Menores en la red – Bruno Guerra Heras.

Todos estos documentales hablan desde los peligros que existen desde el primer momento en el que
te conectas a internet hasta problemas reales que ocurren cada día, como el sexting, grooming,
cyberbullying, etc...

Lo que yo consigo observar es que el documental te lo plantea desde un extremo muy físico.
Pretende asustarte, que es lo que debería hacer, pero te asusta dándote a entender de que le va a
pasar algo a tu integridad física, cuando, en la gran mayoría de casos, pueden hacerte mucho más
daño sin tan siquiera verte o conocerte. He visto la vida de gente ser arruinada simplemente por
pequeñas peleas, de mil maneras diferentes. Algunas de esas formas incluyen: plantar pornografía
infantil en el ordenador de otra persona para después denunciarlo, enlistar en servicios militares,
publicar información confidencial (como cuentas de banco, dni, número de la seguridad social),
robar completamente su identidad para cometer crímenes bajo ella, entre otras...

Nunca suelo tener dudas con este aspecto, ya que siempre suelo ver todos estos casos bastante
transparentes, a mi punto de ver, pero nunca me he dejado de cuestionar si una persona que le
arruina la vida por internet a alguien siente lo mismo que una persona que lo hace en persona, o si
una persona que le arruina la vida a alguien siente el mismo remordimiento si lo hace por internet
que en persona. La respuesta que he sacado a esta pregunta es que no se siente lo mismo en
absoluto, ya que tú no conoces a la otra persona, simplemente sabes quien es. No puedes
interactuar con ella más que a través de una pantalla, entonces eso corta muchos sentimientos. A lo
mejor, solo una persona que sea una sociópata se ve capaz de arruinar la vida a alguien cara a cara,
cuando en internet, la gran mayoría de gente sin dos dedos de frente se atrevería. Es un buen tema
a debatir, en mi opinión.

En conclusión, el internet es lo mejor que le pudo pasar a la tecnología, pero al mismo tiempo, tuvo
y tiene sus consecuencias. El internet es libre, significando que eres libre de hacer o decir lo que
quieras, pero que seas libre no significa que no tengas una serie de normas que seguir, con normas
refiriéndome a la ley. El internet debe estrechar mucho sus leyes, ya que avanza cada día más, y
avanza a peor, en la gran mayoría de casos. Es triste pensar en tanto daño que puede causar una
persona con las herramientas equivocadas. Saber lo que es capaz de hacer alguien por 10 míseros
euros en internet es defraudante.