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Domingo Domingo

4 La Patagónica 21 de mayo de 2023 21 de mayo de 2023


La Patagónica 5

La vida quiso que en


el instante en que
Arregui falleció se
escuchara por la
ventana, la bocina
del tren avanzando.

mejantes moles y de enganchar-


las en orden, según destino y pe-
dido de envío. Si bien fue poco el
tiempo que ejerció, aprendió de
los expertos y hoy su memoria es
la que sirvió para traerlos al pre-
sente: Tomás Quilodrán, Rubén
Puiatti, Luis Retamal, Simón
Gasparini, Victoriano y Jovel
Vergara, Pedro Ossés, Oscar Jau-
reguy y Mario Beretta. Estos últi-
mos fueron presidentes de Con-
cejo municipal en el 73 y 83,
mientras que Ossés pasó a la his-
Los ferroviarios que fueron protagonistas de esta historia. toria ciclista como el “Gamo Pa-
tagónico”, por sus victorias en la
tradicional “Vuelta al Valle”.
Los relatos para esta nota
MUSEO ALLEN
también sumaron a José Monte-
lia, la hija del ‘cambista’ Carlos cino, Daniel Navarro, Héctor
Miguel Arrarás, más conocido García, don Molina, Enrique Rat
como “El Vasco”. y Pablo Cadé. Junto a la figuras
Su infancia y la de Mavis tu- que formaba el humo del tren y el
vieron en común ese terreno in- largo pitar que advertía su avan-
menso, que se tapaba de polvare- ce, fueron testigos de la partida
da en las tardes de viento y ama- de matrimonios recién casados,
necía con escarcha por las hela- la ilusión de los jóvenes que se
das. iban a estudiar y la incertidum-
Marcó a Celia, porque ella na- bre de los convocados al servicio
ció con ayuda de una partera, ba- militar, tal como describió el
jo el techo a dos aguas de una de poeta Eduardo Pérez al respecto.
las casillas ferroviarias, que re- En diálogo con el “Semanario de
sistían junto al molino que aún la Ciudad”, en 1994, don Jovel
está en pie en el Parque Aeróbi- Vergara sumó a esa lista a los tra-
co. Y a Mavis porque llegó al bajadores golondrina que llega-
mundo varios años antes, en la ban del norte del país. Su hija
casona que todavía existe, en la Lucy guardó el recorte de esa pu-
esquina de Juan Manuel de Ro- blicación. Fue antes de los arri-
sas e Irigoyen, cerca de lo que fue bos en colectivo, que empezaron
El recuerdo de sus padres y jugar a ser ferroviarios un rato, la propuesta que llevó a disfrutar este tierno momento. Es un paseo a la infancia, a otra época. la bodega de Millacó. Integraban después de la década del ‘70.
lo que definieron como “La Colo- Esas unidades y los camiones
nia”. Mavis era hija de Rafael So- cambiaron las prioridades en
riano, ferroviario en Allen hasta Nación y la privatización termi-
MELINA ORTIZ CAMPOS
melinacampos@rionegro.com.ar
La vida con el tren: recuerdos Muchos pisaron el andén para subir al “Zapalero”, con sus valijas y baúles.
el año ‘53, cuando se mudó con la
familia a Buenos Aires. Ella aho-
ra vive en la localidad de José
nó de ejecutar la parálisis en
1993.
El homenaje por el centenario

