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INFORME GEOTECNICO

PROYECTO CONSTRUCCION PRESA Y


SISTEMA DE RIEGO PAPA CHACRA

DEPARTAMENTO DE CHUQUISACA

SUCRE, MARZO DE 2023


Sismicidad
Análisis Sísmico

La actividad sísmica en Bolivia tiene un amplio desarrollo cuyo origen está relacionado
con la subducción de la placa de Nazca, las condiciones tectónicas regionales y locales
de los suelos que determinan la aceleración y la severidad del movimiento, que a su vez
tienen una notable influencia sobre las estructuras.

Bolivia se encuentra enclavada en las proximidades del denominado Cinturón de fuego


del Pacífico, por lo que la principal causa de los mayores sismos en Bolivia son generados
por la subducción de la placa de Nazca por debajo de la placa Sudamericana. (Figura 1).

Figura 1 Los Andes Centrales (5ºS – 35ºS) y su segmento central (15ºS y 28ºS)

El movimiento de la placa de Nazca es de aproximadamente 3,1 cm por año (Figura 2), lo


que genera un almacenamiento permanente de energía deformacional en la corteza
continental y litosfera que es liberada súbitamente cuando la capacidad de deformación
de la corteza y litosfera se agota, produciéndose sismos de manera constante y continua.
En la figura 2 las unidades morfoestructurales están representadas por colores distintos y
los triángulos rojos representan los volcanes del arco volcánico Holoceno. En esta figura
también son mostrados los vectores de velocidad absoluta de cada placa.
Figura 2 Los Andes Centrales. Desplazamiento de la placa de Nazca

Una segunda causa de generación de sismos es la presencia de fallas geológicas activas.


Estos sismos locales son por lo general de menor magnitud, pero al generarse muy cerca
de la superficie, alcanzan un gran poder destructor. Eventualmente se alcanza
magnitudes mayores a los 5 grados (de foco superficial) y en casos excepcionales los
terremotos son de gran intensidad (por ejemplo, el de Aiquile en 1998), los que ocurren
por reacomodamiento de bloques (con foco de profundidad intermedia) o bien por
deslizamiento de masas rocosas, como el terremoto de Consata−Mapiri en 1947. Un caso
excepcional de terremoto de gran magnitud fue el que ocurrió entre las provincias Iturralde
(La Paz)−Ballivián (Beni), a unos 300 km al norte de La Paz a las 20:00 horas del 8 de
junio de 1994 donde se registró un sismo a gran profundidad (636 km) con una magnitud
de 8.6 grados lo que resultó de una baja intensidad en superficie.

Según Vega (1996), los focos sísmicos por debajo del altiplano se encuentran entre los 70
– 300 km de profundidad (sismos de profundidad intermedia); focos sísmicos muy
profundos se originan en el extremo de la placa que se hunde a más de 300 km de
profundidad, por debajo del sur del departamento de Santa Cruz y norte de Argentina.
Tanto los focos sísmicos de profundidad intermedia como los profundos sólo son sentidos
en la superficie cuando las magnitudes de estos alcanzan valores extremos.

La sismicidad en Bolivia es registrada por el Observatorio San Calixto, llegando a registrar


un número promedio de aproximadamente 1000 sismos por año, lo cual es una buena
medida de la intensa actividad sísmica del país. Afortunadamente la gran mayoría de esos
movimientos son leves y casi imperceptibles, lo cual no significa que en cualquier instante
se produzcan sismos de gran magnitud.

Los datos de registros disponibles por el Observatorio de San Calixto corresponden con
aquellos eventos con una magnitud ≥ 3. Bolivia está definida como un territorio de
sismicidad intermedia, que está confirmada por las estimaciones de las observaciones
geológico−estructurales, y por mediciones con redes de GPS mostradas en la Figura 3.
Los desplazamientos anuales se vienen midiendo desde el año 1.993.

Figura 3 Los Campos de velocidad cortical para los Andes Centrales al norte de 23ºS.

La distribución espacial de los sismos está asociada a la placa tectónica de Nazca, que se
inicia en la dorsal Pacífica, y que se subduce debajo de la placa Sudaméricana alcanzado
una profundidad de 700 km en el manto superior. La parte de la placa de Nazca que
afecta Bolivia se subduce con un ángulo aproximado de 30º. La placa continental
Sudamericana en Bolivia tiene una corteza de 75 km de espesor, debajo del Altiplano y de
la Cordillera Oriental.

De acuerdo a las características mencionadas, la sismicidad de Bolivia se divide en tres


fuentes sismogénicas y de acuerdo a determinadas particularidades, en subfuentes.
Los sismos de corteza (Figura 4), presentan dos sub fuentes que corresponden a sismos
de profundidades menores a 5 km y de 5 a 75 km de profundidad, distribuidos en los
nueve departamentos, con mayor concentración en la parte central de Bolivia.

Los sismos generados por el proceso de subducción ocurren a profundidades entre 100
km a 350 km denominados sismos intermedios y están distribuidos en los departamentos
de Oruro, Potosí, sector suroeste de La Paz y con menor frecuencia al Oeste de los
departamentos de Cochabamba, Chuquisaca y Tarija. Una segunda sub fuente
correspondería a sismos profundos ocurridos entre 500 km a 700 km en los
departamentos de Beni, La Paz (Norte), Santa Cruz y Tarija.

Las fuentes lejanas corresponden a sismos ocurridos a profundidades entre 20 km y 50


km asociados al contacto entre las placas de Nazca y Sudamérica de las costas de Chile
y Perú. La segunda sub fuente corresponde a sismos de subducción de la placa de Nazca
a profundidades de 75 km a 100 km (Figura 5).
Figura 4 Fuentes sismo-génicas de Bolivia definidas de acuerdo a su origen (Lamb et al., 1998)

Según Brooks et al (2011), la subducción de la placa de Nazca por debajo de América del
Sur ha impulsado el crecimiento de las montañas de los Andes. La subducción ha
generado de manera rutinaria grandes terremotos de magnitud superior a 8,0 a lo largo
del margen occidental de la cadena montañosa, pero el tamaño potencial de terremotos
menos frecuentes en el margen oriental, trasarco, es desconocido. El apoyo continuo del
altiplano en el centro de los Andes sólo puede explicarse si la deformación del margen
trasarco está en curso. La velocidad del movimiento en la superficie disminuye
bruscamente de oeste a este a través de los montes subandinos, tal como se muestra con
puntos rojos en la Figura 10.

