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MATERIAL DIDÁCTICO
RECOMENDACIONES BÁSICAS
Utiliza un lenguaje sencillo, se amable en cada una de tus expresiones.
Pídele al Señor creatividad para que cada semana la casa sea una experiencia
de vida impactante para todos los asistentes.
Tu mensaje debe ser de fe, esperanza y motivación para que los invitados
sigan adelante en su vida cristiana.
Tu testimonio habla por ti, procura mantenerte siempre aprobado dentro y fuera
de la reunión.
1. BIENVENIDA Y SALUDO
2. DINÁMICA SI LA HAY
3. DESARROLLO DEL TEMA
4. ANUNCIOS
5. CIERRE.
Tema 7: Impacto en la iglesia.
Introducción: Hermanos, en esta lección exploraremos cómo podemos tener un
impacto significativo en nuestra comunidad de creyentes. La iglesia es un cuerpo
en el que cada miembro desempeña un papel vital. Recordemos que nuestra
presencia y compromiso pueden marcar la diferencia en la vida de otros.
Versículo bíblico: "Así que, hermanos míos amados, estad firmes y constantes,
creciendo en la obra del Señor siempre, sabiendo que vuestro trabajo en el Señor
no es en vano." (1 Corintios 15:58).
Desarrollo:
Participación activa: Al asistir regularmente a los servicios y eventos de la
iglesia, mostramos nuestro compromiso y apoyo. Nuestra presencia anima a otros
y fortalece la comunidad.
Servicio voluntario: 1 Pedro 4:10 nos recuerda que cada uno tiene un don
especial para servir a los demás. Identifiquemos nuestros dones espirituales y
busquemos oportunidades para servir en áreas que se alineen con nuestros
talentos y pasiones.
Mentoría y discipulado: Busquemos la oportunidad de ser mentores o
discipuladores para aquellos que están creciendo en su fe. Compartamos nuestras
experiencias y conocimientos para ayudar a otros a crecer en su relación con
Cristo.
Apoyo en momentos de necesidad: Cuando alguien en la iglesia enfrenta
dificultades, extendamos una mano de apoyo. Esto puede incluir brindar ayuda
práctica, orar por ellos y ser un hombro en el que puedan apoyarse.
Aplicación:
Calendario de eventos: Junto con nuestra familia, establezcamos un calendario de
eventos de la iglesia a los que asistiremos. Hacerlo una prioridad muestra nuestro
compromiso.
Descubrimiento de dones: Reflexionemos sobre nuestras habilidades y dones
únicos. Luego, conectemos con líderes de la iglesia para explorar oportunidades
de servicio.
Identificación de posibles mentoreados: Busquemos personas que podrían
beneficiarse de nuestra experiencia y orientación espiritual. Iniciemos
conversaciones significativas con ellos.
Red de apoyo: Si conocemos a alguien que enfrenta dificultades, ofrezcamos
nuestro apoyo en forma de oración, ayuda práctica o simplemente estando
presente para escuchar.
Invitación amigable: Invitemos a amigos y conocidos a unirse a nosotros en la
iglesia. Puede ser el comienzo de una experiencia transformadora para ellos.
A través de nuestro compromiso activo en la iglesia, podemos ser instrumentos en
las manos de Dios para edificar y fortalecer a la comunidad de creyentes. Sigamos
adelante con firmeza, sabiendo que nuestro trabajo en el Señor no es en vano.
ORACIÓN Y MINISTRACIÓN
FIN.