Universidad Autónoma de

Nuevo León

FACULTAD DE CONTADURÍA PUBLICA Y

ADMINISTRACIÓN.

DERECHO MERCANTIL

Evidencia “3” Sociedades mercantiles

Leonardo Esaú Hernández Nava

2000762

Martes 25 de abril 2023

Introducción.

Todo el contenido de este documento hablaremos sobre el derecho mercantil y

todos los temas relacionados con este, desde las épocas anteriores hasta la actual,
en verdad que este tema es muy importante; ya que nos enseña las normas y
derechos que hemos de seguir, así como sus regulaciones muchos temas más que
toqué en este archivo.

El derecho mercantil es un área de suma importancia en la actualidad, dado que el

comercio es una actividad cada vez más globalizada y compleja. Por tanto, es
necesario contar con normas claras y precisas que permitan regular las distintas
actividades comerciales y prevenir posibles conflictos o abusos por parte de los
agentes que intervienen en el mercado.

El derecho mercantil abarca temas como el derecho bancario, los títulos valores, las
sociedades mercantiles, la propiedad intelectual, entre otros. Cada uno de estos
temas tiene sus propias normas y regulaciones, lo que demuestra la complejidad y
diversidad del derecho mercantil.

En definitiva, el derecho mercantil es una disciplina clave para el desarrollo

económico y comercial de los países, ya que permite regular las actividades
mercantiles y garantizar la protección de los consumidores, la libre competencia y
la seguridad jurídica en las operaciones comerciales.

Martes 25 de abril 2023

 ¿Qué es el derecho mercantil?

El derecho mercantil es una rama del derecho privado que se encarga de regular
las relaciones entre comerciantes y las normas que rigen el comercio en general.
Su objetivo es establecer un marco jurídico que permita garantizar la seguridad y la
estabilidad de las relaciones comerciales, y fomentar el desarrollo de la actividad
empresarial y comercial.

Entre las materias que abarca el derecho mercantil se encuentran, entre otras, la
empresa y la actividad empresarial, los contratos mercantiles, el derecho de
sociedades, la propiedad industrial y el derecho de la competencia. También se
ocupa de la regulación de instituciones y figuras jurídicas como el comerciante, el
contrato de compraventa mercantil, el cheque, el pagaré, la letra de cambio, la
sociedad mercantil, entre otras.

En resumen, el derecho mercantil es fundamental para regular las relaciones

comerciales y empresariales, y para garantizar el correcto funcionamiento del
mercado y la protección de los derechos e intereses de los empresarios y
comerciantes.

El derecho mercantil se ocupa de regular diferentes aspectos relacionados

con el mundo empresarial, entre los cuales destacan:

• La empresa: Se refiere a la actividad económica organizada para la producción o

intercambio de bienes o servicios. El derecho mercantil regula el funcionamiento de
la empresa, su estructura y su relación con terceros.

• Los contratos mercantiles: Son los acuerdos que se establecen entre comerciantes
o en el marco de la actividad empresarial. El derecho mercantil se ocupa de regular
la forma y los requisitos de estos contratos.

• El derecho de sociedades: Es la rama del derecho que regula la organización y

funcionamiento de las sociedades mercantiles. El derecho mercantil regula la
creación y disolución de las sociedades, sus órganos de gobierno, las
responsabilidades de los socios y otros aspectos relacionados.

• La propiedad industrial: Es el conjunto de derechos de propiedad intelectual

relacionados con las invenciones, marcas, diseños y otros aspectos de la actividad
empresarial. El derecho mercantil se ocupa de regular la protección de estos
derechos y de establecer las obligaciones y responsabilidades de los titulares de
estos.

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• El derecho de la competencia: Es la rama del derecho que regula la competencia
entre empresas y protege al consumidor frente a conductas abusivas o
monopolísticas. El derecho mercantil regula la competencia en el mercado y
establece las medidas necesarias para garantizar la libre competencia y la
protección del consumidor.

• El derecho concursal: Es el conjunto de normas que regulan la insolvencia de las

empresas y su eventual liquidación o reorganización. El derecho mercantil establece
los procedimientos y requisitos necesarios para llevar a cabo estos procesos.

Evolución del derecho mercantil.

La evolución del derecho mercantil ha sido larga y compleja a lo largo de la historia,
y se ha ido adaptando a las necesidades de la actividad comercial en cada época.
A continuación, se presenta una breve reseña de las etapas más destacadas de su
evolución:

• Edad Media: Durante la Edad Media, el derecho mercantil se desarrolló a través del
derecho consuetudinario y las costumbres comerciales. El comercio se realizaba a
través de ferias y mercados y existían gremios que regulaban las actividades de los
comerciantes. Los usos y costumbres comerciales se fueron consolidando y se
convirtieron en fuente del derecho mercantil.

