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TEMA 4: TRASTORNOS DE ANSIEDAD. ESQUEMA.

Conceptos básicos:

Es un problema muy frecuente. La mayor parte de los problemas de la sociedad son


emocionales, centrados en experimentar emociones negativas. Las emociones no son ni malas ni
buenas, sino que dependen de la interpretación que hagamos de ellas (que le demos un valor u
otro). Cuando percibimos amenaza, lo llamamos miedo o ansiedad. Es uno de los conceptos
centrales en psicopatología, está presente en muchos problemas de salud mental y en muchas
enfermedades físicas (hormonales, hipotiroidismo, musculares, respiratorias, estomacales). La
definición de la ansiedad hay que hacerla siempre en términos fenomenológicos, es siempre una
respuesta anticipatoria, ante una amenaza futura, cuya percepción se suele acompañar de un
gran número de manifestaciones físicas, somáticas. El peligro puede venir de fuera, pero
también de dentro. El elemento central en la ansiedad es su naturaleza anticipatoria del peligro o
la amenaza (ej.: el payaso que nos va a matar, el avión que se va a caer). Aquello que en
principio adquirimos en la filogenia, ha perdido hoy su valor adaptativo y es, en términos
generales, desadaptativo. La ansiedad per se no es mala, sino que nos hace activarnos y
prepararnos para múltiples cosas; el problema viene dado cuando esta es muy frecuente o
intensa y genera alguna disfunción. El miedo y la ansiedad serían equivalentes, salvo que el
miedo se produce cuando la amenaza está presente (poco valor cognitivo, muy automático),
mientras que la ansiedad la asociamos a algo más aprensivo, más ligado a la anticipación.

Componentes de la ansiedad:

Lo que se suele hacer es fraccionar la respuesta en tres elementos:

- Componente fisiológico-somático: hace referencia a todo bosquejo de síntomas


presentes en la ansiedad, que es el trastorno en que manifestaciones físicas están más
presentes (enrojecimiento de la piel, temblor, dilatación de las pupilas, tensión
muscular, sudor, incremento de la tasa cardiaca, opresión precordial, o dolor en el
pecho, sensación de mareo o vértigo, descenso de la salivación…).
- Componente cognitivo-subjetivo: es el más importante, ya que es central y hace
referencia a los aspectos más fenomenológicos (la propia experiencia, percepción y
evaluación interna que hace la persona tanto de estímulos, como de estados ligados a la
ansiedad). También entra aquí la valoración de los síntomas físicos (cuando la
valoración es negativa, podemos hablar de ansiedad). Esto es lo que realmente marca la
ansiedad por lo molestos o desagradables que son para la persona.
- Componente motor-conductual: lo más observable. Elementos como la expresión facial,
posturas corporales de rigidez, de tensión, respuestas de escape y evitación (que son
muy importantes para explicar e intervenir).

Clasificación del DSM V: trastornos de ansiedad.

Excepto en la fobia social, en las mujeres la prevalencia es bastante más elevada en las mujeres
que en los hombres (en las fobias y trastorno de pánico).

- Fobias: agorafobia, fobia específica (más común), ansiedad social (fobia social).
- Trastorno de pánico (con o sin agorafobia).
- Ansiedad generalizada.
- Ansiedad por separación: miedo excesivo o inapropiado como respuesta a la separación
del hogar o de las personas a las que uno está ligado afectivamente. Problema de apego.
Hay que considerar siempre el nivel de desarrollo y edad de la persona.
- Mutismo selectivo: también en la infancia. Pierde el habla en situaciones específicas,
pero no necesariamente en todos los contextos. Deja de hablar en el colegio, pero no en
casa, por ejemplo. No hay problemas cerebrales o de lenguaje que lo justifiquen.
- Ansiedad inducida por sustancias: como la cocaína, exceso de cafeína, o síndromes de
abstinencia.
- Ansiedad debida a condiciones médicas: condiciones cardiovasculares, hipertiroidismo,
respiratorias… Hace más probable que tengan trastornos de ansiedad.

Modelo transdiagnóstico de los trastornos emocionales

Parte de que hay 5 niveles explicativos de los trastornos emocionales

Nivel 1: rasgos de vulnerabilidad hacia los problemas emocionales (y hacia la ansiedad en


particular, como el neuroticismo, estado negativo causado por la percepción de situaciones, que
predispone a la persona a experimentar síntomas negativos en situaciones de estrés, entre otras
cosas porque favorece la inhibición conductual) que suelen ser factores temperamentales (tienen
una parte biológica, aunque también está determinado por la historia de aprendizaje). Afecto
positivo (desinhibición de la acción) y negativo son dos factores temperamentales de
vulnerabilidad hacia la ansiedad.

Nivel 2: procesos transdiagnósticos: procesos cognitivo-conductuales vistos en el tema 2,


relacionados con las creencias o expectativas que tienen las personas sobre los síntomas
emocionales o situaciones experimentadas. Por ejemplo, la intolerancia a la incertidumbre es
algo muy presente en la ansiedad. La vida está llena de ambigüedad, si a lo largo de la vida
hemos ido resolviendo los pequeños problemas cotidianos (si los hemos resuelto nosotros
mismos y no los han resuelto por nosotros…) tendremos una mayor tolerancia a la
incertidumbre.

Nivel 3: afrontamiento y regulación emocional (lo que hacemos, cómo reaccionamos, cómo
resolvemos cuando tenemos malestar emocional – si lo afrontamos, nos irá mejor, si lo
evitamos, nos irá peor, rumiaremos; afrontamientos directos serán mucho más beneficiosos).

Todo esto conformará los niveles 4 y 5, que a su vez están interrelacionados:

Nivel 4: síndromes clínicos.

Nivel 5: sintomatología.

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