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Resumen :
Las aeroavalanchas, como se le denomina en Cuba al término en inglés “downburst”, son
consideradas como una de las manifestaciones de severidad local. En casos extremos
pueden llegar a causar daños considerables a la economía y a la sociedad en general. Es
por ello que su pronóstico se torna sumamente importante para la ciencia meteorológica y
de ahí que se realizan numerosas investigaciones sobre el tema. Sin embargo, pese a todos
los esfuerzos que se han llevado a cabo, la multiplicidad de factores que intervienen en su
generación y desarrollo, así como la complejidad de los mismos, impiden que se conozca
aún, que elementos discriminan cuando se produce y cuando no este evento severo. Por
ello el objetivo de esta investigación fue determinar los factores físicos - meteorológicos en
la tropósfera media que discriminan la ocurrencia de las aeroavalanchas, contribuyendo así,
a la elaboración de su futuro pronóstico. Fueron seleccionados una serie de factores que
responden a leyes y procesos de la física de la atmósfera como posibles discriminantes.
Luego de una rigurosa selección de casos, se procedió a comprobar el cumplimiento de
cada factor para casos reales de aeroavalanchas y tormentas eléctricas sin severidad,
mediante el cálculo de variables físicas. Los resultados más relevantes se le atribuyen a la
existencia de una capa seca en los niveles medios y la absorción de calor latente por
evaporación y fusión.
Conclusiones:
● Los posibles factores preexistentes en el entorno en los niveles medios de la
tropósfera que pueden provocar la ocurrencia de aeroavalanchas en Cuba dentro
de una nube convectiva son la presencia de una capa seca y la absorción de calor
latente
● Los factores que aceleran las corrientes descendentes en las nubes de tormenta,
pero no logran discriminar cuando se produce la aeroavalancha son el aumento de
la flotabilidad en la corriente ascendente, el aumento de la viscosidad, la
aceler+ación vertical de Coriolis con el flujo del Este, la advección horizontal de
energía y masa.
● Las variables que mejor diferencian las tormentas con presencia de aeroavalanchas
de las tormentas eléctricas sin severidad son la diferencia de temperatura potencial
equivalente entre el nivel de mínima humedad en los niveles medios y de máxima
humedad en los niveles bajos, la DCAPE y la variación de calor latente de
evaporación y fusión.
Tema 2: Viento zonal y viento meridional en los trópicos
Título:
Gianella Botetano
Conclusiones:
Este estudio confirma las hipótesis de la pendiente M cuasi lineal fuera de rm a partir de
simulaciones idealizadas y la relación entre la pendiente M adimensional y la intensidad de
TC tanto de las simulaciones WRF idealizadas como del conjunto de datos EBT. Para un
TC bien organizado durante RI, la pendiente M cuasi lineal normalizada fuera de rm se
aplana con intensidad creciente.
La introducción del modelo SL proporciona una solución sencilla para reconstruir perfiles de
viento continuos fuera de la habitación.
En la práctica, utilizando rm, Vm, r17, todos disponibles a partir de estimaciones operativas,
y la Ecuación 4, se puede reconstruir el perfil completo de Vt (r) . Creemos que la
simplicidad de la Ecuación 4 y el buen ajuste utilizando el modelo SL para perfiles de viento
simulados WRF muestran grandes perspectivas para aplicaciones futuras, como validar
simulaciones/actualizaciones de asimilación de datos, proporcionar perfiles de viento para
cálculos de marejadas ciclónicas y emitir advertencias de vientos fuertes.
A pesar de los beneficios de utilizar supuestos de pendiente lineal M , vale la pena
mencionar las advertencias: el supuesto de pendiente lineal puede no comportarse bien
para CT bajo una fuerte asimetría (por ejemplo, CT débiles, desorganizadas o inclinadas).
Dado que esta pendiente lineal se encuentra a partir de un enfoque empírico, esperamos
que otras simulaciones u observaciones de modelos puedan proporcionar confirmación en
una gama más amplia de condiciones.
