Las siete tentaciones

PERSONAJES
Pastores Ángeles:
Pecados Micaela San Rafael
Ira Jacinta San Miguel
Soberbia Genoveva José
Envidia Liborio María
Lujuria Jovita
Pereza Octaviano Staff
Gula Flor
Codicia Candelaria

Liborio:Principiamos
Micaela: Qué noche más bonita
Jacinta: Como que las estrellas están más grandotas que nunca, hasta parece que las puedo tocar con la
mano, mira (toca la estrella de utilería)
Genoveva: Qué se me hace que esta noche no es Como todas.
Micaela: Cuando veníamos para acá, el campo estaba iluminado como si fuera de día.
Liborio: Regálame ta ta tantito café pa'l frío (todos toman café)
Jacinta: Oigan, no escuchan una música re bonita...
Micaela: ¿Cuál música? a este ya se le subió el piquete del café
Liborio: Ha de ser tu tu iPod
Jacinta: No, de veras, a lo lejos, se oye una música re linda (trompetas celestiales)
Liborio: Miren, mi mi miren
San Rafael: ¡México, ya llegó, ya esta aquí, el Arcángel.... Saaan Miguel!
San Miguel: Gloria a Dios en las alturas y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad (todos se
amontonan y empujan para verlo). Llenad de gratitud vuestro corazón pues vengo a darles la más
grande dicha, pronto nacerá quien llevará a cuestas sus grandes culpas e intercederá por ustedes
ante Dios nuestro Señor, para lavar con su sangre vuestros pecados. Cuando vean en el cielo una
estrella grande que brilla intensamente, esa…
Pastores: Esa, esa, ahí está
San Miguel: No, esa no. Digo que esa será la señal para que se pongan en camino a rendir pleitesía al hijo de
Dios, que con humildes pañales hallarán en un humilde pesebre. Vayan pastores, que en Belén le
encontrarán, ahora vayan y recordad que todos, pobres y ricos, viejos y jóvenes, feos y
hermosos, tienen la misma dicha de ofrecerle su amor. Y también recordad, debe haber verdad y
alegría, pero sobre todo mucho, mucho amor... Esta es la noche más venturosa que el mundo
habrá visto jamás, preparad pues vuestros corazones, id hacia Belén, que por obra y gracia del
hijo de Dios esta noche es Noche Buena, y mañana Navidad. (Trompeta)
Liborio: ¿Lo oyeron todos, lo lo e escucharon?
Pastores: Milagro, milagro
Jacinta: Pues qué esperamos, vamos a darles la noticia a todos los demás
Liborio: Agarren sus caca…
Todos: ¿Eeeeehhh?
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Liborio: sus ca cachivaches
Pastores: Sí, sí, vamos
Jovita: Se me ocurre algo, vayamos cantándole al hijo de Dios
Liborio: Está bien, ¡arránquense con El Rey!
Genoveva: ¿Cómo que El Rey?
La rama
Genoveva: Ya me cansé (pisa a Candelaria)
Candelaria: ¡Ay! Chin…
Jacinta: ¡Cuidado! no se deben decir esas palabrotas
Genoveva: No la regañes, los humanos a veces cometemos errores
Octaviano: Sí, allá está jugando uno que yo cometí
Jacinta: ¿Qué creen, qué creen? que todos estábamos allí ajuerita cuando de repente que se nos aparece
un señor, de esos como los que están en tu libro, con sus alas blancas, y también tenía una
ruedita dorada sobre su cabeza...
Candelaria: Era un ángel...
Flor: ¿Y qué es un ángel?
Candelaria: ¿de veras no sabes qué es un ángel? un ángel es un espíritu celeste al servicio de Dios
Liborio: Él dijo que pro pro pronto nacerá un niñito y que él nos va a sa sa salvar a todos de nuestros feos
pepe pecados
Cadelaria: (A Liborio) Trae mi libro, a ver, busca
Liborio: (Tartamudo) Aquí di di dice, el año que viene se in in in se in incrementaran los impuestos
Jovita: No pos está medio atrasado, ya nos subieron el I.V.A.
Liborio: (Tartamudo) Aquí dice que una vi vi virgen dará a luz a un ni ni niño que se llamará Jesús
Pastores: ¡Jesús!
Liborio: (Tartamudo) Los popo, los popo
Jovita: Ya se nos hizo
Liborio: Los po pobres y hasta los re re reyes vendrán a tribu
Flor: ¿Tribu? ¿Qué, van a venir los de tu casa manito?
Liborio: No a tribu tributarle honores y será llamado el hi hi hijo de Dios...
Micaela: Pero aquí falta algo, ¿cómo vamos a saber cuándo nacerá el divino Niño?
Genoveva: ¿Pos qué no ves lo que nos contó el señor ese, el ángel?
Jovita: ¿Qué, ya te falla la tatema?
Octaviano: No se dice tatema, se dice choya
Jacinta : ¿Les digo como dijo?
Pastores: Sí, sí
Jacinta: Cuando vean en el cielo una estrella, la más grande, la más bella, la más brillante de todas, esa será la
señal para que se pongan en camino para ir a adorar al Mesías que ha de nacer entre nosotros…

