La planificación en la producción de textos, es la etapa que preceda a la escritura, por lo tanto, esencial pues permite consignar el propósito,

la audiencia, la secuencia de ideas y el tipo de texto que se escribirá. Al planificar se pretende evitar un texto desorganizado, no tener impacto
en la audiencia e ideas que no tienen coherencia y cohesión. En esta etapa se pretende responder a ¿Para qué escribiremos el texto? ¿Con
que objetivo escribiremos?, (objetivo); ¿A quién dirigiremos el texto?, ¿Que sabemos del destinatario? (destinatario); ¿Qué queremos
transmitir al lector a través del texto?, ¿Cómo organizamos la información con la que contamos? (selección y organización de ideas) y ¿Qué
tipo de texto escribiremos? ¿Cómo es su estructura? (tipo de texto).

La textualización es la etapa central el proceso de producción de un texto. Se refiere al momento preciso en el que se juntan palabras de
manera ordenada, organizada y coherente con el propósito, se debe tener en cuenta las reglas ortográficas, la construcción del párrafo, lo
que garantizara que el texto pueda entenderse. A continuación algunas reglas que orienten una buena redacción del texto: la recurrencia
nos permite hacer referencia de algunos elementos en forma reiterada lo que garantiza la unidad y la continuidad del escrito; la progresión
refiere que cada oración debe aportar información nueva, lo que evita la redundancia; la relación consiste en que los elementos del tema se
relacionan entre sí, sin mesclar un tema con otro que no tenga relación, en esta regla el uso de los conectores es de mucha ayuda y clave
para un buen escrito.
La revisión es la etapa orientada a mejorar el resultado de la textualización, aquí se cumplen tareas como la lectura atenta y de ser posible
compartida de lo escrito para detectar casos de incoherencia, vacíos u otros aspectos que necesiten mejoramiento, además es un momento
de reflexión sobre la producción ¿Estoy redactando bien?, ¿Qué puedo mejorar?, ¿Cómo puedo mejorar? En esta etapa se puede considerar
también la reescritura con el objetivo de mejorar el texto.
La autorrevisión se relee lo producido y el alumno se evalúa según los aspectos anteriores. El texto será objeto de corrección tanto como
sea necesario para el logro de un texto coherente.
Conectores textuales