PARROQUIA DE SANTA ANA PACUECO

“Me llamó, lo seguí y soy feliz”

LA LLAMADA
Juglar: Hola que tal niños y niñas, cómo están?
Saben vengo desde el otro lado del puente de la Piedad Michoacán,
ah que dijeron verdad , vengo desde un lugar donde se cultivan …?
Haber que se cultiva aquí?,…muy bien… bueno yo vengo de un
pueblo llamado vocaciolandia, quien se aprendió el nombre de mi
pueblo…..
Ok, yo soy de vocaciolandia y vengo con una misión muy especial.
Contarles la historia de dos personas, super lindas ellas son: Miriam y
Manuel. ¿Quieren conocerla? Muy atentos pues.

Llamada entrante de celular y contesta el papá

Papá: Hola sí, ya va a nacer, si si, voy para alla.
Papá: Ya nació
Enfermera: Si señor, pero le tengo una muy buena noticia no fue uno
sino dos los hijitos que le nacieron, una hermosa mujercita y un bello
varoncito, es decir, un niño y una niña.
Papá: Oh bendito sea Dios, Dios de la Vida que nos ha regalado 2
hermosos hijitos.
Los papás abrazados cada uno con un bebé (Canto: El es mi Hijo” de
Javier Brú

Papá: Lupe, esposa amada, es tiempo de llevar a bautizar a nuestros

hijos
Mamá: Pero, que nombres les vamos a poner?
(Los dos pensativos, y le preguntan a algunos del público)
Papá: Esposa Lupe, que te parece si les ponemos Miriam y Manuel
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Mamá: Sí, me gustan esos nombres

Papás: Vamos pues a buscarles los padrinos para llevarlos a bautizar
(Canto: El es mi Hijo” de Javier Brú)
Papá: Hemos llegado
Sacerdote: pasen, pasen hijos
(Canto: El es mi Hijo” de Javier Brú)
Sacerdote: Queridos Papas que piden a la Iglesia para su hijo e hija
Papás: el bautismo y el don de la fe
Sacerdote: Acerque la madrina a la ahijada. ¿Cuál será su nombre?
Los papás: Miriam
Sacerdote: Miriam yo te bautizo en el nombre del Padre, del Hijo y del
Espíritu Santo
Sacerdote: Pase el padrino con el ahijado: ¿Cuál será su nombre?
Los papás: Manuel
Sacerdote: Manuel yo te bautizo en el nombre del Padre, del Hijo y
del Espíritu Santo
Canto: Bautízame con tu Espíritu
Gritamos todos: que los padrinos nos den el volo
Juglar: Miriam y Manuel fueron creciendo en edad, sabiduría y gracia
delante de Dios, de su familia y de su pueblo
Entran al escenario una niña y un niño de su edad de entre 9 0 10
años bailando el canto de grande y fuerte es nuestro Dios
Juglar: Corrieron los años y Miriam y Manuel estaban por hacer su
confirmación y fueron a un retiro y paso lo siguiente.

Catequista: Hola Miriam. Hola Manuel como están

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Miriam: me siento inquieta no sé cómo decirlo, tengo días

preguntándome para que nací, qué me llena el corazón, estoy
confundida, no sé si a las niñas de mi edad les pase lo mismo, si se
pregunten para quien soy yo. Lo único que estoy segura es que quiero
ser santa.
Manuel: yo también he pensado que ahora que termine mi secundaría
y prepa que camino voy a seguir, y de repente siento temor porque no
sé qué hacer, no se para quien soy yo, e igual que mi hermana deseo
ser santo
Canto: para quien soy yo, mientras Manuel y Miriam se pasean
pensativos
Catequista: Les voy a presentar 4 personajes que les pueden ayudar
a encontrar las repuestas a sus inquietudes ellos son los llamados
miren ahí viene un llamado vamos a recibirlo con un aplauso.
(Entra el matrimonio) (canción este par de anillos, mientras va
entrando el matrimonio)
Matrimonio H: Buenos días ¿cómo están todos? Hola yo soy el
llamado al matrimonio y mi misión es formar una familia, donde reine el
amor, la fidelidad, la confianza y muy especialmente la fe.
Matrimonio M: Nuestro llamado al matrimonio lo recibe un hombre y
una mujer para ser una sola cosa, que mediante una alianza
simbolizada por los anillos nupciales son desde ese momento
esposos.
Miriam: Oh yo nací de un matrimonio
Manuel: Y formo parte de una familia fundada en el amor del
matrimonio.
Miriam y Manuel: ¡Qué hermoso llamado!
Catequista: Miren alla viene el llamado al sacerdocio, vamos a
recibirlo con un fuerte aplauso.
Entra el llamado al sacerdocio y mientras tanto de fondo el canto
sacerdote de Martín Valverde
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Sacerdocio: Hola ¿qué tal cómo están? Bueno, me da gusto que