Interpretando las mediciones de desplazamiento realizadas con GPS Brooks sugiere que
a partir de la geoterma 300 grados Celsius (línea blanca en la figura 5) se generan serie
de fracturas y una falla subhorizontal que subyace en las cordilleras se desliza libremente
en profundidad en el oeste, pero que está bloqueada en el este en los últimos 100 km en
secciones menos profundas. El análisis de los escarpes de falla formados cuando la falla
subhorizontal intercepta la superficie indica que la falla ha generado grandes terremotos
repetidos. Indican que la ruptura de toda la sección bloqueada de la falla podría generar
un terremoto de magnitud 8.7 a 8.9, atribuyéndole un gran potencial sísmico inusual a la
zona subandina.
Figura 5 Perfil topográfico de los Andes centrales. Brooks et al. (2011)

Ámbito Sísmico de Bolivia

En Bolivia la actividad sísmica habitual es de foco superficial, hasta 70 km de profundidad,


y se concentra en la región central del país, entre los departamentos de Cochabamba,
Chuquisaca y Santa Cruz. Otros focos de actividad sísmica superficial se ubican en el
norte del departamento de La Paz, al sur del departamento de Tarija, en las proximidades
de Yacuiba, y en regiones al oeste del departamento de Oruro y en la frontera con Chile.

La historia sísmica de Bolivia empieza en el año 1581, cuando un terremoto se siente en


la Villa Imperial de Potosí; entre los años 1662 y 1851 cinco terremotos fueron sentidos en
la Villa Imperial y en poblaciones cercanas (Vega, 1996).

Siempre los focos de actividad sísmica superficial son los que causan más daños. El
sismo de Sipe Sipe, al oeste de Cochabamba en julio de 1909, causo 15 muertos. El
sismo de marzo de 1948 en la ciudad de Sucre causo 3 muertos y varios heridos.

Datos históricos de sismicidad

En base a un registro de la sismicidad en Bolivia, según el Observatorio Sismológico de


San Calixto (OSC), los eventos sísmicos más importantes se presentan en la 1

Tabla 1: Sismos y Terremotos históricos en Bolivia


DÍ MAGNITUD INTENSIDAD
AÑO MES (MM)
OBSERVACIONES
A (Mb)
Destrucción en la capital del Alto Perú (hoy
1650 11 10 6,4 VIII
Sucre)
Daños en la ciudad de Potosí y pueblos
1662 2 23 5,8 VII
cercanos
En la ciudad de Potosí objetos fueron lanzados
1720 9 7 5,2 VI
al suelo
1743 9 2 5,2 VI Pánico en la ciudad de Potosí
Sentido en Santa Cruz y daños en casas de
1845 1 14 5,2 VI
adobe
1851 7 5 5,8 VII Daños en la ciudad de Potosí
Daños en Villa San Antonio (hoy Villa Tunari)
1871 2 23 5,2 VI
Cochabamba
1884 11 26 5,2 VI Destrozos en Tarabuco, Sucre
1887 9 23 6,4 VII Destrucción en Yacuiba
Daños en Consata y sentido en la ciudad de
1891 8 15 5,8 VII
La Paz
Cerca de Yacuiba muchas casas de adobe
1899 3 23 6,4 VIII
destruidas
1909 5 27 6,3 VI Sentido en Tupiza y Tarija
1909 7 23 5,8 VII En Sipe Sipe, destrucción, muertos y heridos
1923 9 2 6,2 VI Sentido fuerte en Mapiri, Consata
1925 10 25 5,2 VI En Aiquile daños ligeros en casas de adobe
DÍ MAGNITUD INTENSIDAD
AÑO MES (MM)
OBSERVACIONES
A (Mb)
1929 2 19 5,3 IV Fuerte en Warnes (Santa Cruz)
Sentido fuerte en Colquechaca (Potosí) varias
1932 12 25 5,3 VI
réplicas
1937 11 3 5,3 VI Sentido fuerte en Consata
En la ciudad de Cochabamba se sintió
1942 12 25 5,6 VI
fuertemente
Muy fuerte en la ciudad de Cochabamba
1943 2 18 5,8 VI
(destrucción)
Consata destruida, sentido fuertemente en La
1947 2 24 6,4 VIII
Paz
1948 3 28 6,1 VII Destrucción en Sucre, muertos y heridos
Fue sentido en la ciudad de Florida (Santa
1949 11 7 5 V
Cruz)
Fuerte en Consata, sentido en la ciudad de La
1956 8 23 5,8 VI
Paz
En Postervalle varias casas de adobe
1957 8 26 5,9 VII
destruidas
1958 1 6 5,2 VI Pasorapa, casas de adobe sufrieron daños
1958 9 1 5,9 VII Destrozos en Aiquile
1970 3 6 4,5 VI Dos muertos en Ajtara, Potosí
Sentido en la ciudad de Cochabamaba, ligeros
1972 5 12 5 VI
daños
Sentido en las cercanías de Aiquile, ligeros
1976 2 22 5,2 VI
daños
Sentido en Arque y ligeros daños en casas de
1976 6 30 4,7 V
adobe
1981 7 23 5 VI Sentido en Ivirgarzama, daños estructurales
Sentido fuerte en la ciudad de Oruro, ligeros
1982 8 23 4,4 V
daños
Causó alarma en Huañacoma y Caripuyo
1983 5 19 4,3 V
(Potosí)
Sentido en Sabaya (Oruro) daños en casas de
1984 6 27 4,6 V
adobe
1985 3 19 5,4 VI Derrumbes en Monteagudo
1986 5 9 5,6 VI Sentido fuerte en Villa Tunari
Sentido fuerte en Villa Tunari, Chimore y
1986 6 19 5,4 V
Puerto Villarroel
1987 8 22 4,8 V En Santa Cruz ligeros daños
1991 12 21 5 V En Bermejo casas de adobe agrietadas
1994 6 9 8 VI Sismo profundo, sentido en toda Bolivia
1995 11 6 5,2 V En Comujo (Oruro) daños en casas de adobe
Destrozos y muertos en Aiquile, Mizque y
1998 5 22 6,6 VIII
Totora
Sentido fuerte en La Paz, con ligeros daños
2001 6 23 6,9 V
materiales
Sentido en casi toda Bolivia, no se reportan
2001 7 4 6,2 IV
daños
Sentido y con leves daños en Pisagua y
2001 7 24 5,5 V
Coipasa
2002 2 23 4,5 V Sentido en Jorochito, Santa Cruz
2002 10 24 6,1 V Sentido y con daños en Alto Milluni, Zongo
2004 1 21 3,6 III Sentido en Zongo
DÍ MAGNITUD INTENSIDAD
AÑO MES (MM)
OBSERVACIONES
A (Mb)
2004 3 17 4,9 III Sentido en Sucre
2004 3 22 5,8 III Sentido en Tarija
2004 7 17 4,5 III Sentido en Sucre
2004 8 3 4 V Daños en Rivera Santa Cruz

Amenaza Sísmica en Bolivia

Para una mejor evaluación del fenómeno, el OSC (Observatorio San Calixto) creó un
mapa de amenazas sísmicas en las que se evidencian seis zonas: la primera, en el
departamento de La Paz, la segunda en la parte central de Oruro, la tercera en el oeste
de Potosí; el norte de Cochabamba y el sur de Beni ocupan la cuarta zona, la quinta está
en el sur de Cochabamba, Chuquisaca y el oeste de Tarija, y la zona seis en el centro y
oeste de Santa Cruz.

