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Índice de

Contenido
01 BIiografía del autor

02 Resumen

03 Trabajo literario
BIOGRAFÍA DEL AUTOR
Manuel Rivas es un escritor y periodista gallego nacido en A Coruña en 1957.
Se ha destacado por su compromiso con la cultura y la lengua gallega, así
como por sus obras literarias que han sido reconocidas con varios premios y
reconocimientos.

Rivas comenzó su carrera periodística en los años setenta, escribiendo para


diversos medios, y en los ochenta fundó el periódico cultural "Luzes". En 1983
publicó su primer libro, "Un millón de vacas", una colección de cuentos que
fue muy bien recibida. Entre sus obras más destacadas se encuentran "La
lengua de las mariposas" y "¿Qué me quieres, amor?", ambas adaptadas al
cine. Ha recibido varios premios y reconocimientos a lo largo de su carrera,
incluyendo el Premio Nacional de Narrativa en España en 1996 y el Premio
Nacional de la Crítica en Galicia en 2012.
RESUMEN
En un club de alterne trabajaban Herbal, el ex guardia que había sido la sombra del
doctor Da Barca durante un largo periodo de su vida, María de Vistacao, una joven que
era nueva en ese ambiente (la habían comprado) y Marisa, la mujer que Herbal conoció
gracias a un compañero de la cárcel. Una mañana, María vio cómo Herbal estaba
dibujando cruces con un lápiz de carpintero en las esquelas de la familia Da Barca, y
Herbal comenzó a contar todo lo vivido con esa gente. Primero de todo, Herbal tuvo que
matar a un pintor porque su tío no se atrevía a hacerlo y guardó el lápiz que poseía la
víctima como recuerdo. Este pintor y su lápiz le acompañarían hasta el día de su muerte,
manifestándose como una voz detrás de la oreja. Por órdenes del sargento Landesa, el
guardia escribió todo lo que sabía sobre Da Barca, lo que no le supuso ningún problema
porque siempre había estado detrás de él. Al final consiguieron cogerle delante de su
casa. En la cárcel de A Falcona (Galicia) se contaban historias entre los presos, uno de
ellos, Maroño, contó la que se convertiría en el motivo de la muerte de Herbal, la historia
de Muerte y Vida. A Herbal siempre le había caído mal Da Barca, le tenía mucha envidia, y
el motivo principal era Marisa Mallo, la mujer del doctor. Herbal había estado enamorado
de esa mujer desde pequeño. Da Barca intentó fugarse de la cárcel con la ayuda de
Marisa, pero Herbal lo estropeó todo. Además, el guardia le apuntó en la lista de los
presos que iban a ser trasladados a una cárcel de Coruña. Herbal le dijo al sargento que él
también quería trabajar en esa cárcel y el superior aceptó porque tenían una buena
relación y además la hermana del guardia vivía en Coruña con su marido maltratador. En
esa prisión cada cierto tiempo algunos presos solían ser fusilados en el campo de Rata. La
voz del pintor le dijo a Herbal que se apuntase como voluntario en el fusilamiento para
matar a Da Barca. Todo parecía haber salido bien, pero el doctor no murió, la bala le
había traspasado el cuello limpiamente y sobrevivió. Cuando se curó lo condenaron a
muerte por ser todo lo que estaba mal visto en esa época, revolucionario,
independentista… pero la campaña internacional lo defendió y consiguieron que la
sentencia fuera de cadena perpetua. Por las mañanas, Herbal comenzó a escuchar otra
voz, pero no tenía nada que ver con el pintor, era el Hombre de Hierro. Este no se
preocupaba por él y solo le decía qué tenía que hacer. El guardia tuvo un sueño en el que
le visitó Muerte, la chica del cuento que contó Maroño, pero no le paso nada porque
tenía el lápiz. Herbal puso un par de denuncias sobre Da Barca y consiguió que lo
castigarán.
Además, lo ascendieron y cada vez iba comportándose con más crueldad por culpa del
Hombre de Hierro. Marisa fue a visitar a su abuelo Benito Mallo, un hombre que había
ganado mucho dinero a través del contrabando. La nieta le pidió que consiguiera un
indulto para Da Barca, pero él le respondió que ese hombre le caía muy mal. Sin
embargo, le dijo en que estación se encontraría el doctor el día siguiente. Viajó hasta
Coruña y lo encontró en la cola para entrar en un tren, rodeado de enfermos. En el viaje
murieron tres tuberculosos y tuvieron que ir a un hospital. A los pocos días de que
Marisa y Da Barca se casaran por poderes, un inspector se llevó al doctor a comisaría y lo
trajeron de vuelta a los tres días con señales de maltrato. Resulta que habían descubierto
que mandaba cartas a una organización clandestina. Finalmente, lo trasladaron de vuelta
a otra cárcel de Galicia. Se despidió de todos los presos enfermos y se encontró con
Marisa en la estación. Después estuvo hablando con el sargento y este decidió sobornar
a Herbal y hacer que la pareja disfrutase de una noche en un hotel. Por último, Herbal le
contó a María que mató al marido de su hermana con tres tiros y lo metieron en la cárcel
y terminó la conversación diciendo que el doctor Da Barca y Marisa eran lo mejor que le
había pasado en la vida. El pintor le dijo que le regalara el lápiz a María, y eso fue lo que
hizo. Después, salió un rato fuera y vio cómo Muerte se le acercaba, pero esta vez no se
podía defender porque no tenía el lápiz.
TRABAJO DE CRATIVIDAD LITERARIA;
CARTA AL AUTOR DEL LIBRO
28 de Abril 2023
Estimado Manuel Rivas:

