Está en la página 1de 4

DISCURSO

Buenas tardes a todos (profesores, padres, familiares, alumnos, exalumnos y a


todos los aquí presentes). Muchas gracias por asistir a este evento tan importante
para nosotros y esperamos que haya sido de su agrado y que lo hayan disfrutado.
Este concierto ha sido el resultado de muchos años de esfuerzo con todo lo que
eso conlleva (lloros, estrés, y muchos nervios, pero también momentos alegres
que llevaremos siempre en nuestras vidas). Todo esto no hubiera sido posible sin
nuestros padres y familiares, a quienes queremos comenzar agradeciendo toda la
paciencia, cariño y especialmente esfuerzo que han tenido para que nosotros
podamos estar hoy aquí.

Por supuesto también queremos agradecer a todos los profesores del centro que
nos han acompañado y guiado por este camino. Desde el coro en nuestros inicios
con Ruth hasta las intensas pero interesantísimas clases con Miguel.
Es precisamente de él de quién queríamos comenzar a hablar: antes que nada,
queremos agradecerte la grandísima paciencia que has tenido con nosotros estos
años, en ocasiones más que necesaria. Siempre te recordaremos como ese
profesor que supo transmitirnos su gran pasión por la música y todo el mundo
que la rodea. Gracias por tus enseñanzas y por esas tertulias tan interesantes que
hemos tenido sobre el mundo de la música.

Por otra parte, y remontándonos a nuestros orígenes aquí, como no hablar de


Ruth, que, aunque estos últimos años no nos haya dado clase, jamás olvidaremos
aquellas clases de coro en las que en ocasiones, nuestro mayor temor era que
Ruth nos ordenada cantar solos. (Risas genéricas)
A pesar de ello, las guardamos en nuestro corazón con mucho cariño, con sus
obras tan significativas como Bohemian Rhapsody.

Mención especial merecen nuestros tutores, Laurent y Lucía, por todos estos años
de dedicación:
Laurent; Desde el primer día me hiciste sentir como en casa. La confianza y
serenidad que trasmites en cada una de tus clases fue esencial para que me
sintiera cómoda en un sitio desconocido para mí. Sólo puedo darte las gracias,
porque gracias a tus esfuerzos por enseñar y transmitir tu pasión por la música,
somos capaces de plantarnos aquí a interpretar estas obras. Gracias por tu
paciencia, pues somos conscientes de que no somos los mejores alumnos, y
alguna vez Bach, Rode o Brahms nos han superado, pero siempre sabes cómo
tratarnos para que nunca tiremos la toalla, aunque en varias ocasiones lo hayamos
intentado. Tu cercanía con cada uno de tus alumnos hace que no solo seas un
gran profesor, sino también alguien a quien le podemos contar siempre nuestros
problemas, pues tus consejos para estos son siempre muy valorados. (No me
queda más que agradecerte por cada clase amenizada con tus historias y tu
preocupación por nosotros)

Lucía; Siempre recordaré el primer día que tuve clase con ella con esos nervios
de saber si va a ser una profesora estricta y poco cercana.
Si que es verdad que de primeras parecía un poco tímida, pero a medida que fue
pasando el tiempo y fuimos cogiendo confianza entre nosotros y se ha creado un
gran vínculo profesor-alumno muy especial. Por no hablar de todo lo que se
preocupa de nosotros preguntándonos siempre por nuestros problemas o
preocupaciones, sintiéndonos protegidos y valorados; haciéndonos saber que en
cualquier momento podemos contar con ella y que va a estar ahí para nosotros.
Solo tengo palabras de agradecimiento hacia ella y quiero que sepa que, gracias a
su pasión porque aprendamos y no nos frustremos, aunque las cosas nos salgan
mal, es una persona que siempre voy a tener en mente en mi día a día. Muchas
gracias por todas las risas y todos los buenos y malos momentos que hemos
experimentado a tu lado.

Finalmente, profesores que, aunque no nos hayan dado clase como por ejemplo el
actual director del centro de música, Pablo, han contribuido a que nuestra
formación sea lo más plena posible.
También queremos agradecer a todo el personal del centro que hace que todo
esto sea posible y por supuesto agradecer a al director Luis José, que también
hace que todo esto sea posible y nos ayuda con todo lo que necesitemos.

Por supuesto no podríamos acabar este discurso sin mencionarnos a nosotros


mismos no solo como compañeros sino también como amigos, ya que en estos
años se han forjado grandes amistades que continuarán después de esta etapa.

Quiero comenzar hablando de Claudia, la cual no solo es una gran pianista, cómo
ya habéis podido comprobar, sino también una gran persona. Hace un par de
años, cuando yo llegué a este conservatorio, ella me hizo sentir desde el primer
minuto como en casa, apoyándome siempre, no solo en el ámbito musical, sino
también en todos los ámbitos posibles de la vida. Claudia; durante este tiempo
hemos compartido muchos momentos tanto dentro como fuera de las aulas, y
puedo afirmar que te has convertido en una pieza fundamental de mi puzle
llamado vida. Gracias por esta amistad que construimos desde el primer día,
(pues no nos olvidemos que hubo gente que pensaba que nos conocíamos de toda
la vida cuando sólo nos conocíamos de una semana) y que perdurará más allá de
esta etapa. Gracias por tu carisma, simpatía y sinceridad que te caracterizan. En
definitiva, es una amistad que tengo claro que conservaré más allá de esta carrera
musical, al igual que me ocurre con todos mis compañeros aquí presentes.