Las áreas han sido identificadas de acuerdo con el comportamiento de los suelos y su
dinámica, también se tomó en cuenta la recurrencia de sismos. La zona seis es la más
propensa a presentar el fenómeno por las fallas geológicas que la caracterizan y por el
hecho de que hace bastante tiempo que no ha sufrido un sismo de alta magnitud ( Figura
).
Figura 5 Mapa de las 6 zonas sísmicas de Bolivia

Con los datos precedentes y las estaciones de control puestas en marcha el decenio
pasado, el OSC ha elaborado un mapa donde se pueden observar la amenaza sísmica en
Bolivia, que contiene la revisión y recopilación de toda la información sobre las fallas
potencialmente activas en Bolivia. Este mapa muestra la probabilidad de ocurrencia de
daños sísmicos potenciales en Bolivia, así como el nivel de exposición a daño ante este
tipo de evento. Está elaborado en base a un modelo de actividad sísmica del terreno. (7)
Figura 6 Mapa de amenazas sísmicas de Bolivia (2016)

Zonificación sísmica en Bolivia

Una primera aproximación a la zonificación se propuso en la Norma Boliviana de Diseño


Sísmico (NBDS) del año 2006 y que fue revisada en el Manual de Diseño Sísmico (NDS)
del 2015. Para establecer la zonificación sísmica en Bolivia se ha empleado el método
determinista por parte del MDS 2015, realizando una depuración del catálogo y se trabajó
solamente con sismos de magnitud Mb mayor a 4 y foco superficial, es decir aquellos
ocurridos a una profundidad máxima de 70 Km, los más destructivos.

En la Figura 7 puede observarse el mapa de aceleraciones sísmicas de Bolivia, en el que


se han distinguido 4 zonas, estando el área del presente estudio en la zona 2 y marcado
con un rectángulo azul.
Figura 7 Zonificación sísmica de Bolivia (MDS 2015).

Conclusión

Para el diseño de la Presa Papa Chacra y obras anexas debe tenerse en cuenta la Norma
Boliviana de Diseño Sísmico (NBDS) del año 2006 y el Manual de Diseño Sísmico (NDS)
del 2015, que tiene por objeto primordial:

- Se reduzca a un mínimo la posible pérdida de vidas humanas;

- El daño esté limitado; y

- Las estructuras importantes para protección civil, continúen operativas

Dicha norma establece los requisitos mínimos para el análisis, diseño y construcción de
edificaciones sismorresistentes ubicadas en zonas de amenaza sísmica con indicaciones
para realizar el diagnóstico sísmico de edificaciones y recomendaciones de refuerzos
estructurales. Aunque no contempla recomendaciones específicas para el diseño sismo
resistente de estructuras como: puentes, viaductos, túneles, represas, tanques y obras
hidráulicas si sirve de base para establecer los criterios y los mecanismos de cálculo y
desarrollo pertinentes.

TRABAJOS DE INVESTIGACION

En cumplimiento del alcance de trabajo contratado se han realizado los siguientes


trabajos de investigación:

 Cuatro sondeos a diamantina con un total de 85 metros.


 Ensayos de absorción de agua tipo Lugeon.
 Ensayos de laboratorio para caracterizar las rocas y las discontinuidades.

Los resultados obtenidos en esta campaña han sido la base para la elaboración de los
modelos geotécnico e hidrogeológico presentados.

Sondeos a diamantina

Las ubicaciones de los cuatro sondeos han sido determinadas por la supervisión del
estudio; dos en el lecho del rio y los otros 2 en los estribos respectivamente, tal como se
muestra en Tabla 2. Las coordenadas de cada sondeo, profundidades, nivel freático
durante la perforación y el número de ensayos de permeabilidad son presentados en la 2
Coordenadas UTM
Tabla 2: Sondeos a diamantina

Tipo de m Norte Profundida Inclinación


Sondeo
sondeo m Este Zona d total (m) (m)

Perf. a
P-01 301494 7715367 20K 20 90º
diamantina
Perf. a
P-02 301478 7715374 20K 25 90º
diamantina
Perf. a
P-03 301449 7715385 20K 20 90º
diamantina
Perf. a
P-04 301462 7715429 20K 20 90º
diamantina
TOTAL 85

El trabajo de perforación y los ensayos de permeabilidad correlativos ha sido realizado


desde el 18 de marzo de 2023 hasta el 29 marzo de 2023.
Figura 81 Sondeos a diamantina

Para la ejecución de los trabajos de campo fue movilizado un equipo de perforación


montado sobre una oruga denominado SONDA YZJ-200Y. Los datos principales del
equipo son descritos a continuación:

CABEZA DE ROTACIÓN

Velocidad: 2200 RPM

Angulo de perforación: 90-75°

BOMBA DE INYECCIÓN

Modelo: BEAN ROYAL 420-9

Número de pistones: 3

Boca de entrada 2" y Boca de salida 1"

Carrera: 75 mm/

Caudal: 0 – 200 l/min

Presión de trabajo: 35 bar


Las perforaciones han sido realizadas con coronas de inserción serie 6 con diámetro NQ
(diámetro externo o diámetro de pozo 75,7 mm y 47,6 de diámetro interno o diámetro de
testigo).

Para garantizar una recuperación óptima de los testigos se ha empleado una batería de
doble camisa (sistema “wireline”). La ventaja de este tipo de batería es el aislamiento del
testigo ya que no está expuesta al flujo de agua de recuperación de detritos y de
enfriamiento.

Fotografía 1 Equipo perforando el sondeo P-2.

1.1.1.1. Registro de sondeos.

Durante la realización de los sondeos han sido registradas cuidadosamente magnitudes


físicas y/o descripciones fundamentales para el estudio de la roca y las discontinuidades
en función de la profundidad. En la Tabla se muestra un registro tipo de sondeo de
exploración en rocas, en el que se reflejan los datos obtenidos, progresiva de toma de
muestras para el laboratorio, ensayos de laboratorio, ensayos de permeabilidad, etc.

La presentación de los datos sigue el siguiente procedimiento:


 Nombre y ubicación del proyecto, tipo de ensayo, fecha, nombre del supervisor y
el operador, coordenadas, coordenadas del brocal.
 Procedimiento de ejecución: sistema de perforación, diámetro de perforación, tipo
de corona, sistema de evacuación de detritus y de refrigeración, grado de
recuperación en porcentajes, etc.
 Descripción de los testigos: litología, Designación de la Calidad de la Roca (RQD),
 Numero de fracturas en 30 cm, de grado de alteración, ensayos de laboratorio, tipo
y buzamiento de las discontinuidades, rellenos.

