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Nuestra noche de anhelos

En aquella casa ya abandonada, escribía y escribía. Cada hangul era perfecto, ninguna persona se le
igualaba.
Escribía un hermoso relato, esa era su pasión. Escribir cuentos, reglas, dictaduras y poesía, no había
día que no tuviera inspiración. Cuando el emperador se entero del trabajo que hacia Minho quiso
que este le escribiera miles de historias y descripciones sobre cualquier cosa.
Fuera de que el emperador lo conocía ya hace muchos años, cuando solicito que Minho fuera a sus
aposentos acepto su solicitud, se sentó, espero y cuando llego el emperador lo saludo correctamente
y le dijo lo siguiente;
-Minho, no te gustaría ser el escritor personal de la familia Kim?
-No señor, no puedo aceptar su oferta. - dijo Minho con la cabeza mirando abajo por la vergüenza.
-Podría sacarte a ti y a tu hermana de su situación, solo piénsalo. -Minho se arrodillo e hiso una
pose de reverencia hacia Seojun. -Lo hare, señor Kim.

1
-Flores de cerezo-
Minho vivía una vida feliz con su familia, fue lo mejor que había tenido. Su época favorita del año
era cuando caían los Sakuras. Le encantaba su aroma y color, esa era su parte preferida de la
temporada. Y por esa razón fue que nombraron a su hermana menor así
Hubiera sido una vida hermosa de no ser que a su padre lo hubieran decapitado, y como su madre
no se sentía preparada para soportar el peso de ser una madre soltera se suicido frente a ellos
cortando su garganta dejando a Minho a cargo de su hermana.
Minho trabajaba por las tardes, nunca se cansaba de escribir, su letra era como la de un estudiante
profesional que practicaba caligrafía.
Cuando tenia 12 años un señor le pidió crear un letrero para su tienda a cambio de dinero. Quedo
sorprendido al ver la hermosa letra de Minho y decidió recomendárselo a Kim Su-Ji, quien en ese
tiempo era el emperador y padre de Seo-Jun.
Seo-Jun había empezado

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