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Con María

Somos presencia de comunión


Mujeres de Esperanza
Anunciadoras de vida

CONVERSACIONES POR DELEGACIONES

Caminamos juntas

• El tercer nivel de “conversaciones” se realiza en la propia


DELEGACIÓN. Se hace invitando a algunos laicos
comprometidos a quiénes se considere que puedan dar un
aporte significativo. El objetivo es enriquecer el discernimiento
con la experiencia de quienes comparten con nosotras más de
cerca la misión.
• La dinámica exige reservar tres bloques o momentos de
trabajo para la realización de las diversas propuestas, que se
deben adaptar a las características del grupo (HERMANAS-
laicos/as, mujeres-hombres, etc.).
• Puede desarrollarse en forma presencial, virtual o mixta

1- Brevemente se inicia la jornada dedicada a la conversación


DE delegación, creando un clima de fraternidad y
espontaneidad. Se invita a los participantes a hacer una breve
presentación apreciativa de cada un@1, con una dinámica de
bienvenida.
2- Las Hermanas de la Comisión Pre-capitular animan este
momento del encuentro sostenidas y acompañadas por el
Equipo de liderazgo respectivo.

Celebramos la Palabra hecha Vida

(Crear una ambientación, o un clima necesario para la celebración.)

Objetivo de este momento: Celebrar, ritualizar el proceso vivido


hasta ahora por medio de signos, gestos, textos (bíblicos o del
carisma) que nos permitan mantener encendida la memoria de que
‘ya estamos viviendo el Capitulo’, y agradecer lo que hemos ido
logrando hasta ahora. Es una celebración de ‘pasaje’… desde lo
local, zonal, en lo de Delegación, …hacia lo global, institucional.

Saludo de Bienvenida.

Dinámica de integración: Cada participante presenta a otra


hermana o laico de la asamblea, diciendo su nombre completo,
comunidad y una cualidad. La persona presentada, saluda con la
mano al grupo.
Las hermanas de la comisión y el equipo que le ayuda, tienen
previamente el listado de los participantes y preparan esta dinámica,
avisando a cada persona a quien debe presentar para que pueda
informarse adecuadamente.

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Cuando decimos presentación apreciativa, hablamos de invitar a los
participantes a responder preguntas o completar expresiones que nos
permitan conocer lo mejor del otro/a, pueden ser frases o preguntas de
este tipo: ¿qué te inspira hoy? o ¿En qué eres bueno/a y en qué eres muy
bueno/a? o Lo que más disfruto en la vida es … etc.
2
3- Las Hermanas de la Comisión Pre-capitular que animan el
encuentro explican brevemente el camino de preparación recorrido
hasta hoy y los principios que lo han animado.
4-

Escuchamos la Palabra

1. El grupo de hermanas y laicos/as, reunidos, inician el encuentro


con un momento de reflexión sobre la Palabra basado en el
texto de Ex 3.

Introducción: nos acercamos cada vez más a la experiencia Capitular


y no podemos dejar de alabar y agradecer la acción maravillosa que
el Espíritu va obrando en cada hermana de la Congregación, en los
laicos, en los proyectos, ¡en lo cotidiano!

TEXTO BÍBLICO

A continuación, se invita a los participantes a escribir en hojas de


colores y marcadores (2 o 3 palabras como máximo) lo que quedó
grabado en nuestro corazón de los encuentros zonales y/o locales.
(tener preparadas hojas de distintos colores y marcadores para que los
participantes puedan escribir en ellos)

Se invita a dar gracias por todo el camino recorrido hasta ahora, para
lo cual los participantes comparten (leyendo y mostrando) lo escrito en
su hoja.