• Edad Moderna: Con el inicio de la Edad Moderna, el comercio experimentó un gran

auge y se produjo una intensa actividad comercial. Se promulgaron los primeros
códigos mercantiles, como el Código de los Comerciantes de Barcelona de 1494 y
el Código de Comercio de Francia de 1673. Estos códigos buscaban regular las
relaciones comerciales, estableciendo normas sobre el comerciante, los contratos
mercantiles, las sociedades mercantiles y los títulos valores.

• Siglo XIX: En el siglo XIX, el derecho mercantil se consolidó como una rama del
derecho independiente. En este siglo se promulgaron los primeros códigos
comerciales nacionales, como el Código de Comercio español de 1829, el Código
de Comercio alemán de 1861 y el Código de Comercio italiano de 1865. Estos
códigos regulaban la actividad comercial de forma exhaustiva y establecían normas
sobre el comerciante, las sociedades mercantiles, los contratos mercantiles, los
títulos valores y el derecho concursal.

• Siglo XX: Durante el siglo XX, el derecho mercantil evolucionó y se adaptó a las
nuevas formas de actividad comercial. Se promulgaron leyes especiales y reformas
legislativas que regularon nuevas formas de actividad comercial, como el comercio
electrónico, las operaciones bancarias y los contratos internacionales. Se
desarrollaron normas de derecho de la competencia y de propiedad intelectual que
se integraron en el derecho mercantil.

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El derecho mercantil tiene sus orígenes en el derecho romano, donde se
establecieron las primeras normas para regular el comercio. En la Edad Media, el
derecho mercantil se desarrolló principalmente en las ciudades italianas, donde se
establecieron las primeras corporaciones de comerciantes y se crearon las primeras
leyes mercantiles.

Durante la Edad Moderna, el derecho mercantil se consolidó como una rama del
derecho en toda Europa. En esta época se crearon los primeros códigos
mercantiles, como el Código de Comercio francés de 1807, que se convirtió en una
referencia para otros países. En la actualidad, el derecho mercantil es una rama del
derecho que se aplica en todo el mundo, y que se adapta constantemente a las
nuevas realidades del comercio global.

El derecho mercantil se rige por una serie de principios fundamentales que lo

definen y lo diferencian de otras ramas del derecho:

Uno de los principios fundamentales del derecho mercantil es la libertad de

empresa, que se refiere a la libertad de las personas para ejercer cualquier actividad
económica lícita, sin más limitaciones que las establecidas por la ley. La libertad de
empresa es un elemento esencial en el derecho mercantil, ya que permite el
desarrollo de la actividad empresarial y el fomento del comercio.

Otro principio fundamental del derecho mercantil es la buena fe, que se refiere a la
obligación de las partes de actuar de manera leal, honesta y transparente en las
relaciones comerciales. La buena fe implica la obligación de actuar con honestidad
y transparencia en todas las operaciones comerciales y de informar a las demás
partes sobre cualquier aspecto relevante de la transacción.

La seguridad jurídica es otro principio fundamental del derecho mercantil, que se

refiere a la necesidad de contar con normas claras y precisas que permitan a las
personas desarrollar su actividad económica con certeza y confianza. La seguridad
jurídica implica la necesidad de que las normas sean claras, precisas y estables, y
que sean aplicadas de manera uniforme por los tribunales.

El principio de especialidad es otro elemento fundamental del derecho mercantil,

que se refiere a la necesidad de contar con normas específicas para regular las
relaciones comerciales. El derecho mercantil se caracteriza por su carácter
especializado, ya que las normas que lo regulan están diseñadas para regular las
operaciones comerciales y las relaciones entre los comerciantes.

La flexibilidad es otro principio fundamental del derecho mercantil, que permite

adaptarse constantemente a las nuevas necesidades y realidades del mundo
empresarial. La flexibilidad del derecho mercantil permite la adaptación a las nuevas
tecnologías, los nuevos modelos de negocio y los cambios en el mercado.

