BANDAS DE

DISCIPULADO
UNA GUÍA
PRÁCTICA DE
CAMPO

POR MARK
BENJAMIN Y
J.D. WALT
 Copyright 2018 by Mark Benjamin and J. D. Walt
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Mobi ISBN: 978-1-62824-628-5
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uPDF ISBN: 978-1-62824-630-8
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Franklin, Tennessee
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 CONTENIDO

Guía de inicio rápido 4

¿Por qué bandas de discipulado? 5
¿Cómo crecen las personas? 8
¿Qué es una banda de discipulado? 10
¿Qué hacen las bandas de discipulado? 14
¿Qué sucede en una reunión de banda de
discipulado? 17
¿Cómo empiezo? 19
El panorama más amplio: El por qué detrás del
por qué 20
Preguntas frecuentes 23
Notas 28
Recursos para Bandas de discipulado 29
 GUÍA DE INICIO RÁPIDO
Creamos esta sección en caso de que seas una de esas personas a
las que les gusta comenzar a armar cosas antes de leer las
instrucciones.

Una banda de discipulado es un grupo de tres a cinco personas

que leen juntas, oran juntas y se reúnen para convertirse en el
amor de Dios unos para los otros y para el mundo.

La forma más rápida y fácil de comenzar es visitar

discipleshipbands.com y seguir las migas de pan. También puede
ir a la tienda de aplicaciones correspondiente de su teléfono
inteligente, buscar bandas de discipulado (discipleship bands),
descargar la aplicación y subir a bordo. Sin cargos. Sin anuncios.
No se comparte su información con otras empresas u
organizaciones. Haremos todo lo posible para inspirarte,
alentarte y equiparte desde allí.

Para ser claros, descargar la aplicación no lo compromete a

comenzar una banda de discipulado. Simplemente te lleva al lugar
desde donde pueden suceder muchas cosas buenas a
continuación. Dale una oportunidad. Siempre puedes retirarte
gentilmente más tarde, pero al intentarlo, al menos sabrás de la
increíble oportunidad.

Por ahora, puede que hayas decidido seguir leyendo y aprender

más sobre esta oportunidad. Por eso creamos esta breve guía
práctica.

4
 ¿POR QUÉ BANDAS DE
DISCIPULADO?

En un mundo post-cristiano, el contenido del

evangelio tendrá poco impacto en los no creyentes si
las personas no lo ven materializado en las relaciones
entre los creyentes.

En sus horas finales, Jesús oró específicamente por nosotros,

“para que todos sean uno; como tú, Padre, en mí y yo en ti, que
también ellos sean uno en nosotros, para que el mundo crea que
tú me enviaste” (Juan 17:21).
Jesús oró para que las relaciones entre sus seguidores fueran
del mismo carácter que las relaciones entre el Padre, el Hijo y el
Espíritu Santo. Además, oró para que nuestras relaciones
encontraran su hogar dentro de las relaciones del Padre, el Hijo y
el Espíritu Santo. Finalmente, note por qué esto es tan importante.
Nuestras relaciones unos con otros llevarán a las personas más
cerca de Dios o más lejos. ¿Por qué bandas de discipulado? Porque
el discipulado en bandas crea el contexto para que el amor
sobrenatural de Dios se vuelva real en nuestras vidas y en
nuestras relaciones con el mundo. Las bandas de discipulado a la
vez crean un espacio para la transformación interna y la misión
externa.
La gran tragedia del discipulado cristiano es que ha llegado a
significar tantas cosas que puede significar casi nada. Sin duda, el
discipulado tiene complejidades, pero en su esencia debemos
tener una claridad profunda. En sus instrucciones finales para
nosotros, Jesús lo dejó claro:
“Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra. Por tanto,
vayan y hagan discípulos de todas las naciones, bautizándolos en el
nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo, enseñándoles a
obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Y les aseguro que
estaré con ustedes siempre, hasta el fin del mundo.” (Mat. 28:18–20)

5
BANDAS DE DISCIPULADO
Debemos hacer discípulos y enseñarles a obedecer todo lo que Jesús
nos ha mandado. ¿Qué ordenó? Jesús nos hizo un gran favor al
responder la pregunta acerca del mandamiento más grande.
“‘Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda
tu mente’ –le respondió Jesús--. Éste es el primero y el más importante
de los mandamientos. El segundo se parece a éste: ama a tu prójimo
como a ti mismo. De estos dos mandamientos dependen toda la ley y
los profetas.” (Mat. 22:37–40)
En la víspera de su crucifixión, después de lavar los pies de sus
discípulos, Jesús llevó la totalidad de sus mandamientos a un
mandamiento.
“Este es mi mandamiento: que se amen unos a otros, como yo los he
amado. Nadie tiene mayor amor que éste, que es el poner su vida por sus
amigos.” (Juan 15:12–13)
El amor sobrenatural y santo de Dios no es una cosa suave y
confusa como algunos han pensado. Es lo más difícil y glorioso
que haremos. Requiere una intención clara, una atención aguda y
una práctica enfocada durante un largo período de tiempo. Más
que nada, se necesita un tipo particular de marco relacional para
que florezca. ¿Por qué amar? Porque es el punto decisivo del
discipulado. Hemos llegado a creer que el amor de Dios es el
poder de Dios. Este tipo de amor no se puede aprender en la
multitud. Se puede aprender mejor a través del discipulado en
bandas.
Seamos claros. No estamos hablando de un nuevo programa de
grupos pequeños, o de grupos para una mejor rendición de cuentas,
o grupos de estudio de la Biblia. No fallamos en la misión de Dios en
el mundo por falta de más información o mejor contenido o
habilidades mejoradas. Fallamos por falta de amor. No tenemos un
problema de contenido. Tenemos un problema de conexión.
Nuestro principal desafío no es aprender más, sino amar más.
Nos gusta la forma en que nuestro amigo Phil Meadows
describe a las bandas de discipulado:

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 UNA GUÍA PRÁCTICA DE CAMPO
Una banda es una forma de compañerismo que es un medio de
encuentro carismático con la presencia, liderazgo y poder del Espíritu
Santo. Nos acercamos unos a otros. Jesucristo está presente como lo
ha prometido e infunde poderosamente su Espíritu. Y nos ayudamos
unos a otros a fijar nuestros ojos en él, que está en medio nuestro. Y
nos ayudamos mutuamente a abrirnos plenamente para recibir el
Espíritu que él da. Y nos acercamos para tener una conversación
sagrada.
El éxito del evangelio de Jesucristo se eleva y recae sobre la fuerza
de las relaciones entre sus seguidores. En una ocasión, Jesús hizo
una predicción impactante con respecto a sus discípulos:
“Ciertamente les aseguro que el que cree en mí las obras que yo
hago él las hará, y aun las hará mayores, porque yo vuelvo al
Padre” (Juan 14:12). Como se mencionó, y es digno de repetición,
Jesús les diría el secreto de este poder en el siguiente capítulo:
“Éste es mi mandamiento: que se amen unos a otros, como yo los
he amado. Nadie tiene mayor amor que éste, que es el poner su
vida por sus amigos” (Juan 15:12–13). La ambición de Jesús no es
crear un grupo de obradores de milagros individuales y
autónomos. Su misión es crear comunidades milagrosas. Esto
sucede simplemente a través del arduo viaje de las personas que
aprenden a amarse de la misma manera que el Padre, el Hijo y el
Espíritu Santo se aman.
Veremos lo más grandioso del evangelio en el mundo a medida
que el amor más grandioso del evangelio encuentre su lugar en
nuestras relaciones. De esto se trata el reunirnos en bandas. La
primera mitad del evangelio es acerca de creer en el amor de Dios
por el mundo. La segunda mitad del evangelio se trata de
convertirse en el amor de Dios en y para el mundo. Estamos de
acuerdo con esta convicción: el mundo despertará a la primera
mitad del evangelio a medida que el pueblo de Dios despierte a la
segunda mitad del evangelio. En un mundo post-cristiano, el
contenido del evangelio tendrá poco impacto en los no creyentes
si las personas no lo ven materializado en las relaciones entre sus
creyentes. No hay nada nuevo aquí. En realidad, es bastante
antiguo. Desde el grupo de discípulos de Jesús hasta nuestros días,
en todas partes en que la iglesia ha florecido, alguna forma de
discipulado en bandas estaba en su centro.
La mayoría de nosotros no somos perezosos en nuestra fe.

