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LAS ASAMBLEAS DE DIOS DEL PERU

DESPERTANDO PARA EL ÚLTIMO AVIVAMIENTO

EL BAUTISMO DE PODER
¿Qué es y cuáles son los resultados?

EXPOSITOR: Pr. Carlos Jara Depaz

TEXTO

“49 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros en la
ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto.” (Lucas 24:49)

INTRODUCCIÓN

Después de la experiencia maravillosa del día de pentecostés en el que 120 discípulos recibieron
el bautismo en el Espíritu Santo, cambió todo el panorama de la iglesia. El evangelio fue
predicado con poder y en solo 30 años impactaron tres continentes.

El bautismo en el Espíritu Santo es la segunda de las cuatro verdades cardinales sobre los cuales
está fundado el movimiento pentecostal. Jesucristo el bautizador con el Espíritu Santo.

Este bautismo en el Espíritu Santo es de vital importancia para la vida espiritual y el servicio de
todo creyente. El bautismo en el Espíritu Santo es el secreto del poder en la iglesia. Es la
mayor necesidad en toda esfera de la actividad de la Iglesia a fin de que el mensaje de salvación
pueda ser proclamado con la unción divina y cumplir así con su misión en el mundo.

1. ¿QUÉ ES EL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU SANTO?

El bautismo de poder es “EL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU SANTO”, es una experiencia


posterior y diferente de la salvación. En el Nuevo Testamento se utiliza varios nombres para
describir esta experiencia. Se trata de una variedad de formas de referirse a la misma
experiencia, pero no es una simple repetición de lo mismo con palabras diferentes. Es un solo
evento, pero es un equipamiento multifacético para el servicio y los diferentes nombres
hablan de las diferentes dimensiones de este equipamiento.

Esta experiencia cambia radicalmente la vida de la iglesia, comienzan a suceder hechos


sobrenaturales, milagros, sanidades, tiempos de oración profunda, los dones espirituales se
activan, endemoniados son liberados, las personas se convierten apasionadas por las almas
perdidas y predican en todos los lugares, los cultos se convierten tan deliciosos que las
personas desean pasar horas en la presencia de Dios, la gente extraña es atraída como un imán
a estos cultos. No son los equipos de sonido, ni las estrategias del pastor, es la presencia de
Dios.

a. INVESTIDURA DE PODER

“49 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos vosotros
en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto”. (Luc.
24:49)
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1) Este término se deduce de las vestiduras de dignidad, realeza, autoridad, gala y poder
que llevaban los reyes, los nobles y los príncipes de la antigüedad.
2) Investir significa: Poner debajo y cubrirlo con las más espléndidas vestiduras de
dignidad, autoridad y distinción que el Señor da a sus hijos cuando son bautizados en el
Espíritu Santo.
3) De qué cosas están vestidos

✓ Ellos están vestidos del Señor Jesús.

“14 sino vestíos del Señor Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne”.
(Ro 13:14).

✓ Vestidos de las armaduras de luz.

“12 La noche está avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las obras de las
tinieblas, y vistámonos las armas de la luz”. (Ro 13:12).

✓ Vestidos de toda armadura de Dios.

“Vestíos de toda la armadura de Dios, para que podáis estar firmes contra las
asechanzas del diablo.”. (Ef. 6:11)

✓ Vestidos de justicia y santidad como ropaje sacerdotal.

“12 Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable


misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia”. (Col
3:12).

b. RECIBIR PODER

“8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me
seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra”.
(Hch 1.8)

1) Poder de lo alto, autoridad divina, fuerza, capacidad y dominio de Dios para obrar.

“49 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos


vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto”.
(Luc. 24:49).

2) Poder para predicar, echar fuera demonios; sanar toda enfermedad y toda dolencia,
poder para liberar endemoniados y poder para resucitar a los muertos.

“1 Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus
inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda
dolencia”. (Mt 10:1)

“7 Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. 8 Sanad


enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia
recibisteis, dad de gracia”. (Mt 10: 7-8).

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3) La única manera de recibir este poder es mediante el bautismo en el Espíritu Santo. Es
un poder otorgado y delegado para obrar en su nombre y en su representación.

c. EL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU SANTO

1) Juan el Bautista es el primero en llamar al derramamiento del Espíritu, bautismo en el


Espíritu Santo.

“16 respondió Juan, diciendo a todos: Yo a la verdad os bautizo en agua; pero viene
uno más poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la correa de su calzado; él
os bautizará en Espíritu Santo y fuego.” (Lc 3:16)

2) El Señor Jesús lo usa para ordenar a sus discípulos permanecer en Jerusalén hasta ser
bautizados en el Espíritu Santo.

“5 Porque Juan ciertamente bautizó con agua, mas vosotros seréis bautizados con el
Espíritu Santo dentro de no muchos días.” (Hch 1:5)

3) Pedro, informando a la iglesia de Jerusalén lo que había pasado en la casa de


Cornelio, hace referencia al mandato del Señor de permanecer en Jerusalén hasta ser
investidos de poder por el bautismo en el Espíritu.

“15 Y cuando comencé a hablar, cayó el Espíritu Santo sobre ellos también, como
sobre nosotros al principio. 16 Entonces me acordé de lo dicho por el Señor, cuando
dijo: Juan ciertamente bautizó en agua, mas vosotros seréis bautizados con el
Espíritu Santo.” (Hch 11:15-16)

4) Existen otros tres pasajes en el Nuevo Testamento donde se hace referencia al


derramamiento del Espíritu como bautismo en el Espíritu Santo.
5) Bautizar es la transliteración del concepto griego baptizein que significa en su primer
sentido “sumergir totalmente en el agua algo o alguien”.
6) Cuando Juan el Bautista y el Señor Jesús usan este símbolo para referirse al
derramamiento del Espíritu sobre la vida del creyente están enfatizando la forma en la
que Dios equipa al creyente en este nuevo pacto para servirle a él.
7) Bautizar en el Espíritu habla de la forma en la que Dios equipa de manera
sobrenatural al creyente, esto es, sumergiéndolo totalmente en la vida y poder de su
Espíritu Santo para que el Espíritu sea el elemento en el que el creyente viva su vida y
se mueva en todo lo que haga, piense y diga mientras sirve a aquel que lo sumerge.
8) El Espíritu toma al creyente y lo lleva para que lo que hace, no lo haga con sus propios
recursos o habilidades, sino en el poder del elemento en el que es sumergido. Desde la
perspectiva de Lucas, el bautismo en el Espíritu Santo es puro equipamiento divino para
servir a Dios en la predicación del evangelio.

d. LLENURA DEL ESPÍRITU SANTO

1) El ser llenos no solo representa el haber recibido el Espíritu Santo y el haber sido
bautizados en él, sino una condición, un estado en el cual la persona bautizada
permanece llena de la plenitud del poder divino.