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Por último, la uniformidad es otro elemento fundamental del derecho mercantil, ya
que las normas que lo regulan son aplicables en todo el territorio en el que se
desarrolla la actividad comercial. La uniformidad del derecho mercantil permite la
armonización de las normas y la eliminación de barreras para el comercio.
Pasando a otro tema que es importante en esta rama del derecho sería “la figura
del comerciante”. La figura del comerciante se refiere a aquella persona física o
jurídica que realiza de manera habitual y profesional una actividad comercial. Es
decir, se trata de una persona que se dedica a la compra y venta de bienes o
servicios con el objetivo de obtener una ganancia económica.
La ley define al comerciante como aquella persona que tiene por profesión habitual
la realización de actos de comercio, y en consecuencia, hace de ello su principal
fuente de ingresos. Para ser considerado comerciante, no es necesario que se
realice la actividad de manera exclusiva, sino que puede ser combinada con otras
actividades.
La figura del comerciante se encuentra regulada en el derecho mercantil, y se le
atribuyen una serie de obligaciones y responsabilidades. Es importante destacar
que el hecho de ser considerado comerciante no solo tiene implicaciones legales,
sino que también puede tener implicaciones fiscales, laborales y de responsabilidad
civil. Por lo tanto, es importante tener en cuenta todas las obligaciones y
responsabilidades que conlleva esta figura antes de emprender una actividad
comercial.
Derechos del comerciante:
• Derecho a desarrollar libremente su actividad comercial, siempre y cuando
cumpla con las normativas y regulaciones correspondientes.
• Derecho a obtener una ganancia económica por su actividad comercial.
• Derecho a competir libremente en el mercado, siempre y cuando se cumplan
las normativas de competencia.
• Derecho a ser reconocido como comerciante y a utilizar los medios
necesarios para hacer publicidad y promoción de su actividad comercial.
• Derecho a obtener financiamiento y crédito de las entidades financieras.
Obligaciones del comerciante:
• Obligación de inscribirse en el registro mercantil correspondiente y llevar una
contabilidad adecuada y actualizada.
• Obligación de cumplir con las normativas fiscales y tributarias, y de realizar
los pagos correspondientes.
• Obligación de cumplir con las normativas laborales, tanto en lo que se refiere
a las obligaciones del empleador como a las obligaciones del trabajador.
• Obligación de cumplir con las normativas de protección al consumidor y de
competencia.

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 • Obligación de responder por las obligaciones y responsabilidades derivadas
de la actividad comercial, como el pago de deudas, el cumplimiento de
contratos, entre otros.
La figura del comerciante está regulada en diferentes legislaciones nacionales e
internacionales, con el objetivo de establecer un marco legal claro y uniforme para
el desarrollo de la actividad comercial. A continuación, se describen algunas de las
regulaciones más importantes del comerciante en diferentes legislaciones:
• Regulación en la Unión Europea: En la UE, la figura del comerciante se
encuentra regulada por la Directiva 2019/633 del Parlamento Europeo y del
Consejo, que establece las normas relativas a las prácticas comerciales
desleales en las relaciones entre empresas en la cadena de suministro
agrícola y alimentario. Además, existen diferentes regulaciones específicas
para cada país miembro, que establecen las obligaciones y
responsabilidades del comerciante en cada territorio.
• Regulación en Estados Unidos: En Estados Unidos, la figura del comerciante
se encuentra regulada por el Uniform Commercial Code (Código Comercial
Uniforme), que establece las normas relativas a la compraventa y el
transporte de bienes, así como las obligaciones y responsabilidades del
comerciante en caso de incumplimiento de contrato.
• Regulación en México: En México, la figura del comerciante se encuentra
regulada por la Ley de Comercio, que establece las normas relativas a la
actividad comercial, así como las obligaciones y responsabilidades del
comerciante en materia fiscal, laboral y de protección al consumidor.
• Regulación en China: En China, la figura del comerciante se encuentra
regulada por la Ley de Comercio de la República Popular China, que
establece las normas relativas a la actividad comercial, así como las
obligaciones y responsabilidades del comerciante en materia fiscal, laboral y
de protección al consumidor.
• Regulación en Brasil: En Brasil, la figura del comerciante se encuentra
regulada por el Código Civil, que establece las normas relativas a la actividad
comercial, así como las obligaciones y responsabilidades del comerciante en
materia fiscal, laboral y de protección al consumidor.
La protección al consumidor es un derecho fundamental que se encuentra regulado
en diferentes normas jurídicas, tanto a nivel nacional como internacional. En este
sentido, el derecho mercantil establece diversas medidas para proteger a los
consumidores.
• Información: Uno de los pilares fundamentales de la protección al consumidor
es la información que se proporciona sobre los bienes y servicios que se
ofrecen en el mercado. En este sentido, la normativa mercantil exige que los
comerciantes informen de manera clara, precisa y veraz sobre las