desde Allen para entender


Marmol y aunque ya va para 83 de la actividad volvió a juntar en
Un paseo de infancia, a la sies- años, respondió a RÍO NEGRO Allen a los que quedaban de este
ta después del almuerzo de do- GENTILEZA ARMANDO TESTA
vía Messenger, en Facebook. Y equipo, en 2010. Bajo el mismo
mingo, era caminar por la vía Celia recordó: “A mi me gustaba techo con soleras, ese acto cerró
desde el plan Alborada hasta el
“centro” del pueblo, allá por los
años ‘90. Llegar al emblemático
la nostalgia de los ferroviarios mucho el ferrocarril, quería tra-
bajar ahí pero mi papá me decía
que las mujeres no hacían eso…
con el silbato en manos del pro-
pio Fernando Arregui, que reci-
bió simbólicamente la llegada de
cartel de la Estación, “Allen” en- él estaba enojado porque tenía la formación invitada. Y nadie
marcado en un rectángulo blan- cuatro varones, pero ninguno pudo contener la emoción.
co, era emocionante. El andén La ciudad celebra esta semana su 113° Aniversario con una quería seguirlo”. Después de ese instante mági-
que tantos pisaron para subir al A pesar de las ventajas que co, su salud terminó de deterio-
“Zapalero”, con sus valijas y baú- muestra alusiva en la estación, que reabre como Museo. Uno de los ofrecía “Ferrocarriles del Sud”, rarse. Hasta que en la mañana
les, ya había quedado escondido protagonistas y varias hijas de sus colegas compartieron las anécdotas esas viviendas no tenían ni luz ni del 7 de julio de 2015 falleció
del tránsito cotidiano en la calle gas. Por eso los faroles y estufas acompañado por su hija. La vida
Libertad, hoy Eva Perón. Pero que atesoran. eran indispensables. La esta- quiso que en ese instante, a las
para la curiosa mirada de la ni- ción, de hecho, se calefaccionaba 7.40, se escuchara por la venta-
ñez, las ventanas cerradas de ofi- también a leña, gracias a los dur- na, la bocina del tren avanzando.
cina invitaban a imaginar, bajo el mientes que recuperaba la em- “Le agarre la mano y le dije que si
techo adornado con soleras. desde [Fábrica] Bagliani, a Don ria: verse cada 7 o 15 días por la ga y hacienda (excepcional). Sin Después, sobre los rieles, cir- presa. El agua para consumo hu- estaba cansado que se fuera, que
En una mañana cualquiera, Bentata que retiraba las revistas distancia, la crianza solitaria de calculadora y a mano. culaban los ‘maquinistas’, al mano llegaba en un ‘vagón tan- yo lo entendía”, relató Graciela
antes de 1987, el movimiento allí de Buenos Aires, a García que su hijo, el brindis de Nochebue- El uso del telégrafo, explicado frente de la locomotora, y los ‘fo- que’, mientras que para alimen- entre lágrimas.
era distinto. Los zapatos lustra- iba por los estrenos para el cine, na en la desolación de una para- en las anécdotas de Testa, es des- guistas’, para cuando el impulso tar a las locomotoras se cargaba A pesar del abandono y el sa-
dos de Fernando Arregui identi- a Nicoli y Fausto Divano, que re- da lejana. Desde 1973 ejerció en lumbrante. Porque lograban in- era a vapor, hasta la década del bombeando desde el Canal gran- queo de sus espacios, la esencia
ficaban el paso del jefe de Esta- partían yeso”, contó Graciela. Allen, hasta 1991. ternalizar un código como el ‘60. Se convirtieron en ‘ayudan- de hasta el depósito, que todavía ferroviaria sigue viva e sigue
ción, que se movía sereno por su Todos necesitaban del tren. Y Morse y educar el oído para des- tes’ de los conductores, con la En 2010 homenajearon a los que quedaban del equipo.Testa (izq.) y Arregui (der.), presentes. está junto al molino. sembrando. En Allen, el andén
lugar en el mundo. Desde La Pla- Arregui sabía lo que hacía, por- Un prolijo engranaje cifrarlo sobre la marcha. La se- tecnología Diesel. Por su parte, se abrió al público en 1910, para
ta, su hija Graciela es la que hoy que su oficio comenzó a los 18 Cada función dentro de aque- ñal de puntos y rayas se oía, efec- en el terreno, moviendo vagones Testigos la fundación de la ciudad, que el
lo describe del otro lado del telé- años, cuando ingresó como aspi- lla rutina de lunes a lunes y las 24 tivamente, desde el aparato en el estaban los ‘cambistas’, mientras Entre tantos protagonistas, próximo jueves 25 celebrará 113°