“4 Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas,
según el Espíritu les daba que hablasen.” (Hch 2:4)

3
Pedro estaba aún lleno cuando presento su defensa ante el sanedrín judío

“8 Entonces Pedro, lleno del Espíritu Santo, les dijo: Gobernantes del pueblo, y
ancianos de Israel:” (Hch 4:8)

Los diáconos escogidos eran hombres llenos del Espíritu

“3 Buscad, pues, hermanos, de entre vosotros a siete varones de buen testimonio,


llenos del Espíritu Santo y de sabiduría, a quienes encarguemos de este trabajo.”
(Hch 6:3)

Esteban en su martirio permanecía lleno del Espíritu

“55 Pero Esteban, lleno del Espíritu Santo, puestos los ojos en el cielo, vio la gloria
de Dios, y a Jesús que estaba a la diestra de Dios,” (Hch 7:55)}

Pablo que no solo fue lleno del Espíritu por la imposición de manos de Ananías en
Damasco, sino que permaneció lleno a lo largo de todo su ministerio

“9 Entonces Saulo, que también es Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijando en él los
ojos,” (Hch 13:9)

2) Cuando esta unción se describe como llenura del Espíritu, se está enfatizando la esencia
del equipamiento que ilustra el bautismo.
3) La esencia de ese equipamiento o inmersión sobrenatural es el control por plenitud. El
creyente es controlado por el poder del Espíritu cuando todas las necesidades de ese
creyente encuentran su satisfacción en Dios.
4) Cuando todo lo llena Dios, el control viene como resultado. El bautismo en el Espíritu
Santo es control por plenitud.
5) Este término “lleno” viene de pleroma en griego y significaba: llenar hasta arriba, llenar
completamente, espíritu, alma y cuerpo, mente, sentimientos y voluntad.

“18 No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del
Espíritu” (Ef. 5:18)

6) La persona bautizada en el Espíritu Santo:

✓ Está lleno de toda la plenitud de Dios.

“19 y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis
llenos de toda la plenitud de Dios”. (Ef 3:19). Está completo en Cristo.

“10 y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y


potestad”. (Col 2:10). Sin que le falte cosa alguna.

✓ Está lleno de amor, gozo y paz.

“13 Y el Dios de esperanza os llene de todo gozo y paz en el creer, para que
abundéis en esperanza por el poder del Espíritu Santo”. (Ro 15:13)

✓ Lleno de consuelo.

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“4 Mucha franqueza tengo con vosotros; mucho me glorío con respecto de
vosotros; lleno estoy de consolación; sobreabundo de gozo en todas nuestras
tribulaciones”. (2 Co 7:4).

✓ Lleno de frutos de justicia.

“11 llenos de frutos de justicia que son por medio de Jesucristo, para gloria y
alabanza de Dios”. (Fil 1:11).

✓ Y lleno del conocimiento de la voluntad de Dios.

“9 Por lo cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no cesamos de orar por
vosotros, y de pedir que seáis llenos del conocimiento de su voluntad en toda
sabiduría e inteligencia espiritual”. (Col 1:9)

e. EL DON DEL ESPÍRITU SANTO

1) Otra forma de referirse al bautismo en el Espíritu Santo es como la recepción del don de
Dios.

“38 Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de
Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.” (Hch
2:38)

2) Pedro, movido por el Espíritu Santo usa este concepto en la invitación de su primer
mensaje, el día de Pentecostés.
3) La palabra que usa el Espíritu aquí para don es doreá, la cual enfatiza el hecho de que
se trata de algo precioso, algo que es tan precioso que nadie tiene lo suficiente como
para comprarlo, y por tanto, la única forma en la que alguien lo puede obtener es por
gracia; es decir, como un regalo que uno definitivamente no merece.
4) El bautismo en el Espíritu Santo no se recibe por obras, sino por gracia. Es un regalo
preciosísimo de Dios, pero él no lo otorga sobre la base de méritos, de buenas obras, de
la sanidad que uno puede alcanzar, sino por pura gracia.
5) Todo lo que se necesita para recibirlo es anhelarlo, pedirlo y abrir el corazón y
aceptarlo.
6) Nosotros los pentecostales tenemos la tendencia a creer que el bautismo en el Espíritu se
recibe solo cuando el creyente ha alcanzado cierto grado o nivel de madurez y santidad,
y que, si la persona que lo busca no lo puede recibir, se debe a que quizá no ha
abandonado algún pecado oculto.
7) Tenemos que aceptar que el derramamiento del Espíritu es un don que se da por pura
gracia aparte de las obras.
8) En Samaria, Simón el mago creyó que el don del Espíritu se podría comprar y Dios
trato con él con severidad.

“18 Cuando vio Simón que por la imposición de las manos de los apóstoles se daba el
Espíritu Santo, les ofreció dinero, 19 diciendo: Dadme también a mí este poder, para
que cualquiera a quien yo impusiere las manos reciba el Espíritu Santo. 20 Entonces
Pedro le dijo: Tu dinero perezca contigo, porque has pensado que el don de Dios se
obtiene con dinero. 21 No tienes tú parte ni suerte en este asunto, porque tu corazón
no es recto delante de Dios.” (Hch 8:18-21)

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9) Los judíos que habían acompañado a Pedro a Cesarea, a la casa de Cornelio se quedaron
atónitos al ver que los gentiles recibían el don del Espíritu porque asumían que los
gentiles no merecían esto de Dios porque les faltaba santidad, la santidad judía. Dios los
avergonzó mostrándoles su gracia y misericordia.

“45 Y los fieles de la circuncisión que habían venido con Pedro se quedaron atónitos
de que también sobre los gentiles se derramase el don del Espíritu Santo. 46 Porque
los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban a Dios.” (Hch 10:45-46)

f. EL DERRAMAMIENTO DEL ESPÍRITU

1) El bautismo en el Espíritu Santo es visto como un derramamiento de Dios sobre la


vida, el cuerpo y la persona del creyente que ilustra pone en relieve y remarca el
origen y naturaleza de este equipamiento de Dios.
2) Es el origen y la naturaleza de la bendición lo que se trata de enfatizar al describir este
evento como derramamiento.
3) Pedro en pentecostés: Pedro, inmediatamente después de haber recibido la promesa del
Padre, en su sermón predicado el día de Pentecostés, explica que lo que acaban de
recibir es lo que el Señor Jesús había recibido del Padre y que ahora, en cumplimiento a
su promesa, lo había derramado también sobre ellos.

“33 Así que, exaltado por la diestra de Dios, y habiendo recibido del Padre la promesa
del Espíritu Santo, ha derramado esto que vosotros veis y oís.” (Hch 2:33)

4) Samaria: También en el caso de los hermanos samaritanos se dice que el Espíritu Santo
no había descendido todavía sobre ellos.

“15 los cuales, habiendo venido, oraron por ellos para que recibiesen el Espíritu
Santo; 16 porque aún no había descendido sobre ninguno de ellos, sino que
solamente habían sido bautizados en el nombre de Jesús. 17 Entonces les imponían
las manos, y recibían el Espíritu Santo.” (Hch 8:15-17)

5) Cesarea, la casa de Cornelio: En la casa de Cornelio, mientras Pedro predicaba al


grupo que se había reunido allí, el Espíritu Santo cayó sobre ellos.

“44 Mientras aún hablaba Pedro estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos
los que oían el discurso. 45 Y los fieles de la circuncisión que habían venido con
Pedro se quedaron atónitos de que también sobre los gentiles se derramase el don del
Espíritu Santo.” (Hch 10:44-45)

6) Éfeso: En Éfeso, cuando Pablo impone las manos sobre un grupo de creyentes que
habían sido bautizados en agua, el Espíritu santo vino sobre ellos y hablaron en otras
lenguas y profetizaron.

“6 Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y
hablaban en lenguas, y profetizaban.” (Hch 19:6)

7) En estos cuatro casos, el Espíritu desciende y cae sobre el creyente. Esto habla y
enfatiza el origen de este equipamiento. Su origen es Dios. El Espíritu viene de arriba, de
las regiones superiores, de lugares celestiales, de Dios.

