Periodismo y retórica

Teoría del Periodismo

CONTENIDO
1. Objetivos.

2. Introducción.

3. Principios básicos de la retórica.

4. Separación información-opinión.

5. Las teorías de los géneros periodísticos.

6. Aportaciones de la retórica.

7. La elocutio o elocución.

8. Resumen.

9. Bibliografía.

Objetivos
• Dominar la tradición periodística desde sus orígenes
a la actualidad, con atención a los principales
medios de comunicación, periodistas y coberturas
informativas de relieve.
• Conocer las teorías de los géneros periodísticos.
• Analizar las aportaciones de la retórica y la elocución.
Introducción
En su ‘Retórica’ Aristóteles (2014) habla de “hacer
posible el control racional de las instancias objetivas
y subjetivas por las que los hombres se mueven en la
elección de esos actos retóricos”.
En periodismo también es posible el control racional
de las instancias objetivas y subjetivas por las que las
personas de la redacción se mueven en la elección de
sus actos comunicativos, lo que justifica cualquier
esfuerzo de comprensión del periodismo.
Principios básicos
de la retórica
Los principios básicos de la retórica pueden ser muy
útiles para el estudio de la comunicación periodística.
Entre las grandes dificultades para una aproximación
teórica mayor a esta dos áreas está la arraigada tradición
que reduce la retórica a:
• Un método de engaño y falsificación para la
manipulación de discursos.
• El arte de adornar discursos sin comprometerse
con su sustancia.
• El estudio de las metáforas figuras de lenguaje y
construcción.
Para desterrar esta imagen negativa de la retórica se
puede concluir que:
• El esfuerzo por comprender los complejos
fenómenos involucrados en cualquier proceso de la
comunicación humana.
• Es la única disciplina que permite situar e
interrelacionar en un cuerpo teórico común todas
y cualquier posibilidad de estudiar, con apoyo de
otras disciplinas, este conjunto de fenómenos.
• Como el libre periodismo, el dominio público de la
retórica es condición inherente a la democracia,
mientras que todo autoritarismo se basa
prioritariamente en el control de la retórica, inclusive
para justificar el uso de la fuerza.
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Separación información-opinión
La Real Academia Española define el término informar
(2014) como enterar o dar noticia de algo. Asimismo, esta
institución determina el opinar (2014) como manifestar
una idea u opinión.
En sus orígenes, los medios de comunicación fueron
pensados como una herramienta de información.
Funciones de los medios de comunicación:
El desarrollo de las sociedades del mundo amplía las
funciones de los medios de comunicación. Así pues, en la
actualidad se pueden encontrar las siguientes funciones:
• Informar: la función principal de un medio de
comunicación es informar de forma veraz. Desde
sus orígenes dichos medios comunicación han
transmitido información. Así, las personas pueden
conocer y compartir los acontecimientos sucedidos
en el mundo en el menor tiempo posible.
• Entretener: es uno de los propósitos de los medios
de comunicación de masas. En los periódicos hay
varias secciones de entretenimiento. Por ejemplo,
las páginas de pasatiempos (sudokus, sopas de
letras, etc.)
• Educar: los medios de comunicación acercan el
conocimiento a las personas. Hay millones de
revistas, periódicos, páginas webs, programas de
televisión que permiten a las personas conocer
temas diversos, desde un punto de vista divulgativo
y educativo.
• Formar opinión: cada medio de comunicación
considerando sus aspectos culturales, políticos o
religiosos interpretan la información de acuerdo
con sus intereses. Esto viene determinado por la
línea editorial que viene impuesta por la dirección
de cada medio de comunicación. Es por eso, por lo
que una información puede ser presentada desde
diferentes puntos de vista dependiendo del medio
de comunicación que la escriba.
Las teorías de los
géneros periodísticos
El término género periodístico comienza a aparecer en
1970. Es conveniente señalar que hasta mediados del
siglo XIX el periodismo guarda una estrecha relación con
la literatura, de ahí que no exista una necesidad imperiosa
de identificarlo como un género independiente.
Sin embargo, con el surgimiento de las primeras agencias
de prensa los artículos firmados van cediendo su primicia
a las noticias anónimas. Estas poseen las características
de concisión, objetividad, veracidad, etc., muy diferentes
a las de los textos literarios, de ahí que el periodismo
comience a considerarse un género literario nuevo.

