Está en la página 1de 20

17

GEOLOGÍA DE ALICANTE
P. Alfaro, J. M. Andreu, A. Estévez, J. E. Tent-Manclús y A. Yébenes (editores)
Alicante 2004, 17-36 – ISBN 84-86980-07-0

GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

Juan A. Vera
DEPARTAMENTO DE ESTRATIGRAFÍA Y PALEONTOLOGÍA (UNIVERSIDAD DE GRANADA).

REAL ACADEMIA DE CIENCIAS EXACTAS, FÍSICAS Y NATURALES.

Por invitación expresa del Comité Organizador del a los 2.000 m (Sierra Tejeda, en Málaga; Sierras Harana,
XIII Simposio sobre la Enseñanza de la Geología (Alican- de Lújar, de Baza y de la Sagra, en Granada; Sierras
te, 2004) se pronuncia una conferencia cuyo contenido Mágina y de Segura, en Jaén; Sierras de María, de los
se refleja en este trabajo. Hace diez años con motivo Filabres y de Gádor, en Almería; Sierras del Taibilla y
del VIII Simposio (Córdoba, 1994) pronuncié otra con- de las Cabras, en Albacete) y otros muchos relieves de
ferencia, en este caso sobre la «Geología de Andalucía» cotas cercanas o superiores a 1.500 m, pero que des-
(1) y como en aquella ocasión aquí me planteo cubrir tacan ampliamente en el paisaje ya que se elevan de
(en la medida de lo posible) y de manera simultánea manera notable con respecto a los relieves circundantes
dos objetivos que aparentemente son contradictorios. (entre ellos: Sierra de Grazalema, en Cádiz; Serranía de
El primero consiste en mostrar el grado de conocimien- Ronda, Sierras de las Nieves y de Yunquera, en Málaga;
to actual sobre el tema y aportar información sobre la Sierras Horconera, del Ahillo y de Cabra, en Córdoba;
bibliografía básica (seleccionada y reciente) que facilite Sierras Gorda, de Alta Coloma y de Orce, en Granada;
al experto en Geología profundizar por sí mismo en el Sierras de Cazorla, Jabalcuz y Pandera, en Jaén; Sie-
tema. El segundo consiste en manejar, tanto en la con- rras de las Estancias y Alhamilla, en Almería; Calar del
ferencia como en el texto escrito, un lenguaje científico Mundo, Sierras de Alcaraz, del Carche y del Zacatín, en
lo más simple posible que permita su comprensión a Albacete; Sierras Espuña, Pajarón, Buitre y de Ponce, en
personas sin una formación geológica previa. Murcia; Sierras Aitana, Serrella-Aixorta, Cabeçó d’Or y
Puigcampana, en Alicante).
Desde el punto de vista geológico la Cordillera
1. RASGOS GENERALES Y DEFINICIÓN Bética es una cadena montañosa formada durante el
plegamiento alpino que forma parte del conjunto de
La Cordillera Bética es la gran unidad geológica que cadenas alpinas que rodean al Mediterráneo occidental
ocupa del sur y sureste de España. Coincide con la gran (Orógeno Perimediterráneo occidental), el cual a su vez
unidad morfológica constituida básicamente por relie- se integra en un conjunto de cadenas alpinas aún ma-
ves montañosos que ocupan gran parte de Andalucía, yor que incluye los Alpes, Cárpatos, Helénides y Cauca-
la comunidad de Murcia completa, la parte meridional so, y que hacia el este llega hasta el Himalaya.
de la provincia de Albacete, la totalidad de la provincia En la Cordillera Bética los pliegues tienen una ali-
de Alicante y el sur de la de Valencia (Fig. 1). neación dominante OSO-ENE, pero en la cercanía del
Los relieves montañosos incluyen los de mayor al- estrecho de Gibraltar giran casi 180º de manera que,
titud de la Península Ibérica (Sierra Nevada, Mulhacén a través del Arco de Gibraltar, la cordillera se continúa
3.481 m y Veleta 3.392 m), otros con cotas superiores por el norte de África con las cadenas alpinas norteafri-
18
GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

canas (Rif y Tell) las cuales, a su vez, a través de Sicilia, de los principales relieves y establecer la relación de los
se prolongan en Italia con los Apeninos. La Cordillera mismos con las unidades geológicas diferenciadas.
Bética hacia el E se continúa bajo el Mediterráneo has- El estudio sistemático sobre el terreno de los con-
ta el promontorio balear, de manera que las Baleares juntos de estratos sucesivos, y de los fósiles que contie-
forman parte de este conjunto de cadenas alpinas, que nen, posibilita conocer las edades relativas de las rocas
tras una interrupción se continúa por Córcega hasta sedimentarias que afloran en superficie o las que han
llegar a los Alpes donde se tiene el enlace con los sido atravesadas por los sondeos. Estas edades relativas
Apeninos, completándose de este modo el Orógeno pueden expresarse en cifras numéricas, en millones de
Perimediterráneo occidental. Todas las cordilleras que años (Ma), utilizando tablas de tiempo geológico cali-
integran este orógeno, incluida la Cordillera Bética, se brado (7, 8), en las cuales la precisión numérica de las
formaron durante el Mioceno como consecuencia de edades de los límites de unidades relativas es cada vez
movimientos horizontales de fragmentos de la litosfera mayor.
(placas) que ocasionaron el plegamiento y la consi- La fuente de información más valiosa para los
guiente emersión que dio lugar a los nuevos relieves especialistas en cada una de las ramas que integran
montañosos. las Ciencias Geológicas es, sin duda, el conjunto de
artículos y monografías publicados sobre los más dife-
rentes aspectos de la Geología de la Cordillera Bética. El
2. FUENTES DE INFORMACIÓN volumen de publicaciones es enorme y sus autores son
de muy diversas nacionalidades (es especial: españoles,
Las fuentes de información sobre la Geología de la holandeses, franceses, alemanes, ingleses, italianos y
Cordillera Bética son muy diversas. Una esencial son los norteamericanos). Las revistas científicas en las que se
mapas geológicos de diferente escala publicados por el incluyen estas publicaciones también son muy diversas.
Instituto Geológico y minero de España (2), entre los Una parte de ellas son españolas mientras que otra par-
que merecen destacarse los de escala 1: 50.000, ya que te están editadas en otros países, incluyendo entre ellas
son los de escala más detallada que cubren la totalidad las de mayor prestigio científico internacional. Por esta
de España. Precisamente este año ha finalizado el Plan razón es muy necesario recurrir a las bases de datos (9)
MAGNA, iniciado en 1970, con la realización de los que faciliten su localización y análisis. Para el caso con-
últimos mapas geológicos de esta escala que estaban creto de la Cordillera Bética se dispone de una base de
aún pendientes. Para la parte de cordillera incluida en datos muy completa para el intervalo 1978-2002 publi-
Andalucía se dispone de un mapa geológico a escala cada hace un año (10). Para quienes quieran iniciarse
1: 400.000, publicado por la Junta de Andalucía (3) de en el tema es recomendable empezar con los libros en
gran utilidad. Otra fuente de información proviene de los que incluyan capítulos dedicados monográficamen-
la prospección petrolífera, tanto de los perfiles sísmicos te a la Cordillera Bética (11) entre los cuales se incluye
como de los sondeos perforados en la cordillera, que uno de muy reciente aparición (12), del que el autor de
aportan una valiosa información sobre la geometría de este trabajo ha tenido el honor de ser el editor princi-
los materiales en el subsuelo, tanto de la parte emergi- pal, del libro y editor del capítulo de Cordillera Bética
da como de su continuación bajo el mar, en especial en y Baleares, en el que han participado más de sesenta
el Mar de Alborán y el Golfo de Cádiz. A ellos hay que autores todos ellos de reconocido prestigio en los más
añadir los perfiles sísmicos profundos realizados, con diferentes aspectos de la Geología.
fines exclusivamente científicos, en las dos últimas dé-
cadas que han aportado información sobre los niveles
más inferiores de la litosfera (4) y los datos de sondeos 3. GRANDES UNIDADES GEOLÓGICAS
marinos profundos de los proyectos DSDP y ODP (5)
efectuados en el Mar de Alborán, también con fines En la Cordillera Bética en función de la edad de las
puramente científicos. rocas que afloran y del grado de deformación que les
Desde hace unos diez años se dispone de una nueva afecta se pueden diferenciar cuatro grandes unidades
fuente de información que son las imágenes obtenidas geológicas: las Zonas Externas Béticas, las Zonas Inter-
desde satélites que cubren la totalidad de la Península nas Béticas, el Complejo del Campo de Gibraltar y las
Ibérica (6) y que permiten ver la distribución geográfica Cuencas Neógenas postorogénicas (Fig. 1). Para enten-
19
GEOLOGÍA DE ALICANTE