7
 Estamos atorados. No es que nos falte compromiso. Simplemente
estamos detenidos en nuestro desarrollo. El camino a seguir está
tan cercano como lo están algunas personas que están dispuestas
a unirse.

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 UNA GUÍA PRÁCTICA DE CAMPO
PRACTICAL FIELD GUIDE
¿CÓMO CRECEN LAS PERSONAS?
Ahora bien, el Señor es el Espíritu; y donde está el Espíritu del
Señor, allí hay libertad. Así, todos nosotros, que con el rostro
descubierto reflejamos como en un espejo la gloria del Señor,
somos transformados a su semejanza con más y más gloria por la
acción del Señor, que es el Espíritu. (2 Cor. 3:17–18)

El evangelio no solo nos salva; nos cambia. El evangelio de

Jesucristo sucede en cuatro movimientos épicos de gracia. La
primera mitad del evangelio es el movimiento de la gracia
preveniente a la gracia justificadora. La segunda mitad del
evangelio es el movimiento de la gracia santificadora a la gracia
glorificadora.
La gracia preveniente, como se indica con el “pre”, es la gracia
que viene antes de la salvación. El evangelio comienza en nuestras
vidas mucho antes de que tengamos una idea de él. El Espíritu
Santo libera nuestras voluntades, abriéndonos a la posibilidad no
solo de percibir, sino de participar en la gracia de Dios.
La gracia justificadora, que completa la primera mitad del
evangelio, ocurre cuando una persona llega por primera vez a la
fe salvadora en Jesucristo. Comienza cuando la persona se da
cuenta de que su pecado les impide tener una relación con Dios y
nada de lo que pueda hacer superará esta separación. La
salvación progresa a medida que uno comienza a comprender la
realidad de la gracia, que es el amor incondicional de Dios que nos
limpia de nuestro pecado y nos lleva a una relación viva con él. La
salvación es sellada por el Espíritu Santo cuando una persona
confiesa su pecado y recibe la gracia de Dios a través del perdón
de Jesucristo ofrecido a través de la cruz y entra en una relación
correcta con Dios.

9
 Desafortunadamente, para demasiadas personas, aquí es donde
termina la salvación. El evangelio, sin embargo, sólo está
comenzando. Hay una vasta extensión de gracia más allá del don
de la justificación. Lo llamamos santificación, la segunda mitad del
evangelio. La santificación es el proceso continuo de ser rehechos
a la imagen de Dios. En resumen, es participar con la obra del
Espíritu Santo para convertirnos en el tipo de persona que Jesús
sería si fuera nosotros. Como la justificación es el don de Dios por
gracia a través de la fe, así es la santificación el don de Dios por
gracia a través de la fe. Aunque tenemos mucho trabajo que hacer,
no es nuestro trabajo lo que nos salva, sino la gracia de Dios. La
gracia gloriosa, que completa la segunda mitad del evangelio, es
el don de Dios en nuestra muerte, marcando nuestro paso hacia
la plenitud de la vida eterna.
Si bien somos justificados solos ante Dios, solamente seremos
santificados juntos. La madurez cristiana no es un viaje en
solitario, sino un proceso comunitario. Esta es la razón de tanto
desarrollo detenido en nuestra fe: creemos que podemos hacerlo
solos. No podemos. Ahí es donde entra en juego esta pequeña
guía. Los grupos pequeños son útiles y proporcionan un gran
contexto para el compañerismo y el estudio, pero carecen de la
capacidad para guiarnos hacia la plenitud de la vida que Dios
tiene para nosotros. Necesitamos algo más pequeño con la
capacidad de mayor profundidad y crecimiento. Para que el
discipulado alcance su máximo potencial, necesitamos algo más
profundo que los grupos pequeños, algo más rico que un grupo de
rendición de cuentas y algo más allá de otro grupo de estudio.
Necesitamos una banda, que es un grupo de tres a cinco personas
que leen juntos, oran juntos y se reúnen para convertirse en el
amor de Dios el uno para el otro y para el mundo. Debemos
unirnos con algunas otras personas para ayudarnos unos a otros
a persistir en el viaje de la segunda mitad del evangelio.
La primera mitad del evangelio es acerca de creer en el amor de
Dios por el mundo. La segunda mitad del evangelio se trata de
convertirse en el amor de Dios en y para el mundo. El mundo
despertará a la primera mitad del evangelio a medida que la
iglesia despierte a la segunda mitad del evangelio.
El cambio es largo. El cambio es difícil. El cambio es lento. El
cambio es glorioso. Si queremos proseguir hacia la plenitud de la
vida como una nueva creación, debemos encontrarnos en un
10
 UNA GUÍA PRÁCTICA DE CAMPO
nuevo nivel. Ve hacia éste con nosotros.
PRACTICAL No será
FIELD lo más fácil que
GUIDE
harás alguna vez, pero será la más poderosa y una de las gracias
por las que estarás más agradecido.
Este folleto está diseñado para guiarlo en formas prácticas para
comenzar y seguir este camino de discipulado en bandas.

11
 ¿QUÉ ES UNA BANDA
DE DISCIPULADO?

Una banda de discipulado es un grupo de tres a cinco

personas que leen juntas, oran juntas y se reúnen para
convertirse en el amor de Dios el uno para el otro y para
el mundo.

Considere cuidadosamente este texto visionario de las Escrituras

de la carta de Pablo a los efesios.
Le pido que, por medio del Espíritu y con el poder que procede de sus
gloriosas riquezas, los fortalezca a ustedes en lo íntimo de su ser, para
que por fe Cristo habite en sus corazones. Y pido que, arraigados y
cimentados en amor, puedan comprender, junto con todos los santos,
cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo; en fin, que
conozcan ese amor que sobrepasa nuestro conocimiento, para que
sean llenos de la plenitud de Dios. (Efesios 3:16–19)
Primero, note que esta es la Palabra de Dios. Segundo, es una
oración. En tercer lugar, se trata de relaciones. Por estas razones
y más, sirve como texto fundamental para nuestro trabajo. Las
bandas de discipulado brindan un contexto donde podemos hacer
bien estas tres cosas. Leemos juntos. Oramos juntos. Nos
reunimos juntos. Y hacemos estas cosas con el objetivo
avasallador de ser “llenos de la plenitud de Dios”. Este es el
camino para convertirse en el amor de Dios el uno para el otro y
para el mundo.

▪ Queremos ser fortalecidos con poder a través del Espíritu

Santo en nuestro ser interior.
▪ Queremos que Cristo habite en nuestros corazones a través de
la fe.
▪ Queremos estar arraigados y cimentados en amor.

