Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Sabemos de sobra los beneficios que tiene el sexo, disminuye la presión arterial, fortalece el
sistema inmunológico, alivia el estrés, quema calorías e incluso te ayuda a dormir mejor.
Esto se debe a que nuestro cuerpo libera muchas hormonas durante el acto, sin ir más lejos
las endorfinas, llamadas "la hormona de la felicidad", pero, entonces, ¿qué sucede
realmente cuando establecemos esa intimidad con otra persona? La revista “The Healthy”
ha decidido enumerar todos los cambios que se producen en tu cuerpo cuando se produce
ese momento, y estos son:
El sistema límbico, región del cerebro responsable de los impulsos físicos y los elementos
del procesamiento emocional, se activa durante el sexo. Sin embargo, otras partes de la
corteza cerebral que gobiernan el razonamiento superior se cierran. Como consecuencia, el
acto sexual en sí mismo es impulsado más por el instinto y la emoción que por el
pensamiento racional.
Y otras se enfrían
Curiosamente, dos áreas específicas del cerebro de las mujeres parecen “cerrarse” o
“enfriarse” durante el sexo, según la psicóloga clínica Jennifer Sweeton: una región
involucra los juicios sociales y conciencia, “lo cual podría ser la razón por la cual la gente
dice aquello de que el amor es ciego”, explica.
Por ello, quizá, el placer sexual y el dolor a menudo están relacionados. También se ha
encontrado que las áreas vinculadas con la autoconciencia y la auto inhibición se desactivan
en el cerebro femenino, lo que ayuda a potenciar el orgasmo femenino.
Liberamos dopamina:
El sexo hace que el cerebro libere niveles más altos de algunos neuroquímicos, y
especialmente se da relevancia al hecho de que liberamos dopamina, la cual tiene muchas
funciones en el cerebro, incluyendo papeles importantes en el comportamiento y la
cognición, la actividad motora, la motivación y la recompensa, la regulación de la
producción de leche, el sueño, el humor, la atención, y el aprendizaje.
También oxitocina:
Y serotonina:
La serotonina ayuda a regular el estado de ánimo y el sueño, por lo que cuando las personas
no producen suficiente pueden sentirse deprimidas. Dado que aumenta durante las
relaciones sexuales, puede generar sentimientos de felicidad y paz, mejorar el estado de
ánimo, reducir el estrés y, quizás hasta mejorar la memoria.
¿Qué es la noradrenalina?
Quizá te sucedido en alguna ocasión. Se llama disforia postcoital y no es tan raro. Puedes
llorar después de un orgasmo y también durante el mismo. Como hemos dicho, durante el
acto sexual liberamos oxitocina, y esa relajación puede ayudarnos a coger el sueño. De
igual manera también liberamos prolactina al torrente sanguíneo, y eso es lo que en
muchas ocasiones nos hace sentir la necesidad de besar, acariciar y expresar a nuestra
pareja cariño cuando hemos terminado.
Y, de la misma manera, llorar después de la relación es otra conducta de liberación asociada
al clímax que no tiene nada de malo. La oxitocina causa un montón de sensaciones,
incluida la avalancha de lágrimas o los sentimientos asociados con autodesprecio,
vergüenza y ansiedad sin razón aparente.
Otro dato significativo es que el organismo de los hombres genera un 50% más de
serotonina que el de las mujeres, por lo que éstas sentirán con mayor intensidad el aumento
o el descenso de los niveles de este neurotransmisor.
3. Oxitocina: Conocida como la "hormona del amor" o "hormona del apego", desempeña
un papel crucial en el establecimiento de vínculos emocionales y la intimidad. También se
libera durante la excitación sexual y el orgasmo. La oxitocina, es una hormona que está
directamente relacionada con la conducta maternal y paternal, los patrones sexuales y la
impulsividad en la intimidad con la pareja.
La hormona está directamente relacionada con el placer y el afecto, ya que ayuda al cerebro
a sentir cariño por las personas que componen nuestro entorno, permitiendo sentir hacia
ellas lo que no sentimos hacia los desconocidos. Durante las relaciones sexuales se libera
oxitocina, la que actúa sobre los sistemas del cerebro relacionados con el refuerzo positivo,
es decir, con el placer, incrementando la complicidad, afecto y confianza con la pareja.
Aquellas personas que tienen contacto físico y sexual de calidad frecuentemente logran
mayores niveles de oxitocina. De este modo, se estrechan y fortalecen los lazos en la
relación.