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TESIS
Presentada como requisito para optar el grado de Maestría en Ciencias en Recursos Naturales y
Desarrollo Rural
Con orientación en Manejo y Conservación de Recursos Naturales
Por
2017
Dedicatoria
A Dios, por haberme dado vida y permitirme el haber llegado hasta este momento tan
importante de mi formación profesional.
A ti Faustina, por ser el pilar más importante en mi vida, por tu apoyo incondicional, por
ser mi motor, mi ejemplo, por alentarme siempre a luchar por lo que quiero y nunca darme
por vencida, por estar conmigo en los momentos difíciles y nunca dejarme sola, por ser
mi madre, pero también mi amiga.
A mi abuelo Gustavo, por sus consejos, por platicarme sus experiencias de vida, por
enseñarme amar la tierra y por ser esa persona que siempre me ayuda a tener los pies
sobre la tierra.
A mis hermanos Deyar y Miguel, porque siempre he tenido su apoyo, cariño y amor en
todo momento, por compartir alegrías, tristezas y demostrarme que siempre podré contar
con ustedes.
A mis sobrinos Brayan, Héctor Enrique y Paulina, por hacerme sonreír en los momentos
más difíciles.
A mi familia en general, porque me han brindado su apoyo y por compartir conmigo
momentos buenos y malos, porque me alegran la vida y me motivan para continuar
preparándome mejor y ven en mi un ejemplo a seguir, a todos ustedes que me han dado
todo lo que soy como persona, mis valores, mis principios, mi carácter, mi empeño, mi
perseverancia, mi coraje para conseguir mis objetivos.
2
Agradecimientos
Al Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) por haberme otorgado el
financiamiento para llevar a cabo mis estudios de posgrado.
A los investigadores del Colegio de la Frontera Sur quienes participaron en mi formación
académica. Así como a todas aquellas personas que me brindaron su amistad y apoyo e
hicieron de mi estancia una experiencia inolvidable.
A mi comité tutorial, por su excelente dirección académica. Al Dr. Pedro Antonio Macario
Mendoza quien siempre me apoyo, por su comprensión y confianza en todo momento,
no solo en lo académico sino también en los momentos difíciles en los que viví.
Al Dr. Jorge Omar López Martínez por su tiempo durante la redacción del documento, los
cuales sin duda alguna enriquecieron este trabajo.
Al Dr. Benedicto Vargas Larreta, por ayudarme a analizar e interpretar mis datos, así
como por sus revisiones y comentarios a la presente investigación.
Al M.C. Luis Candelario Sánchez Pérez, quien estuvo en todo el trabajo de campo, desde
la búsqueda de los sitios hasta el último día de mediciones, por sus acertados
comentarios, por su amistad y por alentarme en los momentos difíciles.
A la Lic. Patricia Bardales Pastrana, encargada de servicios escolares en la unidad
Chetumal, por todo el apoyo en los trámites administrativos.
A todas las personas que estuvieron en campo: Armando Cahuich Ake, Cornelio Poot
Cahuich, Miguel Carrazcosa Villegas, Fernando Romero Macario, agradezco su alegría
y entusiasmo que hacía el trabajo más ameno.
A mis compañeros y amigos de maestría, por su apoyo en todo momento, tanto en las
clases como fuera de ellas e incluso en los momentos difíciles.
3
A mis sinodales M.C. Luis Candelario Sanchez Perez, M.C. Efrain Aguirre Cortes y al Dr.
Hugo Enrique Lazcano Hernandez, por la disponibilidad que tuvieron al revisar el
documento, así como por los comentarios realizados en este trabajo.
4
ÍNDICE DE CONTENIDO
RESUMEN……………………………………………………………………………………….8
1 INTRODUCCIÓN ...................................................................................................... 9
1.1 GENERALIDADES ................................................................................................ 10
1.2 PRIMERA ETAPA DE LOS MODELOS ....................................................................... 11
1.3 CLASIFICACIÓN DE LOS MODELOS DE CRECIMIENTO ............................................... 11
1.4 CUALIDADES DE UN MODELO DE CRECIMIENTO ...................................................... 14
1.5 VARIABLES A CONSIDERAR EN UN MODELO DE CRECIMIENTO .................................. 14
1.5.1 Crecimiento en diámetro .............................................................................. 15
1.5.2 Crecimiento en altura ................................................................................... 15
1.5.3 Crecimiento basal ......................................................................................... 15
2 ANTECEDENTES ................................................................................................... 17
2.1 ANTECEDENTES EN MÉXICO ................................................................................ 20
3 JUSTIFICACIÓN ..................................................................................................... 24
4 PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN ......................................................................... 25
5 OBJETIVOS ............................................................................................................ 25
5.1 OBJETIVO GENERAL ............................................................................................ 25
5.2 OBJETIVOS ESPECÍFICOS ..................................................................................... 25
6 HIPÓTESIS ............................................................................................................. 25
7 ÁREA DE ESTUDIO ............................................................................................... 26
7.1 CARACTERIZACIÓN GENERAL DE LOS EJIDO X- HAZIL Y ANEXOS Y LAGUNA OM ........ 26
7.1.1 Localización geográfica ................................................................................ 26
7.1.2 Superficie y ubicación geográfica ................................................................. 27
7.1.3 Geología ....................................................................................................... 27
7.1.4 Relieve.......................................................................................................... 28
7.1.5 Hidrología ..................................................................................................... 28
7.1.6 Clima ............................................................................................................ 29
7.1.7 Suelos .......................................................................................................... 29
7.1.8 Vegetación ................................................................................................... 30
7.1.9 Fauna ........................................................................................................... 31
7.1.10 Población .................................................................................................. 31
8 METODOLOGÍA ..................................................................................................... 32
8.1 CARACTERIZACIÓN DE LOS SITIOS ........................................................................ 32
8.2 CARACTERISTICAS DE LA BASE DE DATOS ............................................................. 37
8.3 MODELO PROPUESTO ......................................................................................... 38
9 RESULTADOS Y DISCUSIÓN ............................................................................... 39
10 CONCLUSIONES ................................................................................................... 46
11 LITERATURA CITADA ........................................................................................... 47
12 ANEXOS…………………………………………………………………………………..57
5
INDICE DE FIGURAS
FIGURA
1.
UBICACIÓN
DE
LOS
EJIDOS
X-‐HAZIL
Y
ANEXOS
Y
LAGUNA
OM……………………………………………26
FIGURA
2.
UBICACIÓN
DE
LOS
SITIOS
DE
MUESTREO
EN
EL
EJIDO
X-‐HAZIL
Y
ANEXOS…..…………………….33
FIGURA
3.
UBICACIÓN
DE
LOS
SITIOS
DE
MUESTREO
EN
EL
EJIDO
LAGUNA
OM
………………………………….33
FIGURA
4.
COLOCACIÓN
DE
LA
MOJONERA
EN
EL
CENTRO
DEL
SITIO…………………………………………………34
FIGURA
5.
DIAGRAMA
DEL
SITIO
DE
MUETREO
………………………………………………………………………………….35
FIGURA
6.
PLACA
DE
ÁRBOL……………………………………………………………………………………………………………….36
FIGURA
7.
MEDICIÓN
DE
DIÁMETRO………………………………………………………………………………………………….36
FIGURA
8.
MARCAJE
DE
CIRCUNFERENCIA………………………………………………………………………………………….36
FIGURA
9.
MEDICIÓN
DE
ALTURA
Y
FUSTE………………………………………………………………………………………….36
FIGURA
10.