Resumen:
Mediante la ecuación de balance hídrico superficial se estima la escorrentía media anual en
la zona continental del dominio geográfico de Centro América para el programa Coordinated
Regional Climate Downscaling Experiment (CORDEX) y se validan los resultados en los
principales ríos de la región del Pacífico Colombiano: Atrato, San Juan, Baudó, Patía y Mira,
usando los registros de caudales medios mensuales de las estaciones hidrológicas del
Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (IDEAM), así como los
caudales reportados en el Estudio Nacional del Agua. Para la estimación de los campos de
precipitación se usa información de Tropical Rainfall Measuring Mission (TRMM) y Climate
Hazard group InfraRed Precipitation with Station data (CHIRPS), para la evapotranspiración
real se usa información del Max Planck Institute (MPI), así como los métodos de Choudhury
y Budyko partiendo de información de evapotranspiración potencial del Climatic Research
Unit (CRU). Los resultados obtenidos permiten concluir que sobre la región de estudio se
presenta un cierre casi perfecto en la ecuación de balance hídrico en los ríos Atrato y Patía,
con errores del orden de 1-20%, en contraste la cuenca del Río Mira presenta errores del
orden de 40%.
Conclusiones:
● Se usó la ecuación de balance hídrico de largo plazo para estimar los caudales
medios anuales de los principales ríos sobre la red hidrográfica del Pacífico. Para tal
fin, se utilizaron mapas de la precipitación y de evapotranspiración real.
● La validez del balance de largo plazo ha sido verificada con registros de caudales en
las cuencas de los ríos Atrato, San Juan, Patía y Mira. Los errores de estimación son
del orden de 10-20% en la subcuenca del Río Atrato (comparándolo con la estación
hidrológica) y de 1-8% (respecto al valor reportado por el ENA), confirmando la
calidad de las estimaciones para las cuencas de áreas considerables a la escala
espacial usada.
● La cuenca del Río Baudó posee la menor área de drenaje de las 5 estudiadas.
Debido a la resolución espacial usada para estimar los campos de escorrentía se
esperaría que los errores de estimación fueran mayores; sin embargo, se presentan
los menores errores de estimación respecto a los valores del ENA.
● Se puede concluir entonces que debido a que la resolución espacial, el producto
satelital de TRMM no logra captar la variabilidad de la precipitación en la cuenca y al
validar la información in situ y satelital se evidenció una marcada sobrestimación
(errores > 40%). El promedio estimado de CHIRPS representa de manera más
adecuada la precipitación sobre el área de la cuenca.
Título: Cambio interdecadal en la relación entre el chorro tropical del este y las
anomalías de la temperatura de la superficie del mar tropical en el verano
boreal.
De La Cruz La Rosa, Michael
Resumen:
Se estudia el cambio interdecadal en la relación entre el chorro tropical del este
(TEJ) y las anomalías de la temperatura de la superficie del mar tropical (SSTA) en
el verano boreal. Se ha descubierto que la relación de TEJ con las SSTA se
invierte en el Atlántico oriental tropical (EA), mientras que mejora obviamente en el
Pacífico oriental tropical (EP) después de 1981. Durante 1960-1980, una SSTA
similar al Niño Atlántico sobre el EA puede debilitar la TEJ a través de la anomalía
superior occidental de la circulación anómala de Walker entre EA y el Océano
Índico tropical. Mientras tanto, una SSTA similar a El Niño en el Pacífico sobre el
EP también puede disminuir la intensidad de TEJ a través de una respuesta de
onda Kelvin al este al calentamiento diabático inducido por una mayor precipitación in
situ.
Las observaciones y los experimentos con modelos muestran que las SSTA EA y
EP pueden contribuir a la variabilidad TEJ de manera conjunta o independiente.
