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7. La sociedad
coLoniaL
-rn
7. La o edad cotcrnat
El modelo social de los encomenderos tuvo unos lim ites muy rígidos. delimi-
tados por el número de indios capaces de ser encomendados y por su capaci-
dad de resistir los embates de la Corona. lo que limitaba sus posibilidades de
perpetuarse como grupo privilegiado. Cada encomendero podia hacerse car-
go de un señorío indígena. de ahí que el número de encomenderos de una re-
gión fuera un número finito dependiente de la cantidad de señoríos existen-
tes . Por eso. era imposible que hubiera más encomenderos que señoríos. lo
cual cerraba rápidamente una de las vías de ascenso SOCial del mundo colo-
nial . de hecho. la principal y casi única en los tiempo s iniciales. los enco-
menderos ten ían en sus posesiones del interio r algunos blancos a su servicio.
entre lo s que destacaba el estanciero. encargado de vigilar los bie nes de l pa-
trón pero que podía destinar parte de su tie mpo a algu na ac tivida d ind epen-
d iente. como la cría de ovejas u otras labo res agrarias.
Los e nco menderos fueron el ce ntro de la activ idad loca l. au nq ue la ráp ida
emergencia de otros grupos. para lela a la calda de los ben em érito s. marcó la
conso lidación de una sociedad cada vez más co mp leja. Entre los g rupos
emergentes estaban los artesanos. los profesiona les y los funcionarios. que
co n sus estructuras co rporativas se s umaron a los numerosos actores sociales.
la llegada de nuevos inmi gr antes de origen peni nsular fue otro factor de
complejidad social. Los encomenderos tenían el mayor número de sirvientes
indios hispanizados y de esclavos africanos. y eran. gracias a sus ingresos. los
que podian pagar a los profesionales y lo s que rápi damente se convirtieron en
los mejores clientes de mercaderes y comerciantes. Con el correr del tiempo.
mejoraron su posición. intensificándose la estratificación social dentro de
cada grupo y algunos adquirieron tierras y propiedades urbanas y se convir-
tieron en dueños de esclavos afncanos y criados indígenas. la consolidación
del poder de los mercaderes se ve en la fundación de los Consulados en 1592
en M éxico y en 1613 en Lima. instituciones gre miales que sirvieron para
consolidar su papel socia l y para instituc ional izar sus derechos co rporativos.
Los hacendados o grandes propietarios fueron un grupo más he terogéneo.
Su origen se encuentra entre los pr imeros encome nderos. que co n diversos ar-
ti ugios lograren apropiarse de vastas ex tensio nes de tierras de s us encomcn -
dados. sobre las que legalment e ca recían de todo derech o . Posterio rme nte el
g rupo aume ntó co n los ac apa radores de tierras, que medraron co n las propi e-
dades repa rtidas por los ca bi ldos. pero tamb ién con mi embros de l séq uito de
los vir reyes que reci b ieron me rcedes de tierras y con los beneficiar ios de de-
rechos de pastor eo cedidos por los cab ildos. Estos y otros personajes. co mo
los funcionarios de la Real Hacien da que pudieron compra r tie rras. cime nta-
ron su prestigio y su posición social según el esrarus conferido por la propie-
dad de grandes extensiones. Con el correr del tiempo.Jos latifund ios se con-
vcrtirian en una de las mas importantes bases de poder de la América española
y de la portuguesa.
7 s. cctontat
El sistema de gobier no urbano era di ferente al rural y permitía que los ve-
cinos (los adu ltos pro pietarios o co n un determinado nivel de ingresos) estu-
vieran representados en los cabildos. aunque quienes lo contro laban solían ser
los encom enderos y. posteriormente. los miembros mas rico s y poderosos de
la comunidad. La cooptación. clave en la vida municipal. se co nvirtió en un
excelente mec anismo para mantener el poder de las o figarquias. aun que en al-
gunas ciudades como Oruro. en el Alto Perú, las luchas en el interior de las él i-
tes urbanas eran enca rn izadas y ob ligaba n a convocar elecciones para cubrir
los altos cargos mun icipal es . las diferencias sociales sumadas a las étnicas ha-
cian de la sociedad colonial un mundo jerarquizado y compartimentado. acor-
de con su estructura corporativa. La educación y la relación co n la Iglesia ten-
dían a aumentar las diferencias entre los gru pos . Como ya se ha vis to. la
Iglesia ju gó un papel decisivo en la sociedad co lon ial en 10 referente a su acti-
vidad primordial. la transmisión de la fe y en su papel en tan to mecanismo de
cohesión social. Desde esta perspectiva. el hecho de que la mayor parte de la
educación estuv iera en sus manos fue decisivo para los españoles y para los in-
dígenas. en cuyo proceso de aculturaci ón su labor relig iosa y educativa fue
central.