der mejor estos conceptos es conveniente partir de un hacia el oeste; estos materiales se continúan bajo el
mapa paleogeográfico como el que se representa en Mar de Alborán, constituyendo una corteza continental
la figura 2. Este mapa representa la distribución de las adelgazada. Durante el desplazamiento hacia el oeste
grandes unidades de la litosfera terrestre (placas), así del Dominio de Alborán, y su posterior colisión, los
como la distribución de mares y continentes, durante materiales turbidíticos depositados en los Surcos de los
el Jurásico superior (hace unos 150 Ma). La primera Flyschs fueron expulsados y trasladados solidariamente
unidad cortical es la Placa Ibérica que incluiría un sector hasta ocupar la posición actual, que en la Codillera Bé-
emergido (continente ibérico) que hacia el sur y sureste tica en la proximidad del contacto de las Zonas Internas
se hundía bajo el mar de manera que existía un amplio con las Zonas Externas, con un mayor desarrollo en el
sector en el que había sedimentación marina (margen extremo más occidental (Campo de Gibraltar, provincia
continental sudibérico). La segunda unidad cortical es de Cádiz) razón por la que se les conoce con el nombre
la Placa Africana, que como en el caso anterior tendría de Complejo del Campo de Gibraltar.
una parte emergida (continente africano) y con un Terminada la colisión (la fase orogénica) se indivi-
margen continental adyacente por el norte. La terce- dualizaron áreas con hundimiento (subsidencia) en las
ra unidad cortical de aquella época sería la Subplaca que hubo de nuevo una sedimentación importante,
Mesomediterránea, ubicada en una posición actual- en gran parte alimentadas por los productos de la
mente ocupada por el Mediterráneo. erosión de los nuevos relieves emergidos. Estas áreas
Entre las tres placas (Ibérica, Africana y Mesomedite- son conocidas genéricamente como Cuencas neógenas
rránea) se localizaron a lo largo del tiempo lenguas de postorogénicas, ya que los sedimentos que las rellenan
mar profundas, con sustrato de corteza oceánica, cuya son del Neógeno (Mioceno superior-Plioceno) y su de-
anchura varió a lo largo de tiempo, siguiendo el deno- pósito se inició después de la fase orogénica que formó
minado ciclo de Wilson, que son las que se denominan la cordillera. Dentro de ellas destacan: la Cuenca del
«Surcos de los Flyschs» en los cuales se depositaron Guadalquivir (Fig. 1) localizada entre el Macizo Varisco
turbiditas del Cretácico, Paleógeno y Mioceno inferior. Ibérico y la propia cordillera y un conjunto de cuencas
Concretamente en la banda situada entre la Placa Ibé- menores distribuidas entre los nuevos relieves mon-
rica y la Subplaca Mesomediterránea se depositaron los tañosos (cuencas intramontañosas). También puede
flyschs que actualmente afloran en la Cordillera Bética considerarse la Cuenca de Alborán, desarrollada sobre
(Complejo del Campo de Gibraltar). la corteza continental adelgazada antes citada, ubicada
La Subplaca Mesomediterránea estaría formada por en el mar del mismo nombre al sur de los afloramientos
rocas del Paleozoico y en menor medida del Mesozoico de la Cordillera.
y Paleógeno, que durante el Cenozoico han sufrido
transformaciones muy notables (plegamiento, frac- 3.1. Zonas Externas Béticas
turación, metamorfismo, etc.) aunque con un grado
desigual en cada una de sus unidades o complejos. Ocupan los afloramientos de mayor extensión de la
Durante una parte del Mioceno (desde hace 19 Ma cordillera (Fig. 1). Están constituidas por las rocas sedi-
hasta hace unos 9 Ma) la Subplaca Mesomediterránea mentarias del Triásico hasta el Mioceno inferior que se
se ha desintegrado en varios bloques que han sido ex- habían depositado en el margen continental sudibérico.
pulsados centrífugamente hasta chocar con los márge- Las únicas rocas no sedimentarias existentes son rocas
nes continentales sudibérico y norteafricano. Las Zonas volcánicas submarinas (o subvolcánicas) que localmente
Externas Béticas corresponden a las rocas sedimentarias se intercalan en las rocas sedimentarias del Mesozoico.
depositadas en el margen continental sudibérico defor- Las Zonas Externas Béticas constituyen una cobertera
madas durante la colisión del fragmento de la Subplaca despegada de su basamento, que era la continuación
Mesomediterránea, que se desplazó hacia el oeste (de- hacia el sur del Macizo Varisco Ibérico que en la ac-
nominado Dominio de Alborán). Del mismo modo las tualidad se localiza a pocos kilómetros de profundidad
Zonas Externas Norteafricanas se formaron por la coli- hundiéndose ligeramente hacia el sur. El grado de de-
sión del Dominio de Alborán con el margen continental formación de esta cobertera, adquirido como un efecto
norteafricano. Las Zonas Internas Béticas son precisa- de la colisión continental, es notablemente mayor en
mente la parte emergida del Dominio de Alborán en el las partes más meridionales y menor en las más septen-
sur de España, intensamente deformado y desplazado trionales y más cercanas al antiguo continente ibérico.
20
GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

o 50 100

ZONAS INTERNAS

Complejo del
Campo de Gibraltar

- Subbético}
Mar de Albarán ZONAS
Gibraltar D Pre bético
EXTERNAS

Complejo Olistostrómico
- Cobertera tabular V i:::::::-7 Neógeno postorogénico del Guadalquivir
a_J V.- Rocas volcánicas

Figura 1. Mapa geológico de la Cordillera Bética.