estén muy contentos, sino digo les caería bien una confesadita.
Me presento yo soy el llamado al sacerdocio, llamó a hombres a
varoncitos, a jóvenes que son miembros de una familia y de nuestra
comunidad parroquial.
Mi misión es llamarlos para que sean otro Cristo aquí en la tierra, en
medio de nosotros, para que prolonguen el amor de Dios a todos:
bautizando a los niños, escuchando y absolviendo nuestra confesión,
visitando a los enfermos, casando a los novios y muy pero muy
especialmente celebrando la santa misa, que es el centro de nuestra
fe.
Miriam: el Sacerdote es un Pastor de almas
Manuel: Es la voz del pueblo ante Dios
Miriam y Manuel: ¡Qué padre ser padre!
Catequista: Miren quién viene alla, miren miren!!!
(Entra la Vida consagrada y de fondo el canto de Cristo es mi
prometido de Jesed)
Vida consagrada: Hola buen día yo soy el llamado a la vida
consagrada, llamo a muchachas y muchachos, para que sigan a
Jesús, por el camino del amor, de las virtudes evangélicas, y les llamó
para que además de seguirlo lo imiten en su estilo de vida pobre,
casto y obediente.
Mi misión es hacer presente la vida futura, es decir la vida eterna, por
eso los y las llamadas a la vida consagrada usan un hábito como este,
un velo que cubre nuestra cabeza que significa que le pertenecemos a
Cristo, un anillo que es signo de nuestra alianza con Dios y una Cruz
al pecho que significa nuestra entrega a Dios.
Además la vida consagrada como las abejitas viven en comunidad
encarnando un carisma otorgado por el Espíritu Santo y con ello
haciendo presente el reino de Dios en medio de su pueblo.
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Como hoy los padres y las catequistas de la parroquia de Santa Anita

me invitaron a venir a evangelizar unos niños y niñas que se preparan
para sus sacramentos
Miriam: El llamado a la vida consagrada hace visible el reino de los
cielos
Manuel: y nos ánima a desear la vida eterna
Manuel y Miriam: Bendito llamado

Catequista: nos falta alguien, viene entrando, wuau es el llamado a la

soltería
Vamos a recibirlo con un fuerte aplauso
Entra el llamado a la soltería y de fondo el canto un velero llamado
libertad de José Luis Perales.
Llamado a la soltería: ¡Qué tal como están todos yo soy el llamado a la
soltería, y mi llamado es hacer pero llamado libertad resente el reino
de Dios en medio del mundo.
Equivocadamente muchos creen que soy el llamado solterón que no
encontró con quien casarme. Sin embargo mi misión es trabajar en
medio del mundo por la Iglesia y servir con alegría dando testimonio
del nombre cristiano.
Yo soy el llamado a la soltería, e igual que mi amigo el llamado a la
vida consagrada soy célibe, nada más que yo vivo con mi familia los
valores del Reino.
Juglar: y así cada uno de los llamados se hizo presente en la vida de
Miriam y de Manuel, era una novedad para ellos conocerlos los
llamados y le preguntaron a su catequista
Miriam: Oye catequista dime cual es mi llamado, como puedo saberlo
Manuel: Para cuál llamado nací, cuál es mi misión.
Catequista: todos los llamados son valiosos y todos salen de un
mismo corazón y van a un mismo lugar, miren pero ahí viene quién
nos regala el llamado
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(Entra Jesús, música de fondo el canto para quien soy de Hakuna)

Jesús: La paz este con ustedes, que alegría me da que estén
buscando su vocación, es decir su llamado.
Quiero decirles que el llamado yo lo hago porque deseo que todos se
salven, que todos sean santos, entonces a unos los llamo a ser santos
matrimonios, a otros los llamo a ser santos sacerdotes, y otros los
llamo a ser santos consagrados y otros más a ser santos solteros.
Cada llamado esta llamado a la santidad.
Manuel y Miriam y todos y todas ustedes que me ven y escuchan,
¿quieren ser santos, en el llamado que les regalo?
Manuel y Miriam: Si si queremos ser santos.
Jesus: entonces síganme
Ven y sígueme de Jesed