Los blancos estaban en la cúsp ide de la pirámi de socia l. pero en este grupo
las diferencias entre hombres y mujeres eran marcadas. El lugar de la muj er
en la sociedad colonial se asemejaba a l que tenía en la Peníns ula y en buena
parte de Europa. De acuerdo co n e l derec ho caste llano. las muj eres tenian un
estatus legal similar a los menores de edad : las solt eras dep endí an de sus pa-
dres y las casa das de su marid o y únicamente las viudas podi an di spon er de
sus vidas y hac iendas como person as ad ultas y emancipadas. El papel de la
mujer quedaba relegado al cuidado del hoga r y la familia y a la educación de
los hijos. pero cua ndo por motivos de viudedad u otras razo nes debían trabajar
para ganarse la vida . las posibilidades a su a lcance eran rest ring idas. Las acti-
vidades co nsidera das apt as par a ellas eran limitadas y de esca sa proyección
social: comad ronas. curanderas. panaderas. pasteleras. costureras. bordadoras
o patronas de casas de huéspedes. Las mujeres solieras o las viudas sin hijos
tenían cua tro opciones para permanecer integ radas a la sociedad con un cierto
decoro : v ivir con sus padres co mo hijas de familia. con un hermano so ltero o
viudo como dueñas de casa y ama s de llaves. ayudar a una hermana casada en
sus labores domés ticas o entrar en un co nvento . Esto expl ica la ab undancia de
conventos femeninos, muchos de clausura . que no sólo eran centros de vida
religiosa. sino también refugios para mujeres solas. Estas podian ingresar
como monj as. residentes seg lares. bea tas (una res idente seglar co n algunos to-
ques de monja) o criadas . En algunos conventos existían celdas lujosas pa ra
quienes podí an cos tearlas y otras más humildes pa ra las mujer es pobres.
Las jerarquías sociales peninsulares se trasladaron prácticamente intactas
a Indias. La nobleza española seguía contando en las colonias. donde también
tenían va lor sus títulos y cargos. aunque la Corona no se prod igó en otorgar
nuevos título s nob iliario s a lo s conquistado res. Ilcm án Cortés fue un caso ex-
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América co om et
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7 ..a ooeoad cotc mat
cofradías eran sociedades o asociaciones religiosas que promovían el culto y
la vida espiritua l de las parroquias. pero des de el pu nto de vista soc ial se las
puede considerar una especie de clubes que orientaban una parte importante
de su actividad a la ayuda mutua. la beneficenci a y la ca ridad. A par tir de
1570 los indígenas ado ptaro n es te modelo y a lo largo del siglo XVJll el peso
de las cofradías entre las comunidades indígenas fue muy destacado. Los gr e-
mios tam bién tuv ieron una d imensión reli g iosa importante. ce ntrada en el
culto al santo patrón. a la vez q ue ac tuaba n como sociedades de socorros mu-
tuos. En su interio r se celebraban los matrimonios y surgían las mas diversas
empresas. Los artes anos so lían for mar a los ind íge na', en sus actividades y se
convirtieron en un e ficaz agente de ac ulruraci ón.
Era frecuente que los mercaderes más im por ta ntes se integraran en am-
plias redes comerc iales desde Sevilla u otras plazas mer cantiles anda luzas y
extendidas hasta los territorios mas alejados de los principales centros colo-
niales. La mtegración de los come rciantes en las sociedades en las q ue se es-
tablecían dependía básicamente de su situación y de sus expectativas. Si era n
factores o represe ntantes de las casas matrices peninsulares. era posible que
la estancia en Ind ias fuera limitada y. po r tanto , la integració n y el co ntac to
con el entorn o m ínimos. Sin em bargo. la sociedad co lon ial. es pec ialme nte en
las ciudade s de l inter ior. no conoció arq uetipos puros. Junto a los mercade-
res. que dedicab an part e de su tiempo a tra tar con productos de origen euro-
peo. encontramos a un bue n numero de come rcia ntes o tra tantes especializa -
dos en e l co me rcio a l por m enor y de productos locales. b ien de origen
indígena. bien producidos in situ pero siguiendo patro nes de pro ducc ión eu-
ropeos . Quienes se dedicaban a esta actividad solian ser analfabetos y se ubi-
caban en sec to res marg inales de la soc iedad. Precisam ente en la intermed ia-
ción entre la soc iedad espa ño la y la ind ígena había un nicho de oportuni dad
para mucha gente, au nque no demasiado bien pagado y con escaso prestigio
social. Por si todo es to fuera poco. para aprovec harse de estas po sibi lidades
habia que vivir fuera de las c iudades . Fueron mu chos los españoles. criol los y
peninsul ares. los q ue se dedicaron a estas ac tividades. mezclándose en su
práctica con mestizo s o escl avos y libertos negros.
