CONCLUSION

La ética juega un papel fundamental en la práctica de la psicología, ya que esta disciplina implica
trabajar con la mente, emociones y comportamientos de las personas. El código ético del
psicólogo establece una serie de principios y normas que guían el comportamiento profesional y
protegen tanto a los clientes como a los propios psicólogos.
Algunas de las razones por las cuales es crucial el uso del código ético son:
1. Protección del cliente: El código ético busca asegurar que los clientes reciban un
tratamiento adecuado y respetuoso. Garantiza la confidencialidad, el consentimiento
informado y la protección de los derechos de privacidad y autonomía de los pacientes.
2. Calidad del servicio: Al seguir un código ético, los psicólogos se comprometen a brindar
servicios de alta calidad y basados en evidencia científica, asegurando un enfoque
profesional y responsable en su práctica.
3. Responsabilidad profesional: El código ético establece pautas para la conducta
responsable y ética del psicólogo, lo que implica la necesidad de rendir cuentas por sus
acciones y decisiones profesionales.
4. Fomento de la confianza: Los clientes confían en que los psicólogos actuarán en su mejor
interés y que seguirán estándares éticos. Esta confianza es fundamental para establecer
una relación terapéutica sólida y efectiva.
5. Evitar conflictos de interés: El código ético ayuda a prevenir situaciones en las que los
intereses personales o financieros del psicólogo puedan afectar negativamente el
bienestar del cliente.
6. Integridad de la profesión: El respeto a los principios éticos fortalece la imagen de la
psicología como una profesión valiosa y confiable en la sociedad.
En resumen, el uso del código ético del psicólogo es esencial para garantizar una práctica
profesional responsable, ética y de alta calidad. Al seguir estos principios, los psicólogos
protegen y benefician a sus clientes, mantienen la integridad de la profesión y contribuyen al
bienestar de la sociedad en general.