Periodismo como género literario:
¿Sabías que el principal defensor de la idea del
periodismo como género literario fue el jurista, político y
escritor español J.F. Pacheco?
No sería hasta 1920 cuando la prensa se impuso en
el mundo occidental relegando a un segundo plano al
periodismo ideológico, al servicio de las ideas políticas
o religiosas. A diferencia de los artículos firmados,
comienzan a surgir nuevas tradiciones discursivas como
el reportaje o la crónica, que dan lugar a los que hoy se
identifican como géneros periodísticos informativos.
Tras la Segunda Guerra Mundial, el periodismo adquiere
una mayor profundidad y surge la llamada prensa de
calidad en contraposición con la prensa sensacionalista.
Este periodismo aboga por el periodismo interpretativo,
en el que la narración objetiva de los hechos se acompaña
de explicaciones y juicios de valor. Así pues la crónica se
perfila como un subgénero intermedio a medio camino
entre el relato objetivo de los hechos y el comentario
valorativo de estos hechos por parte del periodista.
Ante el peligro que supone para la credibilidad del
periodismo la confusión entre información, interpretación
y opinión, investigadores del discurso periodístico
inician en 1951 encuentros internacionales en los que
identifican a la interpretación como un elemento básico
en las tareas informativas.
Clasificación de los géneros periodísticos
El escritor y periodista español A. Grijelmo (1997) se
basa en cuatro grandes grupos de clasificación de los
géneros periodísticos:
• Géneros de la información: hace referencia a
aquellos textos periodísticos que transmiten
hechos de interés para el público objetivo al que
se dirigen. Pertenecen a este género: la noticia, la
documentación y el reportaje informativo.
• Géneros de interpretación más opinión: son
textos mixtos que cumplen ambas funciones.
Pertenecen a este género: la crónica, la entrevista
y el reportaje interpretativo.
• Géneros de la interpretación: es un tipo de texto
periodístico que parte de elementos de opinión
y dónde la información, sí existe, queda en un
segundo plano.
• Géneros de opinión: es un tipo de texto escrito de
carácter valorativo, que deja ver la ideología del
periódico. Pertenecen a este género: los editoriales
o los ensayos.
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Aportaciones de la retórica
A diferencia de lo que se pueda pensar, la retórica y el
periodismo tienen más elementos en común más allá
de las páginas de opinión. Se destacan a personas y
escuelas que han vinculado al periodismo y la retórica
como por ejemplo:
• Chillón: estudia la narrativa periodística en la
perspectiva sobre todo de la teoría literaria.
• Borrat y Casasús y Ladevéze: avanzan por la
comprensión de los aspectos retóricos del texto
narrativo pero caminando por los estudios propios
de redacción de noticias.
• Escuela de Frankfurt: dedicada principalmente
al esfuerzo por comprender la importancia del
concepto de macroestructuras para el estudio de
textos periodísticos y las estrategias retóricas que
el autor encuentra en estos textos con intención de
enfatizar las llamadas cualidades de la noticia.
• Van Dijk: el investigador Van Dijk es uno de los
reconocidos representantes del análisis crítico del
discurso.
Análisis del discurso:
Los análisis de discurso comportan, conforme subraya
Van Dijk (1997), el estudio en separado pero relacionado,
del contenido fonético, gráfico, fonológico, morfológico,
sintáctico, micro y macro-semántico, estilístico,
superestructural, retórico, pragmático, conversacional,
interaccional y demás estructuras y estrategias. Pero en
qué están esencialmente interesados tanto los analistas
del discurso como los usuarios del lenguaje común, es
en el significado del discurso, o sea, qué es y de qué
habla este texto, y qué significa y qué repercusiones
tiene para el usuario.
La respuesta a estas preguntas está oculta bajo un gran
número de enlaces entre conceptos, que por ser ya de
conocimiento del lector pueden ser omitidos por el redactor,
de forma que el texto es un iceberg semántico en el que se
manifiesta sólo una parte, mientras el resto de información
se supone que ya es conocida por los lectores.
Por ello este tipo de dependencia sobre el conocimiento del
mundo y otras creencias puede conformar una coherencia
subjetiva e ideológica, de forma que lo coherente para los
periodistas no lo suele ser para los lectores.
Cabe destacar que una de las nociones semánticas más
poderosas en el análisis crítico de la información de
noticias es la implicación. Muchas veces gran parte de la
información de un texto no se expresa de forma explícita,
sino que se realiza de modo implícito. El análisis de lo no
dicho es muchas veces más importante que lo que se ha
dicho con palabras.

