Las neuronas gonadales son células nerviosas especializadas que se encuentran en las

gónadas, es decir, en los órganos reproductores masculinos y femeninos. Estas hormonas

desempeñan un papel fundamental en el desarrollo sexual, la reproducción y el
funcionamiento de los órganos sexuales.

Testosterona:

Produce: Testículos (en los hombres) y en menor cantidad en los ovarios (en las mujeres).

Funciones:

Desarrollo de características sexuales secundarias masculinas, como la voz profunda y el vello

facial.

Estimula la producción de esperma.

Regula el deseo sexual (libido) en ambos sexos.

Participa en el mantenimiento de la masa muscular y la densidad ósea.

Estrógenos:

Produce: Ovarios (en las mujeres) y en menor cantidad en los testículos (en los hombres).

Funciones:

Desarrollo de características sexuales secundarias femeninas, como el crecimiento de las

mamas y la redistribución de la grasa corporal.

Regula el ciclo menstrual en las mujeres.

Contribuye a la salud ósea.

Tiene efectos sobre el estado de ánimo y la cognición.

Progesterona:

Produce: Ovarios (principalmente en el cuerpo lúteo durante el ciclo menstrual) y en menor

cantidad en las glándulas suprarrenales.

Funciones:
Prepara el útero para la implantación del óvulo fertilizado.

Regula el ciclo menstrual y mantiene el embarazo.

Puede tener efectos sobre el estado de ánimo y el comportamiento.

LH (Hormona Luteinizante):

Produce: Hipófisis (glándula en el cerebro).

Funciones:

Estimula la producción de testosterona en los testículos (en hombres) y la ovulación en los

ovarios (en mujeres).

FSH (Hormona Folículo Estimulante):

Produce: Hipófisis.

Funciones:

Estimula el desarrollo de los folículos ováricos en las mujeres y la producción de

espermatozoides en los hombres.

Estas hormonas gonadales trabajan en conjunto para regular el sistema reproductivo y

mantener el equilibrio hormonal en el cuerpo. El funcionamiento adecuado de estas hormonas
es esencial para la fertilidad y la salud sexual en general.