Durante 1981-2001, a medida que la SSTA asociada similar a El Niño del Pacífico
aumenta en magnitud y extensión espacial, ejerce un impacto más fuerte en la
variabilidad de TEJ. A diferencia del período anterior a 1980, el SSTA sobre el EA
caracterizado por un patrón tipo Niña Atlántica en lugar de Niño podría debilitar el
TEJ, que no funciona sin la coexistencia del EP SSTA. Esta SSTA tipo Niña
Atlántica se desarrolla en la primavera anterior y fortalece la SSTA cálida sobre el
EP en verano, y luego afecta indirectamente a la TEJ. El cambio interdecadal de la
relación TEJ SST probablemente esté relacionado con los cambios de la variabilidad
y la configuración espacial de las SSTA tropicales.
Conclusiones:
● Se observa un cambio en la relación entre la corriente en chorro tropical (TEJ) y las
anomalías de temperatura de la superficie del mar (SSTA) durante décadas
específicas.
● La fuerza de la TEJ se relaciona con patrones específicos de SSTA en el Atlántico
oriental (EA) y el Pacífico oriental (PE), mostrando inversiones y mejoras notables.
● Durante 1960-1980, la TEJ débil está asociada con SSTA similar a El Niño en el
Atlántico y el Pacífico, afectando la circulación atmosférica.
● En la década de 1981-2001, la intensificación de SSTA similar a El Niño en el
Pacífico oriental tiene un impacto más fuerte en la TEJ, ahora asociada con una
Niña Atlántica.
● Las variaciones en SSTA EA y EP contribuyen de manera independiente y conjunta
a la variabilidad del TEJ.
● El cambio en la relación TEJ-SSTA se atribuye a la variabilidad y configuración
espacial de las SSTA.
Conclusión:
En este estudio, se aplicaron tendencias lineales a los campos atmosféricos en la región del
Pacífico durante el periodo 1992-2011 para examinar el papel del forzamiento atmosférico
del Pacífico, especialmente la aceleración de los vientos alisios, en los cambios en
temperatura, circulación y contenido de calor oceánico (OHC). Los resultados indican un
calentamiento en el subsuelo del Pacífico occidental, enfriamiento en la superficie del
Pacífico oriental y calentamiento en el subsuelo del Océano Índico, asociado con la
aceleración del PSOC e ITF. Estos hallazgos se alinean con las tendencias observadas de
temperatura durante el periodo 2003-2011. Experimentos adicionales sugieren que las
tendencias en los vientos atmosféricos del Pacífico explican principalmente la respuesta en
el Océano Índico subsuperficial. Se plantea que las tendencias atmosféricas durante la
reciente pausa en el calentamiento podrían contribuir al aumento de calor en ambos
océanos, y se destaca que un retorno a una fase neutral del IPO no revertiría
completamente los cambios en el contenido de calor oceánico debido a procesos no
reversibles.
Conclusion:
Los resultados anteriores indican una estructura compleja de la circulación meridional en el
Pacífico oriental, que en otoño puede describirse aproximadamente como dos células
meridionales superpuestas verticalmente [Nolan et al., 2007, 2010] (Figura 4a), mientras
que en primavera, la circulación tiene estructuras de células únicas hacia el polo de las dos
ITCZs, aunque justo al norte del ecuador la circulación muestra algunos indicios de células
dobles.
Nuestros resultados advierten que tanto los reanálisis basados en modelos como los
algoritmos de recuperación basados en tablas de búsqueda son problemáticos para
caracterizar la circulación convectiva en esta región. Aunque la campaña EPIC2001 fue una
fuente crucial de información para este estudio, es necesario implementar observaciones in
situ más completas y enfocadas. Nuevas misiones satelitales, como la Medición Global de
Precipitación [Smith et al., 2007], que puede medir lluvias ligeras y cuantificar
precipitaciones sólidas, y la próxima ADM-Aeolus [Agencia Espacial Europea et al., 2008],
que podrá medir perfiles de viento, proporcionarán información valiosa, pero necesitará ser
validada. El ciclo diurno de la precipitación [Bain et al., 2010] y la circulación meridional
[Takahashi, 2012] también deben tenerse en cuenta. Creemos que esta región debería ser
un foco importante para el proyecto Tropical Pacific Observing System 2020 [OOPC, 2014],
ya que esto podría ayudar a acelerar nuestros avances hacia la identificación y corrección
del origen del persistente sesgo de doble ITCZ en los modelos climáticos.