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8) Esto significa que el equipamiento que el bautismo con el Espíritu representa es algo
exclusivo de Dios, es sobrenatural, no tiene nada que ver con habilidades o talentos
humanos, es el poder puro de Dios obrando a través del ser humano.

g. EL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU SANTO COMO LA PROMESA DEL PADRE

1) Estas promesas son de gran aliento para el que las busca de todo corazón. Este bautismo
no es algo sobre el cual el creyente debe persuadir al Padre. Dios es el que tomó la
iniciativa y el que prometió darle el Espíritu Santo. Además, el Padre no se olvida de lo
que ha prometido, Dios es fiel para cumplir lo que prometido.

“49 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos


vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto”.
(Lc 24:49).

“4 Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la
promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí”. (Hch 1:4).

2) El padre había prometido

“17 Y en los postreros días, dice Dios, Derramaré de mi Espíritu sobre toda carne, Y
vuestros hijos y vuestras hijas profetizarán; Vuestros jóvenes verán visiones, Y
vuestros ancianos soñarán sueños; 2:18 Y de cierto sobre mis siervos y sobre mis
siervas en aquellos días Derramaré de mi Espíritu, y profetizarán.” (Hch 2:17-18
compara con Joel 2:28-29).

“33 Así que, exaltado por la diestra de Dios, y habiendo recibido del Padre la promesa
del Espíritu Santo, ha derramado esto que vosotros veis y oís”. (Hch 2:33).

3) El Señor Jesús lo enseña a sus discípulos como la promesa del Padre, cuando se despide
del grupo en el Monte de los Olivos, antes de ser arrebatado.

“4 Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la
promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí.” (Hch 1:4)

4) Pedro explica a la gente en su sermón de Pentecostés que lo que están viendo en ese
momento es el cumplimiento de lo prometido por Dios en Joel y de lo prometido por el
Señor Jesús como la promesa del Padre que el enviaría.
5) El bautismo en el Espíritu Santo con la evidencia inicial de hablar con otras lenguas no
es algo que el Señor Jesús inventa, sino que es la promesa antigua que Dios había hecho
como marca o característica de la venida del Mesías.
6) Cuando la promesa mesiánica se cumpliera, el mundo sabría que los últimos tiempos
habían sido inaugurados, el reino de Dios estaba sobre la tierra porque el mesías
bautizaría con el Espíritu Santo y fuego.
7) Constituye una marca del cumplimiento del tiempo. Así que, cuando recibimos el
bautismo con el Espíritu Santo o vemos que alguien lo recibe, gocémonos porque Dios
cumple sus promesas al pie de la letra, y nos encontramos ya en la última recta del plan
de Dios para este orden presente.
8) Lo eterno esta ya sobre nosotros y su consumación ya no puede esperar más.

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h. ES MANDATO DEL SEÑOR

1) El recibir la plenitud del Espíritu no fue algo dejado al deseo o antojo del creyente,
como una mera opción o alternativa.
2) Hay un mandato expreso del Señor que cada uno tiene responsabilidad de obedecer. Él
ordena que seamos llenos del Espíritu. Este mandato se cumple cuando uno es
bautizado en el Espíritu Santo.

“4 Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la
promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí”. (Hch 1:4)

“32 Y nosotros somos testigos suyos de estas cosas, y también el Espíritu Santo, el
cual ha dado Dios a los que le obedecen”. (Hch 5:32).

“18 No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del
Espíritu”. (Ef 5:18)

2. PROPÓSITO DEL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU SANTO

a. RECIBIR PODER

Existen diversos propósitos por los cuales el creyente recibe el don del bautismo del
Espíritu Santo, entre ellos tenemos el otorgamiento de poder.

“8 pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre vosotros el Espíritu Santo, y me
seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaria, y hasta lo último de la tierra”.
(Hch 1:8)

b. SIGNIFICADO DE PODER

1) La palabra “poder” viene de dos voces griegas:

▪ “dunamis” que quiere decir: capacidad inherente, capacidad de llevar a cabo


cualquier cosa, poder para obrar, poder en acción con potencia de señales.
▪ “exosia”. Denota libertad de Acción, derecho a actuar, autoridad delegada,

2) “poder” significa: Autoridad, potestad, dominio, facultad, influencia, energía, fuerza y


vitalidad.
3) Jesús dijo que al ser bautizados con el Espíritu Santo recibiríamos todo esto y mucho
más, también se llama “investidura de poder” o “Bautismo de poder”.

c. PROPÓSITO DE PODER

1) Poder para servir

El propósito principal del bautismo en el Espíritu Santo es capacitar al creyente para el


servicio cristiano. El resultado característico de haber sido lleno del Espíritu es
poder para servir. Jesús fue ungido con el Espíritu Santo antes de comenzar su
ministerio público, ejecutando sus obras poderosas con el poder del Espíritu. Jesús
predicó y sanó bajo la unción del Espíritu Santo.

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“18 El Espíritu del Señor está sobre mí, Por cuanto me ha ungido para dar buenas
nuevas a los pobres; Me ha enviado a sanar a los quebrantados de corazón; A
pregonar libertad a los cautivos, Y vista a los ciegos; A poner en libertad a los
oprimidos”. (Lc 4:18)

“38 cómo Dios ungió con el Espíritu Santo y con poder a Jesús de Nazaret, y cómo
éste anduvo haciendo bienes y sanando a todos los oprimidos por el diablo, porque
Dios estaba con él”. (Hch 10:38)

“28 Pero si yo por el Espíritu de Dios echo fuera los demonios, ciertamente ha
llegado a vosotros el reino de Dios”. (Mt 12:28).

Jesús es nuestro ejemplo, pero también dijo: “que sus discípulos harían obras mayores
por medio del poder del Espíritu Santo a quien el enviaría a ellos cuando regresara al
Padre”

“12 De cierto, de cierto os digo: El que en mí cree, las obras que yo hago, él las hará
también; y aún mayores hará, porque yo voy al Padre”. (Jn. 14:12).

2) Poder para dar testimonio de Jesucristo

“33 Y con gran poder los apóstoles daban testimonio de la resurrección del Señor
Jesús, y abundante gracia era sobre todos ellos”. (Hch 4:33)

Un testigo es aquel que declara lo que ha oído, lo que ha visto y lo ha presenciado. Los
apóstoles dijeron:

“20 porque no podemos dejar de decir lo que hemos visto y oído” (Hch 4:20).

¿Qué vieron? A Jesucristo muerto, resucitado y su ascensión al cielo.

3) Poder para predicar el evangelio

Hay mucha diferencia entre un discurso por más elocuente que sea y una predicación
con poder.

“4 y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana


sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder, 5 para que vuestra fe no
esté fundada en la sabiduría de los hombres, sino en el poder de Dios”. (1 Co 2:4-5)

“20 Porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder”. (1 Co 4:20).