Como consecuencia del plegamiento y la fracturación, donde los materiales mesozoicos quedaron horizonta-
la cobertera se ha acortado sustancialmente con res- les (Cobertera Tabular, Fig. 1) y en otros sectores que
pecto a la anchura original de su área de depósito presentan alineaciones de pliegues diferentes (Cadena
(el margen continental sudibérico), de manera que la o Cordillera Ibérica). El Subbético es la unidad más
anchura de afloramientos actuales (Zonas Externas) es meridional, está desplazada hacia el norte de manera
menos de la mitad de la originaria. que cabalga ampliamente sobre el Prebético y presenta
Dentro de la Zonas Externas Béticas a partir de los un mayor grado de deformación, hasta el punto que
rasgos estratigráficos y el grado de deformación de las en amplios sectores ha perdido su coherencia interna
unidades de rocas se diferencian dos grandes unida- habiendo adquirido una estructura caótica (Complejos
des: Prebético y Subbético (Fig. 1) nombres utilizados Subbéticos caóticos). Desde el punto de vista estratigrá-
desde los primeros trabajos de síntesis de la cordillera fico el Subbético se caracteriza por tener términos del
(13). El Prebético es la unidad más septentrional y con Jurásico medio-superior, del Cretácico y del Paleógeno
menor grado de deformación, se caracteriza por tener propios de depósitos de medios pelágicos, alejados de
términos del Jurásico medio-superior, del Cretácico y las costas, con abundantes fósiles de organismos mari-
del Paleógeno en los que dominan los depósitos de nos nadadores y flotadores (del plancton).
medios marinos someros, con episodios de medios Los nombres de Prebético y Subbético se usan
costeros e incluso continentales. El límite norte del también para denominar a los dos sectores del margen
Prebético se hace coincidir con la desaparición de los continental sudibérico en los que se depositaron los
pliegues de dirección bética (OSO-ENE), de manera sedimentos de la unidad geológica del mismo nombre
que en unos sectores se pone en contacto con áreas (Fig. 2). El Prebético sería el dominio paleogeográfico
21
GEOLOGÍA DE ALICANTE

h i j
10 ~ /

A
Margen continental sudibérico C> Subplaca mesomediterránea
t----------r------------------l 8 (unidad corlical de procedencia
de las Zonas Internas Béticas)
e éi o bb'fco

1::::C::t:9~5""=i~s;::-------------....cN~iv~el.!e!de::.!.Jlmc!.!!a!!....r_ _ _,........_.......,._ _-..,......,_....,._.,..,...- I'


~ ~~===a"-+ / Q ~ -·

B 0k01DmDnDo ¡ p+q .... r

Figura 2. Mapa y sección con la reconstrucción paleogeográfica para el Jurásico superior (hace unos 150 Ma) según Vera y
Martín-Algarra, 1994: Phanerozoic Stromatolites II, Kluwer Academic Press, Dordrecht, pp. 319-344. A.- Mapa paleogeográfico
(I-I’ sección representada en la figura B). Leyenda: a.- Áreas emergidas de la Placa Ibérica, de la Placa Africana y de la Subplaca
Mesomediterránea. b.- Prebético (áreas con depósito). c.- Subbético (sectores más subsidentes). d.- Subbético (sectores menos
subsidentes). e.- Franjas con corteza oceánica (surcos de los flyschs). f.- Margen continental de la Subplaca Mesomediterránea.
g.- Áreas adyacentes al continente de la Subplaca Mesomediterránea con escaso o nulo depósito. h.- Sectores del margen con-
tinental adyacente a la Placa Africana con sedimentación marina somera. i.- Sectores del margen adyacente a la Placa Africana
con sedimentación marina pelágica. j.- Principales fallas normales (extensivas). B.- Sección señalada en la figura A (escala arbitra-
ria). Leyenda: CCG.- Complejo del Campo de Gibraltar. k.- Sedimentos costeros. l.- Sedimentos de plataforma marina somera y de
llanuras de mareas. m.- Facies hemipelágicas. n.- Facies pelágicas de áreas subsidentes (surcos). o.- Facies pelágicas de áreas poco
subsidentes (umbrales). p.- Rocas volcánicas submarinas. q.- Fondo oceánico en expansión. r.- Fondos marinos sin depósito.

más septentrional y más cercano al continente ibérico, de la Cuenca del Guadalquivir, de manera que los
mientras que el Subbético sería el más meridional y afloramientos más occidentales del Prebético son los
más alejado del citado continente (Fig. 3 A). La de- cercanos a Jaén.
formación ocurrida durante el Mioceno inferior-medio La diferenciación entre los dos grandes dominios pa-
(Fig. 3 B,C,D), mientras ocurrió la colisión, dio lugar a leogeográficos tuvo lugar en una etapa de fracturación
que el Prebético de la mitad occidental de la Cordillera ocurrida durante el Jurásico inferior (hace 190 Ma). Pre-
quedase cubierto tectónicamente por el Subbético, o viamente la sedimentación había sido bastante homo-
en su caso por los sedimentos neógenos discordantes génea con desarrollo de plataformas carbonatadas de
22
GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

...........................•-·······-··-·····•....... /' ( ..•-··•~............


\ ¡
,..-·······)
f /~/
/ !
(\
,!..........•. •,:· ....
·•.

......
_// P'~;; .. Í~éric~·· Aquitaniense superior (22,5 Ma) 8 . . ./ Pla·~;·;-~;;;-;;· Burdigaliense inferi or (19,5 Ma
:=======::::;:============.r- l .;;;._..J_....
_ -_-_....
_ -_-------- -----_-_-~-_-_...
_ -----------_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_- -

Tortoniense inferior (9 Ma)

CJ5 111111 ª ----······-· 8 - - 9 ---10

Figura 3. Reconstrucciones paleogeográficas del sur de Iberia desde antes del inicio de la colisión, en el Mioceno inferior (Aquita-
niense superior), hasta el final de la colisión en el inicio del Mioceno superior (según: Sanz de Galdeano y Vera, 1992; Basin Re-
search, 4: 21-36). Leyenda: SPM.- Subplaca Mesomediterránea. ZENA.- Zonas Externas de las cadenas norteafricanas. AB.- Cuenca
de Alborán. 1.- Corteza oceánica. 2.- Corteza continental adelgazada. 3.- Surco de los flyschs. 4.- Materiales depositados en el
surco de los flyschs parcialmente desplazados. 5.- Complejo del Campo de Gibraltar y unidades equivalentes de otras cadenas.
6.- Zonas Internas (de la Cordillera Bética y de las cadenas norteafricanas). 7.- Áreas con gran cantidad de elementos deslizados
(olistostroma). 8.- Línea de costa actual. 9.- Fallas principales. 10.- Frente de los olistostromas.

medios marinos de aguas someras extraordinariamente al Paleógeno. El más meridional presenta secciones
extensas en las que se depositaron rocas carbonatadas estratigráficas mucho más continuas, sin grandes lagu-
que constituyen las unidades litoestratigráficas más nas estratigráficas, y con un importante desarrollo de
características. Sin embargo, a partir de este aconte- las calizas organógenas, de rudistas y orbitolinas, del
cimiento, en el Subbético se inició la sedimentación Cretácico inferior, depositadas en medios marinos muy
marina pelágica, mientras que en el Prebético continuó someros. Hacia el sur, este último sector del Prebético,
la sedimentación en plataformas marinas someras. en la provincia de Alicante presenta algunos términos
En el Prebético, desde el punto de vista estratigrá- con características semejantes a los de la misma edad
fico, se observan variaciones notables según sectores, del Subbético, lo que ha llevado a diferentes autores
lo que permite delimitar dos subdominios paleogeo- (14) a definir el «Prebético de Alicante». Debido a
gráficos de características estratigráficas diferentes. El esta semajanza con el Subbético algunos sectores del
más septentrional del Prebético se caracteriza por tener Prebético de Alicante han sido incluidos en algunos
prolongados episodios sin depósito (lagunas estratigrá- mapas geológicos en el Subbético más septentrional;
ficas) que afectan sobre todo al Cretácico inferior y sin embargo como el límite entre Prebético y Subbéti-
GEOLOGÍA DE ALICANTE