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 y aluego me dijo, gloria a Dios en las alturas, y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad y
mucho, mucho, mucho amor.... Y se fue, despareció
Octaviano: ¿Despareció?
Jacinta: Despareció bien desparecido
Candelaria: Miren allá arriba, una estrella
Octaviano: Ya nació, ya nació
Candelaria: Vamos, ¿qué esperas?
Flor: Es que vine corriendo pa contarles y no he comido nada
Candelaria: Pues ahí quedan unos tamales, comételos y apúrate a alcanzarnos

Infierno
Ira: Yo soy de San Luis Potosí y mi barrio es el infiernito....... Ahora sí voy a formar el batallón con lo
mejorcito de toda la región, órale diablos jijos, maaarchen, ¡ya! (marcha de Zacatecas). ¡Alto!
¡ya! Junten las patas, enderecen las rodillas, metan la panza, saquen el pecho, mirada hacia
arribaaaaa. Voy a pasar lista
Soberbia: Mejor ¿por qué no pasa tonta jefe?
Envidia: Malísimo tu chiste
Ira: Cállense, Lujuria
Lujuria: Maldito vicio, me canso ganso
Ira: Soberbia
Soberbia: Abran paso jijos del aire que ya llego su huracán
Ira: Envidia
Envidia: ¡Bomba!
Todos: ¡Ay!
Envidia: (Con acento yucateco) Bomba yucateca, la otra noche fui a tu casa y me ladraron los perros…
por eso ya no paso por tu casa
Ira: Codicia
Codicia: Éntrele con fe al pecado agarre pecadora agárrela del brazo...
Ira: Pereza
Pereza: (Bostezando) Si el trabajo es salud, que trabajen los enfermos
Ira: Gula
Gula: Como siempre, comiendo para poder vivir
Ira: ¿Tú? Viviendo para poder comer
Lucifer: Iraaaaaaaaa, Iraaaaaaaaa
Ira : Ave María Purísima
Diablos: Sin pecado concebida, ¡el jefe!
Lucifer: Ahí les va una carta

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Diablos: ¡Sí jefe!
Ira: Aquí está la carta, hay que leerla. Cuando recibas esta carta sin razón…
Diablos: Ufemia
Pereza: Pero por qué tanto grito jefe, no dejan dormir
Ira: ¿Quieren que les lea lo que dice la carta?
Diablos: Pues si
Ira: Aquí dice, que tenemos que... tra…
Gula: tragar
Ira: ¡No!
Codicia: Tranzar
Ira: ¡No!
Soberbia: traficar
Ira: ¡No!
Lujuria: Tracalear
Ira: ¡No!
Envidia: Trasquilar
Ira: ¡No!
Pereza: A manejar la tramoya. (Otra opción sería) A tramar
Ira: No, aquí dice que vamos a trabajar
Diablos: (Con desgano) ¿Trabajar?
Ira: Si, vamos a trabajar
Diablos: Sácate
Ira: Órdenes del mero mero
Gula: Pero ¿sin comer? no es justo jefe
Pereza: ¿Y sin dormir tampoco?
Ira: No empecemos. Miren, Lucy, nos ha encargado que...
Todos: ¿Quién?
Ira: Lucifer hombre, nos ha encargado un trabajo de lo más sencillo
Pereza: Ya sé, ya sé, ¿inspectores de colchones, camas y almohadones?
Codicia: ¿Aplicarle impuestos en alimentos y medicinas?
Ira : Nos salió como Carstens
Soberbia: No, ya sé ¿nos va a dar llantas nuevas para cambiar las que se poncharon con tanto bache?
Ira: No, no, no primero escuchen, nos ha mandado a la Tierra a ponerle tentaciones a unos pastores
y unas pastoras
Envidia: Oigan, de un tiempo para acá he visto muy raro a Lulu
Todos: ¿A quien?
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Envidia: A Lucifer
Todos: Aaaaah
Soberbia: Sí, hasta se fue a Michoacán a consultar a “La Familia”
Gula: Yo lo he visto caminar y caminar dándole un montón de vueltas a su camota
Ira: A mí me dijo que va a nacer un huerco, que va a salvar a todos los humanos de sus pecados,
disque en Belén
Lujuria: Oiga jefe, ¿y por lo menos hay metro para llegar allá?
Pereza: Trabajamos nada más dos horas y a dormir ¿verdad?
Gula: Con su respectiva hora para comer
Codicia: ¿Y cuánto vamos a cobrar?
Ira: (Como líder sindical) Ahorita un adelantito y después, todo junto y nos va a mandar a un viaje a
Playa Bruja o a Puerto Maldito con todos los gastos pagados y hasta con visa diplomática, ¿qué
les parece?
Todos: Sí, viva, vamos, a la víbora víbora de la mar de la mar, por aquí pueden pasar.... A la rueda, rueda,
rueda de Lucifer, todos cargan su caja de hiel

