El Himno Nacional del Ecuador se remonta al año 1830, cuando al crearse
la República el Gral. Juan José Flores -presidente del nuevo Estado- encargó al poeta guayaquileño don José Joaquín Olmedo que escribiera una letra con tal propósito. Esta letra patriótica no recibió el favor del público, por lo que el propio Gral. Flores, en 1838 escribió una letra para la primera estrofa. Tampoco esta letra gustó a los ecuatorianos, y al igual que la anterior, no fue tomada en cuenta. El asunto del Himno Nacional fue olvidado durante varios años, hasta que en 1865, el Dr. Nicolás Espinoza Rivadeneira, Presidente de la Cámara del Senado, solicitó a don Juan León Mera, Secretario de la misma, la creación de una canción patriótica que sea digna de ser considerada como Himno Nacional, el mismo relata que en la noche del 15 de noviembre de 1865, escribió la hermosa letra de nuestro Himno que relata referencias a los hechos ocurridos 10 de agosto de 1809 y 24 de mayo de 1822, así mismo busca hacer notar la posición de Ecuador ante un intento de reconquista y recuerda la disposición de los ecuatorianos de defender su libertad y soberanía. Al terminar la letra esta fue, sometida al conocimiento del Congreso Nacional, que tuvo aceptación y aprobación, así convirtiéndose en el autor del Himno Nacional del Ecuador. Dado esto de inmediato la letra fue enviada a Guayaquil donde vivía el notable músico y compositor don Antonio Neumane, para que él creara una música acorde a las exigencias de una canción nacional. Poco tiempo después Neumane entregó sus partituras, y en 1869 el Congreso Nacional las aprobó definitivamente como la música del Himno Nacional. El 29 de septiembre de 1948, el presidente Constitucional de la República, señor Galo Plaza Lasso, oficializó el uso del Himno Nacional del Ecuador, con la letra de Juan León Mera y la música de Antonio Neumane. Ese mismo año, el Congreso decretó la intangibilidad del himno y declaró el 26 de noviembre como su día oficial. Desde ahí los ecuatorianos lo hemos usado y cantado en fechas importantes o celebres de nuestro país.