12
 UNA GUÍA PRÁCTICA DE CAMPO

▪ Queremos tener poder juntos para comprender cuán

ancho, largo, alto y profundo es el amor de Cristo.
▪ Queremos conocer este amor de una manera que sobrepase el
conocimiento.
▪ Queremos ser llenos de la plenitud de Dios.

¿Quieres también estas cosas? Si es así, te invitamos a comenzar

una banda de discipulado.
Una banda de discipulado no es un grupo pequeño tradicional.
No es otro grupo de estudio de la Biblia. No es un grupo clásico de
rendición de cuentas. No es un grupo de servicio comunitario.
Una banda de discipulado es un grupo de tres a cinco personas
que leen juntas, rezan juntas y se reúnen para convertirse en el
amor de Dios el uno para el otro y para el mundo.

¿POR QUÉ TAN PEQUEÑO?

No es que la lectura, la oración y la reunión no puedan suceder en
un grupo más grande. Pueden y suceden. El punto de una banda de
discipulado es la profundidad y la calidad del discipulado posible en
un modelo de micro-comunidad. En verdad, son pocas las personas
con las que uno se puede conectar en este nivel de intencionalidad.
Cuando llega el momento de reunirse, es más efectivo asignar al
menos veinte minutos para que cada persona comparta y se ore por
ella. En nuestra experiencia, bandas de cinco miembros son
permisibles, pero no recomendables; reuniones de dos horas se
vuelven difíciles de manejar.

¿POR QUÉ EL MISMO GÉNERO?

¿Podemos ser honestos? Esta no es la versión de quinto grado
de las niñas en un grupo y los niños en otro. Es mucho más
sofisticado. ¿Recuerdas en el jardín del Edén la forma en que Adán
y Eva respondieron después de su desobediencia? Primero se
cubrieron a sí mismos, escondiéndose el uno del otro, y luego se
escondieron de Dios. El pecado conduce a la vergüenza y la
vergüenza conduce a la ocultación.
Si bien el pecado es común a la raza humana, a veces adquiere
un carácter y cualidades diferentes cuando se trata de diferentes

13
 géneros. A riesgo de simplificar demasiado, pecamos de manera
diferente. Debido a la forma en que la vergüenza acompaña al
pecado, puede dar lugar a dinámicas complicadas entre mujeres
y hombres. Por un lado, los grupos mixtos de género pueden
dificultar la vulnerabilidad debido a la presencia de la vergüenza.
Por otro lado, compartir de manera vulnerable puede crear una
unión inapropiada. Una banda de discipulado debe ser un lugar
de seguridad cada vez mayor, donde la vergüenza puede ser
expresada y se puede decir la verdad. Debe evitarse cualquier
cosa que tienda a obstaculizar esto. En nuestro juicio
considerado, las bandas mixtas de género no son recomendables.

¿POR QUÉ TAN SIMPLE?

Los grupos pequeños se han convertido en muchas cosas para
muchas personas. Satisfacen muchas necesidades a lo largo de
nuestras vidas. A menudo, un grupo comienza con un propósito y
agrega lentamente capas de otros compromisos y actividades a lo
largo del tiempo, lo que hace que el propósito original quede
oculto en el proceso. Las bandas de discipulado brindan un
contexto enfocado para el discipulado profundo en un período de
tiempo significativo. Las bandas de discipulado no tienen como
propósito estar orientadas hacia la misión o al servicio. Su
objetivo es preparar a las personas para la misión al hacer que la
misión del evangelio se materialice más profundamente en la
propia vida.
El discipulado comienza con la comprensión de lo que Dios ha
hecho por nosotros. Continua con Dios haciendo su obra en
nosotros. Finalmente, madura a medida que Dios hace esta obra
en el mundo a través de nosotros. Muchos modelos
programáticos se saltan la segunda fase, moviendo a las personas
de una comprensión de lo que Dios ha hecho por nosotros a las
personas que hacen algo por Dios. Es relativamente fácil enseñar
a las personas lo que Dios ha hecho por nosotros. No es difícil
motivar y persuadir a las personas para que respondan de la
misma manera al tratar de hacer algo por Dios. El gran desafío del
discipulado se centra en la obra de Dios en nosotros. Nos regresa
al texto fundacional, que, recuerden, es una oración.
Le pido que, por medio del Espíritu y con el poder que procede de sus

14
 UNA GUÍA PRÁCTICA DE CAMPO
gloriosas riquezas, los fortalezca a ustedes en lo íntimo de su ser, para
que por fe Cristo habite en sus corazones. Y pido que, arraigados y
cimentados en amor, puedan comprender, junto con todos los santos,
cuán ancho y largo, alto y profundo es el amor de Cristo; en fin, que
conozcan ese amor que sobrepasa nuestro conocimiento, para que sean
llenos de la plenitud de Dios.
El discipulado es un trabajo interno. Debemos ser fortalecidos
con poder a través de su Espíritu. Cristo debe morar en nuestros
corazones por medio de la fe. Debemos estar arraigados y
cimentados en amor. Debemos tener poder para captar el
incomprensible amor de Cristo y para conocerlo más allá del
conocimiento. Y, sí, debemos estar llenos de toda la plenitud de
Dios. Note donde debe suceder todo esto: en nuestro ser interior.
El discipulado es un trabajo interno.

La prueba del discipulado es si conduce a la acción externa.

Debido a que es más fácil medir e informar sobre la actividad
externa, y porque es tan difícil medir la transformación del ser
más profundo de uno, y porque existe una necesidad tan
desesperada a nuestro alrededor, es tentador omitir el arduo
trabajo interno y dirigirse directamente hacia la parte de la
acción. Para que no establezcamos una falsa dicotomía, seamos
claros: el discipulado es tanto interno como externo. La tendencia
establecida ha sido saltarse lo primero para llegar a lo segundo,
lo que resulta en un estilo de trabajo misionero que es útil pero
superficial, bien intencionado pero interesado en su propio
beneficio.

¿POR QUÉ TAN DIFÍCIL?

La mayoría de nosotros estamos detenidos en nuestro
desarrollo de discipulado. Nos quedamos estancados repitiendo
los mismos patrones de pecado. Fácilmente distraídos y
desanimados, tendemos a vagar de un programa o estudio a otro.
Nuestro conocimiento aumenta mientras que, al mismo tiempo,
nuestro sistema muscular espiritual se atrofia. Hemos creído
mentiras acerca de Dios y de nosotros mismos, y nos retienen
como una prisión con rejas que no podemos ver. El discipulado

15
 profundo es difícil porque los seres humanos tienen una
propensión desafortunada y casi infinita a engañarse a sí mismos.
El profeta Jeremías lo dijo mejor.
“El corazón humano es lo más engañoso que hay, y extremadamente
perverso. ¿Quién realmente sabe qué tan malo es?” (Jer. 17:9 NTV)
A pesar de nuestras mejores intenciones, la razón por la que
estamos atascados es que no tenemos el tipo de relaciones
necesarias para catalizar y sostener el tipo de obra que el Espíritu
Santo desea hacer en nuestras vidas. Si tenemos las relaciones, no
las hemos aprovechado de manera efectiva para este tipo de obra
del alma. Requiere una honestidad cada vez mayor con uno
mismo; el tipo de honestidad que es casi imposible aparte de
algunas otras personas al lado. Es por eso que debemos unirnos.