Tabla 3: Registro de Sondeos

Para llenar la columna 7 (Designación de la Calidad de la Roca (RQD)) se aplica la


definición propuesta por D. Deere, regulada en la norma ASTM D 6032-08, que dice “el
RQD es la relación porcentual de la sumatoria de las longitudes de testigos continuos con
una longitud mayor a 100 mm respecto a la longitud total del tramo de perforación
considerado. Esta variable esta íntimamente relacionada con el “Grado de
Fracturamiento” de la roca. En la Tabla se muestra los rangos del índice R.Q.D. del
macizo rocoso.

Tabla 4: Clasificación de la calidad del macizo rocoso según el índice RQD.


RQD % Calidad
< 25 Muy mala
25 - 50 Mala
50 - 75 Medio
75 - 90 Bueno
90 - 100 Muy bueno

La columna 5 (Grado de Meteorización) es rellenada según la clasificación de la Sociedad


Internacional de Mecánica e Ingeniería de Rocas (ISRM), mostrada en la Tabla .
Tabla 5: Grado de meteorización del macizo rocoso.
Grado de
Tipo Descripción
meteorización

I No intemperizado (Fresco) No aparecen signos de meteorización

La decoloración indica alteración del material rocoso y


II Ligeramente meteorizado
de las superficies de discontinuidad

Menos de la mitad del macizo rocoso aparece


descompuesto o transformado en suelo.
III Moderadamente meteorizado
La roca aparece como una estructura continua o
núcleos aislados.

Más de la mitad del macizo rocoso aparece


descompuesto o transformado en suelo.
IV Altamente meteorizado
La roca aparece como una estructura continua o
núcleos aislados.

Todo el macizo rocoso aparece descompuesto o


V Completamente meteorizado transformado en suelo.
Se conserva la estructura original del macizo rocoso

Todo el macizo rocoso se ha transformado en suelo


VI Suelo residual
se ha destruido la estructura y fábrica.

Fuente: ISRM (1981)

Sondeo P-1

La perforación a diamantina P-1 está ubicada en el estribo izquierdo de la presa es


vertical y alcance la profundidad de 20 m. En los 20 metros de la perforación se ha
observado una roca pelitica descrita como lutita (pizarra con grado ligero a moderado de
metamorfismo. En la Tabla es presentado un resumen del sondeo. Se ha registrado una
recuperación de que oscila entre los 80 y los 93% en toda la perforación, excepto en los
primeros 2,6 metros, donde la recuperación fue muy baja. Este es el resultado de una
perforación cuidadosa con una batería de doble camisa. La roca en los primeros 6 metros
está muy fracturada y meteorizada, pasando paulatinamente a una roca con un grado de
fracturación bajo y ligeramente meteorizado desde los 6 m hasta los 10.6 metros. Entre
las profundidades 10.6 a 12.6 m aumenta notablemente el grado de fracturamiento y el
grado de meteorización a partir de 12.6 m hasta los 20 m se presenta una roca sana la
cual no tiene fracturamiento y grado de meteorización muy bajo. Finalmente, a partir de la
profundidad 13 m mejoran las condiciones hasta el final de la perforación con roca RQD
que oscilan entre 70 a 93 % y meteorización ligera.
Sondeo P-01

Tabla 6: Resumen del registro del Sondeo P-01


ID Tramo (m) Avance Tipo de Recuperación RQD Grado de
Sondeo (cm) roca (%) (%) meteorización
Inicial Final
Sed.Coluv.
0 2,6 2,6 clastos de 60 0 V
Lutita
2,6 4,1 1,5 Lutita 75 14 III
4,1 5,6 1,5 Lutita 92 0 II
5,6 7,1 1,5 Lutita 90 42 III
7,1 8,6 1,5 Lutita 88 38 II
8,6 10,1 1,5 Lutita 91 39 II
P-01
10,1 11,6 1,5 Lutita 81 43 III
11,6 13,1 1,5 Lutita 85 46 II
13,1 14,6 1,5 Lutita 78 78 I
14,6 16,1 1,5 Lutita 97 90 I
16,1 17,6 1,5 Lutita 93 84 I
17,6 19,1 1,5 Lutita 93 73 I
19,1 20 0,90 Lutita 100 100 II

Sondeo P-02
Tabla 7: Resumen del registro del Sondeo P-02
ID Tramo (m) Avance Tipo de Recuperación RQD Grado de
Sondeo (cm) roca (%) (%) meteorización
Inicial Final
Sedimentos
0 2,6 2,6 areno 72 0 V
gravosos
Sed.
2,6 4,1 1,5 Arcillosos y 93 0 V
arena
Arenas -
4,1 5,6 1,5 93 0 V
Lutitas
5,6 7,1 1,5 Lutita 92 67 II
7,1 8,6 1,5 Lutita 92 72 II
8,6 10,1 1,5 Lutita 93 11 II
P-02 10,1 11,6 1,5 Lutita 93 51 II
11,6 13,1 1,5 Lutita 90 45 II
13,1 14,6 1,5 Lutita 95 90 II
14,6 16,1 1,5 Lutita 91 83 II
16,1 17,6 1,5 Lutita 95 90 II
17,6 19,1 1,5 Lutita 89 87 II
19,1 20,6 1,5 Lutita 84 76 II
20,6 22,1 1,5 Lutita 88 85 II
22,1 23,6 1,5 Lutita 88 87 II
23,6 25 1,4 Lutita 57 56 II
Sondeo P-03
Tabla 8: Resumen del registro del Sondeo P-03

ID Tramo (m) Avance Tipo de Recuperación RQD Grado de


Sondeo (cm) roca (%) (%) meteorización
Inicial Final
0 2,6 2,6 Lutita 51 8 IV
2,6 4,1 1,5 Lutita 97 7 III
4,1 5,6 1,5 Lutita 97 39 III
5,6 7,1 1,5 Lutita 87 24 II
7,1 8,6 1,5 Lutita 99 41 II
8,6 10,1 1,5 Lutita 95 27 II
P-03 10,1 11,6 1,5 Lutita 91 15 III
11,6 13,1 1,5 Lutita 92 58 II
13,1 14,6 1,5 Lutita 97 39 I
14,6 16,1 1,5 Lutita 87 64 I
16,1 17,6 1,5 Lutita 95 31 I
17,6 19,1 1,5 Lutita 100 78 I
19,1 20 0,9 Lutita 100 92 I

Sondeo P-04
Tabla 9: Resumen del registro del Sondeo P-04

ID Tramo (m) Avance Tipo de Recuperación Grado de


RQD (%)
Sondeo (cm) roca (%) meteorización
Inicial Final
0 2,6 2,6 Lutita 96 0 IV
2,6 4,1 1,5 Lutita 84 6 III
4,1 5,6 1,5 Lutita 86 15 III
5,6 7,1 1,5 Lutita 87 64 III
7,1 8,6 1,5 Lutita 92 27 II
8,6 10,1 1,5 Lutita 89 49 II
P-04 10,1 11,6 1,5 Lutita 93 43 III
11,6 13,1 1,5 Lutita 91 63 II
13,1 14,6 1,5 Lutita 93 73 I
14,6 16,1 1,5 Lutita 87 81 I
16,1 17,6 1,5 Lutita 93 96 I
17,6 19,1 1,5 Lutita 93 79 I
19,1 20 0,9 Lutita 100 90 I

Ensayos de Permeabilidad (Lugeon)


En los estudios de presas en prácticamente una “norma” utilizar el ensayo Lugeon para
determinar la capacidad de admisión de agua en las condiciones definidas en este
ensayo, considerando que el macizo es estanco cuando la absorción de agua es inferior o
igual a 1litro/minuto por metro lineal a una presión de 1 MPa durante 10 minutos.