“5 pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en


poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos
entre vosotros por amor de vosotros”. (1 Ts 1:5)

4) Poder para hacer prodigios y señales en el nombre de Jesucristo

Los apóstoles

"12 Y por la mano de los apóstoles se hacían muchas señales y prodigios en el


pueblo; y estaban todos unánimes en el pórtico de Salomón". (Hch 5:12)
9
"15 tanto que sacaban los enfermos a las calles, y los ponían en camas y lechos, para
que al pasar Pedro, a lo menos su sombra cayese sobre alguno de ellos. 16 Y aun de
las ciudades vecinas muchos venían a Jerusalén, trayendo enfermos y atormentados
de espíritus inmundos; y todos eran sanados". (Hch 5:15-16)

Esteban

"8 Y Esteban, lleno de gracia y de poder, hacía grandes prodigios y señales entre el
pueblo. 9 Entonces se levantaron unos de la sinagoga llamada de los libertos, y de los
de Cirene, de Alejandría, de Cilicia y de Asia, disputando con Esteban. 10 Pero no
podían resistir a la sabiduría y al Espíritu con que hablaba". (Hch. 6:8-10).

Felipe en Samaria

"5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. 6 Y


la gente, unánime, escuchaba atentamente las cosas que decía Felipe, oyendo y
viendo las señales que hacía. 7 Porque de muchos que tenían espíritus inmundos,
salían éstos dando grandes voces; y muchos paralíticos y cojos eran sanados; 8 así
que había gran gozo en aquella ciudad". (Hch. 8:5-8).

5) Poder para expulsar demonios en el nombre de Jesucristo

"7 Porque de muchos que tenían espíritus inmundos, salían éstos dando grandes
voces; y muchos paralíticos y cojos eran sanados". (Hch 8:7)

"6 Y habiendo atravesado toda la isla hasta Pafos, hallaron a cierto mago, falso
profeta, judío, llamado Barjesús, 7 que estaba con el procónsul Sergio Paulo, varón
prudente. Este, llamando a Bernabé y a Saulo, deseaba oír la palabra de Dios. 8 Pero
les resistía Elimas, el mago (pues así se traduce su nombre), procurando apartar de la
fe al procónsul. 9 Entonces Saulo, que también es Pablo, lleno del Espíritu Santo,
fijando en él los ojos, 10 dijo: ¡Oh, lleno de todo engaño y de toda maldad, hijo del
diablo, enemigo de toda justicia! ¿No cesarás de trastornar los caminos rectos del
Señor? 11 Ahora, pues, he aquí la mano del Señor está contra ti, y serás ciego, y no
verás el sol por algún tiempo. E inmediatamente cayeron sobre él oscuridad y
tinieblas; y andando alrededor, buscaba quien le condujese de la mano. 12 Entonces
el procónsul, viendo lo que había sucedido, creyó, maravillado de la doctrina del
Señor". (Hch. 13:6-12)

"16 Aconteció que mientras íbamos a la oración, nos salió al encuentro una
muchacha que tenía espíritu de adivinación, la cual daba gran ganancia a sus amos,
adivinando. 17 Esta, siguiendo a Pablo y a nosotros, daba voces, diciendo: Estos
hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de
salvación. 18 Y esto lo hacía por muchos días; mas desagradando a Pablo, éste se
volvió y dijo al espíritu: Te mando en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella. Y
salió en aquella misma hora". (Hch. 16:16-18)

"1 Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus
inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda
dolencia". (Mt. 10:1)

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"19 He aquí os doy potestad de hollar serpientes y escorpiones, y sobre toda fuerza
del enemigo, y nada os dañará". (Luc. 10:19)

6) Poder para librar grandes batallas espirituales

✓ Expulsar demonios
✓ Orar y hacer verdadera guerra espiritual (orar en el Espíritu).
✓ Para destruir las fortalezas de Satanás.
✓ Para vencer la tentación, el mundo y el pecado.
✓ Para desbaratar la jerarquía satánica.

7) Poder rebosante.

✓ El desafío de Jesús es que del interior del creyente corran ríos de agua viva.

"37 En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz,
diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. 38 El que cree en mí, como dice
la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.39 Esto dijo del Espíritu que
habían de recibir los que creyesen en él; pues aún no había venido el Espíritu
Santo, porque Jesús no había sido aún glorificado". (Jn. 7:37-39)

✓ Note en particular la palabra “correrán”. “El poder debe correr del interior hacia
fuera” del creyente.
✓ No es suficiente que tenga poder, el obrero del Señor debe también influir hacia
fuera. Los siervos de Dios son más que canales vacíos, son vasijas.
✓ El Señor quiere llenarnos con su Espíritu de tal manera que rebosemos de su poder y
presencia.

8) Poder que produce pasión

✓ Pasión divina para hacer tareas divinas y llevar a cabo todas las comisiones dadas
por Dios.
✓ Pasión de amar divinamente como amó Jesús, para predicar a Cristo con
convicción y persuasión.
✓ Pasión de ejercer los dones espirituales para la edificación de la Iglesia.
✓ Pasión para sufrir persecución por causa de Cristo
✓ Pasión para trabajar para Dios en forma amorosa, voluntaria, fiel e
incansablemente.
✓ Pasión para trabajar hasta que venga el Señor o hasta que seamos llamados a su
presencia.

"14 A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor. 15 Así que, en


cuanto a mí, pronto estoy a anunciaros el evangelio también a vosotros que estáis
en Roma. 16 Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios
para salvación a todo aquel que cree; al judío primeramente, y también al griego".
(Ro 1:14-16)

"18 Y llamándolos, les intimaron que en ninguna manera hablasen ni enseñasen


en el nombre de Jesús. 19 Mas Pedro y Juan respondieron diciéndoles: Juzgad si
es justo delante de Dios obedecer a vosotros antes que a Dios". (Hch. 4:18-19)

3. RESULTADOS DEL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU SANTO


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a. PREDICACIÓN UNGIDA

“Los apóstoles daban testimonio con gran poder de la resurrección del Señor Jesús. Y
gozaban todos de gran simpatía”. (Hch 4:33)

1) La señal característica de la predicación de los apóstoles era el poder

"8 Y Esteban, lleno de gracia y de poder, hacía grandes prodigios y señales entre el
pueblo". (Hch 6:8)

2) La predicación y las obras iban unidas: “con potencia de señales y prodigios en el


poder del Espíritu de Dios”.

"18 Porque no osaría hablar sino de lo que Cristo ha hecho por medio de mí para la
obediencia de los gentiles, con la palabra y con las obras, 19 con potencia de señales
y prodigios, en el poder del Espíritu de Dios; de manera que desde Jerusalén, y por
los alrededores hasta Ilírico, todo lo he llenado del evangelio de Cristo". (Ro 15:18-
19)

3) Con la demostración del Espíritu y de Poder

"4 y ni mi palabra ni mi predicación fue con palabras persuasivas de humana


sabiduría, sino con demostración del Espíritu y de poder". (1 Co 2:4)

4) Porque el reino de Dios no consiste en palabras solamente, sino en poder

"20 Porque el reino de Dios no consiste en palabras, sino en poder" (1 Co 4:20)

5) Como en el caso de los tesalonicenses, el evangelio no les llegó en palabras


solamente, sino también en poder en el Espíritu Santo.

"5 pues nuestro evangelio no llegó a vosotros en palabras solamente, sino también en
poder, en el Espíritu Santo y en plena certidumbre, como bien sabéis cuáles fuimos
entre vosotros por amor de vosotros". (1 Tes 1:5)

b. DEMOSTRACIÓN DE SEÑALES Y HECHOS SOBRENATURALES

"12 Y por la mano de los apóstoles se hacían muchas señales y prodigios en el


pueblo…" (Hch 5:12)

1) Servían a la comunidad con el poder de Dios

▪ “señales” (semeion) se refieren a: “señal milagrosa o un milagro”


▪ “prodigios” (terata) se refiere a sucesos extraños que exceden los limites regulares
de la naturaleza, es decir, a actos del poder divino.
▪ Podemos notar que esas señales y esos prodigios se hacían “en el pueblo”, no
dentro de la iglesia sino en la comunidad.

