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Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones - 2006

Volumen 22, n.º 2 - Págs. 179-202. ISSN: 1576-5962

Artículo
La cultura organizacional como núcleo central en la medición
del capital intelectual

Organizational culture as the core issue in the measurement


of intellectual capital
SANDRA M.ª SÁNCHEZ CAÑIZARES1
MARÍA AMALIA TRILLO HOLGADO2
CÉSAR M.ª MORA MÁRQUEZ3
MIGUEL ÁNGEL AYUSO MUÑOZ1
Fecha de Recepción: 19-09-2005 Fecha de Aceptación: 28-09-2006

RESUMEN

El presente trabajo, analiza los conceptos de cultura organizacional y capital intelectual


proponiendo un modelo de medición de este último que considera la cultura como el núcleo
central alrededor del cual se configuran el resto de los elementos integrantes del mismo.
Realizando un análisis del concepto de cultura organizacional en relación a los principa-
les modelos de capital intelectual, se ha detectado su presencia en mayor o menor medida
en cada uno de ellos, lo que lleva a los autores a la hipótesis de su posible configuración
como un capital independiente dentro del modelo de medición del capital intelectual que se
propone. El análisis de la cultura justifica su establecimiento como centro del modelo y
nexo de unión del resto de elementos.
La importancia del capital cultural dentro de las organizaciones se ha resaltado en dos
niveles: estructural y operativo y se destaca como factor esencial, dotando de lógica interna
al modelo propuesto.

1 Prof. Área de Organización de Empresas de la Universidad de Córdoba. sandra.sanchez@uco.es


2 Prof. Dr. Área de Organización de Empresas de la Universidad de Córdoba.
3 Prof. Área de Economía de la Universidad de Córdoba.

Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, 2006, vol. 22 n.º 2 179
La cultura organizacional como núcleo central en la medición del capital intelectual

ABSTRACT

This paper addresses the concepts of organizational culture and intellectual capital and
suggests a model for measuring the latter. In this model, culture is considered the core issue
around which the other components of intellectual capital take shape.
A review of the main models of intellectual capital showed that organizational culture
was present in all models although to a different extent. This let the authors suggest a
hypothesis of the intellectual capital as independent assets in terms of measurement. The
analysis of culture makes it clear its key role in the model and as a link between the rest of
elements.
The relevance of cultural capital within organizations has been highlighted at two levels
–structural and operational. Cultural capital is also a critical aspect since it provides the
model with an internal logic.

PALABRAS CLAVE

Cultura organizacional, Capital intelectual, Modelos de


capital intelectual

KEY WORDS

Organizational culture, Intellectual capital, Models of


intellectual capital.

180 Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, 2006, vol. 22 n.º 2
S. M.ª Sánchez Cañizares, M.ª A. Trillo Holgado, C. M.ª Mora Márquez, M. A. Ayuso Muñoz

INTRODUCCIÓN CONCEPTO DE CULTURA


ORGANIZACIONAL
El presente trabajo analiza la conexión
entre los conceptos de cultura organizacio- Son numerosas las referencias que del
nal y capital intelectual a fin de proponer término “cultura organizacional” se
un modelo de medición del capital intelec- encuentran en la literatura empresarial
tual que interpreta la cultura como ele- especializada. Sin embargo, no existe
mento esencial en cuanto a que dota al hasta la fecha una definición consensuada
mismo de una lógica interna. En este sen- y comúnmente aceptada por los distintos
tido, se sigue la propuesta del profesor autores. Es por ello, que el presente apar-
Bueno (2003), según la cual se plantea la tado persigue recopilar las aportaciones
posibilidad de incorporar el capital cultu- más significativas a su conceptualización
ral como componente discriminante del y estructura, con el objetivo de diseñar un
concepto estratégico - social del capital marco de referencia que permita describir
intelectual en la actual sociedad del cono- lo que se entiende de forma más precisa
cimiento. por cultura en la empresa.

Es en la antropología social donde


El análisis de la cultura en el entorno encontramos los orígenes del término,
empresarial tiene una importancia funda- siendo definida por Tylor (1871) como
mental englobándose dentro del capital “un todo complejo que incluye conoci-
intelectual como una variable clave a miento, creencias, arte, moral, ley, cos-
determinar y valorar. En un mundo cada tumbre y cualquier capacidad o hábito
vez más globalizado y competitivo, donde adquirido por un individuo como miembro
la información y el conocimiento en las de la sociedad”. El uso del término “cultu-
organizaciones resultan cada vez más ra de la organización” se comienza a
valiosos, la consideración de la cultura se emplear especialmente en los años 70
torna fundamental. De hecho, en algunas (Garmendia, 1990) como intersección de
organizaciones, llega a ser un elemento dos teorías: la de la organización, donde
diferenciador que potencia la competitivi- se entiende a la misma como principio
dad. básico para la consecución de objetivos y
la de la cultura, que la define desde una
El trabajo que se presenta define, en perspectiva antropológico-funcionalista,
primer lugar, el concepto de cultura como instrumento requerido para la satis-
tomando en consideración, en un segundo facción de necesidades y valores.
apartado, la delimitación de dicho cons-
tructo y su tratamiento en los principales La sociología utiliza el término “cultura
modelos de medición de capital intelec- organizacional” para explicar las diferen-
tual. A continuación, se resalta la impor- cias entre resultados empresariales de
tancia de este capital para las organizacio- forma cualitativa (Pettigrew, 1979). Es en
nes y se propone un modelo que explica la década de los ochenta cuando comienza
las diferentes relaciones que se establecen a relacionarse el término con el debate
entre los distintos elementos del mismo, entre aspectos tangibles e intangibles, con-
tomando la cultura como factor explicati- siderando que la cultura organizacional
vo de dichas relaciones. era el motor de la organización y definién-