Macroestructuras:
En sus contribuciones al desarrollo de una teoría de las
macroestructuras, Van Dijk (1980) comienza a indagar
sobre las posibilidades de formular reglas generales
y categorías macroestructurales. Siguiendo a este
investigador “Un concepto o una estructura conceptual
(una proposición) puede convertirse en tópico de
discurso si organiza jerárquicamente la estructura
conceptual (proposicional) de la secuencia”.
En caso de que haya más de una proposición que
satisfaga este requisito se puede hablar de alternativas, y
el conjunto de alternativas determinará el conjunto tópico
de esta parte del discurso. Sólo aquellas proposiciones
vinculadas por un discurso o una parte de un discurso
son tópicos que dominan toda la información semántica
de la sentencia.
Las frases tópicas, o sea, que expresan proposiciones
sub-tópicas, que directamente se presentan a menudo
para recalcar el tópico y tienen función específica de
“anunciar” o “confirmar” antes o después de un pasaje
el tópico hipotético establecido por el lector. Las otras
frases pueden entonces ser consideradas como que de
explicación o especificación de la información de las
oraciones tópicas.
El periodismo también es retórico:
Desde un punto de vista pragmático se puede decir que
sin persuasión no existe la comunicación. Todo texto
periodístico tiene en mayor o menor medida alguna
intención de persuasión con vistas al convencimiento.
Así pues, no es que la retórica esté presente en los
textos periodísticos, sino que todo el texto periodístico
depende de algún procedimiento retórico. En conclusión,
en todo acto comunicativo siempre hay un componente
persuasivo implícito o explícito. La investigadora
Elvira Teruel (1997) profundiza esta cuestión en la
fundamentación teórica de su estudio sobre la presencia
de metáforas en titulares de prensa.
Persuasión:
Como Van Dijk, la autora se sitúa también en la lingüística,
pero va a buscar en la semiótica y la pragmática,
pasando también por la psicología social y la filosofía
del lenguaje, la comprensión de la retórica a partir de la
aceptación de que la persuasión es inherente a cualquier
acto de comunicación.
A partir de la comprensión es que el individuo siempre
interpreta la realidad y la modela de acuerdo con sus
constructos y sus normas de conducta, que son el
resultado y el fundamento de la comunicación y la
persuasión, Teruel considera que no son excluyentes las
dos visiones de la comunicación dado que:
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• Una que la ve como actividad unidireccional en que
la persuasión puede o no estar presente conforme
la intencionalidad del emisor.
• La otra ve la comunicación como un proceso
bidireccional en que la persuasión ocurre siempre
de uno con el otro.
Persuasión intencionada:
Pueden existir situaciones en que tiene que dominar
la persuasión intencionada, que se explícita en
mecanismos no verbales y verbales, consciente y
escogida especialmente como instrumento para lograr
un objetivo, también pueden existir situaciones en
las que la persuasión sea la causa y el fruto del acto
comunicativo, consciente igualmente (a medida que
los individuos que intervienen tienen conciencia que
actúan simbólicamente en la conformación de valores
y conductas mutuas), pero sin explicitación expresa de
los mecanismos persuasivos con un valor instrumental.
Se destaca que la mayoría de los estudios sobre medios
de comunicación de masas se fundamentan en la idea
de que la persuasión es una actividad diferente en la
que no interviene la comunicación. Así, Teruel propone
analizar la comunicación como persuasión, concebida
como actividad interaccional.
Comunicación implica persuasión:
No se puede decir de forma absoluta que las relaciones
entre los medios de comunicación son interpersonales.
Aunque son del ámbito público y no privado, Teruel
concluye que las relaciones mediáticas tienen puntos de
contacto suficientes con lo que ella considera necesario
para entenderlas como persuasivas, no en sentido de
manipulación, pero en sentido de que “comunicación
implica persuasión”.
Entre estos están, por ejemplo, el hecho de que, desde
el punto de vista mercantil hay un intercambio de
construcción mediante el cual el receptor/consumidor
exige productos que respondan a sus normas y pautas
de comportamiento, mientras el emisor/vendedor
elabora el producto teniendo en cuenta estas exigencias,
pero también sus propias construcciones, es decir
intentando integrar con el producto otros elementos que
le convienen transmitir.
Por otro lado, desde el punto de vista del grado de
implicación del receptor, no hay que olvidar que el grupo o
receptores está formado por individuos, que se relacionan
con los medios individuales, y la comunicación que se
establece es por lo tanto de carácter personal.
Al contrario de lo que sucede normalmente en las
relaciones interpersonales, en su relación con los medios,
el receptor se siente más libre para actuar o desconectarse
por completo cuando no le apetece el mensaje.