fono. Lo recuerda de saco y cor- rante. Se jubiló obligado por la horas, tenía un nombre particu- escritorio. Viajaba por el cablea- otros compañeros recorrían la una vacante mejor, las que se hija Claudia y sus compañeros Ernesto Poblete estuvo a cargo años. Y la Asociación Museo Mu-
bata, con gorra ferroviaria a ve- edad, después de 50 años. lar y responsabilidades específi- do que unía los pueblos del valle línea haciendo mantenimiento anunciaban en el Boletín sema- coincidieron en que se encarga- Vivir en la Colonia de Arregui como cambista, a los nicipal esta semana vuelve a
ces, inspeccionando que todo es- Ese mismo cargo de jefe, aun- cas, algunas más calificadas, pe- hasta Neuquén y desde ahí a Bue- del tendido eléctrico y telegráfi- nal interno. Una vida en esa ca- ba de las encomiendas en el gal- El predio que cobijó a los tre- 25 años, en 1964 y 1965. Fue abrir sus puertas, justamente,
tuviera en orden. Silbando baji- que como “relevante general”, lo ro todas fundamentales. A los je- nos Aires. En una mañana, por co, rieles y durmientes de que- rrera de uniforme color ‘azul ae- pón que después funcionó como nes en Allen se extendía por más cuando el transporte de fruta, en la valiosa Estación, con una
to, casi susurrando, lograba que ocupó Armando Testa. Se lo con- fes como Arregui y Testa se su- ejemplo, eso podía pasar varias bracho colorado. Los ‘aspiran- ronáutico’, tal como lo llamaban. la Escuela Municipal de Folclore, de ocho cuadras, desde la calle conservas de tomate, encomien- muestra alusiva. Sus integran-
los demás trabajadores ‘pararan vocaba como una especie de co- maban los ‘auxiliares’ dentro de veces, porque era un servicio tes’, en la base del escalafón, eran Cuando Testa ingresó en 1948, el frente al Café Aurelio. Gracias a Juan Manuel de Rosas hasta la das y pasajeros implicaba viajes tes, con Lorenzo Brevi a la cabe-
la oreja’ para saber que se acerca- modín, que iba donde hiciera fal- la oficina, con el telégrafo y los muy usado. Pero el empleado es- los que quedaban llenos de ho- básico ya era de 150 pesos, unos los pases de viaje que recibían los Miguel P. Sorondo. Sin interrup- de unos 40 y hasta 50 vagones en za, han logrado hacer frente al ol-
ba, con las manos tomadas de- ta. Hoy con 94 años recibió a RÍO inmensos libros de registros. taba capacitado para prestar llín por acopiar el carbón de pie- 150 mil actuales, el doble de lo ferroviarios pudo irse de luna de ciones. Es que el cruce y puente fila. 200 ejes, como calculaban vido y al vandalismo, pugnando
trás de la espalda. “Nuestra casa NEGRO en su departamento del Eran los que confeccionaban los atención sólo a los “mensajes” dra y la leña de caldén que se ne- que cobraba en su trabajo ante- miel con “Chiche” a Buenos Ai- de la calle Perito Moreno no exis- ellos. “Nosotros íbamos colga- donde sea posible, por la concre-
se conectaba con la Estación por barrio Santa Catalina, acompa- balances, cada 10 días, con el mo- que venían con destino “Allen”. cesitaban para la combustión al rior. res y desde allí a Salta, Tucumán tía. “Hasta 1977, la avenida Roca dos, agarrados con una mano y ción del reclamado “Tren del Va-
una puerta, que daba a la oficina ñado por Elvira, su esposa hace vimiento de dinero que ingresa- ¿Cómo? Reconociendo las letras principio. Cada cierto tiempo Daniel Alvez fue otro que se y Jujuy, en 1959. Su disfrute que- moría en el predio del tren y el con la otra haciendo señas” para lle”. La utilidad para tantas gene-
de mi papá, yo iba a verlo segui- 67 años. Juntos conocieron to- ba por la venta de pasajes, el pago identificatorias del comienzo: rendían examen para un ascen- integró desde muy joven, apenas dó plasmado en las cartas que puente de calle Avellaneda tenía las maniobras, explicó Poblete. raciones demuestra que vale la
do. Me cruzaba a los que llegaban das las aristas de la vida ferrovia- por encomiendas, equipaje, car- “LLN” ó, en Morse, “.-.. .-.. -.”. so o pedían el pase para cubrir terminó la escuela primaria. Su mandaron. solo pasada en bicicleta”, dijo Ce- Venció el miedo de acomodar se- pena el intento.

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