera, las demás ramas de la profesión
se deben basar en investigaciones. Sin esto, el periodismo se convierte en una
narración escueta de sucesos sin una estructura definida. Es un trabajo de
investigación que difícilmente se lograría sin el empeño del periodista, y que
ofrece una historia de importancia pública, cuyas piezas y pistas pertinentes para
la investigación deben irse obteniendo de fuentes diversas, y a veces oscuras, de
quienes están empeñados en ocultar alguna verdad. Esta rama del periodismo
tuvo su auge y prestigio durante las décadas de los setenta y ochenta, justo
cuando se crearon las primeras unidades investigativas alrededor del mundo.

El periodismo de investigación va más allá; tiene un sello de identidad propio, el


cual se caracteriza en la profundización de la información que circula por los
canales normales de la comunicación. Es un periodismo que exige tiempo,
dedicación, instinto y una búsqueda constante.
10

La esencia del periodismo investigativo consiste en aplicar todas las pautas del
buen hacer periodístico a determinados temas que el periodista investigador
obtiene con su propio esfuerzo fuera de los cauces habituales de la información.
Igualmente esta articulación del periodismo tiene por objetivo el proponer
reformas, exponer injusticias, desenmascarar fraudes, dar a conocer lo que los
poderes políticos quieren ocultar, detectar qué instituciones no cumplen con su
trabajo, dar información a los electores sobre los políticos y sus intenciones de
actuación, reconstruir acontecimientos importantes, etc. 3

“Primero, lo más importante es la responsabilidad. Segundo, todo el periodismo


tiene que ser investigativo, hasta para cubrir una noticia cotidiana se tiene que
investigar. Lo más importante es tener claro el tema y tener un background. Hay
que confrontar lo que se encuentra, hay que tener documentos y acreditar
pruebas; no se puede hacer un periodismo investigativo con testimonios, llamadas
telefónicas o chismes. Todo debe estar sustentado y deben observarse las normas
legales, porque puede terminar en enredos. Es grave cuando el periodista supone
que algo está mal e intenta encarnar a Sherlock Holmes para descubrirlo.

Se debe partir de bases reales y tener un claro sentido de la investigación.


Muchos periodistas se equivocan cuando no tienen un claro sentido de la
investigación. El mejor ejemplo de una investigación periodística es el caso
Watergate, porque los periodistas involucrados cogieron un hilo conductor y fueron
enlazando una cosa con la otra; no hay que dejar cabos sueltos. Así como este
caso es un buen ejemplo, también es un mal ejemplo. Uno de los grandes errores
es pensar que el periodismo investigativo está encaminado a tumbar presidentes.
Este, en la medida que tiene una función social, debe hacerse. Si uno plantea
hipótesis debe buscar contestarlas mas no lanzar hipótesis cuando se presenta la

3
SECANELLA, P.M, “Periodismo de investigación”. Tecnos, Madrid. 1986. Pag. 109.
11

información. Otro requisito importante es el tiempo. Si no hay tiempo, es mejor no


meterse a hacer periodismo investigativo de ninguna clase. Todo requiere tiempo
y responsabilidad”. 4

“Ya es casi leyenda decir que el periodismo investigativo nació en los albores de
los años setenta, cuando dos periodistas avezados del Washington Post
descubrieron que el presidente Nixon, quien aspiraba a la reelección, espiaba los
cuarteles generales de los demócratas en el edificio del Watergate. Este era,
digamos, el bautizo de fuego de una línea de trabajo del periodismo; un híbrido, a
mi manera de ver, entre la denuncia de irregularidades, (abusos de poder,
corrupción oficial) y búsqueda detectivesca de testigos, documentos, nuevos
puntos de giro que le dieran más peso a las historias.

Desde el punto de vista estilístico, era también una mezcla de géneros. Utilizaba
elementos de la crónica, de reportaje, de la descripción escueta de información y,
algunas veces, también editorializaba con base en la información recogida. En
síntesis, el periodismo de investigación (que a pesar de su nombre, nada tenía
que ver con las características del método científico de investigación en las
ciencias sociales) fue una forma que encontraron los grandes medios escritos
(después lo haría también la televisión) de remover, y poner sobre el tapete, las
grandes lacras del poder, sobre todo del poder del Estado. No hay duda de que
ese boom revitalizó el periodismo, lo legitimó ante el ojo escéptico del público y
fortaleció la idea de que las grandes democracias de Occidente no debían temer
que sus medios de comunicación se convirtieran en fiscalizadores de la actividad
de los factores de poder.” 5

4
ENTREVISTA con Daissy Cañón, periodista y abogada. Bogotá, septiembre de 2002.
5
ENTREVISTA con Sergio Otálora, periodista del Miami Herald. Vía Internet, septiembre de 2002.
12

El caso Watergate fue el detonante y la “luz verde” para que los medios de
comunicación pudieran sacar a la luz pública atropellos en contra de una sociedad
que había permanecido, en muchas ocasiones, excluida de la verdad. Se puede
decir que el caso Watergate sirvió de inspiración para muchos periodistas en el
mundo para destapar ollas podridas dentro de sus mismos gobiernos y
sociedades, brindándole al público, por primera vez, una perspectiva única y
verdadera de problemas ocultos.

Por otra parte, el periodismo de investigación es también entendido como “la


búsqueda y difusión de información acerca de sucesos con valor periodístico,
eventos e información que otros mantienen ocultos y quieren impedir que sean
conocidos y difundidos en un ámbito social mayor que aquel circuito de los que
están enterados.”6

Ningún asunto es considerado fuera de los límites del periodismo investigativo; su


campo de acción es muy amplio, y por lo general el mismo género puede abarcar
sin temor o cohibición cualquier tema que esté expuesto a investigación.

“El periodismo investigativo no tiene límites geográficos”.7 Este género se puede


practicar en cualquier terreno, en las ciudades, en áreas rurales, entre otros, ya
que cualquier historia generada en estos ámbitos tiene efecto sobre cualquier
persona. Este género se ha considerado como un servicio público, ya que el
periodista se convierte en un defensor ante los poderosos, como un recurso,
cuando fracasan otros esfuerzos para hacer justicia.

La revelación completa del escándalo de Watergate, que trajo nada menos que la
renuncia del presidente norteamericano Richard Nixon, es un buen ejemplo de

6
FAUNDES, Juan Jorge. “Ética y contexto del periodismo de investigación”. www.saladeprensa.org.
7
GAINES, William. “Periodismo investigativo para prensa y televisión”. Tercer mundo Editores Pag. 2
13

periodismo investigativo. Esta clase de periodismo puede abordar, además, temas


sociales, tales como la guerrilla urbana, la rural, el terrorismo, la droga, las
diversas mafias, etc.

Como podrá apreciarse de todo lo antes dicho, al reconocer la existencia de un


llamado “Periodismo de Investigación”, no estamos hablando de un género
periodístico específico, sino de una actitud, métodos y acciones profesionales ante
determinados temas, que por su complejidad e implicaciones deben ser objeto de
una investigación más acabada y rigurosa; así como del empleo casi siempre
combinado de variadas formas de presentación del material periodístico.

1.1.1 Características

Algunas de las características del periodismo investigativo son las siguientes:

• Descubrimiento de la verdad oculta que las personas privadas o instituciones


públicas desean mantener en secreto y que los ciudadanos tienen derecho a
saber.
• No se apoya en las fuentes de información oficiales, más bien desconfía de
ellas. Le interesa lo que no dicen, lo que ocultan. Por eso necesita de sus
propias fuentes al margen de los cauces normales de la información.
• Investigar más allá de la simple apariencia de los hechos. Escarbar para
llegar a los últimos datos, a las últimas consecuencias. Se necesita, por
tanto, un sexto sentido periodístico, imprescindible para la práctica de su
14

profesión. Este sexto sentido se podría enmarcar en una cualidad: capacidad


de investigar y escarbar.
• Utilizar procedimientos propios de otras ciencias sociales como la sociología
y la sicología y, cuando lo considere oportuno, recurrir a métodos técnicos
especializados, propios del trabajo científico (bancos de datos, etc.)
• Es un periodismo eminentemente informativo que se sustenta en la
exposición fidedigna de datos muy comprobados, y que se apoya en la
constante verificación y contrastación de las diversas fuentes de información.
La precisión y exactitud deben ser dos espectros permanentes en cualquier
texto de investigación.
• No tiene cabida el error. Los datos siempre deben ser verificables. La
rectificación necesaria cuando se cometen errores en la información
desacredita al periodista investigador y al medio que lo publica.8

“Muchas veces los periodistas no conocen cuáles son los instrumentos legales
que tienen para acceder a la información. Estos no conocen cuáles son las vías de
acceso para obtener determinados expedientes. Nadie les cuenta a los periodistas
como es el procedimiento o los instrumentos cuando los están formando en las
universidades. Cuando salen de la academia, no tienen idea a qué tienen derecho
ni cómo acceder a una información. Lo que hace el periodismo es preservar un
marco jurídico y no se puede violar el marco jurídico para preservarlo”.

Como lo afirma Daissy Cañón, la investigación en el periodismo debería surgir


desde la academia, con responsabilidad y conciencia social. Tal es el objetivo del
Proyecto Educativo de Programa (PEP) de la Facultad de Comunicación Social y
Periodismo de la Universidad de la Sabana, que pretende que la búsqueda de la
verdad, sea el primero de los hábitos propios del comunicador social y periodista,
15

y que abarque la totalidad de los ámbitos de la realidad social en que se


desenvuelve el ser humano; asumiendo la responsabilidad de las libertades de
expresión, opinión e información; respetando el diálogo, las discrepancias y
defendiendo los valores.

Martha Soto, Jefe de la Unidad Investigativa de el diario El Tiempo, piensa que “la
gran diferencia es que es periodismo de profundidad es tratar un tema desde
todos los ángulos, es tratar un tema con verificación de información, con cruce de
información, es tratar de establecer algo que alguien quiere que permanezca
oculto; esa es la diferencia con una noticia o con el cubrimiento de una rueda de
prensa o cualquier otra información”.

1.2 El periodista investigador

Por lo general, un periodista que se dedica a la investigación es aquel de mayor


trayectoria dentro de un periódico, una revista, una estación de radio o cualquier
otro medio de comunicación, ya que en muchos casos, gracias a su experiencia
en el medio, el periodista puede juzgar si lo que se hace es correcto o no. En
adición, el medio, y la misma investigación, gana credibilidad gracias a la
idoneidad del equipo de trabajo. Además ha creado una red de personas, de
acuerdo con cada investigación realizada, con la cual cuenta para el proceso
investigativo (fuentes que en muchas ocasiones no revelan sus identidades). Es

8
CAMINOS, Marcet, José María. “Periodismo de investigación: Teoría y práctica”. Proyecto editorial Ciencias
de la Información. Madrid, 1997. Pág. 24 – 25.
16

importante que el periodista investigador se apoye en un equipo trabajador con la


misma voluntad de encontrar la verdad acerca del tema sujeto a investigación.
También debe ser prioridad atar todos los cabos concernientes con las pruebas de
la investigación, de esta manera se evitarán problemas legales o personales con
respecto al tema indagado. Nada se puede dejar pendiente ni mucho menos sin
confirmar. El periodista investigador debe ser consciente de que toda la
información debe ser respaldada.

“Además de la experiencia, el periodista investigador sabe cómo se supone que


trabaja el gobierno y puede juzgar si en realidad lo está haciendo como debiera.
Además, ha creado una red de personas que son fuentes de información y que
pueden confiar en que él no revelará sus identidades. Así mismo, sabe dónde se
llevan registros públicos, entiende los documentos, y es experto en entrevistar y
acertado al juzgar el comportamiento humano.”9

Para Daniel Samper Pizano, uno de los pioneros y reconocido representante del
periodismo investigativo en Colombia, el periodista investigador “es un periodista
independiente que indague por su propia cuenta y denuncie hechos socialmente
significativos que alguien pretende ocultar”.10

Aunque el Periodismo de Investigación empezó con un carácter denunciativo, en


el que se pretendía evidenciar alguna anormalidad, la investigación debe ser la
esencia del periodismo mismo, pues es esta su responsabilidad social y este el
compromiso adquirido por los comunicadores y periodistas.

9
GAINES, William. “Periodismo investigativo para prensa y televisión”. Tercer mundo editores. Bogotá, 1.994.
Pag. 1
10
ENTREVISTA con Daniel Samper Pizano, periodista y columnista. Vía Internet, junio de 2002.
17

“No debería existir una especialidad llamada Periodismo Investigativo porque es la


esencia del periodismo como tal la investigación en profundidad. Se ha convertido
en un vicio en algunos casos porque se encumbró esta especialidad y se enfocó
hacia lo negativo cuando eso lo deberían hacer todos los periodistas.”11

Como afirma Juan Roberto Vargas, para todo el periodismo se necesita tener
olfato, criterio, y rigor. “Yo le insisto mucho en eso porque el periodismo
investigativo es el que más se tiene que acercar a la verdad de los hechos; y para
acercarse a esa verdad tiene que manejar el rigor como su norma máxima. El rigor
significa corroborar, confrontar, verificar, mirar, volver a revisar, volver a
confrontar, determinar si lo que uno tiene como información, como dato, como
testimonio, es realmente lo que es.”12

“No se trata de decirlo primero sino de decirlo bien. Eso varía la metodología de la
investigación de acuerdo con el tema. Otro de los fundamentos del periodismo
investigativo es que debe ser equilibrado. Hoy, hablar de objetividad es perder el
tiempo; no existe, no ha existido ni existirá. Si es equilibrado no hay hecho que no
tenga tres o cuatro caras. Entonces hay que comenzar a buscarlas:
documentarse, buscar a la gente, hacer las entrevistas con un plan y una hipótesis
de trabajo a partir de los primeros documentos, libros y fuentes disponibles, de
manera que cuando va uno con la gente lleva un tema específico, así ya sabe qué
va a buscar y gracias a esto está casi a la altura del personaje; gracias a ese tema
específico que se ha investigado anteriormente en el trabajo de campo, porque de
lo contrario le meten los dedos a la boca.”13

11
ENTREVISTA con Nelson Padilla, periodista de la unidad investigativa de Cromos. Bogotá, noviembre de
2002.
12
ENTREVISTA con Juan Roberto Vargas, periodista y director fines de semana Caracol Noticias. Bogotá,
octubre de 2002.
13
ENTREVISTA con Germán Castro Caycedo, escritor y periodista. Bogota, junio de 2003.
18

1.2.1 Reseña histórica del periodismo investigativo

El periodismo investigativo se ha venido haciendo durante muchos años y ha sido


reconocido con sinónimos como "buen periodismo". Podría considerarse como un
periodismo investigativo, el Nuevo Testamento de la Biblia.14 Esto quiere decir
que desde antes del caso de Watergate, ya se tenía a esta rama como una
estrategia importante del periodismo.

Novelistas como Charles Dickens escribieron historias que pusieron al descubierto


injusticias sociales de diferentes clases. En ocasiones, escasamente disimularon
sus personajes pero nunca usaron nombres reales, y, al igual que las crónicas
investigativas de hoy, algunos de sus escritos aparecieron primero como series
periodísticas.

La prensa estadounidense de principio del siglo XX da los primeros pasos en el


periodismo investigativo. Una serie de periodistas centraba el desarrollo de su
actividad profesional en la denuncia pública de la corrupción política e institucional.
Esta primera generación de periodistas investigadores recibió el nombre de
muckrakers (buscadores de basura).

La etapa de esplendor de este género se prolongó durante toda la primera década


del siglo. Generalmente estas investigaciones se publicaban en libros y en algunos

14
GAINES, William. “Periodismo investigativo para prensa y televisión”. Tercer mundo editores. Bogotá, 1.994
Pag. 3
19

semanarios como Cosmopolitan, Collier’s y Everybody’s Magazyne. Es la etapa de


las grandes investigaciones periodísticas de Joseph Pulitzer contra la corrupción
de los políticos; Jacob Riis, desenmascarando escándalos inmobiliarios; Upton
Sinclair, denunciando la falta de higiene en las distribuidoras de carne en Chicago.
A lo largo de casi 40 años, muy pocos periodistas pudieron continuar con su
trabajo de “escarbar en la basura” del sistema.