Me pongo en contacto con usted para hablarle sobre una de las novelas más conocidas
que ha escrito, “El Lapiz del Carpintero”. Por lo tanto, sabiendo de antemano que mi
conocimiento literario es nulo comparado con el de usted, deseo dejar claro que el
único propósito de la siguiente carta es darle mi humilde y sincera opinión sobre el
libro. Sin ánimo de ofender, lo he leído para realizar un trabajo del instituto, así que
podrá ver qué opinan las generaciones más jóvenes sobre su forma de escribir.

Primero de todo, está claro que este trabajo es una obra maestra literaria, no hace falta
que la escriba yo para que lo sepa, pero es verdad que más de una vez he tenido que
hacer uso de internet para no perderme en los acontecimientos, dado que las
explicaciones que se dan durante los capítulos son las justas. Por ejemplo, me supuso
mucho tiempo y esfuerzo darme cuenta de que el famoso lápiz del carpintero que se
posaba en la oreja de Herbal era la voz del preso que él mismo había asesinado
previamente. Y cuando lo descubrí, se me abrió un mundo, no lo sabe usted bien.

Por otro lado, me parece inaceptable que no se le dé más importancia al gran Gengis
Khan, porque a todos los lectores, a los de mi curso por lo menos, nos ha parecido uno
de los personajes más interesantes. La parte en la que le dió al Doctor Da Barca unas
castañas y una cartera que claramente había robado en esa misma estación es
fascinante. Este es un ejemplo de la cantidad de actos que le hacen ser tan entrañable.
También es muy gracioso el capítulo en el que Da Barca y él están comiendo la comida
de la prisión, pero Gengis, al estar hipnotizado, cree que la comida que tiene delante es
un manjar, y cómo no, vuelve a la realidad por consecuencia de un eructo.

Por todo lo expuesto, confío en que le dedique un par de minutos de su vida a leer esta
carta, y si ha llegado hasta aquí, estoy seguro de que tiene una sonrisa que le sobresale
de la cara, pero no tiene porqué agradecermelo, me basta con poder disfrutar de su
talento de ahora en adelante. Para terminar, reciba mis más sinceras felicitaciones por
su trabajo.

Un cordial saludo.
Ander Elordi

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