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INTRODUCCION

En este trabajo hablaré sobre La Guerra Fría. Fue un enfrentamiento político,


ideológico, económico y cultural que tuvo lugar entre 1945 y 1989 entre dos bloques de
países liderados por los Estados Unidos (EE.UU.) y la Unión de Repúblicas Socialistas
Soviéticas (URSS).
Finalmente, en 1989 tuvo lugar la Cumbre de Malta, durante la cual Gorbachov y el
sucesor de Reagan, George Bush, anunciaron el fin de la Guerra Fría y en diciembre de
1991 desaparecía oficialmente la URSS, que se dividió en las repúblicas postsoviéticas
actuales.

Guerra fría
La Guerra Fría es el periodo entre el fin de la Segunda Guerra Mundial en 1945 y de la
Unión Soviética en 1989 que dividió al mundo en el bloque occidental capitalista,
liderado por Estados Unidos, y el oriental comunista, encabezado por la URSS. Entre
ambas superpotencias existía una tensión permanente, escalada por la carrera
armamentista y el desarrollo de armas nucleares. Como temían destruirse, nunca
llegaron a una guerra directa, pero sus enfrentamientos provocaron conflictos locales.

La rivalidad de las dos superpotencias.

La ruptura definitiva entre Estados Unidos y la URSS llegó en 1947. Entonces,


resurgieron las desconfianzas que ya existían desde la Revolución rusa de 1917, cuando
Estados Unidos apoyó a las fuerzas zaristas para expulsar a los bolcheviques del poder,
y que se habían dejado de lado para luchar contra el nazismo. Europa estaba exhausta
tras la Segunda Guerra Mundial, lo que generó un vacío de poder que aprovecharon
Washington y Moscú, vencedores principales, para expandir su influencia y convertirse
en las potencias económicas y militares hegemónicas.

No fue un enfrentamiento armado directo, sino que constituyó una amenaza permanente
de conflicto entre los dos bandos.
Cada uno de los bloques se organizó mediante tratados de cooperación, ayuda mutua y
apoyo militar.

Etapas

Primera Guerra Fría (1945-1962)

Durante esta etapa EE. UU. y la URSS compitieron por extender su influencia en
Europa, Medio Oriente, América Latina y los nuevos Estados de Asia y África. Las
principales crisis de estos años fueron el bloqueo de Berlín (1948-49), la fase final de
la guerra civil china (1946-49), la guerra de Corea (1950-53), la guerra del Sinaí (1956),
la construcción del Muro de Berlín (1961) y la instalación de misiles soviéticos en
Cuba (1962).

La distensión (1962-1979)

Los problemas económicos que evidenció el bloque oriental llevaron a la URSS a


disminuir sus intervenciones militares. La excepción fue la invasión de Checoslovaquia,
que en 1968 puso fin a la Primavera de Praga.
EE.UU., por su parte, padeció el escándalo Watergate, que forzó la renuncia del
presidente Richard Nixon, y la derrota en la guerra de Vietnam. Esta última debilitó su
influencia en los países del Tercer Mundo, que constituyeron el Movimiento de Países
No Alineados.

Segunda Guerra Fría (1979-1985)

La coexistencia pacífica llegó a su fin en 1979, cuando la URSS invadió Afganistán y


apoyó tanto a la Revolución Islámica como a la Revolución Sandinista, que derrocaron
a los gobiernos pro occidentales de Irán y Nicaragua, respectivamente.
El presidente estadounidense Jimmy Carter reaccionó incrementando los gastos
militares y boicoteando los Juegos Olímpicos de Moscú de 1980. Su sucesor, Ronald
Reagan, enunció la doctrina Reagan, que postuló el derecho de su país a derrocar a los
gobiernos comunistas y a enfrentarse a los soviéticos en cualquier lugar del mundo.
Basándose en estos postulados, Reagan invadió Granada (1983),
bombardeó Libia (1986), dio asistencia a las guerrillas islámicas que luchaban contra
los soviéticos en Afganistán y apoyó a los contras nicaragüenses.

Fin de la Guerra Fría (1985-1989)

La escalada militar estadounidense no pudo ser contestada por la URSS, cuyos gastos
militares representaban el 25 % de su PIB en 1980. Esta situación, sumada a la
disminución de sus divisas debido a la baja de los precios internacionales del petróleo,
puso en crisis a la economía soviética. Los esfuerzos del nuevo líder comunista, Mijaíl
Gorbachov, para reducir los gastos militares culminaron en las cumbres internacionales
de Ginebra (1985), Reikiavik (1986) y Washington (1987), durante las cuales acordó
con Reagan la disminución de los respectivos arsenales nucleares.
Pero la apertura hacia Occidente y la distención entre las superpotencias tuvieron como
efecto secundario el desplazamiento de los gobiernos socialistas de Europa oriental.
Finalmente, en 1989 tuvo lugar la Cumbre de Malta, durante la cual Gorbachov y el
sucesor de Reagan, George Bush, anunciaron el fin de la Guerra Fría.