Tema 9: Variabilidad intraestacional en los trópicos
Título: Impactos de la oscilación de Madden–Julian en la variabilidad de la lluvia
intraestacional del Amazonas
Ghary Guevara
Resumen:
Desde el descubrimiento de la MJO, muchos estudios han investigado la estructura
horizontal y vertical, así como sus características de propagación, con el objetivo de
monitorear y pronosticar su actividad en la región tropical. Para lograr este propósito, se han
desarrollado muchos índices MJO, en los cuales el índice MJO multivariado en tiempo real
(RMM, por sus siglas en inglés), es el que más aceptación ha tenido en la comunidad
científica. Los índices MJO existentes podrían dividirse en tres tipos principales, los cuales
están en función de los datos de entrada que se usan para su cálculo: 1) aquellos que están
basados en la convección, que generalmente usan la variable OLR (Outgoing Long-wave
Radiation) para describir la propagación de la señal de la MJO, este índice se llamará OMI
de ahora en adelante; 2) los índices basados en circulación, que generalmente usan vientos
en la tropósfera inferior y superior ; y 3) índices MJO multivariados que combinan tanto la
parte convectiva como dinámica para representar mejor el desarrollo de la MJO.
Estudios anteriores han mostrado algunas ventajas y desventajas de cada índice, esto
dependiendo de sus aplicaciones. Por ejemplo, el índice MJO multivariado basado en la
velocidad potencial (VPM) muestra una correlación robusta con la actividad de los ciclones
tropicales. Además se encontraron que los índices MJO basados en convección son
capaces de representar mejor el impacto de la MJO en la variabilidad de la precipitación IE
sobre la cuenca amazónica
Conclusiones
El LEIC fluye hacia el oeste durante el otoño-invierno boreal y se invierte a una corriente
que fluye hacia el este durante la primavera-verano.
Sin embargo, en el año siguiente de los eventos de El Niño, el LEIC que fluye hacia el oeste
desaparece durante el otoño-invierno. Con la ayuda de un modelo oceánico lineal
continuamente estratificado, demostramos que la ausencia de El LEIC durante este período
está relacionado principalmente con campos de anomalías de presión en profundidades
intermedias causados por la surgencia fuera del ecuador hacia el oeste, primer modo
meridional y segundo modo baroclínico ondas de Rossby .
Estas ondas de Rossby son generadas por la curvatura de tensión del viento anticiclónico
asociada con la anomalía del viento del este en el Pacífico oriental y por el reflejo del límite
oriental de Kelvin ecuatorial, ondas inicialmente provocadas por la anomalía del viento del
oeste en el Pacífico central durante la etapa madura de El Evento el niño. Los dos orígenes
anteriores hacen contribuciones comparables a la variabilidad interanual.
Conclusiones
En base a un registro de fondeo de 4 años de corrientes zonales en 0°, 142°E, se encuentra
que el LEIC promedio que fluye hacia el oeste tiene una variabilidad interanual significativa.
El modelo LCS y el producto GL12 reproducen fielmente la variabilidad interanual del LEIC
y, por lo tanto, se utilizan para explorar su dinámica subyacente.
De las correlaciones del LEIC Ua observado durante 2014-2018 y GL12 y LCS modelaron
Ua durante 1993-2018 con el Niño ‐ índice 3,4 muestra valores máximos significativos
superiores a 0,61 con un retraso de aproximadamente 11 meses. Esta sugerencia que la
variabilidad interanual del LEIC está fuertemente influenciada por el ciclo ENSO. Ya que al
realizar una serie de experimentos LCS, demostramos que la variabilidad interanual está
estrechamente asociada con los cambios del viento durante la etapa madura de ENSO.
Conclusiones:
● El ciclo anual promedio que presentan las series analizadas muestra un
comportamiento bimodal, el cual es debido a factores de macroescala como la ZCIT,
el ENSO, las ondas del Este, las ondas de Madden – Julian, el chorro del Chocó y
factores geográficos locales.