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Conversamos por el camino

1) En este momento es muy importante que las hermanas de la


Comisión Precapitular recuerden el sentido que en este
itinerario tienen las “conversaciones” que se han realizado a
distintos niveles, y brinden una síntesis escrita, de todo lo que
se ha compartido en las conversaciones locales y zonales.
(Anexo 1 – Power adaptado a cada realidad)

2) Es recomendable que esta síntesis venga presentada en modo


creativo a los participantes, quiénes luego serán invitados a
tener un tiempo de silencio (aproximadamente 30 minutos),
para la reflexión personal. Al inicio o al final del texto se
transcriben las siguientes preguntas:
 ¿Cuáles son para mí las llamadas o invitaciones más fuertes
(o significativas o proféticas), que percibo como ‘del
Espíritu,’ en lo que leo?
 ¿En qué deberíamos poner particular atención para que se
vuelvan vida o para darles continuidad?

3) Luego de un tiempo prudencial de reflexión y silencio, los


participantes se dividirán en grupo de 6 personas para tener
una conversación espiritual sobre las preguntas.

Nota: Las conversaciones espirituales son la metodología


usada en el proceso sinodal actual. El objetivo es favorecer la
escucha activa, con igualdad de oportunidades para todos los

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miembros del grupo, pero además una escucha que favorece
que la persona se involucre totalmente.

El grupo grande se divide en grupo de 6 o 7 personas, lo ideal


sería que todos los grupos tengan el mismo número de
miembros. A continuación, se pide que cada grupo elija un
moderador/a y un secretario/a. El moderador/a se encarga de
cronometrar el tiempo y de dar la palabra y el secretario/a,
tomará las notas necesarias y será el portavoz de lo que el
grupo quiera expresar al final del diálogo.

La dinámica consta de 3 tiempos:

a- Primer tiempo: del ‘YO’… porque se habla desde lo que a


mí me sucede, lo que a mí me parece, etc.
Cada persona es invitada a compartir sus respuestas a las
preguntas
 ¿Cuáles son para mí las llamadas o invitaciones más
fuertes (o significativas o proféticas), que percibo
como ‘del Espíritu’ en lo que leo?
 ¿En qué deberíamos poner particular atención para
que se vuelvan vida o para darles continuidad?

Cada uno tiene un máximo de 5 o 6 minutos, para


compartir sus respuestas. La persona elegida como
moderador/a es la encargada de cronometrar el tiempo y
avisar a la persona que habla que su tiempo ha concluido.

Las personas que escuchan son invitadas a escuchar con


todo su ser, a estar atentas a las emociones, las imágenes,
los sentimientos, o inclusive a las sensaciones físicas que
les puede llegar a producir lo que escuchan de la otra
5
persona. Las personas que están escuchando deben tomar
nota de lo que les parezca significativo, o de las
emociones, sensaciones o imágenes que les hayan surgido
en la escucha.

Cuando todos los miembros del grupo han tenido la


oportunidad de hablar el tiempo establecido (5 ó 6
minutos), se pasa al

b- Segundo tiempo: del TU, porque se hace referencia a lo


que el otro o la otra han suscitado en mí.

Es recomendable proponer un par de minutos de silencio,


antes de comenzar la segunda ronda, de modo que las
personas puedan reordenar sentimientos, emociones e
ideas. Luego, nuevamente el moderador/a se encarga de
cronometrar el tiempo y avisar a la persona que su tiempo
ha concluido. En esta ronda cada persona cuenta con 2 ó 3
minutos, pero cada uno comparte solamente aquello que
ha ‘experimentado’ en la escucha de la primera ronda, o
sea, no habla de sí mismo/a ni de sus ideas, sino de lo que
escuchó, sintió, emociones, imágenes, o sensaciones
corporales que pudieron surgir mientras estaba atenta a la
escucha del otro/a. Nuevamente los oyentes toman nota
de lo que les ‘resuene’ en todo sentido. Cuando todos los
miembros del grupo han tenido la oportunidad de hablar
el tiempo establecido (2 ó 3 minutos), se pasa al

c- Tercer tiempo: del NOSOTROS es el tiempo de la


construcción compartida, comunitaria de lo que sentimos
como ‘nuestro’.

