CITAS BIBLICAS

TEMA “ENAMORAME OTRA VEZ”

Mt. 18:19-20 (1) (Donde están 2 o 3 reunidos en mi nombre, allí estoy

yo en medio de ellos)
Así mismo yo les digo: si en la tierra dos de ustedes se ponen de acuerdo
para pedir alguna cosa, mi Padre Celestial se lo concederá.
Pues donde están dos o tres unidos en i nombre, allí estoy yo, en medio de
ellos.

Mt. 11:28-30. (2) (carguen con mi yugo)

Vengan a mí los que están cansados, llevando pesadas cargas, y yo los
aliviaré. Carguen con mi yugo y aprendan de mí, que soy paciente y
humilde de corazón y sus almas encontrarán descanso. Pues mi yugo es
suave y mi carga liviana.

Ef. 4:30-32. (3) (Arrancar de raíz disgustos y arrebatos).

No entristezcan al Espíritu Santo de Dios; éste es el sello con el que
ustedes fueron marcados y por el que serán reconocidos en el día de la
salvación. Arranquen de raíz de entre ustedes disgustos, arrebatos, enojos,
gritos, ofensas y toda clase de maldad. Más bien sean bueno y
comprensivos unos con otros perdonándose mutuamente como Dios los
perdonó en Cristo.

1Jn:4-10 (4) (el amor de Dios)

En esto está el amor: no es que nosotros hayamos amado a Dios, sino que
él no amó primero y envió a su Hijo como víctima por nuestros pecados.
Jn. 3:16 (4) (La mayor expresión del amor de Dios)
¡Así amó Dios al mundo! Le dio al Hijo Único, para que quien cree en él no
se pierda, sino que tenga vida eterna.
Jn. 14:6-14. (5) (Nadie va al padre si no por mi)
Jesús contesto: “Yo soy el Camino la Verdad y la Vida. Nadie a al Padre
sino por mí. Si me conocen a mí, también conocerán al Padre. PERO YA
LO CONOCEN Y LO HAN VISTO.

Rom. 8:14-17 (6) (Avivamiento Espíritual)

Todos aquellos a los que guía el Espíritu de Dios son hijos e hijas de Dios.
Entonces no vuelvan al miedo; ustedes no recibieron un espíritu de
esclavos, sino el espíritu propio de los hijos, que nos permite gritar: ¡Abba!
o sea ¡Padre! El Espíritu asegura a nuestro espíritu que somos hijos de
Dios. Siendo hijos, son también herederos; la herencia de Dios será nuestra
y la compartiremos con Cristo. Y si hemos sufrido con él, estaremos con él
también en la Gloria.

Mt. 5:13-16. (7) (Sal y Luz)

Ustedes son la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve insípida, ¿cómo
podrá ser salada de nuevo? Ya no sirve para nada, por lo que se tira afuera
y es pisoteada por la gente. Ustedes son la luz del mundo ¿cómo se puede
esconder una ciudad asentada sobre un monte? Nadie enciende una
lámpara para taparla con un cajón; la ponen más bien sobre un candelero,
y alumbra a todos lo que están en la casa. Hagan pues que brille su luz
ante los hombres: que vean estas buenas obras, y por ello den gloria al
Padre de ustedes que está en los Cielos.

Mt. 6: 9-13. (8) (Padre Nuestro)

Ustedes, pues, recen así: Padre nuestro, que estás en el Cielo santificado
sea tu Nombre, venga tu Reino, hágase tu voluntad así en la tierra como en
el Cielo. Danos hoy el pan que nos corresponde, y perdona nuestras
deudas, como también perdonamos a nuestros deudores; y no nos dejes
caer en la tentación, sino líbranos del Maligno.

Mt. 16_24. (9) (Dios nos dice que si queremos seguirlo renunciemos a
sí mismos)
Entonces dijo Jesús a sus discípulos: El que quiera seguirme, que renuncie
a sí mismo, cargue con su cruz y me siga. Pues el que quiera asegurar su
vida la perderá, pero el que sacrifique su vida por causa mía la hallará.

Mt. 28:16-20. (10) (Jesús envía a sus apóstoles).

Por su parte, los Once discípulos partieron para Galilea, al monte que
Jesús les había indicado. Cuando vieron a Jesús, se postraron ante él
aunque algunos todavía dudaban. Jesús se acercó y les habló así. “Me ha
sido dada toda autoridad en el Cielo y en la tierra. Vayan pues, y hagan que
todos los pueblos sean mis discípulos. Bautícenlos en el Nombre del Padre
y del Hijo y del Espíritu Santo, y enséñenles a cumplir todo que yo les he
encomendado a ustedes. Yo estoy con ustedes todos los días hasta el fin
de la historia”