● Los análisis de Fourier evidencian fuertes ciclos diurnos y/o semidiurnos. El
armónico que predomina depende de la localización y de la época del año, lo cual
está directamente relacionado con la existencia de uni y/o bimodalidad en el ciclo
diurno.
● Las estaciones analizadas sobre los Andes colombianos permiten distinguir tres
tipos de comportamiento diurno de la lluvia: (i) unimodalidad (con máximos en hora
variable) o multimodalidad, dependiendo del mes, (ii) bimodalidad, y (iii) bimodalidad
y unimodalidad alternantes dependiendo de la época del año.
● Se reafirma la fuerte asociación entre las dos fases del ENSO y el ciclo diurno
tropical de lluvia. El Niño disminuye la intensidad de los aguaceros a escala horaria
y lo contrario para La Niña. No parece haber incidencia de las fases de la Luna, ni es
clara ni definitiva la asociación con los huracanes del Atlántico tropical norte y
Pacífico oriental.
Conclusiones:
El desierto arenoso hiperárido del sur de Perú, al igual que el de Atacama en Chile, se
beneficia de los efectos de la nubosidad estratiforme, sobre todo, en la primavera, durante
las horas nocturnas y más en aquellos sectores cuya topografía menos contrastada permite
que la niebla venida del océano deposite parte de su contenido líquido que en los sectores
del litoral que tienen altos acantilados a 5 km de la costa.
conclusiones:
No tiene
Resumen:
El objetivo principal de este estudio fue analizar la conexión de las trayectorias de los
Complejos Convectivos de Mesoescala (MCC) con los sistemas sinópticos y la topografía
en el Nordeste brasileño (BNE) entre 2008 y 2017. Se utilizaron imágenes infrarrojas del
satélite METEOSAT para la identificación de los MCC a través de un Algoritmo de análisis
automático. Los sistemas sinópticos y de mesoescala se analizaron mediante datos de
reanálisis de NCAR/NCEP. La mayor frecuencia de casos se produjo durante las
temporadas de otoño y verano (46% y 40%, respectivamente). Los CCM que se
desarrollaron cerca del Ecuador y en el sector central de la BNE presentaron trayectorias
predominantes hacia el Oeste, mientras que los sistemas desarrollados cerca del Océano
Atlántico se desplazaron hacia el Este. El mayor efecto topográfico ocurrió en el estado de
Bahía, donde MCC se desarrolló relativamente cerca de la costa, sin cruzar la región
montañosa. Las trayectorias de MCC estaban directamente vinculadas a los sistemas
sinópticos asociados con sus respectivos orígenes. Los patrones de desplazamiento del
CCM se establecieron según la región y el sistema sinóptico.
conclusiones:
● Entre los años 2012 y 2020 arribaron a la mitad oriental de Cuba un total de 305
ondas tropicales siendo el promedio anual de 34 ondas.
● Las ondas tropicales afectan durante los meses de mayo a noviembre, aunque con
mayor frecuencia durante los meses de junio, julio y agosto, con un máximo absoluto
en el mes de julio.
● La mayoría de las ondas tropicales que llegaron a la mitad oriental fueron
clasificadas como “normales” teniendo en cuenta la velocidad de traslación y
“activas” según su actividad convectiva, con un total de 169 y 175 ondas,
respectivamente.
● En el análisis de la distribución de eventos severos en la mitad oriental se evidencia
que los de mayor frecuencia son las granizadas y las aeroavalanchas durante los
meses de julio y agosto; siendo esto de gran interés para el área de responsabilidad
de los pronósticos, ya que el resultado alcanzado en esta investigación se enmarca
en la labor básica de la vigilancia meteorológica.
● Se encontró la presencia de más de un fenómeno severo asociado al paso de una
onda tropical, demostrando la complejidad de la formación de estos eventos
severos, siendo los granizos y las aeroavalanchas los fenómenos que con más
frecuencia aparecen unidos.
● Durante los años analizados el fenómeno de lluvias intensas es el más frecuente al
paso de ondas tropicales por la mitad oriental; concentrándose el máximo en el mes
de agosto.