Yo tengo el honor de hablar de mi gran y querido compañero y amigo Alberto o


(Alber para los amigos) y antes que nada me gustaría recordar cuando ya en la
escuela de música, Alber, el mayor del grupo nos ayudaba con los deberes y las
tareas de forma apresurada antes de entrar a clase con ese espíritu de ser (el
mayor del grupo).
Hoy Alber es un grandísimo amigo y más especialmente, una grandísima persona
que me ha acompañado en mi vida en momentos muy bonitos para ambos.
El es el ejemplo de cómo una amistad puede crecer tanto hasta hacerse tan
grande como lo es a día de hoy.
Quiero darte las gracias por haber sido un apoyo incondicional no solo en lo
musical, si no especialmente en lo personal, ayudándome en tantas cosas y
aconsejándome en todo aquello que tú sabes bien que me preocupó algún día.
También quiero darte las gracias personalmente y en nombre de todos por haber
aportado momentos tan bonitos a nuestra vida, con tu sentido del humor tan
característico y con esa alegría que desprendes siempre.
Podría seguir dándote las gracias Alber por muchas cosas, pero ya lo sabes todo
perfectamente. Gracias por todo Albertín.

Continuando hablando sobre mi gran amiga Sara, remonto hace


aproximadamente dos años cuando los profesores nos decían que se iba a unir a
nuestro grupo una chica nueva y todos estábamos súper nerviosos con la intriga
de saber quién iba a ser nuestra compañera. Cuando nos conocimos por primera
vez fue cuestión de minutos en saber que nos íbamos a llevar muy bien (y a las
pruebas me remito). Sara es una chica muy alegre que se preocupa más por sus
amigos que por ella misma y la que mejores consejos da, literalmente se podría
decir que es la psicóloga del grupo. Por esto mismo no puedo estar más que
agradecida porque nuestros caminos se hayan juntado y por todos estos
momentos que hemos vivido juntas. Gracias.

Seguimos con Jesús, que, para hablar de él, la verdad, necesitaría alrededor de 3
o 4 horas, pero como me han pedido que sea breve, intentaré resumirlo.
Ya fuera de ser un pianista excepcional, eres una de esas personas que te alegran
el día, y en cuestión de segundos te ha sacado una sonrisa. Desde que con 8 años
te conocimos en las clases de música, supe que serías una persona que estaría
siempre ahí, a nuestro lado. Poco a poco, te has ido convirtiendo en alguien muy
especial en quien puedo confiar o pedir consejo, un amigo que siempre va a dar
lo mejor de sí mismo para ayudarte.
Desde que llegué a una clase donde yo, por edad, sobresalía un par de años, supe
que la pequeña diferencia entre nosotros no sería nada, ya que fuiste uno de los
que más me ayudó a integrarme y a sentirme incluido en ella. Ese gesto, como
otros tantos que has hecho por mí, será algo que nunca olvidaré; al igual que los
momentos vividos fuera del conservatorio, que espero que sigan siendo igual que
hasta ahora.
Es por ello que tu entrega hacia los demás, tu generosidad y toda tu personalidad,
te hacen único.
Para concluir, creo que hablo en nombre de nosotros tres cuando digo que eres de
las mejores personas que hemos conocido y que esperamos que sigas junto a
nosotros al igual que todos estos años.
Por último, no queremos dejar sin mencionar y reiterar nuestro agradecimiento a
Jonás y Adrián, ya que han ayudado también a que este concierto salga adelante
y con su ayuda estos años, poder llegar hasta nuestra última actuación

Lucía, Santiago; que no han podido asistir, son sin duda el ejemplo de
compañerismo que todos hemos llegado a desear, porque su entrega, su ayuda en
diferentes materias, o motivación en momentos difíciles, como cuando una obra
no nos sale como esperamos o agobios ante exámenes, son gestos que
demuestran lo maravillosas personas que son.

Y para finalizar, ahora sí, queremos dar las gracias una vez más a Dora, nuestra
compañera y amiga que, no le ha valido solo su esfuerzo por acompañarnos
diferentes años en orquesta, sino que ha querido estar con nosotros hoy, en uno
de los mejores días de nuestra carrera musical y poner el broche final a este acto
con su maravillosa obra pianística, demostrando así el virtuosismo que ella posee
y la excelente vocación que siente por este instrumento

Una vez más, gracias a todos, alumnos, exalumnos, padres, familias, amigos y
profesorado, por la motivación, ayuda y entrega durante todos estos años.

También podría gustarte