2) Vivían lo sobrenatural

12
“12 Y por la mano de los apóstoles se hacían muchas señales y prodigios en el
pueblo; y estaban todos unánimes en el pórtico de Salomón. 13 De los demás,
ninguno se atrevía a juntarse con ellos; mas el pueblo los alababa grandemente. 14 Y
los que creían en el Señor aumentaban más, gran número así de hombres como de
mujeres; 15 tanto que sacaban los enfermos a las calles, y los ponían en camas y
lechos, para que al pasar Pedro, a lo menos su sombra cayese sobre alguno de ellos.
16 Y aun de las ciudades vecinas muchos venían a Jerusalén, trayendo enfermos y
atormentados de espíritus inmundos; y todos eran sanados.” (Hch 5:12-16)

3) En esta dimensión sobrenatural que se movían, podemos ver que había en el


ambiente una carga tan grande de fe, tanto en la iglesia como en el pueblo

No hacía falta que alguien toque a los enfermos para su sanidad, sacaban los enfermos a
la calle, y los ponían en camas y lechos para que al pasar Pedro, a lo menos su sombra
cayese sobre alguno de ellos.

15 tanto que sacaban los enfermos a las calles, y los ponían en camas y lechos, para
que al pasar Pedro, a lo menos su sombra cayese sobre alguno de ellos.” (Hch 5:15)

4) Las señales eran tan auténticas que no dejaban dudas

✓ La sanidad del cojo

"13 Entonces viendo el denuedo de Pedro y de Juan, y sabiendo que eran hombres
sin letras y del vulgo, se maravillaban; y les reconocían que habían estado con
Jesús. 14 Y viendo al hombre que había sido sanado, que estaba en pie con ellos,
no podían decir nada en contra. 15 Entonces les ordenaron que saliesen del
concilio; y conferenciaban entre sí, 16 diciendo: ¿Qué haremos con estos
hombres? Porque de cierto, señal manifiesta ha sido hecha por ellos, notoria a
todos los que moran en Jerusalén, y no lo podemos negar". (Hechos 4:13-16)

✓ Sanidades y liberaciones en Samaria

"5 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. 6


Y la gente, unánime, escuchaba atentamente las cosas que decía Felipe, oyendo y
viendo las señales que hacía. 7 Porque de muchos que tenían espíritus inmundos,
salían éstos dando grandes voces; y muchos paralíticos y cojos eran sanados; 8 así
que había gran gozo en aquella ciudad". (Hch 8:5-8)

✓ La resurrección de Dorcas.

"40 Entonces, sacando a todos, Pedro se puso de rodillas y oró; y volviéndose al


cuerpo, dijo: Tabita, levántate. Y ella abrió los ojos, y al ver a Pedro, se
incorporó. 41 Y él, dándole la mano, la levantó; entonces, llamando a los santos y
a las viudas, la presentó viva. 42 Esto fue notorio en toda Jope, y muchos creyeron
en el Señor". (Hechos 9:40-42)

✓ El juicio de ceguera sobre Elimas, el Mago y la conversión del procónsul, Sergio


Paulo.

"6 Y habiendo atravesado toda la isla hasta Pafos, hallaron a cierto mago, falso
profeta, judío, llamado Barjesús, 7 que estaba con el procónsul Sergio Paulo,
13
varón prudente. Este, llamando a Bernabé y a Saulo, deseaba oír la palabra de
Dios. 8 Pero les resistía Elimas, el mago (pues así se traduce su nombre),
procurando apartar de la fe al procónsul. 9 Entonces Saulo, que también es Pablo,
lleno del Espíritu Santo, fijando en él los ojos, 10 dijo: ¡Oh, lleno de todo engaño y
de toda maldad, hijo del diablo, enemigo de toda justicia! ¿No cesarás de
trastornar los caminos rectos del Señor? 11 Ahora, pues, he aquí la mano del
Señor está contra ti, y serás ciego, y no verás el sol por algún tiempo. E
inmediatamente cayeron sobre él oscuridad y tinieblas; y andando alrededor,
buscaba quien le condujese de la mano. 12 Entonces el procónsul, viendo lo que
había sucedido, creyó, maravillado de la doctrina del Señor". (Hechos 13:6-12)

✓ La liberación de la muchacha con espíritu de adivinación en Filipos.

"16 Aconteció que mientras íbamos a la oración, nos salió al encuentro una
muchacha que tenía espíritu de adivinación, la cual daba gran ganancia a sus
amos, adivinando. 17 Esta, siguiendo a Pablo y a nosotros, daba voces, diciendo:
Estos hombres son siervos del Dios Altísimo, quienes os anuncian el camino de
salvación. 18 Y esto lo hacía por muchos días; mas desagradando a Pablo, éste se
volvió y dijo al espíritu: Te mando en el nombre de Jesucristo, que salgas de ella. Y
salió en aquella misma hora." (Hechos 16:16-18)

c. AUTORIDAD ESPIRITUAL

"7 y poniéndoles en medio, les preguntaron: ¿Con qué potestad, o en qué nombre, habéis hecho
vosotros esto?" (Hch 4:7)

1) Los Apóstoles predicaban bajo la autoridad de Jesús.

2) Para traer todo pensamiento a la obediencia a Cristo, derribando argumentos y


toda altivez que se levanta contra el conocimiento de Dios.

"4 porque las armas de nuestra milicia no son carnales, sino poderosas en Dios para
la destrucción de fortalezas, 5 derribando argumentos y toda altivez que se levanta
contra el conocimiento de Dios, y llevando cautivo todo pensamiento a la obediencia
a Cristo,” (2 Co 10:4-5)

3) Para predicar sin temor ante las autoridades opuestas al evangelio

"13 Entonces viendo el denuedo de Pedro y de Juan, y sabiendo que eran hombres
sin letras y del vulgo, se maravillaban; y les reconocían que habían estado con
Jesús". (Hechos 4:13)

4) Autoridad sobre los espíritus para echarlos fuera y sanar toda enfermedad y toda
dolencia.

"1 Entonces llamando a sus doce discípulos, les dio autoridad sobre los espíritus
inmundos, para que los echasen fuera, y para sanar toda enfermedad y toda
dolencia". (Mateo 10:1)

5) Autoridad sobre la muerte

14
"8 Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de
gracia recibisteis, dad de gracia". (Mateo 10:8)

d. PASIÓN POR CRISTO Y POR LAS ALMAS

1) El movimiento de mayor impacto en el mundo y de mayor presencia en todos los


países del mundo es el movimiento pentecostal. El factor que ha producido este
fenómeno espiritual es el Espíritu Santo que produce en el corazón pasión por Cristo y
por las almas.

2) El tema principal de la predicación de los apóstoles era la persona de Jesucristo,


aun a costa de la persecución, de las prisiones, de las torturas y de los martirios.

