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Acciones que emprendió como grupo para el logro de sus objetivos

Bajo el espectro del final de la Primera Guerra Mundial, en 1919, se formó el “Partido
Obrero Alemán” (Deutsche Arbeiter Partei, DAP). Ese año ingresó Adolf Hitler como
miembro, asumiendo el rol de jefe de propaganda. En 1920 se cambió el nombre a
“Partido Nacional Socialista Obrero Alemán”, más conocido como Partido Nazi.
El Partido Nazi fue uno de los que manifestaba su descontento con la rendición de
Alemania y la imposición de fuertes medidas compensatorias al país después de la
Primera Guerra Mundial, lo cual provocó una reacción nacionalista en la población que no
comprendía el resultado de la guerra.
El nuevo régimen que se estableció, la República de Weimar, tuvo que enfrentar
problemas económicos, sociales y políticos. Esto incluyó levantamientos de distintos
sectores políticos y la dificultad para establecer su autoridad.
Entre los distintos intentos de golpe de Estado ocurrió el del Partido Nazi, en noviembre
de 1923, bajo el liderazgo de Adolf Hitler. Hitler fue condenado a cinco años de cárcel,
aunque es liberado tras 10 meses. Durante esos meses en prisión escribió su libro “Mi
Lucha” (Mein Kampf).
En esta obra presenta su plataforma ideológica con la cual Partido Nazi crecerá durante la
década de 1920, y llegará al poder en 1933. El texto expone:
Autoritarismo y autoridad total del líder: el Führer, o líder supremo, tenía la autoridad y
control frente a todas las instituciones y organizaciones del régimen nazi y sobre todos los
ciudadanos. Se esperaba una lealtad total al líder.
Estado totalitario: se establecía un control en todos los aspectos de la vida cotidiana,
que los límites entre el espacio público y el privado se borraron. Toda actividad dentro de
Alemania pasaba a estar supeditado a contribuir al partido nazi y a la lealtad al Führer.
Ejército alemán.
Antiparlamentarismo: rechazo a la forma
democrática de elecciones por mayoría,
porque considera que el líder y el partido
tienen la autoridad absoluta. Rechazan la
participación de todas las personas, sólo
acepta la de aquellos considerados
ciudadanos.
Libertades individuales: son sometidas al
interés general del partido, y son sólo para
aquellos que son considerados ciudadanos.
Racismo/Estado racista: el racismo fue una
parte esencial de la ideología nazi. Proponía que los seres humanos estamos divididos en
razas, estando en la cúspide como una “raza superior” la raza aria de la cual los alemanes
eran sus principales representantes. Asimismo, había razas inferiores, como los esclavos
y negros; y grupos que se encontraban en las escalas inferiores de las categorías
raciales, como los judíos. El nazismo identifica a los judíos como su “enemigo racial”, la
antítesis de la raza aria. La presencia de los judíos en Alemania significaba una amenaza
a la pureza racial, por lo que buscaban eliminar a los judíos del país. Esta forma de
entender el mundo fue inculcada a los alemanes a través de las escuelas cuando el
nazismo llegó al poder, en 1933. El Estado comienza a adoctrinar a la juventud en las
teorías racistas por medio de una educación racial.
Sólo quienes son de raza aria pasan a ser ciudadanos.
Uso de la fuerza: era considerado como un mecanismo efectivo para imponer la
ideología nazi.
Espacio vital: es un concepto esencial de la ideología nazi, vinculado con las
necesidades de la raza aria para su desarrollo. Según el nazismo, la raza aria necesitaba
espacio para desarrollar su destino. Luego de la Primera Guerra Mundial, los límites de
Alemania habían sido reducidos, por lo que era necesario expandirse y conquistar los
territorios en los que habitaban personas de raza aria. Así, se lograría equiparar la
superioridad de la raza aria con su extensión territorial.
El partido fue aumentando su presencia en la política durante la década de 1920 sin tener
una votación mayor al 3%. Tras la crisis económica, de 1929, el sistema político en
Alemania se vio afectado de forma profunda. En las elecciones de 1930, tanto el partido
nazi como el partido comunista pasaron a tener cerca del 20% en el Parlamento Alemán,
el Reichstag. En 1932, el Partido Nazi, con un 30%, tuvo la mayor representación en el
Parlamento Alemán.
Tras los resultados, en 1932, y junto con una alianza con el Centro Católico y los
nacionalistas, Hitler fue nombrado como Canciller por el Presidente Hindenburg. Una vez
como canciller, Hitler logró concentrar todo el poder y convertirse en el Fuhrer alemán, así
comenzó la destrucción de la democracia alemana. En julio de 1933, todos los partidos,
excepto el nazi, son prohibidos y se impidió la formación de nuevos partidos políticos,
dejando a los nazis como la única organización política.
Símbolos del Partido Nazi.
Con Hitler y el Partido Nazi en el poder
comenzó una difusión de su ideología a
través de la propaganda y educación estatal,
que incluía la transmisión a las colonias
alemanas en distintas partes del mundo.
Medios utilizados del nazismo para lograr
sus objetivos.