Tierra
Ira: (Llegando a la tierra) Tenemos que apurarnos
Todos: ¿Por qué?
Ira: Porque todos los pastores van juntitos, derechitos a un mitin, tenemos que ganarles
Todos: ¡Los diablos unidos jamás serán vencidos! Los diablos unidos...si se puede,
Pereza: (Entrando tarde) Jefe, mejor nos hubiéramos quedado allá abajo a descansar aquí hace mucho
frío
Lujuria: Pues yo no me quiero perder de esas rorras en huaraches
Gula: Un momento, lo primero es lo primero...
Todos: Pues sí...
Gula: Y lo segundo es lo segundo y lo tercero es lo tercero…
Todos: ¡Ay, ya!
Gula: Perdónenme pero discúlpenme, pero lo primero es comer, estar fuertes, vitaminarse
Envidia: ¿Fuertes? ¿y esa panzota qué?
Gula: Escúchame bien, lo que ves aquí es músculo en reposo
Ira: Ay, ya cállate baboso, aquí el único que está en reposo es (a pereza) éste… ese…eso. Miren
huercos, lo primero es lo primero
Todos: Y lo segundo es lo segundo y lo tercero es lo tercero…
Ira: ¡Silencio!
Pereza: Jefe, hable más bajito, no deja dormir
Codicia: ¿Qué, no te puedes estar despierto un rato?

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Pereza: ¿Qué no ves que estoy descansando?
Codicia: Tú no estás descansando, estás morido
Pereza: No, nomás con los ojitos cerrados
Envidia: Bueno, y de qué estás descansando si nunca trabajas
Pereza: Pos la mera verdad también de no hacer nada se cansa uno, pero voy a seguir haciendo lo que
siempre he hecho
Todos: ¿Qué?
Pereza: Pues nada pero más despacito
Gula: Aquí se viene a trabajar, vámonos
Flor: (A los diablos) Buenas las tenga señores
Lujuria: Y mejor las pases
Flor: Señores, ¿ustedes también son pastores en camino de Belén?
Gula: ¿Y tú quién eres?
Flor: Soy Flor Silvestre y Campesina ¿ustedes también van a ver al niño?
Codicia: Sí, sí, ¿quieres venir con nosotros?
Flor: No gracias, voy con mis amigos que me están esperando
Codicia: Pues ahí te ves (se van pero se queda pereza dormido)
Flor: Oigan, aquí dejaron un bulto (lo mueve) ¡a caray, esta vivo!
Pereza: Hola, ¿qué paso? ¿ya es hora de levantarse? Cinco minutitos más, ¿sí? Es más, duerme, duerme,
duérmete un ratito y luego los alcanzamos
Flor: Pero, yo tengo que llegar a ver al niño
Pereza: Hay más tiempo que vida, mira, descansa, ¿a poco no te duelen ya los pies?
Flor: Pos eso sí pero....
Pereza: Descansa, descansa tantito, ya más tarde sigues adelante (se duermen los dos)
San Rafael: Despierta Flor, despierta, que te dejan tus compañeros, no te dejes vencer por la pereza, el Niño
te espera
Flor: Sí, tienes razón, ya me voy... (mutis Pereza)
Cortinilla

Gula: (Entrando con un carrito) Tacos, tacos, hamburguesas, hot dogs!

Liborio: ¡Ay, qué ri ri rico, ya tengo hambre!
Jovita: No te dentengas, vamos
Liborio: Pero es que, es que, es que, se ve muy rico (trompetas)
San Rafael: ¡Ya llegó, ya está aquí, el Arcángel Saaan Mi...! ¡hamburguesas!
Gula: ¿Tienes hambre?
San Rafael: Sí ¿tienes cajita feliz?