"40 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les
intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad. 41 Y
ellos salieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de
padecer afrenta por causa del Nombre". (Hechos. 5:40-41)

"27 Cuando los trajeron, los presentaron en el concilio, y el sumo sacerdote les
preguntó, 28 diciendo: ¿No os mandamos estrictamente que no enseñaseis en ese
nombre? Y ahora habéis llenado a Jerusalén de vuestra doctrina, y queréis echar
sobre nosotros la sangre de ese hombre. 29 Respondiendo Pedro y los apóstoles,
dijeron: Es necesario obedecer a Dios antes que a los hombres. 31 A éste, Dios ha
exaltado con su diestra por Príncipe y Salvador, para dar a Israel arrepentimiento y
perdón de pecados". (Hch. 5:27-29, 31)

3) Debido a su pasión por Cristo desafiaban a la persecución, las prohibiciones y las


amenazas e intensificaban la predicación en el nombre de Cristo.

"29 Y ahora, Señor, mira sus amenazas, y concede a tus siervos que con todo
denuedo hablen tu palabra, 30 mientras extiendes tu mano para que se hagan
sanidades y señales y prodigios mediante el nombre de tu santo Hijo Jesús". (Hechos
4:29-30)

"42 Y todos los días, en el templo y por las casas, no cesaban de enseñar y predicar a
Jesucristo". (Hch 5:42)

4) El apóstol Pablo expresó su pasión por Cristo

"14 A griegos y a no griegos, a sabios y a no sabios soy deudor". (Ro 1:14)

"16 Pues si anuncio el evangelio, no tengo por qué gloriarme; porque me es impuesta
necesidad; y ¡ay de mí si no anunciare el evangelio!". (1 Co 9:16)

5) Los ministerios crecientes y de gran impacto así mismo las iglesias y movimientos
evangélicos que crecen y avanzan son aquellos que tienen pasión por Cristo y por las
almas.

e. ESTÁN DISPUESTOS A DAR TODO POR CRISTO, AUN SU VIDA

15
"10 …a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus padecimientos,
llegando a ser semejante a él en su muerte, 11 si en alguna manera llegase a la resurrección de
entre los muertos". (Fil 3:10-11)

1) Mucha gente está dispuesta a dar todo por amor a Cristo, inclusive su vida.

2) Las personas más intrépidas, audaces y valientes son aquellas que han recibido el
bautismo en el Espíritu Santo. No se doblegan ante las adversidades, peligros y aun
ante la muerte misma. Jesús les dijo, que al ser llevados ante autoridades, magistrados y
gobernantes, no se preocuparían cómo defenderse, porque el Espíritu Santo hablaría por
ellos.

"16 He aquí, yo os envío como a ovejas en medio de lobos; sed, pues, prudentes como
serpientes, y sencillos como palomas. 17 Y guardaos de los hombres, porque os
entregarán a los concilios, y en sus sinagogas os azotarán;18 y aun ante
gobernadores y reyes seréis llevados por causa de mí, para testimonio a ellos y a los
gentiles. 19 Mas cuando os entreguen, no os preocupéis por cómo o qué hablaréis;
porque en aquella hora os será dado lo que habéis de hablar. 20 Porque no sois
vosotros los que habláis, sino el Espíritu de vuestro Padre que habla en vosotros.
21 El hermano entregará a la muerte al hermano, y el padre al hijo; y los hijos se
levantarán contra los padres, y los harán morir". (Mt 10:16-21)

3) Pablo deseaba experimentar el poder de su resurrección, participar en sus


padecimientos, llegar a ser semejante en su muerte.

"10 a fin de conocerle, y el poder de su resurrección, y la participación de sus


padecimientos, llegando a ser semejante a él en su muerte". (Fil 3:10)

f. ORACIÓN EN EL ESPÍRITU

"26 Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues qué hemos de
pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con
gemidos indecibles. 27 Mas el que escudriña los corazones sabe cuál es la intención del
Espíritu, porque conforme a la voluntad de Dios intercede por los santos". (Ro 8:26-27)

1) Cuando nuestra naturaleza y capacidad humana llega a su límite y se agotan, el Espíritu


Santo toma nuestra mente, nuestro corazón y nuestra lengua y comienza a orar con
gemidos indecibles.

2) Cuando el cristiano trasciende las esferas naturales, llega al trono de la gracia con
peticiones de intercesión que hace en el poder del Espíritu Santo según la voluntad de
Dios. La Biblia dice que si pedimos alguna cosa según la voluntad de Dios Él nos oye.

"14 Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa conforme a
su voluntad, él nos oye". (1 Jn. 5:14)

3) La oración en el Espíritu anula totalmente las armas, las maquinaciones y las


barreras satánicas, enmudece a los demonios y hace temblar al mismo infierno. No
hay poder ni autoridad terrenal que se sobreponga a la oración en el Espíritu.

16
4) La Biblia nos requiere que pasemos de las oraciones simples, mecánicas y superficiales
a la oración en el Espíritu.

"18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu…" (Ef. 6:18)

"20 Pero vosotros, amados, edificándoos sobre vuestra santísima fe, orando en el
Espíritu Santo". (Jud 1:20)

"4 El que habla en lengua extraña, a sí mismo se edifica…" (1 Co 14:4)

"14. Porque si yo oro en lengua desconocida, mi espíritu ora… pero mi


entendimiento queda sin fruto" (1 Co 14:14)

5) La oración en el Espíritu tiene señales. Lenguaje del Espíritu, gemidos indecibles y


agonía.

4. ¿QUÉ HACER PARA RECIBIR EL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU SANTO?

a. UN ARREPENTIMIENTO SINCERO

"37 Al oír esto, se compungieron de corazón, y dijeron a Pedro y a los otros apóstoles:
Varones hermanos, ¿qué haremos? 38 Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno
de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del
Espíritu Santo. 39 Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para
todos los que están lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare". (Hch. 2:37-38)

1) El bautismo en el Espíritu Santo es un don de Dios. Don es un regalo de gracia y amor


que el Señor otorga a los que en Él creen.

2) Ese don tiene un costo elevadísimo y Cristo lo pagó todo, de modo que lo recibamos sin
que nos cueste nada.

3) Sin embargo, por ser regalo, no significa que se da a cualquiera, sino a aquellos que
reúnan los requisitos para recibirlo y uno de esos requisitos es el arrepentimiento.

4) Arrepentimiento es sentir dolor (compungirse) y vergüenza por toda ofensa y pecado


cometido contra Dios, confesar en su totalidad y apartarse definitivamente de esos
pecados. Llegar hasta la conversión, es decir un cambio total.

"19 Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para
que vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio". (Hch. 3:19)

b. LIMPIEZA DE TODA FORMA DE IDOLATRÍA

"25 Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras
inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré. 26 Os daré corazón nuevo, y pondré
espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os
daré un corazón de carne. 27 Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis
en mis estatutos, y guardéis mis preceptos, y los pongáis por obra". (Ez 36:25-27)

1) La limpieza interior y exterior son indispensables para que el Espíritu Santo more con
libertad en nosotros.
17
2) La idolatría es definida en la Biblia como inmundicia, es decir cosa podrida, sucia
que emana olor nauseabundo. Así es la idolatría ante Dios.
3) IDOLATRÍA ES TODA COSA QUE TOMA EL PRIMER LUGAR EN TU
CORAZÓN DESPLAZANDO A DIOS a un segundo. Es algo que amas más que a
Dios. Puede ser dinero, fama, trabajo, deporte, arte, profesión, moda, música, esposo,
esposa, hijos, diversiones y bienes materiales. Si queremos ser bautizados con el
Espíritu Santo debemos limpiarnos de toda idolatría.

c. NO SATISFACER LOS DESEOS DE LA CARNE

"16 Digo, pues: Andad en el Espíritu, y no satisfagáis los deseos de la carne. 17 Porque
el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la carne; y éstos se
oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis". (Gá 5:16-17)

1) Este es un mandato de Dios. “No satisfagáis los deseos de la carne”. Luego presenta
una lista de 17 obras de la carne y añade cosas semejantes a estas.