A partir de la década del los años sesenta surge lo que se ha denominado los
nuevos muckrakers, caracterizados por un trabajo periodístico menos activista y
más profesional. Especializados no sólo en denunciar temas de interés
periodístico, sino también en realizar un trabajo de profundidad, analizando los
hechos, buscando las causas que se encuentran detrás de cada acontecimiento
importante. Entre los periodistas más destacados de esta época cabe mencionar a
Nicholas Cage, quien inició sus investigaciones en 1970 en el “The New York
Times”. Cage es un investigador especialista en temas relacionados con la mafia.

Carl Bernstein es uno de los periodistas que junto a Robert Woodward han
alcanzado mayor fama merced a la investigación que llevaron a cabo sobre el
Watergate.15

Se puede decir que con el caso Watergate en 1972, publicado por el diario
Washington Post, inició una fase importante del género. Dicho caso comenzó con
el seguimiento de una historia rutinaria por parte de los periodistas Carl Bernstein
y Bob Woodward, del diario Washington Post. La historia comienza con el
allanamiento del hotel “Watergate” en la ciudad de Washington, donde se
descubrieron varias agendas con información que involucraba la existencia de una
posible infiltración de dineros ilícitos en la campaña de reelección presidencial de

15
CAMINOS, Marcet, José María. “Periodismo de investigación: Teoría y práctica”. Proyecto editorial Ciencias
de la Información. Madrid, 1997. Pag. 72 – 73 - 74
20

Richard Nixon. Tras una intensa investigación de los periodistas del Washington
Post se destapó el fraude que escondía la comisión de reelección del candidato
demócrata.

Este ejemplo mostró al mundo, y más profundamente a periodistas y directores de


diarios, cómo la perseverancia puede revelar la verdad a pesar de un gran
empeño en ocultarla. Los premios Pulitzer crearon desde 1985 una categoría que
daba reconocimiento a este estilo periodístico.

Además de la misma investigación y de sus importantes y trascendentales


consecuencias, uno de los aspectos más destacables del trabajo de investigación
del caso Watergate fue el fortalecimiento y consolidación del derecho a la libertad
de expresión de la prensa norteamericana y la importancia de un trabajo
profesional serio y riguroso.

Posteriormente, en las décadas de los setenta y ochenta se da la gran explosión


de espacios investigativos en los diferentes medios, principalmente en occidente,
todos estos apalancados por el apoyo financiero de grandes grupos económicos,
siguiendo la tendencia mundial. Es en este momento cuando aparecen
reconocidos programas televisivos como 60 minutos, 20/20 y Panorama o la
revista “Vision” en Inglaterra, y cuando la BBC inicia el apoyo a la realización de
documentales y reportajes de investigación.

Igualmente, durante los lustros venideros se dio gran protagonismo a las recién
creadas Unidades Investigativas de los diferentes medios impresos, las cuales
durante varios años gozaron del respeto y apoyo por parte de los directores y
propietarios de los medios informativos, de la sociedad, y temor de parte de los
sectores políticos y vulnerables a investigaciones.
21

Durante la década de los noventa nacen o se refuerzan las grandes cadenas


nacionales y transnacionales, derivadas de importantes alianzas corporativas,
segmentando la información en grupos especializados en diferentes temas;
aparecen estrategias gestoras de grandes emporios informativos y de
entretenimiento como Discovery Network, CNN, Telemundo, Univisión, CBS, entre
otros.

Finalmente, el revisionismo gubernamental y la censura, así como los intereses


creados en el ámbito político, económico y de poder, han llevado al periodismo a
una decadencia dependiente de decisiones externas y carentes de criterio
profesional, que sacrifican la labor de la academia y la profesionalización del
periodismo, así como cuestionan la labor de los periodistas.
22

1.3 TÉCNICAS Y ESTRATEGIAS DEL PERIODISMO INVESTIGATIVO

En la actualidad el ejercicio del periodismo de investigación recurre a una serie de


técnicas claramente definidas, desarrolladas a través de la experiencia periodística
de los profesionales que se desenvuelven en este campo.

Es de suma importancia que los datos de las investigaciones se verifiquen


constantemente. Una vez recopilada y validada la información, el periodista tiene
la tarea de presentarla al público de la manera más clara posible, sin olvidar la
importancia de no juzgar ni emitir emociones u opiniones. Todas las afirmaciones
de la investigación deben ser irrefutables. Nunca deben quedar cabos sueltos o
informaciones débiles.

Las personas o instituciones denunciadas pueden negar los hechos, o incluso


desmentirlos; pueden iniciar procesos judiciales contra el periodista y su medio,
pero no deben probar nunca que el profesional y el diario están mintiendo. El
periodismo de investigación es un periodismo de denuncia, de ahí que el requisito
básico de su existencia sea la credibilidad de las informaciones que se publican.16

Según José Manuel de Pablós, el periodismo de investigación se realiza a través


de cinco fases, a las que llama las 5p (la P es la inicial de cada una de las cinco
fases indicadas), ineludibles en todo proceso investigador periodístico.
Las cinco fases P son éstas, a saber:

16
CAMINOS, Marcet, José María. “Periodismo de investigación: Teoría y práctica”. Proyecto editorial Ciencias
de la Información. Madrid, 1.997. Pág. 135 - 136
23

- 1ª fase P, la pista.
- 2ª fase P, la pesquisa.
- 3ª fase P, la publicación.
- 4ª fase P, la presión.
- 5ª fase P, la prisión.

1ª fase P: la pista. El planteamiento de un trabajo de periodismo de investigación


se hará por medio de una pista que alguien acerca al medio o al periodista, sea
quien va a realizar posteriormente la investigación, sea a alguno de sus superiores
o a un compañero de la redacción que trabaja en otras cuestiones informativas sin
relación con el periodismo de investigación. Esa pista encerrará un problema
informativo, algunas incógnitas comunicativas, varias dudas periodísticas de tal
dimensión o posibilidades de publicación que alguien con autoridad dentro de la
redacción (cuando no es iniciativa del propio periodista de investigación) propone
o decide que el tema puede ser objeto de una investigación periodística
publicable, en pro de resolver el nudo informativo y ante su indudable beneficio
para los intereses informativos del medio, o sea, para sus lectores.

2ª fase P: la pesquisa. Una vez decidido el trabajo, es importante que el


periodista no tenga otras ocupaciones que le quiten parte de la entrega y
dedicación inevitables para una pesquisa periodística, y así su labor será más
provechosa. Igualmente, ha de contar con la seguridad (documental, mejor) de
que la empresa va a soportar cualquier problema jurídico en el que se pueda ver
inmerso el periodista, porque no es justo que un periodista sea denunciado por
causas de su labor profesional, y la empresa se desconecte del problema, de
manera que el redactor o director se vea sometido a la necesidad de buscarse un
abogado defensor.
24

3ª fase P: la publicación. Una labor de periodismo investigativo se puede


desarrollar durante meses de trabajo minucioso y llevado con mucha precaución, o
se puede realizar vertiginosamente, en pocos días, a lo sumo un par de semanas,
según la maduración del asunto. En cualquier caso, llegada la hora de la
redacción, por lo general en textos que aparecerán en serie, a lo largo de
diferentes ediciones del medio, todo lo que se diga y se afirme habrá de estar
debidamente verificado, pues es un serio problema dejar cabos sueltos sin la
necesaria y prudente comprobación.

4ª fase P: la presión.- Desde el instante inicial de aparición de los primeros


resultados de la pesquisa, los afectados harán presión y pondrán en entredicho la
labor del periodista investigador: con eso hay que contar siempre y estar
preparado para la embestida. Ésta puede tener fundamentalmente dos formas de
presentación: directa e indirecta. La primera, a su vez, puede tener diferentes
maneras de manifestación, desde la acción violenta contra el periodista
investigador hasta la presión personificada de los afectados en la propia
redacción. En cualquier caso, como quedó dicho, se ha de colocar en estado de
prevención para cualquiera de estas presiones, que siempre aparecen en algún
momento.

5ª fase P: la prisión.- No tiene por qué ser siempre esta última y definitiva fase 5ª
la entrada física y personal en prisión o en la celda de una comisaría o juzgado de
las personas investigadas. De lo que se trata es de un cambio de situación; el más
radical de ellos es, en algunos casos, la pérdida de la libertad por parte de algunos
investigados y su ingreso a una prisión. Sin embargo, hay que resaltar que esta
última fase no implica de forma radical la prisión, - aunque eso sucede en la
mayoría de los casos-, sino un cambio radical de estatus del afectado. En últimas,
el beneficiado es la misma población, quien conoció, gracias al trabajo
25

investigativo y de denuncia, uno de los problemas latentes de la sociedad. Esta


última fase no siempre será la definitiva.

“Se podrían resumir en acreditar pruebas, no partir sobre supuestos, hacer una
investigación coherente, mirar las normas, no violar investigaciones que se
puedan ver afectadas por el simple hecho de que se puede descubrir una gran
cosa.”17

Para investigar no sólo hace falta usar un método adecuado, también hay que
saber aplicar una serie de técnicas y estrategias para situar al periodista en el
punto exacto en el que transcurre el hecho investigado, y/o donde estén
depositados los elementos probatorios necesarios para avalar el trabajo
periodístico.18

“Hay temas que le llegan a uno porque alguien se los comunica, hay fuentes para
investigarlos, y materia prima desde donde trabajar. Pero hay otros que parten de
la propia indagación, sensibilidad o compromiso del periodista. Uno de los puntos
críticos es el manejo de la información, cómo interpretarla, ordenarla y editarla
para contar una historia donde no haya vacíos ni debilidades. Cómo evitar los
juicios a priori, o condenar sin que haya de por medio la acción de la justicia. Por
desgracia, el periodismo de investigación se convierte, en países como Colombia
(donde, por otra parte, ese tipo de periodismo está en vías de extinción), en juez y
parte, ante la inoperancia de la justicia o la carencia de fuertes estructuras
democráticas que permitan ventilar de verdad esas denuncias en el Congreso o en
los debates partidistas.

17
ENTREVISTA con Daissy Cañón, periodista y abogada. Bogotá, septiembre de 2002
18
RODRÍGUEZ, Pepe. “Periodismo de investigación: técnicas y estrategias”. Paidós Comunicaciones.
Barcelona, 1994. Pág. 135.
26

No se trata de buscar la objetividad (entelequia absoluta), sino de construir un


texto con todos los elementos de juicio posibles, con todas las pruebas posibles,
con todas las opiniones posibles. Se trata, en últimas, de COMPLEJIZAR LA
REALIDAD, de hacerla más visible, de mostrar sus costuras, y, por supuesto, en la
edición del material, en los acentos que se hacen de unos hechos y no de otros,
ya hay un inevitable, y saludable, PUNTO DE VISTA.”19

La importancia de la calidad informativa es la piedra angular de esta técnica, y el


uso de esta en todos los géneros informativos lo que es significativamente
relevante. No es la denuncia, ni la redacción literaria de los artículos investigativos,
sino proporcionar información útil al público, que lo ayude a ser mejor ciudadano,
mejor persona, mejor estudiante, etc.

Antiguamente, la información era concebida por unos pocos para unos muchos,
pero con la incursión de herramientas como la Internet esto cambió
significativamente; y ahora los públicos deciden libremente qué leer sin la
intermediación mediática de un periodista que decida cuál información es válida
para sus necesidades o no lo es.

Sin embargo, una de las estrategias más importantes del periodismo de


investigación es la colaboración en la construcción de opinión pública, ya que en
las manos de ésta se forjan polémicas respecto a un determinado tema,
haciéndolo relevante en la Agenda Setting∗ de los medios de comunicación.

Según Germán Castro Caycedo, para llegar a realizar una buena investigación,
todo parte de la entrevista. La entrevista se hace, se habla con el personaje, se

19
ENTREVISTA con Sergio Otálora periodista del Miami Herald. Vía Internet, septiembre de 2002
∗ *
Agenda Setting: son los temas de mayor relevancia en determinados momentos del tiempo. Es decir, es la
agenda temática en la que los medios le conceden un orden de importancia a los temas.
27

confrontan los datos y a los terceros que nombre, como en una indagatoria, a esos
toca entrevistarlos. “es que yo con Juan fui...” y busco a Juan. Eso se hace para
tener diferentes puntos de vista de la misma historia, diferentes versiones y,
basado en esto, voy armando la versión central”.20

Igualmente, William Gaines sugiere en su obra los pasos de la investigación


periodística, de acuerdo con los diferentes elementos que aconseja. Tales pasos
se podrían resumir de la siguiente manera:

Título: una idea básica y totalizadora del tema por abordar


Tema: precisión sobre el problema que será objeto de investigación
Necesidad: importancia o trascendencia e interés social del problema y
significación posible de su publicación
Alcance del estudio: delimitación de los marcos en que se desarrollará la
investigación

Métodos y técnicas que se pondrán en práctica para la investigación

Fuentes: Relación de fuentes personales, documentales o institucionales


Producción: géneros, ediciones, materiales por conseguir, etc.

No se trata, por supuesto, de un esquema rígido, sino todo lo contrario. Partiendo


de su papel básico como proyecto por valorar y decidir por el equipo de redacción,
los promotores adecuarán cada situación, a fin de que sirva como sistema
argumental y guía práctica de todo el proceso de realización de la indagación

20
ENTREVISTA con Germán Castro Caycedo, escritor y periodista. Bogota, junio de 2003
28

periodística y sus diferentes variantes de géneros como propuesta de estrategia


comunicativa.21

Como podrá apreciarse, al reconocer la existencia de un llamado “Periodismo de


Investigación”, no estamos hablando de un género periodístico específico, sino de
una actitud, métodos y acciones profesionales ante determinados temas, que por
su complejidad e implicaciones deben ser objeto de una investigación más
acabada y rigurosa; también, del empleo casi siempre combinado de variadas
formas de presentación del material periodístico.

De ahí que lo dicho por el Nobel colombiano, Gabriel García Márquez, tenga tanta
veracidad para los periodistas y el periodismo: todo el periodismo debe ser
investigativo; algo en el que concuerdan otros escritores como Germán Castro
Caicedo.

1.3.1 Herramientas del periodismo investigativo

El periodista investigativo debe vivir bajo el marco de la ley; sin embargo, la ética
extraoficial (o la misma ética personal e individual del periodista) de la profesión
periodística es válida para todos los reporteros. Esta previene contra la deliberada
mala interpretación de los hechos, el provecho personal y la parcialidad que podría

21
GAINES, William. Periodismo Investigativo para prensa y televisión, TM Editores, Colombia,
1996.
29

nublar el juicio crítico de cualquier periodista.22 El reportero investigativo debe


reprimir sus sentimientos al hacer la historia y reconocer que el derecho a la
información no es mayor que el de cualquier otro ciudadano.

Para desarrollar satisfactoriamente la labor investigativa es necesario contar con


unas herramientas fundamentales para lograr el objetivo sin salirse del marco de
la ley y sin abusar ni incurrir en injusticias.

Estas herramientas son las siguientes:

• Entrevistas: Estas son espaciadas a lo largo de la investigación, de una


manera informal y no como un interrogatorio. Hay introductorias con
expertos, en las que un conocedor del tema hace un preámbulo. Con
personas que hayan sido víctimas de una injusticia y, finalmente, se habla
con los sujetos de la investigación.

• Documentos: Un documento es información escrita. Es escrito, impreso, etc.,


en la que se confía para registrar o probar algo. Un documento, a diferencia e
una fuente humana, no cambia su versión.

• Inspección: Consiste en la observación directa por parte del periodista.