Lámina II. Modelo digital del terreno de la Cordillera Bética (cortesía de ANAYA Educación).
23
24
GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

co se fija en el contacto tectónico (cabalgamiento del con el Prebético (Fig. 1) mediante el cabalgamiento,
Subbético sobre el Prebético) es más correcto incluirlo antes mencionado. Sin embargo, en la mitad occiden-
en el Prebético aunque matizando que tiene caracterís- tal de la Cordillera, el Subbético se pone en contacto
ticas estratigráficas singulares. Desde un punto de vista directamente con la Cuenca del Guadalquivir, quedado
tectónico, el Prebético se caracteriza por una estructura el Prebético oculto bajo el Subbético cabalgante y los
de pliegues y fallas muy marcada. Destaca la zona de sedimentos neógenos de la citada cuenca. En el frente
escamas del arco Sierra de Cazorla-Sierra de Alcaraz, norte del Subbético y parte sur de la Cuenca del Gua-
área adyacente al continente ibérico, donde el empuje dalquivir se ubica una unidad compleja constituida por
hacia el norte de todos los materiales se expresa con es- materiales de procedencia esencialmente subbética que
tos sistemas de fallas inversas vergentes hacia fuera de se han deslizado en un fondo marino hacia el norte,
la cordillera. Otro rasgo singular es el gran desarrollo, hasta alcanzar el surco marino profundo que precedía
en las provincias de Alicante y Murcia, de las estructu- a la cuenca del Guadalquivir (15) de manera que los
ras diapíricas, en las que los sedimentos yesíferos del materiales del Subbético quedaron englobados en una
Triásico perforan a los materiales más recientes. En el matriz margosa del Mioceno inferior y, sobre todo, Mio-
resto del Prebético dominan las estructuras en pliegues ceno medio (Complejo Olistostrómico del Guadalquivir,
(anticlinales y sinclinales), en general vergentes hacia ver Fig. 1).
en NNE, y de fallas entre las que destacan algunas de
grandes dimensiones transversales a las estructuras de 3.2. Zonas Internas Béticas
plegamiento y que separan sectores con distinto grado
de deformación (fallas de transferencia). En ellas afloran las rocas, sedimentarias, ígneas y
En el Subbético también se establecen diferencias metamórficas, del Paleozoico (posiblemente incluso
paleogeográficas de orden menor (subdominios paleo- del Precámbrico) y del Triásico, y en menor medida
geográficos) debidas al diferente grado de hundimiento y solamente en alguna de las unidades, del resto de
del fondo de la cuenca sedimentaria simultáneo al de- Mesozoico y del Cenozoico. Se trata de materiales del
pósito (subsidencia) desde la etapa de fracturación antes Dominio de Alborán, fragmento de la Subplaca Meso-
citada: estos subdominios se disponen alineados según mediterránea, intensamente deformados y posterior-
una dirección que actualmente es OSO-ENE (Fig. 2), la mente desplazados hacia el oeste hasta colisionar con
misma que los ejes de los pliegues. Durante el Jurásico el margen continental sudibérico.
medio-superior y Cretácico inferior, se delimitan dos Dentro de las Zonas Internas se delimitan tres gran-
subdominios con escasa subsidencia en los que se de- des unidades complejas (complejos) constituidas por
positaron sedimentos con escaso espesor por unidad de pilas de mantos superpuestos, que de más bajo a más
tiempo (tasa de sedimentación) y otros dos subdominios alto en la ordenación tectónica son: Complejo Nevado-
con mayor subsidencia en los que se acumularon espeso- Filábride, Complejo Alpujárride y Complejo Maláguide,
res mayores de sedimentos. En uno de los sectores más con diferencias notables entre ellos por la edad y
subsidentes del Subbético (el más meridional de los dos) litología de las rocas y el grado de la deformación y
tuvieron lugar erupciones volcánicas submarinas, que se del metamorfismo. Existen otras unidades de menor
intercalan en los sedimentos del Jurásico medio-superior extensión que se ubican en los bordes de los aflora-
y parte del Cretácico. Desde el punto de vista tectónico, mientos de las Zonas Internas Béticas que han sido
en el Subbético destaca el despegue generalizado de la recientemente denominadas Unidades Frontales (16)
corbertera sobre al basamento, actuando de nivel de que incluyen la Dorsal y la Predorsal de nomenclaturas
despegue los materiales yesíferos del Triásico. La estruc- anteriores, y que aquí no serán tratadas. A diferencia
tura interna dominante del Subbético es la de láminas de las Zonas Externas, en las Zonas Internas Béticas los
cabalgantes (antes denominadas mantos de corrimiento) materiales del posible zócalo Paleozoico y de la posible
con desplazamientos notables hacia el NNW. Llama la cobertera del Mesozoico-Cenozoico están deformados
atención la existencia de vergencias contrarias en las par- solidariamente.
tes más meridionales, las más cercanas al contacto con El Complejo Nevado-Filábride es la unidad más in-
las Zonas Internas, debidas a retrocabalgamientos. ferior tectónicamente, y aflora extensamente en Sierra
En la mitad oriental de la cordillera, desde Crevillen- Nevada y la Sierra de los Filabres, de las cuales toma su
te (Alicante) a Jaén, el Subbético se pone en contacto nombre. Sus afloramientos son los núcleos de grandes
25
GEOLOGÍA DE ALICANTE

1 2

3 4

5 6

7 8
Lámina III. Fotografías de campo (P. Alfaro y J.A. López). 1. Rocas volcánicas del Mioceno de Cabo de Gata (Almería). 2. Cali-
zas jurásicas del Torcal de Antequera (Málaga, Subbético). 3. Vista del Estrecho de Gibraltar desde la parte meridional de la
provincia de Cádiz. 4. Mulhacén y otras altas cumbres de Sierra Nevada (Complejo Nevado-Filábride). 5. Sinclinal en calizas
cretácicas del río Truchas (Sierra de Cazorla, Prebético). 6. Minas de Alquife (las rocas encajantes de las menas de hierro son
del Complejo Nevado-Filábride y están fosilizadas por los sedimentos del Plioceno de la Cuenca de Guadix-Baza. 7. Peridotitas
de Sierra Bermeja (Complejo Alpujárride, provincia de Málaga). 8. Vista de la ciudad de Guadix y del relleno sedimentario de
la Cuenca de Guadix-Baza.
26
GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

