Dientes Temporarios

Entre los 7 y 26 meses aparecen en los maxilares los

dientes temporarios, que a partir de los 7 años han de
ser reemplazados por los permanentes, comenzando
por los incisivos centrales. La erupción de estos dientes
se produce cuando aún no se ha calcificado por
completo el tercio apical, el cual se integra pasado
aproximadamente de medio a un año de su aparición
en la cavidad bucal.
Vale decir que aun cuando en el arco aparezcan las coronas de las
diversas piezas temporarias, no significa que en todos los dientes
exista integridad anatómica. Siendo el segundo molar temporario el
último diente en erupcionar, a los 26 meses, sólo completa la
calcificación apical a los 3 años. Entre este momento y la primera
manifestación de resorción en el ápice de un temporario,
generalmente a los 4 años (el incisivo central inferior), el niño
presenta todos sus dientes erupcionados y totalmente calcificados.
Esta situación es la que se denomina período de estado de la
dentición temporaria.
Se ha establecido que los dientes temporarios cumplen funciones biológicas y
fisiológicas.
Las funciones fisiológicas corresponden a:
1. Acción masticatoria.

2. Establecimiento de una línea y plano de oclusión.

3. Mantenimiento de la dimensión vertical.

4. Iniciación de la fonación.
 5. Mantenimiento del espacio requerido para la correcta erupción de los dientes
permanentes.

Las funciones biológicas son las siguientes:

1. Relación de proximidad con los permanentes.

2. Actuación en el proceso de erupción de los permanentes.

3. Acción estimulante en el crecimiento de los maxilares.

Incisivos Temporarios
Su forma resulta muy parecida a la de los permanentes, la cara
palatina muestra una reducción en el tamaño, integran: cuarto
lóbulo y rebordes marginales de poco relieve y depresión con
menor excavación.
La convexidad cervical, más acentuada que
en los permanentes.

Caninos Temporarios
La corona es más aguda que la de los permanentes, porque las oblicuidades de las
vertientes incisales se exageran con respecto a aquéllos. Ocasionalmente muestra la
vertiente mayor del borde incisal situada en mesial, es decir, con disposición inversa a
la del diente de reemplazo.

Primeros Molares Temporarios

Son los únicos dientes temporarios con una forma que les es característica, no
hallándose permanente alguno que se les parezca.

Primer molar superior. Cara oclusal. De forma trapezoidal. El lado vestibular que
constituye la base mayor del trapecio, convexo y sumamente oblicuo desde mesial y
vestibular hacia distal y lingual, debido a la presencia del relieve del tubérculo de
Zuckerkandl. El lado palatino es fuerte mente convexo. Los lados proximales se
presentan con poca oblicuidad y convexidad en mesial y bastante acentuada en distal.
La superficie de la cara muestra una fosa situada más cerca de distal y equidistante de
las caras libres. Esta fosa, al igual que los surcos que de ella emergen, son poco nítidos.
En cuanto a las caras laterales, sólo difieren de las de los permanentes en lo que
respecta a la vestibular, por la presencia del tubérculo de Zuckerkandl, prominencia
del esmalte localizada en cervicomesiovestibular y que parece más abultado porque su
relieve se exagera debido a la estrangulación del cuello. No presenta este tubérculo.
como ocurría con el de Carabelli, ningún surco que lo delimite. Las caras proximales
son algo menos convexas que las de los permanentes.

Primer Molar Inferior.

Cara oclusal. De forma ovoidal, con exagerado diámetro mesiodistal. En
su superficie se encuentran dos fosas principales situadas más cerca de
distal que de mesial, ubicadas una hacia mesiovestibular y la otra hacia
distolingual y unidas por un surco oblicuo y corto. Tanto el surco como
las vertientes de las cúspides son poco notables. Al poco tiempo de
haber entrado el diente en oclusión se borran y la porción vestibular
queda como si la integrara una sola cúspide.
Los dos surcos restantes, de direcciones opuestas y longitudes
desiguales, siendo más largo el mesial de características parecidas a las
señaladas en vestibular. La mesial más aguda.
Los lados de esta cara oclusal señalan el fuerte
relieve localizado en mesiovestibular por la presencia del
tubérculo de Zuckerkandl.
De las caras laterales, la vestibular es bastante plana, pero
destaca la continuidad del surco oclusal sobre el tercio
triturante y el tubérculo de Zuckerkandl. Las caras proximales
son convexas, tal como ocurre con los permanentes.
Segundo Molares Temporarios.
No presentan con respecto a los primeros molares permanentes otras diferencias que
las citadas en las consideraciones generales. La porción radicular. aunque más grande,
es similar a la de los primeros molares temporarios.

Diferencias entre la dentición temporaria y la permanente.

1. Número de dientes. La dentición permanente se compone de 32 dientes, en
tanto que temporaria sólo tiene 20.

2. Grupos dentarios. La dentición permanente está compuesta de 4 grupos, de los

cuales falta en la temporaria la serie de los premolares.

3. Falta de correspondencia de los grupos. Mientras los incisivos y caninos son

reemplazados por los homólogos permanentes, la inexistencia de premolares
temporarios determina que los molares sean sustituidos por los premolares,
que coinciden en ellos sólo en el número y en la ubicación.

4. Discontinuidad del arco. El arco dentario permanente se dispone de tal forma

que no existe separación entre sus distintas piezas. En cambio, el arco
temporario, dado que la suma de los metros es menor que la de dientes que lo
han de reemplazar, se producen, los últimos años de la dentición, separaciones
que hacen al arco discontinuo.

5. Tamaño de la serie molar. En el hombre blanco, el tamaño de los molares es

decreciente en el arco permanente. Es decir, que el primer molar es mayor que
el segundo, el cual a su vez lo es con respecto al tercero. En la dentición
temporaria el molar más grande es el segundo.
6. Color. El color de los caducos es de un tinte blanco azulado, en tanto que los
permanentes son más amarillentos.

7. Volumen. Efectuando esta misma relación para cada arco dentario se

encuentra que hay mayor desproporción de volumen en el maxilar inferior
(permanentes: 1.49; temporarios: 1) que en el superior (permanentes: 1,33;
temporarios: 1).

8. Proporción coronorradicular. Es comparativamente mayor la porción radicular

de los temporarios que la de los permanentes.

9. Línea cervical. Los cuellos en los dientes temporarios aparecen bastante más
deprimidos que en los permanentes, determinando una mayor estrangulación
cervical.

10. Ubicación de la raíz palatina. En el diente permanente la raíz palatina se

implanta práctica- mente en el centro de la cara homóloga, carácter que no
alcanza a alterar su desviación distal. En los temporarios se ubica siempre por
detrás de la raíz distal, tal como si su emergencia de la corona se produjera a
nivel de distopalatino.

11. Tamaño de la cámara pulpar y conducto radicular. En relación con el espesor

de los tejidos duros y el tamaño del diente, las cámaras pulpares y el calibre de
 los conductos radiculares en los dientes temporarios es más amplio que en los
permanentes.

12. Sensibilidad. Esta es, ante todo tipo de estímulo, mayor en los dientes
permanentes que en los temporarios. Esto parece corresponder a una mayor
riqueza de terminaciones nerviosas.
13. Resistencia vital. Los temporarios son más susceptibles a los ataques de los
agentes infecciosos o terapéuticos. Las caries avanzan con mayor rapidez y
alcanzan a comprometer más precozmente.