GRÁFICAS
DE
SWIETENIA
MACROPHYLLA
EN
X-‐HAZIL………………………………………………………42
FIGURA
11.
GRÁFICAS
DE
METOPIUM
BROWNEI
EN
X-‐HAZIL……………………………………………………………..42
FIGURA
12
GRÁFICAS
DE
DENDROPAAX
ARBOREUS
EN
X-‐HAZIL…………………………………………………………42
FIGURA
13.
GRÁFICAS
DE
BURSERA
SIMAROUBA
EN
LAGUNA
OM…………………………………………………….42
FIGURA
14.
GRÁFICAS
DE
SWIETENIA
MACROPHYLLA
EN
LGUNA
OM…………………………………………………43
FIGURA
15.
GRÁFICAS
DE
MANILKARA
ZAPOTA
EN
X-‐HAZIL……………………………………………………………….43
FIGURA
16.
GRÁFICAS
DE
LYSILOMA
LATISILIQUUM
EN
LAGUNA
OM…………………………………………………44
FIGURA
17.
GRÁFICAS
DE
DENDROPANAX
ARBOREUS
EN
LAGUNA
OM……………………………………………..44
FIGURA
18.
GRÁFICAS
DE
VITEX
GAUMERI
EN
X-‐HAZIL……………………………………………………………………….44
FIGURA
19.
GRÁFICAS
DE
VITEX
GAUMERI
EN
LAGUNA
OM……………………………………………………………….44
FIGURA
20.
GRÁFICAS
DE
MANILKARA
ZAPOTA
EN
LAGUNA
OM……………………………………………………….45
FIGURA
21.
GRÁFICAS
DE
LYSILOMA
LATISILIQUUM
EN
X-‐HAZIL………………………………………………………..45
FIGURA
22.
GRÁFICAS
DE
METOPIUM
BROWNEI
EN
LAGUNA
OM……………………………………………………..45
FIGURA
23.
GRÁFICAS
DE
BURSERA
SIMARUBA
EN
X-‐HAZIL
………………………………………………………………45
6
INDICE DE TABLAS
TABLA
1.
LISTADO
DE
ESPECIES
DEL
EJIDO
LAGUNA
OM……………………………………………………………………57
TABLA
2.
LISTADO
DE
ESPECIES
DEL
EJIDO
X-‐HAZIL
Y
ANEXOS…………………………………………………………..62
TABLA
3.
ESPECIES
Y
FAMILIAS
EXISTENTES
EN
CADA
EJIDO………………………………………………………………67
TABLA
4.
PARAMETROS
UTILIZADOS
PARA
EL
VOLUMEN
…………………………………………………………………68
TABLA
5.
RELACIÓN
DE
LOS
AJUSTES
DE
LAS
LINEAS
DE
TENDENCIA
DE
LAS
SIETE
ESPECIES………………40
7
RESUMEN
Los modelos de crecimiento desempeñan un papel fundamental en el aspecto
forestal, sin embargo, son poco los trabajos elaborados en las zonas tropicales, aún más
cuando hablamos de la vegetación secundaria y su dinamismo. Por ello, el objetivo de la
presente investigación fue la de desarrollar un modelo de crecimiento en diámetro para
siete especies en cuatro diferentes etapas sucesionales localizadas en la Península de
Yucatán. El estudio comprende dos localidades X-hazil y anexos, y El Ejido Laguna Om.
Los sitios son de forma circular 500 m2 (12.60 m de radio) para el muestreo. Se utilizaron
modelos estadísticos de regresión lineal, en la cual los que destacaron fueron la
exponencial, potencial y polinómica. Fueron siete las especies que se ajustaron a las
líneas de tendencia en las cuales las de mayor dominación fueron la polinómica y
potencial y una especie fue la que represento al modelo exponencial, en relación a su
edad-diámetro y edad-area basal, una de las posibles explicaciones para este
comportamiento, es que el árbol muestreado se encontraba en una etapa de sucesión
madura. En los resultados obtenidos, se pudo establecer que en algunos casos, es
conveniente ajustar los datos a diferentes modelos, con la finalidad de encontrar el mejor
coeficiente de correlación, y probar el modelo de ajuste para los datos con que se cuenta
y para realizar algunas proyecciones, esto permitirá determinar la confiabilidad del
modelo, ya que algunos ajustan los datos solo en el rango en que éstos se encuentran y
al tratar de hacer proyecciones, los resultados que se obtienen no tienen nada que ver
con la realidad. Se recomienda para los casos en que la dispersión de los datos no sea
grande y que la tendencia es clara, se proponga un modelo basado en ello.
8
1 INTRODUCCIÓN
Los bosques desempeñan una función esencial en el ciclo del agua, la
conservación de los suelos, la fijación de carbono y la protección de los hábitats, en
particular los de los polinizadores. Su gestión sustentable es crucial para lograr una
agricultura y alcanzar la seguridad alimentaria (FAO, 2016).
Las pérdidas de bosques en el período 2010-2015 (la mayoría de las cuales se
refieren a bosques naturales) se compensaron parcialmente mediante una combinación
de expansión natural, a menudo en terrenos agrícolas abandonados (2,2 millones de
hectáreas anuales) y establecimiento de bosques plantados (3,1 millones de hectáreas
anuales) (FAO, 2016).
En México la mayoría de los bosques están intervenidos con fines productivos, es
decir, son manejados. De todos los bosques y selvas de México, el 30% corresponde a
bosques y selvas llamados “secundarios”;; es decir, que se considera que han perdido de
manera significativa su estructura y/o composición “originales”. El resto de bosques y
selvas, son considerados en su mayoría integrantes de biomas antropogénicos (Ellis et
al., 2010).
Quintana Roo enfrenta cambios en su cobertura vegetal con diferentes grados de
madures nombrados como acahuales, guamiles o simplemente vegetación secundaria.
El aprovechamiento de esta vegetación es de principal importancia ya que se requiere
datos de regeneración, estado sucesional, tasas de crecimiento y edad de los arboles
(Shöngart, 2008).
El estudio de crecimiento e incremento de árboles y de bosques es de interés de
los silvicultores con el propósito de determinar su respuesta y su proyección a un
determinado tiempo para un mejor manejo de los bosques (Prodan et al., 1997). Sin
embargo, para un aprovechamiento sostenible el tema es complejo ya que el progresivo
abandono y degradación de la selva hace necesario realizar estudios de gestión de las
mismas que depende en gran medida de factores sociales y políticos. El estudio del
crecimiento permite conocer la dinámica de los bosques y estimar los turnos de
aprovechamiento dentro de un bosque o rodal (Korning & Balslev, 1994).
9
Es por ello la importancia de los modelos de crecimiento, los cuales asisten a los
investigadores y silvicultores de muchas maneras. Algunos usos importantes incluyen la
habilidad para predecir el rendimiento futuro y para explorar opciones silviculturales
(Vanclay, 1994). También recae en el interés para determinar su respuesta y su
proyección a un determinado tiempo para su mejor manejo;; todo esto es posible gracias
a diversos estudios que se realizan día a día para comprender el fenómeno de
crecimiento de las especies forestales (Prodan et al., 1997).
1.1 Generalidades
Un modelo de crecimiento es una abstracción de la dinámica natural de las masas
forestales y puede abarcar el crecimiento, la mortalidad y otros cambios en la estructura
y composición del rodal. Un modelo de crecimiento puede comprender una serie de
ecuaciones matemáticas, los valores numéricos incorporados en estas ecuaciones, la
lógica necesaria para vincular estas ecuaciones y la estructuración en lenguajes de
programación para implementar el modelo. En un sentido amplio, puede abarcar tablas y
curvas de rendimiento, que son compatibles con las ecuaciones, pero que han sido
expresadas en forma tabular o gráfica (Vanclay, 1994). La selección apropiada de una
ecuación de crecimiento para modelar las variables de interés en una masa forestal es
un aspecto de gran importancia en el desarrollo de modelos de crecimiento y rendimiento
(Burkhart y Tomé, 2012).