antiformas de manera que los materiales de los otros ficas, destacando muy especialmente el afloramiento
dos complejos, situados encima, les rodean. Todas las de Sierra Espuña (Murcia) donde alcanzan el máximo
rocas que afloran en este complejo son metamórficas, desarrollo.
dominando los micaesquistos grafitosos, a los que si-
guen, con menor abundancia, las cuarcitas, los gneises, 3.3. Complejo de Campo de Gibraltar
las metabasitas y los mármoles. Dentro del complejo se
han diferenciado dos unidades, inferior y superior, su- Las unidades geológicas que integran del Com-
perpuestas que constituyen pilas de grandes mantos de plejo del Campo de Gibraltar generalmente se dis-
corrimiento, aunque posteriormente han sido afectados ponen cabalgantes sobre las Zonas Externas Béticas
por una tectónica extensional muy importante. Algunos y, a su vez, están cabalgadas por las Zonas Internas
autores han explicado las unidades inferiores de este Béticas. Este dispositivo se explica como consecuen-
complejo como integrantes del margen continental su- cia de su traslado, desde la posición originaria (surco
dibérico en lugar de la Suplaca Mesomediterránea. de los flyschs béticos), de manera solidaria con el
El Complejo Alpujárride es la segunda de las gran- propio desplazamiento (y posterior colisión) del Do-
des unidades que forman las Zonas Internas Béticas y minio de Alborán. Se recuerda que dicha posición
ocupa una posición intermedia, de manera que se dis- originaria era el área de fondo de corteza oceánica
pone sobre el Complejo Nevado-Filábride y está debajo de extensión cambiante, que existió durante el Cretá-
del Complejo Maláguide. De los tres complejos es el cico y Paleógeno, entre la Placa Ibérica y la Subplaca
que mayor extensión de afloramiento ocupa en al ac- Mesomediterránea. El afloramiento más extenso se
tualidad. El Paleozoico está constituido por micaesquis- localiza en el Campo de Gibraltar (del que toman su
tos, cuarcitas, gneises y metabasitas, afectado por un nombre) ocupando la mitad meridional de la provin-
metamorfismo de grado medio a alto. En las unidades cia de Cádiz (Fig. 1). Otros afloramientos significa-
que afloran en el sector más occidental (Serranía de tivos son los localizados en la provincia de Málaga,
Ronda) presenta volúmenes importantes de rocas ultra- entre las Zonas Internas y las Zonas Externas (Fig. 1).
básicas (peridotitas). Sobre el Paleozoico se disponen Los afloramientos más orientales se localizan en la
los materiales permo-triásicos, que se inician con una provincia de Almería (región de los Vélez) con una
unidad de filitas y cuarcitas (Pérmico-Triásico inferior) a posición similar.
la que sigue una potente unidad de rocas carbonatadas Están formadas por lutitas y margas marinas, depo-
(calizas y dolomías) del Triásico medio-superior que en sitadas en medios marinos profundos, en las que se in-
algunas unidades están marmorizadas por efecto del tercalan numerosos niveles de turbiditas tanto calcáreas
metamorfismo. (calcarenitas) como detríticas (areniscas). Los términos
El Complejo Maláguide es la unidad tectónicamente más antiguos son del Cretácico (margas y microbrechas
superior, presenta rasgos bastante diferentes de los dos carbonatadas) y afloran muy localmente en posición
anteriores y aflora extensamente al norte de Málaga. tectónica compleja. Los sedimentos del Paleógeno es-
De una parte es el único complejo, de los tres, en el tán formados por margas y lutitas con intercalaciones
que hay materiales del Jurásico, Cretácico y Paleógeno. de turbiditas (mayoritariamente calcáreas). El mayor
De otra parte el metamorfismo, que afecta solamente volumen, por su potencia y extensión de afloramien-
a una parte del Paleozoico, lo hace de manera desigual tos, corresponde a los términos del Oligoceno terminal
en las diferentes unidades que constituyen el Complejo, y del inicio del Mioceno (Aquitaniense, primer piso de
pero siempre en un grado muy inferior al de los otros Mioceno), los cuales están formados, en unas unidades,
dos complejos, hasta el punto que en algunas unidades por un flysch areniscoso micáceo que localmente pue-
no hay metamorfismo. El Paleozoico tiene una unidad den superar los 1000 m de espesor. En otras unidades
basal de filitas y areniscas (Ordovícico?-Silúrico), una in- están formados por unas areniscas (Areniscas del Aljibe)
termedia de calizas y areniscas (Devónico) y otra supe- extraordinariamente ricas en cuarzo, con estratos muy
rior de areniscas, lutitas y conglomerados (Carbonífero). potentes, semejantes a las que se observan en unidades
Los materiales del Pérmico y Triásico, discordantes sobre equivalentes de la cadenas de plegamiento del norte de
los anteriores, están formados esencialmente por facies África (Rif y Tell), que en amplios sectores de la provin-
detríticas rojas. El Jurásico, el Cretácico y el Paleógeno cia de Cádiz también pueden llegar a superar los 1000
afloran de manera desigual, según las áreas geográ- m de espesor.
27
GEOLOGÍA DE ALICANTE

Lámina IV. Vista de satélite del Estrecho de Gibraltar.


28
GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

3.4. Cuencas neógenas postorogénicas unidades sedimentarias indica que a la vez que ocurría
el depósito el mar se iba retirando hasta su posición
Se han definido previamente como las áreas sub- actual en el Golfo de Cádiz. De esta manera en el
sidentes formadas después de la colisión y la estruc- extremo más oriental de la cuenca los sedimentos son
turación de la cordillera, en las que ha tenido lugar exclusivamente los más antiguos mientras que en el
sedimentación. En la bibliografía geológica se deno- extremo más occidental (cercanía del Golfo de Cádiz)
minan también «depresiones» ya que se trata de áreas están representados todos los términos del Mioceno
deprimidas con respecto a las circundantes. Ambos superior y Plioceno marinos.
términos, cuencas y depresiones, se pueden considerar La Cuenca de Alborán quedó sumergida bajo del
sinónimos en este caso. Las rocas que constituyen el mar del mismo nombre y en ella, sobre un basamen-
relleno sedimentario de estas cuencas son del Mioceno to formado por una corteza continental adelgazada,
superior y del Plioceno, continuando en algunas cuen- se tienen depósitos del Mioceno superior, Plioceno y
cas con el Pleistoceno. Los sedimentos que las rellenan Cuaternario con grandes espesores, de manera que en
mayoritariamente se mantienen en la actualidad subho- amplios sectores se superan los 1000 m de espesor.
rizontales indicando la ausencia de deformaciones com- Los sedimentos dominantes son arcillas o margas ma-
presivas significativas después de su depósito. Las dos rinas, con intercalaciones de areniscas turbidíticas, con
cuencas más extensas son las localizadas al norte y al la excepción de un paquete de evaporitas del Mioceno
sur de la cordillera, en su mitad occidental, que son la terminal (Messiniense), que ha sido interpretado como
Cuenca del Guadalquivir y la Cuenca de Alborán, res- la expresión sedimentaria de un evento de desecación
pectivamente. Además de estas dos grandes cuencas temporal del Mediterráneo, que ha sido y sigue siendo
existen otras muchas menos extensas (Ronda, Granada, objeto de discusión científica.
Guadix-Baza, Almería, Murcia-Alicante, etc.) localizadas En las Cuencas intramontañosas la sedimentación
dentro de los relieves montañosos de la cordillera (Fig. se inicia en medios marinos someros (conglomerados,
1) que son denominadas genéricamente: Cuencas in- calcarenitas y margas), salvo en las cuencas localizadas
tramontañosas. en el seno del Prebético donde son sedimentos conti-
La Cuenca del Guadalquivir se localiza entre los nentales. Hacia el final del Mioceno se establece una
relieves más septentrionales de las Zonas Externas diferencia neta entre las cuencas que están cercanas al
Béticas y el Macizo Varisco Ibérico, al este de la Sierra Mediterráneo, donde la sedimentación continúa siendo
de Cazorla. Tiene una forma triangular, abierta hacia marina, de aquellas otras localizadas lejos del Medite-
el Golfo de Cádiz, y por ella fluye actualmente el Río rráneo donde el mar se retira definitivamente y se inicia
Guadalquivir, del que toma su nombre. Esta cuenca una sedimentación continental (fluvial y lacustre) local-
es semejante a otras cuencas sedimentarias postoro- mente con grandes espesores. Entre estas últimas me-
génicas localizadas en los bordes de otras cordilleras rece destacarse la Cuenca de Guadix-Baza en la que la
alpinas, por lo que también se le puede denominar sedimentación continental continuó durante gran parte
con el nombre genérico de cuenca de antepaís, que del Pleistoceno, existiendo un registro bioestratigráfico
se usa para todas ellas. La Cuenca del Guadalquivir es con más de cien yacimientos de grandes vertebrados
claramente asimétrica ya que en la parte adyacente a y de roedores, lo que junto a los datos magnetoes-
las Zonas Externas Béticas se ubica el Complejo Olistos- tratigráficos disponibles y las dataciones absolutas,
trómico del Guadalquivir, antes nombrado y explicado, permite establecer una escala biocronoestratigráfica
mientras que en la parte norte, la adyacente al Macizo muy precisa.
Varisco Ibérico, no hay términos equivalentes. El relle- En las cuencas intramontañosas de la provincia de
no sedimentario de la Cuenca del Guadalquivir es del Almería, en la región del Cabo de Gata (Fig. 1), afloran
Mioceno superior y del Plioceno, todos ellos marinos. ampliamente rocas volcánicas, intercaladas entre las ro-
Los depósitos dominantes son calcarenitas bioclásticas cas sedimentarias del Mioceno superior. Estos fenóme-
depositadas en medios marinos someros que cambian nos volcánicos tiene su continuación hacia el sur, bajo
hacia el oeste a margas y lutitas depositadas en medios el mar de Alborán, de manera que la isla de Alborán es
marinos más profundos. El dispositivo general de las un afloramiento de estas rocas volcánicas.
29
GEOLOGÍA DE ALICANTE

