- Considerada como un alimento nutritivo y curativo, la cebolla limpia, desinfecta,
nutre, fortifica y cura. Especialmenteindicada contra trastornos cerebra- les, caída del cabello, afecciones de la piel, cáncer y riñones.
casi todas la enfermedades y trastornos tienen su origen en el mal funcionamiento de los
órganos elíminadores del cuerpo, tales como el aparato renal (riñones y vejiga), el aparato digestivo (particularmente los intestinos), los pulmones y la piel, y cuando éstos no eliminan y expulsan las toxinas residuales del metabolismo, éstas se acumulan en el organismo, en forma de ácido tirico y otros elementos morbosos, enve- nenando la sangre. Casi todas la enfermedades se deben al estreñimiento y a la escasa secreción de orina. Debe procurarse que los riiiones y la vejiga funcionen norrnal- mente, para que el ácido rjrico tan perjudicial y que tantas enferme- dades provoca, sea expulcado sin cesar. Muchas enfermedades y moles- tias desaparecen de esta manera. Y ese normal funcionamiento del aparato renal se obtiene tomando en abundancia tisanas diuréticas, de las que se describen un buen numero más adelante. Siendo general- mente necesario para los riñones un tratamiento a base de calor, tomense muchos baños de asiento con agua caliente y un baño de vapor a la semana. Los baños de sol y las cataplasmas de barro sobre los rinones y sobre la región de la vejiga son muy utiIes para ayudar a la expulsión del ácido úrico.Las catdplasmas sobre la región renal no deben ser frías. La cebolla es un remedio diurético y curativo de primera cate- goria. Por eso aconsejamos vivamente a nuestros lectores aplicar a me- El fluido de la cebolla hace que el sueño agradable y profundo invada todo el sistema. El fenómeno se produce al entrar en juego la higiene del cuerpo nervioso de la c ~ l u l acon la oxigenación química del fondo de la esencia virgen y viva de la cebolla, ya sea medio asada al horno, o cruda, o bien hervida y preparada en forma de sopa. El verdadero secreto está en tomar abundante cantidad de cebolla. Al decir cantidad, nos referimos a dos o tres cebollas, de buen tamaño, cada vez, inteligentemente hervidas, cortadas bien finas y cocidas en agua hirviente, dejándolas cocer a fuego vivo durante unos 15 minutos. A veces se puede adicionar al hervido de cebolla una cucharada de arroz blanco, otras veces una patata o un par de cucharadas de harina de maíz, o copos de avena y aderezar con un poco de queso rallado (tier- no). También puede cocerse la cebolla con un poco de tomillo. Se recomienda, especialmente, tomar la sopa de cebolla por la noche con el fin de conseguir un sueno tranquilo. En el tratamiento de la diabetes, la cebolla desempeiia un papel curativo y regenerador muy importante. El diab6tico necesita que se l e purifique la sangre; la cebolla desinfectd y depura ! a sangre, eliminando los tóxicos que contiene, tornándola más cana, más limpia y más fuerte. Con el ácido fosfórico, hierro, calcio, yodo, azufre, magnesio, sodio, y fluor que se aportan a la sangre por la ingestión de mucha cebolla, se corrige paulatinamente la anemia. Regenerando las células de la sangre con la dieta natural, Estac asimilarán fácilmente todas la pro- piedades de los demás alimentos medicinales. La toxemia y la disemia de la sangre se curan con el azufre y el ácido al ilico de la cebolla. Es muy recomendable la cebolla, cruda o cocida, para aquellas personas que tienen poco cabello o para los que sufren alopecia (caída del cabello). El gran subctrato de calcio que contiene la cebolla, así como el fósforo y magnesio, son perfectamente asimilables por las cé- lulas reoforas del sistema intercapilar. A los que padecen de la vista (miopía, fatiga visual, presbicia, ceguera nocturna, congestiones, cataratas, etc.) les conviene aplicarse cada noche a los ojos un poco de zumo de cebolla, y podrán comprobar el buen resultado de esta práctica.