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La cultura organizacional como núcleo central en la medición del capital intelectual

dola como “los valores compartidos por que configuran el constructo señala varias
los miembros de la organización” (Peters capas: en el perímetro, los artefactos
y Waterman, 1982). Desde entonces, se como manifestaciones y productos de la
puede comprobar un alto grado de coinci- actividad cultural que sobreviven incluso a
dencia entre los autores respecto a la iden- los individuos y su unidad social (ejem-
tificación de los intangibles como punto plo: logos, marcas); las estructuras como
de cohesión en la cultura (Leal, 1991). En patrones de actividad (toma de decisiones,
cualquier caso, el análisis de la cultura de mecanismos de coordinación y comunica-
empresa (incluyendo la corporativa) ción); normas de comportamiento, es
adquiere una relevancia a tener en cuenta, decir, creencias sobre el modo aceptable
en tanto mediatiza, en muchas ocasiones, de comportarse; valores, como prioridades
la implantación y desarrollo de nuevas asignadas a ciertos aspectos como innova-
estrategias (Bueno y Morcillo, 2003). De ción o riesgo frente a seguridad; finalmen-
hecho, para muchas empresas, la cultura te, supuestos inconscientes que no son
organizacional puede llegar a ser más conocidos para los individuos y provienen
valiosa que sus propios activos tangibles de la interacción entre éstos.
(Kaplan y Norton, 2004). Estos autores,
también señalan en la antropología las raí- A pesar de las múltiples aportaciones
ces del término, definiéndolo como “sím- existentes, continúa encontrándose un
bolos, mitos y rituales que forman parte vacío en torno a la metodología de estudio
íntegramente de la mente consciente o y la relación que presenta la cultura orga-
subconsciente del grupo”. nizacional con la gestión empresarial.
Schneider (1990) justifica dicho vacío en
Por lo que respecta a la perspectiva psi- las diferencias conceptuales del término
cosocial, son numerosas las referencias al aún cuando anima a la utilización de
término cultura organizacional en tanto ha métodos cuantitativos, aplicando por
sido la disciplina que más ha profundizado ejemplo una metodología de cuestionario,
en el tema. Así, Peiró (1982) describe por el enriquecimiento del estudio de la
cómo Argyris (1938) o Schein (1990) cultura organizacional y la mejor descrip-
identifican el término con el clima organi- ción del término. Desde este punto de
zacional y distinguen varias subculturas en vista, algunos autores han desarrollado
la organización. Sin embargo, otros como algunos instrumentos de medición.
Evan (1976) consideran la cultura organi-
zacional como un conjunto de creencias, Un trabajo significativo se encuentra en
normas y valores que tienen influencia Deshpandé et al. (1993) en el cual se toma
sobre la conducta, afirmando que estos como concepto de cultura “el conjunto de
elementos suponen una amplitud excesiva creencias y valores compartidos que ayu-
del término que no permite delimitar el dan a los individuos a comprender el fun-
clima organizacional. Schneider (1990) cionamiento de la organización, propor-
señala que la cultura organizacional es aún cionándoles las normas de comportamien-
un término joven y no existe una defini- to dentro de la misma” (Deshpandé y
ción aceptada comúnmente, aún cuando Webster, 1989). A partir de éste identifi-
distingue entre cultura como algo que la can cuatro arquetipos culturales en fun-
organización es frente a algo que la orga- ción de los procesos (desde orgánicos a
nización tiene. En cuanto a los elementos mecanicistas) y el enfoque de la organiza-

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ción (interno o externo). Estos son: cultura La representación gráfica de cada uno
tipo clan (orgánica y enfoque interno); de estos modelos se muestra en la tabla nº
adhocrática (orgánica y enfoque externo); 2; no obstante, aquellos que delimitan
jerárquica (mecanicista y enfoque inter- expresamente la cultura como un elemento
no); mercado (mecanicista y enfoque de su composición se detallan en figuras
externo). específicas insertas en el análisis a conti-
nuación.
Otro instrumento de medición es el Per-
fil de cultura organizacional, de Charles
O´Reilly et al (1996), a través del cual, los MODELO DE KAPLAN Y NORTON:
empleados clasifican 54 enunciados de EL CUADRO DE MANDO
valor según la importancia que ellos perci- INTEGRAL O BALANCED
ben que tiene la cultura en su empresa SCORECARD
describiendo, una vez analizados los resul-
tados, la cultura de la misma con un cierto Este modelo fue desarrollado por estos
grado de fiabilidad. dos autores entre los años 1992 y 1996.
No se trata de un modelo específicamente
En definitiva, aunque no existe una creado para la medición del capital inte-
definición consensuada en cuanto al cons- lectual de una organización; pretende ser
tructo y su metodología de medición, un sistema de gestión empresarial y de
sí que podemos confirmar la existencia medición de los resultados obtenidos en el
de unos elementos comunes tales como: seno de la organización, integrando por
creencias, valores, normas y actitudes res- primera vez el concepto de activo intangi-
pecto a los cuales coinciden la mayoría de ble. No obstante, el interés de incluirlo en
autores. este artículo estriba del hecho de que per-
mite explicar buena parte del resultado de
las empresas a través de los intangibles de
TRATAMIENTO DE LA CULTURA la misma. Supone un avance importante
EN LOS PRINCIPALES MODELOS respecto a los anteriores modelos de ges-
DE MEDICIÓN DE CAPITAL tión en tanto que considera que su base se
INTELECTUAL encuentra absolutamente obsoleta, al estar
centrada exclusivamente en indicadores de
El presente capítulo pretende analizar tipo financiero.
los principales modelos de medición de
capital intelectual, destacando en cada uno
de ellos la delimitación del concepto de Tratamiento de la cultura
cultura y su tratamiento específico.
El Cuadro de Mando Integral se distin-
Las contribuciones más significativas gue de las restantes aportaciones teóricas a
de los últimos años respecto a los modelos la hora de ubicar el concepto -cultura-
de medición de capital intelectual se expo- dentro del modelo. Si en la mayoría de
nen a continuación. Se han escogido aque- ellas, como veremos a continuación, la
llos que presentan en su estructura una cultura se entiende como un elemento
relación específica con el concepto de cul- dentro de la organización interna de la
tura organizacional. empresa, aquí se considera más bien desde