Conclusiones: (resumen)
El estudio investigó las fuentes de previsibilidad en las predicciones climáticas estacionales,
desde precipitaciones tropicales hasta ondas de Rossby y circulación invernal extratropical.
Las predicciones de lluvias tropicales mostraron alta habilidad, con el Pacífico Oriental
siendo el más hábil. La conexión entre cuencas y los efectos extratropicales fueron
destacados para futuras investigaciones. Se demostró que las ondas de Rossby
desempeñan un papel crucial en explicar las firmas extratropicales originadas a partir de las
variaciones anuales de las precipitaciones tropicales. Las trayectorias de los rayos se
calcularon utilizando la teoría de ondas lineales de Rossby, con conclusiones sobre la
influencia de los vientos zonales y la climatología del viento medio en las teleconexiones.
Finalmente, se resaltó la importancia de las ondas de Rossby y la propagación de ondas
largas estacionarias en la respuesta estacional a la variabilidad de las precipitaciones
tropicales. La investigación también contribuye a explicar la fuente de previsibilidad en los
pronósticos estacionales de la NAO utilizando índices regionales de precipitaciones
tropicales.
Conclusiones (largas):
Hemos seguido las fuentes de previsibilidad en predicciones climáticas estacionales conjuntas
desde las precipitaciones tropicales hasta la fuente troposférica superior de las ondas de
Rossby y la circulación invernal extratropical a través de las ondas barotrópicas de Rossby.
Nuestras predicciones estacionales de lluvias tropicales exhiben altos niveles de habilidad de
predicción en todas las cuencas oceánicas. El Océano Índico es el menos hábil (r = 0,59) y
el Pacífico Oriental es el más hábil con una puntuación de correlación casi perfecta (r =
0,96). Esta habilidad surge a pesar de importantes sesgos medios en las precipitaciones
tropicales, lo que sugiere que cualquier no linealidad en la variabilidad de las precipitaciones
tropicales es insuficiente para destruir la capacidad de predicción en estas escalas de tiempo.
Obsérvese también que la amplitud de las señales medias del conjunto es similar a la
amplitud de la variabilidad observada de un año a otro, lo que sugiere que gran parte de la
variabilidad observada de las precipitaciones tropicales es predecible.
Además, estas grandes señales predecibles en las precipitaciones tropicales también sugieren
que la discrepancia identificada recientemente entre las puntuaciones de habilidades y la
relación señal-ruido en las predicciones invernales de la NAO (Eade et al., 2014; Scaife et al.,
2014; Siegert et al. ., 2016) es poco probable que se origine directamente por un error en la
amplitud de las precipitaciones tropicales previstas, al menos en las regiones consideradas
aquí.
Aunque no se investigaron explícitamente aquí, las conexiones entre cuencas merecen
estudios futuros, especialmente porque algunos modelos pueden tergiversarlas (Molteni et al.,
2015), y los efectos extratropicales que emanan de diferentes cuencas oceánicas muestran
interferencia de las olas (Fletcher y Cassou, 2015). ).
Dados los alentadores niveles de previsibilidad de las precipitaciones tropicales, mostramos
grandes señales extratropicales asociadas en el flujo de la troposfera superior. El alto grado
de simetría de estos patrones respecto del ecuador es consistente con una fuente tropical.
Además, las correlaciones entre las precipitaciones tropicales y el flujo extratropical en
nuestras predicciones sugieren que los trópicos están actuando como una fuente importante
de previsibilidad para los extratrópicos.
La dinámica de las ondas de Rossby contribuye en gran medida a explicar las firmas
extratropicales que se originan a partir de las variaciones de las precipitaciones tropicales de
un año a otro. Demostramos que las fuentes de ondas de Rossby provenientes de gradientes
de vorticidad y flujo divergente alcanzan un pico fuerte en la troposfera superior, alrededor de
200 hPa, y se predicen hábilmente en las escalas de tiempo estacionales consideradas aquí.