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 características, calidad, precio, forma de pago y plazo de entrega de los
productos o servicios que ofrecen.
• Garantías: El derecho mercantil también establece garantías para los
consumidores, las cuales pueden ser legales o comerciales. Las garantías
legales son obligatorias y se establecen por ley, mientras que las comerciales
son voluntarias y son ofrecidas por los comerciantes de manera adicional a
las garantías legales.
• Responsabilidad: En caso de que los productos o servicios ofrecidos por los
comerciantes no cumplan con las características ofrecidas, el derecho
mercantil establece la responsabilidad de los comerciantes para reparar el
daño causado al consumidor. Asimismo, también se establece la
responsabilidad por los daños y perjuicios que pudieran derivarse de la
utilización de los productos o servicios ofrecidos.
• Protección de datos personales: El derecho mercantil también establece la
protección de los datos personales de los consumidores, garantizando que
los comerciantes no utilicen dichos datos para fines distintos a los que
fueron recabados, ni los cedan a terceros sin el consentimiento expreso del
titular.
Existen diversas herramientas legales para proteger a los consumidores. Entre ellas
destacan las oficinas de protección al consumidor, los procedimientos de arbitraje y
los procedimientos de conciliación.
Las oficinas de protección al consumidor son entidades gubernamentales
encargadas de recibir las denuncias de los consumidores y de dar seguimiento a
los procedimientos de solución de conflictos entre comerciantes y consumidores.
Los procedimientos de arbitraje y de conciliación son procedimientos extrajudiciales,
voluntarios y que permiten a las partes involucradas en el conflicto buscar una
solución de manera pacífica. En el caso del arbitraje, un árbitro o un tribunal arbitral
emite una decisión que es vinculante para ambas partes. En el caso de la
conciliación, un conciliador o mediador ayuda a las partes a llegar a un acuerdo que
satisfaga a ambas partes.
Estas herramientas son muy útiles para proteger a los consumidores, ya que buscan
soluciones rápidas y efectivas para los conflictos que puedan surgir en el mercado.
Además, fomentan la cultura del diálogo y la resolución pacífica de conflictos,
contribuyendo así a una convivencia más sana y justa en la sociedad.
Hablemos sobre el derecho bancario.
El derecho bancario es una rama del derecho que se ocupa de regular las
operaciones bancarias y financieras, así como la relación jurídica que se establece
entre los bancos y sus clientes. Esta disciplina es muy importante ya que regula una
actividad económica fundamental para el funcionamiento del sistema financiero y la
economía en general.

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Entre las principales funciones del derecho bancario se encuentran la regulación
del sistema financiero, la protección de los clientes bancarios, la prevención de
fraudes y la promoción de la estabilidad financiera. Además, el derecho bancario se
encarga de regular las operaciones bancarias, como la apertura de cuentas, la
emisión de cheques, la concesión de créditos, entre otras.
En la actualidad, el derecho bancario cobra especial relevancia debido a la creciente
complejidad de las operaciones financieras, la globalización de los mercados y el
desarrollo de nuevas tecnologías que permiten la realización de transacciones
financieras de manera rápida y eficiente.
También es fundamental en la prevención y resolución de crisis financieras, ya que
proporciona herramientas jurídicas para abordar las situaciones de insolvencia
bancaria y garantizar la protección de los depósitos de los clientes bancarios.
Derecho de la competencia.
El derecho de la competencia, también conocido como derecho antimonopolio, es
una rama del derecho encargada de regular las prácticas comerciales y de mercado
que afectan a la libre competencia. Su objetivo principal es proteger la competencia
y evitar la formación de monopolios o prácticas restrictivas que limiten el acceso al
mercado o afecten negativamente a los consumidores.
En este sentido, las normas de derecho de la competencia son de gran importancia
en la regulación del mercado y la protección de la competencia, ya que establecen
las reglas del juego para las empresas y los mercados, y aseguran que la
competencia se desarrolle de manera justa y equilibrada. Algunas de las principales
normas de derecho de la competencia son:
Prohibición de prácticas restrictivas de la competencia, como acuerdos entre
empresas para fijar precios o repartirse el mercado.
Control de las fusiones y adquisiciones empresariales que puedan limitar la
competencia.
Regulación de los abusos de posición dominante, es decir, de las prácticas
comerciales que se aprovechan de una posición de poder en el mercado para limitar
la competencia.
La importancia de estas normas radica en que protegen a los consumidores de
prácticas comerciales injustas, promueven la innovación y la eficiencia en el
mercado, y fomentan la libre competencia, lo que contribuye al desarrollo económico
y social. Además, las normas de derecho de la competencia también contribuyen a
la estabilidad financiera y al desarrollo de un mercado justo y equilibrado, en el que
todas las empresas compiten en igualdad de condiciones y se respetan los derechos
de los consumidores.

