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ECO 280 NE y X1

Sem. 2/2023
NOMBRE: MAURCIO CAMPOS
REGISTRO: 200911503

Cuestionario 3.- La economía europea en la Edad Moderna (siglos XVI-XVIII)

1. ¿Qué entiende Ud. por “mercantilismo”?


El mercantilismo surgió como sustituto al feudalismo pero con su origen en
este, los señores feudales poseían arcas de guerra donde acumulaban lingotes
y monedas para solventar las hostilidades. El en el siglo XVI los gobiernos
adoptaron esta forma de financiamiento, conocida como bullonismo en el
intento de acumular dentro del país tanto oro y plata como fuera posible y
penando su exportación con pena de muerte. Es un sistema político y
económico donde se busca acumular metales preciosos como reflejo de poder
y bienestar económico. Los créditos a grandes empresarios eran característicos
también. El fomento a la industria y manufacturas, la prohibición a las
importaciones y fomento a las exportaciones, conocidas como proteccionismo,
estaban presentes en el mercantilismo.
2. ¿Qué efectos económicos tuvieron las políticas estatales adoptadas por la
Corona española en la Edad Moderna?
Pese a tener muchos ingresos por metales preciosos del nuevo mundo, fuertes
impuestos a artesanos, campesinos siendo estos los menos capaces de pagarlos
y la herencia de nuevos reinos en gran parte de Europa, no tuvieron éxito por
sus tendencias belicosas y su vida ostentosa, arquitectura monumental y
ceremonias con excesivo lujo, todo esto era casi el tota de sus ingresos.
Cayeron en prestamos de banqueros alemanes, italianos e incluso mercaderes
y nobles llegando al punto de la bancarrota nacional.
3. ¿Cómo se explica el ascenso y la caída de Portugal como potencia?
Portugal tuvo una ventaja significativa en el diseño de barcos y técnicas de
navegación gracias a la herencia de las exploraciones lideradas por el príncipe
Enrique el Navegante. Esto les permitió aventurarse en el océano Índico y
establecer rutas comerciales en Asia.
En el momento en que Portugal comenzó su expansión marítima, los gobiernos
locales en Asia estaban debilitados y divididos por razones independientes de los
acontecimientos en Europa. Esta debilidad permitió a los portugueses establecer
su presencia y control en la región.
Los exploradores portugueses estaban impulsados por el celo religioso, el valor y
la búsqueda de riquezas. Muchos se aventuraron en los mares en busca de
fortuna al servicio de Dios y del rey de Portugal.
Portugal logró un monopolio temporal en el comercio de especias al interrumpir
las rutas terrestres tradicionales hacia el Mediterráneo oriental, lo que afectó a
los venecianos. Sin embargo, este monopolio no fue sostenible a largo plazo.

A pesar de su éxito inicial, Portugal no tenía suficientes recursos para controlar


eficazmente todas sus posesiones y rutas comerciales. Su flota estaba limitada en
número y no podía vigilar la vasta extensión de dos océanos.
La ineficacia y la venalidad de los funcionarios reales encargados de hacer
cumplir el monopolio y los contratistas que arrendaban partes de él llevaron a la
ineficacia y el fraude en el sistema, socavando los objetivos de la Corona.
La imposición de impuestos y gravámenes significativos a las mercancías afectó
el comercio y fomentó la evasión fiscal. La Corona se vio obligada a pedir
préstamos y acumular deudas.
La persecución religiosa, en particular la Inquisición, creó un ambiente de mutua
sospecha y desconfianza en la sociedad portuguesa. Esto provocó la emigración
de personas cualificadas y profesionales, lo que afectó la economía y la sociedad.
La unión de Portugal con España en 1580, bajo el reinado de Felipe II, expuso al
imperio portugués a los ataques de potencias extranjeras, como los holandeses,
que saquearon posesiones portuguesas tanto en Oriente como en Occidente.

En resumen, el ascenso de Portugal como potencia se debió a factores como la


innovación en la navegación, la debilidad de los gobiernos locales en Asia y la
motivación de los exploradores. Sin embargo, su caída se debió a problemas de
gestión, corrupción, cargas impositivas, persecución religiosa y conflictos
externos que debilitaron su imperio.