"19 Y manifiestas son las obras de la carne, que son: adulterio, fornicación,
inmundicia, lascivia, 20 idolatría, hechicerías, enemistades, pleitos, celos, iras,
contiendas, disensiones, herejías, 21 envidias, homicidios, borracheras, orgías, y
cosas semejantes a estas; acerca de las cuales os amonesto, como ya os lo he dicho
antes, que los que practican tales cosas no heredarán el reino de Dios". (Gá 5:19-21.

2) Los deseos y las obras de la carne son totalmente opuestos a los deseos del Espíritu.
Por eso, el que satisface en todos o algunos de estos deseos a su carne no puede recibir
el bautismo en el Espíritu Santo.

"17 Porque el deseo de la carne es contra el Espíritu, y el del Espíritu es contra la


carne; y éstos se oponen entre sí, para que no hagáis lo que quisiereis". (Gá 5:17)

3) Pero los que son de Cristo (nacidos de nuevo) han crucificado la carne con sus
pasiones y deseos.

" 24 Pero los que son de Cristo han crucificado la carne con sus pasiones y deseos".
(Gá 5:24)

4) Han hechos morir lo terrenal en ellos.

"5 Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros: fornicación, impureza, pasiones


desordenadas, malos deseos y avaricia, que es idolatría; 6 cosas por las cuales la ira
de Dios viene sobre los hijos de desobediencia, 7 en las cuales vosotros también
anduvisteis en otro tiempo cuando vivíais en ellas. 8 Pero ahora dejad también
vosotros todas estas cosas: ira, enojo, malicia, blasfemia, palabras deshonestas de
vuestra boca. 9 No mintáis los unos a los otros, habiéndoos despojado del viejo
hombre con sus hechos, 10 y revestido del nuevo, el cual conforme a la imagen del
que lo creó se va renovando hasta el conocimiento pleno". (Col. 3:5-10)

"12 Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable


misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia". "17 Y
todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor
Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él". (Col. 3:12, 17)
18
d. APROPIARSE DE LA PROMESA

"39 Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están
lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare". (Hch 2:39)

1) Una promesa es deuda, Cristo ha prometido bautizarnos en el Espíritu Santo, el cumple


con su propósito porque no es deudor de nadie.

2) Pedro dijo: Que esta promesa es para los que estaban presentes, para sus hijos, para los
judíos que estaban lejos en el vasto imperio romano y para cuantos el Señor nuestro
Dios llamare. Esta última está referida a los gentiles es decir, a nosotros.

3) Entonces, esta promesa de nuestro Padre es para usted y para mí. El quiere bautizarnos
con su Espíritu Santo. Después de la salvación, esta es la segunda bendición más grande
de nuestro Dios.

5. ¿CÓMO RECIBIR EL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU SANTO?

a. CREER EN LA PROMESA Y DESEAR RECIBIRLO DE TODO CORAZÓN

"37 En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si
alguno tiene sed, venga a mí y beba. 38 El que cree en mí, como dice la Escritura, de su
interior correrán ríos de agua viva. 39 Esto dijo del Espíritu que habían de recibir los
que creyesen en él; pues aún no había venido el Espíritu Santo, porque Jesús no había
sido aún glorificado". (Jn 7:37-39)

b. LA FE

1) Los ciento veinte creyeron en las promesas del Señor de enviarles otro consolador y la
promesa del Padre mencionados en la Palabra.

"49 He aquí, yo enviaré la promesa de mi Padre sobre vosotros; pero quedaos


vosotros en la ciudad de Jerusalén, hasta que seáis investidos de poder desde lo alto".
(Lc 24:49)

"4 Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino que esperasen la
promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí. 5 Porque Juan ciertamente bautizó
con agua, mas vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo dentro de no muchos
días". (Hch 1:4-5)

2) La fe es un factor importante para creer en el Señor, en su palabra y en sus obras por eso
dice: “Pero sin fe es imposible agradar a Dios...".

"6 Pero sin fe es imposible agradar a Dios; porque es necesario que el que se acerca
a Dios crea que le hay, y que es galardonador de los que le buscan". (Heb 11:6)

3) El bautismo en el Espíritu Santo se daría como Ríos de agua viva a los que creyesen en
Él.

"37 En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz,
diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. 38 El que cree en mí, como dice la
19
Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva.39 Esto dijo del Espíritu que
habían de recibir los que creyesen en él; pues aún no había venido el Espíritu Santo,
porque Jesús no había sido aún glorificado". (Jn 7:37-39)

c. LA OBEDIENCIA

1) Ellos escucharon atentamente las órdenes que el Señor les dio y obedecieron
exactamente como les dijo, por eso volvieron del Monte de los Olivos a Jerusalén,
subieron al aposento alto y se quedaron allí.

“12 Entonces volvieron a Jerusalén desde el monte que se llama del Olivar, el cual
está cerca de Jerusalén, camino de un día de reposo. 13 Y entrados, subieron al
aposento alto, donde moraban Pedro y Jacobo, Juan, Andrés, Felipe, Tomás,
Bartolomé, Mateo, Jacobo hijo de Alfeo, Simón el Zelote y Judas hermano de Jacobo.
14 Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con
María la madre de Jesús, y con sus hermanos.” (Hch 1:12-14)

2) La obediencia a las palabras y a los mandamientos del Señor es requisito fundamental


para recibir las promesas de Dios y ser llenos del Espíritu Santo.

"31 A éste, Dios ha exaltado con su diestra por Príncipe y Salvador, para dar a Israel
arrepentimiento y perdón de pecados. 32 Y nosotros somos testigos suyos de estas
cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen". (Hch
5:31-32)

3) Los desobedientes andan según los designios de su carne y no tienen el Espíritu de


Cristo.

"Mas vosotros no vivís según la carne, sino según el Espíritu, si es que el Espíritu de
Dios mora en vosotros. Y si alguno no tiene el Espíritu de Cristo, no es de él". (Ro
8:9)

4) El Espíritu de Cristo por naturaleza lleva a la obediencia.

"8 Y aunque era Hijo, por lo que padeció aprendió la obediencia; 9 y habiendo sido
perfeccionado, vino a ser autor de eterna salvación para todos los que le obedecen".
(Heb 5:8-9)

5) La Condición básica para recibir el bautismo en el Espíritu Santo es la obediencia

"31 A éste, Dios ha exaltado con su diestra por Príncipe y Salvador, para dar a Israel
arrepentimiento y perdón de pecados. 32 Y nosotros somos testigos suyos de estas
cosas, y también el Espíritu Santo, el cual ha dado Dios a los que le obedecen". (Hch
5:31-32)

d. LA UNIDAD

1) El libro de los Hechos emplea el término “unánime” varias veces

"14 Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con
María la madre de Jesús, y con sus hermanos". (Hch. 1:14)

20
"1 Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos" (Hch. 2:1)

"24 Y ellos, habiéndolo oído, alzaron unánimes la voz a Dios, y dijeron: Soberano
Señor, tú eres el Dios que hiciste el cielo y la tierra, el mar y todo lo que en ellos hay"
(Hch. 4:24)

2) Unánime significa un solo pensamiento, un mismo sentir, un solo propósito, un


corazón y un alma.