16
 UNA GUÍA PRÁCTICA DE CAMPO

¿QUÉ HACEN LAS BANDAS DE

DISCIPULADO?

Una banda de discipulado no es un grupo pequeño

tradicional ni un grupo típico de rendición de cuentas.
El plan curricular principal es la vida de sus
participantes, unidos en la comunión del Espíritu
Santo.

1. Las bandas leen juntas

La hierba se seca y las flores se marchitan, pero la palabra de
nuestro Dios permanece para siempre. —Isaías 40:8 NTV
Somos un pueblo de un solo Libro. La Palabra de Dios es tanto
nuestra constitución como nuestra brújula. Aunque una banda de
discipulado no es un grupo de estudio de la Biblia, una de las
formas en que nos unimos es a través de la lectura de un texto
común. John Wesley escribió una vez esta célebre y ardiente
advertencia en una carta a un tal Sr. John Premboth.
Te guste o no, lee y ora a diario. Es para tu vida; no hay otra manera;
de lo contrario, serás un individuo frívolo todos tus días y un
predicador mezquino y superficial. Haz justicia a tu propia alma; dale
tiempo y medios para crecer. No te mueras más de hambre. Toma tu
cruz y se un cristiano por completo. Entonces todos los hijos de Dios
se regocijarán (no llorarán) por ti en particular.1
Hay muchas maneras de leer juntos. Lo que importa es encontrar
la manera de estar juntos en la misma página de las Escrituras.
Animamos a las bandas de discipulado a suscribirse a lo que
llamamos el Texto Diario. Cada día proporcionamos un texto de
las Escrituras junto con un breve comentario devocional, una
oración y algunas preguntas de sondeo para el discipulado.
También ofrecemos una creciente colección de recursos escritos
específicamente para bandas de discipulado. Estos son accesibles
en una variedad de formatos, a través de correo electrónico,
17
BANDAS DE DISCIPULADO
versiones impresas o a través de nuestra aplicación Discipleship
Bands. Estos no son necesarios y una banda puede elegir otros
planes de lectura según su interés compartido. Recuerde, estos no
son estudios en torno a los cuales los grupos se reúnen para una
discusión adicional. Nuestro texto común no funciona como la
pieza central de la banda, sino que sirve de manera periférica para
unir aún más al grupo.
Toda la Escritura es inspirada por Dios y útil para enseñar, para reprender,
para corregir y para instruir en la justicia, a fin de que el siervo de Dios esté
enteramente capacitado para toda buena obra. (2 Tim. 3:16–17)

2. Las bandas oran juntas

Dedíquense a la oración: perseveren en ella con agradecimiento. —
Colosenses 4:2
Nuestro compromiso es cuidarnos los unos a los otros con
amor, estar juntos, animarnos y fortalecernos mutuamente.
Nuestra vida de oración continua es una forma fundamental e
importante de alimentar estos compromisos. Los compañeros de
banda son compañeros de oración. Oran juntos ya sea que estén
en realidad juntos o no. Oramos juntos en nuestra reunión
semanal, pero incluso cuando nos recordamos unos a otros
durante toda la semana, en efecto, estamos orando juntos. Con el
tiempo, los compañeros de banda se conocerán de maneras
extraordinarias y desarrollarán la capacidad de orar unos por
otros, como pueden hacerlo pocas personas en nuestras vidas.
Cada semana en la reunión de banda, cada persona tendrá la
oportunidad de orar por otra y que luego los demás oren por ella.
Estos momentos de oración, quizás más que cualquier otra cosa,
servirán para fortalecer los lazos de la banda de manera
profundamente significativa.
3. Las bandas se reúnen
Mantengamos firmes la esperanza que profesamos, porque fiel es
el que hizo la promesa. Preocupémonos los unos por otros, a fin de
estimularnos al amor y a las buenas obras. No dejemos de
congregarnos, como acostumbran hacerlo algunos, sino
animémonos unos a otros, y con mayor razón ahora que vemos que
aquel día se acerca. —Hebreos 10:23–25
18
 UNA GUÍA PRÁCTICA DE CAMPO
Una banda de discipulado no se ha unido hasta que se reúne
regularmente. Reunirse juntos es el componente más crítico de la
experiencia de la banda de discipulado. En esta época distraída y
ocupada, encontrar un momento en el que todos puedan reunirse
constantemente puede ser un desafío. En nuestra experiencia, un
tiempo consistente cada semana funciona mejor. Trate de hacer
este tiempo lo más sacrosanto posible. De vez en cuando surgirá
algo y uno de los miembros de la banda no podrá asistir. Como
regla general, si la mitad o más de la banda no se puede reunir, la
reunión debe cancelarse. No te preocupes por la reprogramación.
Reúnanse nuevamente a la hora establecida la semana siguiente.
La vida pasa. Propóngase cuatro reuniones al mes. Confórmese
con un mínimo de tres reuniones por mes. Si se reduce a dos, la
hora de la reunión debe reconsiderarse. Esto resalta el problema
de establecer una frecuencia de reunión menor a semanalmente.
Las reuniones inevitablemente se cancelan y cuando esto sucede
dentro de un enfoque quincenal o mensual, perjudica la eficacia
de la banda. Reunirse juntos puede tomar una variedad de
formatos. Cara a cara es obviamente la mejor opción. Un servicio
de videoconferencia como Skype, Google Hangouts o Zoom
funcionará bien en una reunión de banda. Una llamada de
conferencia solo por voz también funciona bien. El punto es hacer
lo que sea que funcione y estar abiertos a variar el formato según
lo requiera la necesidad de la semana. Si solo dos personas de la
banda pueden reunirse en el mismo lugar, permita que los otros
miembros se comuniquen por Skype o llamen. En nuestra
experiencia, varias bandas resultaron viviendo en diferentes
lugares, haciendo que fuera imposible una reunión cara a cara. Se
reúnen con éxito por conferencia telefónica o video chat y
trabajan juntos para un retiro anual en persona. El punto es hacer
lo que funciona y lo que sea necesario. La reunión de banda es el
punto decisivo de todo el asunto.
“Además les digo que si dos de ustedes en la tierra se ponen de
acuerdo sobre cualquier cosa que pidan, les será concedida por mi
Padre que está en el cielo. Porque donde dos o tres se reúnen en
mi nombre, allí estoy yo en medio de ellos.” (Mat. 18:19–20)
Ahora pasamos a la esencia de la reunión de banda.
19
¿QUÉ SUCEDE EN UNA REUNIÓN
DE BANDA DE DISCIPULADO?
La reunión semanal de la banda es simple en estructura y
formato. Es esencial que siga siéndolo. Haga planes para unos
veinte minutos por persona en la banda. Conversación informal y
bromas en grupo están bien, pero la banda debe considerar y
respetar la asignación de tiempo. La reunión debe abrirse
formalmente con las palabras iniciales que se indican a
continuación. Una vez que esto sucede, es incumbencia de la
banda hasta el final.

I. APERTURA
Una voz:
Despiértate, tú que duermes, y levántate de los muertos.

Todos los demás:

Y te alumbrará Cristo.
(Adaptado de Efesios 4:14.)

Oración (Leer al
unísono o por un
miembro de la banda)
Padre celestial, oramos para que de tus gloriosas riquezas nos
fortalezcas con poder a través de tu Espíritu en nuestro ser
interior, para que Cristo pueda morar en nuestros corazones
mediante la fe. Y oramos para que nosotros, arraigados y
cimentados en amor, podamos tener poder, junto con todo el
pueblo santo del Señor, para comprender cuán ancho, largo, alto
y profundo es el amor de Cristo, y conocer este amor que
sobrepasa el conocimiento, para que seamos llenos de toda la
plenitud de Dios. Te lo pedimos en el nombre de Jesús, amén.
(Adaptado de Efesios 3:16–19.)