Los medios utilizados para lograr sus


objetivos fueron la propaganda que fue el intento coordinado del partido nazi para influir
en la opinión pública alemana a través del empleo de la propaganda en los medios de
comunicación. Fue empleada por el partido nazi y posteriormente, tras el ascenso al
poder de Adolf Hitler, por el gobierno de Alemania hasta el final de la Segunda Guerra
Mundial. El cine, la televisión y la radio fueron utilizadas como herramienta
propagandística por ambos bandos antes y durante el conflicto bélico. La propaganda nazi
proporcionó un instrumento crucial para adquirir y mantener el poder, así como para la
implementación de sus políticas, incluyendo la prosecución de la guerra total y el
exterminio de millones de personas durante el Holocausto y durante la ocupación de la
Unión Soviética.

La cantidad de víctimas del nazismo


Muchas otras personas y pueblos fueron víctimas del régimen nazi por razones políticas,
sociales o raciales. Los alemanes de izquierdas, incluidos comunistas, socialistas y
líderes de los trabajadores, se encontraban entre los primeros en ser perseguidos debido
a sus actividades políticas. Muchos de ellos murieron en campos de concentración, pero
la mayoría fueron puestos en libertad, después de destrozarles el ánimo.

Las víctimas fueron personas atacadas por el gobierno de la Alemania nazi mediante
diversas prácticas discriminatorias debido a su origen étnico, religión, creencias
políticas u orientación sexual. Estas prácticas institucionalizadas se denominan como
el Holocausto, y comenzaron con la discriminación social legalizada contra grupos
específicos, como la hospitalización involuntaria, la eutanasia y la esterilización forzada de
aquellos que se consideran física o mentalmente no aptos para la sociedad. Estas se
intensificaron durante la Segunda Guerra Mundial que incluían encarcelamiento no
judicial, confiscación de propiedad, trabajo forzado, esclavitud sexual, experimentación
médica, muerte por exceso de trabajo, desnutrición y ejecución a través de una variedad
de métodos, con el genocidio de diferentes grupos como el objetivo principal.

Víctimas Asesinados Fuente

1
Judíos 5 a 6 millones

5.7 millones (excl. 1.3 millones de 2


Ciudadanos soviéticos
judíos)

