Está en la página 1de 35

RITUAL

DE LA VIGILIA PASCUAL

PARROQUIA SANTISIMO REDENTOR


MANAGUA- NICARAGUA
LUCERNARIO

El Presidente se santigua al mismo tiempo que la asamblea, diciendo:

En el nombre del Padre,


y del Hijo,
y del Espíritu Santo.
R/. Amén.
El Presidente, con las manos extendidas, saluda al pueblo.

El Señor esté con vosotros.


R/. Y con tu espíritu.
El Presidente amonesta al pueblo brevemente sobre el sentido de la Vigilia nocturna:

Hermanos: En esta noche santa, en que nuestro Señor


Jesucristo ha pasado de la muerte a la vida, la Iglesia invita a
todos sus hijos, diseminados por el mundo, a que se reúnan para
velar en oración.

Si recordamos así la Pascua del Señor, escuchando su


palabra y celebrando sus misterios, podremos esperar tener
parte en su triunfo sobre la muerte y vivir con él siempre en
Dios.
El Presidente bendice el fuego.

Oremos.
Oh Dios, que por medio de tu Hijo
has dado a tus fieles el fuego de tu luz:
santifica  este fuego,
y enciende en nosotros, durante estas fiestas pascuales,
un deseo tan grande del cielo,
que podamos llegar con corazón limpio
a las fiestas de la eterna luz.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
R/. Amén.
Del nuevo fuego se enciende el Cirio pascual.
Procesión
El acólito turiferario toma del fuego algunas brasas encendidas y las deposita en el turíbulo. Se acerca con la naveta
al Presidente, que pone incienso tres veces, y lo bendice sin decir nada.

Seguidamente, el diácono o, en su defecto, el Presidente, toma el Cirio Pascual y, teniéndolo elevado, canta él solo:

¡Luz de Cristo!
R/. Demos gracias a Dios.
Pregón Pascual

Si no hay diácono, puede cantar el Pregón un salmista, pero no recibe bendición, ni inciensa el Cirio, y omite el saludo
"El Señor esté con vosotros". En este caso, el Presidente puede incensar el Cirio y el Libro, regresando a la Sede, subiendo al
ambón un salmista que cantará el Pregón..
Terminado el Pregón, se apagan las velas y todos se sientan.
Liturgia de la Palabra

LECTURA DE LOS LIBROS HISTÓRICOS


Primera Lectura.

Monición a la primera lectura.


Génesis 1,1-2,2
Canto: Salmo 8 "Oh, Señor, que admirable es tu nombre"
Segunda Lectura.

Monición a la segunda lectura.


Génesis 22,1-18
Canto: "Aquedá"
Tercera Lectura.

Monición a la tercera lectura.


Éxodo 14,15-15,1
[Al terminar esta lectura no se dice "Palabra de Dios", ni tampoco puede haber paso al canto. Inmediatamente se
empieza el Cántico de Moisés, que forma una unidad con la Palabra proclamada]
Cántico de Moisés: "Precipitó en el mar".
ECOS DE LA PALABRA
33. El Presidente invita a dar el eco de esta Palabra que se ha proclamado. Puede terminar recogiendo estos ecos
haciendo una pequeña exhortación (él u otro concelebrante, o también el diácono).

LECTURAS DE LOS PROFETAS


Cuarta Lectura.
Monición a la cuarta lectura.
Isaías 54,5-14
Canto:“Sión, madre de todos los pueblos”
Quinta Lectura.

Monición a la quinta lectura.


Isaias 55,1-11
Canto: "Gritad jubilosos, qué grande es en medio de ti el Santo de Israel"
Sexta Lectura.
Monición a la sexta lectura.
Baruc 3,9-15.32-4,4
Canto: "Shemá Israel"
Séptima Lectura.
Monición a la séptima lectura.
Ezequiel 36,16-28
Canto: Salmo 41 "Como la cierva anhela las corrientes de agua"
ECOS DE LA PALABRA

PASO DE LA FE A LOS NIÑOS


Respuesta de los adultos.

HIMNO PASCUAL
Se encienden los Cirios del altar, también la menorá, y otros candelabros, si los hay. Todos se ponen de pie, y el presidente
entona solemnemente el Gloria.
LECTURAS DEL NUEVO TESTAMENTO Y CANTO DEL
“ALELUYA” PASCUAL

Epístola
Monición.
Romanos 6,3-11
Canto: Salmo 117: “No he de morir, que viviré”
A continuación se hace la monición del Evangelio.

Un diácono, si lo hay, o un lector se acerca al presidente y le anuncia con tono solemne:

Padre, le anuncio una inmensa alegría: el ALELUYA.


Evangelio
Mateo 28,1-10 (ciclo A).
Marcos 16,1-7 (ciclo B).
Lucas 24,1-12 (ciclo C).

Terminado el Evangelio, bendice a la asamblea. El Presidente besa el Libro, mientras lo toca con la mano.

Ecos de la Palabra.

Homilía.
LITURGIA BAUTISMAL
Se inicia la procesión hacia la fuente bautismal, que estará en el centro, en un lugar visible. Va delante un ministro
con el Cirio Pascual, siguen los catecúmenos con los padrinos, o los padres con los niños, y, finalmente, va el Presidente con
los ministros.

Los padres y padrinos se colocan al otro lado de la fuente, mientras que los ministros permanecen delante.

Los cantores inician el canto de las Letanías de los Santos, en las que se pueden añadir algunos nombres de Santos,
especialmente el del Titular de la iglesia o de los Patronos del lugar, y de los Patronos de los que van a ser bautizados:

Señor, ten piedad. Señor, ten piedad.