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San Miguel: Rafael, ¿qué haces?
San Rafael: Aquí con un ojo al taco y otro al garabato
San Miguel: ¿Qué no te mande a que cuidaras el changarro?
San Rafael: Pos si pero es que...
San Miguel: ¿Qué no te das cuenta de que es el demonio que te quiere hacer caer en el pencado?
San Rafael: Pero cómo que demonio si es un simple taquero
San Miguel: A ver, pregúntale su nombre
San Rafael: Sí. Señor, señor, ¿cómo se llama?
Gula: Yo soy Donaciano Ocamoto Catoblás Mecanuto Méndez Pérez, pero me puedes decir Gula
San Rafael: Dice que le puedo decir Gula
San Miguel: Y a la gula y al marrano le pegamos con la mano
Gula: ¡Ah!, no, no, no, no, no..... (le pegan, y se va corriendo)
Carnaval
Jacinta: No hay por qué llorar, que la vida es un carnaval
Lujuria: Soy yo
Jacinta: ¡Ay, qué susto me diste! Mira, sácate de aquí inmediatamente
Lujuria: (Seductor) Tranquila chiquita, tranquila. Tú lo que necesitas son dos brazos fuertes que te ayuden
a soportar la dura carga de esta infame vida; sí mi amor, tú y yo hemos nacido el uno para el otro,
deja que nuestros corazones palpiten juntos pum, pum, pum pum
Jacinta: ¡Ay! qué bonito habla, señor
Lujuria: Dime Elvis, Elvis Cachito
Jacinta (Seducida) Elvis (trompetas)
San Rafael: ¡Ya llegó, ya está aquí, el Arcángel Saaan Miguel!
San Miguel: Dime lujurioso demonio, ¿qué haces por estos lares?
Lujuria: Vete de aquí, no ves que haces mal tercio, estoy haciendo mi luchita y por cierto, y tú güerejo
¿quién eres?
San Miguel: Soy San Miguel y vengo a evitar tu daño y a librarlos de tu engaño
San Rafael: Perdón, perdón, ¿puedo ir al baño?
San Miguel: ¡No!
Candelaria: Pues no sé quién será este güerito pero está muy guapo
San Miguel: Soy San Miguel
Candelaria: ¡Luis Miguel! (trata de abrazarlo)
San Miguel: Detente en el nombre del Señor, no me toquéis por favor, ¿no veis que pertenezco al sindicato
único de ángeles, arcángeles y serafines? ¿No te das cuenta que este es el demonio que te quiere
tentar?
Candelaria: Pero, si ya hasta me propuso matrimonio
Lujuria; Tampoco, tampoco. Nomás les da uno entrada y ya quieren altar

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San Miguel: ¿No te das cuenta que es el demonio que te quiere hacer perder? A ver tú, remedo de
(improvisa), voltéate (lo obliga a voltearse y le da una patada) ¡adiós!
Lujuria: ¡Ay!
Candelaria: Otro que se me va (llora)
San Miguel: No llores candelaria, mira, escúchame bien, no te dejes tentar por el demonio, sigue tu camino
Candelaria: Está bien, adiós angelito, no me desampares ni de noche ni de día
Octaviano: Fíjense que Flor estaba allá atrás hablando con un desconocido nomás se atrasaba y no hacía
caso, hasta se echó a dormir
Flor: Cómo eres chismoso, por eso me caes bien gordo (lo empuja)
Candelaria: Ustedes siempre se están peleando ¿Por qué no pueden vivir en paz?

Flor: Eres un chismoso, mugroso, vete de aquí

Candelaria: Vámonos, se hace tarde...
Octaviano: Siempre me tratas mal Florecita, y yo te quiero tanto
Flor: Pos yo no te quiero, sácate (entran Codicia y Envidia)

Música tensión

Codicia: Ahora sí, van a ver cómo con estas moneditas les van a temblar las piernitas y les van a brillar los
ojitos
Envidia: Y yo con estas piedritas los voy a enemistar más. Mira allí están nuestros clientes
Flor: Mira, qué bonitas piedritas me encontré
Octaviano: A ver, ¿me das unas?
Flor: No, son mías
Octaviano: No me importa, yo también voy a encontrar algo mejor que tus piedras. A ver, dónde, dónde,
dónde, dónde
Diablos: Ahí baboso
Octaviano: ¡Ah! Aquí. Mira, unas monedas, ¡qué padre! Valen más que tus piedras
Codicia: Manos arriba, vengan esas monedas
Octaviano: ¡No, qué! son mías, yo me las encontré
Codicia: Entonces, me llevo a la muchacha...
Octaviano: Pos llévatela, total, nomás me maltrata, son más valiosas estas monedas
Codicia: La voy a torturar, la voy a hacer sufrir por toda la eternidad....

San Miguel : No seas tonto, rescata a la muchacha, ¿qué, no la quieres?

Octaviano: Tienes razón, no sé qué me pasó. (A Codicia) Por favor, no te la lleves, aunque ella es muy mala
conmigo, yo la quiero. Toma, toma las monedas y hasta mi taquito de chicharrón que traigo aquí,
pero no te la lleves....
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Codicia: ¡Me lleva el jefe! (Codicia y Envidia se van enojados)
San Miguel : Amor 1, diablos 0
Octaviano: Mira, Ni siquiera se llevó las moneditas. Oye ¿y si te cambio unas de mis moneditas por unas de
tus piedritas?
Flor: Bueno
Octaviano: Pero con una condición, que ya no me llames chismoso ni me desprecies
Flor: ¿Esa es toda la condición?
Octaviano: Pues sí...
Flor: Ay, tú siempre tan poquitero. No me pides ni un besito.
Octaviano: Mira, nos están tomando una foto allá, córrele no vaya a ser un paparazzi
Pastores: Los pastores a Belén, corren presurosos llevan de tanto correr......
Jovita: Ansina, Ansina, Ansina...
Flor: Ya les dije que yo no me llamo Ansina, me llamo Flor y Ansina me dicen
Candelaria: Pos por eso, Ansina. Que bueno que ya no se pelean y son amigos
Octaviano: Te prometo que de hoy en adelante todo va a ser diferente
Candelaria: (A Flor) ¿Y ya terminaste tu bordado?
Flor: Ya merito, me está quedando chido...
Genoveva: Niña, no se dice chido porque se oye gacho. Qué va a decir la gente de ti mija, que no saliste a mí
Jacinta: Bendito sea Dios. (A Genoveva que está enojada) No se enoje, yo le prometo que de ahora en
adelante todo va a ser mejor
Ira: Engarrótenseme ahí, este es un buen momento para caerles encima. Éntrale Envidia, este es tu
momento
Envidia: Ya verás, todas van a ponerse tan envidiosas de Flor que se van a olvidar de ir a ver al niño
(A Jacinta)Psst, psst. El otro día oí a Nicanor decir que ninguna pastora era tan bonita y graciosa como
Flor
Jacint:a ¿Eso dijo? (A Refugio) Oye, fíjate lo que dijo el Nicanor
Candelaria: ¿Qué dijo?
Jacinta: Que las pastoras están muy feas com com comparadas con Flor
Candelaria: Maldito Nicanor y yo que le iba a preparar unas tortillitas azules, infeliz. (A Genoveva) Ven, ¿te
digo lo que dijo de nosotras Nicanor?
Genoveva: ¿Nicanor estaba hablando de nosotras?
Candelaria: Sí, dijo que comparadas con Flor. Éramos feísimas y que estábamos muy gordas
Genoveva : ¿Gordas?, después de que llevo tres semanas haciendo aerobics, correteando a mis pollos
alrededor del corral, desgraciado, me las va a pagar, le voy a contar a todos lo que anda diciendo
ese baboso (A Candelaria) ¿Qué crees que dijo Nicanor?
Candelaria: Nicanor, me cae muy bien, desde chiquitos jugábamos juntos, somos como hermanos, dime,
dime
Genoveva: Dijo que comparadas con Flor éramos feísimas, gordas y apestosas

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Candelaria: ¡Apestosas! Pero si el otro día me dijo que mi perfume olía tan bonito, que le iba a regalar uno
igual a su novia. Mal amigo, traidor, ya verá (A Micaela) ¿Qué crees que anda diciendo
Octaviano?
Micaela: Ya sé, que Ansina es su novia, que se llama Flor y que Ansina le dicen
Candelaria: Esa es precisamente la causante de todo, porque resulta que por culpa de Flor, o Ansina, o como
le digan, Nicanor dice que somos feas, gordas, sucias y tontas
Micaela: Pero, no es posible, Nicanor es muy bueno, no lo creo capaz....
Candelaria: Pues no es el mismo desde que anda con Flor, es más, dicen que ella se va a encargar de que
ninguna pastora se le acerque a su novio para que sea nada más suyo
Micaela: Nunca creí que Nicanor fuera tan tonto para dejarse mangonear así
Candelaria: Pues entonces ya no les vamos a hacer caso, total, que se queden solos Nicanor y Flor, vieja fea,
gorda, apestosa y tonta
Micaela: (A Flor sin darse cuenta que es ella) ¿Oíste?
Valeria: ¿Qué pasó?
Micaela: Dicen que Nicanor ya no quiere a Flor, que porque es una vieja fea, gorda, apestosa, tonta y
fodonga
Flor: ¿Qué dijiste? ¿Que Nicanor dijo qué? ¡Nicanor, ven acá!
Octaviano: ¿Qué pasó, Florecita? ¿Qué se te ofrece, mi amorrrrr?
Flor: ¿Cuál amor?, ¡hipócrita!, ya me enteré de lo que piensas de mí, está bien que me quedé un rato
dormidita, pero no es para que digas que soy una fodonga
Octaviano: Pero Flor, de qué hablas, ya habíamos hecho las paces ¿por qué me vuelves a tratar así?
Flor: Hazte para allá, no te me acerques
Envidia: Ja, ja, ja, ja, ja, lero, lero, huarache de cuero; liro, liro, por más que lo miro; lara, lara está muy
enojada; lere, lere y ya no lo quiere...
San Rafael: Óyeme tú, qué tanto cantas diablo tercermundista
Envidia: ¡Uuuuyy!....este......este
San Rafael: Por favor Don Liborio, explíquele a esta niña el engaño con el que le hicieron daño, que no le
quede duda de las intenciones de ese demonio
Liborio: Claro. Florecita, ven acá, mira, todo esto fue una artimaña que planeó un demonio, provocó la
envidia en tus compañeras y de esa manera logró que te enojaras con Nicanor y con ellas al
mismo tiempo, todo esto lo hace con el fin de que se acabe la armonía entre nosotros, piénsalo
bien, si Nicanor no te quisiera bien, no estaría tan preocupado, míralo, ve los pucheros que hace
Octaviano: Florecita, no creas en los chismes de las envidiosas, por favor
Flor: Tienes razón, perdóname
Rafael: Amor 2, diablos 0
Ira: ¡Me lleva el diablo! Digo, me lleva el ángel..... (Fingiendo dulzura) A ver, soberbia, andas muy
descansadito ¿verdad, mijito?
Soberbia: Sí
Ira: ¡Ay, qué bueno mi chulito!, no sabes qué gusto me da (enojada) y ¿no se te ha ocurrido alguna
buena maldad para tentar a estos mugrosos?