Prisioneros de guerra 3
2.8 a 3.3 millones
soviéticos

456
Polacos 1.8 a 3 millones

78
Serbios 300 000 a 600 000

9
Discapacitados 270 000

1011
Gitanos o romanís 130 000 a 500 000

1213
Masones 80 000 a 200 000
14
Eslovenos 20 000 a 25 000

15
Homosexuales 5000 a 15 000

16
Republicanos españoles 3500

17
Testigos de Jehová 1250 a 5000

Según el Museo del Holocausto de los Estados Unidos (USHMM, por sus siglas
en inglés), el memorial oficial del Holocausto en Estados Unidos, «el Holocausto fue el
asesinato de seis millones de judíos y millones más a manos de los nazis y sus
colaboradores durante la Segunda Guerra Mundial». El museo calcula el número total de
asesinados durante el Holocausto en 17 millones: 6 millones de judíos y otros 11 millones
incluidos civiles soviéticos, polacos, prisioneros de guerra, discapacitados, etcétera.
Opinión publica sobre los actos del partido nazi
 el nazismo fomentó el odio suficiente como para empezar una guerra que acabó
con la vida de más de 40 millones de personas.
 En 1933, Hitler llega al poder y convierte a Alemania en una dictadura.
 Los nazis intentaban transformar el mundo conforme a su concepto de él, muy
influido por el Darwinismo y por la creencia de que, a lo largo de la historia de la
Humanidad, los fuertes han dominado a los débiles. Consideraron que el pueblo
alemán poseía cualidades raciales superiores y debía dirigir a las razas inferiores.
Tras el estallido de la Segunda Guerra Mundial, llevaron a cabo una serie de
proyectos que podrían definirse como una reestructuración racial para hacer
realidad su utopía. Clasificaban a las personas conforme a supuestas categorías
raciales científicas, las trataban como a títeres y las trasladaban de un sitio a otro
ante la mirada impasible de Europa, por lo general, vulnerando por completo sus
derechos humanos fundamentales. Los nazis consideraban a los judíos sus
enemigos acérrimos por motivos raciales, cuya "influencia" sobre el resto de la
humanidad era necesario frenar.
Análisis del grupo sobre el nazismo
Adolf Hitler fue un alemán mediocre que no destacó ni en los estudios ni en el arte (ya que
no pasó de ser un pintor callejero) ni en la carrera militar y que, incluso, tuvo que mitigar el
hambre asistiendo a un comedor social dirigido por monjas en Viena. De carácter
autoritario ni siquiera era apto para el ejército y tuvo que alistarse como voluntario en el
batallón bávaro en el que solo llegaría a ascender a cabo a lo largo de toda la I Guerra
Mundial. Podríamos decir que Hitler era una persona desclasada, lobo entre los lobos que
supo aprovechar hábilmente los escrúpulos y las contradicciones de sus adversarios,
utilizando una mezcla de cinismo y fraseología idealista y de valores irracionales puestos
al servicio de cálculos oportunistas. La imagen legendaria que Hitler había forjado de sí
mismo como persona ascética, dispuesto al sacrificio, desinteresado, al servicio del
pueblo y capaz de renunciar a su sueldo como canciller del Reich son absolutamente
falsas. Se sabe que ya desde los primeros años de la década de los veinte del siglo
pasado, recibía y gestionaba, cuantiosas donaciones y fondos procedentes del mundo
empresarial alemán y norteamericano. Además, cuando Hitler llegó al poder cobraba dos
sueldos, el que le correspondía como canciller y como presidente de Alemania. Se sabe
que Hitler ganó 8 millones de marcos imperiales por los derechos de autor de su libro Mi
lucha que el Estado regalaba a los recién casados e incluso recibía sumas de dinero por
las ventas de Correos que llevaban su retrato e ingresos procedentes de las fotografías
en las que aparecía, herencias de miembros del partido, etc., todo acababa en los
bolsillos del Führer, de tal modo que cuando se suicidó, en su bunker de Berlín, contaba
con una considerable fortuna. El Führer comienza a ser conocido en Alemania después
del fracasado golpe de estado de Munich, de noviembre de 1923 y se da cuenta de que
importantes sectores sociales y económicos pretenden acabar con la República de
Weimar y que la justicia alemana no condena con energía los ataques contra la República
alemana, sino que es condescendiente con los sectores más reaccionarios de la sociedad
alemana. Para conseguir ascender al poder hasta convertirse, primero en canciller y