Metodologías de los ensayos

Ensayos tipo Lugeon

El ensayo de permeabilidad Lugeon es un ensayo que se realiza en campo para estimar


la permeabilidad del macizo rocoso. Se aplica principalmente en rocas fracturadas.
Consiste en medir el volumen de agua que se consigue inyectar en el terreno durante un
tiempo determinado (caudal), en una longitud concreta de la perforación y a una presión
constante. En la Figura 16 puede observarse de manera sencilla el esquema básico de
un ensayo de este tipo.

Figura 2: Esquema de ejecución de ensayos de permeabilidad tipo Lugeon

Se realizan una serie de escalones de presión a los cuales el agua es inyectada,


manteniendo constante la presión en la zona de ensayo. En cada escalón se incrementa
la P hasta la máxima establecida, y posteriormente es reducida pasando por los mismos
escalones.
La permeabilidad viene dada por las siguientes expresiones:

Donde, L representa la longitud del tramo ensayado, r el radio del sondeo y h la presión
hidrostática en el centro del tramo.

La unidad de medida del ensayo es el denominado Lugeon que se define como la


absorción de 1 litro de agua por metro lineal de sondeo y por minuto, realizando el ensayo
a 10 atmósferas de presión y durante 10 minutos. Por tanto, una unidad Lugeon equivale
a un coeficiente de permeabilidad k de 10−5 cm/s.

A partir de los resultados obtenidos, es posible clasificar la permeabilidad de las


discontinuidades del macizo rocoso de acuerdo a la clasificación de Olalla y Sopeña
(1991) recogida en González et al. 2002 la cual se muestra en la siguiente tabla:

Tabla 1: Clasificación de la permeabilidad de los macizos rocosos según los ensayos Lugeon.
González et. 2002.
Tipo de macizo Unidades Lugeon Presión (MPa)
Muy impermeable 0-1 0,98
Prácticamente impermeable 1-3 0,98
>3 0,98
Permeable
1,5 - 6 0,49
>3 0,98
Muy Permeable
>6 0,49
Olalla y Sopeña 1991

Además, a partir de la curva de caudales admitidos en función de la presión de cada


ensayo Lugeon es posible determinar el tipo de flujo que se ha producido. En la siguiente
Figura se muestra dicha caracterización:
Figura 10: Esquema para la interpretacion de ensayos de permeabilidad Lugeon

Ensayos de permeabilidad realizados

Han sido ejecutados 13 ensayos Lugeon. Para los ensayos Lugeon se adoptó
sistemáticamente una longitud de 5 metros de tramo de perforación para cada ensayo, los
cuales fueron aislados por obturadores (Packers) que permitan controlar la salida de agua
hacia los tramos colindantes al tramo ensayado.

En la tabla 11 son presentados los resultados de los ensayos de permeabilidad obtenidos


para el presente estudio:
Tabla 11: Resultados de los ensayos Lugeon
Unidade
Ensay Perforació Profundida Tipo de Permeabilida Clasificació Observacione
s
o n d (m) Ensayo d K (cm/s) n del macizo s
Lugeon
Muy
01 5.00–10.00 11 1.09E-04 Flujo Laminar
Permeable
Flujo
02 P-01 10.00–15.00 Lugeon 2.8 2.8E-05 Permeable
Turbulento
Flujo
03 15.00–20.00 1.9 2.7E-05 Permeable
Turbulento
Flujo
01 6.00–11.00 9.2 9.2 E-05 Permeable
Turbulento
Flujo
02 11.00–15.00 2.9 2.90E-05 Permeable
P-02 Lugeon Turbulento
Flujo
03 15.00–20.00 1.8 1.8E-05 Permeable
Turbulento
04 15.00-20.00 0.7 7.0E-06 Impermeable Flujo Laminar
Flujo
01 5.00-10.00 6.2 6.2E-05 Permeable
Turbulento
02 P-03 10.00–15.00 Lugeon 6.4 6.4E-04 Permeable Flujo Laminar
Flujo
03 15.00–20.00 4.4 4.4E-05 Permeable
Turbulento
Muy
01 5.00–10.00 10.5 1.05E-04 Flujo Laminar
Permeable
Flujo
02 P-04 10.00–15.00 Lugeon 5.7 5.7E-05 Permeable
Turbulento
Flujo
03 15.00–20.00 2.5 2.8E-05 Permeable
Turbulento

o Ensayos de Laboratorio

Inicialmente se ha realizado los ensayos en bloques extraídos de las estaciones


geomecánicas realizadas en la superficie del área de trabajo. Las planillas de laboratorio
se presentan en el Anexo 3.2, posteriormente se ha realizado los ensayos de laboratorio
en las muestras extraídas de los sondeos a diamantina, los certificados de los ensayos se
presentan en el Anexo 3.3. El detalle de ensayos realizados se presenta en la Tabla 23 y
Tabla 24.

Tabla 12 Ensayos de laboratorio muestras de sondeos a diamantina.


Entayo Triaxial
Uniaxial No
Saturado

Saturado
Uniaxial
Ensayo

Ensayo

ID de Profundidad,
sondeo m

13,57 – 13.77 X X X
P - 01

P - 02 13,70 - 13,90 X X X
Entayo Triaxial
Uniaxial No
Saturado

Saturado
Uniaxial
Ensayo

Ensayo
ID de Profundidad,
sondeo m

14,22 – 14,42 X X X
P - 03

TOTAL 3 3 3

 Ensayo Compresión Uniaxial

El ensayo tiene el objetivo de determinar en el laboratorio la resistencia uniaxial (σ1) no


confinada de la roca, o resistencia a la compresión simple. Es un ensayo para la
clasificación de la roca por su resistencia. El ensayo de compresión simple (uniaxial), o
también llamado ensayo de compresión no confinada (σucs), tiene el objetivo de determinar
la resistencia a la compresión. El procedimiento sigue las recomendaciones de la norma
ASTM D 2938. El ensayo emplea núcleos de roca o especímenes de forma cilíndrica con
una relación L/D mayor a 2 y menor a 2,5. La σ ucs es la relación de la fuerza necesaria
para alcanzar la falla respecto al área transversal del espécimen. A partir de σ ucs se
clasificó la roca según el criterio de la ISRM (1981).