Aunque diferenciando la capacidad de los medios para
manipular y su capacidad para crear necesidades, Teruel
sostiene que no hay que perder de vista el papel activo
del receptor en este tipo de relaciones. Por ello concluye
que, en la comunicación mediática, la persuasión actúa
siempre, implícita o explícitamente.
Para verificar la presencia de la retórica en la
comunicación periodística, Teruel parte de la evidente
adecuación de la retórica clásica, para el estudio de los
medios actuales, ambas disciplinas estructuran sus
principios y peculiaridades en las relaciones entre el
emisor, receptor y el mensaje.
Del mismo modo que Aristóteles insiste en que la
función de la retórica no es crear persuasión, sino tan
solo encontrar los medios de persuasión más adecuados
a cada tema de discurso en función del público al
que se dirige. Teruel insiste en que “en todo acto de
comunicación hay persuasión, lo que queda es ser un
buen comunicador”.
Y esto se hace por medio de la inventio, la dispositio
y la elocutio, donde se articulan todos los contenidos
de los medios, y donde se distinguen los criterios y
compromisos que deben orientar las distinciones entre
ficción, publicidad y periodismo. Se apreciará por lo
tanto, en una perspectiva semiótica, qué se encuentran
procedimientos retóricos en periodismo a nivel de
inventio, después de dispositio y de elocutio.
Inventio, dispositio y elocutio:
• Inventio: “Sobre toda cosa dada (tema de discurso)
aquello que en cada caso es más apto para la
persuasión”. Se puede definir la “cosa” dado como
los hechos de la realidad que se quieren transmitir y
encontrar la mejor forma de transmitirlos.
• Dispositio y de elocutio: la manera de hacerlo (mediante
noticia, artículo de opinión, reportaje, etc.) se decide
aquí. Sin embargo de qué hablar y qué elementos se
deben aportar son propios de la Inventio.
Cabe destacar que se puede buscar convencer mediante
pruebas técnicas y atécnicas. Las pruebas atécnicas
son las declaraciones, testimonios, confesiones, etc.
Las pruebas técnicas son las construidas y presentadas
en el propio discurso. Estas pueden estar basadas en la
credibilidad del orador o en la disposición emocional
del receptor.
La demostración en el discurso se hace por
procedimientos lógicos, que pueden ser de dos tipos: el
ejemplo y el entimema (deducción mediante silogismo
que parte siempre de al menos una premisa), según
Aristóteles la mejor forma de construir argumentos
persuasivos, pues se apoya en conocimientos y creencias
ya compartidas por el receptor para crear, junto con él,
nuevas “verdades” u opiniones.
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Como explica Teruel, tanto los mecanismos lógicos
como los psicológicos que en la retórica sirven para
convencer o para emocionar, respectivamente, tienen
una correspondencia con los que se hacen servir en la
elaboración de los textos periodísticos, que para convencer
pueden apoyarse en pruebas técnicas y atécnicas.
Las pruebas técnicas y atécnicas:
Las pruebas técnicas pertenecen a la categoría de los
recursos lógicos que pueden ser transformados en
persuasivos mediante operaciones retóricas. Como se
ha visto, pueden ser extraídas del carácter del orador, de
la disposición del auditorio, y del propio discurso.
Las pruebas atécnicas en periodismo son, evidentemente,
las declaraciones textuales, dictámenes y documentos
oficiales, datos estadísticos etc., que, como apunta
también Van Dijk se considera en general que dan al
texto mayor fiabilidad, más carácter de verdad, porque
dan a entender que transmiten la información tal como
se produjo, es decir, objetivamente, sin manipulación.
La elocutio o elocución
Cicerón ideó cinco cánones de la retórica que se refieren
a las categorías que deben tenerse en cuenta a la hora de
construir y realizar una presentación en público para que
esta cumpla con su función: convencer al auditorio.
• La invención: es la primera señal por la que
transitar y comienza en el preciso momento en
el que la persona tiene que hallar qué decir. Se
trata de escoger adecuadamente y por anticipado
los argumentos que se van a utilizar a favor y los
que pueden utilizar en contra; encontrar las líneas
argumentales más sólidas y convincentes; escoger
el tono adecuado del discurso en función del
auditorio, etc.
• La disposición: es el siguiente canon y se refiere a la
correcta estructuración del discurso. Tiene que ver
con poner el contenido adecuadamente en partes,
con ordenar el conjunto de argumentos de forma
que tengan el mayor impacto persuasivo posible.
• Con el canon de la elocución o estilo se deja
atrás la estructuración del discurso y se pasa a la
puesta en escena. Se refiere a la manera cómo se
expone lo que se tiene que decir, la forma como
son expresadas las ideas, la claridad expositiva del
orador, su capacidad para declamar correctamente.
• La memoria: tal vez sea este el canon, no sólo
más olvidado, sino también el más denostado.
Actualmente se vive en unos tiempos en los que la
responsabilidad memorística se ha situado fuera de sí
mismo. Se cuenta con teléfonos y almacenamientos
externos de todo tipo.El último canon es la acción o
intervención y típicamente se refiere a la puesta en
escena, otro de los aspectos que en la actualidad se
encuentra en un segundo plano.