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Títulos valores.
Los títulos valores son documentos o instrumentos que representan una obligación
o derecho de naturaleza económica y que pueden ser objeto de negociación en el
mercado. Estos documentos tienen un valor económico y son utilizados para facilitar
las transacciones comerciales y financieras. Se caracterizan por ser documentos
formales, escritos y emitidos de acuerdo con una normativa específica que regula
su emisión, transmisión y negociación. Además, son instrumentos jurídicos que
permiten a su titular ejercer ciertos derechos o reclamar ciertas obligaciones.
Son instrumentos muy importantes en el tráfico mercantil, ya que permiten a los
comerciantes y empresas obtener financiamiento y realizar transacciones
comerciales de manera más eficiente. Por ello, su regulación es fundamental para
garantizar la seguridad y transparencia en las operaciones financieras.
La regulación de los títulos valores varía según el país y se encuentra establecida
en leyes específicas, las cuales determinan las características y requisitos que
deben cumplir estos instrumentos para su emisión, transmisión y negociación. Estas
leyes también establecen las sanciones correspondientes en caso de
incumplimiento de las obligaciones y responsabilidades relacionadas con los títulos
valores.
Entre las regulaciones más importantes se encuentran las relativas a la emisión,
endoso, protesto y prescripción de los mismos. La emisión se refiere a la creación
del título y a la fijación de sus características, como su valor nominal, la forma de
pago y las condiciones de emisión. El endoso, por su parte, se refiere a la
transmisión de los títulos de una persona a otra, lo cual puede hacerse de manera
total o parcial. El protesto, en cambio, es el acto mediante el cual se comprueba el
incumplimiento de una obligación contenida en el título valor. Y la prescripción se
refiere al plazo en el cual se pueden hacer efectivos los derechos contenidos en el
título valor.
La regulación de los títulos valores es importante porque permite la circulación de
estos instrumentos de manera segura y transparente, lo que a su vez genera
confianza y estabilidad en el mercado financiero. Además, esta regulación establece
los derechos y obligaciones de los titulares de los títulos valores y los mecanismos
para su protección en caso de incumplimiento de las obligaciones correspondientes.
En el derecho mercantil existen diferentes formas de sociedades mercantiles, las
cuales se clasifican de acuerdo con su estructura, finalidad y responsabilidad de sus
socios. A continuación, se presentan las principales formas de sociedades
mercantiles:
• Sociedad Anónima (S.A.): Es una sociedad en la cual los socios no
responden personalmente por las deudas de la sociedad, sino que su
responsabilidad se limita al capital que han aportado. Los socios son

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 accionistas y su capital está representado en acciones, las cuales pueden
ser libremente compradas y vendidas en el mercado de valores.
• Sociedad de Responsabilidad Limitada (S.R.L.): Es una sociedad en la cual
la responsabilidad de los socios está limitada al capital que han aportado. La
estructura de la sociedad es más flexible que la de la sociedad anónima, ya
que se permite la participación de un número menor de socios, los cuales
pueden ser personas físicas o jurídicas.
• Sociedad en Comandita Simple: Es una sociedad formada por dos tipos de
socios: los comanditados, que tienen responsabilidad ilimitada y gestionan la
sociedad, y los comanditarios, que tienen responsabilidad limitada y aportan
capital sin intervenir en la gestión de la sociedad.
• Sociedad en Comandita por Acciones: Es una sociedad en la que se
combinan características de la sociedad anónima y la sociedad en comandita
simple. Los socios comanditados tienen responsabilidad ilimitada y gestionan
la sociedad, mientras que los socios comanditarios tienen responsabilidad
limitada y aportan capital mediante la adquisición de acciones.
• Sociedad Colectiva: Es una sociedad en la que todos los socios tienen
responsabilidad ilimitada y responden personalmente por las deudas de la
sociedad. Los socios participan en la gestión de la sociedad y sus decisiones
se toman por unanimidad.
• Cooperativa: Es una sociedad en la que los socios se unen voluntariamente
para satisfacer sus necesidades y aspiraciones económicas, sociales y
culturales comunes, mediante una empresa de propiedad conjunta y
democráticamente gestionada.
Cada forma de sociedad mercantil tiene sus propias características y requisitos
legales, por lo que es importante elegir la que mejor se adapte a las necesidades y
objetivos de los socios. La elección de la forma de sociedad adecuada puede ser
determinante para el éxito de un proyecto empresarial.
Derecho societario también es muy importante.
El derecho societario es una rama del derecho mercantil que se encarga de regular
la constitución, funcionamiento y disolución de las sociedades mercantiles.
• Leyes mercantiles: Cada país cuenta con leyes mercantiles que establecen
los requisitos y procedimientos para la constitución de las sociedades
mercantiles. Estas leyes establecen, por ejemplo, el tipo de sociedad que se
puede constituir, el número mínimo de socios, los requisitos para la escritura
constitutiva, entre otros.
• Escritura constitutiva: La escritura constitutiva es el documento en el que se
formaliza la constitución de la sociedad mercantil. En ella se establecen los
estatutos de la sociedad, la identidad de los socios, el capital social, entre
otros aspectos. Esta escritura debe ser otorgada ante notario público y
cumplir con los requisitos establecidos por la ley.