Curiosamente, la fuente de ondas de Rossby muestra "puntos calientes" altamente localizados
que son relativamente pocos en número. Esto se debe en parte a que están anclados en
regiones de gran gradiente de vorticidad en el borde de las corrientes en chorro subtropicales
y extratropicales en lugar de estar en los trópicos muy profundos y en parte a las
importantes conexiones de lluvia entre cuencas. Por lo tanto, los mismos "puntos críticos"
para la generación de ondas de Rossby están activos durante episodios bastante diferentes
de lluvia tropical y los mismos trenes de ondas lineales forzadas parecen estar asociados con
una variedad de anomalías de lluvia diferentes.
Dada la ubicación de las fuentes de ondas, utilizamos la teoría de ondas lineal de Rossby
para calcular las trayectorias de los rayos. De las pruebas de sensibilidad concluimos que:
• Los vientos zonales deben ser promedios sectoriales en la escala de la
ondas: normalmente 60◦.
• La curvatura del viento uyy puede despreciarse para la mayoría de los propósitos.
• Los vientos zonales de la troposfera superior a 200 hPa son el
flujo medio más apropiado.
• El paso del tiempo cada 2 h es adecuado para la mayoría de los propósitos.
Las fluctuaciones transitorias y de un año a otro en los vientos zonales podrían, en principio,
alterar las características de propagación media estacional y estos serían aspectos
interesantes para examinar en estudios futuros. Sin embargo, si la climatología del viento
medio en nuestras predicciones se reemplaza con la climatología observada, entonces e
producen muy pocos cambios en las trayectorias de los rayos, lo que sugiere el sorprendente
resultado de que cualquier error en las teleconexiones puede no deberse principalmente a la
sensibilidad de la propagación de las ondas a los errores en los vientos de fondo, al menos
en los pronósticos estacionales analizados aquí. Esto es importante porque implica que las
mejoras en la capacidad de pronóstico estacional regional pueden provenir de fuentes
mejoradas de ondas de Rossby o de retroalimentaciones locales en lugar de una mejor
propagación de las ondas. Con nuestra metodología refinada finalmente pudimos mostrar
rayos que cruzan muchas de las anomalías de circulación modeladas y que la propagación
hacia el noreste de ondas largas estacionarias puede dominar la respuesta estacional a la
variabilidad de las precipitaciones tropicales en muchas situaciones.
Últimamente se ha informado sobre la habilidad de pronóstico estacional extratropical
principalmente en invierno y puede haber buenas razones para ello. Por ejemplo, ENSO tiende
a alcanzar su punto máximo en invierno, y la estratosfera, que está relacionada con la
previsibilidad de la NAO en invierno extratropical (Sigmond et al., 2013; Scaife et al., 2016),
solo está dinámicamente activa en invierno (por ejemplo, Kidston et al. , 2015). De hecho,
estos dos factores también están relacionados porque las teleconexiones ENSO tienen un
camino a través de la estratosfera (Manzini et al., 2006; Bell et al., 2009) y esto nuevamente
bloquea la respuesta al invierno y amplifica la firma de la NAO en los extratrópicos (Ineson y
Scaife, 2009). De manera similar, el mecanismo investigado aquí agrega una tercera
explicación para la preferencia por la habilidad invernal, porque opera preferentemente en
invierno, cuando los vientos son del oeste y la propagación de las olas se apoya en un
dominio amplio.
La investigación de las teleconexiones de lluvias tropicales presentada aquí ayuda a explicar
la fuente de previsibilidad en los pronósticos estacionales de la NAO. Aunque se han
identificado otras fuentes en otros lugares, mostramos aquí que utilizando sólo cuatro índices
regionales de precipitaciones simples pudimos explicar una proporción muy significativa de la
variabilidad prevista de la NAO.