Cristo, ten piedad. Cristo, ten piedad.
Señor, ten piedad. Señor, ten piedad.

Santa María, Madre de Dios. ruega por nosotros.


San Miguel. ruega por nosotros.
Santos ángeles de Dios. rogad por nosotros.
San Juan Bautista. ruega por nosotros.
San José. ruega por nosotros.
Santos Pedro y Pablo. rogad por nosotros.
San Andrés. ruega por nosotros.
San Juan. ruega por nosotros.
Santa María Magdalena. ruega por nosotros.
San Esteban.
San Ignacio de Antioquía.
San Lorenzo.
Santas Perpetua y Felicidad.
Santa Inés.
San Gregorio.
San Agustín.
San Atanasio.
San Basilio.
San Martín.
San Benito.
Santos Francisco y Domingo.
San Francisco Javier.
San Juan María Vianney.
Santa Catalina de Siena.
Santa Teresa de Avila.
se pueden añadir otros nombres de santos.
Santos y Santas de Dios. rogad por nosotros.

Muéstrate propicio. líbranos, Señor.


De todo mal. líbranos, Señor.
De todo pecado. líbranos, Señor.
De la muerte eterna. líbranos, Señor.
Por tu encarnación. líbranos, Señor.
Por tu muerte y resurrección. líbranos, Señor.
Por el envío del Espíritu Santo. líbranos, Señor.

Nosotros, que somos pecadores. Te rogamos, óyenos.


Para que regeneres a estos elegidos
con la gracia del Bautismo. Te rogamos, óyenos.
Jesús, Hijo de Dios vivo. Te rogamos, óyenos.

El Presidente:

Oremos.
Que tu eficacia, Dios todopoderoso y eterno,
se manifieste en estos sacramentos,
obra de tu amor.
Que el espíritu de adopción descienda
sobre los nuevos hijos
que van a nacer de la fuente bautismal.
Que tu poder dé eficacia
a la acción de tu ministro.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
R/ Amén.

Si no hay bautismos:

Se lleva un recipiente con agua al presbiterio, cerca de la sede. No se cantan las Letanías de los Santos. El presidente hace la
siguiente monición:
Bendición del agua bautismal
El Presidente, o el diácono, bendice el agua bautismal, cantando o diciendo la siguiente oración, con las manos extendidas.
BAUTISMO
ORACIÓN DE LOS FIELES
El diácono, u otro ministro idóneo, canta o dice las siguientes intenciones:

1. Oremos hermanos a Cristo,


que por su Resurreción ha vencido la muerte
y ha destruido el pecado,
para que todos los cristianos sean siempre fieles
a las promesas del bautismo
que han renovado en esta noche santa.
R/. Escúchanos, oh Señor.

2. Oremos hermanos a Cristo,


que por su resurrección, ha hecho renacer a los nuevos hijos
de la Iglesia, engendrándolos por el agua y el Espíritu Santo,
para que confirme en ellos los dones
que les ha concedido en esta Pascua.

3. Oremos hermanos a Cristo,


que por su resurrección ha dado la vida verdadera al mundo
y ha renovado toda la creación,
para que aquellos que viven sin fe y sin esperanza
encuentren la paz y la alegría de la Vida Eterna.

4. Oremos hermanos a Cristo,


que por su resurrección ha abierto el cielo
a quienes gemían en el abismo del pecado
para que otorgue la Vida al hombre mortal,
y le alivie de todos sus sufrimientos.

5. Oremos hermanos a Cristo,


que anunció la alegría de su resurrección
apareciéndose a las mujeres y a los apóstoles,
para que nos conceda a todos nosotros celebrar su triunfo
y anunciarlo a todas las naciones.
RITO DE LA PAZ
En el Espíritu de Cristo resucitado, daos fraternalmente la
paz.
los hermanos se saludan con el beso santo de la paz, diciendo:

V/. ¡Cristo ha resucitado!


R/. ¡Verdaderamente, ha resucitado!
se concluye con un canto de paz, mientras todos se sientan.
PREFACIO PASCUAL

El Señor esté con vosotros.


R/. Y con tu espíritu.

Levantemos el corazón.
R/. Lo tenemos levantado hacia el Señor.

Demos gracias al Señor, nuestro Dios.


R/. Es justo y necesario.

En verdad es justo y necesario,


es nuestro deber y salvación
glorificarte siempre, Señor;
pero más que nunca en este día
en que Cristo, nuestra Pascua,
ha sido inmolado.

El es el verdadero Cordero
que quita el pecado del mundo;
muriendo destruyó nuestra muerte,
resucitando restauró nuestra vida.

R/. Muriendo, destruyó nuestra muerte,


resucitando restauró nuestra vida.

Por eso, con esta efusión de gozo pascual,


el mundo entero se desborda de alegría,
y con la asamblea de los ángeles y de los santos,
canta, canta, el himno de tu gloria:

R/. Santo, Santo, Santo.


Seguidamente el Presidente hace la fracción del pan, y deja caer una parte del mismo en el cáliz. Muestra el pan partido
a toda la asamblea, que lo venera haciendo una inclinación simple. Sube a la sede y se sienta. Otros concelebrantes, o los
diáconos, se acercan al altar y hacen la fracción de lospanes. Un diácono, o un presbítero, toma la patena del altar y se acerca
al Presidente, a quien ofrece el Cuerpo de Cristo, o se lo entrega directamente. A continuación se reparte la comunión del
Cuerpo del Señor a todos los fieles. El Presidente muestra un trozo a la asamblea y dice:
FRACCION DEL PAN Y COMUNIÓN
RITO DE CONCLUSIÓN

DESPEDIDA

También podría gustarte