La oración es una de las formas en las que el hombre coopera

con Él, es un modo por medio del cual el hombre invoca a Dios y
es el proceso por el cual el Espíritu de Dios conmueve al hombre.
Se puede decir que los que están sin oración son muertos que
carecen de espíritu, lo que prueba que les falta la facultad para
que Dios los conmueva. Sin la oración, sería imposible llevar una
vida espiritual normal, mucho menos seguir el ritmo de la obra
del Espíritu Santo. Estar sin la oración es romper la relación con
Dios y sería imposible recibir el elogio de Dios. Como creyente en
Dios, mientras más ores, más te conmueve Dios, más estás lleno
de determinación y mejor se puede recibir nuevo esclarecimiento
de Dios. Como resultado, este tipo de persona puede ser
perfeccionada de manera muy rápida por el Espíritu Santo.

La oración es de suma importancia para vosotros. Cuando oras y

recibes la obra del Espíritu Santo, Dios conmueve tu corazón y
surge la fuerza para amar a Dios. Si no oras con el corazón, si no
abres tu corazón para tener comunión con Dios, entonces Dios no
va a tener forma de obrar en ti. Si, habiendo orado y dicho las
palabras de tu corazón el Espíritu de Dios no ha empezado Su
obra y no has recibido inspiración, entonces esto demuestra que
tu corazón carece de sinceridad, que tus palabras no son ciertas
y que siguen siendo impuras. Si, habiendo orado, tienes un
sentido de satisfacción, entonces tus oraciones han sido
aceptables para Dios y el Espíritu de Dios está obrando en ti.

resumen:

La oración es muy importante para cada uno de nosotros, porque

la oración es un diálogo entre nosotros y el Creador y un puente
entre el alma y el Altísimo. Cuando oramos nos colocamos ante
Dios, abrimos nuestro corazón y compartimos nuestras alegrías,
tristezas, necesidades y agradecimientos. Este proceso de
comunicación íntima no sólo nos permite comprendernos mejor a
nosotros mismos, sino que también nos permite conocer mejor a
Dios. Por lo tanto, la oración es una manera de buscar
constantemente la fuerza y la gracia de Dios. En las dificultades,
la oración nos permite ganar coraje y paz; en la alegría, la
oración es un canal para que compartamos el agradecimiento.
No importa cuándo y dónde, la oración es la fuerza impulsora y el
apoyo en nuestra vida espiritual. Que cada oración que hagamos
produzca sublimación espiritual e inyecte poder infinito en
nuestras vidas.

Ⅱ. Frases sobre la oración para ser escuchado por Dios: hacer

verdaderas oraciones a Dios

1. No olvides orar desde el corazón para poder acercarte a Dios.

2. Una persona que ora sinceramente a Dios todos los días es

una persona rica.

3. Si no oras con sinceridad, no tendrás ninguna posibilidad de

obtener una respuesta de Dios.

4. ¿Lo crees? A veces todo lo que se necesita es una verdadera

oración para cambiarlo todo.

5. Dios escucha cada oración del corazón, sólo confía en Él y Él

te dará la respuesta más adecuada.

6. Sólo orando a Dios con sinceridad podrá Dios escuchar.

Las palabras relevantes de Dios:

Lo mínimo que Dios exige del hombre es que le pueda abrir su

corazón a Él. Si el hombre le da a Dios su corazón sincero y le
dice lo que realmente hay dentro de este, entonces Dios estará
dispuesto a obrar en él. Lo que Dios quiere no es el corazón
retorcido del hombre, sino un corazón puro y honesto. Si el
hombre no le habla a Dios de corazón, entonces Dios no se lo
conmueve ni obra dentro de él. Por lo tanto, lo más crucial de la
oración es hablarle a Dios de corazón, contarle tus defectos o tu
carácter rebelde y abrirte completamente a Él; solo entonces
Dios estará interesado en tus oraciones, de lo contrario, Él te
ocultará Su rostro.

¿Qué es la verdadera oración? Es decirle a Dios lo que hay en tu

corazón, tener comunión con Él al comprender Su voluntad,
comunicarte con Dios a través de Sus palabras, sentirte
especialmente cerca de Dios, sentir que Él está delante de ti y
creer que tienes algo que decirle. Sientes que tu corazón está
lleno de luz y lo encantador que es Dios. Te sientes
especialmente inspirado y escucharte les da satisfacción a tus
hermanos y hermanas. Sentirán que las palabras que dices son
las que están dentro de sus corazones, las que ellos desean
pronunciar, como si tus palabras sustituyeran a las suyas. Esta
es la verdadera oración. Después de que hayas orado
verdaderamente, tu corazón estará en paz y conocerá la
satisfacción. La fuerza para amar a Dios puede surgir y sentirás
que no hay nada con más valor o significado en la vida que amar
a Dios. Todo esto prueba que tus oraciones han sido efectivas.

resumen:

Dios escucha nuestras verdaderas oraciones. Es un amor

incondicional y un compromiso conmovedor. Cuando
simplemente abrimos nuestro corazón a Dios y ponemos todo lo
que tenemos frente a Dios, ya sea alegría, dolor, agradecimiento
o necesidad, Él puede escuchar cada voz sutil de nuestro
corazón, conocer cada oración sincera y dar las respuestas más
apropiadas para que podamos encontrar paz, fortaleza y
bendiciones en nuestro camino de oración. Cuando podemos
hablar con Dios desde el fondo de nuestro corazón, realmente
podemos tener una conversación de corazón a corazón, contarle
a Dios todas nuestras verdaderas dificultades y luego pedirle a
Dios misericordia y salvación, esto es hablar desde el corazón.
Que practiquemos la verdadera oración con Dios todos los días.

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