Descubrir los hechos, los lugares y los documentos de orden público y
privado que emiten las empresas, entre otros. Este procedimiento ayuda a
fortalecer la historia y a obtener nuevos puntos de vista.

• Estudios: Un estudio es un examen sistemático de un grupo o lista de ítems


dentro de un tema de investigación. De un estudio puede surgir una historia.

22
GAINES, William. “Periodismo investigativo para prensa y televisión”. Tercer mundo editores. Bogotá. 1994
30

Se puede recurrir al mismo para comparar o simplemente para verificar


equidad en un determinado sistema.

Por otro lado, es recomendable ver el estudio que comenzó Pedro Enrique
Almendares, del Centro de Periodistas de Investigación, en el que se analiza la
entrada del periodismo de investigación a la era moderna por medio del uso de
técnicas y tecnologías que podrían, en un futuro, ampliar el uso de herramientas
modernas para realizar investigaciones sin el bloqueo burocrático, permitiendo el
acceso a documentos y fuentes de importante relevancia para darle un buen uso a
las informaciones emitidas por los medios23.

Según Almendares, el uso de técnicas computarizadas en el periodismo de


investigación contribuye a erosionar el monopolio oficial de la información. Los
reporteros pueden encontrar en Internet fuentes alternativas para llegar a lo que
los funcionarios pretenden ocultar, analizar esa información mediante el uso de
hojas de cálculo, administradores de bases de datos, etc., y compararla con los
comunicados de prensa oficiales.

Publicados los reportajes, los funcionarios se ven obligados a responder y,


muchas veces, a liberar la información que antes limitaban u ocultaban.
En lo que todos coincidían, y por supuesto es un obstáculo considerable, es que,
dada la cultura política tradicional que persiste en América Latina, los políticos y
burócratas tienden a considerar la información pública como un recurso personal y
asumen el derecho de compartirla o no con la prensa y con la sociedad en
general.

Pag. 13
23
ALMENDARES, Pedro Enrique. Los desafíos del periodismo investigativo. La investigación periodística computarizada
en América Latina. www.chasqui.comunica.org/armenadares67
31

“En estos tres años, sin embargo, hemos confirmado que la investigación
periodística por medio de técnicas computarizadas no solo es posible en América
Latina, sino que su uso puede contribuir a erosionar el monopolio oficial de la
información. Por ejemplo, los reporteros pueden encontrar en Internet fuentes
alternativas para llegar a lo que algunos funcionarios pretenden ocultar, y
después analizar esa información mediante hojas de cálculo o administradores de
bases de datos, y después compararla con los comunicados de prensa oficiales.

Mientras tanto, los periodistas latinoamericanos han encontrado nuevas formas


para burlar los obstáculos al acceso a la información; una de ellas es buscar en
otros países lo que se trata de ocultar en los suyos. Para ello, Internet es
particularmente útil, ya que permite identificar y hacer contacto con fuentes
internacionales -académicas, periodísticas, no gubernamentales y aun sitios de
otros gobiernos- que ofrecen información relevante para los países
latinoamericanos.

Cuando iniciamos nuestras actividades en México, la respuesta fue muy positiva y


nos llevamos una sorpresa: a pesar del marcado centralismo que padece el país,
o quizás por ello mismo, nuestro proyecto despertó un mayor interés en otras
ciudades distintas a la capital. Más aún, pronto empezamos a recibir preguntas y
solicitudes de talleres y seminarios en otros países de América Latina, y pronto el
Centro se convirtió en un proyecto continental con actividades en Colombia, Brasil,
Argentina, Perú, Panamá, Puerto Rico, Guatemala y Nicaragua”.24

24
Ibid.
32

Algunos problemas

Un problema real es que si bien hay carencias técnicas en muchas redacciones,


cuando los medios hacen esfuerzos por dotar de equipo moderno a los reporteros
es frecuente que estos se resistan a capacitarse para utilizarlos, bien por temor a
la tecnología o bien porque consideran que su tiempo es demasiado valioso para
perderlo aprendiendo a usar las computadoras.

Por su parte, muchas empresas periodísticas tampoco parecen demasiado


interesadas en invertir en la capacitación de sus reporteros para promover el uso
del Periodismo Asistido por Computador o “PAC”. Su “leitmotiv” es la recurrente
crisis económica, pero en realidad muchos medios de la región aún no están
convencidos del potencial que representan el periodismo de investigación y el
PAC para competir con sus rivales.

Pero, además, el conocimiento y el uso del PAC en América Latina superar el


antiguo debate sobre si el periodismo de investigación es una especialidad en sí
misma o si se trata de una expresión redundante. Es común que muchos
egresados de las escuelas de periodismo tengan sueños de convertirse en
estrellas del periodismo de investigación, y también es claro que ese tipo de
vacantes son muy escasas. Pero lo que sí es posible es que todos los jóvenes
periodistas conozcan la metodología del periodismo de investigación y se
capaciten en las técnicas y herramientas del PAC y apliquen esos conocimientos
en su trabajo cotidiano. De esa manera, si bien no tendremos legiones de
periodistas investigadores, sí habrá un creciente número de reporteros rigurosos y
33

sofisticados quienes contribuirán a incrementar la calidad del periodismo en


general.25

El estudio del Centro de Periodistas de Investigación revela definitivamente una


importante herramienta para hacer buen periodismo de investigación, de hecho
buen periodismo. Estas herramientas tecnológicas deberían tenerse muy en
cuenta para aplicarse a un país como Colombia, donde el periodismo investigativo
tiene aún un campo enorme de desarrollo. Con seguridad, el uso del PAC
brindaría a los periodistas y a los medios la posibilidad de ofrecer informaciones
de calidad.

1.3.2 Tipos de investigación

Si cualquier tema se presta para una investigación, o puede llegar a ser tema de
un artículo investigativo, los artículos más importantes se refieren a cuestiones
políticas y problemas sociales, económicos, culturales, ambientales, etc.
Igualmente, las empresas, instituciones y organizaciones son también lugares
para llevar a cabo una investigación periodística. Generalmente, se presentan
fraudes, estafas, contabilidades ficticias y abusos a los consumidores, entre otros.
Sin embargo, no sólo los temas de tipo denunciativo pueden llegar a ser objeto de
investigación; en muchas ocasiones, temas de diversa índole, - actualidad,

25
ALMENDARES, Pedro Enrique. Los desafíos del periodismo investigativo. La investigación periodística computarizada en
América Latina. www.chasqui.comunica.org/armenadares67
34

economía, deportes, entre otros -, pueden conducir al reportero a una


investigación de gran calidad.

Sin embargo, a medida que se desarrolla un artículo los roles de los individuos se
evidencian. A menudo, los lectores recuerdan más a un personaje y su papel en
relación con el caso, que el caso mismo. Un ejemplo es el caso de los supuestos
dineros calientes en la campaña presidencial de Ernesto Samper en la que se
recuerda mucho más a los implicados (Ernesto Samper, Fernando Botero y
Santiago Medina) que los detalles de la investigación misma.

1.3.3 Cómo se escribe un artículo investigativo: más que redactar un


artículo

Redactar un artículo investigativo es, tal vez, una de las tareas más difíciles de un
periodista, porque debe escribir un artículo comprensible, según la información
recolectada durante su extensa investigación, por lo general abundante. Antes de
que el periodista redacte siquiera lo que será su trabajo de investigación, es
fundamental pasar por una fase de planeación y estructuración.

Para escribir un artículo planeado, los reporteros recogen una gran cantidad de
información sobre el tema, pero no la publican tan pronto la confirman; por el
35

contrario, la almacenan, la organizan e invierten el tiempo necesario para


presentarla de la manera más comprensible. El proyecto investigativo exige una
gran cantidad de tiempo y esfuerzo. En el proceso de planeación se pueden gastar
semanas enteras recogiendo información, estudiándola para determinar su
significación y, entonces, categorizarla mentalmente o descartarla. 26

Para dicho proceso es necesario juzgar el material necesario y luego organizarlo


para redactar la información de forma que personas sin ningún conocimiento
previo del tema puedan comprenderlo e interpretarlo.

Algunos de los objetivos de un artículo investigativo es educar, informar y


entretener.27 En este sentido, el periodista y el equipo de investigación deben
completar una serie de pasos, más específicamente un proceso, antes de escribir
acerca de cualquier investigación. Este proceso consta de los siguientes pasos:

• Determinación del objetivo: El periodista pondera exactamente qué le va a


contar al lector, al televidente o al radioescucha. El periodista usualmente
encuentra la misión mucho antes de haber recogido toda la información y de
que llegue la hora de redactar. Teniendo en cuenta la misión, recoge lo
necesario para aclarar el núcleo del artículo.

• El sacrificio: Simplemente en este paso se puede presentar la pérdida de la


investigación por desecho de información. El paso del sacrificio no es fácil,
pero puede lograrse con autodisciplina. Es posible que haya desacuerdo
entre los miembros del equipo periodístico acerca de lo que debería
destacarse, pero en todo caso para el éxito, e incluso para la supervivencia
del proyecto, es importante tomar una decisión apropiada.

26
Ibid. Pag. 41
36

• La alineación de piezas: Desplegando todos los datos se puede detectar la


ausencia de unas cuantas piezas. En el momento de redactar, casi todos los
artículos investigativos exigen más investigación. La alineación de las piezas
implica escribir un plan general.

• El formato: Antes de definir el párrafo de encabezado, debe decidir si su


artículo ha de enfocarse como un caso noticioso directo, como un artículo de
actualidad, o como un artículo ligero y divertido.

- Artículo noticioso directo: Un artículo investigativo es un caso noticioso aun


cuando no se origine en información aportada por un agente externo. Pueden
citarse documentos o personas como fuentes de detalles específicos.

- Artículo de actualidad: En el texto de un artículo serio de actualidad pueden


insertarse un recuadro informativo o un logotipo. Esto alertará al lector sobre el
hecho de que el artículo es una investigación, sobre la envergadura del tema,
si es parte de una serie de artículos, y los nombres de los reporteros que
trabajaron en él.

- El artículo ligero: Un pequeño cuadro relativo a un incidente o personaje,


puede publicarse solo o como una columna lateral a una serie de artículos de
actualidad. Usualmente, este tipo de artículo se centra en un individuo o en un
incidente, y da espacio para la creatividad del redactor. Sin embargo, no se
podría decir, por todo lo expuesto, que esto sea periodismo investigativo.

27
Ibid. Pag. 109
37

• El tono: Se establece mediante la escogencia de las palabras, y de un estilo


formal e informal, pues pueden cometerse errores.

• Transmisión de documentación: Cuando se organizan los hechos de un


artículo investigativo, la meta del periodista es comunicarlo fielmente, sin
comentario editorial. De este modo, y a medida que ordena las diversas
piezas de documentación, deben reconocerse los diferentes niveles de
confiabilidad.

La documentación es sólo tan confiable como la persona que la haya escrito. En


este sentido, el periodista precisará la documentación usada en su artículo. En
este aspecto el reportero atribuye toda documentación; si ésta no puede ser
atribuida, no es documentación.
38

1.4 EL PERIODISMO INVESTIGATIVO EN COLOMBIA

En 1984, Alberto Donadío aún trabajaba en la unidad investigativa del periódico El


Tiempo, en Bogotá. No sabía que esa unidad, fundada por él y Daniel Samper
siete años antes, iba a desaparecer en 1987 asediada por dentro y por fuera
cuando Colombia se hundía en una de sus peores crisis de violencia.

El recrudecimiento de la violencia había comenzado tres años antes, cuando


sicarios pagados por los traficantes de drogas acabaron con la vida del ministro de
Justicia, Rodrigo Lara Bonilla, y se agudizó, a partir de 1986, con el asesinato de
Guillermo Cano, director del diario El Espectador.

“El Periodismo Investigativo en Colombia es muy reciente. Nació en los años


setenta, en el periódico más poderoso, El Tiempo. Fue una tarea muy complicada
para sus impulsores, porque el periódico, como dicen, mató el tigre y se asustó
con el cuero. A pesar de que hubo muchos informes de la Unidad Investigativa de
ese periódico que generaron gran polémica nacional, a medida que la situación se
fue complicando, la agudización de la violencia y de la guerra, y los altos índices
de corrupción, por paradojas de la vida, la Unidad Investigativa de El Tiempo fue
languideciendo hasta morir.”28

Para Daniel Samper, el Periodismo Investigativo surgió en Colombia “a raíz del


debilitamiento de los resortes de fiscalización y vigilancia del Estado, en particular,
y la sociedad, en general. Ese debilitamiento fue producto del matrimonio entre los
dos partidos tradicionales, el liberal y el conservador”.

28
ENTREVISTA con Sergio Otálora periodista del Miami Herald. Vía Internet, septiembre de 2002.
39

Igualmente, como uno de los creadores de las Unidades investigativas, Samper


Pizano afirma que el desarrollo del periodismo investigativo se produjo sobre todo
a partir de la Unidad Investigativa de El Tiempo durante el gobierno de Alfonso
López Michelsen (1974-1978) y hasta los años 80.

Sin embargo, asegura Samper, otros sucesos parecieron ápices de Periodismo


Investigativo, pero nunca llegaron al pleno desarrollo de la materia. “Hubo, en
distintas épocas, denuncias y campañas anti-corrupción, pero casi siempre eran
esfuerzos aislados, esporádicos, y que obedecían a intereses políticos o
partidistas. El verdadero Periodismo Investigativo nace en los años 70”.

“El Espectador retomó la idea y desarrolló una serie de informes sobre


narcotráfico, violación de los Derechos Humanos e impunidad muy interesantes.
Hasta el año 2000, la unidad de El Espectador generó informes de gran
importancia, de impacto internacional, pero no ha vuelto a producir investigaciones
de alta injerencia en la opinión pública. Para que un periodista investigador pueda
florecer, se requiere una democracia operante y unos periódicos dispuestos a
cumplir su función social de fiscalizadores. Con el proceso 8.000 hubo un furor
coyuntural del Periodismo Investigativo, así como una carrera sospechosa de los
medios por ver quién era el más infidente de todos y lograba “filtrar” indagatorias o
documentos que hacían parte de la reserva del sumario.”29

Las unidades investigativas de varios periódicos que habían surgido en medio de


los debates provocados por las primeras investigaciones publicadas por El
Tiempo, desaparecieron una tras otra después de 1987. Las presiones y las
amenazas contra los periodistas se multiplicaron y llevaron al colapso a una época
considerada como la “primavera del periodismo en Colombia.”

29
ENTREVISTA con Sergio Otálora periodista del Miami Herald. Vía Internet, septiembre de 2002.
40

1.4.1 Crisis del periodismo investigativo en Colombia

Primero, con llamadas telefónicas y papeles anónimos, e inmediatamente después


en las primeras "listas negras" publicadas en la prensa. Ocultos tras la máscara de
siglas, hasta entonces desconocidas, los grupos paramilitares amenazaron de
muerte a líderes políticos de los grupos de oposición, dirigentes sindicales,
abogados, miembros de organizaciones para la defensa de los derechos
humanos, escritores y periodistas.

En 1988, ya no existía en Colombia una sola de las unidades investigativas que se


habían fundado a principios de la década, y muchos de los periodistas que se
habían atrevido a escribir con independencia habían sido asesinados o se habían
exiliado. Daniel Samper, Gerardo Reyes, Alberto Donadío y Antonio Caballero, los
más destacados, vivían fuera de Colombia.

Daniel Samper y Antonio Caballero, ambos, fueron calificados como "sicarios


morales" por los políticos corruptos que ellos habían denunciado en sus columnas
y en sus investigaciones.