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Es recomendable proponer un par de minutos de silencio,
antes de comenzar la tercera ronda. En este momento se
abre el diálogo y el grupo busca responder las preguntas a
la luz de todo lo que se ha compartido en las dos rondas
anteriores. El deseo no es una simple síntesis, sino
descubrir esa novedad que el Espíritu suscita por medio de
la escucha, dejar nacer esa innovación que nos habita y
nos atraviesa a todos, visualizar esos ‘puntos de encuentro
posibles’ que seguramente existen más allá de cualquier
tipo de diferencia.

El/La secretario/a será el portavoz del grupo.

4) Asamblea: los grupos vuelven a reunirse con el grupo grande.


Cada grupo presenta lo trabajado y en diálogo se elaboran
temáticas comunes que emergen de lo compartido por los
grupos. En este caso las hermanas de la comisión pre-capitular
moderan la asamblea y van individualizando las temáticas que
se desprenden y las van formulando de modo que se elabore
un elenco final de llamadas o provocaciones, con los
respectivos aspectos a los que poner atención para poder
hacerlas vida. Se escriben en orden de prioridades y se elige 4
o 5 llamadas sobre las cuales trabajar.

CON MARIA…

7
En esta tercera etapa del proceso, los participantes se dividen por
grupos, según los intereses individuales, con el fin de diseñar y
planificar los temas/llamadas priorizadas entre todos: consideramos
cada uno de los temas/llamadas como un área de oportunidad. En
este momento las personas eligen libremente el grupo en el que
quieren trabajar. O sea que las personas se dividen en grupo, pero
ellas mismas eligen en qué tema de los 4 o 5 llamadas que
quedaron como prioritarias al final del trabajo anterior, quieren
trabajar.

Trabajo de grupo (60 minutos)

1. Primero de todo cada uno comparte lo que entiende sobre el


tema que han elegido para trabajar con el fin de tener una visión
compartida y un lenguaje común.

2. Se hace una lluvia de ideas relacionadas con el área de


oportunidad (tema/llamada): ideas que puedan hacer avanzar la
Congregación en la dirección de las aspiraciones y visiones de
futuro que estamos experimentando, identificando cuáles son los
ingredientes necesarios para apoyar el tema y hacerlo posible.
En este momento, hay que tener en cuenta estas orientaciones:
✓ No descartamos ideas
✓ Apoyamos las ideas, aunque parezcan desmesuradas.
✓ Construyamos sobre las ideas de los demás.
✓ Mantengámonos centrados en el tema.

3. Hacemos una lectura rápida de las ideas y miramos si se pueden


combinar y/o agrupar.

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4. Reflexionamos sobre las dos o tres ideas con las que queremos
trabajar.
5. Creamos una propuesta provocadora2
6. Cada grupo presenta al grupo grande 2 o 3 propuestas
provocadoras.

Contamos lo que nos ha pasado


• Las hermanas de la CP que han dirigido la “conversación” de
Delegación recogen sus frutos compilando la siguiente ficha
2
Una propuesta provocadora es la expresión de una idea que nos lleva
más allá de lo habitual e integra "lo mejor del pasado y de lo posible". Por
ello se expresa en una o dos líneas, se escribe en presente y debe
presentar con claridad la foto de cómo serán las cosas… Las propuestas
escogidas serán desarrolladas posteriormente.
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Lugar y fecha de la “conversación”

Nombres de las participantes.


Nombre de los/as participantes laicos/as y su relación con la
Congregación.
Impresiones generales
sobre el desarrollo de la conversación
Los “frutos de la conversación”
Las llamadas o invitaciones del Poner atención en …
Espíritu
 Se recogen las llamadas o  Se recogen los elementos
invitaciones del Espíritu más significativos en los que
más significativas de poner particular atención.
manera concisa, que
nacen como fruto de las
conversaciones
espirituales.

Propuestas Provocadoras
 Se recogen las “propuestas provocadoras” que cada grupo ha
presentado en el tercer tiempo de trabajo.

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