Tema 18: Línea de Inestabilidad
Título: PROPAGACIÓN DE LÍNEA DE INESTABILIDAD QUE ORIGINARON EPISODIOS
DE INUNDACIONES EN JAVABALI, INDONESIA
Luis Paredes
Resumen :
El artículo examina un evento inusual de propagación de una línea de inestabilidad a lo
largo de Sumatra, que desencadenó peligros meteorológicos en el norte del Marítimo de
Indonesia, incluyendo Sumatra y Kalimantan. Este fenómeno, ocurrido entre el 22 de mayo
y el 2 de junio de 2020, resultó en una severa marejada ciclónica e inundaciones costeras
en Java-Bali. Utilizando un enfoque integral que combina estudios observacionales,
numéricos y analíticos, se propone un mecanismo posible relacionado con esta línea de
inestabilidad de larga duración en el Marítimo de Indonesia, una región tropical ecuatorial
con interacciones aire-mar complejas. Se descubre que la línea de inestabilidad, iniciada
como tormenta multicelular sobre Sumatra central el 20 de mayo de 2020, se propagó de
manera constante hacia el sureste hasta alcanzar Bali varios días después. La línea
convectiva casi constante viajó aproximadamente 6 horas desde Sumatra central hasta
Java occidental. El desarrollo rápido tipo supercélula desde una tormenta multicelular se
atribuye a una corriente ascendente convectiva profunda bajo un pozo frío fuerte y rápido
(~13.8 m/s). La propagación posterior de la línea de inestabilidad con un patrón de línea
quebrada parece ser reforzada por el transporte de humedad a nivel bajo desde el Mar de
Java. Además, se plantea la posibilidad de que eventos inusuales de líneas de inestabilidad
de larga duración sean más frecuentes en el calentamiento del océano superior de
Indonesia.
Conclusiones:
Resumen/Abstract:
Se evaluó el impacto de la resolución horizontal atmosférica en la capacidad de predicción y
la fidelidad de los pronósticos estacionales. Se mostró la respuesta a un aumento de la
resolución atmosférica de 0,8 a 0,3.-espaciado de cuadrícula horizontal en conjuntos
paralelos de pronósticos. Los cambios en la habilidad de predicción de los modos
principales de la variabilidad de la Oscilación del Sur (ENSO) de El Niño tropical y de la
Oscilación del Atlántico Norte (NAO) extratropical son pequeños y no se detectan y no hay
un impacto discernible en la débil relación señal-ruido en las predicciones estacionales de la
NAO de invierno en este rango de resoluciones. Aunque los estudios han demostrado
mejoras en la simulación de ciclones tropicales a medida que aumenta la resolución del
modelo, encontramos poco impacto en la capacidad de predicción estacional de su número
o intensidad. En este rango de resoluciones parece que el beneficio de aumentar la
resolución atmosférica para las predicciones climáticas estacionales es mínimo. Sin
embargo, en escalas aún más finas parece haber una mayor retroalimentación de remolinos
que podría fortalecer las señales débiles en las predicciones de la NAO. Hasta que los
sistemas de predicción puedan ejecutarse operativamente a estas escalas, puede ser mejor
utilizar recursos informáticos adicionales para otras mejoras, como el aumento del tamaño
del conjunto, para lo cual existe un claro beneficio en la habilidad de predicción estacional
extratropical.
Conclusiones
- Aunque ningún estudio puede llevar a cabo un análisis completo de la habilidad
retrospectiva estacional, se examinó la habilidad de los principales modos de
variabilidad tropicales (ENOS) y extratropicales (NAO) y los que posiblemente sean
los eventos hidrometeorológicos extremos más devastadores (ciclones tropicales);
Se ha demostrado previamente que todos ellos exhiben previsibilidad en escalas de
tiempo estacionales.
- Se encontró poco impacto si se duplicara la resolución horizontal atmosférica de
0,83 a 0,35.-sobre predicciones estacionales de ENOS, la NAO o ciclones tropicales.
Sin embargo, se encontró evidencia de una mayor retroalimentación de remolinos de
pequeña escala con una resolución mucho mayor que podría fortalecer las señales
previstas en los pronósticos estacionales de la NAO.
- Hasta que la resolución pueda implementarse en los sistemas de predicción por
conjuntos, puede ser mejor aumentar el tamaño del conjunto, la resolución vertical o
quizás la resolución oceánica para mejorar la habilidad de los sistemas de predicción
estacional operacionales globales
Conclusiones: