GUIA PARA REZAR EL ROSARIO

1. INICIO
- Señal de la cruz y Credo o Padre Nuestro

Por la señal de la Santa Cruz, de nuestros enemigos líbranos Señor Dios Nuestro. En el
nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.

2. PETICIONES
3 Ave María y el Gloria

3. ANUNCIO DE LOS MISTERIOS

4. 1 ER MISTERIO
Se dice el 1er misterio que corresponde al día (La encarnación…), y se puede añadir
peticiones personales.
-Padre Nuestro (Nudo)

Guía: Padre nuestro, que estás en el cielo, santificado sea tu Nombre; venga a nosotros
tu reino; hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Pueblo: Danos hoy nuestro pan de cada día; perdona nuestras ofensas como también
nosotros perdonamos a los que nos ofenden; no nos dejes caer en la tentación y
líbranos del mal. Amén.

- Ave María por cada cuenca (10)

 Guía: Dios te salve, María, llena eres de gracia; el Señor es contigo, bendita Tú eres
entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu vientre, Jesús.
Pueblo: Santa María, Madre de Dios, ruega por nosotros, pecadores, ahora y en la hora
de nuestra muerte. Amén.

-Gloria y Jaculatorias (Nudo)

Guía: Gloria al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo.
Pueblo: Como era en el principio, ahora y siempre, por los siglos de los siglos. Amén.

Jaculatoria a María
Guía: María, Madre de gracia, Madre de misericordia.
Pueblo: En la vida y en la muerte ampáranos Madre nuestra.

Jaculatoria a Jesús

Oh Jesús Mío (Todos)

Oh Jesús mío, perdona nuestros pecados, líbranos del fuego del infierno, lleva a todas
las almas al cielo, especialmente a las más necesitadas de tu infinita misericordia.
Amén.

5. 2DO MISTERIO
6. 3ER MISTERIO
7. 4TO MISTERIO
8. 5TO MISTERIO

Al Finalizar el rezo de los misterios continúan las Letanías a la Virgen María

Señor, ten piedad Madre de la Esperanza

Cristo, ten piedad Madre purísima,
Señor, ten piedad Madre castísima,
Cristo, óyenos Madre siempre virgen,
Cristo, escúchanos Madre inmaculada,
Madre amable,
Dios Padre celestial.
Madre admirable,
Ten misericordia de nosotros.
Madre del buen consejo,
Dios Hijo, Redentor del mundo.
Madre del Creador,
Ten misericordia de nosotros.
Madre del Salvador,
Dios Espíritu Santo.
Virgen prudentísima,
Ten misericordia de nosotros.
Virgen digna de veneración,
Trinidad Santa, un solo Dios.
Virgen digna de alabanza,
Santa María, Virgen poderosa,
Ruega por nosotros Virgen clemente,
Santa Madre de Dios, Virgen fiel,
Ruega por nosotros Espejo de justicia,
Santa Virgen de las Vírgenes, Trono de la sabiduría,
Ruega por nosotros… Causa de nuestra alegría,
Madre de Cristo, Vaso espiritual,
Madre de la Iglesia, Vaso digno de honor,
Madre de la Misericordia Vaso insigne de devoción,
Madre de la divina gracia, Rosa mística,
Torre de David, Reina de los Patriarcas,
Torre de marfil, Reina de los Profetas,
Casa de oro, Reina de los Apóstoles,
Arca de la Alianza, Reina de los Mártires,
Puerta del cielo, Reina de los Confesores,
Estrella de la mañana, Reina de las Vírgenes,
Salud de los enfermos, Reina de todos los Santos,
Refugio de los pecadores, Reina concebida sin pecado original,
Consuelo de los migrantes Reina asunta a los Cielos,
Consoladora de los afligidos, Reina del Santo Rosario,
Auxilio de los cristianos, Reina de la familia,
Reina de los Ángeles, Reina de la paz.

Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo.

Perdónanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo.
Escúchanos, Señor.
Cordero de Dios, que quitas el pecado del mundo.
Ten piedad de nosotros.

Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.

Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén.

9. Oraciones Finales.

Te pedimos, Señor, nos concedas a nosotros tus siervos, gozar de perpetua salud de alma y
cuerpo, y por la gloriosa intercesión de la
bienaventurada siempre Virgen María, seamos librados de las tristezas presentes y
gocemos de la eterna alegría. Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén.

Salve

Dios te salve, Reina y Madre de misericordia, vida, dulzura y esperanza nuestra; Dios te salve. A
Ti llamamos los desterrados hijos de Eva; a Ti suspiramos, gimiendo y llorando, en este valle de
lágrimas. Ea, pues, Señora, abogada nuestra, vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos; y
después de este destierro muéstranos a Jesús, fruto bendito de tu vientre. ¡Oh clemente, oh
piadosa, oh dulce Virgen María!

Ruega por nosotros, Santa Madre de Dios.

Para que seamos dignos de alcanzar las promesas de Nuestro Señor Jesucristo. Amén

10. Nos despedimos haciendo la señal de la cruz.