Olga Behar y Laura Restrepo, dos periodistas que habían escrito reportajes sobre
el fracasado pacto de paz con las guerrillas y la toma del Palacio de Justicia
durante el gobierno del presidente Belisario Betancur, se habían exiliado en
México. Otros escritores y reporteros que habían publicado investigaciones sobre
los movimientos guerrilleros, como Arturo Alape; o sobre los capos del
narcotráfico, como Fabio Castillo, habían tenido que viajar a Cuba o Estados
Unidos. Los demás acallaron sus plumas o abandonaron los periódicos. Unos
pocos, sin embargo, se exiliaron en silencio.
41

La campaña de terror contra los periodistas alcanzó su punto culminante con el


asesinato del director de El Espectador, Guillermo Cano, y posteriormente con la
explosión de un camión cargado de dinamita que destruyó parcialmente las
instalaciones del edificio del diario en Bogotá. “El Espectador básicamente
denunciaba el narcotráfico, y los editoriales de Guillermo Cano eran muy valientes
en el sentido de que cómo era posible que esos bandidos estuvieran sueltos. A
Guillermo Cano lo mataron por la posición antinarcotraficante”30.

Mientras la lista de muertos se alargaba, los periodistas seguían escribiendo.


Algunos, como Alberto Donadío y Silvia Galvis, lo hacían fuera del país,
desempolvando documentos sobre la historia contemporánea de Colombia en
archivos diplomáticos de Italia e Inglaterra, o investigando la correspondencia de
los embajadores de Estados Unidos en los archivos de la Biblioteca del Congreso.
Otros, como Antonio Caballero y Daniel Samper, continuaban enviando columnas
y reportajes desde España.

En Colombia, nuevos y viejos reporteros, unos adentro y otros afuera de los


periódicos, seguían el rastro de los acontecimientos que sacudían al país. Muchos
de ellos hacían su trabajo con la certeza de que los datos que recogían podrían
morir en las páginas de sus libretas de apuntes.

Otros pensaban que lo sucedido por lo menos se podía investigar. Con los años
tal vez podría servir para escribir un libro de reportajes o, en último caso, una
novela que contara esa historia como una ficción, como lo hizo en México en los
años veinte don Martín Luis Guzmán.

30
ENTREVISTA con Germán Castro Caycedo, escritor y periodista. Bogota, junio de 2003
42

Como consecuencia de las amenazas contra los periodistas y los periódicos, pero
sobre todo debido a la autocensura y la desaparición de los reportajes
investigativos en la prensa diaria, muchos de esos reporteros fueron a parar con
sus cuartillas al "exilio" de las editoriales que se atrevieron a publicar sus libros.

Germán Castro Caycedo, uno de los pioneros del periodismo investigativo en


Colombia, ya había colonizado ese mundo desde 1966, cuando se retiró de El
Tiempo después de siete años de trabajo y publicó el primero de sus nueve libros,
”Colombia amarga”. Fiel a su idea de que "el buen periodismo es producto de la
terquedad y la paciencia", Castro reunió algunos de los mejores reportajes que
había publicado en El Tiempo.

“Hay que meterse en la cabeza que el compromiso del periodista es con la gente,
y que la gente sólo quiere que se le cuente lo que está pasando”, declaró Castro
en 1989. Él ya lo hacía dos décadas atrás cuando investigó, con la colaboración
de Alberto Donadío, los estragos causados por el uso del “Agente Naranja” en la
fumigación de cultivos de algodón. La publicación de estos reportajes y su serie
sobre la corrupción en la Contraloría General de la Nación, que causó la salida del
Contralor y 300 personas más, son tal vez los antecedentes históricos más
importantes del periodismo investigativo moderno en Colombia.

Germán Castro Caycedo ha logrado contar algunas de las historias más


conmovedoras de esta época; desde la colonización de las selvas del Orinoco y el
Amazonas y los rezagos de la violencia partidista, hasta el surgimiento de las
mafias del tráfico de drogas, la emigración clandestina de colombianos a Estados
Unidos, la lucha de los guerrilleros y la historia más reciente de los grupos
paramilitares.
43

Alberto Donadío, con métodos de trabajo diferente y metido casi siempre en los
archivos, ha hecho algo parecido. Desde su primer libro, aparecido en 1983, ha
publicado siete más, en los que se ha ocupado de la corrupción en los bancos y
en el Gobierno; el manejo irregular de los fondos del subsidio familiar; la
penetración de los nazis en Colombia; la dictadura militar del general Gustavo
Rojas Pinilla; la guerra entre Colombia y Perú en los años treinta, y la figura
polémica del fiscal general Alfonso Valdivieso.

Por su parte, Gerardo Reyes, quien permaneció fiel a su oficio hasta los días
finales de la Unidad Investigativa de El Tiempo, en 1987, ha encontrado un nuevo
hogar en The Miami Herald. Él también se ha sumado al “exilio” con su libro,
“Periodismo investigativo”, publicado en México por la editorial Trillas, en
colaboración con la Universidad Internacional de la Florida.

El antiguo jefe de Reyes, Daniel Samper, desde su exilio en España, ha publicado


una nueva antología de grandes reportajes colombianos escritos desde 1930
hasta nuestros días, y varios libros donde recopila sus divertidas columnas de
humor. De política y corrupción, sus viejos temas en la Unidad Investigativa de El
Tiempo, no ha vuelto a ocuparse por decisión propia.

Igualmente, para algunos idóneos en materia investigativa el problema tiene sus


raíces en los mismos medios y en la academia. “Con respecto a la desaparición
paulatina de esta rama, sí, está en decadencia, este es un país decadente; en el
mundo entero es vigente, pero aquí no, aquí mandaron el periodismo para el
carajo, se enseña otra cosa que no es periodismo. Pero, además, en la dirección
de los diarios no hay esa conciencia, o hay compromisos políticos o de clase
44

social... por eso ha desaparecido. No hay modelos de investigación o hay muy


pocos”.31

En la actualidad, la eficacia de la existencia del Periodismo Investigativo está en


tela de juicio por algunos periodistas que ya estuvieron por este escabroso
camino. El periodista Diego Fajardo considera que el periodismo colombiano ha
tenido una evolución, comenzó muy fuerte con trabajos serios que se hicieron en
El Tiempo, en el diario El Espectador con Ignacio Gómez, y después se empezó a
desarrollar en TV con Séptimo Día. Como dijo Fajardo, “fue maestro en un formato
que innovó la manera de hacer periodismo investigativo en Colombia, ya que trajo
un elemento adicional, la posibilidad de ver al malo delinquiendo, la posibilidad de
utilizar la cámara escondida para verlo, la posibilidad de inquirir al malo y poderlo
cuestionar. Esto logró darle un nuevo rumbo al periodismo investigativo en
Colombia, que infortunadamente murió así como mueren todos los proyectos de
periodismo investigativo en este país”.

Para Hugo Sabogal, reconocido periodista quien ha trabajado en la BBC, The


Miami Herald, El Tiempo, en las unidades investigativas de El País de Madrid, The
Sunday Times de Londres y la Revista Dinero en Colombia, entre otros, además
coautor del libro “Las Guerras de la cocaína”, resultado de varios años de
investigaciones, la crisis que vive actualmente el periodismo depende de una
suma de factores en contra de esta profesión, más específicamente de la técnica
investigativa.

“A nivel internacional la crisis de la información se da porque la gente decide


libremente qué leer sin intermediación de editores o periodistas que escojan por su
público. En el caso colombiano, sin excluirlo del punto anterior, una tendencia

31
ENTREVISTA con Germán Castro Caycedo, escritor y periodista. Bogota, junio de 2003
45

generalizada que cuestiona la función de los medios; la situación interna del país,
enmarcado en un conflicto armado que debilita y convierte en blanco de guerra al
periodismo, en donde además no existe la independencia informativa, está
llevando al periodismo en general a una crisis y una depresión de grandes
proporciones.” 32

“El periodismo investigativo en Colombia ha perdido campo sobre todo en las


grandes capitales en la medida en que los periodistas han sido asesinados por
meterse en temas espinosos. Colombia tuvo una época dorada, que fueron los
años del 65 al 70 y comienzos de los 80´ con la Unidad Investigativa de El Tiempo.
En televisión hubo buenos intentos en noticieros como 24 Horas, con Mauricio
Gómez, o T.V. Hoy, cuando estuvo Andrés Pastrana, cuando se conformaron
grupos de investigación; también unidades investigativas en periódicos como El
Colombiano o El Heraldo. El problema de ello es que resulta muy costoso y hoy
por hoy la nómina de los medios se ha reducido significativamente, y los
periodistas tienen una gran carga y presión laboral. Indudablemente no es serio
que se hagan investigaciones en un día; no se puede hacer una investigación
periodística profunda para un programa que sale en la noche o para una
publicación de una semana. Las grandes investigaciones tienen que hacerse con
tiempo.”33

Además de todas las razones que existan para “justificar” una crisis en el ejercicio
del periodismo de investigación, también está latente el factor tiempo, que por
ejemplo, como lo afirma Juan Roberto Vargas, “porque es un periodismo que
requiere de más tiempo que el periodismo “normal”, es decir, en televisión es muy
complicado hacer periodismo investigativo. En prensa es “más fácil”, usted
requiere de más tiempo; en una o dos semanas se puede hacer una buena

32
ENTREVISTA con Hugo Sabogal, periodista y consultor de contenidos de Legis. Bogotá, febrero de 2003.
33
ENTREVISTA con Daissy Cañón, periodista y abogada. Bogotá, septiembre de 2002.
46

investigación sobre cualquier tema. En televisión el tiempo es tan corto, que usted
necesita estar produciendo material para llenar información. No necesita grandes
investigaciones para eso. Y los medio electrónicos no le están jugando mucho a
eso; no tienen un equipo que se le dedique al asunto”.

Es indiscutible también, y en eso están de acuerdo todos los periodistas aquí


consultados, la situación de inseguridad que ha perseguido a los grandes
periodistas investigadores. Como lo dice Juan Roberto, “total, a uno muchas
veces le da pereza meterse en un tema por miedo. Porque en este país a usted lo
acaban. Hace tres meses yo iba a empezar a hacer una investigación sobre la
mafia del fútbol y me llamó un personaje muy prestante de la vida nacional y me
dijo, - no se ponga a escarbar ahí... no duraría usted ahí medio día”.

Sin embargo, Vargas cuestiona hasta qué punto vale la pena someterse a un
riesgo de este tipo. Es muy distinto hacer un periodismo “más tranquilo” pero
menos riesgoso; o lo contrario, hacer un periodismo que llegue hasta el fondo y en
el cual uno esté expuesto a esos riesgos, a los que están expuestos todos los
colombianos. “No hay que dárselas de víctima. Usted ve a un pobre Fiscal, a un
pobre policía o a un pobre militar que les toca todos los días jugarse el pellejo
porque ese es su trabajo, y si no lo hacen los botan. Entonces por qué uno no lo
va a hacer. Hay que quitarse ese “esto no lo investigo porque me amenazan”. Lo
que se debe hacer es investigar y llegar hasta el fondo si realmente vale la pena,
si no, es preferible no hacerlo, pero no quedarse en ese paño de lágrimas
lamentándose cada momento porque lo van a matar o porque lo van a
amenazar.”34

34
ENTREVISTA con Juan Roberto Vargas, periodista y director fines de semana Caracol Noticias. Bogotá,
octubre de 2002.
47

Otro factor que pone en jaque la labor del periodismo y a los periodistas, es el afán
de los medios de comunicación, los grupos y sus directores de limitarse a llenar
espacios informativos y no preocuparse por la calidad de la información emitida, lo
que se traduce en una visión cortoplacista de los medios: adquirir el poder
pasajero con la información como bandera.

“En Colombia el periodismo, los medios y los periodistas van al son del que más
grite, pendientes de un tren en el que se montan todos los medios para seguir una
tendencia”.35

1.4.2 El futuro del periodismo investigativo en Colombia

Muchos de los periodistas que alguna vez en su vida lograron hacer una
investigación de fondo y con argumentos, que lograra tener relevancia en el
aspecto nacional o internacional, opinan diferente del asunto. Unos dicen que ese
periodismo de investigación no volverá a existir por el intercambio de intereses, ya
sean personales o económicos, “Caracol no va a publicar una investigación hecha
al grupo Ardila Lülle y viceversa; entre ellos mismos se cubren la espalda para no
perjudicarse”36; y otros opinan que será una rama del periodismo que es necesario
destacar. Sin embargo, todos coinciden en el rigor como una “norma” que los
futuros investigadores tienen que tener en cuenta para su profesión. Tal y como

35
ENTREVISTA con Hugo Sabogal, periodista y consultor de contenidos de Legis. Febrero de 2003.
36
ENTREVISTA con Diego Fajardo, periodista del Canal UNO y antiguo miembro del equipo de Séptimo Día.
Bogotá, noviembre de 2002.
48

Juan Roberto Vargas comenta, “hay que seguir adelante, sobre todo con
profesionalismo; hacerlo bien hecho, con rigor, con mística”.

Acerca del futuro del periodismo investigativo en el país, Diego Fajardo opina:
“Realmente no lo veo, mucho menos ahora con los canales privados, ellos están
actualmente en otra cosa, en ver cómo ganan plata; lo veo oscuro en los medios
para el periodismo investigativo. No existe un interés, los medios se están
acabando como le pasó a El Espectador. Hay intentos en la Unidad Investigativa
de El Tiempo, pero son intentos tímidos, que no logran el eco que deberían lograr.
Es un mal momento para el periodismo investigativo, pero es en los malos
momentos en que se toman fuerzas y se sacan las cosas adelante”.

También se ve el periodismo investigativo como una rama fundamental de apoyo a


los organismos de investigación del país para adelantar y recolectar información
que ayude a corto o mediano plazo a esclarecer alguna investigación. 37

Aunque algunos periodistas lo ponen en tela de juicio, el periodismo de


investigación puede tener futuro en la medida en que el reportero cuente con
apoyo, desde las cúpulas gubernamentales hasta los mismos medios de
comunicación; que sepa usar herramientas y estrategias que le ayuden a llegar al
fondo de las investigaciones que realiza. Diego Fajardo asegura que “ahora no
existe algún programa de investigación. Se encuentran programas de opinión que
son diferentes, por lo que es necesario inquirir a los medios de comunicación
masivos grandes (Caracol, RCN) para que hagan periodismo investigativo. Es la
esencia del periodismo. El periodismo no es una cara bonita saliendo a decir una
noticia”.

37
ENTREVISTA con Diego Fajardo, periodista del Canal UNO y antiguo miembro del equipo de Séptimo Día.
Bogotá, noviembre de 2002.
49

Como se ha recalcado antes, y en lo que concuerdan muchos de los personajes


aquí consultados, es fundamental usar el rigor y la disciplina en el ejercicio
profesional.

El periodista Ignacio Gómez piensa que “hay una reducción en la frecuencia y en


la profundidad con la que se hacia periodismo investigativo en Colombia, pero el
fenómeno se puede interpretar también a nivel continental. Actualmente en
Estados Unidos es muy poco el nivel de periodismo investigativo que se está
haciendo”. Paralelamente la razón de la crisis en esta rama en Colombia es
explicada por Gómez de manera puntual: “el término periodismo investigativo
como tal se prostituyó. En Colombia un daño grande lo hizo el proceso 8000,
donde la simple incidencia de un proceso judicial comenzó a llamarse periodismo
investigativo; y comenzó a ser un periodismo más de relaciones, de amistad, de
complot, lo que en el imaginario de la gente se llamaba periodismo investigativo
que en realidad no lo era, eran noticias sobre una investigación judicial, que es
diferente al mismo género del periodismo investigativo. Por otro lado, este es más
costoso que el resto del periodismo, y en situaciones de crisis se han recortado
esos gastos. Y, finalmente, el poder político en América Latina y en Colombia,
específicamente, es cada vez más antidemocrático. Hoy en día con el monopolio
informativo que hay, (Tiempo, RCN y Caracol,) más aun cuando dos grupos fueron
promotores de la candidatura de Álvaro Uribe Vélez; y el tercer grupo, es decir El
Tiempo tiene vicepresidente. Las posibilidades de una crítica o de una
investigación sobre las actividades de corrupción del gobierno se ven muy
cerradas”.

