PRINCIPALES FACTORES QUE AFECTAN A LA BOIODIVERSIDAD

La biodiversidad, o diversidad biológica, alberga la amplia variedad de seres vivos

que habitan el planeta Tierra y sus patrones naturales tras miles de millones de años
de evolución. La biodiversidad es por tanto el término que incluye las especies vivas,
que suministran el sistema de soporte vital de la Tierra; una agrupación de plantas,
animales, insectos y peces componen los ecosistemas que nos proporcionan comida,
agua limpia, aire y energía.
Sin embargo, existen factores que afectan, unos más que otros, a la biodiversidad,
conocer estas causas es relevante para tener en cuenta el grave problema que
suponen, hoy se dirán los principales factores que afectan a la biodiversidad.
Principales factores:

•
La conversión de los ecosistemas naturales a sistemas productivos (agrícolas o
ganaderos)
La conversión de ecosistemas es el cambio de un ecosistema natural a otro uso del
suelo, o un cambio profundo en la composición, estructura o función de las especies
del ecosistema natural y esto es común en áreas de agricultura, debido a que en esa
área estarán los agricultores, por ejemplo, y aunque esta práctica es importante ya
que produce alimentos altamente proteicos, afecta a la biodiversidad, porque están
quitando áreas o ecosistemas donde albergaban especies importantes para esta
hábitat, dejándolos sin hogar.

•
La contaminación ambiental
La presencia de agentes contaminantes en el agua, en el aire y en el suelo produce
una alteración nociva en todos los ecosistemas. Si bien, la contaminación tiene causas
naturales, las más graves proceden de la actividad humana. La contaminación es una
de las causas de pérdida de biodiversidad en mayor extensión, ya que gracias a las
alteraciones que producen, se pueden incluso perder las especies, ya que, en el caso
del agua, afectan a las especies contaminando también a las criaturas y afectándolas
en su forma de vivir, como en el caso de las tortugas o peces que se quedan atrapados
en esta contaminación impidiéndoles nadar bien.

•
El cambio climático
El cambio climático puede modificar los hábitats naturales tan drásticamente, que las
especies nativas de ahí ya no pueden sobrevivir en ellos, como el caso de los polos,
que, gracias a este cambio climático, se están empezando a derretir, desapareciendo
así, las diversas especies de propias de esas zonas altamente vulnerables, también
este cambio puede favorecer a ciertas especies invasoras y patógenos que se adaptan
rápidamente a nuevos ambientes, desplazando a las especies nativas y alterando los
ecosistemas.

•
Tráfico de especies
El comercio de animales salvajes comprende el comercio legal e ilegal de especies de
animales salvajes y/o productos derivados. Entre los productos derivados, algunos conllevan
la muerte del animal. También es uno de los negocios ilícitos más dañinos y rentables del
mundo. Este tráfico puede causar la extinción de muchas especies, así como también
provocan la aparición de especies invasoras en determinadas zonas que, a su vez, estas
especies causan la extinción y destrucción de los hábitats en las que fueron liberadas o
vendidas.

•
Incendios forestales
Los incendios forestales principalmente afectan a los hábitats de las especies en las
que haya ocurrido el incendio, y sin sus hábitats, estas especies pueden enfrentar un
riesgo significativo de disminución o extinción, así como también los incendios
excesivos o en momentos inapropiados pueden alterar el equilibrio ecológico,
favoreciendo a unas especies sobre otras y cambiando la composición de los
ecosistemas. Estos incendios eliminan la fuente de refugio y alimento para las
especies alterando significativamente a la cadena alimenticia.

•
Introducción de especies exóticas invasoras
Las especies invasoras compiten con las especies nativas por recursos como
alimento, agua, hábitat y espacio. Al no tener depredadores naturales en el nuevo
entorno, las especies invasoras pueden multiplicarse rápidamente y desplazar a las
especies locales. Esto puede llevar a la disminución de la población de especies
nativas e incluso a su extinción. Además, las especies invasoras también pueden
introducir enfermedades o parásitos a las poblaciones nativas, lo que puede tener
efectos devastadores en la biodiversidad local. Un claro ejemplo de esto es el caracol
manzana, que, gracias a la máxima comercialización, ha llegado a lugares que no son
su hogar, por lo que esta especie se adapta muy rápido y llega a producir demasiado
huevos, por tanto, en varias regiones se ha convertido en una especie invasora,
dejando sin alimento a las nativas.

•
La sobreexplotación de especies
Las especies (principalmente el ganado) son sobreexplotadas de gran manera,
afectando significativamente a la biodiversidad, pudiendo ocasionar un desequilibrio
en los ecosistemas ya que cada especie juega un papel específico dentro de su
ecosistema, actuando como depredador, presa, polinizador, descomponedor, etc. La
extracción excesiva de una especie puede desencadenar un efecto dominó que afecte
a otras especies y a la estructura del ecosistema en su conjunto, por lo tanto, también
ocasiona una pérdida de especies, así como una alteración de las cadenas
alimentarias.

•
Construcción de presas y embalses
La creación de un embalse generalmente implica inundar extensas áreas de terreno,
lo que destruye los hábitats existentes en esos lugares. Esto afecta tanto a las especies
terrestres que pierden su hogar como a las acuáticas cuyos ecosistemas naturales
son alterados o eliminados. Por otra parte, las presas alteran el flujo natural de los ríos,
afectando los ciclos de vida de las especies que dependen de flujos específicos para
la reproducción, alimentación y migración. Por ejemplo, especies de peces que
migran río arriba para desovar pueden encontrarse con barreras insuperables.

•
Acidificación de los océanos

Esto es causado principalmente por la absorción de CO2 por parte de los océanos, afecta
a organismos marinos, especialmente a aquellos con estructuras calcáreas como corales
y moluscos, lo que a su vez afecta a las especies que dependen de estos hábitats. Así como
también la acidificación reduce significativamente el tamaño de la población que pueden
llevar a una disminución en la variabilidad genética, haciendo a las especies más
vulnerables a enfermedades y cambios ambientales.

Deforestación y destrucción de hábitats

Lo que afecta principalmente es la pérdida directa de hábitat. Muchas especies

dependen de ecosistemas específicos para sobrevivir, reproducirse y alimentarse. Al
destruir estos ambientes, las especies pierden sus hogares, fuentes de alimento y
lugares de cría, lo que puede llevar a una disminución dramática en sus poblaciones
e incluso a la extinción. La deforestación a menudo fragmenta el hábitat restante,
dividiendo poblaciones de especies en grupos más pequeños y aislados. Esto reduce
la diversidad genética, afecta la reproducción y aumenta la vulnerabilidad a
enfermedades y cambios ambientales, reduciendo la resiliencia de las poblaciones.