1 2

3 4
Lámina V. Fotografías de campo. 1. Calizas organógenas del Cretácico inferior del río Borosa (Sierra de Cazorla, Prebético). 2.
Calizas nodulosas ricas en ammonites (Ammnítico Rosso) del Jurásico superior (Sierra de Quípar, Cehegín, Murcia, Subbético).
3. Calizas del Jurásico inferior del Subbético en el Maimón (al fondo Vélez Rubio, Almería). 4. Calizas del Cretácico inferior del
Cabeço d’Or (Alicante, Prebético).
30
GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

4. EVOLUCIÓN PALEOGEOGRÁFICA Y cizo Varisco Ibérico) que será el gran continente de


CONCLUSIONES Iberia durante el Mesozoico, que ha sido sometido a
una importante erosión de manera que se convierte en
Los cambios paleogeográficos acaecidos a lo largo el área fuente que suministra materiales a las cuencas
del tiempo en la región que actualmente ocupa la sedimentarias adyacentes. La otra localizada, hacia
Cordillera Bética han sido muy significativos y han sido el sur y sureste de citado continente de Iberia, en la
objeto de múltiples propuestas de reconstrucción (17). que el Paleozoico se hunde, formando un basamento
Como en otros casos similares, para otras cadenas alpi- varisco, sobre el cual se inició la sedimentación de los
nas, la interpretación es siempre compleja y por tanto materiales que constituyen las Zonas Externas Béticas.
es bastante difícil de reconstruir en detalle. De acuerdo Esta segunda área tenía su continuación con las cuen-
con el llamado ciclo de Wilson, implica la diferenciación cas sedimentarias adyacentes donde se depositaron los
inicial de dos unidades corticales (o placas) a partir de términos mesozoicos de la Cobertera Tabular y de la
una única, los movimientos relativos de las dos placas Cadena Ibérica.
con unas fases expansivas iniciales que ocasionan una Durante el Triásico, en el área en la que hubo se-
separación progresiva y seguida de unas fases compre- dimentación, se diferenciaron a su vez dos sectores,
sivas que ocasionan un nuevo acercamiento de ambas precursores de la subdivisión de la placa única en dos
placas, y la posterior colisión entre ellas con la consi- (ocurrida posteriormente) por fracturación, extensión y
guiente formación de la cadena montañosa. adelgazamiento de la corteza continental. En el sector
La historia anterior al inicio del Mesozoico es la más septentrional se depositaron materiales detríticos
más difícil de reconstruir en detalle, ya que los mate- rojos (entre ellos las llamadas facies Keuper) y en un
riales del Paleozoico (y en caso del Precámbrico) sólo episodio (durante el Triásico medio) materiales de
afloran en las Zonas Internas Béticas y están muy de- plataformas carbonatadas marinas someras. En el otro
formados, mientras que en el resto forman parte de sector, donde se ubicará posteriormente la Subplaca
un basamento que no aflora. Sin embargo, se puede Mesomediterránea, la sedimentación en su totalidad
afirmar que toda la región en la que se asienta la ac- fue marina, como en otros dominios alpinos equiva-
tual Cordillera Bética formaba parte, al final del Paleo- lentes.
zoico, de la gran cadena de plegamiento formada por Al inicio del Jurásico (hace 205 Ma) ocurrió una
en la Orogenia Varisca, durante la colisión ocurrida invasión del mar de tierras que previamente estaban
durante el Carbonífero. Por tanto la historia previa a emergidas (transgresión) de manera que se implantó
esta etapa orogénica varisca sería común a la de los una plataforma carbonatada marina somera de unas
materiales del Macizo Varisco Ibérico, que afloran al dimensiones enormes. En un momento del Jurásico
norte del valle del Guadalquivir. inferior, hace unos 192 Ma, ocurrió otro fenómeno
El momento más significativo de la historia paleozoi- muy significativo de fracturación y adelgazamiento de
ca se sitúa hacia el límite entre el Westfaliense y Estefa- la corteza continental infrayacente (fase principal del
niense (hace 303 Ma) cuando tuvo lugar la fase princi- rifting intracontinental), que originó, en el área donde
pal de la orogenia varisca, que ocasionó el plegamiento después se ubicará el Margen Continental Sudibérico,
de los materiales marinos más antiguos, de manera que la separación de los dos grandes dominios paleogeo-
los sedimentos más modernos (Estefaniense y Pérmico) gráficos (Prebético y Subbético). Durante el resto del
se depositaron en medios continentales y se disponen Jurásico inferior y casi todo el Jurásico medio, en el
discordantes sobre las rocas anteriores plegadas. Prebético continuó la sedimentación en una platafor-
La historia geológica y la reconstrucción paleogeo- ma carbonatada, marina somera, mientras que en el
gráfica de las Zonas Externas desde el inicio del Meso- Subbético se depositaron sedimentos marinos pelági-
zoico hasta la actualidad se esquematiza en la figura 4 cos, con diferentes espesores según los subdominios
y ha sido representada en juegos de figuras para cada paleogeográficos, y empezó el vulcanismo submarino
una de las etapas sucesivas (17). en uno de los subdominios más subsidentes.
Al principio del Triásico (sin descartar que se iniciase Cerca del límite entre el Jurásico medio y el Jurásico
en el Pérmico) comenzó la separación, dentro de una superior (hace unos 160 Ma) empezó realmente la se-
misma placa, de dos áreas muy diferentes. Una quedó paración de lo que era una placa única en dos placas,
definitivamente formando un terreno emergido (Ma- debida a la formación de una estrecha banda de corte-
31
GEOLOGÍA DE ALICANTE

1 2

3 4

5 6

7 8
Lámina VI. Fotografías de campo. 1. Relieves de calizas del Jurásico (Carcabuey, Córdoba, Subbético). 2. Relieve de potentes
calizas del Jurásico (Jabalcuz, Jaén). 3. Borde oriental de Sierra Gorda, calizas del Jurásico y margas del Cretácico (Subbético).
4. Vista del flanco sur del anticlinal de materiales jurásicos de Sierra Pelada (Subbético, Granada). 5. Calizas nodulosas con
ammonites del Jurásico superior (Sierra de Quípar, Cehegín, Murcia, Subbético). 6. Alternancia de calizas y margas, con
ammonites del Cretácico inferior (Río Argos, Caravaca, Murcia, Subbético). 7. Turbiditas del Oligoceno superior-Mioceno inferior
de Tarifa (Complejo del Campo de Gibraltar). 8. Vista de las series calizas del Jurásico del Subbético al SE de Jaén.
32
GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

Ma
Era Periodo y época Millones Episodios más significativos de la formación de las Zonas Externas Béticas
de años