"32 Y la multitud de los que habían creído era de un corazón y un alma; y ninguno
decía ser suyo propio nada de lo que poseía, sino que tenían todas las cosas en
común". (Hch. 4:32)

3) Donde hay contiendas, divisiones y sublevación no obra el Espíritu de Dios, sino el


espíritu maligno y la carne. Es importante entender la oración de Jesús acerca de la
unidad.

"11 Y ya no estoy en el mundo; mas éstos están en el mundo, y yo voy a ti. Padre
santo, a los que me has dado, guárdalos en tu nombre, para que sean uno, así como
nosotros". (Jn. 17:11)

"21 para que todos sean uno; como tú, oh Padre, en mí, y yo en ti, que también ellos
sean uno en nosotros; para que el mundo crea que tú me enviaste. 22 La gloria que
me diste, yo les he dado, para que sean uno, así como nosotros somos uno. 23 Yo en
ellos, y tú en mí, para que sean perfectos en unidad, para que el mundo conozca que
tú me enviaste, y que los has amado a ellos como también a mí me has amado". (Jn.
17:21-23)

e. ESPERAR Y PERSEVERAR

1) Jesús les dijo que esperasen la promesa del Padre, y ellos esperaron pacientemente el
cumplimiento de esa promesa.

"3 a quienes también, después de haber padecido, se presentó vivo con muchas
pruebas indubitables, apareciéndoseles durante cuarenta días y hablándoles acerca
del reino de Dios. 4 Y estando juntos, les mandó que no se fueran de Jerusalén, sino
que esperasen la promesa del Padre, la cual, les dijo, oísteis de mí". (Hch 1:3-4)

2) Otro término que usa el libro de los hechos es perseverar. Los 120 esperaron y
perseveraron hasta recibir el bautismo en el Espíritu Santo.

“14 Todos éstos perseveraban unánimes en oración y ruego, con las mujeres, y con
María la madre de Jesús, y con sus hermanos.” (Hch 1:14)

3) Los que esperan con expectación y perseveran en oración con toda seguridad: recibieron
esta promesa.

f. APROPIARSE DE LA PROMESA

"39 Porque para vosotros es la promesa, y para vuestros hijos, y para todos los que están
lejos; para cuantos el Señor nuestro Dios llamare". (Hch 2:39)

21
6. EVIDENCIA INCIAL DEL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU SANTO

a. La evidencia inicial de la recepción del don del Espíritu Santo es de suprema importancia
para todos los que tienen hambre por ser llenos del Espíritu Santo.

b. Hay muchas manifestaciones del Espíritu, pero solo un bautismo en el Espíritu Santo.
Si no hubiera una señal inicial, particular y sobrenatural ¿cómo se podría estar seguro de
que uno lo ha recibido este maravilloso bautismo?

c. Tenemos por el libro de los Hechos, por la experiencia y por la historia que LA
EVIDENCIA INICIAL DEL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU SANTO ES HABLAR
EN OTRAS LENGUAS según el Espíritu da para hablar.

d. La evidencia de la plenitud del Espíritu EN EL DÍA DE PENTECOSTÉS fue hablar


en otras lenguas.

"3 y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno
de ellos. 4 Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras
lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen". (Hch. 2:3-4)

Todos los judíos que por motivo de la fiesta nacional de Pentecostés habían ido a Jerusalén
presenciaron este hecho extraordinario, estaban atónicos y perplejos porque los oían hablar
en lenguas las maravillas de Dios.

"5 Moraban entonces en Jerusalén judíos, varones piadosos, de todas las naciones bajo
el cielo. 6 Y hecho este estruendo, se juntó la multitud; y estaban confusos, porque cada
uno les oía hablar en su propia lengua. 7 Y estaban atónitos y maravillados, diciendo:
Mirad, ¿no son galileos todos estos que hablan? 8 ¿Cómo, pues, les oímos nosotros
hablar cada uno en nuestra lengua en la que hemos nacido? 9 Partos, medos, elamitas, y
los que habitamos en Mesopotamia, en Judea, en Capadocia, en el Ponto y en Asia, 10
en Frigia y Panfilia, en Egipto y en las regiones de Africa más allá de Cirene, y romanos
aquí residentes, tanto judíos como prosélitos, 11 cretenses y árabes, les oímos hablar en
nuestras lenguas las maravillas de Dios. 12 Y estaban todos atónitos y perplejos,
diciéndose unos a otros: ¿Qué quiere decir esto?". (Hch. 2:5-12)

e. CESAREA: La segunda manifestación del hablar en lenguas fue en la casa de


Cornelio en Cesarea.

Los judíos que habían venido con Pedro se quedaron atónitos porque sabían que los
gentiles habían recibido la misma experiencia del Espíritu Santo que habían recibido los
discípulos en el día de Pentecostés, “porque los oían que hablaban en lenguas, y que
magnificaban a Dios”. Su hablar en lenguas no era una breve confusión de sílabas, sino un
hablar fluido y claramente en un idioma que traía asombro a los que presenciaban este
hecho sobrenatural.

"44 Mientras aún hablaba Pedro estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos los
que oían el discurso. 45 Y los fieles de la circuncisión que habían venido con Pedro se
quedaron atónitos de que también sobre los gentiles se derramase el don del Espíritu
Santo. 46 Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban a Dios". (Hch.
10:44-46)

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f. EFESO: Los discípulos de Juan recibieron el don del Espíritu Santo. Se menciona
específicamente que al imponerles Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo y
hablaban en lenguas y profetizaban. Esto fue en la ciudad de Éfeso.

"1 Aconteció que entre tanto que Apolos estaba en Corinto, Pablo, después de recorrer
las regiones superiores, vino a Efeso, y hallando a ciertos discípulos, 2 les dijo:
¿Recibisteis el Espíritu Santo cuando creísteis? Y ellos le dijeron: Ni siquiera hemos
oído si hay Espíritu Santo. 3 Entonces dijo: ¿En qué, pues, fuisteis bautizados? Ellos
dijeron: En el bautismo de Juan. 4 Dijo Pablo: Juan bautizó con bautismo de
arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en aquel que vendría después de él,
esto es, en Jesús el Cristo. 5 Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del
Señor Jesús. 6 Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu
Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban". (Hch 19:1-6)

g. Es importante entender que EL PROPÓSITO DEL BAUTISMO EN EL ESPÍRITU


SANTO NO ES DARNOS LENGUAS SINO PODER.
h. Tampoco nosotros buscamos lenguas sino el bautismo de poder. Pero el auténtico
bautismo en el Espíritu Santo tendrá como evidencia inevitable el hablar en otras lenguas.
i. La manifestación del Espíritu en el día de Pentecostés fue el derramamiento original de
poder sobre la Iglesia. Fue el modelo de la experiencia. Es razonable que lo que ocurrió a
los discípulos al ser llenos, igualmente sucede a todos los que hoy reciben el bautismo en
el Espíritu Santo. En tanto que el propósito de la unción era darles el poder para testificar,
no es sorprendente que la señal de la experiencia fuese manifestada en el hablar en otras
lenguas.

CONCLUSIONES

Las personas que han experimentado el bautismo de poder, sus vidas y ministerios fueron
totalmente transformados. Tú, necesitas ese bautismo, no mañana, sino el día de hoy.

Pr. Carlos Jara Depaz


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