Por otra parte, hay periodistas que le ven el lado positivo a la situación actual del
periodismo investigativo en Colombia. Martha Elvira Soto es una de ellas: “Yo
pienso que el periodismo investigativo tuvo un pico, una caída y en este momento
se mantiene, y pienso que es una posición más importante que el pico o el
50

bajonazo, ya que es mantenerse en el tiempo. Hay muchas cosas en contra, como


por ejemplo que las universidades no preparan periodistas investigativos; los
intereses en algunos medios de comunicación, en áreas de investigación
importantes; la crisis económica hace muy difícil mantener una Unidad
Investigativa; y por factores como las amenazas, que también van en contra del
género. Para mí es más importante que se mantenga, a que esté en un gran auge
o una gran picada”. 38

38
ENTREVISTA con Martha Elvira Soto, jefe de la Unidad Investigativa de El Tiempo. Bogotá, octubre de 2002.
51

2. LAS LEYES EN EL PERIODISMO INVESTIGATIVO

Es indispensable que para el correcto desempeño de la labor, el periodista


investigador tenga un conocimiento de las leyes que regulan su actividad
profesional, las cuales definen el marco sobre el cual se va a desenvolver
profesionalmente. Esto le puede evitar altercados y situaciones de riesgo jurídico y
legal en su contra. Por esto, el periodista investigativo es amparado por una serie
de leyes las cuales le facilitan su trabajo y trazan una división o margen legal entre
su persona y sus investigaciones.

Así mismo, el investigador debe tener presente los derechos que amparan a las
personas a las que pueda estar investigando. No es una simple cuestión
individual, sino un deber ético y moral que debe ejercer.

Sin embargo, hay que tener en cuenta las limitaciones legales del periodismo
investigativo. Dichas limitaciones pueden ser meramente entes reguladores para
los periodistas y para los mismos medios de comunicación.

“Sobre las limitaciones legales del género en Colombia, primero que todo están las
normas, que no serían una limitación sino un freno, y que además son necesarias.
Pero una de las cosas que más lo ha perjudicado, y servido, es la Tutela. Lo malo
es que lo medios generalmente se asustan con el solo hecho de que alguien pida
una rectificación. Uno de los problemas más graves de la parte legal es el "coco"
que significa lo legal. La gente se muere de susto sobretodo en radio y televisión
porque son medios controlados por el Estado, a diferencia de los medios
impresos. Germán Castro Caycedo dice que lo ideal es ser libre a través de un
52

libro, pero que obviamente tiene riesgos. Desde el punto de vista legal, los
abogados que amenazan a los medios con tutelas los asustan, así que más que
las normas en sí, porque las normas tienen que existir, me parece grave que
estemos asustados, muchas veces por desconocimiento y otras veces por el
temor que le da a los mismos dueños de los medios o al mismo periodista. Es por
esto que cuando uno hace una buena investigación y no deja ningún clavo suelto,
no hay posibilidades de que las cosas legales lo molesten.”39

Sin embargo, factores como el libertinaje dentro de los medios de comunicación,


en cuanto a las consecuencias se refieren, ha provocado que se tomen medidas
legales respecto al control de emisión de información por parte de los medios
masivos de comunicación.

“En algunos casos no existe una reflexión en la información, y en repetidas


ocasiones se ha visto que por intereses creados y un mal manejo de las
investigaciones, el nombre y la reputación de las personas resulten vulnerados. De
ahí que en la Constitución de 1991 se hayan incluido algunas reglamentaciones
que limitan el ejercicio del periodismo. En cierta medida esto es consecuencia de
la falta de responsabilidad de algunos periodistas que se encargaron de enlodar el
nombre de algunos personajes de la vida nacional con investigaciones triviales.” 40

Derecho a la información y responsabilidad social


Tanto el derecho a la información como la responsabilidad social son dos aspectos
de suma importancia, correlacionados entre sí, que cada día mantienen una
vigencia y se convierten en temas que generan polémica en el ámbito periodístico.

39
ENTREVISTA con Daissy Cañón, periodista y abogada. Bogotá, septiembre de 2002.
40
ENTREVISTA con Hugo Sabogal, periodista y consultor de contenidos de Legis. Bogotá, febrero de 2003.
53

Por un lado, la responsabilidad social del periodista o del medio de comunicación


es subalterna del Derecho a la Información. Por esto, este mismo derecho tiene
unas claras limitaciones, las cuales implican anteponer de cierta manera el respeto
al derecho de los demás. “Diferente es informar con objetividad y veracidad que
injuriar y calumniar”41

De alguna manera se puede ligar el derecho a la información con el ejercicio del


periodismo investigativo, de manera que se pueden nutrir el uno del otro
desembocando en una serie de postulados.

Los limites de la información de investigación se pueden exponer en puntos como


la objetividad, las especulaciones, las conclusiones apresuradas, considerar
verdadero algo que no se ha establecido, equilibrio de la información, cómo se
afecta el buen nombre, el límite legal de la reserva sumarial y la capacidad de
acreditar la prueba de aseveraciones.

• Informar exactamente y con objetividad: El medio de comunicación y el


periodista deben informar exactamente las cosas como las percibe y como
son. No es labor ni función del medio llevar a cabo análisis ni juicios acerca
de la información que se transmite. Su única obligación es difundir
información para que el público la interprete. Es así como se llega a una
información imparcial.
• Las especulaciones: En medio de la inmediatez que acosa a los periodistas y
a los mismos medios de comunicación, es fundamental que el ejercicio y la
labor periodística no recaiga en utilizar especulaciones como fuentes sólidas
de información.

41
SANDOVAL, Jairo Antonio. “Manual de normas esenciales sobre medios de comunicación”. Imprenta Nacional
Colombiana. Bogotá 2001. Pág. 199.
54

El fenómeno mediático de la chiva informativa provoca reiteradamente que el


periodista incurra en el grave error de generar información basada
explícitamente en datos no confirmados o emitidos por una sola fuente o una
fuente no confiable.
• Considerar verdadero algo que no se ha establecido: Al igual que las
especulaciones, el periodista y el medio de comunicación deben centralizar
su atención en verificar información de cualquier índole antes de emitirla de
manera oficial al público. El periodista debe tener un criterio y una madurez
profesionales para determinar qué datos informativos, y en qué momento
emitirlos.
• Equilibrio de la información: En el momento de transmitir información se debe
tener en cuenta algo más que el simple hecho de emitir datos noticiosos que
puedan llegar a ser de índole violenta, espectacular o sensacionalista. No se
puede dejar de lado que también se encuentran hechos noticiosos en temas
sencillos, los cuales pueden llegar a producir en los receptores sentimientos
de tranquilidad y seguridad.
• Cómo se afecta el buen nombre: Llega a ser muy claro que el buen nombre
se ve afectado cuando se propaga, sin fundamento alguno o muy poco,
información con la cual se juega con la honra, la fama y el honor de una
persona. Este caso puede llegar a ser un brazo del fenómeno de considerar
cierto algo que no lo es, o del hecho de basar datos relevantes para una
investigación en especulaciones.
• El límite legal de la reserva sumarial: Dentro de los límites legales del
periodista investigador, y a los cuales se debe someter como ciudadano
antes que periodista, es la reserva sumarial. El respeto por las normas
legales y el curso regular de los procesos deben primar y anteponerse ante el
afán amarillista de los periodistas, amparados por los medios de
comunicación. El título de periodista no le da derecho de sobreponerse y
55

saltarse los procesos legales estipulados, bajo los cuales se deben regir
todos los demás ciudadanos. “El periodista, antes que la noticia, debe
evaluar la pertinencia y legalidad de su divulgación aun antes del sacrificio de
la chiva, en salvaguardia de más elevados intereses como los que se derivan
del éxito de investigaciones o actuaciones en curso”.42

• Acreditar pruebas: La esencia del periodismo investigativo, aun más que la


información misma, es la capacidad de acreditar pruebas de los datos
obtenidos a lo largo de una investigación. Teniendo en cuenta que este
género está basado estrictamente en los datos que se puedan corroborar, no
se puede dejar de lado, y menos olvidar que cada dato comprobado será un
peso más a favor del tema sujeto a investigación.

El periodismo investigativo es un género que va más allá de la información


escueta y superficial, las pruebas y su capacidad de verificación constituyen uno
de sus principales elementos.

2.1 La Tutela

La Tutela es esencialmente un mecanismo que se creó en la reforma


constitucional de 1991 y que promueve la defensa y protección de los derechos
fundamentales de ciudadanos.

42
Ibid. Pag. 201.
56

En el caso específico de los periodistas, el uso de la Tutela es un mecanismo que


les permite acceder a información de las autoridades públicas en el caso de que
esta les sea negada, después de solicitar un Derecho de Petición a Documentos
Públicos.

Uno de los grandes problemas de los periodistas hoy en día es cuando empiezan
a realizar una investigación y los investigados sienten que sus derechos
fundamentales, como el de la intimidad, están siendo violados, lo que empieza a
acarrear problemas, no sólo para el periodista sino también para el medio en el
que este trabaje. Esta se convierte en una razón para que aquellos que hacen
periodismo investigativo se independicen y trabajen por su propia cuenta y riesgo.

Es claro que la Tutela se ha convertido en un mecanismo que desfavorece al


periodista y puede evitar que algunas investigaciones sean reveladas, así sea que
lo investigado vulnere derechos comunes. Se enfrentan los derechos del
periodista como informador con los derechos del particular, cuando este considera
que las publicaciones agreden sus derechos (caso de los abortos ilegales que
Séptimo Día quería emitir y un fallo de la Corte evitó que saliera al aire y adujo la
violación del Derecho a la Intimidad de los doctores que lo practicaban).

La tutela como enemiga del periodismo


Como se observa en el libro de María Teresa Herrán “Tutela, Periodismo y Medios
de Comunicación” en los casos analizados, la reacción ante los fallos de tutela
demuestra que los dueños de los medios de comunicación y sus directores no
necesariamente están de acuerdo con sus periodistas. Ello no es un pecado, sino
tal vez un acicate saludable para la democracia.

La razón de esa percepción diferente se encuentra en que en esa batalla contra la


tutela han salido a flote intereses particulares, contrapuestos al interés colectivo.
57

No siempre tras la defensa de la libertad de prensa se escuda tan sólo el deseo de


preservarla.

Es también evidente el contraste que existe entre esa cruzada de algunos medios
de comunicación contra la Tutela y, en cambio, su pasividad respecto a otras
amenazas a su derecho a la información como las restricciones sugeridas por el
Ejecutivo o el Legislativo para los estados de excepción; la presión y manipulación
de los políticos o los grupos económicos adquirientes o monopolizadores de
medios; y la asfixia producida por esta realidad a otros derechos emanados
también del derecho fundamental a la información, como serían el acceso
pluralista a los medios, la igualdad de oportunidades, el derecho de expresar
libremente la opinión, la independencia profesional, etc.

Los argumentos en contra


Con base en los razonamientos expuestos por los gremios empresariales de los
medios de comunicación (Asomedios, Anda, Ucep) y, por desgracia, en alguna
oportunidad por el Círculo de periodistas de Bogotá (CPB), se pueden sintetizar
las argumentaciones en contra de la tutela.

Primer Argumento: la acción de tutela no cabe en el periodismo


En discutible declaración producida a raíz de la decisión de la jueza de arrestar a
Juan Carlos Pastrana43 por desacato, el Círculo de Periodistas de Bogotá
expresaba:

1. Se reitera enfáticamente la convicción de que la acción de tutela, a la luz


del muy claro texto constitucional, no procede contra el periodismo.

43
Ex director del diario La Prensa. Véase caso completo. HERRÁN, María Teresa, Tutela, Periodismo y
Medios de Comunicación, Tercer Mundo Editores. Bogotá, 1993, pp. 146 - 152
58

2. Que convoca a la comisión legal del CPB para que analice con urgencia las
acciones que se adelantaron con el fin de definir de una vez por todas que
la acción de tutela no procede contra el periodismo.
3. Que rechaza como atentatoria contra la libertad de prensa y contra la
existencia de la misma del periodismo colombiano la decisión de la jueza 16
del Circuito Penal, de someter a detención al director del diario La Prensa,
Juan Carlos Pastrana Arango.
4. Que mira ya no sólo con preocupación sino con frustrante sensación de
injusticia el hecho de que a los periodistas se les está sometiendo en forma
cada vez más frecuente a la censura amordazante por parte de quienes
tiene como misión fundamental preservar y defender los derechos
ciudadanos.
5. Que el CPB no puede pasar por alto la ligereza con que frecuentemente se
le aplica a los periodistas y a los medios el recurso de tutela, convertido así
en el gran garrote de la libertad de información, que es no sólo un derecho
fundamental del individuo, sino base de apoyo de la libertad para la
democracia.
6. Que tampoco puede ser utilizada por los jueces para obligar rectificaciones
que vayan contra la conciencia del periodista y contra la verdad
comprobada y libremente difundida. La verdad no es rectificable.44
Pero algunos socios del CPB estuvieron en desacuerdo, y contra esa afirmación
alegaron hechos como los siguientes:

a. El periodista no es una casta privilegiada. Si las acciones de tutela


proceden contra cualquier ciudadano o institución que viole los derechos
fundamentales de los demás ciudadanos, no se ve por qué no haya que
aplicarla a los periodistas.

44
Comunicado publicado en El Espectador, sábado 8 de mayo de 1993, p. 12ª.
59

b. Un examen de la práctica periodística en Colombia muestra que hay


violaciones de derechos fundamentales por parte de los periodistas. Afirmar
que la tutela no procede contra el periodismo equivale a sostener: o que los
periodistas, por naturaleza, no violan los derechos humanos, o que ante
esas violaciones el ciudadano ofendido no puede acudir a ese recurso.
c. Afirman ustedes en otra parte del comunicado que la tutela es “el gran
garrote contra la libertad de información”. La expresión tiene toda la ligereza
de los lugares comunes y olvida que la libertad de información ha resultado
más limitada por los abusos de los medios de prensa que por la acción de
los jueces. La Corte Constitucional revisó que las tutelas solicitadas fueron
hechas por personas que no tenían otra defensa contra el poder de los
medios.
d. No puede confundirse el derecho a denunciar con el derecho a sentenciar.
El primero, ejercido con responsabilidad, es elemento esencial del derecho
a la información. El segundo es propio de la rama judicial.
e. Centran ustedes su declaración en la afirmación sobre la “verdad no
rectificable”. Pero, por ética profesional, se exige que la verdad sea
comprobada, pero muchas veces los medios no lo hacen.
f. Finalmente, las decisiones de los jueces no pueden ser invalidadas por
editoriales ni por titulares de prensa. El día en que esa práctica se convierta
en corriente, habrá comenzado la decadencia de la sociedad, y no es la
responsabilidad que queremos llevar como periodistas.45

45
Carta dirigida a la junta directiva del CPB, mayo 15 de 1993
60

Segundo argumento: La tutela no es necesaria, por cuanto se puede


denunciar penalmente por calumnia e injuria.
En teoría, esta argumentación es válida, porque efectivamente existe una
tipificación legal de los delitos contra el honor, la dignidad y el buen nombre. De
otra parte, hasta ahora la tutela ha sido más que todo entablada en contra de los
medios de comunicación o de los mismos periodistas, pero eso no impide que lo
sea a favor de estos y de sus periodistas, para proteger lo que son sus derechos
fundamentales.

Un ejemplo de este argumento es el pronunciamiento de la Corte Constitucional


en mayo de 1993 a favor del periodista Plinio Apuleyo Mendoza, abusivamente
citado a comparecer ante el Congreso por el senador Salomón Náder.46

Tercer argumento: La tutela va contra la prohibición de censura.


Los que atacan la tutela, como era el caso del diario La Prensa y su Director, han
llegado a asegurar que se trata de una censura de prensa, pero aun tratándose de
actos emanados de la rama ejecutiva o legislativa, la teoría del núcleo esencial del
derecho permite restringir los derechos fundamentales por razones de interés
social.