Los modelos de crecimiento sirven para simular experimentos que no sería posible
realizar en la realidad, debido a los largos períodos de observación necesarios, también
proporcionan información sobre las consecuencias económicas y ecológicas de una
determinada decisión. Por tanto, son herramientas indispensables de apoyo a la toma de
decisiones para el manejo forestal (Gadow et al., 2007).
10
1.2 Primera etapa de los modelos
Munro (1974) sugirió la siguiente clasificación de los modelos de crecimiento:
1. Modelos de masa. Utiliza variables de masa (p., ej., edad, índice de sitio, área
basimétrica, número de pies por hectárea) como variables de partida, mientras que
por lo menos algunas de las variables de partida en un modelo de árbol son
variables de árbol individual.
2. Modelos de árbol individual independiente de la distancia entre pies (no
espaciales), no se requiere ninguna información de la distribución espacial de los
árboles. No usan información espacial para expresar competencia, pero pueden
usar variables predictoras (p. ej., el área basimétrica) que miden la densidad de la
masa y, de esta forma, expresan la competencia total de la misma (Pukkala, 1988,
1989;; Vanclay, 1994;; Van Laar y Akca, 1997).
3. Modelos de árbol dependientes de la distancia entre pies (espaciales), incluyen o
precisan una medición espacial de la competencia. Ésta se expresa normalmente
en función de la distancia entre un árbol determinado y sus vecinos, así como la
talla de dichos vecinos.
1.3 Clasificación de los modelos de crecimiento
Diéguez-Aranda et al. (2009) destacan la clasificación de los modelos de
crecimiento bajo el siguiente enfoque:
1. Modelos de rodal. Estos modelos explican sobre el desarrollo probable del
conjunto de árboles que constituyen el rodal. Su principal ventaja es que solo se
requieren variables del rodal para estimar el crecimiento y volumen futuros.
2. Modelos de clases dimensionales. Estos modelos dan respuesta a las
necesidades de información sobre el número de árboles de diferentes tamaños
que existen en el rodal. Estos modelos permiten caracterizar y simular la estructura
11
de las masas forestales y predecir su evolución no solo desde el punto de vista de
existencias volumétricas, sino también de la calidad de sus productos.
3. Modelos de árbol individual. Son modelos que tratan de describir el crecimiento
individual de cada uno de los árboles de un rodal a partir de los fenómenos que lo
condicionan. Proporcionan información más detallada que otras metodologías de
modelización (García, 1994;; García, 2003), y generalmente funcionan mejor que
los modelos de masa para proyecciones a corto plazo (Burkhart, 2003). Además,
cuando hay información a nivel árbol en una masa, los modelos de árbol permiten
una descripción más detallada de la estructura de la misma y su dinámica que los
modelos de masa (Mabvurira y Miina, 2002). Estos modelos permiten la simulación
de un rango mayor de tratamientos silvícolas, ya que la respuesta de un árbol
concreto a los tratamientos depende directamente del grado en que la
competencia a que estaba sometido se haya visto reducida por el tratamiento.
4. Modelos estáticos. Son sistemas estructurados de relaciones matemáticas,
estadísticas o lógicas que no dependen, o no consideran explícitamente, la tasa
de crecimiento de los árboles o los rodales forestales.
5. Modelos dinámicos. Estos consideran el crecimiento de las variables descriptivas
de los árboles o rodales forestales, por lo que para su construcción es necesario
disponer de datos provenientes de árboles o rodales inventariados al menos en
dos ocasiones y además el ajuste estadístico debe realizarse con una metodología
que considere el crecimiento. Los modelos dinámicos describen cómo las
variables de estado evolucionan con el tiempo, mientras que los modelos estáticos
no.
6. Modelos determinísticos. Estos modelos generan siempre los mismos resultados
ante el mismo escenario (mismos datos de entrada y mismos algoritmos).
7. Modelos estocásticos. Son modelos que generan diferentes resultados cada vez
que se realiza la simulación, debido a la incorporación deliberada de un
componente aleatorio en el modelo. Los modelos estocásticos incluyen un factor
aleatorio o distribuciones de probabilidad.
8. Modelos empíricos. Estos explican la dinámica de los árboles o los rodales
forestales a partir de datos experimentales obtenidos en parcelas de investigación
12
en una región determinada, representando fielmente la realidad observada, pero
sin tener en cuenta los mecanismos y procesos elementales de crecimiento. Su
interés radica en que, a partir de variables muy fáciles de medir, proporcionan
estimaciones cuantitativas muy importantes para el manejo forestal. Los modelos
empíricos también se denominan modelos correlativos o estadísticos (Dourado-
Neto et al., 1998b ), que ofrecen poco o nada a la comprensión de los procesos
causa-efecto involucrados, y están diseñados para obtener la correlación entre la
producción de cultivos con una o más variables como la temperatura, la radiación,
la disponibilidad de agua y los nutrientes, especialmente el nitrógeno. Los modelos
empíricos son simples de desarrollar y fáciles de aplicar. Sin embargo, son más
propensos al error y se limitan al rango de condiciones en que se calibraron
(Dourado-Neto et al., 1998b ).
9. Modelos de procesos. Estos modelos incorporan a la simulación una interpretación
del crecimiento de los árboles fisiológica y ecológicamente realistas, suelen incluir
variables como la luz, el ciclo de nutrientes, el balance de carbono, el índice de
área foliar, entre otras. La principal ventaja de los modelos basados en procesos
es que son sensibles a los cambios ambientales, siendo por lo tanto de aplicación
más general que los modelos empíricos.
10. Modelos híbridos. Estos modelos incorporan las influencias ambientales en los
modelos de crecimiento y producción empíricos, mediante el establecimiento de
relaciones entre algunas de sus salidas o entradas. Así se incorporan variables
edáficas y climáticas a los modelos empíricos, mejorando sensiblemente la
predicción de las estimaciones.
11. Modelos mecanísticos. Consideran el conocimiento de los procesos físicos,
químicos y biológicos que rigen los fenómenos en estudio. Algunas veces se
consideran explicativas porque expresan una relación causa-efecto entre las
variables (Teh, 2006 ).
13
genética, entre otros, que en conjunto constituyen los principales objetivos de los
desarrolladores y usuarios del modelo.
Mendoza (1983) destaca el alcance de la utilización de los modelos de crecimiento
con las siguientes cualidades:
1. Generalidad: Es la medida en que un determinado modelo puede ser utilizado en
el estudio de procesos. El caso del crecimiento modelado como curva sigmoide,
es un ejemplo de modelo de amplia generalidad;; puesto que, utilizando los valores
numéricos apropiados a cada caso, puede representar para una diversidad de
objetivos el desarrollo de las masas forestales.
2. Complejidad. Es el resultado del número de variables en el modelo, así como el
número y tipo de ecuaciones. La importancia de esta característica reside en los
problemas que la complejidad pueda causar en cuanto a la disponibilidad de
paquetes estadísticos y acumulación de errores. Entre más complejo sea un
modelo aumenta el realismo para la explicación del fenómeno de estudio.
3. Realismo. Se trata de una medida de similitud entre el modelo y el patrón. En
general los modelos de simulación son más realistas que los modelos predictivos.
