ALUMNA

NOHELY MICHELL GUZMAN ALVARADO

NUMERO DE CUENTA
123070018

CATEDRATICO
ABG: NADIA SALGADO

CLASE
DERECHO CONSTITUCIONAL
El artículo 30 de la Constitución de la República de Honduras
establece una obligación importante para los extranjeros que
ingresan al territorio nacional. Básicamente, este artículo
establece que los extranjeros tienen la obligación de respetar las
autoridades hondureñas y cumplir con las leyes del país desde el
momento en que ingresan a Honduras.

Esto significa que los extranjeros que se encuentran en Honduras

deben acatar las normas y regulaciones establecidas por el
gobierno hondureño, así como respetar las decisiones y autoridad
de las instituciones y funcionarios gubernamentales. En esencia,
se espera que los extranjeros se comporten de acuerdo con las
leyes y las normas locales mientras estén en el país y que cumplan
con sus obligaciones cívicas y legales.

Esta disposición es común en muchas constituciones de diversos

países y tiene como objetivo garantizar el orden y la seguridad
dentro del territorio nacional, así como proteger los derechos y
deberes de todos los que se encuentren en el país,
independientemente de su nacionalidad.

El artículo 31 de la Constitución de la República de Honduras

establece que los extranjeros que se encuentren en el país gozan
de los mismos derechos civiles que los hondureños, con ciertas
restricciones que puedan ser establecidas por leyes específicas.
Estas restricciones pueden ser justificadas por razones de orden
público, seguridad, interés nacional o conveniencia social.

Además, el artículo establece que los extranjeros también están

sujetos a los mismos tributos ordinarios y extraordinarios de
carácter general que los hondureños, de acuerdo con lo que
establece la ley. Esto significa que los extranjeros que residen o
trabajan en Honduras están obligados a pagar los mismos
impuestos que los ciudadanos hondureños, de acuerdo con las
regulaciones tributarias vigentes en el país.

En resumen, el artículo 31 garantiza a los extranjeros en

Honduras ciertos derechos civiles, pero también reconoce que
pueden existir restricciones legales justificadas por razones de
seguridad o interés público. Además, establece la igualdad en
cuanto al pago de impuestos entre extranjeros y hondureños,
siempre de acuerdo con la legislación tributaria.

El artículo 32 de la Constitución de la República de Honduras

establece una restricción para los extranjeros en cuanto a su
participación en actividades políticas en el país. En esencia,
prohíbe a los extranjeros involucrarse en actividades políticas de
carácter nacional o internacional en Honduras. Esto significa que
los extranjeros no pueden participar en asuntos políticos que
afecten al país o su gobierno, ya sea a nivel nacional o
internacional.

La violación de esta disposición conlleva sanciones de acuerdo con

la ley hondureña. Esto significa que, si un extranjero se involucra
en actividades políticas en Honduras, podría enfrentar sanciones
legales, que pueden incluir multas, deportación u otras medidas
establecidas por las autoridades competentes.

Esta disposición generalmente busca proteger la soberanía y la

estabilidad política del país al limitar la influencia extranjera en
asuntos políticos internos. Es importante que los extranjeros que
residen o visitan Honduras estén conscientes de esta restricción y
se abstengan de participar en actividades políticas que puedan
estar en contra de esta disposición constitucional.
El artículo 33 de la Constitución de la República de Honduras
establece ciertas restricciones en cuanto a las reclamaciones y
demandas que los extranjeros pueden hacer al Estado hondureño.
Aquí se explican sus principales puntos:

1- Reclamaciones y Exigencias de Indemnización: Los

extranjeros no tienen el derecho de hacer reclamaciones ni
exigir indemnización alguna al Estado a menos que estén en
los mismos casos y formas en que los hondureños pueden
hacerlo. Esto significa que los extranjeros deben seguir los
mismos procedimientos legales y cumplir con los mismos
requisitos que los ciudadanos hondureños cuando deseen
presentar una reclamación o demanda contra el Estado.

2- Recursos Diplomáticos Limitados: Los extranjeros no

pueden recurrir a la vía diplomática, a través de sus
respectivos países de origen, a menos que se trate de casos
de denegación de justicia. La denegación de justicia se refiere
a situaciones en las que no se ha proporcionado un acceso
justo y adecuado a la justicia en Honduras. No se considerará
denegación de justicia si un fallo legal simplemente es
desfavorable para el reclamante.

3- Consecuencia de No Cumplir: En caso de que un

extranjero no cumpla con estas disposiciones, perderá el
derecho de habitar en el país. Esto implica que si un
extranjero no respeta las reglas establecidas en el artículo
33, su estatus de residente o su permiso para permanecer en
Honduras podría ser revocado.
En resumen, este artículo busca garantizar que los extranjeros que
se encuentren en Honduras estén sujetos a las mismas condiciones
y restricciones legales que los ciudadanos hondureños cuando se
trata de hacer reclamaciones al Estado o recurrir a la vía
diplomática. También establece una consecuencia importante para
aquellos que no cumplan con estas reglas.

El artículo 34 de la Constitución de Honduras establece las

condiciones bajo las cuales los extranjeros pueden desempeñar
empleos en el país. Aquí presento una explicación:

1- Restricciones en el Empleo: Según este artículo, los

extranjeros solo pueden desempeñar empleos dentro de los
límites que establezca la ley. Esto significa que las leyes de
honduras deben definir cuáles son los empleos específicos
que los extranjeros pueden ocupar en el País.

2- Áreas Permitidas: Los extranjeros tienen permitido

trabajar en la enseñanza de las ciencias y las artes, así como
prestar servicios técnicos o de asesoramiento al estado. Estas
áreas se consideran abiertas para la contribución de
extranjeros en Honduras.

3- Condiciones para la Contratación: Los extranjeros pueden

ocupar estos empleos solo en situaciones en las que no haya
hondureños disponibles que puedan desempeñar esos
mismos empleos o prestar esos servicios. Esto significa que
si hay ciudadanos hondureños calificados y disponibles para
un empleo en particular, se les dará prioridad sobre los
extranjeros.

En Resumen, el artículo 34 busca equilibrar la participación de

extranjeros en la fuerza laboral hondureña al permitirles trabajar
en campos específicos, pero con la condición de que solo lo hagan
cuando no haya hondureños aptos para esos empleos o servicios.
Esto asegura que los ciudadanos tengan oportunidades laborales
prioritarias en su propio país.