Las mismas razones existen para que no se considere la prohibición de censura


como un derecho absoluto, sin limitaciones.

46
Véase caso completo. HERRÁN, María Teresa, Tutela, Periodismo y Medios de Comunicación, Tercer
Mundo Editores, 1993, pp. 213 - 215
61

Cuarto argumento: La autorregulación es suficiente.


A raíz de la orden de arresto contra Juan Carlos Pastrana,47 Asomedios
consideraba que “la prohibición constitucional de censura reafirma la vigencia de
la autorregulación como mecanismo capaz para hacer compatible el ejercicio de
las funciones de los medios con la responsabilidad periodística. Además
Asomedios argumentaba que era suficiente con la simple autorregulación por
cuanto permite a los medios de comunicación en Colombia cumplir su misión de
informar con profesionalismo, responsabilidad, oportunidad y veracidad”48.

Pero no basta sólo con la simple rectificación de noticias, porque resulta que ni en
uno ni en otro ámbito, las herramientas morales y éticas son las más deseables,
pero no pueden reemplazar las legales.

Derechos protegidos
A continuación se explicarán los derechos que amparan al periodista en el
ejercicio de la labor investigativa y que pueden ser cobijados por la ley con
relación en la esencia misma del derecho a la información.

• Independencia y libertad del periodista (cláusula de conciencia y protección


contra presiones que provienen de la pauta o de los propietarios de los
medios de comunicación)
• Protección al ejercicio.
• Derecho a la imparcialidad y a la veracidad.
• Libertad de expresar y difundir opiniones.
• Prohibición de censura.

47
Herrán, Op. Cit. P. 142
48
Comunicado de Asomedios publicado en El Espectador, Sábado 8 de mayo de 1993, Pag.12a
62

• Responsabilidad social reflejada en el derecho y deber de supeditar los


intereses particulares a los intereses colectivos.
• Derecho a la inviolabilidad del secreto profesional.
• Derecho a acceso a documentos.
• Derecho a formar colegiaturas.
• Derecho a la igualdad de oportunidades en el uso del espectro
electromagnético y a que no se vea afectado por prácticas restrictivas.
• Libertad de fundar medios de comunicación.49

Los anteriores derechos son los fundamentales para realizar una investigación
periodística de calidad que permita confirmar la información recibida y acumulada.
Desde nuestro punto de vista, si se llega a fallar en alguno de los puntos
anteriores, la investigación se podría ver comprometida, y la confiabilidad y
seguridad que los periodistas tengan, tanto en ellos mismos como en la misma
investigación, se podría ver afectada. Así mismo, para lograr que estos puntos se
alcancen con éxito, es fundamental un apoyo del medio que “patrocina” la
investigación. Debe existir un apoyo incondicional que le demuestre respaldo a su
equipo periodístico y que esté dispuesto a darle credibilidad al medio de
comunicación por medio de un sostén profesional y un sentido y vocación hacia la
verdad y hacia todo ese ideal que los medios de comunicación deben representar.

49
HERRÁN, María Teresa. “Tutela, periodismo y medios de comunicación”. Tm Editores. Bogotá, 1993. pp.
189 - 199
63

2.2 LEYES INTERNACIONALES QUE AMPARAN EL EJERCICIO DEL


PERIODISTA INVESTIGADOR EN COLOMBIA

El ejercicio del periodista investigador está amparado tanto por leyes


internacionales como nacionales en cada país donde existe la libertad para llevar
acabo investigaciones y denuncias.

Desde la declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU, hasta la


Constitución Nacional de cada país, incluyen artículos que protegen la vida y el
derecho de investigar en el marco del periodismo y la responsabilidad social.

Declaración Universal de los Derechos Humanos de la ONU, 1948


Artículo 19: todo individuo tiene derecho a la libertad de opinión y de expresión;
este derecho incluye el de no ser molestado a causa de sus opiniones, el de
investigar y recibir informaciones y opiniones, y el de difundirlas, sin limitación de
fronteras, por cualquier medio de expresión.

Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos (aprobado en Colombia por la


Ley 74 de 1968 y ratificado en 1969; entró en vigencia en 1976)

2. Toda persona tiene derecho a la libertad de expresión; este derecho comprende


la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e ideas de toda índole, sin
64

consideración de fronteras, ya sea oralmente, por escrito o en formas impresa o


artística o por cualquier otro procedimiento de su elección.

Convención Americana de Derechos Humanos o Pacto de San José de Costa


Rica, aprobado en Colombia por la ley 16 de 1972, ratificada el 31 de julio de
1973, la cual entró en vigencia en 1975.

Artículo 13: Libertad de pensamiento y expresión.

1. Toda persona tiene derecho a la libertad de pensamiento y expresión. Este


derecho comprende la libertad de buscar, recibir y difundir informaciones e
ideas de toda índole, sin consideración de fronteras, ya sea oralmente, por
escrito o en formas impresa o artística o por cualquier otro procedimiento de
su elección.

2. El ejercicio del derecho previsto en el inciso precedente no puede estar


sujeto a previa censura sino a responsabilidades ulteriores, las que deben
estar previamente fijadas por la ley.

3. No se puede restringir el derecho de expresión por vías o medios indirectos,


tales como el abuso de controles oficiales o particulares de papel para
periódicos, de frecuencias radioeléctricas, o de enseres o aparatos usados
en la difusión de información o por cualesquier otros medios encaminados a
impedir la comunicación, la circulación de ideas u opiniones.
65

2.3 LEYES NACIONALES QUE AMPARAN EL EJERCICIO DEL PERIODISTA


INVESTIGADOR EN COLOMBIA

Las leyes nacionales que llegan a proteger el ejercicio del periodismo en Colombia
están enfocadas a resguardar al género, debido a su importancia social y política
dentro del mismo país, y no amparar al periodista por el simple hecho de
pertenecer a un medio de comunicación.

Tal es la importancia que le concede la Constitución de 1991 al derecho a la


información que el periodismo es la única profesión amparada por la carta magna
para ofrecer, expresamente, la garantía de su libertad e independencia
profesional. Esta protección se debe al efecto trascendental que la actividad
periodística ejerce en la sociedad democrática y no al periodista por el simple
hecho de serlo.50

Haciendo referencia al Artículo 73 de la Constitución nacional el cual reza: “La


actividad periodística gozará de protección para garantizar su libertad e
independencia profesional”, se puede aclarar que este es uno de los aportes más
valiosos que hace la Constitución al ejercicio periodístico, el cual puede llegar a
amparar cualquier rama de la misma profesión y de su ejercicio.

50
HERRÁN, María Teresa. “Tutela, periodismo y medios de comunicación”. Tm Editores. Bogotá, 1993. Pag.
199 - 200
66

El Artículo 73 es un mandato constitucional directo que ni siquiera requiere


desarrollo legal para que sus destinatarios, el periodista y los medios de
comunicación, sean protegidos, ya que forman parte del núcleo esencial del
derecho a la información, en este caso por la vía del informador. En efecto, la
libertad y la independencia profesional son condiciones sine qua non (sin el cual
no) para que el periodismo pueda cumplir con las exigencias constitucionales de
imparcialidad y veracidad, y para que a la vez sea protegido su derecho
fundamental de prohibición de censura, el cual también forma parte del núcleo
esencial del derecho a la información. Nadie puede alegar que una información
censurada es una información imparcial y veraz.51

“Cuando la Constitución habla de los derechos y de estar bien informado, quiere


decir que no habrá censura. Hoy en día tenemos derecho a informar, y los
colombianos tienen derecho a estar informados. Normalmente la investigaciones
terminan siendo censuradas. Por ejemplo, cuando Manuel Teodoro vino a la
Universidad, contó cómo muchas veces la censura proviene de los mismos
medios. Yo creo que lo mejor es el periodismo independiente y el creciente
fenómeno del periodista "free lance", aquel que prepara un gran reportaje y logra
que una buena revista lo publique.”52

El acceso a documentos
Es un derecho del periodista investigador, y un aspecto esencial, el tener acceso a
documentos oficiales, en especial cuando en un gran número de oportunidades
son el medio más seguro para confirmar informaciones de procesos. No en vano
la Constitución de 1991 estableció que “todas las personas tienen derecho a
acceder a documentos públicos, salvo en los casos que establezca la ley”. En este

51
IBID. Pag. 205
52
ENTREVISTA con Daissy Cañón, periodista y abogada. Bogotá, septiembre de 2002.
67

caso quedan cobijados por dicha excepción los documentos de carácter reservado
por disposición legal o constitucional, por ejemplo los que hagan referencia o
tengan relación con los temas de defensa y/o seguridad nacional.

Un ejemplo es el caso de la tutela de Alberto Donadío. El periodista estableció en


su resumen del caso que:
Se ordene al Procurador General de la Nación que le permita la consulta de todos
los documentos y expedientes a los cuales solicitó acceso. Fundamenta su acción
en el hecho de que su petición no fue absuelta durante el plazo taxativo previsto
por la ley 57 de 1985, caso en el cual dicha ley entiende absueltas todas las
peticiones por silencio administrativo positivo. Ante que “lo que está en discusión
no es la reserva sino otra cosa: la petición no fue absuelta en el plazo
taxativamente fijado por la ley”.53

La Procuraduría le restringió el acceso a los documentos aun cuando algunos


expedientes requeridos por Donadío estaban bajo reserva sumarial y su fin era
tener dichos documentos como información no duplicable para sus archivos
personales.

Sin embargo, la Constitución establece en su artículo 74: “Todas las personas


tienen derecho a acceder a los documentos públicos salvo los casos que
establezca la ley”.

Para los periodistas existen mecanismos específicos y especiales; una


herramienta, aparte de la de Tutela, a la que pueden acudir los periodistas para
acceder a información y que no es muy conocida por muchos es el Recurso de
Insistencia que se contempla en la Ley 57 de 1985. Este puede ser usado ante

53
Ibid. Pag. 52
68

el Contencioso Administrativo para aquellos casos en los que al periodista se le


niegue el acceso a documentos públicos cuando las entidades consideran que son
de reserva, a menos que exista la ley respectiva que los protege. La respuesta a
este Recurso debe ser dentro de los 10 primeros días. Con esta herramienta se
destaparon varios escándalos como la Crisis Financiera del 82 y el caso de las
armas de Jamaica.

Un periodista también puede acudir a los jueces del circuito cuando se le niegue
un Derecho de Petición para solicitar la protección inmediata de sus derechos de
informar, en el término no mayor a 48 horas.
69

3. JUSTIFICACIÓN DEL PERIODISMO INVESTIGATIVO

¿Por qué se hace periodismo investigativo en el mundo?


Para Juan Roberto Vargas, subdirector de La Noche y editor de justicia del diario
El Tiempo, el periodismo investigativo es el mejor de todos, porque es el que lo
obliga a ser riguroso, a ser exacto, a buscar temas de importancia y a buscar en
los temas – hablo de todos los periodistas – la profundidad. “Buscar las cosas que
no todo el mundo busca, por afán, por pereza, y hacerlo bien hecho. Ese es el
mayor reto que tiene ese periodismo”.54

La razón para la existencia de este tipo de periodismo es la necesidad de las


sociedades a estar informadas sobre las amenazas o problemas ocultos que se
manejen, que puedan llegar a afectarlas en cualquier aspecto. El periodismo
investigativo se puede considerar como una técnica empleada, o la “voz” de la
sociedad, para denunciar estos mismos problemas. Existe la necesidad de
publicar los problemas de repercusión social.

Otra de las razones por las que se decide hacer profundas investigaciones en el
periodismo son los efectos sobre la opinión pública, como la espiral del silencio, el
mal manejo de la Agenda Setting y la brecha del conocimiento.

Brevemente veremos qué significa cada uno de los efectos:

54
ENTREVISTA con Juan Roberto Vargas, periodista y director fines de semana Caracol Noticias. Bogotá,
octubre de 2002.
70

• La Espiral del Silencio: Los medios, en particular la televisión, influyen en las


audiencias elaborando reconstrucciones de realidades. Conducen la
percepción de la audiencia a partir de la recreación de la realidad y no de la
realidad misma. Si el público piensa, analiza e interpreta realidades
reflejadas y no tangibles, su postura siempre tendrá un sesgo. Si la opinión
precede a la participación, esta se verá desenfocada; no se ejerce
autonomía. De aquí se desprende que los medios, definitivamente, publican
según sus intereses o conveniencias; igualmente, si estos medios
pertenecen a grandes grupos, los intereses económicos, personales, etc, son
una constante.
• La Agenda Setting: Puede ser sinónimo de jerarquización de las noticias,
capacidad para establecer la agenda temática, canalización periodística de la
realidad, papel de los medios en la difusión, selección y ocultamiento de
noticias y orden de importancia que conceden los medios a los temas.

En su funcionamiento se desempeña como un gate keeper (guarda puertas):


Oculta lo que le interesa y deja pasar sólo lo que le conviene.

• La brecha del conocimiento: contradice que a mayor número de medios,


mayor información; y a mayor información mejor comprensión del entorno.
Nos han convencido de que estamos en la sociedad de la información,
cuanto tocamos las puertas de la desinformación. Es decir, la Opinión
Pública se ha convertido en un objeto de mercado, al cual los medios han
extendido su labor comunicacional hacia la publicidad.

A razón de estos efectos es que surgen los investigadores independientes, para


que al público le llegue la información completa y verdadera sin pensar en las
presiones de los grandes medios de comunicación.
71

El nacimiento de esta rama del periodismo no se conoce con exactitud, tampoco


existe una escuela definida dedicada a enseñar el periodismo investigativo como
tal. De hecho, es algo que los periodistas han aprendido a hacer por sus propios
medios; pero el aprendizaje tiene que ser desde la academia para ejercer la
profesión basada en valores humanos y éticos que le permitan al periodista
trabajar con la verdad y por la verdad, sin sustentarse sólo en rumores.

“Infortunadamente, el afán de figuración, de rating, de vender; el afán de lograr


éxitos, hace que los periodistas pequen un poco de no acercarse a esa rigurosidad
en la que el periodismo, como norma, debería basarse para todo, no sólo para el
investigativo”.55

Otro aspecto que vulnera al periodismo investigativo es la crisis por las que
atraviesan la mayoría de las empresas periodísticas, las cuales, a fin de reducir
gastos, reducen recursos humanos, trasladando trabajo al poco equipo
periodístico restante. De este modo, la carga laboral de los periodistas impide que
estos realicen una profunda investigación.

Igualmente, los espacios de investigación y denuncia tienden a cerrarse cada vez


más por el ambiente de guerra en el que se desenvuelven los periodistas
colombianos.

“El potencial periodístico en Colombia no tiene la misma calidad que hace unos
años... Los periodistas no quieren arriesgarse, por eso ya no hay investigación en
el periodismo en Colombia”56

55
ENTREVISTA con Juan Roberto Vargas, periodista y director fines de semana Caracol Noticias. Bogotá,
octubre de 2002.
56
Entrevista con Hugo Sabogal, periodista y asesor de contenidos de Legis. Bogotá, febrero de 2003.
72

En conclusión, todo el periodismo en sí debe ser investigativo; es característica


primordial dedicarle tiempo a cualquier investigación que se pretenda realizar para
ilustrar verdaderas realidades y verdades.
73

4. EL CASO DE SÉPTIMO DÍA

Retomando algunos de los principios fundamentales para la aplicación efectiva del


periodismo investigativo, se recuerda y recalca que la rama se enfoca claramente
en la búsqueda de la verdad. En medio de toda investigación es inevitable que
surjan problemas. La solución es tener toda la información clara y atar todos los
cabos. Antes de abordar un tema, el periodista investigativo debe saber hacia
dónde va encaminada la investigación, qué quiere y va a decir, cómo va a hacer
para conseguirlo, cómo va a mostrarlo y qué reacción va a generar su información
en la sociedad.

Si se diseña un plan de investigación, es imperativo tener en cuenta las


recomendaciones anteriores a fin de darle a la investigación un alto nivel de
credibilidad y confiabilidad en el público.