después en dictador de Alemania, utilizó todo tipo de mecanismos ilegales además de la
mentira y el engaño apoyándose en la brutal crisis económica que padecía Alemania en
los primeros años treinta del siglo pasado. Considero falsa la afirmación realizada por
muchos historiadores que indican cómo el partido nazi consigue el poder en Alemania de
forma legal y democrática al ganar las elecciones de noviembre de 1932 y marzo de 1933.
No estoy de acuerdo con esa afirmación por dos motivos básicamente. En primer lugar,
Hitler y los dirigentes del partido nazi se apoyaron en sus batallones de asalto (las SA)
que estaba formado por decenas de miles de personas entrenadas y adiestradas para
intimidar, golpear y asesinar a sus adversarios políticos por las calles de las ciudades
alemanas y, evidentemente, ese tipo de actuaciones ni son legales ni democráticas. En
segundo lugar, la financiación del partido nacional-socialista siempre estuvo oculta, sin
salir a la luz pública, y no se supo, hasta muchos años más tarde después de finalizada la
II Guerra Mundial, qué personas financiaron al partido nazi y con cuánto dinero. Por
consiguiente si el partido nazi nunca estuvo de acuerdo ni con la República de Weimar ni
con su constitución y, además, utilizaba el terror con fines políticos partidistas y no daba
cuenta públicamente del dinero que estaba recibiendo de importantes empresarios
alemanes y norteamericanos para sostenerse e intentar tomar el poder, pienso,
sinceramente, que no podemos hablar de un partido democrático (por su estructura
interna y procedimientos empleados) ni que, por consiguiente, alcanzara el poder
ganando “democráticamente” las elecciones. En política interior el gobierno nazi será
implacable contra cualquier tipo de oposición política o social construyendo (ya desde los
primeros meses de su gobierno) campos de concentración y persiguiendo con severidad a
los judíos privándoles de los más elementales Derechos Humanos. En política exterior
anexionará Austria y parte de la República de Checoslovaquía sin que las potencias
europeas hiciesen nada para impedírselo Durante la dictadura nazi la economía alemana
creció de forma apreciable. Se consiguió, en pocos años, estabilizar el marco, reducir
significativamente la inflación y acabar con el paro. No obstante, estos éxitos económicos
se consiguieron sin tener en cuenta los más elementales Derechos Humanos y Sociales
por lo que se pueden considerar como inaceptables para cualquier país medianamente
civilizado: se emplearon a millones de trabajadores esclavos de procedencia judía o
disidentes al régimen, se despedía a los trabajadores libremente de sus puestos de
trabajo sin ninguna indemnización y se potenció la economía de guerra (producción de
armas, tanques, aviones…) que llevaría, inevitablemente al estallido de la II Guerra
Mundial. En cuanto a si Hitler era una persona religiosa o, por el contrario, atea existen
disparidad de criterios entre los historiadores, aunque a mi parecer creo que no profesaba
ninguna religión y se movía en la más absoluta indiferencia en estas cuestiones
intentando, eso sí, utilizarlas en su propio beneficio personal y cuando se encontraba con
algún tipo de oposición no dudaba en expropiar las propiedades eclesiásticas, encarcelar
a algún miembro de la iglesia e incluso asesinarlo. A pesar de la férrea dictadura y
represión utilizada por Hitler nada más alzarse ilegalmente con el gobierno de Alemania
utilizando, para ello, todo el aparato represivo con el que contaba (como la SA y la temida
SS), existieron grupos de oposición interna al nazismo. Entre ellos, caben destacar,
grupos de cristianos como el denominado la Rosa Blanca que, sin emplear la violencia,
proponían un total cambio político para Alemania y el rechazo del sistema totalitario
hitleriano.
Independientemente de la oposición de grupos políticos y sociales que, con mayor o
menor intensidad se aprecian en la Alemania de los años treinta y principios de los
cuarenta del siglo pasado, al final algunos generales y oficiales del ejército alemán van a
intentar asesinar a Adolf Hitler sin conseguirlo. Tal vez el caso mejor planificado y
estudiado sea el denominado Operación Valkiria.

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