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La cultura organizacional como núcleo central en la medición del capital intelectual

el punto de vista del aprendizaje. De núcleo de conexión entre los elementos


hecho, al clasificar los activos de la pers- que configuran al capital intelectual.
pectiva de aprendizaje-crecimiento, uno
de ellos se define como cultura-clima para
el aprendizaje y la acción. SKANDIA NAVIGATOR

De este modo se pueden distinguir dos Se trata del primer modelo dinámico de
puntos de vista relacionados con la cultura capital intelectual. Su principal impulsor
organizacional: es Leif Edvinsson. Aparece por primera
vez en 1992 en la memoria de la compañía
— La visión de la empresa, que en el Skandia. Su base se sustenta en la diferen-
modelo queda como núcleo de las relacio- cia entre el valor en libros de la empresa y
nes entre las perspectivas, de una forma el de mercado, lo que implica que existen
muy similar a lo que la cultura implica en una serie de activos intangibles que dicho
el modelo propio que presentaremos pos- mercado está descontando actualmente
teriormente. La visión de una organiza- como futuros flujos de caja. La composi-
ción es la definición del negocio, el primer ción del capital intelectual se encuentra
paso para delimitar la estrategia y todas determinada por una estructura de capas,
las decisiones restantes. Desde este punto de forma que el centro de la misma queda
de vista, existe una relación establecida compuesto por la cultura y los valores de
entre cultura y visión. Autores como la empresa.
Edgar Schein (2004) definen la cultura
organizacional como “aquel conjunto de
creencias que comparten los miembros de Tratamiento de la cultura
una organización sobre cuál es la mejor
forma de hacer las cosas, las cuales defi- Al igual que en el modelo de Cuadro de
nen la visión que la empresa tiene de sí Mando Integral, la cultura se percibe en
misma y del entorno”. Por tanto, cabe dos situaciones distintas:
poner de manifiesto la conexión del
núcleo del Balanced Scorecard con el tér- — Por un lado, aparece como el centro
mino cultura organizacional. de la figura de la estructura de capas que
constituyen el capital intelectual. Si el
— La cultura y el clima de aprendizaje capital estructural sustenta la base del
y mejora que, como se ha mencionado capital humano, este último constituye el
previamente, configura un activo de dicha fundamento del liderazgo, la cultura y los
perspectiva del aprendizaje y crecimiento valores de la organización.
y donde se hace referencia a la cultura de
la empresa desde un enfoque más específi- Aunque la situación central de la cultu-
co. En cualquier caso, los autores definen ra es similar al modelo que propondremos
entre los indicadores de este activo, el ali- al final de este trabajo, la idea que explica
neamiento de los objetivos de las personas dicha situación es sensiblemente diferente.
y equipos con la visión de la empresa, lo Edvinsson se considera la cultura y valo-
que refuerza la reciprocidad entre cultura res organizativos como consecuencia del
y visión expuesta en el párrafo anterior y capital humano de la empresa. Desde
la idea de considerar a la primera como nuestro punto de vista, la cultura es un

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Figura 1.
Estructura del Capital Intelectual

nexo de unión entre los distintos capitales sidad de desarrollar una metodología que
que configuran el Capital Intelectual. permita auditar la información relacionada
con el último.
— Por otro lado, la relación de la cul-
tura con el resto de los capitales se esta- Valor de la Empresa = Activos Tangi-
blece por capas, es decir, concatenada- bles + Capital Intelectual
mente. Sin embargo, nuestro modelo esta-
ble esas relaciones a través de la cultura.
Tratamiento de la cultura

TECHNOLOGY BROKER Brooking incluye la cultura dentro de


los activos de infraestructura, entendién-
La consultora The Technology Broker dola como cultura corporativa. La define
presenta este modelo en 1996 a través de como “la forma en que se hacen las
su fundadora y directora Anne Brooking. cosas”. Comprende valores, ritos, rituales
El punto de partida es similar al de Skan- y héroes que son conocidos y compartidos
dia, considerando que el valor de mercado por la fuerza de trabajo de la empresa.
de la empresa es una suma del valor con-
table o activos tangibles de la misma y su Una cultura corporativa fuerte puede
Capital Intelectual, incidiendo en la nece- ser entendida como un activo si refleja la

