Para mí "Miraculous" ha significado mucho más que solo una simple serie animada.

Desde el
primer episodio hasta el último actualmente, esta serie ha demostrado que va más allá de las
animaciones ordinarias. Thomas Astruc y Jeremy Zag lograron crear una serie en la cual el
personaje vaya creciendo junto con el espectador al paso de los episodios, lo que comenzó
siendo una serie animada más del montón del 2016 a ser una serie significativa para muchos
jóvenes hoy.

"Las aventuras de Ladybug" obtuvo mi atención por la personalidad y evolución de los

personajes, especialmente el giro que dio con el villano que supuestamente era el "principal"
para luego dar la sorpresa que no era así, que los protagonistas deberán enfrentarse a algo
mucho más grande de lo que aparentaba ser, que realmente el malo siempre estuvo ahí, pero
ni los protagonistas ni los espectadores se dieron cuentan o no le tomaron relevancia. También,
la historia de amor la cual me hacía fantasear mucho y sufrir por lo complicado que se veía. La
forma en que Thomas Astruc logró describir, capturar la esencia de una adolescente que se
siente atrapada en su rutina y que conforme pasa la trama ella va creciendo, aprende a tomar
sus decisiones y las consecuencias que puede causar, los problemas que pueden influir en los
jóvenes me hizo sentirme identificada en muchas ocasiones.

Además, la trama de dos jóvenes que comparten su vida secreta como superhéroes y
desconocen sus identidades, pero el saber que están en la misma sintonía, son compañeros de
clases y amigos es el toque que le da al espectador de querer seguir viendo hasta saber si
podría causar un conflicto entre ellos con sus máscaras o en su amistad.

La tensión constante de que muchas veces se diera un romance entre los protagonistas era lo
que me mantenía al borde del sillón comiéndome las uñas para que una vez que derrotaran al
villano de cada episodio fuera una cuenta regresiva y me dejaran perdida al saber que no se
daba nada.