Está en la página 1de 2

En general, las personas jurídicas y las asociaciones desempeñan un papel importante en la

sociedad y en la economía. Estas entidades permiten a los individuos unirse y colaborar para
lograr objetivos comunes, ya sea en el ámbito comercial, social, cultural o benéfico.

Las personas jurídicas son entidades legales reconocidas por la ley como sujetos de derechos y
obligaciones. Pueden ser empresas, organizaciones sin fines de lucro, instituciones educativas,
gubernamentales, entre otras. Al tener personalidad jurídica, las personas jurídicas tienen la
capacidad de realizar contratos, adquirir propiedades, demandar y ser demandadas en los
tribunales, entre otros actos legales.

Las asociaciones, por su parte, son un tipo específico de persona jurídica que se crea cuando
dos o más personas se asocian con un propósito común. Estas pueden ser asociaciones
comerciales, profesionales, sociales, deportivas, culturales o de cualquier otro tipo. Las
asociaciones suelen tener una estructura más flexible y democrática que las empresas, y
suelen estar reguladas por estatutos o reglamentos internos.

Tanto las personas jurídicas como las asociaciones tienen ventajas y desventajas. Por un lado,
permiten la acumulación de recursos, la división del trabajo y la reducción de riesgos para los
individuos involucrados. Además, brindan un marco legal y organizativo para llevar a cabo
actividades de manera más efectiva y sostenible. Por otro lado, también pueden enfrentar
desafíos, como la necesidad de una gestión adecuada, la responsabilidad legal y la toma de
decisiones colectivas.

En resumen, las personas jurídicas y las asociaciones son importantes para la sociedad ya que
permiten a las personas unirse y trabajar juntas para alcanzar objetivos comunes.
Proporcionan un marco legal y organizativo que facilita la realización de actividades y
proyectos, promoviendo así el desarrollo económico, social y cultural. Sin embargo, es
fundamental que estas entidades sean gestionadas de manera responsable y ética, teniendo
en cuenta tanto los intereses de sus miembros como el impacto que pueden tener en la
comunidad en general.

En conclusión, al hablar de personas jurídicas y asociaciones tenemos que tener encuentra el


Código Civil peruano el cual nos los menciona desde su artículo 76° hasta su artículo 98°. Por
ende, al hablar, específicamente, la persona jurídica nos remontamos a su evolución
considerando cuatro etapas: edad antigua (Roma y el Estado, las asociaciones, las fundaciones
y la herencia yacente), la edad media (estructura de las agrupaciones), la edad moderna (la
depuración de la teoría de persona jurídica) y en la edad contemporánea (podemos mencionar
que las personas jurídicas son la agrupación de personas naturales que son inscritas en un
registro establecido y existen en el derecho privado y público). Además, en la actualidad,
poseen capacidades, tanto de goce como de ejercicio; asimismo, existe una clasificación la cual
la divide en tres: asociaciones, fundaciones y comités. De igual modo, tienen estatutos,
representación y tienen una responsabilidad como tal, ello se puede visualizar en los artículos
76° y 79°. Por otro lado, tenemos a las asociaciones que son sin fines de lucro y con un fin en
común especificado, además, esto se puede encontrar con mejor explicación desde los
artículos 80° hasta el 98° del Código Civil peruano.

También podría gustarte