CUATERNARIO Elevación del conjunto de la cordillera y encajamiento de la red nuvial actual


1,8
o o Plioceno Sedimentación en las cuencas postorogénicas (Cuenca del Guadalquivir y cuencas intramo ntañosas),
zw 5,3 inic ialmente marina, después lacustre y finalmente fluvial. Exte nsión en el conjunto de la cordillera
u
... \ll
-o
Sup.
Mioceno Med 11,2
Final de la colisión del Dominio de Alborán con el margen sudibérico
o w 16, 4
Despegue de su basamento y deformación de la cobertera del margen continental (Zonas Externas)
N z Inicio de la colisión del Dominio de Alborán con el margen sud ibérico
o 23,8
z 33,7 Sin sedimentac ión en el Prebético Externo. Sedimentación carbonatada (calizas de Nummulites), que
w ha cia el sur cambia a margas, en el Prebético Interno. Sedimentación pe lág ica (con foraminiferos
u planctónicos y nanoplacton calcáreo), con intercalaciones de turbiditas, en el Subbético
Comienzo de la subducción del fondo oceánico ubicado al SE del margen sudibérico, bajo la
54,8
Placa Mesomediterránea (Estructuración interna del Dominio de Albarán)
65 CAMBIO DE UN MARGEN CONTINENTAL EXTENSIVO A UN MARGEN CONVERGENTE
Sedimentación carbonatada en el Prebético, que hacia el S cambia a margas y sedimentación
pelágica (con foraminíferos planctónicos y nanplancton calcáreo) en el Subbético
98 , 9 UNIFORMIZACIÓN: Menor fracturación del fondo de la cuenca
Sedimentación carbonatada (con Rud istas) en el Prebético Externo y
pelágica (con Ammonites), localmente con turbiditas, en el Subbético
FRACTURACIÓN: Divide el Prebético (Externo e Interno)
Sedimentación carbonatada marina somera y mareal en el Prebético Externo
y pelágica (con Ammonites), con diferencias de espesor, en el Subbético Vulcanismo
submarino en
Inicio de la formación de corteza oceánica (margen sudibérico) el Su bbétlco
Sedimentación carbonatada marina somera en el Prebético y
sedime ntació n pelágica (con Ammonites) en el Subbético

FRACTURACIÓN: Individualizacion del Subbético y Prebético


Sedimentación carbonatada en una gran plataforma marina somera localizada al S de I beria
TRANSGRESIÓN: Invasión del mar de tierras previamente emergidas
Sedimentación detrítica esencialmente continental (con un episodio marino somero) al S y E de Iberia
In icio de la sedimentación al S y E de Ibe ria, sobre el sustrato va risco (prolongación del Macizo Ibérico
248,2 - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - ·

Figura 4. Evolución paleogeográfica del Margen Continental Sudibérico.

za oceánica formada en este tiempo. Al norte de esta unos 99 Ma) la fracturación que afectó a los intervalos
banda se localizaba el Margen Continental Sudibérico, anteriores fue menor y se produjo una uniformización
integrante de la Placa Ibérica, cuyo límite norte era el de las características sedimentarias.
propio continente de Iberia. Al sur de la citada banda Otro de los momentos más significativos de la his-
se individualiza la Subplaca Mesomediterránea (Fig. 2) toria geológica ocurrió hacia el final del Cretácico (hace
parte de la cual era también un continente. 65 Ma) cuando el margen continental sudibérico pasó
Hacia el final del Jurásico (hace unos 144 Ma) se de ser de tipo extensivo a un margen continental de
produjo una nueva fase de extensión con fracturación tipo convergente, con lo que la banda de corteza con-
(rifting del margen continental), que afectó especial- tinental que había estado creciendo desde su forma-
mente al Prebético, de manera que se establecieron dos ción, empezó a reducir su extensión. Durante la etapa
grandes subdominios: uno menos subsidente (al norte) compresiva, que comprende el Paleógeno y parte del
y otro más subsidente (al sur), llamados Prebético Ex- Mioceno inferior, en la Subplaca Mesomediterránea
terno y Prebético Interno, respectivamente. Durante el ocurrieron cambios notables, con una estructuración
Cretácico inferior, en gran parte del Prebético Externo interna compleja (incluyendo el metamorfismo y la de-
no hubo sedimentación, mientras que en el Prebético formación ligada al mismo), y la formación de pilas de
Interno hubo un amplio desarrollo de los depósitos de mantos superpuestos. Esta subplaca, ya intensamente
calizas pararrecifales. Simultáneamente en el Subbético deformada y estructurada, empezó a fragmentarse y
(y en los sectores más meridionales del Prebético de Ali- la fracción localizada más al oeste (Dominio de Albo-
cante) la sedimentación fue de margas y calizas marinas rán) quedó individualizada. En las fases finales de este
pelágicas, localmente con turbiditas. Cerca del límite intervalo de tiempo los depósitos turbidíticos de los
entre el Cretácico inferior y el Cretácico superior (hace surcos de los flyschs alcanzaron el máximo desarrollo
33
GEOLOGÍA DE ALICANTE

1 2

3 4

5 6

7 8
Lámina VII. Fotografías de campo. 1. Calizas organógenas del Cretácico inferior de Sierra Mariola (Alicante). 2. Vista de los
términos inferiores (plano delantero) del Cretácico inferior de Sierra Mariola (Alicante). 3. Vista desde Sierra Aixorta (Cretáci-
co superior) hacia la Sierra de Mariola (Paleógeno, Alicante). 4. Vista de la parte meridional del Jabalcuz (Jurásico-Cretácico,
Subbético, Jaén). 5. Lavas almohadilladas (pillow-lavas) de las rocas volcánicas submarinas del Jurásico (Alamedilla, Granada,
Subbético). 6. Detalle de las lavas almohadilladas. 7. Discordancia entre los materiales subverticales del Cretácico y los horizon-
tales del Plioceno (Gorafe, Cuenca de Guadix-Baza). 8. Discordancia entre las dolomías del Triásico (verticales) y las calcarenitas
bioclásticas horizontales del Mioceno superior (Bermejales, Cuenca de Granada).
34
GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

Lámina VIII. Imagen de satélite del Subbético en la transversal de Jaén.