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Soberbia: No, todavía no, es que me he estado juntando mucho con la pereza y no creas, ese vicio se pega
Ira: ¡Ay!, pobrecito, quién lo diría...
Soberbia: Sí fíjate, he estado un poco desganado, yo que siempre soy tan activo, tan brillante, tan infalible,
fuerte audaz y valiente
Ira: Humilde…
Soberbia: También eso
Ira: Mira, Pancho Pantera, nos queda poco tiempo; te lo advierto, si no piensas en algo pronto, te voy
a condenar a ver 20 horas seguidas de Ventaneando, tú dices
Soberbia: No, por favor, Ventaneando no...
Ira: Pues muévete de una vez, órale
Soberbia: Qué pasa, acaso no recuerdas con quien soy yo, no hay diablo más fregón
Ira: Pues a ver si como roncas, duermes…
Pereza: ¿Me llamaban?
Ira: No, no, ahorita no, yo te aviso cuando te necesite, duérmete niño, duérmete ya...
Candelaria: (A los demás pastores) Verán, debemos llevar al niño algún regalo para demostrarle nuestro
cariño, además, como el ángel dijo, nació en un lugar muy humilde
Octaviano: Sí, va a tener mucho frío y hambre. Hay que decirles a todos que le regalemos algo que pueda
servirle
Soberbia: De aquí me agarro yo, tengo una buena idea
Candelaria: Escuchen todos, tenemos que darle al niño algo de lo que llevamos en nuestros morralitos, él es
el más pobre de todos y aunque nuestro amor le dará calorcito, va a necesitar alimentarse y
cubrirse del frío, ¿qué dicen, están de acuerdo?
Todos: Sí
Jacinta: A ver, ¿qué puede darle cada quién? yo llevo unas tunas dulces coloradas
Soberbia: ¿Tunas? Qué bien, se va a tapar
Micaela: Yo tengo una cobijita que he venido tejiendo por el camino
Soberbia: ¿Ah, sí? Ahora verán (le mete el pie a Genoveva que trae un jarrito con café)
Genoveva: Ay, perdón, ya te ensucié la cobijita
Micaela: No te preocupes ahorita lo lavo con mi nuevo Vanish, y la mancha se va
Soberbia: ¡Chirrión!, me chocan las buenas amas de casa, ¿qué ésta no ha oído hablar de la liberación
femenina? Que se me hace que ésta es una víctima más de mi compadre machismo y su primo
chovinismo
Octaviano: Yo le voy a regalar las moneditas que me hallé por el camino
Flor: Y yo mis piedritas, están re lindas
Soberbia: Vaya, las que les dejaron codicia y envidia. Nadie sabe para quién trabaja, ¿verdad?
Flor: (A candelaria) ¿Tú que le llevas al niño?
Candelaria: Pues… yo… no tengo nada

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Soberbia: Tú no te preocupes, déjamelo a mí. (A los demás pastores) Pues no es por presumirles pero, aquí
mi amiga, trae un ropón de seda, lo más fino de la colección de invierno de Armani
Candelaria: (Viendo un ropón en su morral) ¿Y esto, cómo apareció en mi morral?
Soberbia: ¡Chitón!, ya es tuyo, te lo ganaste por ser la más inteligente, la que más vale la pena de esta
manada de… personas, que no te llegan ni a los talones, tú sí que tienes clase, no como esos…
pobres
Candelaria: Tienes razón, (a los demás pastores) pues sí, cómo la ven, este es mi regalo para el niño. La gente
de alcurnia como yo no puede andar dando regalillos ridículos como los de ustedes
Micaela: ¿Ah sí? Y dime, ¿de dónde viene tu alcurnia?, si se puede saber
Candelaria: (A Soberbia) Oye, ¿de dónde eh?
Soberbia: Pues no sé, ¿no tienes algún pariente en el gabinete?
Candelaria: ¿En el qué?
Soberbia: ¿O algún apellido compuesto?
Candelaria: Pus qué ¿los apellidos se descomponen?
Soberbia: Algunos se arrastran, a veces, pregúntale a... bueno, olvídalo, ¿no tienes aunque sea algún
conocido en la familia Galicia?
Candelaria: No, pos no
Soberbia: Pues ya te amolaste. De alcurnia no tienes nada...
Genoveva: Claro, tú eres igual que nosotros, una humilde pastora, hija de pastores también, y aunque a
veces eres algo presumidilla, eres una buena persona
San Rafael: Ser sencilla y humilde es tu mejor cualidad y ese es el regalo que más apreciará el niño. Es tan
pequeño e indefenso, él no sabe de soberbias, es solamente un bebé
Candelaria: Es cierto... (A Soberbia) ten tu trapo, no lo necesito, la fruta del campo es buen regalo, esos lujos
no los necesita el Salvador
Soberbia: Me quiero morir ¿no, verdad?
Ira: Ven acá, remedo de María Félix/Pedro Armendáriz ¡inútil!
Codicia: Deme chance jefa, le prometo que algún terreno voy a ganar
Ira: Dales duro, que ya estamos dando patadas de ahogado
Gula; ¿Ahogado yo? Si sólo estaba probando un licorcito de almendras
Ira: ¡Borracho! Hazte a un lado, apestas
Gula: Jefe, si yo la quiero mucho, de veras...
Codicia: (A Octaviano) ¿Y tú, qué llevas en tu morral que te quedaste tan calladito, eh?
Octaviano: ¿Yo? nada, nada, ¿por qué me preguntas?
Codicia: Te estuve observando, recogiste todas las cosas que pudiste por el camino, fruta que se caía de
los árboles, los taquitos que te convidaban, las cobijas que dejaron olvidadas, y no dices qué le
vas a regalar al chamaco ese
Octaviano: Es que… ¿qué tal si hay una emergencia y nos toma desprevenidos? nos moriríamos de hambre
y frío, pero yo tendría un guardadito