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 • Registro mercantil: La sociedad mercantil debe ser inscrita en el registro
mercantil correspondiente. Este registro es el encargado de llevar un registro
público de todas las sociedades mercantiles y de los actos y negocios que
estas realizan.
• Capital social: La ley mercantil establece los requisitos y formas para el
aporte del capital social de la sociedad. Este capital puede ser en efectivo,
en especie o en trabajo, y se establece en los estatutos sociales.
• Órganos de la sociedad: Las sociedades mercantiles tienen órganos de
administración y representación, como el consejo de administración o la junta
de socios. Las leyes mercantiles establecen las normas para la elección,
funciones y responsabilidades de estos órganos.
• Fiscalización: En algunas sociedades mercantiles, se requiere la figura de un
auditor o comisario, que se encarga de supervisar las actividades de la
sociedad y reportar a los socios o al registro mercantil.
Arbitraje y resolución de conflictos en el ámbito mercantil.
El arbitraje es un medio alternativo para la resolución de conflictos que se utiliza en
el ámbito mercantil. Se trata de un proceso voluntario y privado en el que las partes
en conflicto acuerdan designar a un árbitro o a un tribunal arbitral para que resuelva
la controversia entre ellos, en lugar de acudir a los tribunales judiciales ordinarios.
El arbitraje en el ámbito mercantil tiene ciertas ventajas, entre las que destacan la
rapidez, la especialización de los árbitros en la materia, la confidencialidad y la
flexibilidad en el procedimiento. Además, al tratarse de un proceso privado, las
partes pueden acordar la sede del arbitraje y el idioma en el que se llevará a cabo,
lo que puede facilitar la resolución del conflicto en un contexto internacional.
Para que el arbitraje sea válido, es necesario que las partes en conflicto hayan
acordado previamente someterse a este proceso. Este acuerdo se puede incluir en
un contrato mercantil o puede ser pactado posteriormente mediante un acuerdo
específico de arbitraje.
En muchos países, la regulación del arbitraje en el ámbito mercantil está recogida
en leyes específicas de arbitraje. Estas leyes establecen el marco legal para la
designación de los árbitros, el procedimiento arbitral, la ejecución de los laudos y la
supervisión judicial del arbitraje.
Los administradores de una sociedad mercantil tienen una gran responsabilidad en
el buen funcionamiento de la empresa y en la protección de los intereses de los
accionistas y demás partes interesadas. En general, su papel principal es tomar
decisiones estratégicas y operativas, supervisar el cumplimiento de las leyes y
normativas aplicables, y asegurar que se maximicen los beneficios de la empresa.

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Entre las principales responsabilidades de los administradores en una sociedad
mercantil se encuentran:
• Representar a la sociedad: Los administradores actúan como representantes
legales de la sociedad ante terceros y son responsables de sus acciones.
• Tomar decisiones: Los administradores deben tomar decisiones que
favorezcan los intereses de la sociedad y de los accionistas, y que estén en
línea con los objetivos estratégicos establecidos.
• Cumplir con las leyes y normativas: Los administradores deben asegurarse
de que la sociedad cumpla con todas las leyes y normativas aplicables en su
sector.
• Gestionar los recursos: Los administradores deben gestionar los recursos de
la sociedad de forma eficiente y responsable, y tomar medidas para proteger
el patrimonio de la empresa.
• Rendir cuentas: Los administradores tienen la obligación de rendir cuentas a
los accionistas y otros stakeholders, y de proporcionar información
transparente y precisa sobre la situación financiera y los resultados de la
empresa.
En caso de que los administradores incumplan con sus responsabilidades, pueden
ser objeto de acciones legales por parte de los accionistas u otras partes afectadas.
Por lo tanto, es crucial que los administradores actúen de manera diligente y
responsable en su gestión de la sociedad mercantil.
Los contratos mercantiles.
Los contratos mercantiles son acuerdos legales entre dos o más partes que tienen
como finalidad regular las relaciones comerciales y mercantiles entre ellas. Estos
contratos pueden ser utilizados en una amplia variedad de situaciones, tales como
la compra y venta de bienes o servicios, la prestación de servicios profesionales, el
arrendamiento de inmuebles o la distribución de productos, entre otros.
Estos son algunos de los numerosos contratos mercantiles que hay:
• Contrato de compraventa: Este contrato se utiliza para regular la compra y
venta de bienes, y establece las condiciones de la transacción, como el
precio, las condiciones de entrega, y los términos de pago.
• Contrato de arrendamiento: Este contrato se utiliza para regular el
arrendamiento de un inmueble o de una propiedad, y establece las
condiciones de la relación entre el arrendador y el arrendatario, como el plazo
del contrato, el precio del alquiler, las condiciones de uso y mantenimiento
del inmueble, entre otros.
• Contrato de distribución: Este contrato se utiliza para establecer las
condiciones de la relación entre un proveedor y un distribuidor de productos,
y regula aspectos como las condiciones de venta, el territorio de distribución,
el plazo del contrato, y las obligaciones de las partes.