4. ¿Cuáles eran las principales características del nacionalismo económico


propuesto por los “cameralistas”?
Los cameralistas eran partidarios de fortalecer la autoridad de los príncipes
territoriales en sus estados. Abogaban por la autonomía política y económica
de estos territorios, en oposición a la autoridad centralizada del Sacro Imperio
Romano Germánico.
Los cameralistas abogaban por restringir el comercio exterior. Promovían
aranceles y barreras comerciales para proteger la economía local y reducir la
dependencia de los productos extranjeros.
Los cameralistas promovían la producción interna y la manufactura nacional.
Buscaban reducir la importación de bienes manufacturados y promover la
producción local. Abogaban por la colonización de tierras baldías, lo que
implicaba una expansión territorial y el desarrollo de nuevas áreas para
aumentar la producción de alimentos y recursos. Los cameralistas estaban
interesados en brindar empleo a los "pobres desocupados" y, en algunos casos,
esto implicaba el trabajo forzado para aumentar la fuerza laboral y la
producción.
Para implementar estas políticas, se crearon cátedras especiales en
Staatswissenschaft (ciencia del Estado) en varias universidades alemanas para
formar futuros funcionarios. La administración centralizada y la gestión eficaz
de los recursos del Estado eran elementos esenciales para el éxito de sus
políticas.

Es importante destacar que estas políticas estaban destinadas a fortalecer la


posición de los gobernantes territoriales y sus estados individuales, y no
necesariamente a promover una unidad económica o política a nivel de
Alemania en su conjunto. Las políticas variaron en efectividad y alcance en
diferentes estados alemanes y a lo largo del tiempo. El ejemplo más destacado
de éxito en la implementación de políticas de nacionalismo económico fue el
ascenso de Prusia bajo los Hohenzollern.

5. ¿Qué impacto económico tuvo el “colbertismo” en Francia?


Colbert implementó una política económica fuertemente mercantilista. Esto
implicaba una intervención activa del Estado en la economía para promover la
acumulación de riqueza nacional y el equilibrio de pagos. Se fomentaron las
exportaciones y la sustitución de importaciones a través de altos aranceles y
regulaciones específicas.
Bajo Colbert, se promovió el desarrollo de la industria y la manufactura en
Francia. Se otorgaron subsidios a las "manufactures royales" para producir
artículos de lujo y bienes manufacturados de alta calidad. Además, se emitieron
reglas y regulaciones detalladas sobre la producción y el comercio de estos
bienes, destinadas a mejorar la calidad y aumentar la productividad.
Colbert buscó centralizar el poder económico en el gobierno y estableció un
sistema de regulaciones económicas detalladas. Estableció inspecciones y
regulaciones para controlar la calidad y el cumplimiento de las leyes
comerciales y de manufactura.
Colbert implementó un sistema de aranceles proteccionistas para proteger la
industria y la manufactura nacionales. Estos aranceles se aplicaron tanto a las
importaciones como a las exportaciones, lo que generó conflictos comerciales
con otras naciones.
Se promovió la colonización y el comercio ultramarino, en parte mediante la
creación de monopolios reales y sociedades anónimas para controlar el
comercio en las Indias Occidentales y Orientales.
Colbert trató de reformar el sistema fiscal francés, aunque con un éxito
limitado. El caótico sistema de impuestos se mantuvo sin cambios en gran
medida, y se recurrió a la venta de cargos para financiar las necesidades del
Estado. La venta de cargos, aunque no fue iniciada por Colbert, continuó bajo
su mandato. Esto creó una proliferación de cargos públicos que a menudo eran
ineficaces y corruptos, lo que tenía un impacto negativo a largo plazo en la
administración estatal.

El "colbertismo" tuvo un impacto mixto en la economía de Francia. Aunque se


promovió el desarrollo de la industria y la manufactura, y se buscó fomentar la
autosuficiencia económica, las políticas proteccionistas a veces generaron
tensiones comerciales con otras naciones. La centralización del poder y la
regulación económica detallada también tuvieron efectos variados en la
economía, y la incapacidad para reformar completamente el sistema fiscal y el
recurso a la venta de cargos contribuyeron a problemas económicos a largo
plazo.