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Codicia: Haces bien, total, ellos han sido desperdiciados, no han previsto, pero tú, tú estás preparado, y
mientras más cosas acumules, más valioso será tu morral. Pero nadie debe sospecharlo porque
te lo quitarían. Yo digo que si sólo tú te sacrificas cargando tantas cosas, ellos no se merecen que
compartas lo tuyo
Micaela: ¿Por qué tu morral esta tan gordo, qué tienes adentro?
Octaviano: Nada, deja, son cosas mías
Codicia: Qué metiche eres, ¿no ves que este morral es propiedad ajena?
Micaela: Está bien, sólo dime, ¿qué le vas a regalar al niño?
Octaviano: Pues no tengo mucho ¿eh?, ni creas, uno que otro cacahuatito
Codicia: Y con cáscara, no vayas a pensar que japoneses o Hot Nuts ¿eh?
San Rafael: Parece mentira que te dejes llevar por la codicia
Codicia: Sí, déjate llevar por mí...
San Rafael: A un lado, espantapájaros, no intervengas en los asuntos de lo divino
Codicia: Ay sí, te crees el muy divino ¿no?
San Rafael: He venido directito del cielo, luego entonces, ¿no soy divino?(A Octaviano) Y tú, reparte y
comparte y verás que te quedas con la mejor parte. ¿De qué te sirve acumular riquezas? al cielo
vas a llegar, cuando mucho, con una túnica y unas alas; eso sí, sólo en caso de que apartes de ti a
este demonio, si no tendrás que vestirte de payaso, como estos
Octaviano: Gracias por devolverme la razón. (A Codicia) Al principio mi intención era muy buena, y tú la
transformaste en maldad, aléjate de mí. (A los demás pastores) Amigos, aquí hay suficientes
cosas para compartir
Pastores: Gracias, gracias
Codicia: Es el colmo, (A Ira) jefe, necesitamos echarles toda la carga, el tiempo se agota
Ira: Tenemos que llevarnos por lo menos a uno, ¿qué les parece el tal Nicanor?, es el que tiene más
cara de pen....sativo, vamos a echarle montón ¡órale diablos jijos! ¡Todos juntos, ya! ¡Marchen,
ya!
Diablos Venían del infiernito, iban con rumbo a Belén, traían 600 pecados, toditos nomás pa este wey
Ira: A ver cómo le hacen pero me lo llevan directito al infierno, ¡órale!
San Rafael: (Trompetas) ¡México! ¡Ya llegó, ya está aquí..!
Diablos: Ay sí, ya sabemos, “ya llegó, ya está aquí, el arcángel San Miguel”
San Rafael: Qué gachos, ese es casi mi único texto... de todas formas lo voy a decir: México, ya llegó ya está
aquí, el arcángel San Miguel
San Miguel: (Entrando con un caballo de palo) Detengan su perfidia, engendros del averno
Ira: Ay Miguel, no seas payaso
Gula: (Refiriéndose al caballo) ¿Y qué es eso?
San Miguel: Es mi caballo, me lo regaló Joan Sebastián
Codicia: Pues con esas plumitas y esos chinitos no se parece a Joan Sebastián
Envidia: Más bien parece amazona de la escaramuza charra
San Miguel: Eso no les importa, acérquense y verán de a cómo les toca