Causas y consecuencias
Causas

La decisiva participación de la URSS y EE.UU. en la Segunda Guerra Mundial,


apuntalando al bando aliado, en el que Gran Bretaña y sus excolonias resistían en
soledad el avance de la Alemania nazi.
Los bombardeos atómicos de Hiroshima y Nagasaki, que constituyeron una velada
amenaza de EE.UU. a una URSS que estaba a punto de sumarse a la guerra contra
Japón.
La ambición de los dirigentes de EE.UU. y de la URSS de extender su ideología y
su modelo de organización política, económica y social a todo el mundo.
La imposición de gobiernos aliados a Moscú en los países de Europa oriental.
El Plan Marshall, por el cual los estadounidenses concedieron créditos a bajos intereses
a los países de Europa occidental devastados por la guerra, para evitar que cayeran en
manos de partidos comunistas aliados a Moscú.

Consecuencias

La polarización del mundo en dos bloques, el procomunista y el anticomunista. Esto se


manifestó en la persecución de los dirigentes de izquierda en varios países de Occidente
y en la proscripción de los partidos no comunistas en la URSS y los países del bloque
oriental. En EE.UU. cobró fuerza el macartismo, una especie de «caza de brujas»,
durante la cual se hicieron acusaciones de traición a la patria, sin ninguna consideración
a los derechos legales de los acusados.
La represión por parte del Pacto de Varsovia de cualquier intento de deponer a los
gobiernos títeres de Moscú, como ocurrió en Hungría en 1956 y en Checoslovaquia en
1968.
La desmesurada injerencia de EE.UU. en la política interna de los países americanos y
su apoyo a golpes de Estado que derrocaron a gobiernos izquierdistas, como el de
Salvador Allende en Chile, en 1973.
La acumulación de armas en los países satélites de las grandes potencias, que luego de
la Guerra Fría se utilizaron en guerras civiles o fueron redirigidas a organizaciones
guerrilleras.
El desarrollo de movimientos antibelicistas y antinucleares internacionales como
consecuencia de la amenaza permanente del estallido de una guerra nuclear.

La Guerra Fría en el resto del mundo

La tensión aumentó con la crisis de Berlín en 1949 —que dividió Alemania en un país
capitalista y otro comunista—, el final de la guerra civil china ese mismo año y el inicio
de la guerra de Corea al siguiente. Además, la URSS probó con éxito su primera bomba
atómica, lo que disuadió a Estados Unidos e instauró el temor a la destrucción mutua.
Aunque hubo episodios de riesgo límite, como la crisis de los misiles en Cuba de 1962,
se pudo evitar el enfrentamiento nuclear.
Sin embargo, las dos superpotencias se enfrentaron indirectamente en varios conflictos.
Por un lado, en la guerra de Vietnam (1955-1975) se impusieron las fuerzas socialistas
con el apoyo de la URSS, China y Cuba, dando un duro golpe a Estados Unidos. Por
otro, en la guerra de Afganistán (1978-1992), los insurgentes islámicos
fundamentalistas, los muyahidines, contaron con ayuda estadounidense para desgastar al
régimen socialista y a los soviéticos hasta provocar su retirada.

Los historiadores consideran que la Guerra Fría terminó con la caída del Muro de
Berlín en 1989 y la posterior desaparición de la Unión Soviética en 1991.
Sin embargo, la división del mundo en dos bloques se mantiene en la actualidad entre
gobiernos con ideologías muy diferentes. En ese sentido, Estados Unidos mantiene su
pulso particular con países comunistas como la Cuba de la familia Castro, el régimen de
Corea del Norte o el gobierno comunista chino.
Por otro lado, Rusia, el país más importante de la antigua URSS, sigue rivalizando
con Estados Unidos para extender su influencia a nivel global. Ambos gobiernos
quieren mantener su autoridad y, para conseguirlo, se posicionan en conflictos
internacionales.
Uno de los últimos ejemplos es la guerra de Siria: Rusia se alió con el régimen sirio de
Bashar el Asad, mientras que Estados Unidos apoyó a rebeldes sirios y kurdos.

CONCLUSION

Durante décadas, estadounidenses y soviéticos compitieron por extender su


influencia en muchos ámbitos, todo por demostrar que su sistema era mejor.
Por suerte, su rivalidad nunca llegó a estallar en una guerra, por eso a este
enfrentamiento se le llama “Guerra Fría”.
Pero como podemos ver, en la actualidad continua la rivalidad entre estos dos países,
por ejemplo, los Estados Unidos han exportado el sistema capitalista a la mayoría
de países occidentales. Pero también han tratado de influir de forma ilícita en el gobierno
de países extranjeros apoyando varios golpes de estado. En cuanto a Rusia, instauró el
sistema comunista en sus territorios, pero también lo exportó a países
como China, Cuba o Venezuela. En un país comunista, el gobierno es propietario de los
recursos públicos para distribuirlos entre la sociedad.

BIBLIOGRAFIA
https://elordenmundial.com/que-fue-la-guerra-fria-por-la-que-estados-unidos-y-la-urss-
dividieron-al-mundo/
De la Guardia, Ricardo Martín. La caída del Muro de Berlín. El final de la Guerra
Fría y el auge de un nuevo mundo. Madrid, La Esfera de los Libros. 2019.
Hobsbawm, Eric. Historia del siglo XX. Buenos Aires, Crítica Grijalbo Mondadori.
1998.
Leffler, Melvin P. La guerra después de la guerra. Estados Unidos, la Unión
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Lozano, Álvaro. La Guerra Fría. Santa Cruz de Tenerife, Melusina. 2017.
Westad, Odd Arne. La Guerra Fría, una historia mundial. Madrid, Galaxia
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