Huella de carbono

La huella de carbono es una medida que nos permite evaluar el impacto de nuestras
actividades en la emisión de gases de efecto invernadero, especialmente el dióxido de carbono.
(Espíndola & Valderrama, 2012). Al comparar mi huella de carbono, que dio un valor de 0.68
toneladas con la huella de carbono promedio en Ecuador, 2.31 toneladas por año, existe una
diferencia significativa. Es importante tener en cuenta que la huella de carbono promedio de un
país refleja las emisiones totales de gases de efecto invernadero de todos los sectores de la
economía, incluyendo la generación de electricidad, la industria, el transporte, la agricultura,
entre otros. Por otro lado, mi huella de carbono se calcula teniendo en cuenta mis hábitos de
consumo y estilo de vida individual. Por lo que, mi enfoque en la eficiencia energética en el
hogar, utilizando gas natural y electricidad de manera consciente, ha contribuido a una menor
emisión de gases de efecto invernadero a comparación con la media nacional. Además, no he
considerado aspectos como vuelos, coches o motos debido a que no he realizado viajes en
avión ni poseo vehículos motorizados.
Sin embargo, existen áreas en las que aún puedo mejorar para reducir mi huella de carbono.
Por ejemplo, aunque mi consumo de productos de comida y bebida es relativamente bajo, aún
puedo explorar opciones más sostenibles, como elegir alimentos locales y de temporada,
reducir el desperdicio de alimentos y considerar alternativas de origen vegetal para reducir la
dependencia de productos cárnicos.
Además, al analizar mis gastos en productos farmacéuticos, ropa, textiles, zapatos, productos a
base de papel, hoteles, restaurantes, llamadas telefónicas, educación y actividades recreativas,
culturales y deportivas, puedo identificar oportunidades para reducir mi huella de carbono en
estas áreas. Algunas acciones podrían incluir la compra de productos ecoamigables y de
segunda mano, reducir el consumo de papel y optar por servicios digitales, apoyar negocios
locales y sostenibles, y elegir actividades recreativas y culturales de bajo impacto ambiental.
La comparación entre la huella de carbono promedio en Ecuador y mi propia huella personal
muestra que he logrado reducir significativamente mis emisiones de gases de efecto
invernadero. Sin embargo, siempre hay margen para mejorar y tomar medidas adicionales para
minimizar mi impacto ambiental. Al implementar acciones como una alimentación más
sostenible, la reducción del consumo de productos de un solo uso y la elección de opciones de
transporte y consumo conscientes, puedo seguir reduciendo mi huella de carbono y contribuir a
la protección del medio ambiente y la lucha contra el cambio climático.
Bibliografía

Espíndola, C., & Valderrama, J. O. (2012). Huella del carbono. Parte 1: conceptos, métodos de estimación
y complejidades metodológicas. Informacion Tecnologica, 23(1), 163–176.
https://doi.org/10.4067/S0718-07642012000100017
ANEXOS

Anexo A. Cálculo de huella de carbono