Tabla Resultados del ensayo de compresión uniaxial


Resistencia
Resistencia
compresión Clasificación de
ID compresión
uniaxial la roca según
muestra uniaxial (σ1),
saturada (σ1), ISRM (1981)
MPa
MPa

P - 01 21.28 17.43 Blanda

P - 02 50.49 42.81 Blanda

Blanda
P - 03 17.63 14.65

Se puede observar que los valores de compresión uniaxial en ambos estribos es inferior
a los valores presentados en el pozo perforado en el eje de la quebrada.

 Ensayo de compresión triaxial

Generalidades
Este ensayo representa las condiciones de las rocas in situ sometidas a esfuerzos
confinantes, mediante la aplicación de presión hidráulica uniforme alrededor de la probeta.
Permite determinar la envolvente o línea de resistencia del material rocoso ensayado a
partir de la que se obtienen los valores de sus parámetros resistentes cohesión (c) y
ángulo de fricción (Ø)
Tabla Resultados Ensayos Triaxiales
Fuerza Axial Presión Axial σ1
ID Sondeo σ2 = σ3
MPa Mpa

P - 01 1.5 62.5 46.11

P - 02 3.0 73.5 54.65

P - 03 4.5 38.9 31.00

Resultados, modelo geotécnico, modelo hidrogeológico

o Modelos de evaluación
 Parámetros de la roca intacta

Los parámetros de resistencia de la roca intacta se determinan a partir de los ensayos de


laboratorio efectuados, utilizándose ensayos a compresión simple o uniaxial, y ensayos
triaxiales.

De esta manera, si se representan los resultados de estos ensayos en el plano [3 - 1] se
obtiene un punto para cada ensayo. Los diferentes criterios de rotura determinan una
relación funcional entre estos puntos. Los dos criterios fundamentales son el de Mohr-
Coulomb y el de Hoek-Brown.

El criterio de Mohr-Coulomb supone una relación lineal entre 3 - 1:

σ 1 = λ⋅σ 3 + σ c

Siendo la c la resistencia a compresión simple del litotipo y  un parámetro relacionado


con el ángulo de fricción según la ecuación:

1+ senφ φ
λ= = tg2 (45 + )
1 − senφ  2

A partir de c y 3 se pueden obtener el ángulo de fricción () y la cohesión ( c) del litotipo


mediante la expresión:

φ = 2⋅atg √ λ − 90
1−sen φ
c = σc
2 cos φ

Los valores obtenidos en laboratorio de la UATF en los ensayos de compresión uniaxial y


los ensayos triaxiales son los siguientes:

Ø 35.31 º
C 16.21 MPa
Por otra parte, el criterio de Hoek-Brown supone una relación no lineal entre 1 y 3 de la
forma:


σ 1 = σ 3 + mσ c σ 3 + sσ 2
c

donde m es un parámetro que depende del tipo de roca y de la textura , y s es un


parámetro relacionado con el grado de fracturamiento de la roca.

Para el caso de roca intacta (ensayos de laboratorio), el parámetro s es igual a la unidad.


Si se denomina mi a m, la ecuación adquiere la forma:


σ 1 = σ 3 + mi σ c σ 3 +σ 2
c

Si ahora se efectúa el cambio de variables:

x = 3

y = (1 - 3)2

se obtiene la siguiente relación lineal para roca intacta:

y = micx + c2

Si se asume un valor de un c fijo, determinado en este caso por los ensayos de


laboratorio, se puede obtener el valor del parámetro mi, que se utilizará más adelante para
evaluar las propiedades del macizo rocoso.

Para determinar los valores de los parámetros del criterio de plastificación, tanto del
criterio de Mohr-Coulomb como del de Hoek-Brown, se realiza una regresión lineal de los
valores 1 y 3 obtenidos de los ensayos de laboratorio. Así, para el criterio de Mohr-
Coulomb, se ajusta la recta de la fórmula anteriormente expuesta, y para el de Hoek-
Brown, en caso de roca intacta, el que se indicó en la expresión.
En general, estos ajustes son muy sensibles al valor de c y, normalmente, el valor de c
obtenido en laboratorio debería ser similar al de los ajustados para los dos criterios de
rotura. En este caso, se parte de una resistencia a compresión simple determinada en
laboratorio, por lo que las expresiones utilizadas para estimar los parámetros son, para el
caso del criterio de Mohr-Coulomb:

φ = 2⋅atg √ λ − 90

1 − senφe
ce = σc
2 cosφ c

y para el criterio de Hoek y Brown:

me =
1
n
Σ
[ ( σ 1i−σ 3 i )2 σ
( σ3 i σc )
c
2

]
Los valores obtenidos de mi según el criterio de Hoek y Brown deben ajustarse de modo
aproximado a los rangos establecidos por Hoek y Marinos en 2.000. En caso de no
disponer de un ajuste adecuado por no disponer de datos, es posible tomarlos como
bibliográficos.
Tabla Coeficiente mi de Hoek-Brown
Clástica

18
SEDIMENTARIA

Yeso (Chalk)
7
Organicas
Carbón
8 -21
No Breccia Caliza Caliza
Clástica
Carbonatos 20 Espartica micritica
10 8
Yeso Anhidrita
Quimica
16 13
Marmol Homfeisa Cuarcita
METAMORFICA

No Foliada
9 19 24

Migmatita Amfibolita Milonita


Ligeramente Foliada
30 25 a 31 6

Gneis Esquisto Filita Pizarra


Foliada
33 4a8 10 9

Granito Riolita Obsidiano


33 16 19
Claros Granodiorita Dacita
30 17
Diorita Andesita
IGNEA

28 19
Gabro Dolerita Basalto
Oscuros 27 19 17
Norita
22
Aglomerado Breccia Tufa
20 18 15

Fuente: Hoek y Marinos (2.000) “Predicting tunnel squeezing problems in weak heterogeneous rock
masses”).

En cuanto al módulo de deformación de la roca intacta, para su determinación es posible


recurrir al denominado Módulo Relativo (MR), basado las investigaciones de Deere y en
Palmstrom y Singh, quienes recomiendan estimar el módulo de deformación a nivel de
roca intacta como el producto de la resistencia a compresión simple por el Módulo
Relativo.
En la siguiente se muestran los diferentes valores del Módulo Relativo establecidos para
cada litología y a partir de la cual se asigna a cada litotipo un valor.