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 • Contrato de prestación de servicios: Este contrato se utiliza para regular la
prestación de servicios profesionales entre un prestador y un cliente, y
establece las condiciones de la prestación, como el plazo del contrato, el
precio, las obligaciones de las partes, y las condiciones de terminación del
contrato.
Es importante que los contratos mercantiles sean redactados de manera clara y
precisa, y que incluyan todos los detalles relevantes de la transacción o relación
comercial que regula, para evitar posibles conflictos y malentendidos.
La internacionalización del derecho mercantil se refiere al proceso mediante el cual
las normas y principios del derecho mercantil son aplicados en un contexto
internacional. Este proceso se ha intensificado en las últimas décadas debido a la
globalización y el aumento del comercio internacional.
La internacionalización del derecho mercantil es importante en el contexto del
comercio internacional porque facilita la realización de transacciones comerciales
entre diferentes países y jurisdicciones. Al contar con normas y principios
estandarizados en materia de contratación, propiedad intelectual, resolución de
conflictos, entre otros aspectos, se reduce la incertidumbre y el riesgo de las
operaciones comerciales transfronterizas.
Una de las principales formas de internacionalización del derecho mercantil es a
través de la creación de tratados internacionales y acuerdos comerciales entre
países. Estos acuerdos establecen normas y principios en materia de comercio
internacional que buscan armonizar las regulaciones y reducir las barreras para el
comercio.
Otra forma de internacionalización del derecho mercantil es a través de la adopción
de prácticas comerciales internacionales estandarizadas, como las normas
INCOTERMS para la entrega de mercancías o los contratos tipo utilizados en
transacciones internacionales.
Además, la internacionalización del derecho mercantil también implica la aplicación
de normas y principios del derecho mercantil de diferentes jurisdicciones en los
conflictos comerciales internacionales. En este sentido, se requiere un conocimiento
profundo de las normas y principios del derecho mercantil de diferentes países para
resolver conflictos en un contexto internacional.
En conclusión, la internacionalización del derecho mercantil es un fenómeno
creciente y fundamental en el contexto del comercio internacional. La adopción de
normas y principios estandarizados en materia de comercio, propiedad intelectual,
contratación y resolución de conflictos, entre otros aspectos, facilita la realización
de transacciones comerciales transfronterizas y reduce la incertidumbre y el riesgo
en el tráfico mercantil internacional.

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Los INCOTERMS (acrónimo en inglés de International Commercial Terms) son un
conjunto de reglas internacionales que establecen los términos comerciales y
condiciones de entrega en los contratos de compraventa internacional de
mercancías. Fueron creados por la Cámara de Comercio Internacional (CCI) en
1936 y se han actualizado en varias ocasiones para adaptarse a los cambios en el
comercio internacional.
Los INCOTERMS se dividen en dos categorías: términos para cualquier medio de
transporte (EXW, FCA, CPT, CIP, DAT, DAP, DDP) y términos exclusivos para
transporte marítimo (FAS, FOB, CFR, CIF).
Cada término establece las obligaciones y responsabilidades tanto del vendedor
como del comprador en cuanto a la entrega de la mercancía, el transporte, los
costos y los riesgos. Por ejemplo, el término EXW (Ex Works) establece que el
vendedor entrega la mercancía en su propia fábrica o almacén y el comprador se
hace cargo del transporte y los riesgos desde ese momento. Mientras que el término
CIF (Cost, Insurance and Freight) establece que el vendedor se hace cargo de los
costos y del seguro de transporte hasta el puerto de destino convenido.
Es importante que los contratos de compraventa internacional especifiquen
claramente el término INCOTERM que se va a utilizar, para evitar malentendidos y
conflictos entre las partes. Además, es fundamental conocer los INCOTERMS y su
aplicación en el comercio internacional para poder negociar acuerdos beneficiosos
para ambas partes y evitar riesgos y costos innecesarios.
Protección de datos personales en el comercio electrónico.
es un tema cada vez más relevante en la actualidad, ya que el auge de las
tecnologías de la información y la comunicación ha llevado a un aumento en la
cantidad de datos personales que se manejan en línea.
En este sentido, el derecho mercantil juega un papel fundamental en la protección
de los datos personales de los consumidores en el comercio electrónico. En muchos
países, existen leyes que regulan la recolección, uso y divulgación de datos
personales en el comercio electrónico, y establecen medidas de seguridad para
protegerlos.
En la Unión Europea, por ejemplo, existe el Reglamento General de Protección de
Datos (RGPD), que entró en vigor en mayo de 2018 y establece las normas para la
protección de datos personales de los ciudadanos europeos. El RGPD establece
que las empresas que recopilan y manejan datos personales deben obtener el
consentimiento explícito de los usuarios para hacerlo, y deben tomar medidas de
seguridad para proteger la privacidad de los usuarios.
En otros países, como Estados Unidos, existen leyes como la Ley de Privacidad en
Línea de California (CCPA), que establece medidas de seguridad para la protección
de los datos personales de los ciudadanos de California.