17
BANDAS DE DISCIPULADO

II. LAS PREGUNTAS

1. ¿Cómo está tu alma?
2. ¿Cuáles son tus luchas y éxitos?
3. ¿Algún pecado por confesar?
4. ¿Algo que quieras mantener en secreto?
5. ¿Cómo podría el Espíritu Santo hablar y moverse en tu vida?

Con el fin de mantenerlo simple y memorable, piense en las

preguntas como: alma, luchas/éxitos, pecado, secretos, Espíritu.
Al concluir el tiempo de compartir de cada persona, alguien de
la banda ofrecerá una oración por la persona que compartió. Esta
es también una oportunidad para buscar aclaraciones, ofrecer
ánimo y hablar de la vida de los demás. Cuando se confiesa el
pecado, instamos a alguien de la banda a pronunciar palabras de
perdón (por ejemplo, “En el nombre de Jesucristo, eres
perdonado”. Véase 1 Juan 1: 9).
Podría ser aconsejable que una nueva banda, particularmente
entre personas que no están familiarizadas entre sí, cubra solo la
pregunta # 1 durante el primer mes. Tal vez agregue la pregunta
# 2 para el segundo mes. Vaya a su propio ritmo y preste atención
a la dinámica relacional. Enfocarse en generar confianza y
mantener siempre la confidencialidad.*

III. CLAUSURA
Leer al unísono o por un miembro de la banda
Al que puede hacer muchísimo más que todo lo que podamos
imaginarnos o pedir, por el poder que obra eficazmente en nosotros, ¡a
él sea la gloria en la iglesia y en Cristo Jesús por todas las generaciones,
por los siglos de los siglos! Amén. (Ef. 3:20–21)

* Las preguntas originales de la banda, escritas por John Wesley, fueron las siguientes: 1. ¿Qué
pecados conocidos has cometido desde nuestra última reunión? 2. ¿Con qué tentaciones te
has enfrentado? 3. ¿Cómo fuiste liberado? 4. ¿Has pensado, dicho o hecho cosa alguna que
haya provocado en ti la duda de haber pecado? 5. ¿Tienes algún secreto que desees guardar
para ti?

18
 ¿CÓMO EMPIEZO?
Ya sea que esté listo para comenzar una banda de discipulado o
simplemente esté dispuesto a considerar la posibilidad, haremos
todo lo posible para reunir, conectar y proporcionarle recursos.
Inicie sesión en www.discipleshipbands.com.
Iniciar sesión no te compromete en una u otra dirección.
Simplemente te mueve hacia el círculo más amplio de la
comunión. No hay cuotas de inscripción. Al iniciar sesión,
comenzará a recibir el Texto diario, la forma en que nos
mantenemos en la misma página de las Escrituras. Puede
determinar cómo lo recibe, ya sea en su bandeja de entrada de
correo electrónico o como una notificación a través de su teléfono
inteligente. Desde allí puedes avanzar hacia el inicio de una banda
de discipulado. De cualquier manera, estaremos conectados y en
nuestro camino.
Además del Texto diario, encontrará muchos otros recursos
diseñados para ayudarlo a comenzar y progresar en una banda
de discipulado, incluidas formas de probar las aguas antes de
hacer un compromiso más importante.
Para aquellos de ustedes que no se consideran expertos en
tecnología, hay buenas noticias. No tienes que ser experto en
tecnología para hacer esto. Tenemos todo tipo de formas
analógicas de hacerlo. Sin embargo, necesitamos saber quién
eres. Por ahora, incluso los menos expertos en tecnología
tenemos una dirección de correo electrónico y algún acceso a
Internet. Vaya a discipleshipbands.com y establezca una conexión
con nosotros y desde allí iremos analógicamente con usted. Y
solo para que sepas que nos tomamos en serio nuestro
compromiso con las bandas de discipulado anteriores a Internet,
si eres un “ludita” reconocido, envíanos una carta de correo
regular a la antigua a:
Discipleship Bands
c/o Seedbed
415 Bridge Street
Franklin, TN 37064
Estaremos en contacto desde allí.
19
BANDAS DE DISCIPULADO

EL PANORAMA MÁS AMPLIO:

EL POR QUÉ DETRÁS DEL POR QUÉ
Hay una conversación famosa de la historia a la que nos referimos a
menudo en nuestro trabajo. Sucedió entre el célebre predicador
George Whitefield y un hombre llamado John Pool, un miembro
desconocido del movimiento metodista. Aquí está el diálogo.
“Bueno, John, ¿todavía eres wesleyano?”
Pool respondió: “Sí, señor, y le agradezco a Dios que tengo el
privilegio de estar en conexión con él y uno de sus predicadores.”
“John”, dijo Whitefield, “estás en el lugar correcto. Mi hermano Wesley
actuó sabiamente—las almas que fueron despertadas bajo su
ministerio se unieron en clases, y así preservaron los frutos de su labor.
Esto lo descuidé y mi gente es una cuerda de arena.”2
El despertar que anhelamos no vendrá de reunir grandes
multitudes en conferencias más grandes. No vendrá a medida que
más y más personas prestan atención a lo grandioso que
esperamos que Dios haga entre nosotros. El despertar vendrá a
medida que más y más personas hagan lo pequeño. A medida que
miles y luego cientos de miles comiencen a unirse y hacer el gran
trabajo de despertar en el nivel más pequeño de las relaciones de
formación de discípulos, las balanzas un día se inclinarán y no
solo habrá un gran despertar sobre nosotros, sino que el Espíritu
Santo nos habrá organizado en el tipo de compañerismo donde el
despertar puede crecer, sostenerse y multiplicarse.
New Room no es una organización que estamos tratando de
crear, aunque sí representa un esfuerzo para organizarnos. No
estamos tratando de comenzar un nuevo movimiento, sino de
participar mejor en el antiguo movimiento de Jesucristo. La visión
no es para formar otra entidad asociativa de conexiones poco
unidas, sino una comunidad de lazos fuertes. La imagen de una
red de pesca viene a la mente. Una red es lo opuesto a una cuerda
de arena. Una red de pesca es simplemente una constelación de
22
nudos estrechamente unidos. Los primeros discípulos de Jesús
dejaron sus redes para seguirlo. Pronto se convertirían en la red
ellos mismos. Así es como él les enseñaría a pescar personas, no
con cebo, sino con la red literal formada por sus relaciones con los
demás. Cuando les dijo que tiraran sus redes al otro lado del bote,
en el agua profunda, prefiguraba lo que haría con sus relaciones
en bandas en el amplio mundo. El evangelio funciona de manera
más prominente y poderosa a través del tipo de relaciones
extraordinarias que el Espíritu Santo formó entre nosotros.
Piense en un cuadro individual de una red como una banda de
discipulado, o tal vez la banda sea el nudo mismo. Ahora imagine
el efecto de cientos, miles, incluso decenas de miles de nudos y
cuadros. Esta es una imagen de la iglesia como se fundó y se
extendió por la tierra en aquellos primeros siglos. La iglesia no se
diseminó y creció en función de sus estructuras institucionales o
su clero profesional o edificios impresionantes o sus excedentes
o déficits presupuestarios. La iglesia se multiplicó en amplitud a
medida que las relaciones entre su gente crecieron en
profundidad. Las pequeñas iglesias de Filipos, Corinto, Éfeso,
Tesalónica y Colosas eran como muchas redes de pesca. Fue la
victoriosa constelación de sus relaciones distintivas en las
profundas aguas de estas bulliciosas ciudades irreligiosas y, a
menudo, súper-religiosas, lo que atrajo la atención de buscadores
y perseguidores por igual. Para estar seguros, Jesús mora en
nuestras vidas individuales, pero multiplica su movimiento a
través de los vínculos entre nosotros. Es donde dos o tres se
reúnen en su nombre que se presenta a sí mismo de manera
poderosa. Mientras él teje y nutre los lazos divinos del amor santo
entre pequeñas bandas de personas que tienen poco en común,
excepto su relación con él, el mundo despierta a las maravillas del
cielo tocando la tierra. La visión es unir a los despertados en
bandas y unir las bandas en siembra para un despertar. En todas
partes que vemos una banda de discipulado, vemos una
incubadora para un despertar, un lugar donde una forma más
profunda de amor puede echar raíces en una comunidad.
Este amor comenzará como una manera de orar. Vemos bandas
que se unen para orar por el despertar de las iglesias locales.
Como consecuencia, vemos iglesias locales unidas para orar por
el despertar de las ciudades y regiones. Tomará años. Puede