4. Precisión. Exactitud y confiabilidad. Estos componentes son parte importante de
la determinación de la calidad del modelo.
1.5 Variables a considerar en un modelo de crecimiento
Prodan (1993) opina que no se deben aprovechar los bosques más allá de su
crecimiento. Por ello es fundamental conocer el crecimiento en diámetro, altura y las
variables que de ellas se derivan como son el área basal y el volumen a fin de poder
planificar un aprovechamiento racional del recurso mediante un adecuado manejo
silvícola.
14
1.5.1 Crecimiento en diámetro
El crecimiento en diámetro de los árboles en masas forestales con o sin manejo
está fuertemente influenciado por la calidad de estación y por las condiciones de
competencia existentes en el rodal, ya que el crecimiento en diámetro de los árboles, en
general, es más dependiente de la competencia que el crecimiento en altura. El
crecimiento e incremento en diámetro es un elemento muy importante en el manejo
forestal, ya que el diámetro es una de las variables más fácil de medir y tiene una fuerte
relación con la altura y volumen. El objetivo de evaluar el crecimiento en diámetro es
definir su dinámica a una edad y condición inicial determinada, con ello es posible
identificar estrategias de manejo para optimizar tasas de crecimiento que satisfagan los
objetivos de producción planteados, estimar periodos de cosecha, así como planificar
actividades de protección y aprovechamiento de los recursos forestales (Torres y
Magaña, 2001).
1.5.2 Crecimiento en altura
El crecimiento en altura de los árboles más grandes en el rodal esta correlacionado
con la capacidad productiva del sitio y es poco afectado por la densidad del rodal y las
cortas intermedias. Naturalmente, esté se verá afectado con la aplicación poco usual de
aclareos por lo alto. Por ello, la altura dominante del rodal es la variable más usada para
clasificar sitios por calidad de estación (Cruz, 2007).
1.5.3 Crecimiento basal
-1
El crecimiento en área basal depende de número de árboles vivos/ha de la masa.
Por tanto, en rodales coetáneos o regulares de la misma densidad, el crecimiento del
área basal aumenta al incrementarse la altura dominante del rodal. Las funciones para
determinar el crecimiento y proyección en de área basal, deben presentar 3 propiedades
(Clutter et al., 1983;; Amaro et al., 1997b;; Van Laar y Akca, 1997;; Del Rio, 1999):
15
inflexión coherente, biológicamente deben alcanzar mejores índices de sitio.
2. Invarianza. Se expresa a los valores predichos de área basal, que pueden en un futuro
partir del área basal (G2 ) a una proyección (G1) área basal inicial, de tal manera
que deben ser iguales independientemente del número de intervalos utilizados en
su predicción.
3. Sencillez. Cuando los modelos son demasiado complejos y presentan muchas
interacciones entre las variables independientes se pueden ver afectados por la
existencia de correlación entre las variables, por consiguiente, son inestables y
con una capacidad predictiva inferior a la de otros modelos más simples, inclusive,
aunque el ajuste de estos últimos a los datos experimentales sea no el más
adecuado.
16
2 ANTECEDENTES
17
Huang y Titus (1995) desarrollaron un modelo de incremento en diámetro
independiente de la edad con datos obtenidos de parcelas permanentes de muestreo en
rodales mixtos en Alberta. El incremento periódico anual es definido como una función
del diámetro normal, altura total, competencia relativa de los árboles dentro del rodal,
composición de especies, densidad del rodal y productividad de sitio.
Murphy y Shelton (1996) desarrollaron un modelo de crecimiento en área basal en
rodales irregulares usando árboles individuales que crecen libres de competencia a los
cuales se les ajustó un factor que reduce su crecimiento con las características y variables
del rodal.
Wensel y Tumblom (1998) desarrollaron un modelo de árboles individuales para
estimar el incremento periódico anual en área basal en el noroeste de California con datos
de parcelas permanentes de muestreo, el cual fue ajustado por los niveles de variación
en la precipitación.
Hokka y Groot (1999) desarrollaron un modelo de árboles individuales para estimar
el crecimiento en área basal de Picea Mariana en Ontario. Los datos usados fueron
derivados de análisis troncales. El modelo fue expresado como una función del diámetro,
nivel de competencia en el rodal y de cada árbol y el grosor de la turba.
Sudáfrica es el cuarto país con mayor superficie ocupada por Pinus radiata, con
aproximadamente 300.000 hectáreas repobladas (Eldridge, 1997). Cabe destacar en este
país el modelo de simulación de crecimiento y producción PCPROJ (Pretorius, 1993),
desarrollado por la South African Forestry Company Limited (SAFCOL), basándose en
los datos de un ensayo de espaciamiento situado en la masa más importante de esta
especie en el país.
En Portugal, se han realizado modelajes para el crecimiento en diámetro para
alcornocales del centro y sur de este país, en la que se analizó la influencia de las
dimensiones del individuo, la gestión aplicada en el descorche y la competencia
intraespecífica en el crecimiento diametral. (J. Vázquez Piqué y H. Pereira, 2004).
En Argentina, Galindez et al. (2005) desarrolla una modelación de crecimiento en
Prosopis alba Griseb. Empleando dos modelos biológicos, su objetivo fue ajustar dos
ecuaciones no lineales como el Modelo de Chapman- Richards y el Modelo Logístico para
predecir el crecimiento de algarrobo blanco en la región del Chaco.
18
Adame P et al., (2007) desarrollaron un modelo mixto independiente de la distancia
para predecir el crecimiento diametral para árbol individual de masas de rebollo (Quercus
pyrenaica Willd.) localizadas en la Comunidad de Castilla y León, España. Las variables
independientes requeridas para dicha predicción se dividieron en cuatro grupos: tamaño
del árbol, variables de masa, índices de competencia y variables biogeoclimáticas. Entre
todas las variables probadas, las más significativas fueron el diámetro normal del árbol,
la suma del área basimétrica de los árboles mayores que el árbol objetivo, la altura
dominante de la masa, la calidad de estación y el estrato biogeoclimático. El modelo fue
definido como un modelo lineal mixto con la parcela como variable aleatoria, alcanzando
una eficiencia del 44.38%.
En España, la primera referencia en la modelización del crecimiento de Pinus
radiata se debe a Echeverría (1942), que construyó unas tablas de producción normal
con datos recogidos en 41 parcelas localizadas en las provincias de Vizcaya, Guipúzcoa,
Pontevedra y Santander. Son tablas de espesura completa, que buscaban la plena
utilización de los recursos y la máxima producción mediante la utilización del espacio de
forma total y eficaz. Más recientemente, Castedo-Dorado (2004) desarrolló un modelo
dinámico de crecimiento para esta especie más avanzado que el anterior (incluye incluso
un sistema de desagregación por clases diamétricas), que se basa en datos de dos
inventarios de las mismas parcelas utilizadas por Sánchez (2001) y en la utilización de
variables de estado y de funciones de transición en forma de diferencias algebraicas para
proyectar dichas variables. Este modelo dinámico ha sido recientemente revisado,
utilizando para ello datos de un tercer inventario de parte de la red original de parcelas y
aplicando técnicas estadísticas más avanzadas (Castedo-Dorado et al., 2007a). El
modelo permite simular cualquier situación posible eligiendo los marcos de plantación y
regímenes de clara que interesen, siempre que la evolución propuesta esté representada
en las parcelas empleadas para ajustar el mismo.
Manceñido (2016) desarrolló un modelo de crecimiento potencial en diámetro para
árboles individuales de ciprés de la cordillera (Austrocedrus chilensis (D. Don) Pic. Serm.