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Pereza: Ay qué flojera, mejor desde aquí te vemos
San Miguel: Vengan y verán a lo que se enfrentan
Lujuria: Nombre, si ya me está preocupando
Soberbia: ¿No te das cuenta, mamarracho emplumado, del poder que tenemos?
San Miguel: ¡Yo tengo el poder divino! Y los voy a poner en su lugar
Diablos: Uy qué miedo, mira como estoy temblando, uy que miedo, mira como estoy temblando
Gula: Mira Miguelito, tú acércate y verás cómo te hacemos longaniza
San Miguel: Una vez ya se los dije y se los voy a repetir, sigan interponiéndose en mi camino…
Diablos: ¿Y qué?
San Miguel: Y me los voy a resurtir
Ira: Anda Miguelito te voy a quitar lo presumido
San Miguel: (Sacando su espada) Ahora sí, que empiece la fiesta (torea a ira, pastores gritan “ole”, diablos
abuchean; al final, cuando va a darle la estocada ira huye y se tira al suelo pidiendo perdón)
Ira: ¡No, no, no!
San Miguel: ¿Dónde estás? ¡No te escondas compadre! A ver, el niño que aventó su Elmo cosquillas al
escenario que lo venga a recoger
Ira: (Al público) ¿De qué se ríen?, pueden tener un hijo igualito a mí. (A San Miguel) Mira, mira
llavecita,
San Miguel: pero no para tu llavero (mutis corriendo)
Diablos: ¡Oreja, oreja!
Pastores: ¡Rabo, rabo!
Soberbia: Oye, Mickey, ya se vio que tú venciste y como la única tentación que vale la pena en esta
compañía, te pregunto ¿no podrías dejarnos ir al infierno, llevándonos a uno que otro?
San Miguel: Sácate de aquí, mala imitación de Elba Ester Gordillo
Soberbia: ¡Alto, alto! Eso sí estuvo muy gacho
San Miguel: Sí, ahora sí me pasé, sorry. Pero sáquense ya
Pereza: Ay si, te crees mucho porque traes tu espadota
Octaviano: ¡Ora, no lo ande espiando!
Envidia: Pero en un descuido, te la habremos de arrebatar
San Miguel: Ya me agotaron la paciencia, a callar o me los voy a...
Diablos: ¿Qué?
San Miguel: Digo, que mi fulgor los ha de cegar
Codicia: Ay sí, mira, cómo no, ja, ja, ja
San Miguel: Ya no quiero discutir, ni la discordia sembrar. De que se vayan de aquí, les daré la última
oportunidad
Lujuria: Le salió un verso sin esfuerzo
Pereza: ¿Que se le salió un qué?

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Codicia: Le salió un verso sin esfuerzo
Gula: Ay y te salió otra vez
Pereza: ¿A ti también se te salió?
San Miguel: Basta de sandeces, ¡a volar! (San Miguel y San Rafael los corren)
Candelaria: Ganó San Miguel y con eso nos salvó del pecado
San Rafael: Él actúa en el nombre del Señor
Liborio: Ángel guerrero y héroe
San Rafael: Su deber es vuestra salvación
Candelaria: Además, no está nada mal ¿verdad?
San Miguel: Señora, soy celestial, ¡respéteme!
Lujuria: Bueno ahora sí ya nos amolaste, pero vete mucho a la....
Pastores: ¡No!
Lujuria: ¿Es una pastorela familiar, verdad?
Pastores: Sí
Lujuria: ¿Y no lo puedo decir?,
No ¿qué, hay muchos escuincles? ¿Gente muy decente o qué? Ah sí, aquí ya vi a uno, allá atrás hay
otros dos. Bueno pues, ¿de plano no digo lo que iba a decir?
Pastores: ¡No!
Lujuria: Mira, mira, a ver, ustedes ¿saben inglés?
Pastores: ¡Yes!
Lujuria: Entonces, ¡evritodi! ¡allá atrás, evritodi! Lisen tu mi. (Chifla una mentada y hace mutis corriendo
amenazado por San Miguel)
Pastores: ¡El ángel! ¡El ángel!
Diablos: ¡El diablo! ¡El diablo! (San Miguel y San Rafael los persiguen y los diablos hacen mutis corriendo)
San Miguel: ¡Silencio pastores! ¿Ya se les olvidó a dónde querían llegar? ¡No es a mí a quien tienen que
adorar! Vamos pastores no se pongan tristes, canten y regocíjense, no pierdan la fe, a ver al niño
hay que partir y el nacimiento de Dios vivir (se van los pastores cantando un villancico)
Octaviano: (Llegando al pesebre) Hemos llegado, no puedo decirles la emoción que siento
Flor: Hermoso niño Dios, estamos aquí felices de conocerte
Candelaria: Tu estrella nos guio, y aunque enfrentamos muchas tentaciones, las vencimos y aquí nos tienes, a
tus pies. Es muy poco lo que tenemos para regalarte, pero nuestro amor es muy grande y te va a
cobijar, niño precioso

Octaviano: Ojalá que el mundo conozca el mensaje divino que significa tu nacimiento
Micaela: Y que esto sirva para que todos los hombres y las mujeres vivan en paz y armonía
Genoveva: Y llenen sus corazones con la dicha de tu presencia
San Rafael: Recuerden aquí, frente al niño Jesús, que la solución a los problemas humanos es el amor y la
tolerancia. Sigamos sus enseñanzas y amémonos los unos a los otros
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San Miguel: Bien dicho, gloria a Dios en las alturas y paz en la tierra a los hombres de buena voluntad
(aleluya, aleluya)
Llegan a plástica del nacimiento-
José: Heber
María: Monserrat

FIN

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