35
GEOLOGÍA DE ALICANTE

expresado en espesores muy considerables de sedimen- Al final del Pleistoceno (hace 0,1 Ma) la red fluvial
tos. Durante el Paleógeno y parte del Mioceno inferior, actual quedó definitivamente estructurada y la sedi-
en el margen sudibérico hubo: emersión del Prebético mentación del Holoceno se limitó a las zonas costeras
Externo, sedimentación marina somera en el Prebético y las zonas de inundación de los ríos. La morfología
Interno (excepto el Prebético de Alicante) y sedimenta- actual de la cordillera es en definitiva el resultado de
ción pelágica con turbiditas en el Subbético (incluido el la interacción de los múltiples factores que regulan el
Prebético de Alicante). clima actual.
Hace unos 19 Ma (cerca del final del de Mioceno
inferior) se inició la colisión del Dominio de Alborán
(que se había desplazado hacia el oeste) con el Mar- BIBLIOGRAFÍA
gen Continental Sudibérico, que ocasionó los cambios
mayores (Fig. 3). En la parte central de la Subplaca (1) Conferencia pronunciada por J.A. Vera en el VIII
Mesomediterránea se inició la formación de una cor- Simposio sobre Enseñanza de la Geología, cele-
teza oceánica que transmite un dispositivo extensivo brado en Córdoba (septiembre, 1994), cuyo texto
al conjunto de la misma. El desplazamiento del Do- fue publicado en: Vera, J.A. (1994): Geología de
minio de Alborán por procesos extensivos produce el Andalucía. Enseñanza de las Ciencias de la Tierra,
desplazamiento solidario de la cobertera sedimentaria vol. 2.2- 2.3, pp. 306-316.
de los surcos de los flyschs. Posteriormente originó en (2) Mapas geológicos de escalas 1:25.000 (parte), 1:
el Margen Continental Sudibérico el despegue de la 50.000, 1:200.000 y 1:1.000.000 del conjunto
cobertera sedimentaria (Triásico-Mioceno inferior) de de España publicados por el Instituto Geológico
su basamento (Paleozoico) con la consiguiente estruc- y Minero de España (IGME) (Página Web: http:
turación por efecto de una deformación compresiva de //www.igme.es)
las Zonas Externas Béticas. (3) Junta de Andalucía (1985): Mapa geológico y mi-
Terminada la colisión hacia el inicio del Mioceno nero de Andalucía, a escala 1: 400.000, publicado
superior (hace unos 9 Ma) y formada la nueva cadena por la Consejería de Economía e Industria, Sevilla.
montañosa, se individualizaron, en una fase extensiva, (4) WGDSSAS1974-1975 (Working Group for Deep
las cuencas neógenas postorogénicas en las cuales Seismic Sounding in the Alboran Sea) (1978):
se acumularon gran cantidad de sedimentos. Estas Crustal Seismic Profils in the Alboran Sea. Prelimi-
deformaciones extensivas afectaron también a las Zo- nary results. Pure Appl. Geophys., 116: 167-180.
nas Internas Béticas de manera que la mayor parte de WGDSSS1974-1975 (Working Group for Deep
los contactos tectónicos que se ven en la actualidad Seismic Sounding in Spain) (1977): Deep Seismic
muestran rasgos propios de esta extensión que borran sounding in southern Spain. Pure Appl. Geophys.,
parcial o totalmente los rasgos previos de las deforma- 115: 721-735.
ciones de tipo compresivo. (5) De los proyectos Deep Sea Drilling Project (DSDP)
Antes del inicio del Plioceno (hace unos 5,3 Ma) y Ocean Drilling Program (ODP) se puede disponer
tuvo lugar una elevación muy notable del conjunto de de una amplia información en la página web de la
la cordillera (18) que trajo consigo la retirada definitiva organización (http://www.odp.org) y en las pu-
del mar de las cuencas intramontañosas alejadas de las blicaciones que realiza la misma que se distribuyen
costas actuales. Al inicio del Cuaternario (hace 1,8 Ma) a las bibliotecas de todos los grandes centros de
se produjo un nuevo levantamiento del conjunto de la investigación geológica del mundo.
cordillera seguido del encajamiento de la red fluvial. (6) Imágenes de satélite (a escalas: 1:100.000 y 1:
Solamente en algunas cuencas sedimentarias (p. ej. 250.000) del conjunto de España publicadas por el
Guadix-Baza) continuó el depósito durante el Pleisto- Instituto Geográfico Nacional (Página Web: http:
ceno, mientras que en la mayoría de dichas cuencas a //www.mfom.es/igne/geografico.html)
partir de este momento dominó la erosión. La morfo- (7) Tablas de tiempo geológico de fácil acceso: En
logía del relieve de la cordillera se va modelando por la diferentes libros, entre ellos: Vera (1994: Estrati-
acción combinada de varios efectos (19) entre ellos el grafía: principios y métodos. Ed. Rueda, Madrid);
glaciarismo y la karstificación, aunque con dominio de Tarbuck (1999: Ciencias de la Tierra. Prentice Hall,
la acción erosiva de la red fluvial. Madrid); Hardenbol et al. (1998: Mesozoic and
36
GEOLOGÍA DE LA CORDILLERA BÉTICA

Cenozoic Sequence Chronostratigraphic Frame- J.M. y Vera, J.A. (1983): La Cordillera Bética. Intro-
work of European Basins, SEPM, Tulsa). ducción. En: Geología de España, Libro Jubilar de
(8) Tablas de tiempo geológico calibrado actualizadas J.M. Ríos, IGME, Madrid, pp. 205-218]
de acceso libre en la red: Universidad de Ber- (14) De Ruig (1992; Tesis Doctoral, Universidad de
keley: http://www.ucmp.berkeley.edu/help/ Ámsterdam); Castro (1997: Tesis Doctoral, Uni-
timeform.html, International Union of Geological versidad de Granada), Ruiz-Ortiz y Castro (1998:
Sciences (http://www.iugs.or). Bull. Soc. Geol. France, 169: 21-33), Chacón y
(9) Bases de datos internacionales de mayor uso: Martín-Chivelet (2001: Rev. Soc. Geol. España,
Institute for Scientific Information (ISI) y GeoRef 14: 123-133) y Caracuel et al. (2002: Geogaceta,
(del American Geological Institute). Bases de datos 32: 171-174).
nacional: BIGPI (Bibliografía geológica de la Penín- (15) Sanz de Galdeano y Vera (1992; Basin Research, 4:
sula Ibérica), Facultad de Geología de la Universi- 21-36).
dad de Barcelona e Institut Jaume Almera (http: (16) Martín-Algarra et al. (2004): Las Zonas Internas
//www.bib.es/bigpi/bigpi.htm). Base de datos Béticas. En: J.A. Vera (editor): Geología de España.
incluida en el CR-Rom anexo al libro Vera, J.A. SGE-IGME.
(editor) (2004): Geología de España, SGE-IGME. (17) Azema et al. (1979: Microfacies del Jurásico y
(10) J.M. Molina y J.A. Vera (2003): Bibliografía geoló- Cretácico de las Zonas Externas de las Cordill-
gica de la Cordillera Bética y Baleares (1978-2002). eras Béticas. Secreta. Publica. Univ. Granada);
Ed. Univ. Jaén, 271 p. y 1 CD-Rom. Contiene más Martín-Algarra (1987: Tesis Doctoral, Univ.
de 3.000 citas bibliográficas. Granada); Dercourt et al. (1993): Atlas Tethys,
(11) Libros específicos sobre Geología de España: IGME Palaeoenviromental Maps. Gauthier-Villars,
(1983): Geología de España, Libro Jubilar de J.M. Paris); Sanz de Galdeano (1997: La Zona Interna
Ríos, IGME, Madrid, 2 volúmenes, 1457 p; W. Bético-Rifeñas, Tierras del Sur, Granada); Ziegler
Gibson y T. Moreno (editores) (2002): The Geolo- (1998: Amer. Assoc. Petrol. Geol. Mem. 43, 198
gy of Spain. Publicado por The Geological Society p; Vera (2001: Mem. Mus. Nac. Cien. Nat. Paris,
of London, con la participación de 160 autores, 186: 109-143).
Londres, 649 p. (18) Braga, Martín y Quesada (2003): Patterns and
(12) Vera, J.A. (editor) (2004): Geología de España. Edi- average rates of late Neogene-Recent uplift of the
tado por la Sociedad Geológica de España (SGE) y Betic Cordillera, SE Spain. Geomorphology, 50: 3-
el Instituto Geológico y Minero de España (IGME), 26.
con la participación de 350 autores, Madrid, 720 (19) Goy, Zazo y Rodríguez-Vidal (1994): Cordilleras
p., 2 mapas, 1 CD-Rom. Béticas - Islas Baleares. En: Geomorfología de
(13) Trabajos clásicos: Blumenthal (1927), Fallot (1948) España (M. Gutiérrez-Elorza, Editor), Ed. Rueda,
y Fontboté (1970) [Ver referencias en: Fontboté, Madrid).

También podría gustarte