Et Bizzarri) que considera al diámetro a la altura del pecho y al índice de sitio como
variables predictoras, en la región de El Bolsón, provincia de Rio Negro, Argentina.
19
2.1 Antecedentes en México
21
Návar et al. (1996) desarrollaron un modelo matemático para estimar el
crecimiento forestal de rodales irregulares en el sudoeste de Sinaloa México, con
información proveniente de inventarios convencionales, basado en el ajuste de la
distribución Weibull a las categorías diamétricas por clase de edad.
Moreno (1996) realizó una comparación de dos métodos de construcción de
curvas de índice de sitio para Pinus pseudostobus Lindl. En la región de Hidalgo-
Zinapécuaro, Mich. mediante análisis troncales de 51 árboles. El autor utilizó los modelos
de Schumacher y Chapman- Richards en su versión polimórfica. De igual forma, Franco
(2001) realizó un estudio del índice de sitio para Pinus montezumae Lamb. en la región
de Cd. Hidalgo, Mich. Mediante 28 análisis troncales;; para lo cual utilizó el método de la
curva guía y los modelos de Chapman-Richards, Schumacher y Gompertz.
Zepeda y Domínguez (1998) estiman el crecimiento e incremento de rodales puros
y coetáneos de Pinus arizonica con un modelo compatible del rodal. Los datos utilizados
fueron obtenidos de parcelas permanentes de muestreo establecidas en 1970.
Valles et al. (1998) relacionan nueve índices de competencia dependientes de los
árboles con el crecimiento en diámetro de Pinus cooperi en un bosque irregular mezclado
en Durango. Los datos utilizados fueron de parcelas permanentes de muestreo.
Návar et al., (1999) ajustan preliminarmente tres modelos de crecimiento y
producción en bosques irregulares bajo manejo en Durango. Los modelos utilizados
fueron al nivel arboles individuales, al nivel del rodal y al nivel de clases diamétricas
ajustando la distribución Weibull a las estructuras diamétricas de los árboles dentro del
rodal, recomendando el último por ser más consistente en estimar los volúmenes a partir
del incremento de los últimos 10 años.
Vargas-Larreta et al. (2010) describe el simulador de crecimiento y producción de
rodales forestales BWINPro7 versión El Salto, Durango. Este programa incorpora
modelos de crecimiento de árbol individual, desarrollados en los últimos años para las
principales especies de pino y encino de los bosques mixtos e irregulares del noroeste
de México, aquí se incorporó modelos para estimar el diámetro de copa y la altura de
fuste limpio, modelos para la estimación del crecimiento en altura y area basal de árboles
individuales y un modelo para la cuantificación de la mortalidad natural.
22
Manzano- Méndez et al. (2010) determino el crecimiento estacional en diámetro
de una especie de importancia maderable Zanthoxylum kellermanii P. Wilson en una
selva perennifolia del norte de Oaxaca, seleccionaron 22 árboles de seis categorías
diamétricas y les instalaron bandas dendrométricas para tomar lecturas bimensuales de
su crecimiento, se registraron características relacionadas con la copa de los arboles:
calidad (simetría, vigor, densidad del follaje) y posición (incidencia de luz). Los análisis
de varianza mostraron diferencias altamente significativas (p<0,001) entre categorías
diamétricas, así como entre calidades y posiciones de copa.
Domínguez-Calleros et al. (2017). Realizaron aplicaciones y ejemplos de modelos
de crecimiento diamétrico para árboles individuales en bosques tropicales
latinoamericanos, los resultados muestran los parámetros de las ecuaciones de mejor
ajuste y las curvas de crecimiento diamétrico en función de la edad y se describe su
potencial utilización en el desarrollo de planes de manejo forestal.
23
3 JUSTIFICACIÓN
En la actualidad, la vegetación de Quintana Roo comprende un mosaico de selvas
en diferentes estados de sucesión que han sido causados por diferentes tipos y grados
de perturbación, con la posibilidad de ser manejadas para rehabilitarlas y dirigir el estado
de sucesión a diferentes estados de desarrollo (Gómez-Pompa, 1987;; Rico-Gray, 1991;;
Carranza et al., 1996;; Gómez-Pompa, 1998). Aunado a lo anterior surge el interés de
silvicultores y forestales el investigar sobre el crecimiento y ecología de la dinámica
sucesional que ocurre en las diferentes etapas de la vegetación secundaria con el fin de
darle un adecuado manejo. Una herramienta válida para tal análisis es el estudio de
crecimiento de esta vegetación lo que permitirá plantear estrategias de manejo y
recuperación de los mismos (Villagra et al., 2002).
No se conoce la dinámica de crecimiento e incremento en altura y diámetro de las
especies propuestas para este estudio, lo cual es trascendente para realizar un mejor
manejo y aprovechamiento de las mismas. Por lo anterior, la caracterización y descripción
de los patrones de crecimiento e incremento de las especies propuestas proporcionará
información que facilitará la toma de decisiones para su aprovechamiento.
24
4 PREGUNTA DE INVESTIGACIÓN
¿De qué manera influye la etapa sucesional en el crecimiento diámetrico de las
siete especies de árboles tropicales presentes en la Península de Yucatán?
5 OBJETIVOS
5.1 Objetivo general
Desarrollar un modelo de crecimiento en diámetro para siete especies de árboles
tropicales en cuatro diferentes etapas sucesionales localizadas en la Península de
Yucatán.
6 HIPÓTESIS
No existen diferencias significativas en el crecimiento en diámetro entre ninguna de
las especies de árboles tropicales y la etapa sucesional no influye en la presencia y
crecimiento diamétrico de las siete especies.
Por lo menos existen diferencias significativas en el crecimiento en diámetro entre
dos o más especies y de acuerdo a la etapa sucesional se puede dar la presencia y
crecimiento diamétrico de estas especies.
25
7 ÁREA DE ESTUDIO
7.1 Caracterización general de los Ejido X- hazil y anexos y Laguna Om
7.1.1 Localización geográfica
W E YUCAT¡ N
S
2200000
2200000
E
CH
PE
M
CA
TABASCO
2000000
2000000
Sureste de MÈxico
E
LI C
Ejidos en estudio
Ejido X-hazil y Anexos
BE
1800000
Entidad
QUINTANA ROO
GUATEMALA
1600000
1600000
40 0 40 KilÛmetros
80 120 160 Kilometers
Fuente: Macario, 2003.
Figura 1. Ubicación de los ejidos X-Hazil y anexos y Laguna Om en el Estado de Quintana Roo.
26
El ejido Laguna Om, ubicado dentro del municipio de Othón P. Blanco, cuya
cabecera municipal se localiza en Nicolás Bravo. Este ejido colinda con los ejidos
Francisco Villa, Caobas, Nuevo Becar y el Cedral. Con población colonizadora
(básicamente por inmigrantes del interior del país), con mayor uso de la agricultura
mecanizada y con un crecimiento elevado a la ganadería. No obstante, ambos conservan
importantes recursos forestales (Figura 1).
27
cuyo espesor de 2 metros aproximadamente, cubre casi todas las rocas, del Terciario
(INEGI, 2002).
En el área del ejido X-hazil se presenta una formación cárstica causada por la
emersión lenta y desigual de los depósitos calcáreos, la alta permeabilidad y a la gran
disolución del material calcáreo, lo que finalmente ha dado como resultado la formación
de cenotes, cavernas, grutas sumideros (Robles R. 1958).