Como se puede apreciar la elocución es el tercer elemento
de los cinco cánones de la retórica de Cicerón. Es la
continuación de la energía retórica de construcción del
texto que comienza con estas dos etapas previas. Cabe
destacar que la elocución se puede dar simultáneamente
de forma parcial o total con la disposición durante el
proceso creativo, incluso con la invención. Así pues en
la creación del discurso retórico, convergen al mismo
tiempo las dos o tres instancias.
Si las ideas del texto son su macroestructura, las palabras
escogidas son su microestructura. Se basa tanto en
palabras aisladas, como en las que están conectadas en
enunciados y enunciados conectados entre sí por una
unidad textual (supraoracional). Así pues la elocución
trata del estilo del lenguaje y las figuras retóricas que
se usen. Dicho de otra manera, es la “verbalización de
la estructura semántico-intensional del discurso, con la
finalidad de hacerla comprensible por el receptor”.
La elocución tiene dos sustratos: las cualidades elocutivas
y los registros elocutivos.
Cualidades elocutivas:
Se pueden definir cuatro cualidades elocutivas:
1. Puritas: es la pureza lingüística, consiste en el uso
apropiado del lenguaje. Implica seguir las reglas
gramaticales.
2. Perspicuitas: es la claridad de la expresión, remite
a la claridad necesaria para que el discurso sea
comprensible para el destinatario.
3. Ornatus: es el embellecimiento del texto, consiste
en el uso de figuras y tropos para captar la atención
del destinatario.
4. Urbanistas: es la elegancia de estilo, de esta cualidad
depende el agrado que se produzca en el auditorio.
Registros elocutivos:
Existen tres tipos de registro:
1. Genus humile: es un estilo simple de escritura,
maneja un vocabulario sencillo con frases cortas y
gramaticalmente correcto y simple.
2. Genus médium: es un estilo que busca el deleite,
por tanto, utiliza un lenguaje con palabras de
complejidad media.
3. Genus sublime: es un estilo diseñado para
conmover, utiliza un vocabulario sofisticado, que
emite enunciados largos y complejos.
El estilo de la oratoria contemporánea regularmente es
sencillo, directo, sugerente y sobrio. La retórica más
eficaz es la que está presente, pero que es menos
evidente. El humor puede ser persuasivo, la musicalidad
también es un elemento recomendable, así como el
control del tiempo de la narración. Cabe destacar que
el estilo de comunicación debe de ser adecuado para el
auditorio para el que se va a hablar.
Periodismo y retórica | 7
Cualidades del discurso:
Por consiguiente se puede concluir que las cualidades
del discurso oratorio son:
• Claridad.
• Precisión.
• Elegancia.
• Corrección gramatical.
• Concisión.
• Corto.
Resumen
Separación información-opinión:
La Real Academia Española define el término informar
(2014) como enterar o dar noticia de algo. Asimismo,
esta institución define el término opinar como manifestar
una idea u opinión.
En sus orígenes, los medios de comunicación fueron
pensados como una herramienta de información. El
desarrollo de las sociedades del mundo amplían las
funciones de los medios de comunicación. Así pues,
en la actualidad se pueden encontrar en los medios de
comunicación las siguientes funciones:
• Informar: la función principal de un medio de
comunicación es informar de forma veraz. Desde
sus orígenes los medios de comunicación han
transmitido información. Así, las personas pueden
conocer y compartir los acontecimientos sucedidos
en el mundo en el menor tiempo posible.
• Entretener: es uno de los principales propósitos
de los medios de comunicación de masas. En los
periódicos hay varias secciones de entretenimiento.
Por ejemplo; las páginas de pasatiempos (sudokus,
sopas de letras, etc.
• Educar: los medios de comunicación acercan el
conocimiento a las personas. Hay millones de
revistas, periódicos, páginas webs, programas de
televisión que permiten a las personas conocer
temas diversos, desde un punto de vista divulgativo
y educativo.
• Formar opinión: cada medio de comunicación
considerando sus aspectos culturales, políticos o
religiosos interpretan la información de acuerdo
con sus intereses. Esto viene determinado por la
línea editorial que viene impuesta por la dirección
de cada medio de comunicación. Es por eso por
lo que una información puede ser presentada de
diferentes puntos de vista dependiendo del medio
de comunicación que la escriba.

