Recinto Rubén Bonifaz Nuño: preludio a su legado

Andrea Velázquez Ríos

Quiero abrir mi participación con una cita del maestro Rubén Bonifaz Nuño, abro cita “Yo

digo que los poemas no se hacen con palabras, se hacen con ritmos. Hay ritmos como formas

vacías, que por su atracción gravitacional llaman a las palabras y las van colocando en

aquella música hecha para que se vaya haciendo.” Cierro cita

En la misma línea, un preludio en música de acuerdo con el diccionario de la RAE es una

“Composición musical de corto desarrollo y libertad de forma, generalmente destinada a prec

eder la ejecución de otras obras.” O Bien otra acepción que se le da es

“Obertura o sinfonía, pieza que antecede a una obra musical.” Me tomo la libertad de

proponer esta metáfora, el Recinto Rubén Bonifaz Nuño es un preludio que contiene distintas

formas, manuscritos, fotografías, pinturas, libros, dibujos e historias, que nos permiten

vislumbrar la gran y extensa obra del maestro, es decir, su legado.

Hablaré de algunos de los materiales que resguarda y exhibe el Recinto, además de exponer

un poco en lo que nos encontramos trabajando ahora.

El Recinto se encuentra en el segundo piso de la Biblioteca Central, espacio que fue su

oficina desde 1985. Abrigado por los emblemáticos murales de O “gorman. En donde nos

recibe Paloma Guardia Montoya, responsable del Recinto, y quien me ha proporcionado el

acceso al material.

1
Los documentos y piezas que se encuentran en el Recinto pueden dividirse en dos, primero la

parte museográfica, que es la oficina del maestro Bonifaz, y segundo, la parte del archivo.

En la primera, residen los ejemplares de su obra publicada, conjuntamente, objetos

personales como su colección de Snoopy, su máquina de escribir, una catana, su letra a través

de los años, sus característicos chalecos, su particular fistol de la mosca que hace referencia

al poema que todos conocemos; y en cada pieza una historia que nos comparte con afabilidad

Paloma Guardia Montoya.

En la segunda parte se localiza el archivo del maestro, donde laboro actualmente, puesto que

organizo y clasifico el material que consta de traducciones, poemas, cartas, discursos y el

trabajo de investigación.

Igualmente, se encuentra un conjunto de libros personales, así como ejemplares de sus obras

poéticas y de sus estudios de la iconografía antigua mexicana.

Asimismo, el acervo de las versiones del maestro Bonifaz de la Bibliotheca Scrptorum

Graecorum et Romanorum Mexicana. Y por supuesto, los borradores de sus traducciones, de

la Eneida, la Ilíada entre otros. En una entrevista que realizaron al maestro Bonifaz en la

Biblioteca Central en el 2007, él expresa que en sus traducciones intenta dar una versión fiel

a los originales de los griegos y latinos. Y al estar allí me he percatado al ver cada borrador

tras borrador que se aprecia su disciplina por el trabajo de la escritura, lo cual recuerda a los

clásicos, una rítmica disciplinada, así como el maestro. De igual manera, los manuscritos y

borradores de poemas donde podemos apreciar el proceso creativo.

2
Otros documentos muy interesantes, son las epístolas dirigidas al maestro de parte de

Alfonso Reyes, Octavio Paz, Francisco Hernández, Manuel Scorza, Miguel León Portilla,

Marco Antonio Campos y la lista continua, contienen una redacción amena, improvisan

poemas, comentan sus obras. Esta suma de interacciones es verdaderamente un deleite,

porque se ve el diálogo literario en un género que podría tildarse de simple en esta época.

Otra parte igual de importante es el archivo hemerográfico, que Paloma Guardia se encuentra

organizando, en el podemos analizar su obra con la materialidad de este medio, entiendo y

como ustedes saben por materialidad al texto analizado junto con los demás elementos

presentes en la página. En esta comúnmente llamada era digital considero es relevante el

estudio y rescate de dicho material, pues allí residen grandes tesoros literarios del maestro

Bonifaz.

Incluso, hay fotografías con personalidades como Rosario Castellanos, Ali Chumacero,

Miguel León Portilla, Fausto Vega, Henrique González Casanova, Agustín Yánez.

Además, está en proceso recibir en el Recinto por parte del Colegio Nacional los cuantiosos

reconocimientos que le fueron otorgados al maestro, y que próximamente podrán ser

exhibidos.

Por un lado, todo el proceso de organizar los documentos tiene como objetivo si bien de

resguardar, también es para que una vez finalizado, los investigadores y los estudiantes

puedan consultarlos. No leemos sólo por su belleza sino porque en sus estudios humanísticos

encontramos respuestas.

3
Por otro lado, el Recinto es un espacio que puede ser visitado para conocer y apreciar la parte

museográfica, por esta razón Paloma Guardia Montoya y yo creamos la página de Facebook

del Recinto, la cual los invito a seguir Recinto Rubén Bonifaz Nuño. Creada con el objetivo

de difundir eventos, compartir fragmentos de su obra, fotografías e instar a conocer el

espacio.

Para concluir. ¿Cómo el legado del maestro Rubén Bonifaz Nuño se presenta a nuestros días?

Encontramos su legado en múltiples lugares en la Universidad y sus obras; sin embargo, en el

Recinto Rubén Bonifaz Nuño hallamos un preludio de su legado, el maestro Bonifaz era

consciente del papel que desempeña un maestro, en la entrevista del 2007 que con

anterioridad mencioné el maestro Bonifaz Nuño expresa, abro cita: “El profesor universitario

es el hombre que debe ser modelo para todos, yo he tratado de ser en ese aspecto un modelo.

En este aspecto, no cerrar nunca una puerta a nadie absolutamente, y abrir todas las puertas

que se cierren para alguien.” Cierro cita Siempre se concentró en el estudio y en compartir

con los estudiantes y quienes quisieran aprender, entendía la magia y el poder de las palabras

y sobre este mismo principio nos sumamos a visitar el Recinto como investigadores o como

usuarios de un museo.

Gracias