Organism: Disarmament & International Security

Committee
Country: Greece
Delegates: Lia Gomez and Gabriela Tejeda
Grecia, una tierra que ha sido cuna de la civilización y ha mantenido una tradición
rica en sabiduría diplomática, se establece como un faro de mediación en el
complejo escenario global. En nuestra identidad nacional, los hilos de la mediación
se entrelazan con la firme determinación de proteger los intereses fundamentales de
nuestro país. En un mundo donde los desafíos se multiplican y las tensiones
internacionales son evidentes, Grecia asume un papel activo en la búsqueda de la
paz en conflictos, no solo como una expresión de su legado histórico, sino también
como una estrategia fundamental para mantener la estabilidad regional y
salvaguardar sus propios intereses nacionales.

En el contexto de los conflictos étnicos en Grecia, la mediación internacional

emerge como un recurso vital para abordar tensiones profundamente arraigadas y
construir puentes hacia la reconciliación. La complejidad de los conflictos étnicos,
marcados por diversidad cultural e histórica, requieren una respuesta
cuidadosamente elaborada tanto a nivel nacional como internacional. Los cambios
que trae la nueva Ley de Mediación, son un hito en la promoción de un sistema
completo de resolución extrajudicial de conflictos, ya que la promoción estructurada
a nivel global de esta popular Institución, pretende que los ciudadanos tengan acceso
a un método rápido, fácil y económico de resolución de conflictos. Sin
embargo, este ADR también pretende agilizar los tiempos que requiere la resolución
de los litigios, y pretende descongestionar y dejar de sobrecargar los tribunales, ya
que, dicha opción, aspira a llevar la resolución de los casos fuera de las salas.

En esta situación, la colaboración con organizaciones internacionales como las

Naciones Unidas y la Unión Europea son factores de suma importancia en la
estrategia griega, ya que la cooperación internacional no solo proporciona recursos y
experiencia, sino que también aumenta la legitimidad de los esfuerzos para mediar y
promover el reconocimiento mundial de las soluciones expuestas. Tomando en
cuenta que el compromiso del gobierno en la búsqueda de soluciones dialogadas es
evidente puesto que la adopción de medidas políticas para facilitar la mediación y la
resolución pacífica de disputas étnicas refleja un enfoque proactivo hacia la
construcción de una sociedad más inclusiva y cohesionada.
El impacto de la mediación internacional no se evalúa solo por la reducción de la
violencia, sino también por el fomento de la tolerancia y la convivencia pacífica. Al
promover el diálogo y facilitar la participación de las diferentes comunidades étnicas
en los procesos de toma de decisiones, se sentan las bases para alcanzar una paz
duradera y fortalecer la identidad nacional.