Está en la página 1de 5

Universidad Mariano Gálvez

Sede: Antigua Guatemala

Nombre: Daniela Nohemí López Ordoñez

Carrera: Psicología clínica

Primer semestre

Sección A

Licenciada: María Del Rosario Pereira Ibarra

Curso: Desarrollo humano y profesional


Síntesis

El principio de la renuncia, en la vida no somos dueños de nada simplemente somos


creaciones de Dios el cual nos encomendó el administrar toda su creación, y se nos ha
asignado una parte de esta no importando si es mucho o poco, nada es nuestro en su
totalidad, analizando este principio me doy cuenta que desde pequeño el ser humano
tiene la mentalidad de que es dueño de las cosas que lo rodean y siempre está buscando
el obtener más aunque tenga que endeudarse, también se tiene un apego emocional a
las cosas que administramos que muchas veces nos hace tomar malas decisiones a lo
largo de nuestra vida.

En el capítulo se dice que solo somos administradores o gerentes, pero este apego
emocional hace que seamos malos gerentes ya que el mundo financiero se debe tomar
decisiones frías y rápidas si queremos ser personas productivas y eficientes.
No hay duda que debemos cambiar nuestra mentalidad de dueños a administradores si
queremos prosperar en la vida y no terminar como la pareja de la historia con muchas
deudas y aferrándose a sus posesiones materiales como lo era su casa, fue hasta que
lograron comprender este principio que fueron libres económicamente hablando, de
ahora en adelante comenzare a aplicar este principio para “Llegar.

Analizando este principio, me di cuenta de que una persona tiene una mentalidad desde
muy joven. Él es el dueño de las cosas que le rodean y siempre espera obtener más,
incluso si tiene que endeudarse. También existe un apego emocional a las cosas que
manejamos, y muchas veces nos hacen tomar decisiones equivocadas en nuestras
vidas.

Dato importante:
Debemos comenzar a desprendernos de las cosas de manera emocionalmente para
empezar a disfrutar de las cosas que nos rodean y así poder ser felices.

También podría gustarte