23
BANDAS DE DISCIPULADO
llevar décadas. Debemos tener la visión a largo plazo. Estamos
sembrando para un gran despertar por generaciones aún por
nacer.
Si tu corazón es como el nuestro, démonos la mano. ¿Podríamos
ir por este camino juntos? Todo lo que necesitamos saber es quién
es usted, dónde está y cómo podemos mantenernos en contacto.
No hay tarifas de afiliación, ni apretones de manos secretos ni
ningún otro santo y seña que produce incluidos y excluidos. No
tiene que estar en una banda para unirse, pero tenga en cuenta
que tenemos la intención de alentarlo en esa dirección. Lo
invitaremos a que se reúna, lo ayudaremos a conectarse y lo
bendeciremos con recursos. A su vez, usted aportará al
compañerismo con historias de despertamiento en sus lugares de
siembra.

24
 PREGUNTAS
FRECUENTES
¿DE DÓNDE VIENE ESTA PRÁCTICA DE UNIRSE EN
BANDAS?
John Wesley fue introducido originalmente a una forma de
reuniones de banda por parte de los moravos en 1738. Sus
reuniones congregaron a un pequeño número de personas y las
dividieron por estado civil y género. Nuestro deseo no es replicar
exactamente su modelo de reunión de banda, sino más bien
encontrar un nuevo modelo para vivir lo que estaba en el corazón
de la reunión de banda, es decir, un discipulado más profundo en
el contexto de relaciones sólidas.
Wesley tiene una declaración a menudo citada, pero
frecuentemente mal entendida: “El evangelio de Cristo no conoce
otra clase de religión sino una religión social; no otra santidad,
sino santidad social”.3 En otras palabras, una vida santa no puede
vivirse sola, sino que solo puede vivirse en relación con otros
cristianos.
John Wesley alentó a los miembros a usar la reunión de banda
como un lugar para derramar sus corazones sin reservas,
especialmente “el pecado que tan fácilmente nos hace tropezar”
(Hebreos 12:1, NTV). Mientras sostenía que uno no podía ser
santificado (o vivir una vida santa) aparte de la fe a través de la
gracia, también sabía que esto no significaba que un creyente
simplemente debería sentarse pasivamente y esperar este regalo.
En cambio, creía firmemente que había muchas prácticas que
Dios puso a disposición de su pueblo para ir en pos de la santidad,
mediante las cuales podían encontrar al Espíritu Santo. Estamos
convencidos de que tenemos la mejor oportunidad de santidad en
el contexto de una comunidad de creyentes que nos brinda
apoyo.4 Las reuniones de la banda tenían un formato muy simple
en aquel entonces: reunirse una vez a la semana, comenzar con
una canto u oración, y luego cada uno compartía por turno “libre
y claramente acerca del verdadero estado de nuestras almas, de
las faltas que hemos cometido de pensamiento, palabra u obra, y

28
 de las tentaciones que hemos experimentado desde nuestra
última reunión.”5 Después de esto, terminarían en oración,
orando específicamente por el estado o situación de cada persona
que compartió. (Véase el libro de Watson y Kisker, The Band
Meeting: Rediscovering Relational Discipleship in Transformational
Community [La reunión de banda: redescubriendo el discipulado
relacional en la comunidad transformacional].)

Para Wesley, el propósito de la reunión de banda se resumió en

Santiago 5: 16a: “Por eso, confiésense unos a otros sus pecados y
oren unos por otros, para que sean sanados”.

¿PARA QUIÉN ES UNA BANDA DE DISCIPULADO?

Cualquiera que desee crecer en amor por Dios y por el prójimo.
Es para aquellos que desean compartir la vida en un nivel más
profundo con otras personas. Es para aquellos que desean
compartir alegrías y cargas, orar y recibir oración por ellos. Lo
más importante es que estos grupos son para personas comunes
y corrientes que se enfrentan a la vida real y desean hacer la
jornada con personas reales.

¿Y SI NO ME SIENTO CÓMODO PROFUNDIZANDO

TANTO?
Le recomendamos que vea las preguntas como una ayuda para
su tiempo de compartir; no es necesario que cada persona
responda todas las preguntas cada vez que se reúnen. Durante un
tiempo, el grupo podría decidir simplemente responder la
pregunta uno durante el primer mes de la reunión. Luego agregue
las preguntas dos y cinco, y cuando esté listo, comience a
responder las preguntas tres y cuatro. Encontramos que
generalmente se requiere que alguien en el grupo esté dispuesto
a ir de primero en ser vulnerable, lo que abrirá la anuencia en los
demás para también serlo.

¿LAS BANDAS DE DISCIPULADO REQUIEREN UN

LÍDER?
Las bandas no necesariamente requieren un líder, pero sí
29
 requieren que alguien familiarizado con el proceso ayude a que el
grupo tenga un buen comienzo. También tendemos a creer que se
necesita un discípulo para hacer un discípulo. Un grupo será más
fuerte si lo facilita alguien que está bien encaminado para
ejemplificar las características de un discípulo de Cristo, es decir,
un amor creciente por Dios, obediencia a su Palabra y amor por
las personas. Parte del atractivo de estar en una banda es que
tiene un formato muy simple. Por lo general, habrá alguien que
ayude a iniciar el grupo y facilite las reuniones cuidadosamente,
pero en última instancia, estos grupos se centran en que cada
persona tenga la oportunidad de compartir con los demás en el
grupo, por lo que realmente no requieren un líder oficial. La
respuesta simple es que estos grupos requieren un poco de
planificación y facilitación, pero no necesitan un líder oficial.
Estamos descubriendo que ofrecer capacitación a un grupo de
personas que desean comenzar bandas puede ser muy
beneficioso. Use esta guía en su capacitación, modele para ellos
cómo funciona una reunión de banda y responda cualquier
pregunta que tengan. A medida que las bandas comienzan en su
comunidad, una persona de contacto puede responder las
preguntas que puedan surgir de los facilitadores.

