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23 de enero de 2024

Universidad Nacional Experimental del Transporte


Departamento de Procesos Químicos
Ingeniería Ambiental
Génesis Salazar C.I 30.136.796

ENSAYO SOBRE LOS TRATAMIENTOS TERCIARIOS DE AGUAS RESIDUALES.


Una planta de tratamiento de aguas residuales tiene como objetivo principal eliminar los sólidos
presentes en el agua, reducir la cantidad de materia orgánica y contaminantes, y restablecer los niveles
adecuados de oxígeno. Para lograr esto, se utilizan bacterias y microorganismos beneficiosos que se
encargan de consumir la materia orgánica presente en el agua residual. Estos organismos son
posteriormente separados del agua tratada. La restauración del oxígeno es un aspecto crucial, ya que el
agua tratada debe contener la cantidad suficiente de oxígeno para mantener la vida acuática. En
conclusión, una planta de tratamiento de aguas residuales busca purificar el agua residual mediante
procesos biológicos y físicos para asegurar su adecuada calidad antes de ser devuelta al medio ambiente.

El tratamiento terciario es el procedimiento más completo para tratar el contenido de las aguas
residuales, pero no ha sido ampliamente adoptado por ser muy caro. La finalidad de los tratamientos
terciarios es eliminar la carga orgánica residual y aquellas otras sustancias contaminantes no eliminadas
en los tratamientos secundarios, como, por ejemplo, los nutrientes, fósforo y nitrógeno. consiste en un
proceso físico-químico que utiliza la precipitación, la filtración y/o la cloración para reducir
drásticamente los niveles de nutrientes inorgánicos, especialmente los fosfatos y nitratos del efluente
final. El agua residual que recibe un tratamiento terciario adecuado no permite un desarrollo microbiano
considerable. Estos procesos son de naturaleza biológica o físico química, siendo el proceso unitario más
empleado el tratamiento físico-químico. Este consta de una coagulación - floculación y una decantación.
Algunos de estos tratamientos son los siguientes: La desnitrificación es un proceso que implica la
reducción del nitrato a nitrito y, posteriormente, a compuestos de nitrógeno gaseoso, como el óxido
nítrico (NO), el óxido nitroso (N2O) y el nitrógeno diatómico (N2), en presencia de una fuente de
carbono orgánica. Durante este proceso, el nitrato y el nitrito reemplazan al oxígeno en la cadena de
transporte de electrones de los microorganismos involucrados en la respiración. ocurre en ambientes
anóxicos, es decir, aquellos carentes de oxígeno, donde hay disponibilidad de nitrito y nitrato como
aceptores de electrones. Esta ausencia de oxígeno crea las condiciones propicias para que los
microorganismos desnitrificantes utilicen el nitrato y el nitrito en lugar del oxígeno para la respiración
microbiana. Hay una amplia variedad de microorganismos involucrados en las reacciones de
desnitrificación, lo que les confiere la capacidad de adaptarse a una amplia gama de ambientes naturales.

La suavización o ablandamiento del agua es la eliminación de calcio y magnesio del agua dura, es una
operación en la que se utiliza un material, habitualmente denominado resinas de intercambio iónico, que
es capaz de retener selectivamente sobre su superficie los iones disueltos en el agua, los mantiene
temporalmente unidos a la superficie, y los cede frente a una disolución con un fuerte regenerante. La
aplicación habitual de estos sistemas, es por ejemplo, la eliminación de sales cuando se encuentran en
bajas concentraciones.

El principio de la ultrafiltración es la separación física. Es el tamaño de poro de la membrana lo que


determina hasta qué punto son eliminados los sólidos disueltos, la turbidez y los microorganismos. Las
sustancias de mayor tamaño que los poros de la membrana son retenidas totalmente la cual, permite
retener moléculas cuyo tamaño oscila entre 0.001 y 0.1 µm.

La osmosis inversa consiste en aplicarle a la disolución concentrada una presión superior a la osmótica,
produciéndose el paso de disolvente (agua) desde la disolución más concentrada a la más diluida hasta
alcanzar un nuevo equilibrio. Usando esta técnica, se elimina la mayor parte del contenido en sales del
agua. La desinfección es el paso final antes de distribuir las aguas residuales ya tratadas al ambiente, y
es para matar microorganismos que pueden representar un peligro para la salud.
Este proceso, llamado desinfección puede ser alcanzado agregando cloro, exponiendo el agua residual a
rayos ultravioletas o mediante la ozonización. Mediante Sistema de Cloración, La cloración del agua
residual es una forma sencilla y económica de tratamiento terciario para la reutilización del agua en riego
de jardines y plantas. Consiste en mantener un contenido adecuado de cloro libre en el depósito final de
distribución para evitar la proliferación de microorganismos y hacerla apta para su reutilización. Se
pueden utilizar diferentes métodos de cloración, como sistemas automáticos de medición y control de la
dosificación de cloro libre mediante sondas de cloro libre o de redox, o dosificación proporcional al
caudal de agua depurada utilizando un contador/emisor de impulsos. Mediante Radiación Ultravioleta
(luz ultravioleta) para este proceso la desinfección se realiza mediante un equipo UV que proporciona
una desinfección inmediata y más efectiva que la cloración. Otra ventaja añadida es que no requiere de
depósitos de contacto ya que la desinfección se realiza de forma instantánea mediante el paso de agua
por el equipo de tratamiento ultravioleta lo que favorece este tipo de tratamiento terciario cuando no se
disponga de espacio suficiente para un tratamiento con cloro o con ozono. Para asegurar el buen
funcionamiento del equipo ultravioleta es necesario un correcto sistema de filtración para eliminar
turbidez y asegurar una transmisión adecuada de la radiación ultravioleta en el flujo de agua a tratar y
mediante ozonización, el ozono es un poderoso oxidante y desinfectante con una velocidad de
esterilización superior a la de un tratamiento convencional de cloro aumentando su eficacia. Esto permite
tratamientos con ozono con tanques de contacto muy reducidos ya que únicamente son necesarios unos
tres minutos de tiempo de contacto para asegurar la desinfección.

Los tratamientos terciarios de aguas residuales desempeñan un papel fundamental en la mejora de la


calidad del agua tratada y en la protección del medio ambiente. La desnitrificación, la desinfección por
cloración, la ozonización, la radiación UV, el suavizado, la microfiltración y la osmosis inversa son solo
algunos ejemplos de los procesos utilizados para lograr estos objetivos. Estas tecnologías permiten la
eliminación de contaminantes específicos, la reducción de riesgos para la salud humana y la protección
de los ecosistemas acuáticos. Sin embargo, es importante tener en cuenta los aspectos relacionados con
la sostenibilidad de estos tratamientos, como la generación de subproductos y el consumo energético.
En el futuro, se espera que los avances tecnológicos y las prácticas de gestión adecuadas permitan
mejorar la eficiencia y la sostenibilidad de los tratamientos terciarios, garantizando así un suministro
seguro y sostenible de agua para las generaciones futuras.

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