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ANDREA RODRÍGUEZ MEDINA

“Nuestra barbarie protegida por cuchillas” es un texto expositivo argumentativo


publicado el 15 de octubre de 2023 por Cristina Fallarás en el periódico Público, que va
a tratar un tema (los conflictos, las protestas incoherentes y la extrema derecha) y dará
una serie de argumentos.

Es un ejemplo de texto periodístico que se incluye dentro de los subgéneros de opinión,


más concretamente un artículo, puesto que hay una autora que firma (Cristina
Fallarás), expresando su punto de vista sobre el tema tratado de forma subjetiva.
Además, el texto es de interés divulgativo, ya que está dirigido a un receptor amplio.

Teniendo en cuenta estos rasgos, las funciones predominantes son: la representativa


porque habla de unos hechos objetivamente reales, como por ejemplo: “Las personas
que están matando (…) a orillas del Mediterráneo” (quinto párrafo, línea 1). La
expresiva, que se encuentra presente durante todo el texto, cuando la autora habla en
primera persona expresando sus emociones sobre el tema: “trato de no mirar…”, “no
puedo dejar de pensar…” “Al menos yo”. También encontramos la función apelativa,
ya que nos incluye: “nos echamos las manos a la cabeza”, “Nuestra contradicción es
inabarcable” “Debemos asumir que…”. Con esto, la autora llama la atención del lector,
ya que le habla directamente a él. Por último, la poética, cuando hace uso de recursos
literarios durante el texto: “una incoherencia que palpita…” (personificación), “
nuestra barbarie protegida por cuchillas” (metáfora). También hace uso de preguntas
retóricas: “¿Cómo iba a hacerlo?”, “¿Cómo no van a ganar?”. La autora hace uso de
recursos literarios durante todo el texto para transmitir la información de una forma
más subjetiva.

Respecto a la comunicación: el emisor, en este caso, es la autora del texto (Cristina


Fallarás); el receptor es amplio, porque va dirigido a un gran número de lectores; el
canal sería el periódico Público en todos sus formatos; y el código es la lengua castellana
escrita. El contexto es formal, con un registro culto, ya que es un texto escrito sin
errores y plagado de riqueza léxica.

El tema que se plantea en el texto es la extrema derecha como forma de gobierno líder
en el mundo. Cristina Fallarás hace una reflexión sobre la contradicción y la
incoherencia de quienes protestan y se horrorizan por situaciones como las muertes en
Gaza o la construcción de muros, mientras que simultáneamente disfrutan de las
comodidades y ventajas de una sociedad que, según la autora, ha sido construida a costa
de la vida y la paz de otras personas: “Las personas (…) resto del mundo” (párrafo 5).

Se puede considerar un tema de actualidad por ser muy relevante a día de hoy y por
haber sido publicado recientemente. Además, se trata de un tema donde muchas
personas sufren y que provoca muchos conflictos. Entonces, se considera un tema muy
importante y actual.
En cuanto a la estructura externa del texto, podemos distinguir 6 párrafos. En ellos se
distribuye la información expuesta por la autora siguiendo la organización más
frecuente de los textos expositivos-argumentativos. De esta forma, tenemos la
introducción que se encuentra en los dos primeros párrafos, en donde se destacan la
importancia y extensión del problema; un desarrollo que abarca desde el tercer hasta el
cuarto párrafo, en donde la autora va a tratar el tema respaldado con argumentos; y
una conclusión, que se encuentra en los dos últimos párrafos, donde la autora resume
los puntos principales y hace un cierre del texto.

Cristina Fallarás, plantea que esta sociedad, con sus beneficios y comodidades, ha sido
moldeada por fuerzas políticas de derecha. Su tesis se basa en la idea de que la crítica
hacia situaciones injustas se vuelve contradictoria cuando estas críticas surgen desde un
lugar que ha sido establecido por esas mismas fuerzas de derecha.
La autora hace una referencia específica al caso de Gaza, lo que ilustra cómo la
sociedad europea, a pesar de condenar los ataques, está conectada con el país atacante,
Israel, a través de apoyos y falta de respuestas contundentes por parte de Europa. Esta
contradicción de protestar desde dentro de una estructura que ha creado barreras y
desigualdades contribuye al avance de las fuerzas políticas de derecha en Europa. Por lo
tanto, la autora pretende hacernos concienciar sobre cómo está organizada nuestra
sociedad, considerando que nunca habrá un cambio si la derecha está al mando.

La estructura de la tesis es de tipo encuadrada, ya que aparece al principio y final del


texto: “La sociedad en la que habitamos es un mundo diseñado por ellos”, “porque en el
mundo en el que vivimos es el suyo”.

En la argumentación de su tesis, la autora hace uso de varios, emplea un argumento de


hecho en el quinto párrafo: “Las personas (…) a orillas del Mediterráneo”. También
emplea un argumento afectivo-emotivo en el cuarto párrafo: “nuestro terrible
malestar”. Por último, emplea un argumento de ejemplificación: “me pregunto a diario
(…) autónomas españolas” (párrafo 1).