En el sitio de emplazamiento de la presa se ha identificado una única formación


geológica: Formación Obispo perteneciente al sistema Ordovícico Inferior. Las rocas son
de textura muy finas (pelíticas) con un grado moderado de metamorfismo denominadas
Meta-lulitas o pizarras. El Modulo Relativo M está en el orden de 400 a 600.

Tabla Coeficiente Valores del Módulo Relativo para diferentes litologías

Fuente: Deere y Palmstrom y Singh.

Para la estimación de la resistencia a compresión simple de la roca intacta se cuenta con


los ensayos de laboratorio realizados. (ver anexos).
En cuanto a la constante mi se ha procedido con el ajuste por mínimos cuadrados de los
resultados del ensayo triaxial en la Universidad de Autónoma Tomás Frías Potosí,
habiéndose obtenido para mi 10,48 y para la resistencia a la compresión simple 14,091
MPa, tal como se muestra en la Figura 3 obtenida con el programa Roclab de la empresa
Rocksciences (Canada)

Figura 3 Ajuste de mi y resistencia a la compresión simple de la lutita

El valor de mi está dentro de los valores obtenidos por el equipo de investigación del
Imperial College de Londres para una pizarra (slate) después del análisis y ajuste de
centenas de ensayos triaxiales durante 10 años. En el marco del presente estudio se
adopta un valor de 10 para el cálculo del coeficiente m b del macizo rocoso. El valor
ajustado para la resistencia de 13,09 MPa resulta menor que los valores determinados en
los ensayos de compresión simple realizado.

Del mismo modo, para la estimación del módulo de deformación de la roca intacta, en
aquellos casos en los que no se cuenta con ensayos específicos, se ha procedido
también a adoptar un valor bibliográfico según la litología a partir de la propuesta de
Deere, Palmstrong y Sing, mostrado Tabla.
 Parámetros de las discontinuidades
Parámetros de resistencia

En cuanto a los parámetros de corte de las discontinuidades, en primer lugar se ha


procedido a determinar el ángulo de rozamiento característico de las discontinuidades de
cada litología según el criterio de Franklin el cual establece:

∅ b=arctg ¿

Donde:

b es el ángulo de fricción básico

 es el ángulo de fricción residual de la discontinuidad

Por tanto a partir de la expresión anterior es posible estimar el ángulo de fricción básico
de las discontinuidades, teniendo en cuenta que dicho ángulo siempre será inferior al
ángulo de fricción básico de la roca intacta por el efecto de meteorización que se produce
sobre la junta.

En la siguiente Tabla 2 se incluyen los valores característicos del ángulo de fricción básico
de distintos tipo de litologías publicado por Luis I. González de Vallejo.

Tabla 2 Valores característicos del ángulo de fricción básico para distintas rocas
Roca Ángulo de fricción básico b
Andesita 45
Arenisca 30-50
Basalto 48-55
Caliza 35-50
Caliza Margosa 30
Cuarcita 40-55
Diabasa 40-50
Diorita 50-55
Dolomía 25-35
Esquisto 25-30
Gabro 35
Gneis 30-40
Granito 45-58
Grauvaca 45-50
Mármol 35-45
Lutita 40-60
Pizarra 40-55
Yeso 30

Fuente : (Luis I. González de Vallejo 2002).


Así, a partir de los resultados anteriores se toma como parámetros característicos los
valores más restrictivos con el fin de favorecer a la seguridad en los cálculos geotécnicos.
En cuanto a la cohesión de las discontinuidades (juntas), se ha considerado un valor nulo
debido que se determinó la presencia de materiales finos entre las juntas de las
discontinuidades. Los valores estimados para los cálculos se muestran en la siguiente
tabla.

Tabla Valores de resistencia adoptados para las discontinuidades


Ángulo de Ángulo de
Ángulo fricción fricción Cohesión
Litotipo
considerado residual residual (MPa)
estimado  adoptado
Lulitas 46 44 44 0.00

Si se considera, ahora, que el macizo rocoso en la superficie está más expuesto a


agentes de alteración y meteorización, se adopta finalmente los siguientes valores de
resistencia en corte de las discontinuidades:

• Estratificación: ángulo de fricción 42º y cohesión nula.


• Juntas: ángulo de fricción 44º y cohesión nula.
 Propiedades del macizo rocoso
Clasificación Geomecánica del macizo rocoso

La clasificación del macizo rocoso es de gran utilidad para el empleo de métodos


empíricos de diseño, los mismos han funcionado en muchas obras importantes desde
hace más de 38 años. Esto supone, sin embargo, el uso correcto del sistema de
clasificación seleccionado. Hay un gran número de sistemas de clasificación de macizos
rocosos desarrollados para propósitos generales, en este sentido se detallan los
empleados para este trabajo.

Clasificación Según Bieniawski, RMR


El RMR, ha sido introducido por Bieniawski en 1.976, se considera junto a la clasificación
propuesta por Barton (Q) como las más usadas. Bieniawski en 1.976 publicó las
consideraciones específicas para la clasificación del macizo rocoso denominado Índice
del Macizo Rocoso o Rock Mass Rating (RMR). Con los años, este sistema ha sido
calibrado y mejorado con algunos cambios significativos en la puntuación asignada a los
diferentes parámetros. La discusión que sigue se basa en la versión de 1.989 de la
clasificación (Bieniawski, 1989). Tanto en esta versión y como en la versión de 1.976 se
emplea los siguientes parámetros:

RMR=I 1 + I 2 + I 3 + I 4 + I 5
(4)
Dónde:
I1 = Factor de resistencia a la compresión uniaxial de la roca intacta.
I2 = Factor de designación de calidad de roca (RQD).
I3 = Factor del espaciamiento de las discontinuidades.
I4 = Factor de condición de las discontinuidades.
I5 = Factor de condiciones del agua.

La aplicación de la clasificación del RMR para cada estación ha sido reunida en el Anexo.
En la Tabla 3 son mostrados los valores para el Incide del Macizo Rocoso básico o
estructural, es decir, considerando un macizo rocoso seco.

Considerando la necesidad de tener también valores para el Índice de Resistencia


Geológica (GSI) de E. Hoek, es incorporada en la Tabla 3 los GSI para cada estación.

La correlación empleada entre el RMR y el GSI es la empleada desde hace más de 20


años:
GSI =RMR−5
(5)

Dónde:

RMR = Clasificación de Bieniawski RMR.


GSI= Índice de resistencia geológica.

Tabla 3 Resumen de resultados de las clasificaciones geomecánica de la superficie.

Nº Descripción Estación RMR básico GSI

1 Estación Geomecánica Superficial EG-01 41 36


2 Estación Geomecánica Superficial EG-02 40 35
3 Estación Geomecánica Superficial EG-03 45 40

Caracterización del macizo rocoso

El macizo rocoso se describe como un medio discontinuo para ello es esencial una
descripción cuidadosa de la estructura que presenta, lo que significa el estudio de la
morfología de las discontinuidades. En general, se ha realizado una descripción cualitativa
y cuantitativa del macizo rocoso (roca intacta y discontinuidades). La descripción
cualitativa para el siguiente trabajo ha seguido las recomendaciones planteadas por la
Sociedad Internacional de Mecánica de Rocas ISRM (1.981) como descripción básica
geotécnica del macizo rocoso (BGD), que tiene como objeto la descripción visual de las
características estructurales y mecánicas del macizo rocoso.