El ejido Laguna Om se ubica en la formación geológica de mayor antigüedad
denominada “Peten”, la cual pertenece al paleoceno-eoceno y se caracteriza por las
calizas masivas compactas macro y micro cristalinas, de color que va del amarillo al
blanco, en partes manchadas de color café por óxidos de fierro (Robles R. 1958, Escobar
N. 1986).
7.1.4 Relieve
El relieve es plano con algunas ondulaciones, similar a lo observado en la mayor
parte de la Península, que le confiere un micro relieve cárstico, y su altitud sobre el nivel
del mar que varía entre cinco y 15 m.
En el ejido X-hazil las elevaciones no rebasa los 15 metros, con un micro relieve
en el que se suceden altillos y bajos conformados por un mosaico de lomeríos con alturas
de tres a 10 metros y bajos intermedios (INEGI, 2003).
En Laguna Om el relieve es plano con un micro relieve ondulado, con amplias
depresiones que abrigan pequeñas llanuras, su altitud sobre el nivel del mar varía entre
100 y 150 m (Wright 1967, Escobar 1986).
7.1.5 Hidrología
El área del ejido X-hazil y anexos carece de escurrimientos superficiales, esto se
debe a la gran infiltración del material calizo altamente soluble (Robles 1958). Existen
zonas con acumulamiento de aguas superficiales denominados localmente como
lagunas, aguadas y cenotes, entre las que podemos mencionar: Noh dzonot, Maruch,
Xdomini y la Laguna Chi entre las más importantes (INEGI 1985b;; Macario M.1991).
28
En Laguna Om es similar, se carece de escurrimientos superficiales permanentes,
existen tres lagunas importantes: Laguna Chacambacab, Palmas y Barranco. Un arroyo
temporal llamado “Arroyo Ucum”, varios cuerpos de agua temporales llamados “aguadas”
y algunos cenotes.
7.1.6 Clima
El ejido X-hazil y anexos presenta un clima de tipo Aw(x’) i, cálido subhúmedo, con
lluvias en verano y parte de invierno según la clasificación de Köppen (García, 1987).
Los datos climatológicos que se tienen corresponden a la estación climatológica
más cercana (18 km) reporta 1 290 mm anuales de precipitación y temperatura media
Leptosoles, el material original puede ser cualquiera tanto rocas como materiales
no consolidados con menos del 10 % de tierra fina. Se encuentran en todas las zonas
climáticas y, particularmente, en áreas fuertemente erosionadas. El desarrollo del perfil
es de tipo AR o AC, muy rara vez aparece un incipiente horizonte B. Son suelos poco o
nada atractivos para cultivos;; presentan una potencialidad muy limitada para cultivos
arbóreos o para pastos. Lo mejor es mantenerlos bajo bosque.
Regosoles, se desarrollan sobre materiales no consolidados, alterados y de textura
29
fina. Son muy comunes en zonas áridas, en los trópicos secos y en las regiones
montañosas. El perfil es de tipo AC. La evolución del perfil es mínima como consecuencia
de su juventud, o de un lento proceso de formación por una prolongada sequedad.
Gleysoles, son suelos con mal drenaje, presentan agua en el perfil, en forma
permanente o semipermanente, con fluctuaciones de nivel freático en los primeros 5
decímetros;; los más abundantes son los Gleysoles húmicos y calcáricos. Se dan cuando
las condiciones del relieve favorecen el estancamiento del agua, son suelos con un
exceso de humedad y están ocupados por una vegetación higrófila.
La prolongada saturación de agua y la falta de oxígeno los hace poco aptos para
el desarrollo de raíces y el crecimiento de las plantas.
En el ejido de Laguna Om los suelos presentes son;; Vertisoles, Leptosoles y
Gleysoles.
Vertisoles, con alto contenido en arcillas (mayor que el 35%). Son profundos
abundantes grietas muy anchas (mayor de 1cm diámetro) y profundas (hasta al menos
50 cm.). A veces con micro relieve su perfil A-C.
Leptosoles, muy delgados (espesor menor a 30 cm), sobre una roca dura o capa
cementada, o material. Muy bajas evolución. Perfil A-R.
Gleysoles, con terrenos bajos inundables. Horizontes grises, verdosos o azulados.
Suelo con drenaje deficiente. Perfil A-B-C (ó R). (INEGI, 1985).
7.1.8 Vegetación
Los tipos de vegetación primaria que se desarrollan en el área del ejido X-hazil y
anexos, son la selva mediana subperennifolia, selva subcaducifolia (localmente conocida
como sakalche) y sabana de acuerdo a las observaciones reportadas por (Macario M.
1991). También se encuentran grandes extensiones de vegetación secundaria en
recuperación y terrenos en uso agropecuario.
En el ejido Laguna Om, se presenta la selva mediana subperennifolia, la cual está
dominada por las siguientes especies arbóreas: Cedro (Cedrelaodorata), Caoba
(Swieteniamacrophylla King.), Ramón (Brosimum alicastrum Swartz), Zapote (Manilkara
30
zapota L. Van Royen), Negrito (Simarouba glauca DC.). Este tipo de vegetación es la que
ha sido perturbada por el aprovechamiento selectivo y por la agricultura tradicional de
roza-tumba-quema.
También, se presentan selvas bajas, la cual está conformada por los siguientes
elementos: Catzin (Mimosa bahamensis Benth.), Boob (Coccoloba spicata Lundell), y
varios tipos de cocolobas. Por lo regular se inundan en la temporada de lluvias.
(Gutierréz,1983;; Olmsted y Durán 1983).
7.1.9 Fauna
La fauna reportada para ambos ejidos son los siguientes: tepezcuintle (Agouti
paca), sereque (Dasyprocta punctata), tejón (Nasua nasua), jabalí de labios blancos
(Tayassu pecari), jabalí de collar (Tayassu tajacu), temazate (Mazama americana),
venado cola blanca (Odocoileus virginianus), hocofaisán (Crax rubra), chachalaca (Ortalis
vetula), pavo de monte (Agriocharis ocellata) (Macario M. 1991;; Jorgenson, 1993).
7.1.10 Población
El ejido de X-hazil y anexos se encuentra conformado por tres comunidades, X-
hazil sur, Uh- May y Chanca Veracruz (Bello B. et al., 1997). La población es de 1 932
personas, de las cuales 1 859 fueron registrados como nativos y 73 como colonos (INEGI,
2001).
La población de las tres comunidades corresponde al grupo lingüístico maya
yucateco, sus antecedentes históricos lo ubica como indígenas mayas que participaron
en el conflicto denominado Guerra de Castas. El número de ejidatarios es de 395.
Cuenta con agua potable, electricidad, tienda CONASUPO, tiendas misceláneas y
molinos de nixtamal (Bello B. et al., 1997).
En el ejido Laguna Om, la población actual es de 3 650 personas, de las cuales 2
117 fueron registradas como nativos y 1 533 como colonos en su mayoría provenientes
de Veracruz, Tabasco, Yucatán, Campeche, Chiapas, Puebla y Michoacán (INEGI,
2001).
31
El ejido cuenta con los servicios de agua potable, alumbrado, teléfono, centro de
salud, transporte, educación de preprimaria, primaria, secundaria y bachillerato.
8 METODOLOGÍA
En el presente trabajo los sitios fueron instalados en 2001 formando parte del
trabajo “Efecto del cambio en el uso del suelo sobre la selva y estrategias para el manejo
sustentable de la vegetación secundaria en Quintana Roo” (Macario, 2003).