6. ¿Cuáles fueron los factores principales que explican el crecimiento


económico de los Países Bajos?
La estructura de gobierno de la República Holandesa era significativamente
diferente de las monarquías absolutas de la Europa continental. Los Estados
Generales se centraban en la política exterior, mientras que los asuntos
internos estaban en manos de los estados provinciales y los ayuntamientos.
Esta descentralización permitía una mayor autonomía y eficiencia en la toma de
decisiones económicas a nivel local.
La economía holandesa dependía en gran medida del comercio internacional.
Los holandeses se especializaron en el comercio marítimo y establecieron una
red de conexiones comerciales en todo el mundo, lo que les permitió importar
materias primas y productos semielaborados, así como exportar productos
terminados y bienes manufacturados.
Los Países Bajos se destacaron en el transporte de mercancías, y sus barcos
representaban una parte significativa del tráfico marítimo en el mar del Norte,
el Báltico, el golfo de Vizcaya y el Mediterráneo. Esta posición dominante en el
comercio marítimo contribuyó a su crecimiento económico. La pesca del
arenque fue una parte esencial de la economía holandesa, empleando a
aproximadamente una cuarta parte de la población. Los holandeses
desarrollaron métodos avanzados para conservar y distribuir el arenque seco,
ahumado y salado, lo que les permitió abastecer a toda Europa con este
producto altamente demandado.
A pesar de que la agricultura ocupaba una proporción menor de mano de obra
en comparación con otras regiones, la agricultura holandesa era altamente
productiva y se especializaba en productos de alto valor, como mantequilla,
queso y cultivos industriales. Inmigración y capital humano: Los Países Bajos del
norte, en particular Holanda y Zelanda, atrajeron a inmigrantes de otras partes
de Europa, incluidos mercaderes y artesanos cualificados, así como refugiados
religiosos, judíos y hugonotes. Esta inmigración aportó capital y mano de obra
cualificada a la economía holandesa.
Los Países Bajos mantuvieron una política de tolerancia religiosa única en su
tiempo. A pesar de algunos intentos de imponer una nueva ortodoxia religiosa,
la oligarquía mercantil logró mantener la libertad religiosa, lo que atrajo a
personas de diversas creencias y contribuyó a su crecimiento económico.
En general, los holandeses seguían una política de libre comercio y no imponían
aranceles significativos a las importaciones y exportaciones. Las regulaciones
gremiales eran menos restrictivas que en otros países, lo que fomentaba la
actividad económica. Aunque los holandeses abogaban por la libertad en los
mares, estaban dispuestos a proteger sus intereses en el comercio marítimo y
se involucraban en guerras para mantener sus derechos de transporte de
mercancías a todas las partes. Las Compañías de las Indias Orientales y
Occidentales desempeñaron un papel importante en la expansión y
consolidación del comercio y el control territorial en las colonias, lo que
permitió a los holandeses establecer un control monopolístico en el comercio
con sus colonias.

La combinación de una estructura de gobierno descentralizada, un enfoque en


el comercio internacional, la especialización en sectores económicos clave, la
inmigración de capital humano, la tolerancia religiosa y la defensa de sus
intereses comerciales contribuyeron significativamente al crecimiento
económico de los Países Bajos en los siglos XVI y XVII.
7. ¿Cuáles fueron las principales características de las políticas económicas
adoptadas en Gran Bretaña durante la Edad Moderna?
A lo largo de los siglos XVI y XVII, Gran Bretaña experimentó una evolución
gradual hacia un gobierno constitucional. A diferencia de muchas monarquías
absolutas continentales, en Gran Bretaña, el poder monárquico disminuyó, y
se estableció una monarquía constitucional bajo control parlamentario
después de la Revolución Gloriosa de 1688-1689.
El Parlamento británico desempeñó un papel crucial en la formulación y
aplicación de políticas económicas. A diferencia de muchas asambleas
representativas continentales, el Parlamento inglés nunca renunció a su
prerrogativa de aprobar nuevos impuestos, lo que a menudo llevó a
conflictos entre la Corona y el Parlamento.
Se establecieron mecanismos para garantizar la estabilidad financiera. En el
decenio de 1690, se creó una deuda pública formal, el Banco de Inglaterra y
un mercado organizado para valores públicos y privados. Estas medidas
ayudaron a financiar las guerras y fomentaron el desarrollo económico.
Las Leyes de Navegación, implementadas en 1651 y reforzadas después de la
Restauración de Carlos II en 1660, reservaban el comercio internacional para
la marina mercante británica. Estas leyes buscaban proteger y promover la
marina mercante inglesa y la economía británica, aunque a menudo tenían
un impacto negativo en los consumidores.
A través de regulaciones selectivas, como la prohibición de importar calicos
(telas de algodón estampadas), se promovió el desarrollo industrial en áreas
como la manufactura del algodón, que se convertiría en la cuna de la
Revolución Industrial en Gran Bretaña.
Gran Bretaña siguió una política de nacionalismo económico estricto,
promoviendo la producción y el comercio internos y protegiendo las
industrias nacionales. Esto se manifestó a través de leyes y regulaciones que
buscaban impulsar la economía británica.

Las políticas económicas de Gran Bretaña durante la Edad Moderna estaban


marcadas por un gobierno constitucional, un papel activo del Parlamento, un
enfoque en la estabilidad financiera, la promoción de la marina mercante
británica, el desarrollo industrial y un fuerte nacionalismo económico. Estas
políticas desempeñaron un papel fundamental en el crecimiento económico
de Gran Bretaña y su ascenso como una potencia económica y colonial en la
época moderna.

Bibliografía básica
Rondo Cameron y Larry Neal, Historia económica mundial desde el paleolítico hasta el
presente. Madrid: Alianza Editorial, 2014 (Ed. electrónica). Traducción de la 4ª ed. en
inglés publicada por Oxford University Press en 2002. Cap. 6, pp. 151-184.

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