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La cultura organizacional como núcleo central en la medición del capital intelectual

filosofía de negocio de la organización, Ubicación de la cultura en el modelo


mientras que se transforma en un pasivo si
existen discrepancias entre ambos concep- La cultura organizacional cobra un
tos. papel importante en este modelo. Su ubi-
cación natural se presenta dentro del capi-
Brooking considera que la cultura se tal estructural. El modelo del Canadian
crea desde la cúspide de la compañía y Imperial Bank considera que este capital
refleja los valores de los fundadores del se divide en cuatro categorías:
negocio aunque igualmente indica, que en
organizaciones de gran tamaño, los traba- — Sistemas: forma en que la organiza-
jadores de distintas áreas perciben que las ción realiza sus procesos (toma de decisio-
culturas de sus departamentos difieren en nes, comunicación…)
esencia.
— Estructura: distribución de respon-
Desde nuestra perspectiva, considera- sabilidades y definición de la posición de
mos excesivamente ambigua la clasifica- cada miembro de la organización.
ción de la cultura como un activo de
infraestructura donde se engloban ele- — Estrategia: objetivos de la empresa
mentos de índoles tan distintas como y camino en que ésta trata de alcanzarlos.
bases de datos y filosofía de negocio. Se
haría necesaria una estructuración más — Cultura: suma de las opiniones indi-
específica dentro de este tipo de activos. viduales, creencias compartidas, valores y
Igualmente, creemos que la cultura de normas dentro de la organización.
una organización proviene de muy diver-
sos ámbitos, desde los valores de los pro- El conocimiento tácito que incluye
pios empleados que la forman, hasta su intuiciones, perspectivas, creencias y valo-
forma de relación con clientes y provee- res de los individuos como resultado de
dores; de este modo, reducirla a los valo- sus experiencias, a pesar de tener un
res transmitidos por los fundadores, redu- importante impacto en cada uno de estos
ce excesivamente su esencia en este elementos, proviene de la cultura, a dife-
modelo. rencia del conocimiento explícito que es el
conocimiento articulado. Existe una fuerte
conexión entre la estrategia y la cultura de
MODELO DEL CANADIAN forma que si éstas no son congruentes, el
IMPERIAL BANK éxito y las ventajas competitivas serán
difícilmente alcanzables.
Herbert Saint Onge establece este
modelo en el cual se dota de gran relevan- En principio, la cultura de la organiza-
cia a las dimensiones de conocimiento ción actúa como filtro de las percepcio-
explícito, y, principalmente, tácito, dentro nes del entorno, lo que contribuye a
de los componentes del capital intelectual. adoptar determinadas estrategias. Más
Identifica el conocimiento con el capital tarde, cuando las estrategias específicas
intelectual, al que considera como el pri- se desarrollan, su implementación no será
mer creador dinámico de valor en una posible, o al menos no con éxito, si la
firma. cultura y el comportamiento organizati-

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Figura 2.
Elementos del Capital Estructural

vos no están alineados con dichas estrate- entre el valor contable y el valor de mer-
gias. cado de una organización.

En resumen, la cultura se entiende como


un elemento del capital estructural. Sin Tratamiento de la cultura
embargo, no se define como un elemento
más, sino aquel de donde el conocimiento Dentro de los indicadores de estabili-
tácito fluye y que determina el desarrollo dad en la estructura interna, están com-
de ventajas competitivas en la firma. prendidas las medidas de valores y actitud.
Sveiby indica que los juicios de valor son
un componente de las competencias. Pero
MONITOR DE ACTIVOS un tipo de juicio de valor que resulta útil
INTANGIBLES conocer es la actitud hacia el lugar de tra-
bajo, los clientes y los superiores. Este
El Monitor de Activos Intangibles es concepto es conocido como cultura corpo-
una herramienta creada por Karl Eric rativa en opinión del autor. Por ello queda
Sveiby en 1997 para la medición de intan- incluido en la estructura interna. Se ubica
gibles a través de un sistema de indicado- en los indicadores de estabilidad puesto
res, cuya elección depende de la estrategia que una medida de actitudes negativa es
de la compañía a la que se aplique. Los una señal de problemas para la organiza-
activos intangibles explican la diferencia ción en el futuro.

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De esta forma, la cultura se entiende lectual y las dimensiones culturales pro-


desde el punto de vista interno, pero se puestas por Hofstede, (1978) pueden
define como actitudes de empleados hacia mostrar interesantes relaciones entre con-
su puesto de trabajo, los clientes y los ceptos.
superiores, lo que indica una relación con
el bloque humano y el bloque externo de
la organización. MODELO NOVA

Se trata de una iniciativa de medición


MODELO DE LA UNIVERSIDAD de capital intelectual en España bajo el
WESTERN ONTARIO amparo del Club de Gestión del Conoci-
miento e Innovación de la Comunidad
Este modelo procede de un estudio de- Valenciana. El modelo ha sido desarrolla-
sarrollado por Nick Bontis para explorar do por Camisón, Palacios y Devece y su
el impacto del capital intelectual sobre el objetivo es reflejar la transformación que
desempeño empresarial dentro de la Uni- sufren los componentes del capital intelec-
versidad de Western Ontario. Basándose tual y su efecto sobre los restantes capita-
en un estudio piloto desarrollado a través les.
de un análisis en componentes principales
y mínimos cuadrados parciales, llega a
una relación causal entre las dimensiones Tratamiento de la cultura
del capital intelectual y los resultados
organizativos. La cultura aparece como grupo compo-
nente del capital organizativo. Se entiende
como cultura organizacional que es com-
Tratamiento de la cultura partida y asumida por el personal de la
organización.
La cultura organizacional aparece como
elemento esencial en el desarrollo del De igual forma, también quedan inclui-
capital estructural. Una organización con dos en este bloque, los valores culturales,
un fuerte capital estructural tendrá necesa- actitudes y comportamientos que estimu-
riamente una cultura que permita a los lan la creatividad y la innovación, es decir,
individuos probar cosas nuevas, fallar, una cultura innovadora, explicitada en la
aprender e intentarlo de nuevo. Una cultu- confianza, apertura al diálogo, asunción de
ra que penalice los fallos llevará a un éxito riesgos, experimentación, delegación y
mínimo. autorresponsabilización, reflexión y acep-
tación de los errores.
De este modo, la cultura se entiende
como una filosofía de negocio que permita Consideramos que todos estos valores,
a los individuos desarrollar sus ideas de a pesar de formar parte del conocimiento
forma que el capital estructural se vea for- interno de la organización, han de prove-
talecido. nir igualmente de los individuos que la
forman, con lo que resulta un enfoque res-
Bontis propone que las referencias trictivo delimitar la cultura como compo-
cruzadas entre los datos de capital inte- nente único del capital organizativo.