¿A QUIÉN DEBO PEDIR QUE ESTÉ EN UNA BANDA

DE DISCIPULADO CONMIGO?
Consideramos que este es un asunto que se debe abordar con
cierto nivel de oración y discernimiento. Puede haber personas
en tu vida con las que ya tienes una sensación de conexión
espiritual. Puede que haya amigos a quienes haya conocido por
algún tiempo y que también tengan un deseo de profundizar en
su fe. También puede haber personas que te vienen a la mente a
las que ya has alentado a un discipulado más profundo. Puede
haber alguien a quien un pastor o líder de su iglesia le recomiende
para que lo acompañes en esto.

¿QUÉ SUCEDE SI YA ESTOY EN OTRO GRUPO

PEQUEÑO O GRUPO DE ESTUDIO?
Nuestra esperanza es que su banda sea complementaria a otros
grupos con los que está involucrado. Probablemente, este grupo
30
 será más pequeño que los otros grupos y con un punto focal
diferente. Por el hecho de ser pequeño, le brinda una mayor
oportunidad para que comparta su vida más personalmente. Las
bandas de discipulado no pretenden ser un reemplazo para otros
tipos de grupos. Algunos de los que ya están en un grupo más
grande pueden elegir formar bandas dentro de ese grupo más
grande. Por ejemplo, hemos escuchado de pequeños grupos
actuales que se dividen en bandas dentro del grupo para tener
reuniones de banda (hombres con hombres/mujeres con
mujeres). Esta puede ser una forma efectiva de profundizar como
grupo y probar el unirse en bandas dentro de una estructura de
grupo pequeño.

¿CON QUÉ FRECUENCIA SE DEBE REUNIR

UNA BANDA DE DISCIPULADO?
Recomendamos encontrar un horario fijo para reunirse
semanalmente. Si más de la mitad del grupo no puede hacerlo,
simplemente cancele para esa semana. Hemos descubierto que,
en promedio, si planea reunirse cuatro veces al mes, al menos lo
hará en dos oportunidades.

UNA VEZ FORMADO, ¿POR CUÁNTO TIEMPO ES

EL COMPROMISO DE ESTAR EN UNA BANDA DE
DISCIPULADO?
La gente tiende a dudar cuando los invitamos a un compromiso
que aparentemente no tiene un punto final o de salida.
Recomendamos establecer un período de prueba inicial de cuatro
semanas. Si, después de cuatro semanas, el grupo desea
continuar, puede reagruparse y comprometerse a reunirse en la
banda durante al menos tres meses más. Este debería ser el
tiempo suficiente para establecer algunos ritmos y tener una idea
de si el grupo es el adecuado. Al cabo de cuatro meses,
fomentamos una conversación abierta y honesta preguntando
cómo van. Algunos pueden desear comenzar otra banda con otras
personas después de esta experiencia. Otros pueden decidir que
esto no les funciona en este momento. Los grupos con el mayor
éxito se ajustarán según sea necesario y encontrarán patrones

31
 que funcionen para el grupo. Con esto esperamos que las
personas descubran grupos con los que puedan reunirse durante
los próximos años.

¿SE SUPONE QUE LAS BANDAS DE DISCIPULADO

SEAN DEL MISMO GÉNERO?
Recomendamos que las bandas sean de un solo género para
aumentar la posibilidad de compartir con franqueza y
honestidad. Si bien apoyamos firmemente la práctica de
relaciones mixtas de mentoría de género, esta no es la visión para
las bandas. En nuestra experiencia, las bandas mixtas de género
pueden llevar a una falta de participación por un lado y al exceso
de unión por el otro; ambos pueden distraer del propósito
esencial de las bandas.

¿QUÉ SUCEDE SI NO ME SIENTO CÓMODO

COMPARTIENDO PERSONALMENTE FRENTE
A OTROS?
Para algunos, la invitación a tomar quince minutos y compartir
sobre si mismo con otros suena como su peor pesadilla. Puedes
elegir compartir menos en cualquier semana y esto estará bien.
Tal vez, si sientes que no tienes nada que compartir, puedes
simplemente pasar en esa oportunidad o simplemente pedir que
la gente ore por ti. Esto también es correcto.

¿POR QUÉ USAR LA PLATAFORMA EN LA LÍNEA O

LA APLICACIÓN DE BANDAS DE DISCIPULADO?
Creamos la plataforma en línea de bandas de discipulado
reconociendo que nuestra cultura actual de ajetreo a menudo
puede tener un efecto negativo en nuestro crecimiento espiritual,
pero también puede aprovecharse para bien. Por lo tanto, nuestra
esperanza es que la plataforma en línea pueda ser una
herramienta para ayudar a facilitar una mayor conexión
relacional entre sí, al tiempo que ofrece contenido de discipulado
en el contexto de una relación real. La plataforma en línea no
pretende ser un reemplazo para la conexión de persona a persona
en vivo, sino más bien ayudar a facilitar el crecimiento relacional
32
continuo entre los tiempos de reunión. También ofrece contenido
en fragmentos cortos cada día, lo que ayuda a las personas a
desarrollar un patrón diario de lectura y reflexión espiritual, en
lugar de solo un ritmo semanal, quincenal o mensual que gira en
torno al momento en que un grupo se reúne en persona.

¿TIENE UNA REUNIÓN DE BANDA DE

DISCIPULADO QUE SER CARA A CARA?
La clave no es tanto cara a cara como persona a persona. Cara a
cara es, por supuesto, el estándar de oro. Sin embargo, sabemos
de muchas bandas que se reúnen por teléfono o video conferencia
cada semana con gran éxito. Con la complejidad de la
programación en nuestra sociedad actual, también vemos bandas
que toman enfoques híbridos. Pueden determinar de semana a
semana qué puede funcionar, en persona, por videoconferencia o
por llamada telefónica. Otras bandas que se reúnen por teléfono
cada semana han desarrollado ritmos de un retiro anual o bianual
en persona. Sea flexible e innovador mientras se mantiene fiel al
espíritu y propósito de las bandas.

¿HAY UNA MANERA SUGERIDA PARA QUE

UNA BANDA DE DISCIPULADO TENGA UNA
REUNIÓN?
Sí, vea las instrucciones detalladas en la sección anterior titulada,
“¿Qué sucede en una reunión de banda?”

¿CUÁNTO TIEMPO DEBE DURAR UNA REUNIÓN

DE BANDA?
La duración de la reunión dependerá de cuánta gente haya en
tu banda. Sugerimos un mínimo de veinte minutos para cada
persona en el grupo. Por ejemplo, un grupo con tres participantes
duraría aproximadamente una hora.

33
 NOTAS
1. Tomado de un editorial por J. B. Chapman in The Preacher’s
Magazine (vol. 6, no. 1, January 1, 1931). La nota fue
escrita a John Premboth on August 17, 1760.

2. W. H. Gilder, ed., The Philadelphia Repository and Religious and

Literary Review Volume 1 (Philadelphia: Orrin Rogers,
1840) 189.

3. John Wesley, The Works of John Wesley, volume XIV, preface to

poetical works (Peabody, MA: Hendrickson Publishers,
1991), 321.

4. Kevin Watson, Pursuing Social Holiness: The Band Meeting in

Wesley’s Thought and Popular Methodist Practice (New York,
NY: Oxford Press, 2014), 1–2.