Si no se conocen los hechos, antes de confrontarlos, la investigación está


destinada a morir. Ante la producción, realización y emisión de una investigación
lo más importante es conocer el tema. Se debe asegurar en dónde se está
metiendo el periodista. Esta es una de las características principales del ejercicio
del periodismo investigativo. No puede haber un margen de error, lo que llevaría al
fracaso de la investigación y al desprestigio tanto del medio de comunicación que
emite la información como de los periodistas involucrados.

A continuación estudiaremos algunos programas de periodismo investigativo del


programa Séptimo Día, así como la manera en que se estaba pasando la
74

información, y la metodología que manejaba el programa, la cual generó su salida


del aire.

Séptimo Día
El proyecto del programa Séptimo Día comenzó con Manuel Teodoro, periodista
de formación norteamericana (país abanderado de la televisión investigativa).
Programas como 20/20 y 60 minutos inspiraron a Teodoro, quien era partidario de
esa línea y admirador de esa tendencia de televisión.

El programa no solo fue concebido como un programa de denuncia, aunque


siempre fue encasillado, y con argumentos de peso de sus televidentes y críticos,
en esta área, sino que también apuntó a romper con el argumento de que el
periodismo de investigación solo sirve para denunciar.

Así, el programa estaba dividido en tres bloques, a los que sus productores
llamaban Bloque A. B y C, y con los que trataban de equilibrar cada emisión.

En estos bloques se trababan temas diferentes al de la denuncia, y se enfocaba el


periodismo de investigación en abordar otros temas, no siempre con el fin último
de denunciar, y así lo explica Javier Giraldo, uno de los periodistas que estuvo
durante la mayor parte de vida del programa.

“El programa se dividía en tres bloques, A, B y C, en los que se trataban temas


diferentes con enfoques diferentes. Por ejemplo, en el Bloque A sí se trataban
temas de denuncia, el Bloque B apuntaba hacía las historias humanas tratadas,
por ejemplo, desde perfiles de personas; y finalmente, el Bloque, C, que contenía
historias livianas, o “light”, tratadas desde otras perspectivas, pero que siempre
75

involucraban la presencia e investigación por parte de los periodistas. Así, en cada


emisión del programa se incluían notas de los tres bloques para equilibrarlo.”57

Sin embargo, Giraldo no considera a Séptimo Día como un programa


exclusivamente de denuncia, sino como un formato que contaba historias
completas con el fin de alertar con temas que interesaban y demostraban la
situación de vulnerabilidad de cualquier persona ante una situación como las
manejadas en el programa, parte de la filosofía de selección de las notas, para lo
cual se usaba al periodista como interlocutor – razón por la que nunca se usó la
dramatización como recurso-. En este sentido se situaba al periodista llevando a
cabo la investigación y la denuncia para demostrar que el investigador estaba ahí,
“haciendo la imagen para usted, el televidente”, como lo describe Giraldo.
Además, parte de las preguntas realizadas por los periodistas eran las mismas
que se le podían ocurrir a un televidente cualquiera en ese momento, involucrando
al televidente en los temas tratados.

Todos los componentes explicados y enunciados se resumían en su titular: “Más


allá de los titulares, la otra cara de los sucesos, las historias que suceden a su
lado día a día”.

Pero todos los componentes del programa demuestran que Séptimo Día, si no fue
concebido como un programa de denuncia, sí se casó con esa tendencia y con los
recursos utilizados por este tipo de periodismo.

En Séptimo Día, conseguir los temas era una parte importante, si no esencial, del
programa. Cómo demostrar que efectivamente se le estaba haciendo un daño a la
sociedad a través de algún mecanismo, cómo grabarlo, cómo mostrarlo, cómo

57
Giraldo, Javier. Periodista, jefe de redacción de “Registro Médico” de Legis.
76

escribirlo y cómo presentarlo era, a simple vista, un objetivo específico para


causar la reacción esperada dentro de la audiencia televidente.

Como asegura el periodista Diego Fajardo, miembro del equipo del programa
Séptimo Día, “en TV hay grandes problemas, como por ejemplo la necesidad de la
prueba visual, porque se necesita demostrar los hechos”.

En Manuel Teodoro nace la inquietud de crear un programa en Colombia que siga


la misma línea de esos programas investigativos norteamericanos que tanto
admiraba. Así se lo propone a Mabel García, presidenta de Caracol Televisión en
la época. Ella acepta el reto de hacer el producto, y es cuando Teodoro comienza
a reclutar su equipo de periodistas investigativos. Los miembros del equipo
empezaron a ser capacitados en el tema específico de periodismo investigativo.
“Él nos ponía a ver 20/20, 60 minutos y hacíamos talleres sobre los temas”.58

Así arranca el proceso del programa. En un principio, manejando un estilo


enmarcado bajo la modalidad de “crónica”, mostraba temas sorprendentes. Con el
tiempo se comienza a transformar en un programa que empieza a descubrir a los
“malos” como tal y a mostrar dónde están, utilizando herramientas como la cámara
escondida (más adelante métodos altamente cuestionados, alegando que su uso
violaba la privacidad de la persona investigada), elemento que defienden los
periodistas del equipo de Séptimo Día.

“Fue una experiencia interesante, donde se trabajaba sabroso, era un programa


semanal con muy buena audiencia en un canal importante en ese momento. Al
principio, lo hacía Prego (programadora de televisión), pero después nacen los

58
ENTREVISTA con Diego Fajardo, periodista del Canal UNO y antiguo miembro del equipo de Séptimo Día.
Bogotá, noviembre de 2002.
77

privados y llega Caracol. Allí subsiste durante algún tiempo y así comienza el
programa”.59

El programa se arma con un director, un subdirector, unos periodistas y


productores que ayudan a los comunicadores a buscar las notas. Los datos de las
notas periodísticas llegan a través de cartas, anónimos, llamadas telefónicas,
visitas que se hacían a programas, personajes, historias que se conseguían a
través de los periodistas, e incluso a través de denuncias de otro medio o de un
periodista miembro del equipo.

Los temas sujetos a investigación se discutían todos los lunes en un consejo de


redacción. Ahí comenzaba la investigación para el fin de semana. Se tenían todas
las posibilidades técnicas y económicas para hacerlo, para viajar, para ir y para
buscar. Había investigaciones que podían durar una semana, ocho días, como
había investigaciones que podían durar dos, tres, cuatro, cinco y hasta seis
meses.

Con el tiempo las cosas se fueron dificultando para Teodoro y su equipo: “no es
fácil, el malo a veces no cae fácil, no es tan fácil encontrarlos, cada vez era más
difícil, y posteriormente el programa se fue, diría yo, degenerando en el sentido en
que no sólo se hacía la investigación y la denuncia, sino que se acorralaba y se
perseguía al malo. Ahí yo no sé hasta dónde, de verdad, uno tiene que también
reconocer a veces errores, todos los cometemos y mucho más en este trabajo.
Pero no sé hasta qué punto eso de buscar al “malo” y denunciarlo, no sé si
nuestra función sea denunciarlo y mostrar su maldad, o ir más allá y tratar de
corretearlo por las calles con una cámara, no sé hasta dónde eso era interesante.

59
ENTREVISTA con Diego Fajardo, periodista del Canal UNO y ex miembro del equipo de Séptimo Día.
Bogotá, noviembre de 2002.
78

Lo que pasa es que al público le gusta, este es un país que vive del morbo, del
show en la televisión y estas cosas, y televisión es eso, no sé hasta qué punto eso
sea importante e interesante. Ese fue entonces el gran colapso del programa. Yo
salí antes de que terminara. Duré en el programa dos años, y este duró tres años.
Fue de lo mejor que pudimos hacer y, definitivamente, la mejor experiencia en los
medios de comunicación”.

La razón específica de qué fue lo que pasó con el programa y qué fue lo que lo
terminó sacando del aire es incierta. Aun así hay algunas teorías, una de ellas es
que el programa era demasiado caro. Fajardo piensa que “en cierta manera lo era,
hacer un programa de investigación cuesta plata en este país; tu no te puedes
meter en una investigación sin un peso. Además necesitas el respaldo de los
medios, si no lo tienes ni te metas; y el programa fue muriendo precisamente por
eso, fue perdiendo el respaldo de las directivas de Caracol porque entró en un
plan de ajuste y el canal considero que era muy caro, pero en últimas realmente lo
que hubo allí, es que era un programa que tocaba espinas de personas y Caracol
se mamo del programa, de que era un programa que tenía tutelas, que era
complicado y quisieron quitarse el dolor de cabeza y decidieron acabar con ese
programa” .

Indiscutiblemente, Séptimo Día fue un programa que ganó amigos y enemigos.


Fajardo reconoce que se cometieron errores, pero también reconoce que fueron
pioneros en un modo de periodismo investigativo nunca antes visto en el país. Tal
vez la primera vez que se mostraba a una persona delinquiendo en vivo. Uno de
los errores más graves que cometió Séptimo Día fue dejarse llevar por el afán del
raiting y la necesidad de satisfacer el morbo de la teleaudiencia colombiana. La
labor de este equipo periodístico debió estar enfocada más hacia el trabajo
explícitamente denunciativo que de persecución, para exponer los casos a la luz
pública.
79

Otro problema notorio del programa y su equipo se puede apreciar en la manera


de juzgar a los investigados en vez de limitarse a que la investigación fuera
estudiada por las autoridades competentes y fueran estas las encargadas de
juzgar e impartir justicia.

EL LIPOMITÓMANO
Fecha de emisión: 31 de marzo de 1998
El caso del cirujano estético, doctor José Arley López, investigado por el
programa, desenmascarando una serie de incoherencias en la vida del personaje,
fue uno de los factores influyentes en la decisión de las directivas del Canal
Caracol para sacar al programa del aire.

El equipo de periodistas del programa se descuidó en extremo con esta


investigación. Por un lado, las ganas y el afán del programa por sacar a la luz
pública problemas que afectaban directamente a la sociedad, impulsó a su equipo
a descuidarse en muchos de los pasos, casi mandamientos, del periodismo
investigativo.

De este modo, se excedieron en la manera de plantear y de presentar al personaje


(López) dentro del programa. Se usaron calificativos como “Lipomitómano”, y
mientras el programa daba paso a la investigación, se utilizaron varias cortinillas
en la que a López se le tildaba de mentiroso, mientras se hacía un análisis de
cada una de las alegadas mentiras y contradicciones encontradas por los
periodistas de Séptimo Día.
80

Por otro lado, y apoyándose en las incongruencias del doctor, los periodistas del
programa comenzaron a indagar en el pasado del personaje corroborando los
diplomas de éste en cursos de diferentes instituciones educativas (Microcirugía
Láser en la Universidad de Harvard, Cirugía Estética y Dermatología en la
Universidad de Nueva York, Medicina en Keen College de Nueva Jersey y un
diploma Ph.D. en Patología Experimental de la Universidad de Nueva York), así
como proyectos que había alegado realizar o que se encontraban en proceso,
tales como la asesoría a la compañía de rayos láser Sharplan Láser, la fundación
de la Universidad de Keen que llevaba su nombre la cual otorgaba becas a
estudiantes hispanos, y la supuesta invitación que se le hizo a su fundación para ir
a operar a los niños de la guerra en Bosnia.

El gran problema en esta parte de la investigación, o de lo que se podría


denominar como segunda fase P (la pesquisa), fue que los periodistas no le
dedicaron el tiempo necesario a corroborar tanto las fuentes como la información
que recibían. Así mismo, la manera de obtener la información no fue la más
apropiada. En el programa se muestra a Manuel Teodoro corroborando un dato y
una parte muy importante para la investigación por vía telefónica. Aunque la fuente
de la información se encontraba en la ciudad de Nueva York, esto no era excusa
para limitarse o arriesgarse a basar datos tan comprometedores dentro de la
investigación en una simple llamada telefónica. Tanto los productores como los
mismos periodistas debieron tomar precauciones, negociando con Caracol,
pidiéndoles apoyo económico para realizar viajes a los lugares donde había pistas,
plantear otra manera para acceder a las pruebas.

El equipo del programa, y en especial Teodoro, no le dedicaron un poco más de


tiempo a la investigación y a la comprobación y corroboración de la información
antes de emitirla. No debieron dejar clavos sueltos, con los cuales el investigado
se pudiera basar y eventualmente cuestionar seriamente la investigación.
81

Indiscutiblemente, los periodistas que viajaron a la ciudad de Nueva York, a


buscar los supuestos centros médicos del doctor López, debieron consultar el
resto de fuentes de esa ciudad y en lugares cercanos (La oficina de registros en
Albany, la Universidad de Nueva York, la Universidad de Harvard y el Colombus
Hospital de Nueva York) para tener la información y los datos de primera mano, y
así por lo menos establecer alguna clase de contacto con las mismas fuentes, la
información y los datos que se encontraban allá. Esto le hubiera dado muchísima
más credibilidad y peso a la investigación.

De igual manera, esta necesidad de desenmascarar a López se tornó en algo


“personal”, en la medida que el personaje fue juzgado y sentenciado por el
programa. El equipo periodístico se descuidó y perdió de vista el objetivo central
de lo que es el periodismo investigativo; un periodismo específicamente
informativo, sustentado en pruebas y datos comprobados con el fin de exponer
algo que la sociedad desconoce y que puede o no llegar a afectarla. Con esta
investigación, se dejaron demasiados cabos sueltos e informaciones a medias.

Aunque la investigación se hubiera tardado un poco en salir a la luz, el equipo de


Séptimo Día hubiera tenido la certeza de que la investigación estaba corroborada,
contrastada y completa. El rigor investigativo quedó relegado y cuestionado por el
afán de emitir una información y un programa a la espera de raiting.

Como afirma Germán Castro Caycedo, “se trata de emitir la información de la


mejor manera posible”. Los miembros del programa dejaron que su obvio
resentimiento hacia el personaje investigado los cegara, e influyera en su
imparcialidad, debieron no juzgar ni emitir emociones. Siendo un problema tan
grave, los periodistas debieron ser cautelosos con todos los aspectos, fuentes y
datos informativos que iban a emitir, para que así López no presentara obstáculos
ni trabas a la hora de emisión del programa. De este modo se hubiera evitado la
82

acción de tutela y la posterior rectificación. Retomando lo que se comenta en la


parte de técnicas y estrategias del periodismo investigativo, esta es una forma de
denuncia y es aquí donde nacen la necesidad y la importancia de la credibilidad de
la información, lo que ennoblece más noble el oficio del investigador.

La veracidad de una investigación sale de la variedad, importancia y relevancia de


las fuentes consultadas. El público le cree más a una investigación al citar a los
directos implicados y a los expertos sobre el tema, así como el contraste de las
partes.

Aunque la alineación de piezas llevó a la innegable verdad de que el Doctor que


se proclamaba cirujano estético tenía muchas incongruencias en su hoja de vida,
el esfuerzo por parte de los periodistas de Séptimo Día no sirvió, debido a los
errores cometidos en la investigación.

Séptimo Día perdió credibilidad a causa de fallas humanas relacionadas con los
procesos de investigación. También ayudó a su desprestigio la manipulación en
altos cargos, impulsada por intereses de fondo.

En 1998 RCN y Caracol estaban a punto de recibir la aprobación de la Comisión


Nacional de Televisión para convertirse en los primeros canales privados del país.
Caracol –concesionario responsable del programa- no quiso entrar en problemas
legales con el doctor López, quien tenía influencias en la CNTV. En este caso, la
tutela -siendo una herramienta a favor de los intereses particulares de las
personas- terminó favoreciendo a López en contra de los derechos e intereses
colectivos de la sociedad.

Muchas veces las presiones políticas o de los mismos grupos económicos dueños
de los medios de comunicación encargados de emitir investigaciones, termina por
83

asfixiar a los periodistas investigadores -o como en el caso de Séptimo Día- al


programa mismo. Con esto, no se quiere decir que todo lo que hacía Teodoro y su
equipo debía ser aplaudido por las Directivas de Caracol, pero sí debió estar
respaldado o redireccionado en una muy buena parte para no descarrilarse y
perder de vista la noble tarea con la que se embarcó el programa.

