INTRODUCCION

El Fenómeno del Niño es un evento climático complejo que afecta a nivel global. En el período
2017-2018, Perú experimentó uno de los episodios más intensos de este fenómeno. El
Fenómeno del Niño se caracteriza por el calentamiento inusual de las aguas del Océano
Pacífico ecuatorial, lo que tiene un impacto significativo en el clima y los ecosistemas.

CARACTERÍSTICAS

Durante el Fenómeno del Niño 2017-2018, las aguas superficiales del Pacífico tropical se
calentaron significativamente, generando cambios climáticos extremos en varias regiones,
incluyendo Perú. Entre las principales características de este fenómeno se encuentran:

- Aumento de las temperaturas en el océano Pacífico.

- Incremento de las precipitaciones en algunas áreas y sequías en otras.
- Cambios en los patrones de circulación atmosférica y corrientes oceánicas.

IMPACTO

Durante el período 2017-2018, el Fenómeno del Niño afectó a Perú de varias maneras:

1. Lluvias Intensas: Hubo precipitaciones extremadamente intensas en la costa norte del país,
causando desbordes de ríos, inundaciones y deslizamientos de tierra. Esto resultó en daños a
infraestructuras, pérdida de cultivos y viviendas, y afectación a la población.

2. Desertificación en la Costa Sur: Contrariamente, la costa sur experimentó una sequía

significativa, lo que llevó a la desertificación y escasez de agua. Las comunidades agrícolas
sufrieron pérdidas de cultivos y dificultades en el acceso al agua potable.

3. Incremento de Temperaturas: El aumento de las temperaturas ocasionó eventos de calor

extremo, afectando la salud de la población y agravando los problemas de escasez de agua.

RESPUESTA Y REPARACION

Ante los impactos del Fenómeno del Niño, Perú implementó medidas de respuesta y
preparación:

1. Alerta Temprana: Se fortaleció el monitoreo climático y se estableció un sistema de alerta

temprana para prevenir y mitigar los riesgos asociados al fenómeno.

2. Evacuación y Rescate: Se llevaron a cabo operaciones de evacuación y rescate para salvar

vidas en áreas afectadas por inundaciones y deslizamientos.

3. Apoyo a Comunidades: Se proporcionó asistencia humanitaria a las comunidades

damnificadas, incluyendo alimentos, agua, refugio y atención médica.

CONCLUCION

El Fenómeno del Niño 2017-2018 en Perú destacó la importancia de la preparación y la

colaboración ante eventos climáticos extremos. Aprendimos que la vigilancia constante, la
planificación y la respuesta rápida son esenciales para minimizar los impactos en la población y
el entorno. Es fundamental seguir fortaleciendo la resiliencia y la capacidad de respuesta ante
futuros eventos climáticos.