¿De qué forma incidiría nuestra forma de manejar nuestra propia identidad digital

en la manera que proyectamos nuestra personalidad y mostramos nuestra forma

de ser, frente a los demás, en los medios digitales?

Primero que nada, definiremos como identidad digital a la suma de toda

la información relativa a un individuo en la red. Esto es, sus datos personales,
imágenes, registros, noticias, comentarios, blogs, y en definitiva todo aquello que
conforma una descripción de una persona en el plano digital. Y Donde se produce
más actividad es en las redes sociales que nos permite podernos comunicar tanto
con nuestros seres queridos y también conocer personas que tengan rasgos
comunes al nuestro, en estas redes sociales podremos describir o mostrar
nuestros rasgos físicos y psicológicos.
Dicho esto, nuestra identidad digital incidiría de la forma en que nuestros
seguidores nos conocen en el mundo digital, es por esto que es importante darle
un buen uso, ser respetuoso, compartir contenido de calidad, no hacer
comentarios ofensivos o insultantes, es importante tener una reputación digital que
refleje nuestros valores y objetivos que nos
representen en el mundo virtual ya que como sabemos es nuestro curriculum vitae
digital.
Por lo que debemos tener en claro es que hay que tratar de demostrar la misma
imagen tanto digital como real. La información que se publica las redes no siempre
puede ser 100% real; sin embargo, todo lo que se haga o diga digitalmente, tiene
consecuencias en el mundo real (y viceversa).
Un dato importante para tener en consideración a la hora de construirnos una
identidad digital y nos queremos enfrentarnos en el mundo laboral: Es que
Según estudio realizado por Adecco (consultora de reclutamiento de
personal): * 86% de los profesionales de recursos humanos miran perfiles de
los candidatos en sus redes sociales. * 33% aseguró haber rechazado a un
candidato por algún tipo de publicación en redes sociales (Facebook, IG,
LinkedIn, blogs, etc.).