A raíz del descuido de Séptimo Día, y debido a la tutela impuesta por López, este
se vio en la obligación de rectificar la información emitida, aun conociendo su alta
validez. La rectificación, de 6 minutos y 30 segundos de duración, fue una de las
piedras en el zapato que ayudó a la salida del aire del programa.

FALSO POSITIVO
Fecha de emisión: 16 de mayo de 1999
27 de junio de 1999
El objeto del informe que emitió Séptimo Día era alertar a las mujeres y a la
sociedad que no cayeran en el engaño que en ciertas clínicas se presentaba:
ofrecer abortos a mujeres que no estaban embarazadas. Este programa fue uno
de los más polémicos en cuanto a las estrategias y herramientas utilizadas para
desenmascarar a las personas culpables y a las acciones de las autoridades
competentes con respecto a esta historia.

En este programa se utiliza, al igual que en la mayoría de los otros, la cámara


escondida, objeto de muchas críticas porque aquellos que están siendo filmados
no lo saben.

Muchas personas dentro y fuera del círculo periodístico mundial consideran que el
uso de la cámara escondida es una invasión a la privacidad de la persona que
84

está siendo grabada. Este factor pudo ser un arma de doble filo para Séptimo Día,
ya que, por su reputación de ser amarillista, el uso de la cámara escondida para
recolectar pruebas audiovisuales terminó de etiquetar al programa. Aunque el
recurso indiscutiblemente es una prueba irrefutable, se incurre en la violación de
uno de los derechos fundamentales de las personas.

Manuel Teodoro ignora qué hubiera pasado al no contar con la evidencia del
video de la cámara escondida.

Usar la cámara escondida, según El Tribunal Superior, no se le intentó hacer daño


al médico, sino mostrar que el medio cumplió con la responsabilidad y obligación
social que le corresponde de agenciar intereses colectivos poniendo en alerta a la
sociedad, prevaleciendo ante todo la libertad de información para el bien de los
derechos colectivos antes que el derecho individual.

En este caso, como se comentó anteriormente, las herramientas utilizadas son


criticadas pero útiles, sin embargo el procedimiento que llevó a cabo el equipo de
Séptimo Día no fue el más apropiado.
La imparcialidad fue olvidada al momento de tomar partido en el desarrollo de los
hechos y se llegó al punto de enjuiciar a los participantes responsables de las
acciones, ya fueran buenas o malas.

Otro de los puntos que se deben estudiar y analizar, es cómo los periodistas que
llevaban a cabo la pesquisa, se dejaron llevar por sus emociones, señalando
culpables; sólo la ley puede hacerlo. Llegaron hasta el punto prácticamente de
allanar los sitios de trabajo, y el papel de los periodistas se convirtió en una labor
de policías persiguiendo a los implicados en la investigación, intentando hallar
respuestas a sus actos. La cuarta fase P, o la Presión, fue ejecutada con
85

exagerado rigor, tanto así, que las personas le tenían miedo a los periodistas del
programa por sus duros juicios.

El deber del equipo periodístico de Séptimo Día era denunciar los delitos frente a
las autoridades, y en ningún momento judicializar ni intentar sugerirle a la tele-
audiencia que estuviera en contra de las personas protagonistas con comentarios
como “¿no creen que Yolanda60 es una criminal?”. De hecho, según Javier Darío
Restrepo, defensor del lector del diario El Tiempo, el castigo ya correspondía a
una investigación penal.

En este caso, varios fueron los errores cometidos. Los periodistas olvidaron la
esencia de su labor y se tornaron en jueces y policías al tratar de obtener
resultados de lo que fue una ardua investigación en la recopilación de pruebas,
testimonios. Es en estos casos es cuando el fin no siempre justifica los medios. El
equipo de Séptimo Día, al tratar de hacerle un bien a la sociedad: exponer a los
criminales ocultos detrás de algunos centros médicos, recurrieron a cuanta
herramienta y medio tuvieron a la mano. Si se hubieran llevado las investigaciones
y denuncias por un camino más controlado, los resultados probablemente fueran
otros, y no se trataría de una percepción de un programa de investigación y
denuncia convertido en morbo y amarillismo.

Entrevista a Manuel Teodoro

En una entrevista realizada por la revista TV y Novelas, Manuel Teodoro relata su


experiencia con Séptimo Día, su frustración por la decisión de Caracol de acabar
el programa y el futuro del periodismo de investigación en Colombia.

60
Nombre ficticio
86

- ¿Manuel, siente usted frustración?

Bastante, pero también me agrada porque dejé una semilla sembrada. Séptimo
día demostró que el periodismo de denuncia es útil y necesario si los temas son
tratados correctamente. Aunque se terminó, nos quedaron muchas historias por
contar. Nos quedaron unas 130 denuncias contra alcaldes, asesinos de bebés que
comercializan con sus órganos, concesionarios y muchos más. Me da tristeza es
que no sabemos cómo explicarles a esas personas que tomaron el riesgo de
escribir sus denuncias y que esperaban que fueran investigadas y denunciadas.
Esa es mi gran frustración. Otra frustración es que hubo una gran cantidad de
denuncias que mostramos, y de las que las autoridades se enteraron, quedaron en
veremos porque salía el funcionario respectivo diciendo que se tomarían medidas
en el asunto y no pasaba nada.

- ¿Qué va a pasar con el periodismo investigativo en Colombia?

Es difícil saber, porque, por un lado, Séptimo día demostró que funciona en
televisión, tuvo siempre el mejor rating y el espacio se vendía bien, y no soy el
único interesado en este tipo de periodismo. La denuncia investigada es como un
tentáculo de la ley en un país como Colombia donde la justicia se mueve
lentamente y a veces ni siquiera existe. Mucha gente, en vez de ir a la Fiscalía iba
a Séptimo Día, porque se siente tan poco respaldada. Por eso la frustración en
este momento no es mía, es de todos los colombianos. Me da tristeza es que no
sabemos cómo explicarles a esas personas que tomaron el riesgo de escribir sus
denuncias y que esperaban que fueran investigadas y denunciadas.
87

- ¿Cuántas tutelas tuvieron y cuántas perdieron?

Unas treinta, y sólo perdimos dos. La de José Arley todavía está en discusión,
aunque él no ha podido probar nada contrario a lo que demostramos. Una de las
que perdimos fue la de un médico que manoseaba a sus pacientes y así lo
demostramos, pero tuvimos que cortar las imágenes grabadas porque la ley
protege el derecho al buen nombre, aunque sea un delincuente. Se fue a la Corte
y nos ordenaron no transmitir. Éramos inmaduros y no apelamos. Hoy en día creo
que ese médico todavía está violando mujeres y no pudimos decir el nombre, ni la
clínica, ni la dirección. Otro caso que nos da un indicio de la corrupción del país
fue la de la nota de un médico que ofrecía abortos a mujeres que no estaban
embarazadas, La juez, que era una mujer, nos dijo que no se podía sacar;
apelamos y la sacamos.

- ¿Y ese hombre está en la cárcel por practicar abortos?, algo que es ilegal
en el país?

Fíjate, ahí hay algo muy raro porque no le hicieron nada. Después de cuatro años
de hacer este programa, me di cuenta de que uno está solo, porque, por cada ley
que hay en el país, hay otra que es absurdamente contraria y la contrarresta.
Como que a la ley de libertad de información se opone la del derecho a la
intimidad y la del derecho al buen nombre.

- ¿En algún momento autocensuró una historia por miedo?

En un par de ocasiones, y aunque los periodistas que estaban amenazados


querían que saliera, no quise, pues eran tan evidentes las amenazas contra los
reporteros que las paré, porque yo me siento responsable por su suerte como un
papá con sus hijos, porque ellos a veces se sienten como niños que juegan.
88

Además creo que ninguna historia es tan buena para que valga la pena morir por
ella.

- ¿Si otra programadora le ofrece hacer el programa, lo haría?

Sí, lo haría igual, aunque en este momento yo comprendería que un Canal no


quiera transmitir con denuncias, y uno puede hacer una investigación de salud, de
aventuras como la de Lina que se perdió en la selva y sobrevivió a punta de
guayabas. Una historia es buena por sí misma, o por el trato que se le dé. Yo
puedo hacer un programa sin denuncias. 61

El programa fue sacado del aire, por una parte, gracias a las nuevas herramientas
legales que pueden usar las personas para su defensa, como la tutela -de las
cuales Caracol ya estaba cansada-, alegando el supuesto maltrato contra los
derechos fundamentales de la persona, así como la pérdida del rumbo relacionado
con lo que se pretendía hacer con el programa (investigar y denunciar) y con lo
que se terminó haciendo (persecución y enjuiciamiento). También se le atribuye,
según Diego Fajardo y Javier Giraldo, a que el programa era demasiado costoso y
no estaba representando las ganancias que Caracol esperaba.

61
ENTREVISTA con Manuel Teodoro, periodista, director y presentador programa Séptimo Día. Extraído de
www.encolombia.com/tvynovelas1106-266untinto2.htm
89

5. CONCLUSIONES

El periodismo investigativo en Colombia se ha destacado al revelar muchos


escándalos que involucran, en cierta medida, los intereses colectivos. Actualmente
el periodismo investigativo, al menos en un país como Colombia, está de capa
caída. Las razones sobran. Por un lado, está el poco apoyo económico y general
que dan los medios de comunicación a sus unidades investigativas. Hoy en día, lo
que importa es la inmediatez, la “chiva” y qué medio saca primero la información,
no importa si está corroborada y confirmada. En esta carrera entre los medios de
comunicación, lo único que importa es vender esa información superficial,
consultada y emitida a medias. Parece que algunos medios de comunicación
“ensayaran” la divulgación de las noticias con el público.

En relación con el programa Séptimo Día, el cual nació con la noble labor de
investigar y denunciar aquellos casos desconocidos y que maltrataban a la
sociedad, en un punto perdió el significado de lo que era su función inicial.
Muchos fueron los causantes detectados a lo largo de esta monografía de por qué
el programa se degradó. El afán de la “chiva”, la necesidad de abarcar una
audiencia con raiting y el poco apoyo, complementado por intereses de fondo, de
los concesionarios de televisión como lo fue en el momento Caracol.

Es válido tomar como ejemplo un producto como Séptimo Día para tener un punto
de partida y crear programas de periodismo de investigación, ya que en Colombia
programas de esta índole no existen. Es claro que se emiten reportajes en los
diferentes canales de televisión, pero esa clase de periodismo difiere de las
90

grandes investigaciones, falta profundidad y tiempo, fundamental para su


realización.

Los temas ahora emitidos investigan en el mismo día o en unas pocas semanas,
sin considerar el tiempo para consultar y contrastar todas las fuentes y empaparse
tanto del tema que no quepa el error. En el periodismo investigativo un descuido
puede salir caro para toda la investigación, ya que se manipulan la imagen, el
nombre, la dignidad y el respeto de las personas, entidades u organizaciones.

El periodismo de investigación no lo ha entendido bien la sociedad, los grupos de


presión, los medios y sus periodistas. Ninguno de estos concibe la investigación
como un elemento más de su profesión en el día a día. Es necesario por esto
crear una cultura de investigación relacionada con la denuncia, y con el fomento a
la investigación de temas útiles y de interés para la sociedad.

Además de la falta de disciplina y al ambiente de violencia, hay una suma de


factores en contra del Periodismo de Investigación y, en general, de todo tipo de
periodismo, y es la falta de héroes sanos que den ejemplo y susciten
investigaciones buenas, productivas y creativas, pero, sobre todo, útiles para una
sociedad.

La falta de reflexión y responsabilidad en el ejercicio del periodismo, y en mayor


proporción en las técnicas de investigación, han llevado a la labor periodística a
convertirse en una prensa incitadora e imparcial ante los hechos, inconsecuente y
con más libertinaje que libertad de prensa.
91

6. BIBLIOGRAFÍA

• CAMINOS, Marcet, José María. “Periodismo de investigación: Teoría y


práctica”. Proyecto editorial Ciencias de la Información. Editorial Síntesis S.A ,
1997
• FAUNDES, Juan Jorge. “Ética y contexto del periodismo de investigación”.
Publicado en www.saladeprensa.org.
• GAINES, William. “Periodismo Investigativo para Prensa y Televisión”. Tercer
Mundo Editores. Bogotá, 1994
• HERRÁN, María Teresa. “Tutela, periodismo y medios de comunicación”. Tm
Editores. 1993.
• RODRÍGUEZ, Pepe. “Periodismo de investigación: técnicas y estrategias”.
Paidós comunicaciones. Barcelona 1994.
• SANDOVAL, Jairo Antonio. “Manual de normas esenciales sobre medios de
comunicación”. Imprenta Nacional Colombiana. Bogotá 2001.
• SECANELLA, P.M, 1986. “Periodismo de investigación”. Tecnos, Madrid.
92

ENTREVISTAS

• CAÑÓN, Daissy. Periodista y abogada. Bogotá, septiembre de 2002.


• CASTRO, Caycedo Germán. Escritor y periodista. Bogota, junio de 2003.
• FAJARDO, Diego. Periodista del Canal UNO y antiguo miembro del equipo
de Séptimo Día. Bogotá, noviembre de 2002.
• GIRALDO, Javier. Periodista, jefe de redacción de “Registro Médico” de
Legis.
• GÓMEZ, Ignacio. Periodista del Canal UNO y reconocido periodista
investigador. Bogotá, noviembre de 2002.
• OTÁLORA, Sergio. Periodista del Miami Herald. Vía Internet, septiembre de
2002.
• PADILLA, Nelson. Periodista de la unidad investigativa de Cromos. Bogotá,
noviembre de 2002.
• SABOGAL, Hugo. Periodista y consultor de contenidos de Legis. Bogotá,
febrero de 2003.
• SAMPER. Pizano, Daniel. Periodista. Vía Internet, agosto de 2002.
• SOTO, Martha Elvira. Periodista y jefe de la Unidad Investigativa, Diario El
Tiempo. Bogotá, Enero de 2003.
• SUÁREZ, Germán. Abogado, periodista y docente de la Universidad de La
Sabana. Bogotá, mayo de 2003.
• TEODORO, Manuel. Periodista director y presentador programa Séptimo
Día. http://www.encolombia.com/tvynovelas1106-266untinto2.htm
• VARGAS, Juan Roberto. Periodista y director fines de semana Caracol
Noticias. Bogotá, octubre de 2002
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LISTA DE ANEXOS

Anexo A. Cuestionario de las entrevistas realizadas para esta monografía.

Anexo B. Casete con los programas de Séptimo Día analizados para esta
monografía.
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ANEXO A

1. ¿Para usted qué es el periodismo investigativo (genero, herramienta, etc.) y


por qué?
2. ¿Cuáles diría usted que son las características principales y esenciales del
periodismo investigativo y por qué?
3. ¿Cuáles son los puntos críticos a la hora de escribir o realizar un artículo
investigativo?
4. ¿Cómo ha sido, o fue, el desarrollo general del periodismo investigativo en
Colombia a través de su historia?
5. ¿Qué hacían las unidades investigativas con respecto a las amenazas y las
presiones?
6. ¿Qué publicaban los medios de comunicación en la época que eran
atacados por el narcotráfico y el terrorismo?
7. ¿Considera que hay una desaparición paulatina del periodismo investigativo
en Colombia? ¿Por qué? ¿Qué solución propondría?
8. ¿Cuáles diría usted que son sus limitaciones legales en Colombia?
9. ¿Qué leyes existen en Colombia que amparan el ejercicio del periodismo
investigativo?
10. Hablando de Séptimo Día como la cúspide del periodismo investigativo en
el país, ¿cuál era el objetivo principal del programa? Y ¿qué acabó
terminando con el?
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ANEXO B

Casete con programas de Séptimo Día.

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