0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
4 vistas1 página
Un molinero perdió y recuperó su fortuna varias veces. Un día, una ninfa le prometió devolverle la riqueza a cambio de lo que acabara de nacer en su casa. El molinero aceptó sin saber que su esposa había dado a luz un hijo. Años más tarde, el hijo ahora un hombre joven fue arrastrado al estanque por la ninfa, cumpliendo la promesa que ella hizo al molinero tiempo atrás.
Un molinero perdió y recuperó su fortuna varias veces. Un día, una ninfa le prometió devolverle la riqueza a cambio de lo que acabara de nacer en su casa. El molinero aceptó sin saber que su esposa había dado a luz un hijo. Años más tarde, el hijo ahora un hombre joven fue arrastrado al estanque por la ninfa, cumpliendo la promesa que ella hizo al molinero tiempo atrás.
Un molinero perdió y recuperó su fortuna varias veces. Un día, una ninfa le prometió devolverle la riqueza a cambio de lo que acabara de nacer en su casa. El molinero aceptó sin saber que su esposa había dado a luz un hijo. Años más tarde, el hijo ahora un hombre joven fue arrastrado al estanque por la ninfa, cumpliendo la promesa que ella hizo al molinero tiempo atrás.
Había una vez un molinero que hizo encontró en el estanque a una joven
fortuna con su molino. Pero como lo flotando sobre el que le prometió
que viene se va, el molinero iba año que sus riquezas volverían a cambio a año perdiendo su fortuna hasta de que le diera lo que acaba de quedarse otra vez pobre. Un día se nacer en la casa. El hombre acepto sin molinero volvió a la había dado a luz un reparo pensando que casa muy alegre y niño. El molinero que lo que habría nacido consolado cuando en herido por la noticia, en la casa sería algún ese momento salió la ya que se sintió perro o gato. La ninfa criada de la casa engañado por la despareció dentro del anunciando al ninfa estanque y el hombre que su mujer Se acercó a su mujer que notó su cara triste y el molinero le contó lo ocurrido en el estanque y la promesa que le había hecho la ninfa. Pasó el tiempo y las riquezas crecieron de nuevo, a la vez que su hijo al que el molinero le había prohibido acercarse al estanque diciéndole que si se aproximaba, del agua saldría una mano y lo arrastraría al fondo para siempre. Los años siguieron pasando y el niño creció convirtiéndose en un bello muchacho, el cual se fue a vivir con una joven a una casa que les regaló un cazador para el que trabajaba. Un día mientras corría por el bosque tras la caza de un corzo, después de cazarlo se acercó al estanque a lavarse las mano y en ese momento, la ninfa salió del estanque arrastrándolo hacia el fondo.