Se utilizaron imágenes provenientes del sensor MultiSpectral Scanner (MSS)
tomadas por la serie de satélites Landsat, que corresponden a tres décadas (1975,1984,
1990), se utilizaron para cuantificar y ubicar los diferentes usos del suelo y realizar la
clasificación por intervalos de edad de la vegetación secundaria, se realizó la
fotointerpretación de fotografía aérea monocromática en escala 1:75 000. Con lo cual se
clasifico la vegetación en las siguientes categorías de edad: acahual reciente (3-4 años),
acahual joven (8-10 años), acahual intermedio (13-15 años), acahual viejo (25-30 años)
y selva (mayor a 50 años) (Macario, 2003).
8.1 Caracterización de los sitios
En el ejido X-Hazil y anexos se tienen 15 sitios (3 por clase de edad), las edades
de la vegetación marcadas fueron acahual reciente (3-4 años), acahual joven (8-10 años),
acahual intermedio (13-15 años), acahual viejo (25-30 años) y selva (mayor a 50 años)
(Figura 2).
En el ejido Laguna Om se tienen también 15 sitios con las mismas clases de edad
que los anteriores (Figura 3).
32
Figura 2. Ubicación de los sitios de muestreo permanentes en el ejido
X-Hazil y anexos.
33
Para el presente trabajo se procedió a la localización física de los sitios de muetreo,
con el apoyo del GPS (global position system) ahora se tiene la localización precisa y el
establecimiento de los sitios de muestreo. Ya ubicados se procedió a marcar el sitio
colocando mojoneras (montículo de piedras) en el centro y pintándolas (Figura 4).
Figura 4. Colocación de la mojonera en el centro del sitio de muestreo.
Los sitios son de forma circular 500 m2 (12.60 m de radio) para el muestreo
(Figura 5), ya que esta forma reduce de manera significativa el efecto de borde.
34
Figura 5.Diagrama del sitio de muestreo, con la distribución espacial y áreas a muestrear, así como las
tallas de los individuos a registrar.
Fuente: Macario (2003).
Circulo grande = 500 m2, para registro de individuos >10 cm de dap.
Circulo chico = 100 m2, para registro de individuos entre 5 y 9.9 cm de dap.
I y II = 50 m2, para registro de individuos entre 1 y 4.9 cm de dap.
*dap (diametro a la altura del pecho correspondiente a 1.30 metros)
El seguimiento de los sitios es a nivel de individuo, es decir, cada árbol dentro de
ellas fue identificado con un número (Figura 6). A cada árbol se le determinó la especie,
se le midió el diámetro a la altura del pecho (dap) con cinta diamétrica o vernier
(individuos entre 1-5 cm de dap con vernier, individuos mayores a 5 cm de dap con cinta)
a la altura de 1.30 metros desde el suelo (Figura 7) y se pintó con aerosol rojo la
circunferencia, para que las mediciones posteriores sean en el mismo lugar (Figura 8);;
también se midió la altura de fuste limpio y total (m) (Figura 9).
35
36
Los sitios tuvieron áreas diferentes, de acuerdo con la densidad de las áreas donde
se ubicaron, así como en función del diámetro, altura y grado de desarrollo de la
vegetación secundaria. Para los individuos mayores a 10 cm de dap cuya densidad es
menor a la de los individuos con diámetro menor, se usó un área de 500 m2 .Para los
individuos con dap entre 5 y 9.9 cm, cuya densidad es mayor que la de los individuos con
dap mayor, un área de 100 m2 y para los individuos con dap entre 1 y 4.9 cm cuya
densidad es mayor que la de las dos categorías anteriores se utilizaron sitios con una
superficie de 50 m2.
Con los datos de crecimiento obtenidos (diámetro, fuste y altura), se procedió a
ingresarlos en la base de datos (excel). Las referencias utilizados para esta base son:
Número de individuo, ejido, número de sitio, edad, forma de vida, familia, genero,nombre
codificado, nombre cientifico, nombre común, diametros, altura total y fuste de los años
2001, 2006, 2011 y 2016 respectivamente. Se realizo una depuracion en la base de datos,
en la cual unicamente se trabajo con 7 especies que son: Bursera simaruba (L.) Sarg.
(Chaca rojo), Dendropanax arboreus (L.) Decne. & Planchon (Sakchaca), Metopium
brownei (Jacq.) Urban (Chechem negro), Lysiloma latisiliquum (L.) Benth. (Tzalam),
Manilkara sapota (L) Van Royen (Chicozapote, zapote), Vitex gaumeri Greenman
(Yaxnic), Swietenia macrophylla King. (Caoba). Y con datos únicos como edad, diámetro,
area basal y volumen para este último se tomaron en consideración los parámetros de la
tabla 4 que corresponden a las zonas estudiadas.
37
8.3 Modelo propuesto
38
9 RESULTADOS Y DISCUSIÓN
Diámetro
2
Ejido Especies Tendencia R Ecuación
1.752
Sm Potencial 0.65615 y=0.0236x
2
Mz Polinómica 0.01403 y=0.0018x -0.1158x+10.012
X-Hazil y Anexos Ll Polinómica 0.27503
2
y=-0.0115x +0.8817x+2.2735
0.8329
Mb Potencial 0.25569 y=0.4616x
0.8689
Da Potencial 0.01348 y=0.4398x
2
Vg Polinómica 0.05468 y=-0.0033x +0.2913x+8.7684
2
Bs Polinómica 0.34657 y=-0.0037x +0.4609x+1.2454
2
Sm Polinómica 0.9756 y=0.016x -1.416x+54.17
0.0028x
Mz Exponencial 0.00869 y=61.993e
2
Ll Polinómica 0.0532 y=-0.0089x +0.9206x+2.9141
0.474
Laguna Om Mb Potencial 0.06964 y=1.6772x
2
Da Polinómica 0.2948 y=0.005x +0.4453x+1.4295
2
Vg Polinómica 0.15351 y=-0.0102x +0.7919x+5.8008
0.4318
Bs Potencial 0.23862 y=3.2324x
40
Área basal
2
Ejido Especies Tendencia R Ecuación
3.5039
Sm Potencial 0.65615 y=4E-08x
2
Mz Polinómica 0.13850 y=4E-06x -0.0003x+0.0115
0.9382
Ll Potencial 0.26168 y=0.0009ex
1.6659
X-Hazil y Anexos Mb Potencial 0.25569 y=-2E-05x
1.7378
Da Potencial 0.31348 y=2E-05x
2
Vg Polinómica 0.08757 y=-2E-06 +0.0005x+0.0065
1.3869
Bs Potencial 0.34280 y=8E-05x
2
Sm Polinómica 0.97449 y=0.0021x -0.0015x+0.0425
0.0057x
Mz Exponencial 0.00869 y=0.3018e
2
Ll Polinómica 0.06407 y=-2E-05x +0.0028x-0.0215
3
Laguna Om Mb Polinómica 0.07132 y=-2E-06x +0.003x+0.0017
2
Da Polinómica 0.29613 y=-2E-05x +0.0001x-0.0012
2
Vg Polinómica 0.13281 y=-2E-05x +0.0021x-0.0032
0.8636
Bs Potencial 0.23862 y=0.0008x
Volumen
2
Ejido Especies Tendencia R Ecuación
4.4332
Sm Potencial 0.67229 y=7E-09x
2
Mz Polinómica 0.01672 y=2E-05x -0.0016x+0.059
1.275
Ll Potencial 0.33359 y=0.0016x
2.166
X-Hazil y Anexos Mb Potencial 0.26995 y=1E-05
2.1672
Da Potencial 0.31681 y=1E-05x
2
Vg Polinómica 0.10967 y=-2E05x +0.0029x+0.0281
1.864
Bs Potencial 0.35808 y=6E-05x
2
Sm Polinómica 0.97449 y=0.0021x -0.0115x+0.0425
2
Mz Polinómica 0.04569 y=0.003x -0.2941x+11.102
2
Ll Polinómica 0.09524 y=-0.0002x +0.0266x-0.3063
2
Laguna Om Mb Polinómica 0.09208 y=-5E-06x +0.0014x+0.005
2
Da Polinómica 0.3165 y=0.0002x +0.0002x+0.0061
2
Vg Polinómica 0.14864 y=-0.001x +0.0106x-0.0153
1.0842
Bs Potencial 0.28676 y=0.0024x
41
A continuación, se detallan en las gráficas su coeficiente R2 y su proximidad de ajuste.
