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EL SEÑOR DE LAS BATALLAS “Jesús lo miró con

Llamada.
Seguirte no es fácil. Porque atraes, Jesús, atrae tu forma de
cariño y le dijo: --
pasar por el mundo, tu manera de mirar a la gente, tu actitud de
Es curioso cómo te llamamos de formas tan diferentes que, a veces, casi resulta -Una cosa te atender a todos. Es fascinante verte sanar, y verte amar a los menos
contradictorio. Eres el manso, nos hablas en lenguaje de bienaventuranza; eres el Dios del falta: anda, vende amables… y quiero seguirte. Pero, seamos sinceros, no es tan fácil
amor, el príncipe de la paz… pero al mismo tiempo nos pones en disposición de luchar, de cuanto tienes y poner los pies en tus zapatos. No es tan fácil amar así, sin
afrontar la tormenta y pelear por lo que merece la pena. Sé tú, Señor, nuestra fortaleza. dáselo a los condiciones. No es tan fácil vivir esa generosidad y apertura radical,
pobres y tendrás cuando tantas veces me encuentro pensando en mí mismo, mis
“En aquel tiempo dijo Jesús: No penséis que he venido a traer paz a la tierra. No un tesoro en el problemas, mis urgencias, mis gustos… Hasta que otra vez llega tu
vine a traer paz, sino espada. Vine a enemistar a un hombre con su padre, a la cielo; después voz y me dice: “Sal de ti mismo”.
hija con su madre, a la nuera con su suegra; y así el hombre tendrá por enemigos sígueme” (Mc
“Quien no carga con su cruz
a los de su propia casa. Quien ame a su padre o a su madre más que a mí no es 10,21)
y me sigue no puede ser mi
digno de mí; quien ame a su hijo o a su hija más que a mí no es digno de mí. Armas.
discípulo” (Lc 14,27)
Quien no tome su cruz para seguirme no es digno de mí. Quien se aferre a la vida ¿Qué armas habré de llevar para la batalla? ¿Las
manos vacías? ¿El corazón en carne viva? ¿Una toalla ceñida
la perderá, quien la pierda por mí la conservará”. (Mt 10,34-39
a la cintura? ¿Un traje de compasión? ¿la cruz? Asusta. Uno
se siente un poco desnudo así. Y
por eso la tentación es
bllindarme un poco, para que el
mundo no me invada. Poner
contraseñas que me permitan
EN PIE DE GUERRA. reservar algunas partes de mi
vida. Negociar con mi tiempo.
Entre luchar a tu lado, Buscar un equilibrio conveniente.
u holgar sin ti, elijo la guerra. Pero tus palabras me hablan de
Habrá jornadas ásperas, radicalidad, de darlo todo, de
nostalgias huecas y vivir a fondo y no conformarme
con un horizonte mediocre. Hablas, y me dices que menos que todo es poco.
ceños fruncidos,
Batallas.
pero aún así...
El campo de batalla es la vida misma. Y tiene muchas
…prefiero batallar, “Si un rey va a trabar batalla
expresiones, muchos frentes, infinidad de momentos en
contigo por compañero, con otro, ¿no se sienta los que toma cuerpo esa lucha. Es lucha interior y
a tu ausencia confortable primero a deliberar si podrá exterior: por conseguir silencio en medio del ruido; por
TE ALABO resistir con diez mil al que encontrar palabra cuando falta el sentido; por abrirme al
Aun en la tormenta, Pelearemos, amigo, viene a atacarlo con veinte prójimo, siempre; por volver fecundo el tiempo, y que
aun cuando arrecia el mar, hasta que tu bandera mil?” (Lc 14, 31) dé buenos frutos; por aprender a perdonar; por
te alabo, te alabo en verdad. sea estandarte de muchos; renunciar al egoísmo en el amor. A veces tendré más
hasta que tu palabra fuerzas, y otras menos. En ocasiones, casi siempre,
Aun lejos de los míos, sea credo común, necesitaré apoyarme en otros, y juntos pelearemos para que sea tu luz la que el mundo vea. Tú
y tu gesto dibuje me invitas a no rendirme, a pelear, a tu manera, contigo.
aun en mi soledad,
te alabo, te alabo en verdad. en todo horizonte
el amor posible. Victoria.
Algunos días me revolveré Contigo ganar y perder es diferente. No eres
Pues sólo a Ti te tengo, (Señor) “lo defendió de sus enemigos y
contra ti, contra el mundo, un triunfador a la moda. No te celebra la gente bailando
pues Tú eres mi heredad. lo puso a salvo de asechanzas,
en una fuente, o encendiéndote luces en conciertos
Te alabo, te alabo en verdad. (2) contra mi temeridad de hoy. le dio la victoria en la dura
multitudinarios. Tú ganas cada vez que alguna herida
Pero no me creas batalla, para que supiera que la
empieza a sanar. Cada vez que un hombre herido se
Aun en la tormenta, si entonces me desdigo levanta y decide seguir luchando. Cada vez que hay piedad es más fuerte que
aun cuando arrecia el mar, de lo que ahora prometo. destellos del amor más generoso en nuestro mundo. nada.” (Sab 10,12)
te alabo, te alabo en verdad. Cada vez que alguien descubre que es capaz de luchar,
No sé si tu fuego a tu manera. Y, aunque no siempre sea fácil, Señor, aquí
Aun sin muchas palabras me vuelve loco me tienes. Para seguir, en la brega, contigo. Cada día.
aunque no sé alabar o me hace cuerdo.
te alabo, te alabo en verdad. Pero sé, sin lugar a dudas, SÓLO EL AMOR, SÓLO EL AMOR,
que mi guerra ALUMBRA LO QUE PERDURA ENGENDRA LA MARAVILLA,
Pues sólo a Ti te tengo, (Señor) es tu evangelio. SÓLO EL AMOR, SÓLO EL AMOR,
pues Tú eres mi heredad. CONVIERTE EN MILAGRO EL BARRO (bis) CONSIGUE ENCENDER LO MUERTO (bis)
Te alabo, te alabo en verdad. (2)

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