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MODELO INTELLECTUS Tratamiento de la cultura

A lo largo del año 2002 el Foro de Cono- La cultura se encuentra ubicada en el


cimiento Intellectus del Centro de Investiga- capital estructural, concretamente en el
ción sobre la Sociedad del Conocimiento capital organizativo. La definición que da
desarrolló un nuevo modelo de medición y el modelo al concepto se resume en
gestión de intangibles sobre la base del “valores, normas y formas de actuación
modelo Intelect, por lo que no se ha consi- compartidos y asumidos por la mayor
derado necesario analizar este último. Se parte de las personas de la organización
trata del Modelo Intellectus, que supone un que condicionan su comportamiento y los
avance sobre el anterior y la más reciente resultados corporativos”. Como variables
aportación del mundo científico español al integradoras se mencionan: la homoge-
análisis del concepto de capital intelectual. neidad cultural, la evolución de los valo-
res culturales, el clima social y la filoso-
Estructura el capital intelectual en cinco fía de negocio (el modelo Intelect consi-
capitales, cuyos elementos se especifican a deraba este último como elemento dife-
continuación en la siguiente tabla: renciador).

Tabla 1.
Elementos de los capitales en el Modelo Intelectus

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Sin embargo, el propio documento en IMPORTANCIA DE LA CULTURA


el que se presenta el modelo, menciona COMO NÚCLEO CENTRAL
que las últimas reuniones científicas y EN LA MEDICIÓN DEL CAPITAL
profesionales sobre intangibles están con- INTELECTUAL
siderando la idea de introducir el capital
cultural como conjunto de activos intelec- Entre la prolija y variada literatura que
tuales por su valor en las estrategias sobre encontramos acerca del concepto de “cul-
conocimiento. Es aquí, pues, donde pre- tura organizacional” son numerosos los
tendemos realizar nuestra aportación, no autores que la elevan al grado de pieza
incluyendo el capital cultural como ele- básica en el éxito empresarial. Así,
mento independiente, sino otorgándole la encontramos la teoría mencionada por
consideración de elemento de cohesión Flamholtz (2002) según la cual la cultura
interna entre los capitales. es “un área de desarrollo organizativo
esencial, una pieza estratégica básica de
De todo lo dicho hasta ahora, se puede las empresas de éxito”. Por su parte,
afirmar que, en la mayoría de los modelos Copeland (2001) indica que la definición
desarrollados hasta la fecha, la cultura se de la cultura de una compañía es un paso
considera como un componente intrínseco clave en el desarrollo del capital intelec-
de la organización insertándose, por tanto, tual.
dentro de la estructura interna de la
misma, con independencia de la nomen- De igual forma, veíamos cómo Edvins-
clatura empleada por cada modelo para son, en su modelo del Navegador Skandia,
describir dicha estructura. posicionaba la cultura y los valores en el
centro de los capitales originantes del
Sin embargo, cabe en todos ellos el capital intelectual. De este modo, entende-
establecimiento de una lógica interna a mos que definir a la cultura como un sim-
través de la cultura que dote de armonía al ple elemento configurador del capital
conjunto de elementos y variables emplea- estructural resulta una consideración exce-
dos en la determinación del capital inte- sivamente limitada para la importancia
lectual. Existe una tendencia a considerar que la literatura empresarial le ha otorga-
cada uno de dichos elementos o capitales do.
(según la denominación de cada modelo)
como factores aislados o independientes La consideración de la cultura como
sin que se defina un nexo que ponga de factor discriminante de nuestro modelo se
manifiesto la conexión que se puede esta- justifica por los siguientes aspectos (Cla-
blecer entre los mismos y la influencia que ver et al., 1998):
ejerce la organización en su desarrollo.
— Se puede afirmar que la cultura es a
El presente trabajo se centra en la bús- la empresa como la personalidad al hom-
queda de dicha lógica interna a través de bre.
la consideración de la cultura como ele-
mento clave en la generación de la misma, — Si miramos hacia el organigrama de
aportando un enfoque que destaca el papel la empresa, se pueden perder posibles ven-
que juega en la configuración del capital tajas competitivas si no se tiene una orien-
intelectual de cada empresa. tación cultural clara que delimite las acti-

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Tratamiento de la cultura en los principales modelos de mediación de capital intelectual
Tabla 2.

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Tratamiento de la cultura en los principales modelos de mediación de capital intelectual
(Continuación)
Tabla 2.

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Tratamiento de la cultura en los principales modelos de mediación de capital intelectual
(Continuación)
Tabla 2.