Fig. 10. Gráficas de Swietenia macrophylla Fig. 11. Gráficas Metopium brownei
Fig.12. Gráficas de Dendropanax arboreus Fig.13. Gráficas de Bursera simaruba
42
Basándonos en la información que se presenta en las Figuras 10, 11, 12 y 13,
corresponden a un ajuste de los datos de un modelo potencial, podemos decir que es el
modelo que mejor se ajusta para estas especies tanto en su diámetro, área basal y
volumen.
Fig. 14. Gráficas de Swietenia macrophylla Fig.15 Gráficas de Manilkara zapota
43
Fig. 16. Graficas de Lysiloma latisiliquum Fig. 17. Graficas de Dendropanax arboreus
Fig. 18. Gráfica de Vitex gaumeri Fig. 19. Gráficas de Vitex gaumeri
44
En las gráficas de las Fig. 14, 15, 16,17,18 y 19, se obtuvo un modelo polinómico.
Fig.20. Gráficas de Manilkara zapota Fig.21. Gráficas de Lysiloma latisiliquum
Fig.22. Graficas de Metopium Brownei Fig.23. Gráficas de Bursera simaruba
45
Al gráficar los datos correspondientes a las Figuras 20,21,22 y 23, se observa que
no todas las relaciones presentan el mismo patrón de modelo, es decir la misma especie
presenta dos modelos diferentes, ya sea en su diámetro, en su area basal o en su
volumen.
Lo cual nos permite pensar que la base de datos no fue suficiente para detectar si
el número de árboles medidos influyo en el ajuste de un modelo en específico. (Scolforo
et al., 2008) menciona que la falta de datos a largo plazo en el bioma es un importante
impedimento para el desarrollo de los estudios de crecimiento y rendimiento.
El diámetro parece ser la única variable posible para los propósitos de modelado
en el escenario actual del bioma y no suponemos que esta variable se predice con
precisión (Nascimento, 2016). Más bien, sugerimos que el modelo de tasa de crecimiento
de diámetro sirve como línea de base para la identificación de especies de árboles nativos
potencialmente de rápido crecimiento.
Un aspecto adicional importante es la inclusión de una variable de densidad de
rodales en el modelo de tasa de crecimiento de dap (Bec et al., 2015).
10 CONCLUSIONES
46
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12 ANEXOS
Tabla 1.- Lista de especies encontradas en la vegetación del ejido Laguna Om.
3 Adelia barbinervis Schlecht.& Cham Desc.X árbol espinas (sin nombre) Euphorbiaceae
15 Cestrum nocturnum L. Akab xiw, palo huele de noche Solanaceae
57
26 Cosmocalyx spectabilis Standley Chacte kok, palo de rosa Rubiaceae
37 Dichapetalum donell-smithii Engler. Nich mash ak - Guaco ak Dichapetalaceae
58
56 Lonchocarpus punctatus H.B.& K. Balche Fabaceae
64 Morfotipo10 Desconocido Y
72 Morfotipo8 Desconocido
59
86 Piscidia piscipula (L.) Sarg Habin, jabin Fabaceae
87 Pisonia aculeata L. Chac beeb - una de gato Nyctaginaceae
100 Sabal yapa C. Wrisht ex Beccari Guano botan Arecaceae
106 Simira salvadorensis (Standl.) steyermark Chac kax, palo rojo Rubiaceae
109 Stizophyllum riparium (H.B. & K.) Sandwith Soj bach Bignoniaceae
60
115 Thevetia ahouai (L.) A. DC. Huevo de perro o gato Apocynaceae
120 Trichilia arborea C. DC. Chò ben ché, kán lool Meliaceae
123 Trophis racemosa (L.) Urban Ramon colorado, sak-ox, chac ox Moraceae
124 Tynanthus guatemalensis Donn. Smith Pimienta Ak o Café Ak Bignoniaceae
127 Vitis bourgaeana Planch Saya ak (bejuco de agua) Vitaceae
129 Zuelania guidonia (Swartz) Britt. & Millsp. Tamay, palo volador Flacourtiaceae
61
Tabla 2.- Lista de especies encontradas en la vegetación del ejido X-Hazil y Anexos.
62
28 Ceiba aesculifolia (H.B.&K.) Britton & Baker Piim, pochote, yax-che, ceiba Bombacaceae
29 Ceratophytum tetragonolobus (Jacq.) Sprague & Sandwith Bilin cox huele a chile Bignoniaceae
30 Cestrum nocturnum L. Akab xiw, palo huele de noche Solanaceae
33 Chrysophyllum mexicanum T.S. Brandegee ex Standley Caimito, chi' keej Sapotaceae
46 Dichapetalum donell-smithii Engler. Nich mash ak - Guaco ak Dichapetalaceae
63
58 Ficus maxima P. Miller. Sak a way Moraceae
64
88 Morfotipo13 Katalox ak
89 Morfotipo14 Kekeche
91 Morfotipo19 Sacchechen
101 Parathesis cubana (A. DC.) molinet& Gomez Maza Chamalche Myrsinaceae
107 Pisonia aculeata L. Chac beeb - una de gato Nyctaginaceae
108 Pithecellobium stevensonii (Standley) Standley & Steyerm. Chokche´, kakaw che´ Fabaceae
112 Pseudobombax ellipticum (H.B. & K.) Dugand Amapola, K'ujche Malvaceae
65
118 Russelia campechiana Standley Corrimiento ak Scrophulariaceae
119 Sabal yapa C. Wrisht ex Beccari Guano botan Arecaceae
121 Sapranthus campechianus (H. B. & K.) Standley Nich mash Annonaceae
128 Stizophyllum riparium (H.B. & K.) Sandwith Soj bach Bignoniaceae
136 Trichilia arborea C. DC. Chò ben ché, kán lool Meliaceae
138 Trophis racemosa (L.) Urban Ramon colorado, sak-ox, chac ox Moraceae
141 Vitis bourgaeana Planch Saya ak (bejuco de agua) Vitaceae
142 Zuelania guidonia (Swartz) Britt. & Millsp. Tamay, palo volador Flacourtiaceae
66
Tabla 3.- Listado con el número de especies y familias existentes por edad en los ejidos
de Laguna Om e X-Hazil y anexos.
2 (8-10 años) 36 72 30 68
3 (13-15 años) 33 64 34 77
4 (25-15 años) 31 64 33 86
67
Tabla 4.- Parámetros usados para el volumen de las especies de Laguna Om e X-Hazil
y Anexos.
Parámetros
Especies 𝒶0 𝒶1 𝒶2
Sm 0.000437 1.514627 0.777501
2301
Ll 0.000067 1.792358 0.985033
Laguna Om
Mb 0.000065 2.176957 0.583098
Zona
Mz 0.000069 2.100531 0.604244
2303
Mb 0.000041 2.208201 0.666952
68
69