La fam ilia fue un facto r clave de organización y reproducción social. es-
pecialmente en los es tratos sociales más a ltos. donde el matrimonio y la dote
eran mecani smo s de ascen so soci al. de conso lidació n de po siciones o de re-
forzamiento de situaciones privi legiadas. Lo s vínculos familiares. dentro de
los cuales se puede inclu ir el compadrazgo. eran esenci ales y en tomo a ellos
se tejian redes de influe ncia y poder. que se extendían má s all á de te rr ito rios
concretos o de los límites virreinales. Jun to a las solidaridades familiares es-
taha el paisan aje. ya que los lazo s regionales. bien en alusión a las reg ion es
peninsulare s (vascos. anda luces. extreme ños. gallegos . catalanes , etc . j. bien a
las indianas. fu eron cobra ndo import ancia co n el paso del tiempo y co n el de-
sarro llo de «patrias chicas» en los terr ito rios americano s. El criollismo no es-
capa a es ta realidad y habria que pregu nta rse cuánto ten ia de sentimie nto 10-
Am éri ca cl orria¡
Junto a los tres principales grupos étnicos (indios. blancos y negros) habia
otros. prod ucto del en trecr uzamiento étnico. Los más importantes eran los
mulatos (blancos y negras ) y mestizos (blancos e indias). El mestizo fue una
catego ria npicamcnre social. q ue no racial. Teóricamente , los mestizos eran
los hijos de madre india y padre blanco. Sin embargo. en los siglos XVI y XVII
los niños mestizos nacidos en el seno de un ma trimonio --que eran muy po-
cos- . reco noc idos por sus padre s co mo hij os legilimos o ed ucados como es-
pañoles eran ten idos por eu ropeos. Por el contrario. los niños mestizos cria-
dos como indios eran tratados como indios. A fines del XVII Yen el xvm la
catego ría de mestizo se exte ndió por doqu ier, y más que para hablar de los hi-
jos de indias y españoles se utili zó para designar a aq uellos indios que aban-
donaban sus comunidades rura les de origen y se establecían en las ciudades.
imitando las pautas de vida blancas.
Los negros se convirtieron en una pieza clave de las c iudades españolas.
Desempeñaban muchas tareas q ue los blancos no querían realizar y, de hecho.
fueron sus auxi liares o intermediarios en zonas habitadas predominantemen-
te por indios. Muchos estancieros de los encomenderos eran negros y si eran
españoles solían tener a su car go a varios neg ros que les ayudaba n en sus
tareas. Los esclavos africanos al ser vicio de los españoles desempeñab an la-
bares de cierta responsabilidad bien como ayudantes de los artesanos. bien
como criados domés ticos de confianza en las reside ncias importantes. Tam-
bién se vc¡a a los esclavos neg ros en las ca lles de las ciuda des comerciando
algunos productos po r cuenta de sus amos blancos. Pese a ser esclavos. los
a fricanos no oc upaban el último lugar en la escala soc ial. Al igual que los eu-
ropcos. su sistema inmunológico los hacía más res istentes a las enfcrrneda-
des importadas del Viejo Mundo. por lo que su espe ranza de vida era mayor y
su elevado preci o los convert ía en un objeto a cuidar. lo que los diferenciaba
de los indios. Muy pronto los esclavos pudieron emanciparse. bien compran-
do su libertad. bie n por la co ncesión del amo, lo que permitió e l desarrollo de
un g rupo de negros y mulatos libres que se integraron a la vida urbana .
La periferia de la sociedad colonial dio lugar a numerosos tipos y figuras
marginales. A partir del siglo X"' I come nzó a crece r e l núme ro de vagos. mu-
chos participantes de la conquista y q ue. una vez acaba da. se quedaron sin la-
7 La sociedad cctontat
bor que cumplir ni estímulos para integrarse en la sociedad. Era frecuente que
estos vagos se reunieran en bandas y que su actividad fuera una fuente de pre-
ocupación para las autoridades colon iales. Los escl avos negros huidos solían
refugiarse en el mo nte o en lugares apartados donde se agrupaban en comuni-
dades o palenques, quilombos en Brasil, que también se convirtieron en un
polo de atracción para blancos, mestizos e indios marginales.
Los centros mineros. habitados por una ínfima porción de la población
regional. vivían al margen de las ciudades. La distancia de los centros produc-
tores a las zonas más po bladas de indígenas y a los núcleos urbanos. así como
las dificultades de acceso a los reales de mi nas. conv irtieron a los campamen-
tos mineros en enclaves pecul iares. con una población transeúnte de cierta
importancia aunque socialme nte periférica. Cua ndo la extracción de la plata
seconvirtió en la activi dad minera por excelencia, los centros productores co-
menzaron a asemejarse a las ciudades españolas con sus cab ildos dominados
por los empresarios mineros locales. y sus mercados, con mercaderes. artesa-
nos y profesionales. Las minas demandaban una cantidad de mano de obra
fijay especializada, que se cubría con trab ajadores indigenas desplazados de
loslugares más recónditos. Las minas. como las ciudades. eran sitios adecua-
dos para la integración de los indios en la soc iedad española , y por eso se
pudo ver a los indígenas tra bajando en las galerías de los yacimientos de plata
yen los molinos de re fino del mineral.
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Amrrlca olo llial
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7. La sociedad colonial
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