Mediante este texto, la autora, Cristina Fallarás, reflexiona sobre la contradicción de


criticar injusticias mientras se disfruta de beneficios en una sociedad diseñada por
fuerzas políticas de derecha. Destaca cómo la comodidad y seguridad en la sociedad
contemporánea han sido construidas gracias a otras vidas. La autora señala la
incoherencia de condenar eventos como los ataques en Gaza desde dentro de la Unión
Europea, un espacio que ella percibe como moldeado por fuerzas de derecha,
argumentando que vivimos en un mundo influido por la derecha, lo cual contribuye a la
contradicción y malestar en la sociedad actual.
En el nivel léxico-semántico vemos como las palabras que más se repiten son: “derecha,
mundo y sociedad” ya que están en consonancia con el tema del texto, por lo que sus
sinónimos son: “extrema derecha, las derechas, Europa, Unión Europea…”. Todo ello
da coherencia y cohesión al texto. Por lo tanto, los campos semánticos más importantes
responden a estos tres términos con ejemplos como:
“ las derechas, los malos, la barbarie, nuestras fronteras, espacio...”. También está
presente el campo semántico del poder con ejemplos como: “gobiernos, capitales,
régimen”.
Otros ejemplos son los antónimos como: “guerra y paz” o “libertad” frente a
“encierro”. Todo ello, ayuda a cohesionar el texto y a no repetir los mismos términos.
Hay presencia de un lenguaje connotativo en la forma singular de describir o mostrar
las ideas: “lo hacemos rodeadas de vallas coronadas de cuchillas”.

Pasando al nivel morfológico, podemos observar el uso mayoritario de la segunda


persona del singular y plural para mostrar las realidades y describir los hechos de
forma objetiva. Hay siempre una muestra de subjetividad en la que la autora se
presenta a través de la forma verbal de primera persona del plural y el pronombre
deíctico “nos” en la que nos incluye claramente: “Nos preguntamos por qué…”.

Los tiempos verbales van desde el presente: “es, pregunto”, por tratarse de un hecho
actual; hasta el pasado: “ha recibido”, “hemos levantado” (pretérito perfecto
compuesto), que ayuda al autor a traer momentos ya sucedidos para comentar. También
es destacable la presencia de las formas no personales infinitivas: “mirar”, “asumir”
que ayudan, en la parte expositiva, a mostrar una objetividad en los datos descritos.
Los sustantivos y adjetivos, mayoritariamente comunes y especificativos: “país atacante,
derecha extrema” describen las realidades; aunque hay presencia de abstractos:
“malestar, contradicción, libertad”, pues muestran las ideas y pensamientos del autor.

La modalidad predominante en el texto es la enunciativa afirmativa y negativa, propia


de la suma de información, pero también hay presencia de exclamación: “¡Lo hacemos
rodeadas de vallas coronadas de cuchillas!”, que ayudan al autor a llamar nuestra
atención.
Las oraciones, en su totalidad, son complejas, por aportar marcas de opinión, supeditar
ideas y contrastar las mismas. Así hay desde coordinadas copulativas y adversativas: “a
costa de la vida y de la paz de...” y “pero, ¿cómo no van a ganar?” hasta subordinadas,
en su mayoría adverbiales: “Porque en el caso de los ataques de Israel…”.
Los nexos y marcadores del discurso ayudan al autor a construir el texto. Hay nexos
copulativos, afirmativos y negativos: “y, que”; adversativos: “pero”; adverbiales:
“como, cuando, porque”.
Como ejemplos de recursos literarios presentes en el texto vemos: comparaciones “como
nuestro propio país…”; alguna metáfora: “rodeados de vallas coronadas de cuchillas”,
“un mundo diseñado por ellos” (refiriéndose a la sociedad). También, se encuentran
ejemplos de paralelismo al comparar situaciones, como en la frase “La suya los encierra
en una cárcel al aire libre. La nuestra nos encierra en la contradicción…”, o
personificaciones: “una incoherencia que palpita” .
El léxico es utilizado de modo denotativo, sin presencia de tecnicismos, cultismos o
valores connotativos, lo que favorece el carácter divulgativo anteriormente señalado.

VALORACIÓN PERSONAL

Nos encontramos en un momento de conflictos políticos, de guerras y de dolor.


Lamentablemente, esto no es una novedad, sino que ha ido ocurriendo durante toda la
historia de este mundo. Muchos se lamentan por el conflicto de Israel y Palestina, y
sienten un inmenso dolor al ver las imágenes de sufrimiento y terror de personas en las
noticias o Internet. Pero lo peor es que, de momento, no podemos hacer nada,
simplemente porque vivimos en un sistema que nos lo impide.

Principalmente, en nuestro país tenemos seguridad, protección, libertad, tranquilidad…


entre otros beneficios, lo que nos permite estar en calma. Sin embargo, si miramos un
poco más allá de nuestras fronteras, podremos ver desesperación, inquietud, terror,
muerte, inseguridad, encierro y muchas cosas más. Al poner esos muros que delimitan
nuestro territorio con los otros, nos estamos encerrando en todo aquello beneficioso
para nosotros, pero a ellos los estamos encerrando en un infierno del que no pueden
escapar. La extrema derecha es quien cierra la puerta a todas aquellas personas, es el
problema, la causante de estas divisiones, la que crea diferencias en las personas por su
origen. Es incoherente protestar desde el lado beneficioso, el lado que ha sido el
causante de la creación de barreras y desigualdades. Además, según el periódico
NewTral, la extrema derecha ya cuenta con representación parlamentaria en 22 países
de la Unión Europea, de los cuales 5 forman parte del gobierno.

Para finalizar esta valoración personal, al igual que la autora, pienso que es
contradictorio el hecho de que se proteste desde el lugar que ha sido, en parte, causante
de diferencias y divisiones. Somos culpables y egoístas al no permitirle a los demás
cruzar nuestras fronteras para que puedan vivir en un lugar mejor. Si es verdad que
vivimos en una democracia, entre todos podemos decidir lo mejor para nosotros y para
los demás. La derecha nunca será lo mejor, ni nunca será la solución, por lo que
tendremos que luchar contra ella por todos aquellos que están sufriendo por un
conflicto del que ellos no tienen culpa, la culpa es de aquellos gobernadores que no
merecen serlo. Pues los que más tienen son los que menos sufren, así como dijo Jean
Paul Sartre: “Cuando los ricos se hacen la guerra, son los pobres los que mueren”.

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