Las teorías de los géneros periodísticos:
El término género periodístico comienza a aparecer en
1970. Es conveniente señalar que hasta mediados del
siglo XIX el periodismo guarda una estrecha relación con
la literatura, de ahí que no exista una necesidad imperiosa
de identificarlo como un género independiente.
Sin embargo, con el surgimiento de las primeras agencias
de prensa los artículos firmados van cediendo su primacía
a las noticias anónimas. Estas poseen las características
de concisión, objetividad, veracidad, etc., muy diferentes
a las de los textos literarios, de ahí que el periodismo
comience a considerarse un género literario nuevo.
¿Sabías que el principal defensor de la idea del
periodismo como género literario fue el jurista, político y
escritor español J.F. Pacheco?
No sería hasta 1920 cuando la prensa se impuso en
el mundo occidental relegando a un segundo plano al
periodismo ideológico, al servicio de las ideas políticas
o religiosas. A diferencia de los artículos firmados,
comienzan a surgir nuevas tradiciones discursivas como
el reportaje o la crónica, que dan lugar a lo que hoy se
identifica como géneros periodísticos informativos.
Aportaciones de la retórica:
A diferencia de lo que se pueda pensar, la retórica y el
periodismo tienen más elementos en común más allá de
las páginas de opinión. Se destacan a estas personas y
escuelas que han vinculado al periodismo y la retórica
más allá de las páginas de opinión.
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• Chillón: estudia la narrativa periodística en la
perspectiva sobre todo de la teoría literaria.
• Borrat y Casasús y Ladevéze: avanzan por la
comprensión de los aspectos retóricos del texto
narrativo pero caminando por los estudios propios
de redacción de noticias.
• Escuela de Frankfurt: dedicadas principalmente
al esfuerzo por comprender la importancia del
concepto de macroestructuras para el estudio de
textos periodísticos y las estrategias retóricas que
el autor encuentra en estos textos con intención de
enfatizar las llamadas cualidades de la noticia.
• Van Dijk: el investigador Van Dijk es uno de los
reconocidos representantes del análisis crítico del
discurso.
Bibliográfia
1. ‘Retórica’. Aristóteles (2014). Alianza Editorial.
2. Real Academia Española (2014). Diccionario de la
Lengua Española: S.L.U. Espasa Libros.
3. Real Academia Española (2014). Diccionario de la
Lengua Española: S.L.U. Espasa Libros.
4. Grijelmo, A (1997). El estilo del periodista. Madrid:
Grupo Santillana de Ediciones.
5. Van Dijk, T.A (1997). Racismo y análisis crítico de los
medios: Barcelona: Paidos.
6. Van Dijk, T. A (1980). Macrostructures: an
interdisciplinary study of global structures in
discourse. Hillsdale, Erlbaun.
7. Teruel Planas, M.E (1997). Retórica, informació
i metáfora – Análisi aplicada als mitjans de
comunicació de massa. Barcelona. Aldea Global.