5. Ibid., 193.

34
RECURSOS PARA BANDAS DE DISCIPULADO

An Introduction to Discipleship
Bands
A Four-Week Study
¿Nuevo en la idea de una banda de
discipulado? ¡Este es un gran lugar para
empezar! Durante esta serie de cuatro
semanas, Mark Benjamin nos ayuda a
conocernos mejor mientras practicamos el
ritmo diario de compartir de manera honesta y
auténtica.
Este estudio es una invitación para un viaje
de larga distancia. Es una invitación al pueblo
de Dios a unirse y sembrar para un gran
despertar. No es un avivamiento pasajero, ni
una renovación espiritual, ni un despertar, sino
un despertar a gran escala.

The Band Meeting

REDISCOVERING RELATIONAL
DISCIPLESHIP IN
TRANSFORMATIONAL COMMUNITY
La reunión de la banda, un modelo de
discipulado comprobado para crecer en el
amor a través de la rendición de cuentas de
grupos pequeños del mismo género, fue una de
las características definitorias del movimiento
metodista iniciado por John Wesley a mediados
del siglo XVIII. Kevin Watson y Scott Kisker dan
una visión general de la riqueza de esta
tradición temprana e introducen un enfoque
práctico para crecer hacia una experiencia
auténtica de grupos pequeños orientada a la
transformación.

Awaken
FROM DRY BONES TO THE RIVER OF LIFE
A Six-Week Study
En Awaken: From Dry Bones to the River of Life, J. D.
Walt lleva a los lectores a través del libro de
35
RECURSOS PARA BANDAS DE DISCIPULADO
Ezequiel como una invitación a unirse y
sembrar para un gran despertar, no un
avivamiento pasajero, ni una renovación
espiritual, o un refrescamiento, sino un
despertar a gran escala.

36
RECURSOS PARA BANDAS DE DISCIPULADO

Wake Up
AN INTRODUCTION TO THE SECOND HALF OF THE
GOSPEL
A Six-Week Study
En este estudio de bandas de discipulado, te
sumergirás en la segunda mitad del evangelio. Si
bien muchos de nosotros nos hemos arrepentido
de nuestros pecados y hemos experimentado la
gracia salvadora de Dios a través de Jesucristo, la
mayoría de nosotros todavía estamos dormidos
hasta la segunda mitad del evangelio. Y como
pronto descubrirás, el resto del evangelio es lo
mejor del evangelio.

Kingdom Tide
UNLEASHING THE RIPPLE EFFECT OF AWAKENING
A Six-Week Study
Mientras sembramos, oramos y anhelamos el
despertamiento, no estamos esperando un gran
momento. No estamos esperando un sermón
histórico o una reunión de avivamiento. En lugar
de eso, Matt LeRoy nos alienta a agruparnos en
grupos de tres a cinco discípulos con la perspectiva
a largo plazo en mente. A medida que
profundizamos, las olas de la esperanza se amplían
y se cruzan para convertirse en una marea
creciente del reino.

Everything Can Change in Forty Days

A Forty-Day Study
¿Anhelas un cambio en ti mismo, en los que amas
o en el mundo que te rodea? ¿Has orado en vano
por la transformación?
En Everything Can Change in Forty Days, Jean
Watson nos anima a dejar de intentar crear un
cambio y simplemente vivir un estilo de vida de
adoración, permitiendo que Dios obre en nosotros
y a través de nosotros. Si se siente desanimado o

37
RECURSOS PARA BANDAS DE DISCIPULADO
atorado, quizás ahora sea el momento de reservar
cuarenta días para renovar su fe y creer que, con
Cristo, ¡todo puede cambiar!

38
RECURSOS PARA BANDAS DE DISCIPULADO

Third Person
THIRTY DAYS WITH THE HOLY SPIRIT
A Thirty-Day Study
Dios existe en una relación y quiere que entremos
en una relación con él, donde descubrimos quiénes
somos realmente. In Third Person, Amy Vogel leva a
los lectores a una mayor comprensión del Espíritu
Santo, esta persona poco conocida de la Trinidad.
A medida que adquiera comprensión, verá que su
vida adquiere más significado, color y dirección de
lo que nunca creyó posible.

This Is How We Know

THE SEEDBED DAILY TEXT - 1 JOHN
En This Is How We Know, J.D. Walt nos invita a un
viaje devocional de 44 días para explorar lo que él
llama “la segunda mitad del evangelio”, como se
presenta en 1 Juan. Al igual que la Osa Mayor nos
señala el verdadero norte, Juan 3:16 nos señala el
versículo mucho menos comúnmente recitado 1
Juan 3:16: “En esto conocemos lo que es el amor:
en que Cristo entregó su vida por nosotros. Así
también nosotros debemos entregar la vida por
nuestros hermanos”.

The Domino Effect

THE SEEDBED DAILY TEXT - COLOSSIANS
Colosenses es un tesoro de dominós proverbiales,
cada uno con una enorme capacidad para derribar
cosas que superan su tamaño. Y cuando están
dispuestos juntos, tienen la posibilidad de ofrecer
nuevos movimientos de despertamiento. Eso es lo
que sucedió desde el momento en que Jesús
comenzó a llamar a los discípulos para que lo
siguieran. Una vida se inclinó hacia otra vida, que
se inclinó hacia una familia, que se inclinó hacia un
pueblo, una ciudad y una región. La buena noticia
es que los dominós siguen cayendo. Las cosas
imposibles siguen sucediendo. Y los grandes
39
RECURSOS PARA BANDAS DE DISCIPULADO
despertamientos siguen en el horizonte.

40
RECURSOS PARA BANDAS DE DISCIPULADO

(un)Puzzled
THE SEEDBED DAILY TEXT - EPHESIANS
Leer los dos primeros capítulos de la Biblia es
como mirar una obra maestra artística. Lee los
siguientes nueve capítulos y es como si alguien
hubiera destrozado la obra maestra en un millón
de piezas de rompecabezas fragmentados. En su
magistral carta a la Iglesia en Éfeso, es como si
Pablo estuviera armando un enorme
rompecabezas. J. D. Walt muestra cómo encajan lo
espiritual y lo material, cómo lo masculino y lo
femenino, lo esclavo y lo libre, e incluso la
etnicidad y la nacionalidad se conectan e
interrelacionan en esta nueva creación del reino
de Dios.

The Advent Mission

THE SEEDBED DAILY TEXT - ADVENT
Para muchos de nosotros, el Adviento es la
plataforma de lanzamiento para la mañana de
Navidad. Una cuenta regresiva de veinticuatro días
para los stockings y los regalos. No pensamos en el
Adviento como lo primero que se relaciona con la
segunda venida. La llegada de la noche silenciosa
de Jesús al pesebre es la primera parte de esa
misión. Su llegada al sonido de las trompetas en las
nubes es la última parte. Tomando las dos
temporadas juntas, Omar Rikabi muestra cómo
prepararse para este tipo de Adviento antes de
celebrar la Navidad es cómo nos metemos en la
misión de rescate de Dios.

The First Real Christian

THE SEEDBED DAILY TEXT - JAMES
¿Recuerdas al primer verdadero cristiano que
conociste? Hay una cualidad en este tipo de
personas. Ellos avanzan, demuestran con hechos
sus palabras y obedecen la Palabra de Dios. Sus
vidas hacen señas a los seguidores de Jesús para

41
RECURSOS PARA BANDAS DE DISCIPULADO
que dejen de perder tiempo. Santiago era así, un
verdadero agente de despertamiento. Cuando
comenzamos a quedarnos dormidos, sus palabras
ofrecen un llamado de atención. A través de este
libro, J.D. Walt nos implorará día tras día para
convertirnos en verdaderos cristianos.

Todos los recursos están disponibles

en seedbed.com.

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