Se ha realizado la descripción básica geotécnica de tres (3) sectores o estaciones. Las


características discontinuas que presenta el macizo rocoso reconocido, especialmente
cerca de la superficie, determinará el comportamiento ante la implementación de la presa,
de esta manera, se ha realizado el levantamiento a detalle de las características del
conjunto de discontinuidades, como se muestra a continuación.

El levantamiento de características de las discontinuidades ha consistido en la


determinación de los tipos de los sistemas de discontinuidades representativas,
orientaciones, espaciamientos, persistencias, rugosidades, resistencias de las paredes y
apertura. Los métodos aplicados para la obtención de estos parámetros se basan en
sugerencias recogidas de la Sociedad Internacional de Mecánica de Rocas ISRM (1.978),

A partir de los resultados obtenidos de las clasificaciones geomecánicas medidas en las


estaciones geomecánicas, se ha procedido a caracterizar geomecánicamente el macizo
rocoso afectado por el trazado en estudio.

Para ello, en primer lugar, se han analizado los resultados de las estaciones
geomecánicas. En la siguiente Tabla se resumen los resultados y el grado de
meteorización.

Tabla Resumen de parámetros de estaciones geomecánicas superficiales.


PARÁMETROS CARACTERÍSTICOS
LITOTIPO GM RMR BÁSICO GSI
Rango Valor Prom. Rango Valor Prom.
Lutita 3 41 45 42 35 40 37

A la vista de los resultados, se presenta una calidad geomecánica regular. Hay que tener
en cuenta que las calidades obtenidas son para macizos rocosos en superficie, en
profundidad su calidad aumentará progresivamente al disminuir la meteorización, excepto
para los estratos donde se tiene un incremento del grado de fracturamiento debido a los
fenómenos geotectónicos ocurridos en los diferentes ciclos que han resultado en “fallas
intrafornacionales”.
Modelo geotécnico

Sobre la base de la consideración de toda la información obtenida especialmente, los


sondeos a diamantina, y todos los análisis realizados se ha elaborado el Modelo
Geotécnico, donde han sido definidas 3 Unidades Geotécnicas: la primera
correspondiente a suelos aluviales y coluviales y las 2 restantes al macizo rocoso con una
matriz rocosa de lutitas.

Figura 4 Plano PC-GT-01 Modelo Geotécnica.

o Estimación de la cota de fundación

Una de las tareas más difícil y complicada en el diseño de una presa es la definición de la
cota de fundación. Según el Prof. Manuel Romana (2.012) son utilizados uno de los
siguientes criterios:

 Grado de intemperismo según la escala de la Sociedad


Internacional de Mecánica de Rocas (ISRM).

La experiencia portuguesa recomienda fundar una presa de gravedad en un macizo


rocoso con un grado de intemperismo I-II de la escala del ISRM, es decir excavar hasta
encontrar un macizo rocoso sin o signos muy ligeros de alteración del macizo rocoso y las
superficies de las discontinuidades.

Módulo de deformación del macizo rocoso

Según los criterios del Prof. M. Rocha del Laboratorio Nacional de Ingeniería Civil de
Lisboa una relación Ehormigón/ E r m de 4 a 8 está asociada con influencias de escasa
importancia en el comportamiento deformacional de la presa. Por otra parte, se tiene la
experiencia colombiana indicando que hay compatibilidad entre la fundación y la presa
RCC cuando el ratio es menor a 4.

El criterio que se aplica actualmente dice que la relación permisible E hormigón/ Er m debe ser
menor a 10, y que cuando es 20 se tiene problemas de deformabilidad en la presa. Si se
considera que el módulo de deformación del hormigón compactado con rodillos es del
orden de 20 MPa

se tiene que la cota de fundación debe alcanzar la unidad geotécnica 3 para satisfacer
este criterio, tal como se muestra en la Tabla 4, tercera columna .

Tabla 4 Relación Ehormigón/ Er m

Emr Emr, red


UGT DMR DEF Ehor /Emr (Ehor /Emr)red
(MPa) (MPa)

3 45 4364.89 4.58 1309.47 15,27

Si, ahora, se aplica la reducción del módulo de deformación por efecto de la saturación
total del macizo rocoso en un 70 % según las investigaciones de Romana y Vasarhely
(1997), la construcción de una presa de gravedad en el sitio seleccionado (Ehor /Emr)red.

 Análisis y conclusión

El tercer criterio del “Modulo de Deformación del macizo rocoso” tiene la debilidad
intrínseca de estar asociada a una incertidumbre considerable debido al carácter empírico
de las fórmulas para estimar el módulo de deformación del macizo rocoso E mr.
Evidentemente, existen muchas expresiones empíricas que arrojan valores con una
dispersión grande para un mismo valor del RMR o el GSI. Atendiendo a esta constatación,
no se recomienda su aplicación, aunque se debe tener el mayor cuidado durante la
construcción de verificar la reducción de la resistencia a la compresión simple de la roca
intacta saturada, así como también, del módulo de deformación saturado E,i saturado
Aplicando los resultados de las investigaciones de Zeballos, se concluye que la cota de
fundación puede estar en la UGT 3, la cual esta mostrada en el plano con una línea roja
llena.

o Modelo hidrogeológico, permeabilidades

Los de permeabilidad ejecutados han permitido obtener una distribución espacial


razonable de la permeabilidad en el área de implantación de la presa, a partir de la cual
se ha elaborado el plano, donde han sido identificados varias zonas respondiendo a las
siguientes definiciones mostrada en la Error: Reference source not found.

La zonificación adoptada en la Error: Reference source not found está basada en las
recomendaciones de Houlsby, tal como se muestra en la Error: Reference source not
found. La zona ligeramente impermeable ( 1< Lu<5) está en el límite de la perdida de
agua considerada costosa. Un análisis de optimización económico podrá dar una
respuesta definitiva durante la ejecución de la inyecciones para crear la cortina de
impermeabilización, y ser baja da a 2 o 3 Lugeones como límite inferior.
En función a la posición espacial de los estratos y la presencia de fallas
intraformacionales se puede asumir que el tensor permeabilidad es elipsoide con la
permeabilidad principal paralela a la estratificación y las otras dos permeabilidades
principales ortogonales a los planos de estratificación.

En base a las consideraciones expuestas líneas arriba, se han propuesto las cotas de la
parte inferior de la futura cortina de inyecciones, las cuales son mostradas en el plano con
una línea roja segmentada.

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