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vidades susceptibles de originar un prove- • Logra la conexión entre los pertene-


cho significativo. cientes a la empresa.

— A la hora de implantar una estrate- Por otra parte, en ocasiones se hace


gia empresarial, se hace necesario pon- necesario la revisión de los valores cultu-
derar las inquietudes y expectativas de rales de la empresa, que tienen carácter de
los empleadosi. En consecuencia, el cho- permanencia, dada la dinamicidad innega-
que cultura – estrategia se amortigua ble del entorno a la que ésta se ve someti-
considerablemente en tanto que ésta últi- da. Esta revisión no resulta útil únicamen-
ma se implemente de forma más partici- te debido a la adaptación competitiva que
pativa. toda empresa ha de hacer, sino también
teniendo en cuenta que a veces los valores
— La característica de liderazgo den- culturales no se transmiten de manera ade-
tro de la misión gerencial de la empresa, cuadaii.
conlleva la unión de todos los miembros
de la misma en torno a unos valores Matizando más la cuestión, también
(Schein, 1988). podemos destacar, como maneras de
expresión de la cultura las siguientesiii: el
— La naturaleza cualitativa e intuitiva sentido de pertenencia, la capacidad flexi-
de la cultura, que sirve como guía para el ble de conseguir las metas comunes, la
desarrollo de las actividades dentro de la gestión integral de la empresa, con sus
empresa, con los siguientes cometidos: objetivos estratégicos y criterios de eva-
luación de la medida de los resultados.
• Reduce el riesgo en las fusiones y Las organizaciones plasman en sus misio-
adquisiciones. nes la cultura.

• Permite conocer si la asunción de En este sentido también se pronuncia


nuevas tecnologías será asumible de Aguadoiv al afirmar que la cultura cumple
manera satisfactoria. las siguientes funciones:

• Marca las pautas para la utilización — Transmitir de un sentimiento de


de la información. identidad a los miembros de la organiza-
ción.
• Determina el nivel de aprovecha-
miento de los intraemprendedores — Facilitar el compromiso con algo
(Sinetar, 1985). mayor que el yo mismo.

i
Cultura y estrategia son dos conceptos difícilmente extrapolables de una empresa a otra, ya que la valoración
que requieren de factores concretos, raramente se darán en dos compañías.
ii
Remitimos a Rodríguez Antón, J.M, “La cultura organizacional ¿patrimonio exclusivo de la humanidad?”,
Revista Madri+d, nº3, marzo 2001, donde se cuenta el experimento que se realizó con una docena de simios y nos
da idea de cómo se transmiten los valores culturales en la empresa.
iii
http://personales.jet.es/amozarrain/Cutura_Empresarial. htm
iv
Página web de J. Aguado: http://www.avantel.net/~rjaguado/index.html

194 Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, 2006, vol. 22 n.º 2
S. M.ª Sánchez Cañizares, M.ª A. Trillo Holgado, C. M.ª Mora Márquez, M. A. Ayuso Muñoz

— Reforzar la estabilidad del sistema interrelaciones entre capital humano,


social. organizativo, tecnológico, negocio y
social.
— Ofrecer premisas reconocidas y
aceptadas para la toma de decisiones.
MODELO PROPUESTO
En último término se ha probado, Ala-
bart (1995), que existe una relación entre: El modelo que presentamos se funda-
menta en la línea de investigación avanza-
— Cultura, estrategia y competitivi- da por el Modelo Intellectus, según la
dad. cual, comienza a discutirse la posibilidad
de considerar a la cultura organizacional
— Cultura, estructura y entorno. como un nuevo capital en la medición del
capital intelectual. Debido a la influencia
No obstante, como hemos indicado pre- de la cultura en las organizaciones, y ante
viamente, nuestro modelo no se limita a la maraña conceptual que presenta su
independizar la cultura organizacional identificación en cualquier entidad moder-
como un nuevo capital, sino que se llega a na, consideramos un modelo de medición
su inclusión como centro de las relaciones de capital intelectual que define de forma
entre los cinco capitales definidos por el concreta la composición de la cultura así
modelo Intellectus. Esta consideración se como sus relaciones con el resto de capita-
debe a aportaciones como la de Smircich, les.
(1983) según el cual, la cultura es parte de
lo que la organización es más que algo Sin embargo, nuestra propuesta no pre-
que la organización posee. De este modo, tende únicamente la inclusión de la cultura
se constituye en el núcleo o esencia misma como un nuevo capital en el modelo, sino
de la empresa. que la considera como el centro del
mismo, entendiéndola como capital discri-
De igual forma Tierney (1988), afirma minante en la organización, de modo que
que la cultura organizacional es una red sustenta las relaciones entre el resto de
de relaciones interconectadas, factibles de capitales dotando, de esta forma, de lógica
medir con cierto grado de fiabilidad. De interna al conjunto.
hecho, algunos investigadores argumen-
tan que se ha tendido a focalizar la cultura A continuación, pasaremos a definir
organizacional como una serie de elemen- los puntos de conexión entre cada uno de
tos independientes ignorando su naturale- los capitales que conforman nuestro
za multidimensional, es decir, se trata de modelo (partimos de la división de capi-
un constructo compuesto de la íntima tales del modelo Intellectus por conside-
interrelación de numerosas variables, rarlo el más avanzado al respecto) y los
Schein (1990). Esto, unido a las distintas elementos que configuran la cultura orga-
definiciones y componentes que diversos nizacional en relación a cada uno de
autores presentan a la hora de realizar una ellos, así como las variables. Por lo que
descripción detallada o una medición respecta a los indicadores descriptivos de
empírica del concepto “cultura” nos lleva las mismas, quedan especificados en la
a su ubicación como centro complejo de tabla nº 3.

Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, 2006, vol. 22 n.º 2 195
La cultura organizacional como núcleo central en la medición del capital intelectual

— Capital Humano: — Capital Organizativo:

Elementos que aparecen de forma per- Este capital constituye la ubicación


manente en la definición de cultura son natural de la mayoría de los modelos res-
los valores y las normas. Una de las pecto a la cultura, de forma que su relación
corrientes de opinión, tal como la que parece clara. El modelo de Bontis, de
subyace en el modelo Technology Broker Edvinsson, Intelect, etc., consideran que la
(Brooking, 1997), considera que, en el cultura, como parte del conocimiento tácito
caso de una organización, estas normas y que posee la organización, debe formar
valores que constituyen su cultura pro- parte de su capital estructural. Posterior-
vendrán habitualmente de los fundadores mente, el modelo Intellectus, al dividir
o de la directiva. Otra corriente, sin dicho capital en organizativo y tecnológi-
embargo, entiende que estará formada por co, reubica más específicamente la cultura
las creencias colectivas y el sistema de dentro del primero. Resulta indiscutible por
valores de todos los individuos que traba- tanto, la consideración de este constructo
jan en la empresa (Marcoulides y Heck, como elemento relacionado con la estruc-
1993). En cualquier caso, parece indiscu- tura. De este modo, en la medida en que la
tible la relación cultura - capital humano, composición del capital organizativo sea
que consideramos bidireccional, ya que de mejor calidad, también lo será el capital
ambos se nutren de las características del intelectual de la empresa contribuyendo al
otro, de forma que la cultura está definida aumento de los estándares de rendimiento
por los valores, normas y creencias cons- organizativo por la puesta en acción de
tituidas en el seno del bloque de trabaja- unas mejores prácticas, así como con la
dores (ya sean directivos o no) de la orga- filosofía del negocio y la ética empresarial.
nización, mientras que el capital humano,
debe de mantener un grado de acuerdo Sin embargo, en nuestra opinión, como
elevado con la cultura que posee la orga- se ha indicado previamente, limitar el con-
nización; de hecho, ciertos autores consi- cepto a este capital resulta demasiado
deran que es necesario realizar el proceso estricto en tanto la importancia y la multi-
de selección teniendo en cuenta que los dimensionalidad que, según se ha dicho
recursos humanos reclutados han de pre- posee la cultura organizacional. De hecho,
sentar una alta adaptación a la filosofía de Tyrell (2004) argumenta que la cultura es
la empresa (Messmer, 1999). Para Flam- más una variable que emerge del proceso
holtz (2002), el tratamiento que se da a interactivo continuo entre individuos y
los empleados o capital humano de la estructura que el resultado de la estructura
organización es una de las áreas esencia- organizacional. Por tanto, se manifiesta la
les en que la empresa ha de gestionar su relación del constructo con ambos, capital
cultura. Por tanto, del capital humano, humano y estructural, sin la limitación de
compuesto por valores, actitudes, aptitu- su consideración de elemento exclusivo
des y capacidades, se desagregarían los del último. La cultura como tal, que tradi-
“valores”, integrándolos en el capital cul- cionalmente ha formado parte de este
tural, ya que éstos, que denominaríamos capital, pasa ahora a denominarse “cultura
“valores culturales” son los que impulsan organizacional”, perfilando desde el capi-
el resto de componentes del capital huma- tal cultural la estructura, aprendizaje y
no. procesos de la organización.

196 Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, 2006, vol. 22 n.º 2
S. M.ª Sánchez Cañizares, M.ª A. Trillo Holgado, C. M.ª Mora Márquez, M. A. Ayuso Muñoz

— Capital tecnológico: tura innovadora o emprendedora”, confi-


gurando los demás elementos que quedarí-
Diversos autores hablan de la cultura de an dentro del concepto de capital tecnoló-
innovación como fuente de ventajas com- gico.
petitivas basadas en el conocimiento y la
creatividad. Para Bueno y Morcillo
(2003), la cultura de innovación se ha — Capital negocio:
entendido “como una forma de pensar y
actuar que genera, desarrolla y establece La orientación que presenta la cultura
valores y actitudes en la empresa propen- organizacional hacia los clientes y agentes
sos a suscitar, asumir e impulsar ideas y relacionados con el negocio empresarial
cambios que supongan un capital tecnoló- resulta patente. Así, encontramos defini-
gico de mayor calidad y, por tanto, mejo- ciones como las de Taguiri y Litwin,
ras en el funcionamiento y eficiencia de la (1968) según la cual la cultura es “el
misma, aún cuando ello implique una rup- ambiente o clima que se establece en una
tura con lo convencional o tradicional” empresa por la distribución física de sus
(Morcillo, 1997). Incluso se hace una dis- miembros y la forma en que estos se rela-
tinción entre cultura tecnológica y cultura cionan con los clientes u otros terceros”.
de innovación. La primera se centra en: El modelo de medición del impacto de la
desarrollar la adaptación de las personas a cultura sobre el desarrollo empresarial cre-
los cambios tecnológicos (una relación ado por Marcoulides y Heck (1993) inclu-
entre capital humano y tecnológico) con- ye entre los constructos de medición las
cienciándolas de que la tecnología es un principales ideologías y valores que una
pilar básico para la competitividad; estar organización sostiene como deseables en
pendiente del entorno para detectar los la práctica de servicio a sus clientes.
avances tecnológicos, contrastándolo con
las instalaciones disponibles e impulsando Es apropiado indicar que las empresas
nuevas inversiones que generen mayor buscan desarrollar sus culturas organiza-
valor añadido. La cultura de innovación se cionales de tal forma que supongan un
fundamenta en la creación de estructuras impacto positivo en la satisfacción del
flexibles; desarrollo de una mentalidad cliente como consecuencia de las mejoras
corporativa de experimentación y genera- en la forma en que los empleados trabajan
ción de nuevas ideas; favorecer la predis- y se relacionan entre sí. Es por ello, que
posición al cambio, las relaciones interde- entendemos nuevamente, que la cultura se
partamentales y la asunción de riesgos. constituye en un centro neurálgico que
justifica las relaciones de personal, estruc-
Así pues, observamos cómo nuevamen- tura organizacional y entorno.
te la cultura se mantiene como centro de
relación del capital tecnológico con otras
áreas de la organización según las caracte- — Capital social:
rísticas que acabamos de mencionar para
la cultura de innovación y orientada a la Si el desarrollo que una organización
tecnología. Del capital tecnológico des- hace de su cultura busca un impacto positi-
membraríamos el espíritu innovador y cre- vo en la satisfacción del cliente, no es
ativo, que puede considerarse como “cul- menos cierto, que también pretende origi-

Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, 2006, vol. 22 n.º 2 197
La cultura organizacional como núcleo central en la medición del capital intelectual

nar dicho impacto en el resto de agentes ducta establecidas por la organización, ten-
con los que se relaciona (administraciones, drá mucho que decir sobre las relaciones
medios de comunicación…). Así, entre los de la empresa con su entorno social.
valores culturales que utiliza Flamholtz
(2002) para la medición del impacto de la Se desglosa por tanto del capital nego-
cultura en empresas de éxito, se encontraba cio y social la llamada “cultura relacio-
la responsabilidad social o forma en que la nal”, que refleja la idiosincrasia de las
organización se comporta como miembro relaciones con los principales agentes vin-
de una comunidad. culados a la empresa (integrados en el
capital de negocio) y de los códigos de
De este modo, la cultura, en tanto repre- conducta, patrones de relación y filosofía
senta los valores y normas o pautas de con- del negocio (elementos del capital social).

Figura 3.
Modelo propuesto

198 Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, 2006, vol. 22 n.º 2
S. M.ª Sánchez Cañizares, M.ª A. Trillo Holgado, C. M.ª Mora Márquez, M. A. Ayuso Muñoz

Tabla 3.
Elementos, variables e indicadores del modelo propuesto

Revista de Psicología del Trabajo y de las Organizaciones, 2006, vol. 22 n.º 2 199
La cultura organizacional como núcleo central en la medición del capital intelectual

CONCLUSIONES valores de los trabajadores de la misma y


los de los directivos. Es importante que
Tomando como base los capitales del esto se lleve a cabo de la mejor forma
modelo Intellectus, por considerarlo el posible, a fin de evitar los conflictos de
más avanzado en esta materia, se ha pre- intereses que en el seno de cualquier
sentado una propuesta innovadora de empresa suelen presentarse. La adecua-
medición del capital intelectual en tanto ción referida determinará lo que hemos
que se considera la cultura como elemento denominado “valores culturales”, que per-
esencial. Ésta dota de una lógica interna al mitirán afirmar que la empresa es cultural-
modelo al establecer a través de la misma, mente fuerte.
las relaciones entre el resto de los capita-
les que lo configuran. Respecto al capital organizativo, la cul-
tura se torna esencial al emerger del pro-
La consideración del capital cultural se ceso interactivo continuo que se debe esta-
ha definido a dos niveles: cultura estructu- blecer entre los individuos y la estructura
ral y cultura operativa. empresarial, configurando la “cultura
organizacional”.
La cultura estructural se fundamenta en
ciertas variables estratégicas que presen- Se puede ver cómo el capital tecnológi-
tan un alto grado de estabilidad en el seno co cobra su sentido a través de la cultura,
de la empresa como ciertos valores que observando el proceso de adaptación de
prevalecen a lo largo del tiempo, la histo- las personas a los avances tecnológicos y
ria y la idiosincrasia de los fundadores. determinando cuál es la flexibilidad de las
mismas para favorecer los cambios y asu-
Por lo que respecta a la cultura operati- mir los riesgos que la competitividad del
va, se ha analizado la relación que justifi- mercado requiere en cada momento. De
ca la conexión con cada uno de los cinco esta manera aludimos a la que hemos
capitales integrantes del capital intelec- denominado “cultura innovadora o
tual. En el modelo propuesto se han esta- emprendedora”.
blecido dichas conexiones encuadrándolas
en aquellas variables específicas que Por último, “cultura relacional” es fun-
hemos considerado más representativas de damental en relación al capital de negocio
acuerdo con la revisión realizada y el y al capital social, para reformar los
nuevo enfoque planteado. siguientes elementos básicos en cualquier
organización excelente: devoción al clien-
Más concretamente, respecto a este te, orientación a la acción, autonomía y
engranaje que conforma la cultura operati- espíritu empresarial y productividad del
va con los capitales que componen el personal.
modelo que se presenta, las líneas genera-
les concluidas hacen referencia a lo que se
especifica a continuación. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

En lo que se refiere al capital humano, Alabart, Y. (1995). Definiciones y


es esencial es proceso de adecuación que manifestaciones de la cultura empresarial.
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