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Las sociedades anónimas cotizadas en bolsa son aquellas empresas que han
realizado una oferta pública de sus acciones y están listadas en una bolsa de
valores. Esta forma de organización empresarial es muy común en el mundo de los
negocios y se encuentra regulada por diversas normas y leyes.
La regulación de las sociedades anónimas cotizadas en bolsa incluye aspectos
como la información que deben proporcionar a los inversores, la transparencia en
sus operaciones, la responsabilidad de los administradores y la protección de los
accionistas minoritarios. En muchos países, existen regulaciones específicas para
las empresas cotizadas en bolsa, con el objetivo de proteger a los inversores y
garantizar un funcionamiento justo y transparente del mercado.
Algunas de las normas más comunes en relación a las sociedades anónimas
cotizadas en bolsa incluyen la obligación de publicar informes financieros
periódicos, la regulación de la compra y venta de acciones, la protección de los
accionistas minoritarios en caso de fusiones o adquisiciones, y la responsabilidad
de los administradores en caso de incumplimiento de sus obligaciones.
Es importante destacar que la regulación de las sociedades anónimas cotizadas en
bolsa varía de un país a otro, y que la normativa aplicable puede cambiar con el
tiempo. Por esta razón, es fundamental que los inversores y los administradores de
empresas cotizadas en bolsa estén actualizados sobre las leyes y regulaciones que
les afectan en cada caso particular.
La propiedad intelectual es un tema de gran importancia en el derecho mercantil,
ya que permite a los titulares de los derechos proteger sus creaciones intelectuales
y obtener beneficios económicos por su explotación comercial.
La propiedad intelectual incluye diferentes tipos de derechos, como el derecho de
autor, la marca registrada, la patente, el diseño industrial y el secreto empresarial.
Cada uno de estos derechos tiene su propia regulación y protección en el ámbito
mercantil.
En el caso del derecho de autor, la ley protege las obras literarias, artísticas,
científicas y otros tipos de creaciones intelectuales. Los titulares de los derechos
pueden explotar comercialmente estas obras y obtener beneficios económicos por
su uso, como en el caso de las obras musicales, cinematográficas y literarias.
Por otro lado, la marca registrada es un signo distintivo que identifica los productos
y servicios de una empresa. Las empresas pueden registrar sus marcas para
protegerlas de la competencia desleal y evitar que terceros las utilicen sin su
consentimiento.
La patente es un derecho que protege una invención o innovación técnica y permite
a su titular tener el derecho exclusivo de explotar comercialmente la invención
durante un período determinado de tiempo. Esto permite al titular de la patente

Martes 25 de abril 2023

obtener beneficios económicos por su invento y evitar que terceros lo utilicen sin su
autorización.
El diseño industrial, por su parte, protege la apariencia estética de los productos y
su diseño, como la forma, color y textura. Esto permite a los titulares de los derechos
proteger sus diseños de la competencia y obtener beneficios económicos por su
explotación comercial.
Finalmente, el secreto empresarial se refiere a la información confidencial que
posee una empresa y que le da una ventaja competitiva en el mercado. La ley
protege esta información para evitar que terceros la utilicen sin el consentimiento de
la empresa y obtener beneficios económicos por ella.

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Bibliografía.
• Susana, D. T. M. (2010, 15 mayo). Manual de introducción al derecho
mercantil. Colección Cultura Jurídica.
http://ru.juridicas.unam.mx/xmlui/handle/123456789/12163
(SE DIVIDE POR CAPITULOS, LOS PDF SE NECESITAN DESCARGAR)

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