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Día 11 – La respuesta de los ofensores: persecución

S. Mateo 5 :10

Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino
de los cielos.

Reflexionamos sobre las palabras de Cristo en este texto y nos abre la ventana completamente para que
veamos que hay una respuesta de los ofensores a los que hemos sido encomendados, ellos responderán
persiguiendo a los que trabajan por la paz, haciendo justicia y anhelando la justicia de Dios, sobre un mundo
totalmente lleno de transgresiones hacia Dios.

Es bendito todo aquel que sufre el castigo injusto por llevar una causa justa: la reconciliación de las personas
con Dios su creador. Esto lo han vivido los primeros discípulos y hasta el día de hoy se sigue viviendo de
diferentes maneras, desde las más sublimadas hasta las más crueles y primitivas en algunos lugares.

Tú puedes experimentar en algún momento rechazo o algún modo de persecución por ser justo y agradar a
Dios con los propósitos que abrazas en tu relación con Dios. Entonces el Espíritu Santo te recuerda que el reino
de los cielos te pertenece. Los sufrimientos temporales jamás se comparan a las glorias venideras en Cristo.
Estar empleado en la justicia de Dios sobre la humanidad es compensado eternamente. Aunque
temporalmente no es premiado, sino rechazado por la humanidad. Cobra ánimo y avanza presentando en cada
oportunidad la opción de salvación para todos a través de Cristo.

Muchos están siendo perseguidos hoy a causa de la justicia, únete en oración por estos hermanos(as). Oremos
para que el propósito de Dios se cumpla en los lugares en donde ellos están haciendo la labor de justicia de
Dios. Oremos por la iglesia perseguida, para que hoy Dios obre en ellos valor, denuedo y poder para seguir
testificando. También ora a Dios por las acciones de justicia que están siendo llamado a hacer en nombre de
Cristo. Ora para que no pierdas el foco, y logres ver a Dios glorificado en toda tu manera de vivir, desde el seno
de tu hogar hasta las relaciones más lejanas a tu entorno familiar. Es justo que tu vida tenga el sentido de
eternidad vigente en todo lo que haces.

PASTOR JUAN LAVADO.